![](https://assets.isu.pub/document-structure/220105171840-55814dc444b8794e9bdc7b56d6b60ad8/v1/2705baa319d558fedaf4ff0b2837de05.jpeg?width=720&quality=85%2C50)
4 minute read
Luis Bautista
Cine Tertulia con Edmundo Aray
Advertisement
Luis Bautista
Estamos en la ciudad de Caracas, es el año 2014 y se realiza “el Foro del cine venezolano”, una asamblea que congregó a la comunidad cinematográfica nacional para hacer una evaluación de nuestra cinematografía, y construir una agenda colectiva o plan de acción para los años siguientes. En dicho evento estuve presente junto a otros compañeros de la Red Popular de Cine y Audiovisual del Estado Falcón. Aprovechando la participación de algunos maestros del séptimo arte, junto a Francisco Hernández con cámara en mano abordamos a algunos de ellos. Las siguientes líneas son parte de una de esas conversaciones, en esta ocasión con Edmundo Aray, célebre escritor y cineasta de larga trayectoria, nacido en Maracay un 16 de Noviembre del año 1936, fallecido el 26 de Junio del 2019, a quienes queremos rendir un tributo por todo lo que hizo por la cultura nacional. -Luis Bautista: Maestro, ante todo gracias por las palabras que nos brindará. Primeramente identifíquese por favor. - Edmundo Aray, escritor, cineasta, economista, historiador y pare usted de contar LB. Maestro, ¿Por qué decidió dedicarse al cine? EA. --Desde mi adolescencia me inicié en la escritura. Comenzando en los años 60 me incorporó al cine un cineasta venezolano, documentalista, Carlos Rebolledo, me invitó a esa aventura y me atrajo realmente la actividad. Y con ese entusiasmo nos fuimos a Cabimas, estado Zulia, y rodamos una película que tiene por título “Pozo muerto”. Un año después hicimos “Venezuela tres tiempos”, y luego Carlos hizo un largo –sin fortuna- pero es una gran película basada en un libro mío que lleva por título “Alias El Rey del Joropo”. Desde entonces, digamos, pertenezco al cine… LB: ¿Por qué decidió involucrarse en este mundo, que significa el cine para usted? EA: --Mira, vivíamos tiempos muy difíciles, una atmósfera de muerte terrible en el país. Sentíamos que nuestra escritura y nuestras acciones en el campo de las artes –sobre todo la plástica- no eran suficientes, creímos que el cine era una manera de llegar a un público mayor. Las circunstancias, pues, se tradujeron en persecuciones por parte de los organismos represivos del Estado, en general, con los cineastas y con muchos escritores, sin embargo, el Estado mismo fue cuidadoso a la hora de reprimir a los intelectuales. LB: Maestro ¿ y cómo puede influir el cine en la sociedad, en la realidad? EA: --Es muy difícil, pero lo cierto es que el cine primero es una creación y en segundo lugar podía ser una especie de denuncia, eso a su vez es un acto de investigación, lo qué dicen nuestros pueblos, lo que le sucede a nuestros pueblos. Se hablaba de los humillados y oprimidos de nuestros pueblos. Bueno, nosotros fuimos consecuentes, no sólo en Venezuela, sino en toda América Latina. LB. Ahora, contextualizando un poco, estamos en el Foro del Cine Venezolano 2014 ¿Qué hace falta para consolidar nuestra cultura e industria cinematográfica? EA: --Bien, tenemos cincuenta años de lucha. hace cuarenta y ocho
![](https://assets.isu.pub/document-structure/220105171840-55814dc444b8794e9bdc7b56d6b60ad8/v1/9a75e517a845e7058fba68f2c68c2c48.jpeg?width=720&quality=85%2C50)
años –justamente- nos reunimos en Ciudad Bolívar y ya aspirábamos a una ley de cine, algunos bromeaban porque decían que queríamos una ley sin películas, pero estábamos haciendo películas, unos más que otros, cortometrajes o largos, en fin, todo era el resultado de hacernos escuchar y vernos, y sobre todo lograr que nuestro pueblo se viera en la pantalla, ese era sin duda alguna el objetivo fundamental, porque el destinatario del cine Latinoamericano –sobre todo en los años sesenta, setenta y ochenta-- fue nuestro pueblo.
De allí que no sólo hiciéramos cine, sino que creáramos organismos que fueran fundamentales en el desarrollo de la cinematografía. Desde el punto de vista internacional fuimos participando de “El comité de cineastas de América Latina”, “La Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano”, “El Festival del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana”, “La Escuela Internacional de Cine de San Antonio de los Baños “. Y aquí, fundamentalmente logramos el fortalecimiento de los gremios para alcanzar, a través de una lucha sostenida y tenaz, normas legales que fomentaran nuestro cine, hasta que alcanzáramos la plenitud la ley de cine. Te hago este recuento porque es la expresión de que el cineasta no sólo es un artista, un creador, el cineasta es fundamentalmente un combatiente, y así hemos trabajado a lo largo de estos cincuenta años… Pero por otro lado voy directo a tu pregunta. En estos momentos estamos viviendo un momento de auge de nuestra cinematografía, pensamos que es necesario hacer un plan de acción por lo menos de cinco años, a los fines del desarrollo cinematográfico. Y este foro comenzó a plantearse hace dos años y finalmente hemos llegado a él y creo que tenemos una especie de gran asamblea, una convocatoria nacional, ¿por qué? porque tenemos capacidad de convocatoria, porque la gente está haciendo cine en todo el país, porque la gente quiere hacer cine en todo el país, y porque tenemos una generación nueva que es hábil y necesita nuevos caminos, hacerse escuchar, y sobre todo ser apoyada por una legislación que contribuya a ese desarrollo, por organismos que permitan ese desarrollo. LB: ¿Algo que desee agregar? EA: --Bien, fundamentalmente creo que hablo, converso con ustedes de alguna manera sobre todo si son gente del cine, de que tengan confianza en sí mismos, tengan confianza en su pueblo, tengan confianza en el proceso de crecimiento y desarrollo del país, y que tengan confianza en la cinematografía nacional. Qué más alta expresión que las cifras que hoy tenemos de espectadores, una cifra que nos recuerda a los años setenta que eran convulsos, que nos atacaron violentamente porque nuestro pueblo asistía a las salas a escucharse. Bueno, ahora quizás estamos viviendo el momento en que tenemos más espectadores, perfectamente podemos competir con el cine extranjero y particularmente con el cine de Hollywood. Compañeros, crean ustedes en el cine, crean en nuestro pueblo. ◙