María victoria rivera by Asistencia Doctorado Ulasalle

DESCUBRIENDO MI PROPÓSITO EN ESTE DRAGÓN VERDE

MARÍA VICTORIA RIVERA PÁEZ CHIFLADURA TESIS DE GRADO 11ª Cohorte - Colombia

DOCTORADO EN EDUCACIÓN CON ESPECIALIDAD EN MEDIACIÓN PEDAGÓGICA UNIVERSIDAD DE LA SALLE SAN JOSÉ - COSTA RICA

2016

A nuestras hijas Irene, Silvia y Elena A mi alma gemela, Nicolás A mi madre y mis ancestras femeninas A mi padre y mis ancestros masculinos A mis hermanos y hermanas, A mis amigos y amigas, a mis acompañantes del rizoma A mi familia, también la de la práctica A Thich Nhat Hanh y todos los maestros y maestras que iluminan mi camino

Imagen 1 Universo Dragรณn verde

Universo dragón verde Placa en arcilla Esmalte 1260º María Victoria Rivera Páez Enero 2015 Una explosión que genera pluriversos, todo el campo está in-formado desde el origen. Emerge desde el infinito el dragón verde, la alquimia de los minerales en el fuego del horno permitió el color verde en este ser alado. Todo resuena, hay un ajuste fino para que en la tierra surja la vida. Esa malla circular es campo akásico. Es también autopoiesis, holograma creativo. Cada cristal del hierro me recuerda la saturación que precede a la explosión, es la evocación de la vida. El dragón es tierra-memoria, aire-movimiento, fuego-transformación. Esta pieza es una remembranza del origen, es enacción de mi conciencia cósmica. El universo se expande y se contrae. No existe nacer y morir, todo se transforma.

Esta pieza de cerámica es un homenaje a Brian Swimme, por su manera poética de ayudarme a recorrer este camino de aprendencia. El Universo es un Dragón Verde me acompañó durante mi chifladura doctoral. He recorrido sus páginas repetidas veces y siempre descubro una nueva inspiración. Me encantó la invitación de Swimme a la alegría, a la celebración del milagro de la vida, a mantener la capacidad de asombrarme, al juego y a la ensoñación. Descubrí en este libro identidades múltiples, mi ser mar-absorción, tierra-memoria, aire-movimiento, y fuego-transformación. Este libro me abre la imaginación para reconocerme dragón verde palpitante, voladora, creadora de nuevas realidades.

“Reconozco que comparar el Universo con un dragón verde es una locura, pero ojalá refleje el asombro que siento ante lo que hoy en día sabemos sobre el Universo. En realidad, la imagen del dragón es imperfecta, porque los dragones verdes son demasiado comunes y, por eso mismo, no reflejan en absoluto todo el alcance de lo que hemos comprendido. Así de limitado es el lenguaje...” Swimme, Brian (1998:18)

DESCUBRIENDO MI PROPÓSITO EN ESTE DRAGÓN VERDE TABLA DE CONTENIDO INTRODUCCIÓN

HEXÁGONO 1. MEDITACIÓN CONJUNTA: MÉTODO EMERGENTE Y MEDIACIÓN ESTÉTICA DEL APRENDIZAJE 21 PREGUNTAS AUTÉNTICAS TAZA REVELADORA PINTURA INTUITIVA ALFARERÍA Y ALQUIMIA NARRATIVAS MULTIFACÉTICAS RITUAL, INVOCACIÓN Y PAGAMENTO IMAGINACIÓN Y ENSOÑACIÓN GEOMETRÍA SAGRADA: EL HEXÁGONO DEL CANASTO

26 27 31 34 38 39 39 41

HEXÁGONO 2. RECONOCIENDO EL SUFRIMIENTO: NARRATIVAS DE LA FRAGMENTACIÓN NARRATIVAS TEMPRANAS DE DESCONEXIÓN NARRATIVA DE DESENCANTO NARRATIVAS DE AUTOORGANIZACIÓN

47 51 56 59

HEXÁGONO 3. SEMILLAS DE TOTALIDAD

LA NATURALEZA ORGÁNICA QUE SOMOS COMPLEJIDAD: SOY UN MISTERIO INTERCONEXIÓN: UNIDAD EN LA DIVERSIDAD TRASCENDENTAL

66 69 71

HEXÁGONO 4. RECONOCIENDO LA IN-FORMACIÓN FEMENINA QUE ME CONSAGRA: ROJO CREATIVO, ROJO SANGRE, ROJO NEGADO, ROJO INTEGRADO 79 CAMPOS MÓRFICOS Y ENERGÍAS FEMENINAS EL GÉNERO RELACIONADO CON EL TERRITORIO. INVISIBILIZACIONES NATURALIZADAS: LA RELIGIÓN Y EL PATRIARCADO CIENCIA REFLEXIVA QUE INTEGRE CREATIVIDAD, INTUICIÓN Y SABER COTIDIANO

84 87 92 96

HEXÁGONO 5. HONRANDO A LOS ANCESTROS

102

RESONANCIA: DESDE SIEMPRE RESUENAN EN MÍ LOS ANCESTROS CAMPOS MÓRFICOS Y SINCRONICIDAD COTIDIANA HOLOGRAMAS Y FRACTALES

104 110 113

HEXÁGONO 6. ENCANTAMIENTO ES ALEGRÍA, CONEXIÓN, ESPIRITUALIDAD, CONCIENCIA CÓSMICA DEL ANTROPOCENTRISMO AL ECOCENTRISMO CONCIENCIA CÓSMICA NUESTRO ORIGEN COMÚN LA TOTALIDAD

121 122 124 127

CONDENSACIÓN

139

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

144

TABLA DE IMÁGENES

UNIVERSO DRAGÓN VERDE CONFIGURACIÓN HEXGONAL: TRIANGULOS DE PINTURA INTUITIVA MEDITACIÓN CONJUNTA TAZA REVELADORA ÚTERO CREATIVO, ÚTERO ENRAIZADO REVERENCIA Y CELEBRACIÓN ATENCIÓN PLENA, ALFARERIANDO EN TALLER AIREKÚ CANASTO TANIMUKA LETUAMA FRACTALIDAD HEXAGONAL GEOMETRÍA SAGRADA EN LA ESTRUCTURA HOLOGRÁFICA MI YO CUÁNTICO Y EL OM DE LA UNIFICACIÓN DOLOR EN LA FRAGMENTACIÓN IDENTIDAD SEPARADA AMOR FUERZA RELIGANTE NATURALEZA ORGÁNICA HOLOGRAMAS Y FRACTALES MADRE DEL AGUA-BIOLOGÍA DEL AMOR ACUARELA ROJO SANGRE, ROJO ANCESTRAL, ROJO NEGADO MADRE DEL AGUA-BIOLOGÍA DEL AMOR PLACA DE CERÁMICA NIÑOS Y NIÑAS KOGGI CHAMANA, BRUJA, ALQUIMISTA, SANADORA CHAMANA, BRUJA, ALQUIMISTA, SANADORA ARQUETIPOS ANCESTRALES ANCESTRAS Y DESCENDIENTES: CHAMANAS, MAGAS, BRUJAS QUEMADAS EN LA HOGUERA AGUA SAGRADA CAMPO MÓRFICO MUJER TRAZA HOLOGRÁFICA

4 19 21 30 30 33 36 42 43 44 47 51 55 58 66 72 75 79 82 89 94 95 103 106 109 113 116

RESONANCIA ARMÓNICA TOMO REFUGIO EN MI ISLA INTERIOR ACUARELA CONCIENCIA PLANETARIA Y CÓSMICA TOMO REFUGIO EN MI ISLA INTERIOR PLACA DE CERÁMICA AUTOPOIESIS AJUSTE FINO, REVERENCIA Y EVOCACIÓN CONCIENCIA CÓSMICA ALIANZA CÓSMICA Y JUSTICIA DE LAS COSAS SAGRADAS TRASCENDENCIA, ENCANTAMIENTO CAMPO AKÁSICO, ANCESTRALIDAD Y ENCANTAMIENTO DRAGÓN VERDE, CONCIENCIA CÓSMICA, SACRALIDAD DE LA VIDA - PINTURA EN BATIK

119 120 125 127 129 131 133 136 137 140 144

INTRODUCCIÓN azul, fotón emitido en cada rayo?, ¿Acaso conectará el café del desayuno con los rayos del sol, el agricultor que produjo el grano y aprenderá de las manchas que interpreta en los rastros que quedan inscritos en la taza reveladora?, ¿Cómo será esta ciudad cuando los campos mórficos de muchos logren producir esos cambios de conciencia?

Es febrero de 2016, podría ser cualquier otro día del año pasado cuando escribía mi chifladura o del futuro que imagino cuando ya todo el texto está escrito. Brilla el sol, sale de los cerros sagrados que alguna vez veneraron mis ancestros muiscas. La ciudad bulliciosa se siente en el exterior, parece que hubiese cambiado el piso térmico, nunca había sentido tan alta la temperatura en Bogotá. Las noticias hablan del calentamiento global. Sentada frente al computador, con la página en blanco me pregunto. ¿Cómo introducir mi chifladura? Y comienzan a emerger desde el mismo cosmos, una explosión de estrellas, se manifiesta desde el centro de la tierra como en un volcán lo que quisiera dejar plasmado en este texto. Me dejo ir por la ensoñación, estoy en el futuro y me pregunto ¿Acaso algún día las personas de esta ciudad que viven una educación en el cambio paradigmático, al ver el sol brillar en las montañas, harán las conexiones que hoy estoy experimentando?, ¿Acaso la gente cada día al despertar y ver el sol se sentirá cosmos, planeta

Mi chifladura ha sido la búsqueda de integración de mi ser fragmentado; para volver a encantar el mundo he descubierto la importancia de la consciencia de mis ancestros y de mi pertenencia cósmica, ello me conduce a vivir de una manera auténtica 1 . La pregunta que me guía es ontológica y a la vez pragmática:

1Necesitamos

que la educación permita a los seres expresar su autenticidad de manera que tenga sentido la vida. Seres auténticos serán capaces de reconocerse en el otro y la otra y de respetarlos porque son legítimos otros y otras.

¿Cuál es el propósito de mi vida y cómo lo enactúo cada día?

Desde hace más de 15 años cuando leí el libro The Spirit of Intimacy de la escritora de Burkina Faso, Sobonfu Somé 2 , me ha inquietado la pregunta acerca de ¿Cómo identificar mi propósito? Esa pregunta me abrió las puertas a esta chifladura de búsqueda de mí propósito en la aparente fragmentación que percibía.

conocer, ser y hacer en el mundo en los diferentes momentos de mi vida. Vivir con ese sentimiento de fragmentación por dentro, sin encontrar los hilos que han tejido mi historia personal, me causó mucho sufrimiento. Me he preguntado ¿Cuántos más como yo perciben su ser fragmentado, sufren y no encuentran el sentido ni el propósito a su vida? También me he preguntado ¿Cómo sería la narrativa del mundo y por tanto cómo sería el mundo creado por personas que viven su vida colmada de sentido? ¿Acaso la transformación de mi cosmovisión, de mi conciencia ancestral, y de mi manera de vivir en el mundo puede contribuir con un cambio de conciencia colectivo?

Mi chifladura parte de una necesidad interior de comprender el ser que soy y el sentido que tiene hoy para mí estar viva. En esa búsqueda de sentido me percibía muy fragmentada; no estaba viendo las interconexiones entre mis formas de Somé, Sobonfu (1999:59). “Cada persona escoge su propósito de vida antes de nacer. Yo, por ejemplo, escogí trabajar con los grandes misterios, explorar lo desconocido, rendirme a los misterios de manera que otros puedan aprender, descubrir lo desconocido, y recordar los viejos rituales.” 2

Con estas preguntas en mi mente3 identifique en campos mórficos en mis sistemas familiares, en mi mi chifladura la necesidad de explorar en tres sociedad, así como descifrar el campo akásico y dimensiones: integración, aproximarme a la conciencia ancestralidad y encantamiento, cósmica, me permiten verme las cuales parecen conjugarse en la multiplicidad de yoes que ¿Acaso la transformación de en el presente que al mismo hoy ya no percibo mi cosmovisión, de mi tiempo es pasado y futuro. fragmentados. conciencia ancestral, y de mi Entiendo que la comprensión profunda de dónde vengo, de cuáles son mis ancestros, de cómo se han configurado los

manera de vivir en el mundo puede contribuir con un cambio de conciencia colectivo?

El encantamiento tiene que ver con el encuentro del propósito, con la consciencia trascendente, cósmica, con vislumbrar el sentido o los sentidos que tiene estar viva; es a la vez la posibilidad de la ensoñación, de comprender el mundo hoy, aquí y ahora ya no en estado de fragmentación sino en la totalidad de sus múltiples estados potenciales. Esto permite un amplio lugar a la incertidumbre sin angustia y a la esperanza de que otros mundos aún son posibles.

Entiendo la mente con Varela y Maturana a partir de Capra (1998:185): “De acuerdo con la teoría de los sistemas vivos la mente no es una cosa sino un proceso: el proceso mismo de la vida. En otras palabras, la actividad organizadora de los sistemas vivos, a todos los niveles de vida es una actividad mental. Las interacciones de un organismo vivo –planta, animal, o humano- con su entorno son interacciones cognitivas, mentales. La mente – o más precisamente el proceso mentales inmanente en la materia a todos los niveles de la vida.” Bateson (1998) enfatizó que la mente se manifiesta no sólo en organismos individuales, sino también en sistemas sociales y ecosistemas. Pensamos por relaciones y no por partes (en occidente nos fragmentamos y dejamos de ver las relaciones esto es mío). El cerebro entonces no es la única estructura a través de la cual opera el proceso de cognición. 3

Nuestro tránsito de exploración en la conciencia, nos llevó al hallazgo en esta andadura de una práctica espiritual. Hemos encontrado una mediación, un camino de práctica cotidiana para estar con la consciencia despierta, para vivir

con la atención plena. Sin apego a ideologías, sin fanatismo, comprendiendo la práctica como un camino de respirar conscientemente. El cambio de paradigma trae consigo el renacimiento de esa dimensión espiritual de re-ligación, y de conexión profunda con el cosmos, emerge una cosmología funcional, que como lo afirman Boff y Hathaway 4 (2014:176) se perdió con el patriarcado y con la modernidad; con esta dimensión despierta es posible reconectarse con la magia de la vida, es posible experimentar la sacralidad de cada instante, se hace necesario recuperar la ritualidad y el asombro ante el milagro de la vida.

doctorado y del rizoma. Esta dimensión me permite explorar mi chifladura desde las distintas formas de narrarme: la cerámica, la pintura intuitiva, los relatos en diarios, mis experiencias en constelaciones familiares y pedagogía sistémica, los sueños y las manchas de las tazas reveladoras. La cerámica en esta chifladura ocupa un lugar preponderante para nosotros, pues como parte del doctorado nos propusimos construir nuestro taller y retomar el trabajo con el barro; como mediación estética para la aprendencia y con foco en el doctorado estamos encantando la vida al recuperar nuestra identidad de alfareros. En una sociedad como la que habitamos, en tiempos de construcción de paz como los que nos estamos inventando, este proyecto tiene sentido en tanto puede aportar mediaciones para procesos y actos educativos para vivir en paz; para ver luces sobre la identidad interrelacionada e interconectada, el lugar y la acción que a cada quien le corresponde, desde una mirada de integración, autenticidad y sentido. Cada persona necesita comprenderse a sí misma para comprenderse en convivencia. En la medida en que podamos aportar mediaciones

Mi chifladura tiene el método emergente y la mediación estética para la aprendencia compartida con Nicolás, mi esposo, padre de mis hijas, compañero de vida, de propósito, del Boff y Hathaway (2014:176) se refieren al redescubrimiento de la cosmología y ligan este concepto a la visión del mundo y al paradigma. Para ellos, la cultura de la modernidad perdió la cosmología funcional al introducir la idea de que el universo es carente de finalidad, no tiene historia, no hay mito, no tiene sentido. En la cultura de la Modernidad, la religión terminó reemplazando la cosmología. 4

para esa comprensión de una identidad cósmica, planetaria, nacional, de género, es decir como seres interdependientes que siendo particularidad y autenticidad a la vez pertenecemos al todo, estamos aportando en crear las condiciones de una vida en convivencia y paz.

Encantamiento, conciencia cósmica, ancestralidad, integración, diversidad, género, creatividad, cognición estética, mediación pedagógica, narrativas, método emergente palabras todas que tienen sentido para expresar mi chifladura.

¿Qué me propongo? Indagar en el campo del En mi impulso por escribir, quiero plasmar en este propósito y del sentido ¿Quién soy?, ¿Cómo ha escrito las mediaciones estéticas que me han sido la alquimia de mi ser?, ¿Cómo logro unir, permitido vivir la experiencia de religar para comprenderme y hacer integración. Hemos aprendido en el en el mundo lo que me gozo. La cognición estética es vital corresponde? Toda esta reflexión en ¿Cómo ha sido la para comprender y para expresar lo torno a la integración de mi ser, me alquimia de mi ser? comprendido. Las emociones, la lleva al cuestionamiento profundo intuición, la espiritualidad y la razón acerca de ¿Dónde están mis están integradas. acciones vitales? Después de pasar por todo este proceso sin duda se han La luz brilla afuera, continúo mi camino, me dono transformado mis formas de verme en el mundo; en este texto para que otros lo disfruten, en el fin se disuelven prioridades y van emergiendo otras de semana recogimos espinacas de la huerta, nuevas. Intento con este texto comunicar las vamos a preparar sopa de espinaca para el mediaciones pedagógicas que me han permitido almuerzo, ¿Qué tendrá esta tarde para comprenderme en la totalidad, y avanzar en el contarnos?, ¿Cuál es la aprendencia que se camino de descubrirme auténtica. alumbrará?

Dando continuidad al hexágono que me acompaña desde la experiencia de vida amazónica, presento el texto escrito de esta chifladura a manera de panal en seis hexágonos: Hexágono 1 Meditación conjunta: método emergente y mediación estética del aprendizaje escrito con Nicolás Bermúdez Vélez, pues hemos recorrido juntos esta andadura. Hexágono 2 Reconociendo el sufrimiento narrativas desde la fragmentación. Hexágono 3 Semillas de totalidad. Hexágono 4 Reconociendo la información femenina que me consagra. Hexágono 5 Honrando a los ancestros. Hexágono 6 Encantamiento es alegría, conexión, espiritualidad, conciencia cósmica. Cada hexágono está integrado por párrafos (fractales) que comunican con diferentes formas narrativas, el camino, la aprendencia, la reflexión, el

sentimiento, el relato, la resonancia y el diálogo con los autores. Al nombrar estos capítulos como hexágonos invoco la magia implícita en la geometría sagrada, porque en mi andadura cognitiva la geometría sagrada del hexágono me ha permitido conectarme con el orden implicado y ver emerger sincronicidades, intuiciones; con la magia del hexágono puedo interpretar libremente para dar lugar a la creatividad en la cognición. Invocar la energía hexagonal en este caso me ayuda para establecer las múltiples interrelaciones que se me revelan y que hoy comprendo como la manifestación del campo akásico, ese principio geométrico con el que se constituye la flor de la vida se me presenta como una ayuda para el aprendizaje.

Imagen 2 Configuraciรณn hexagonal: triรกngulos de pintura intuitiva

HEXÁGONO 1. MEDITACIÓN CONJUNTA 5 : MÉTODO EMERGENTE Y MEDIACIÓN ESTÉTICA DEL APRENDIZAJE

Imagen 3 Meditación conjunta

Este aparte fue escrito conjuntamente por María Victoria Rivera y Nicolás Bermúdez, como texto articulador de sus respectivas chifladuras. Por tanto, el texto aparece en cada una de las tesis doctorales, aunque ubicado en lugares distintos (aquí, como primer capítulo e iniciando el despliegue de mi chifladura; allá en medio del último capítulo e iniciando el cierre de su chifladura). 5

*** Escribiendo juntos este hexágono nos enfrentamos al reto de nombrar con palabras lineales todo lo que hemos vivido como una espiral en este camino de aprendencia 6 . Al compartir el camino es importante aclarar que es un proceso de cognición y por lo tanto es complejo; es la aprendencia en la vida misma, lo que hemos llamado bioaprendizaje, entendiendo la redundancia que contiene este concepto. Así, no es un camino lineal, no existe un “paso a” al que le sigue un “paso b” para luego pasar a un “paso c”; no es una fórmula que produce un resultado al replicarse. Este camino es proceso en sí mismo, es alquimia, porque ha sido transformador y va emergiendo a medida que resultan nuevas configuraciones de autoorganización.

*** La reflexión sobre método emergente nos lleva a comprender cómo hemos aprendido, cómo nos hemos transformado. En la aprendencia estamos viendo simultáneamente la morfogénesis de lo creado en la alquimia dentro del horno (piezas de cerámica), donde el fuego transforma los minerales presentes en cada una de las piezas; y nuestra propia morfogénesis al irnos transformando. Esta transformación es la alquimia que está presente en nuestro ser, constituido por los mismos minerales que en el horno vivieron ese proceso. Nuevos horizontes aparecen ante nuestros ojos, disfrutamos el tiempo presente y en nuestro camino se refuerza el compromiso de trabajar con la diversidad, construyendo paz y reconciliación, y aportando desde nuestro hacer en la dignificación de la vida en el planeta.

Concepto donado por Hugo Assmann, el cual comprendemos como el proceso de aprendizaje enriquecido por una ampliación de la conciencia. Este concepto ha sido inspirador para comprender el sentido que tienen estas chifladuras en el contexto del Doctorado en Educación, porque de hecho vivir es aprender. Con Assmann, ligamos aprendizaje y conciencia en nuestra experiencia de transformación.

En nuestra experiencia hemos enactuado el método, según Morin, como “una ayuda para aprender”. El método ha sido emergente, entendiendo la emergencia desde la teoría del caos. Es decir, a medida que vamos trabajando en la chifladura, encontramos puntos de

bifurcación donde surge una autoorganización manifiesta en todo el proceso de aprendencia: inesperada, nuevas configuraciones de la integra nuestras percepciones, emociones y estructura del ser, que nos plantean retos por la sentimientos; la razón también está presente, en incertidumbre y nos llevan al caos, al extravío y una relación co-creadora con la intuición. Somos de repente a la comprensión conscientes de que el predominio instantánea, emergente. El de la razón lineal nos ha llevado método ha implicado el error y La mediación trasciende por los caminos de una educación explorar en el error nos ha llevado que fragmenta y homogeniza. En lo instrumental, es para a entrar en los intersticios de la la mediación experienciada en nosotros el proceso aprendencia. Poco a poco vemos esta andadura, hemos visto vivido, en el que nos cómo aprendizaje y emerger relaciones antes hemos transformado y transformación están vinculados insospechadas; esto nos ha con la conciencia. Se manifiestan hemos dado a luz nuevos permitido ver coherencias e así los campos mórficos, el orden incoherencias en nuestras vidas. La sentidos. implicado, la trama oculta de la mediación trasciende lo vida, el campo akásico. instrumental: es para nosotros el proceso vivido, en el que nos hemos La mediación 7 aplicada a procesos de transformado y hemos dado a luz nuevos aprendizaje tiene una intención pedagógica. El sentidos. El hallazgo en el Doctorado del acto educativo requiere un tratamiento para que concepto de mediación pedagógica, como lo en los contenidos y en las formas de expresión exponen Cruz Prado y Francisco Gutiérrez 8 , nos haya participación, creatividad y relacionalidad. inspiró para explorar y seguir la ruta de nuestras La mediación en nuestras chifladuras se intuiciones, de recorridos previos, del desarrollo Prado, Cruz y Gutiérrez, Francisco. Las siete claves de la mediación pedagógica. Serie Holografías No. 3. Universidad de la Salle. San José. 8

Concepto donado por Francisco Gutiérrez y Daniel Prieto (1991: 38). 7

de nuestras capacidades creativas, del placer en el aprendizaje; y para continuar con la búsqueda profunda del sentido. Los textos resultantes como tesis son otra manifestación de la mediación vivenciada, son nuestro campo relacional con los lectores de estas chifladuras.

activo del infinito”, a explorar otras sintaxis 9 , permitiendo la enacción de nuestras comprensiones sobre nuevos paradigmas.

*** Nuestra apuesta metodológica y de mediación pedagógica se comprometió con la integración consciente de mente, cuerpo y espíritu en la aprendencia. Integración necesaria por la fragmentación aprendida desde la racionalidad occidental que ha separado mente y cuerpo, cuerpo y espíritu, separación que a su vez nos ha llevado a comprendernos fragmentados. En esta mediación pedagógica sentimos el llamado profundo a experimentar el holismo antes que hablar del mismo.

Castaneda(2000:3) narra: “Ninguno pensó que al proponer que el universo comenzó, el hombre había meramente reflejado la sintaxis de su lengua madre… ¿Es la sintaxis que requiere comienzos, desarrollos y finales en tanto declaraciones de hechos, la única sintaxis que existe? Ésa es la verdadera pregunta. Hay otras sintaxis. Hay una, por ejemplo, que exige que variedades de intensidad sean tomadas como hechos. En esa sintaxis, nada comienza y nada termina”. 9

El Dalai Lama (2006: 147) también nos llama la atención sobre la sintaxis. A pesar de la universalidad de la experiencia de la conciencia, las lenguas en que articulamos nuestras experiencias subjetivas tienen sus raíces en fondos culturales, históricos y lingüísticos dispares. Estas procedencias dispares representan distintos marcos cognitivos: mapas conceptuales, prácticas lingüísticas o herencias filosóficas y espirituales.

La experiencia frustrante de una educación transmisionista, donde se desconoce que la vida es un proceso incierto de educarse, nos empujó a explorar lo que Carlos Castaneda llama “el lado

¿Cómo hemos ido integrándonos? Para avanzar en esta andadura cognitiva, María Victoria y Nicolás decidimos despojarnos de toda prevención y lanzarnos al vacío. Un vacío que entendemos preñado, lleno de oportunidades para descubrir, colmado de posibilidades. Hemos viajado de la mano de la razón conciliada con la intuición, de la percepción y del amor. Ahora invitamos a nuestros lectores a adentrarse y al mismo tiempo a expandirse en este viaje.

Nuestra apuesta por la cognición estética nos ha permitido a lo largo del doctorado experienciar la trascendencia en este entrelazamiento de verdad (como el momento en que se expresa nuestra vinculación con el todo) y creatividad (como el momento en el que se revela nuestro verdadero yo en comunión). Vemos cómo una educación para la sostenibilidad de la vida requiere rescatar la cognición estética como mediación que nos permite la experiencia de la unidad. Rizoma CDT: Claves en la educación para la sostenibilidad (2015)

Preguntas auténticas Las preguntas han sido inspiradoras, son una característica de nuestro método emergente. Son preguntas auténticas que no tienen respuesta previa. Se trata de indagar hacia adentro y hacia fuera; las preguntas nos conducen por caminos de aprendencia. Son preguntas que motivan, que invocan, que nos llevan en un tránsito alejado de la búsqueda de respuestas. En estas chifladuras buscamos integración para sanar y comprender. Si vivir es aprender, las personas y demás seres vivientes en la naturaleza somos aprendientes.

hay personas que sí saben y otras que no?, ¿Cómo dar rienda suelta a la libertad para experimentar la cognición estética sin ataduras? Partimos hacia un reencuentro con nuestra manifestación artística primigenia, sabiéndonos artistas que hemos sido castrados por la educación de la modernidad. Las preguntas conducen a acciones. Nuestra resolución ha sido experimentar en carne propia lo que queremos compartir con otros. Esto resuena con nuevas formas de concebir la educación. Una educación basada en preguntas auténticas permite el aprendizaje en la vida, en la experiencia.

¿Cómo cambiar el modelo de alguien que enseña y transmite y otro que se llena de contenidos?, ¿Cómo cambiar esa visión de que

Interrogamos a quien lea nuestras chifladuras: ¿Cuáles preguntas auténticas surgen de lo más profundo de tu ser?

Taza reveladora Nos encontramos con amigos celebrando la vida de Roberto Franco. En medio de las múltiples conversaciones el tiempo de esa noche se detuvo con el relato maravilloso de Patricia Vargas contándonos sobre su método de aprendizaje. Todo comenzó porque no había tazas para tomar café, pues una colección de manchas esperaba en su estudio para ser pintadas en acuarela. Patricia habló esa noche de la aparición de un personaje mítico del Chocó, que la inspiró para su trabajo sobre las paradojas en las territorialidades de algunas regiones del país. Salimos encantados, vivimos un fenómeno de sincronicidad, experimentamos la resonancia: en medio de la celebración y del compartir tuvimos un alumbramiento metodológico para aportar a nuestro rizoma y a nuestras chifladuras.

convirtió en una práctica: se trata de interpretar lo que queda narrado en las manchas que emergen con los residuos de los alimentos en la taza. Aparecían seres fantásticos, montañas, ángeles, flores, músicos, ríos, océanos, budas, casas, animales en paisajes y contextos relacionales. Así nos volvimos asiduos lectores de los libros del doctorado y de las tazas reveladoras. En la práctica fuimos comprendiendo cómo sucede el fenómeno de percepción; lo percibido por cada persona es diferente, único, propio de su mundo, su momento, sus sueños, sus interconexiones10. Profundizamos en el conocimiento emergente, entendimos que la interrelación de nuestro ser con los alimentos genera campos que son únicos, auténticos; en la taza se dibuja el fenómeno emergente de esa interconexión de in-formación. Vimos que estábamos indagando por los aprendizajes inscritos en el orden implicado, en

A partir de ese día comenzamos a jugar, a leer cada mañana al desayuno o a la hora del almuerzo o la cena, la taza del café; también las manchas de la sopa de espinaca, el extracto de zanahoria y apio, el chocolate. El juego se

Para David Bohm es muy importante identificar este fenómeno, así como el de la propiocepción, para lograr el diálogo. 10

nuestros campos mórficos, en las resonancias del campo akásico. Así nos dispusimos a develar los saberes inscritos y aún no escritos que pulsan, en el interior de cada uno de nosotros, por ser narrados. Las tazas del café, del chocolate, de la sopa de espinaca se convirtieron en maestras de nuestro bioaprendizaje. Con esta mediación se volvió importante escoger lo que comíamos, vimos cómo en la vida cotidiana se dibujan los campos más profundos del saber y nos dimos cuenta con qué frecuencia los dejamos pasar. En esta práctica de aprendencia además experimentamos aquello que Julio César Payán nos recuerda: somos lo que comemos.

campo mórfico. Para cada tema estudiado en el proceso de educarnos, en diálogo con los autores, hacíamos la pregunta a la taza; aparecía siempre algo inesperado, misterioso, asombroso. Interpretando las manchas nos dimos oportunidades de aprender. Esta aventura con nuestras tazas vibra con la lectura de manchas practicada por Jung y sus amigos surrealistas, con quienes nos encontramos también en este camino de aprendencia. Jung habló de la sincronicidad y David Peat nos lo recuerda. He aquí una nueva sincronicidad que encontramos y toma un gran significado: tomamos este camino de la taza reveladora y la pintura intuitiva y, en medio de la andadura, aprendemos que esta dimensión del campo akásico fue también sintonizada por otros. Jung decía que la imagen es vehículo y energía de la emoción y que con ella se facilita el acceso a la conciencia; así, toda emoción es factible de transformarse en imagen.

Desciframos los vínculos virtuales y de resonancia mórfica en las manchas que se dibujan en los recipientes donde tomamos nuestros alimentos. Sucede allí un fenómeno de “comprensión intuitiva de una constelación de hechos”11 que se expresan en las manchas. Las manchas emergen autoorganizándose cada día, dejando su información para ser interpretada, concretando el Capra (1998) distingue los sistemas expertos de los expertos humanos, en el sentido de que los humanos logran esa comprensión intuitiva que se deriva de su experiencia. 11

El acto educativo ha de abrir amplio espacio a la intuición, a las manifestaciones de la emoción y el afecto; ha de apelar a la estética de la cognición, de manera que se logre un contacto profundo con la conciencia de cada ser.

En mi aproximación a mi conciencia de género aparecieron estas manchas y la pintura intuitiva se configuró con estos colores. ¿Qué reflexiones o preguntas te genera esta mediación?

Imagen 4 Taza Reveladora

Imagen 5 Útero creativo, útero enraizado

Pintura intuitiva En esta andadura nos sumergimos en la estética 12 de la cognición, reinterpretando la propuesta de Patricia e integrando la geometría sagrada: decidimos trabajar con acuarelas para plasmar en dibujos de pintura intuitiva y creativa lo que nos fue revelado en cada taza escogida. Fuimos haciendo una colección de pinturas y con ellas, establecimos lenguajeos con los amigos y familiares, con el grupo del doctorado, con nuestras hijas.

y la humedad de la acuarela hacen que siempre esté presente la incertidumbre; la persona artista nunca sabe qué resultado va a obtener; aun cuando existe la intención, los materiales generan configuraciones emergentes. Gozamos los pinceles, los colores que dieron vida y sentido a algunas de nuestras interpretaciones originales. Nos dejamos admirar, nos dejamos sorprender, descubrimos en esta mediación una suerte de ritual mágico, asistimos al fenómeno de la emergencia. El color adquirió dimensiones insospechadas, la intuición nos iba revelando caminos posibles, fuimos aprendiendo sobre la intensidad, la energía transmitida en cada color, nos dejamos llevar por el placer y por la creatividad. Hoy comprendemos la intuición como el proceso de decodificación de la información presente en el campo akásico.

Conociendo el papel y la acuarela, configuramos manchas de distintos modos, unas más libres y otras más intencionadas, plasmando una mirada intuitiva y otra mirada interpretativa, de segundo y tercer orden, sobre lo observado en nuestras tazas. Hicieron presencia nuestros sentimientos y emociones más profundas; la percepción nos permitió develar conocimientos implícitos, saberes que provienen del misterio. Estas manchas terminan por autoorganizarse, el papel

Cada pintura surgió del talento interior, de la libertad, de nuestra capacidad de soltar las ataduras y dejarnos ser. Experimentamos en esta mediación un cambio de sintaxis. Mariavé:

La estética incluye tanto lo bello como lo que carece de belleza. Lo estético es sensorial, proviene de los sentidos. La estética y la ética están profundamente interrelacionadas. 12

“siento que perdí la vergüenza y el miedo, dejé (1998), el proceso mental es cognición, así se salir a mi artista, a la maga, a la sabia”. Nicolás: logra entender la no separación de mente y “pude contactar el pozo interior en el fondo de cuerpo. La cognición es el proceso que conecta mi alma y entonces dejé brotar el agua sagrada, la estructura con el patrón. En este mismo sentido, que fluyó hasta cada una de mis Da Vinci afirmaría que, además, la células; eso fue lo que movió mis cognición es sensorial y estética. sentidos y se expresó por Hoy comprendemos la resonancia mórfica en mis *** intuición como el acuarelas”. Desafortunadamente en nuestra proceso en el que se experiencia cognitiva en este decodifica la inLuego de un tiempo de mundo occidental, hemos formación presente en experimentación, caminamos de experimentado cómo la dualidad y la mano amorosa de nuestra la separación han marcado un el campo akásico. amiga Blanca Moreno, artista abismo entre la cognición racionalque conoce la acuarela y la científica y la cognición estética. La trabaja con destreza. Esta andadura nos permitió frustración generada por esta fragmentación nos comprender un poco mejor el proceso de la motivó a enlazar nuestras chifladuras con el pintura, reconocernos en los materiales, gozar la propósito de buscar la integración para exploración de ese pliegue artístico tan poco comprendernos, para sanarnos, para vivir mejor. explorado en nuestras vidas. *** *** Mariavé: En mis primeros años de vida aprendí a De acuerdo con Varela y Maturana, la cognición tejer en dos agujas. Tejer me encantaba; durante es una condición de la vida. Varela (2000) afirma mi adolescencia tejí sacos, chalecos, bufandas. que todos los fenómenos cognitivos son también Hace muchos años dejé de hacerlo; ahora, en emocional-afectivos. De acuerdo con Capra esta aprendencia, he visto que se alumbra mi

identidad de tejedora: comprendo la trama, la red, las interconexiones. Al reencontrar a la tejedora, encuentro el sentido de la trama oculta, de esa red virtual que nos conecta: campo akásico de Laszlo, orden implicado de David Bohm, universo dragón verde de Swimme. Me gusta la metáfora de entretejerme, de reencontrarme en mi experiencia de cognición estética integradora.

el vasto diseño del todo […] no sólo en su extensión espacial, sino en su proceso emergente […]; así experimento una identidad con el orden cósmico entero dentro de mi propio ser”14.

*** Nicolás: al narrar-me en mis vivencias de ecología profunda, reencuentro a mi ser auténtico, al ser viviente que vibra en compenetración con el mundo natural y sufre con la destrucción de ecosistemas por sus congéneres, y busca en este dolor visceral la fuerza para emprender la creación de mundos eco-sociales sostenibles. La prosa poética, la taza reveladora y la pintura intuitiva hacen emerger al ser que ha “temblado con asombro en las profundidades de lo humano” 13 y sonreído con serenidad ante las maravillas del cosmos, “sintiendo una honda intimidad con cada partícula del universo y con 13 Swimme

Imagen 6 Reverencia y celebración

(1984).

Berry (1988:16).

Alfarería y alquimia En nuestra andadura la arcilla clamaba por ser amasada. Al fin en la mediación llegamos también a la alquimia que se manifestó en el horno de gas y sus misterios: así integramos los esmaltes, las pastas, los minerales. En el taller de cerámica trabajamos placas, dejamos fluir la inspiración y fueron quedando impresas en el barro nuestras preguntas, aproximaciones y comprensiones.

Cuando amaso el barro siento que se despiertan todos mis sentidos. La configuración de la alfarera emerge con toda su fuerza, siento que soy tierra y que al fundirme con el barro estoy realizando mi ser, al darle forma me doy forma a mí misma, al saborearlo y al olerlo, re-nace en mí el ser creativo que tanto ha necesitado aflorar desde mi infancia, siento que allí encuentro el sentido de mi humanidad, me reencuentro con mi pasado ancestral, con mi presente sensual, con el futuro emergente.

Cada placa de cerámica resultante es un homenaje a la aprendencia encarnada en el proceso doctoral: el campo akásico, el universo es un dragón verde, el caos y muchos big bang, los puntos de bifurcación, el orden implicado, la conciencia cósmica, la puerta siempre abierta del dharma, la autopoiesis, la sincronicidad como principio de conexiones acausales, el holograma y los fractales, la incertidumbre, el vacío preñado y el inter-ser, el lado activo del infinito, el lenguaje total y la ideogenomatesis.

El barro nos llamó, se hizo efectiva la invocación ritual a los ancestros alfareros y así realizamos nuestra chifladura de la cerámica como una manera de plasmarnos desde el sentido estético de la cognición, creando una mediación pedagógica15 plena de búsqueda y sentido.

creatividad de cada persona manifestarse y ser; experimentamos convivencialidad, dialogicidad, y relacionalidad. Nuestro taller ha sido espacio para los amigos, para encontrarnos en el hacer y de esta manera seguir encontrando el sentido de ser humanos. Ha sido espacio para compartir con nuestras hijas, con nuestras madres. Aún falta extender el proyecto a otros que pertenecen al sistema.

Hemos apostado a hacer vivir nuestro taller de cerámica como lugar de encuentro, de creatividad, de dialogicidad 16 desde el lenguaje17 estético que nos comunica a través de la arcilla. Volvimos a encontrarnos con la biología del amor; con la sensualidad que se manifiesta en el contacto con la arcilla; con la dicha de hacer juntos sin pensar mucho, permitiendo a la

Toda esta reflexión, donde están presentes los senti-pensamientos así como los razonamientos, ha sido plasmada en placas de cerámica, en un ejercicio de mediación ética y estética, experimentando la ideogenomatesis de Gutiérrez, la enacción de Varela, la aprendencia de Assmann, la sabiduría ecológica de Hathaway y Boff: lo que hemos llamado el aprendizaje activo y encarnado, experimentando la alquimia del ser.

Gutiérrez y Prieto (2004). Bohm (1996: 77-81). “Se trata, en principio, de conseguir que todo el mundo aprenda a escuchar y conocer las opiniones de los demás, porque el hecho de ignorarlas nos lleva a reaccionar de acuerdo con lo que suponemos al respecto, lo cual genera todo tipo de problemas [...] Lo esencial es llegar a ser capaces de compartir nuestros juicios y nuestras opiniones y de escuchar las creencias de los demás.” 17 Maturana (2002: 122) entiende “la cultura como el modo de convivir en el entrelazamiento del lenguajear y el emocionar en una red de coordinaciones de acciones y emociones que designo con la palabra conversar, que significa dar vuelta juntos en la conducta y la emoción.” 15 16

Imagen 7 Atención plena alfareriando en Taller Airekú Monásticos de la tradición del maestro budista Thich Nhat Hanh

MEDITACIÓN GUIADA: CHIFLADURAS ARTICULADAS Inspiro, siento la tierra Espiro, amaso el barro Inspiro, soy tierra Espiro, senti-pienso como tierra Inspiro, ¿soy yo dando forma al barro? Espiro, ¿es el barro que me da forma? Inspiro, las formas me in-forman en sueños Espiro, imprimo formas en el barro Inspiro, enciendo el fuego Espiro, cocino el barro Inspiro, me maravilla la alquimia en el horno Espiro, me encanta mi propia alquimia Inspiro, estoy aquí y ahora Espiro, sonrío

Narrativas multifacéticas Cada paso ha sido acompañado de un texto escrito senti-pensado, algunas veces más descriptivo, otras veces más interpretativo; en ciertas ocasiones nuestros textos dejan ver nuestro ser analítico18. Escribir también se volvió un gozo, que incluye la tarea de traducir y mediar, de llegar a quien nos lea, nos mire, nos interprete, de manera que podamos comunicarnos. La narrativa no sólo es texto escrito, trasciende la restricción del lenguaje verbal. En nuestras narrativas hay relatos autobiográficos o etnográficos, extractos de diarios, textos en verso y prosa poética; también hay pintura intuitiva con acuarelas, fotos de la taza reveladora, piezas de cerámica, fotos del camino y la andadura,

mantras. Todas ellas son maneras de contar nuestro proceso, de narrarnos, de reflejarnos. El texto está configurado con diferentes narrativas: la narrativa estética, lo que nuestro ser produjo en el taller de cerámica y en los dibujos en acuarela que nos ayudan a enactuar la aprendencia; la narrativa interpretativa, que expresa nuestro aprendizaje o nuestra observación de segundo y tercer orden sobre la experiencia vivida y narrada; y la narrativa en prosa o verso, donde estamos contando el cuento de cómo vivimos la bioaprendencia. Estas narrativas nos ayudan expresar, a través de la estética de la cognición, las apuestas del cambio paradigmático que nos tocan, que afectan nuestras vidas, que nos transforman. Las narrativas han sido cruciales para seguir sanando, para experimentar la integración.

Estamos conscientes de que analizar es separar y que esa separación no es parte del paradigma emergente si se queda allí no más, si no hay complejidad para establecer las relaciones y comprender el todo. Abrazamos el análisis como vía para la comprensión, pero sabemos que hay otras vías potentes y válidas, las cuales pueden tener prioridad en una aprendencia cercana al pensamiento complejo y al cambio paradigmático. Buscamos ir más allá de la dialéctica que pasa por el análisis para llegar a la síntesis. 18

En la declaración de existencia grupal al inicio de la producción del rizoma escribimos: “Nos gustan los relatos porque son maneras de comprendernos, de mostrarnos a otros, de

conocer y compartir, de sanar. La chifladura de las narrativas viene fertilizada por nuestra experiencia con el mundo indígena Letuama y Tanimuka, del lugar principal que ocupa el mito la narración ancestral- que le da un orden al mundo narrado.” María Victoria y Nicolás nos comprendemos como personas narradoras, en nuestro interior pulsan historias para ser contadas. Las diversas maneras como contamos el cuento nos permiten recrearnos en cada momento, y a la vez crear o ver cómo se nos alumbran nuevas realidades.

ritualidad se vincula con un cambio en la cosmovisión, con el reconocimiento de lo sagrado integrado a nuestro ser cotidiano. En el ritual hacemos pagamento19: honramos nuestras interconexiones, honramos ser hijos de la madre tierra, honramos a los ancestros. El ritual nos permite agradecer y experimentar esta energía que resuena en los cristales del agua, dejándonos ver su mayor belleza.

Imaginación y ensoñación Siguiendo la invitación de Mark Hathaway20 y las mediaciones creadas por Joanna Macy (1990; 1995), nos permitimos soñar con una narrativa en la que el Gran Cambio sí fue posible. Así, con el ensueño, creamos una realidad esperanzadora, fortalecemos el relato del cambio de cosmovisión

Ritual, invocación y pagamento Aprendimos en el mundo indígena sobre el poder de las palabras; aprendimos a nombrar sólo lo que es nombrable, a callar y participar en el ritual antes de crear realidades con el verbo. Aprendimos a bailar cantando, a ser uno, a evocar e invocar a las fuerzas sagradas que nos unifican, nos encantó experimentar la unidad.

Concepto endógeno de diversas etnias de la Sierra Nevada de Santa Marta y la Amazonía, que consiste en un ritual de ofrecimiento de sustancias sagradas a los espíritus guardianes del territorio, con el fin de mantener la armonía y reestablecer el equilibrio entre seres humanos y con el mundo natural al que pertenecen. 20 En conversación personal y ejercicios de meditación realizados en el curso “Carta de la Tierra, Aprendizaje Transformador y Sabiduría Ecológica” realizado en el mes de febrero 2015 en la Universidad para la Paz, Costa Rica. 19

La incorporación del ritual a la vida cotidiana y a la educación ensoñada es un aporte que podemos aprender de los pueblos indígenas. La

que nos lleva a mejores relaciones entre humanos, a una mejor comprensión de lo que nos une; así abandonamos poco a poco la fragmentación que nos separa y nos hace vivir compitiendo con nosotros mismos, con otras personas, con la naturaleza que somos.

También nos invitó a la ensoñación Carlos Castaneda; asistimos a la cita y nuestras chifladuras están impregnadas de esta práctica. Como dice Don Juan: la ensoñación nos hace posible “cambiar el punto de fijación, haciendo del sueño la entrada a otro mundo, lo cual nos permite trasladarnos a otro pliegue de la realidad” 21 . Esos otros pliegues que estamos creando resuenan en el acto de educarse, en la aprendencia, con la biología del amor, con la transformación en la convivencia misma.

Es necesario que el acto de educarse esté abierto a la ensoñación, ello significaría enactuar en la vida cotidiana, por la vía de resonancia mórfica, realidades con equidad, en paz, permitiendo el buen vivir de todos los seres existentes. Por el estudio de los fenómenos de la conciencia, sabemos que es posible la transformación; sólo se requiere la sincronicidad de muchas personas que practican la ensoñación e imaginan el mundo transformado, para que esa realidad se manifieste, tome forma, es decir para que se exprese el campo akásico sintonizado. Lo confirma Masaru Emoto con los estudios de los cristales del agua: si toda la humanidad expresa su agradecimiento por la vida y se sincroniza con la energía amorosa de la paz, bastaría un segundo para transformar el mundo.

Así mismo, con Ervin Laszlo nos estamos atreviendo a crear nuevas fábulas, explorar enigmas e inventar utopías inspiradas en Akasha, nuevos mundos a partir del campo universal del potencial cuántico. Vivimos nuestra andadura conmovidos con el lenguaje de Brian Swimme: Tenemos que entender que nuestros sueños no son sólo un producto de nuestra 21

Castaneda (2000: 97-98)

mente. Somos el cauce de los sueños de la Tierra. Somos su imaginación, el espacio incomparable en el que se expresan, con una lucidez analítica, las visiones y las esperanzas que nos guían. Para convertimos en la mente y el corazón de la Tierra tenemos que dejar que la Tierra rija todas las actividades con autoconciencia. Nuestro destino superior es dejar que la Tierra se organice de una manera nunca vista, imposible de lograr en los miles de millones de años anteriores a la aparición del ser humano.22

Geometría sagrada: canasto

el hexágono

aparecen en el proceso cognitivo. El hexágono en sí mismo constituye un método emergente, es una ayuda para la comprensión a partir de la sincronicidad, de lo que logramos descifrar, de lo que invocamos, de lo que evocamos en esta andadura cognitiva.

del

El prisma hexagonal adquirió para nosotros sentido como mediación hace años en la selva amazónica, viendo a los chamanes y las sabedoras interrogar y adivinar con los cristales de cuarzo y con las piedras. El hexágono es un patrón para seguir explorando, pues son múltiples las estructuras y las interrelaciones que 22

Imagen 8 Canasto Tanimuka-Letuama

Swimme (1998: 117).

El canasto Tanimuka y Letuama, tejido por los hombres y usado por las mujeres cotidianamente para traer los alimentos cosechados en las chagras, está constituido por un tejido hexagonal hologramático. Se puede ver la fractalidad tanto en el cuerpo del canasto, cuya trama es un tejido en tres dimensiones con agujeros hexagonales, como en la base del canasto que también tiene la trama hexagonal y en sí misma es un hexágono. De este modo el canasto Tanimuka-Letuama puede ser usado metafóricamente como un prisma hexagonal que ayuda a ver diferentes caras de la realidad, o distintas realidades desde diferentes perspectivas. Realizar el ser femenino y masculino es estas etnias implica para cada género mantener una relación íntima con el canasto: trama tejida por el hombre que crea un campo de protección y urdimbre de compañía para la mujer en la chagra, pensamiento y trabajo, nuevo amanecer.

impregnados de la geometría sagrada hexagonal; nuevamente la ponemos en juego en nuestras chifladuras. En nuestras chifladuras aparecen, como ayuda interpretativa de la aprendencia, los triángulos pintados intuitivamente para el rizoma23. Con los triángulos se forman hexágonos que pueden ser interpretados de acuerdo con la configuración resultante. La red de hexágonos puede también estar constituida por figuras rectangulares y trapezoidales. En estas chifladuras trascendimos el triángulo dando paso a toda la fractalidad contenida en la geometría del hexágono.

Para el holón del doctorado Colombia 2011, propusimos un patrón hexagonal que devino mediante la co-creación una “estrategia del panal”; ésta fue retomada en nuestro rizoma CDT para profundizar su uso como mediación en la educación para la sostenibilidad. Allí vimos el poder que tiene el hexágono para la aprendencia por lo cual continuamos alimentando esta emergencia-enacción metodológica en la geometría sagrada de nuestras chifladuras. 23

Interpretamos que este canasto invoca la flor de la vida: al ser el recipiente de la cosecha, aporta vida al alimento en un nivel de campo mórfico. Doce años de vida juntos en la selva, nos dejaron

Imagen 9 Fractalidad hexagonal Ritual de presentaciรณn del Rizoma CDT 2015

Imagen 10 GeometrĂa sagrada en la estructura hologrĂĄfica Nassim Haramein, Resonance Project Foundation

En esta andadura doctoral el rizoma 24 fue enactuado con la resonancia del hexágono, así lo escribíamos: Nuestro lenguajeo se enriqueció a partir del diálogo entre avances de la ciencia cuántica aplicados a la física de la cosmología y los vestigios arqueológicos de antiguas religiones y sistemas de conocimiento esotérico de la antigüedad. Coincide la presencia de la geometría sagrada generando un orden desde la estética, en contextos tan diversos como el arte y la arquitectura en las antiguas civilizaciones egipcia, asiria, fenicia, india, del cercano oriente y el medioevo europeo. También está presente la simetría en las formas sagradas provenientes del origen mítico del universo como recurso ordenador del pensamiento chamanístico, las prácticas la vida social en las diversas cosmovisiones amerindias, tanto en la Amazonía y los Andes, como en Mesoamérica y las distintas regiones de Norte América. El físico suizo Nassim Haramein25 viene argumentando la existencia de una red multidimensional, que parte de la figura del hexágono, con la “singularidad” o “semilla de la vida” en el centro, que se multiplica y pasa por la “flor de la vida” formada por 13 círculos y por una dinámica de “doble-toroide tridimensional”, para convertirse en un poliedro de complejidad siempre creciente que se expande en 12 direcciones, en un “proceso de crecimiento fractal que podría iterarse de forma indefinida, (…) y no sólo hacia el exterior (doblando la longitud de la arista) sino también Corporeidad, diversidad y trascendencia: claves en la educación para la sostenibilidad, (2015: 41) Ver múltiples referencias a la estructura subyacente del “universo holofractográfico” y la “gravedad cuántica” en el sitio web del Resonance Project Foundation orientado por N. Haramein: www.resonance.is 24 25

hacia el interior (reduciéndola a la mitad).” Haramein argumenta que esta red establece la estructura misma del vacío, está en el centro del proceso de creación de vida (“el huevo de la vida”) y define el patrón auto-organizativo del universo que responde a esta misma estructura holofractográfica, siguiendo un comportamiento fractal que se puede observar en toda la naturaleza. Por ejemplo, la misma estructura de la Flor de la Vida se manifiesta en música (distancia entre tonos y medios tonos), en la división celular del desarrollo embrionario y los sistemas energéticos del cuerpo humano, en la dinámica de creación de las galaxias. El modelo de estructura doble-toroidal resulta significativo, pues genera una configuración espacial única que coincide geométricamente con la red de 64 tetraedros o Flor de la Vida de la geometría sagrada de la antigüedad, y con la estructura fractal del universo identificada por Haramein, quien también describe cómo “el electromagnetismo se expande y la gravitación se contrae hacia el horizonte de sucesos de un agujero negro”. Lo cual permite visualizar una dinámica de estructura y proceso interactuantes en la evolución del universo, la cual se aplica a distintos fenómenos de la naturaleza, incluyendo nuestro lenguajear en medio de la enacción del rizoma.

HEXÁGONO 2. RECONOCIENDO FRAGMENTACIÓN

SUFRIMIENTO:

NARRATIVAS

Mi yo cuántico y el OM de la unificación Acuarela María Victoria Rivera Páez Abril 2015 La razón se disuelve en el violeta trascendente, hay emoción, creatividad. Tres cabezas que se unifican en el OM. Rescato la espiritualidad en el proceso de unificar lo fragmentado. Sanación dorada en el ritual de la vida. Muchos yoes cuánticos, estados superpuestos. Veo a la niña y a la mujer adulta que ha parido, ambas en reverencia; el útero resplandece con los colores armonizados de los chacras, la ausencia de cabeza es una representación de la razón que se rinde. Veo a la niña en un juego-ritual con esa sustancia amarilla que todo lo conecta. La olla de barro, recipiente de luz pareciera que desafía la gravedad y chupa. La magia presente en el teatro representado por la máscara crea nuevas realidades.

Imagen 11 Mi yo cuántico y el OM de la unificación

INTERPRETACIONES DE QUIENES NAVEGAN ESTA CHIFLADURA

*** Para sanar la fragmentación y lograr una experiencia de integración es necesario reconocer el sufrimiento 26 . Este hexágono presenta narrativas de diferentes momentos de mi vida en las que me descubro fragmentada, en las que reconozco que mi forma de ver el mundo es lineal, dicotómica, separada; esta forma de vivir en el mundo obedece a una educación desconectada, predominantemente racional, que desconoce las emociones, la intuición, la espiritualidad, la magia, el amor. En el seno de esa educación fundamentada en el paradigma científico y de una religión patriarcal que no permite la conexión y la re-ligación, sentí que estaba naufragando.

*** Me place poder escribir en primera persona para incorporar la comprensión de la conciencia como plantea el Dalai Lama (2006: 147): “Dada la experiencia altamente subjetiva de nuestra experiencia de la conciencia ¿será alguna vez posible su comprensión científica, en el sentido de un discurso objetivo en tercera persona?” La escritura en primera persona es reflexiva, me permite adentrarme en la experiencia total y hacer conciencia de ella. En este hexágono me propongo entrelazar estas narrativas de fragmentación con comprensiones surgidas a lo largo de esta andadura doctoral, así se ha ido desenvolviendo mi chifladura. A medida que voy narrando voy integrando esa “extraordinaria fuerza del amor, del encanto, de la recreación que ha venido manifestándose desde el comienzo del Universo” de la que habla Brian Swimme (1998: 50). De esa manera voy encontrando sentido.

Thich Nhat Hanh, maestro budista, propone una forma amorosa para la integración del ser, a partir de reconocer el sufrimiento, y aceptar que está allí. Una vez reconocido, es posible nombrarlo, abrazarlo tiernamente, como abraza una madre a su bebé que llora, y con ese amor es posible transformarlo. Mark Hathaway también propone un primer paso de reconocer el sufrimiento, siguiendo el método de Joanna Macy para sanar, ejercicios en curso Carta de la Tierra, Aprendizaje Transformador y Sabiduría Ecológica, febrero de 2015. 26

*** Mi chifladura tiene que ver con una necesidad del ser, una necesidad de integración ¿qué necesito integrar?: las múltiples María Victoria que he sido, las que han pasado por mi vida, las que pensé que habían quedado atrás (como si dejarlas atrás fuera posible), las que hoy soy. Las múltiples que hasta hoy había leído y narrado como fragmentadas. El territorio de esa necesidad está situado en mi búsqueda del sentido, también de mi profesión u oficio. El cómo de esa integración han sido las mediaciones para la transformación de mi manera de verme y sentirme en el mundo. Hay incertidumbre en el

color, el material, la temperatura, el sabor de cada narrativa; en cómo se arma la trama, en como resulta el urdido. El resultado es emergente, impredecible. Seré en esta andadura observadora de mí misma, estoy creándome, atendiendo a la afirmación de que el observador crea lo observado. Con este hexágono comienzo a recrearme en el sentido del gozo, a reencantarme, estoy inventando nuevas narrativas de mi identidad.

Seré en esta andadura observadora de mí misma, estoy creándome, atendiendo a la afirmación de que el observador crea lo observado.

Narrativas tempranas de desconexión

Dolor en la fragmentación Acuarela María Victoria Rivera Páez Octubre 2014 Veo un sentimiento de ruptura y desconexión, las raíces se profundizan para lograr contacto con esa fuente primigenia de creatividad. El árbol talado, el río contaminado, los lobos miran como espectadores de la desesperanza. El vórtice creativo en el lugar del tercer ojo refleja una esperanza de que el cambio de conciencia puede salvarnos de un panorama seco y desolador.

Imagen 12 Dolor en la fragmentación

Una manifestación temprana de la fragmentación surgió en lo que escribí en junio de 1974 cuando tenía 10 años. Encontré el papel en la biblioteca de mi padre, años después de su muerte, guardado entre un libro, y dice así:

*** Diez años después, a mis 20 años escribía: Septiembre 15 de 1984. Yo no sé si esto sea justo, pero es un sufrimiento que me consume. ¿Hacia dónde voy? No tengo razones para vivir, necesito encontrar mis motivos, debe existir algo por lo que yo quiera luchar, estoy segura que este no es el fin. ¿De dónde saco fuerzas para soportar la vida?, siento que desde dentro de mí ya no surgen. ¿Por qué estoy detenida?, no puedo entenderlo, ¿Por qué tanta confusión? Esto me pesa, me aplasta, me siento hundir en el océano, estoy naufragando. Le temo mucho a este mundo impersonal. Mi vida se llenó de escepticismo, no tengo fe ni en mí misma, ya no me confío. Hoy falta mucho amor en mi vida, siento el corazón desocupado.

“Las flores ya no crecen, los niños ya no ríen, los pájaros no cantan, la gente ya no sale por aquel rio. Ya no tenemos vida, ya no tenemos suerte.” Me impactó mucho constatar que la niña de 10 años vivía el desencanto. La ausencia de alegría, el daño a la naturaleza, la desconexión de la gente con el río, son el reflejo de una cultura fragmentada, y separada. Ya no tenemos vida, es la manifestación de la pérdida de sentido, ya no tenemos suerte, es la pérdida del encanto y de la magia en la vida. Me pregunto ¿Por qué se manifestaba el desencanto tan pronto en la vida?, ¿De dónde llegaba a mí la in-formación de que algo diferente podría existir o haber existido? Imagino que desde entonces operaban las resonancias mórficas, ser niña me permitía estar más sensible a captar los campos mórficos de ancestros que vivieron la vida de otras formas, con flores, pájaros y ríos en sinfonía.

En este momento de mi vida cursaba estudios en medicina y mi padre había muerto tres años atrás. En este relato es evidente la desconexión, perder la fe hasta en mí misma me deja ver que no tenía la experiencia trascendente. Estar en el mundo sin “razones” me deja ver el predominio de la razón y la separación de mente y cuerpo, la ausencia de la espiritualidad. Desde el fondo de

mí emergía una respuesta que poco a poco he ido encontrando: la trascendencia y el sentido están profundamente ligados a la biología del amor.

como si fuera un cerebro, un corazón o un riñón de acuerdo con su especialidad? En séptimo semestre perdió para mí el sentido de seguir estudiando medicina, me había vuelto dura, ruda, había negado toda mi emocionalidad. En los hospitales me sentía lejos de mí misma y de mi impulso de trabajar por la vida, pero retirarme era una decisión difícil de tomar: se esperaba de mí que terminara la carrera, y tuviera éxito, tanto profesional como económico, esta profesión era un pasaporte al éxito en ese momento. En medio de mis dudas comencé a hacer teatro con el grupo de la Universidad Nacional, así, fui entrando al mundo del arte escénico que me encantaba, le fui dedicando más tiempo hasta que decidí retirarme de medicina.

*** Desde que recuerdo… quise ser médica psiquiatra, me encantaba la idea de trabajar en el ámbito de la psiquis de las personas, sentía una aproximación terapéutica, sanadora, hoy podría afirmar que un impulso chamánico. Eso me llevó a decidirme por estudiar medicina. Fueron siete semestres tortuosos, en los que no me hallaba, no encontraba sentido a lo que estaba haciendo, me cuestionaba la forma deshumanizada de aprender, cada día al levantarme me preguntaba ¿Esto es la medicina?, ¿Así se entrenan los médicos? Cuando recuerdo ese tiempo siento un gran vacío en mi plexo solar. Mi idea de ser psiquiatra desapareció apenas roté por psiquiatría en el Hospital San Juan de Dios en Bogotá; luego acompañé a mi hermano en sus crisis nerviosas y hasta ahí me llegó el encanto por esa disciplina. En ese tiempo me cuestionaba ¿Cómo es posible que una persona pierda su integridad a los ojos del terapeuta, quien la mira

La fragmentación de occidente se hizo evidente en esta experiencia; al retirarme le puse un candado a la medicina, no volví a mirar esa vivencia de María Victoria que había seguido el impulso de estudiar esa carrera porque tenía un enfoque chamánico-terapéutico. Leo esta actitud como una fragmentación. Por otra parte desde la epistemología conocida, con una visión del mundo llena de dicotomías y polaridades,

veía las cosas como blanco o negro, era ciencia o arte, no podía ser ciencia y arte, mi cultura me hacía leerlas incompatibles. Mi alma (teatro) vivía separada de mi cuerpo físico (medicina).

el amor y seguramente eso fue lo que me salvó en ese naufragio. *** Este relato resuena con el texto del Dalai Lama (2006: 61) cuando se refiere a la identidad.

*** En 1990 escribía: que tan lejos de mí misma, que tan absurdo todo esto. Siento una fuerza más allá de mí que me domina, me confunde, me hacer perder mi identidad. Estoy lejos, miro mi rostro en el espejo y me doy cuenta… ¡cuánto he cambiado! Poco a poco he dejado de reconocerme. Esta soledad me llama, me interroga, me tortura. Siento miedo. Me hago falta. A veces, dentro de mí me encuentro ausente…Creo en el amor como base fundamental para poder vivir, mientras no haya amor la vida pierde su sentido.

“En la experiencia cotidiana, tendemos a relacionarnos con el mundo y con nosotros mismos como si dichas entidades poseyeran unas características intrínsecas, definibles, discretas y perdurables. Por ejemplo, si examinamos nuestra comprensión de nosotros mismos veremos que tendemos a creer en la presencia de un núcleo esencial de nuestro ser, que caracteriza nuestra individualidad e identidad como un eco discreto, independiente de los elementos físicos y mentales que constituyen nuestra existencia. Cualquier creencia en una realidad objetiva, fundamentada en la suposición de una existencia intrínseca independiente, es insostenible”.

Para ese momento había abandonado la medicina, estudiaba antropología y pertenecía a un grupo de teatro. En ese diario todo expresa mi percepción de soledad; buscaba una identidad esencialista que me definiera a mí misma sin relacionamientos. Estaba perdida, el miedo como emoción no me dejaba ver, seguía creyendo en

Imagen 13 Identidad separada

Narrativa de desencanto De niña siempre complacía a mis padres en las reuniones familiares cuando me pedían que declamara poesías populares. Al encontrar el teatro, la niña declamadora encontró un lugar para expresar sus narrativas, qué delicia el escenario, el público, la creación de una obra, los estrenos; qué maravilla ese sentimiento de cosquillas en la boca del estómago. Viví apasionadamente mi vida de teatrera con Vendimia Teatro, la cual combiné con mis estudios de antropología. Me encantaba hacer teatro y comenzamos a recorrer el país con las obras que íbamos montando; compartimos nuestra escena en las calles, en comunidades indígenas; hicimos la gran función en el Congreso de Antropología: habíamos escogido el camino de la antropología teatral. Haciendo teatro vivíamos un ritual, al actuar nos transformábamos, nos dejábamos habitar por los seres que se manifestaban en el escenario. La interconexión de energía dentro del escenario muchas veces me permitió experimentar la trascendencia: más allá de mi yo y de mi personaje, se entrelazaban las múltiples relaciones de las otras personas que

estaban encarnando a sus personajes y con el público; más allá de cada uno y de la suma de actores, logramos momentos de creación del ser emergente colectivo. Trascendíamos hacia fuera, nos expandíamos. Esta experiencia me enseño sobre creación colectiva, sobre el trabajo interconectado con otros, sobre auto-organización y emergencia. Aprendí sobre sinergia, todo ello en la práctica, sin nombre, en el proceso pedagógico de aprender – haciendo. *** Después de seis años de estar juntos, comencé a sentir que se había ido perdiendo el encanto, estaba comprometida con el grupo pero me sentía oprimida, la vida en ese momento seguía siendo difícil para mí y le había perdido el gusto y el sentido. En la vivencia con los teatreros había algo que no resonaba con mi ser; era a la vez maravillosa y dolorosa porque me sentía diferente, no era del todo parte del grupo, chocaban mis valores con los del medio, en

últimas me embargaba una sensación de soledad profunda, faltaba espiritualidad, mirada hacia adentro. En ese tiempo me di cuenta de la diferencia entre ser parte de y pertenecer. No sentía la pertenencia, esta falta de resonancia me fue llevando hacia otros rumbos. Era muy fuerte vivir con la voz patriarcal del director del grupo que siempre ponía en cuestión mi talento pero resaltaba mi esfuerzo y disciplina. “Con disciplina también se construye un actor”, decía, pero me sentía insegura por no ser talentosa, “el artista nace siendo artista” era la sentencia que me apabullaba. ¿Si yo en mi inseguridad no me creía artista cómo creaba a la artista? Me

distancié del teatro y cerré otra puerta, el mundo de los teatreros se volvió ajeno a mi vida cotidiana; corté mis relaciones con las personas que me acercaban a ese mundo; estas personas dejaron de existir en mi realidad y yo en la de ellas. Esos fueron tiempos de mucho desencanto. Reflexiono en torno al desencanto en términos de Brian Swimme, esa María Victoria “había perdido la fuerza unificadora que se expresa en todas partes”; la vida sin atracción, sin evocación de la existencia, sin identificación con el colectivo, se ve gris y aburrida. Porque el amor evoca la vida.

Imagen 14 Amor: fuerza religante

Narrativas de autoorganización por el camino de la experiencia y la vivencia aplicada, por el del diálogo intercultural, por el de re-aprender el mundo a partir de lo que nos mostraron las vidas complejas de los Letuama, los Tanimuka, los Matapí, los Yukuna. Con las mujeres me descubrí como mujer, con mi marido trabajamos vinculados con visión de género; en la selva también me descubrí como ceramista, con mi suegra Natalia en su taller fui aprendiente. Para mí fue un alivio rescatar mi yo cuántico creativo, artista, mi ser femenino; identificarme como un ser que necesita hacer, trabajar con las manos, crear.

Seguí buscando. Terminé mis estudios de antropología. Me encanta la multiplicidad de ventanas que me abrió la antropología, me permitió ver la diversidad, me abrió el camino hacia el mundo indígena, hacia la selva, hacia otras realidades que resuenan con mi ser interior; a través de la antropología cuestioné mis fundamentos de verdad basados en el método científico; experimenté otras formas de aproximarme al mundo y de conocerlo; conocí el ritual que me conectó profundamente con la unidad, con el mundo donde las malocas son de dantas, de cantores, el mundo del agua, de la tierra y el fuego primordiales. En la selva me encontré con mi otro yo, mi alma gemela, mi compañero de vida y por fin experimenté la identificación profunda. Caminamos juntos, haciendo un recorrido en contravía (-digo yo), y me pregunto ¿en contravía de qué? Del mundo académico, de la sociedad que niega y desconoce a los pueblos indígenas, de la iglesia que los trata como no civilizados, como objetos de educación; en contravía del deber ser, de trabajar por pasión y no por plata. Transitamos

Una de las reflexiones es la importancia de la primera persona, del aprendizaje a partir de la experiencia; surgen reflexiones en torno a la educación y su sentido, su forma, su color, su necesidad de transformación. Surge un sentimiento y una emoción de agradecimiento con la vida por habernos regalado la oportunidad de vincularnos, de vivir la interculturalidad, de entregarnos hasta transformarnos.

Creció nuestra familia y seguimos como andariegos por los ríos apoyando iniciativas de fortalecimiento de la autonomía en el territorio; de re-nacimiento de saberes ancestrales; de educación propia en medio del contexto intercultural que pone en relación los mundos amazónicos con la sociedad mayoritaria, colonizadora, devastadora. Apareció la realidad de la impermanencia, todo se transforma, todo fluye, todo cambia y así sucedió con nuestra realidad selvática, a pesar de que queríamos fijarla se fue agotando, se fue disolviendo, y comenzó otra realidad en la ciudad.

que educa. Cambiamos el aire húmedo tropical de la selva amazónica por el aire contaminado de la ciudad. Cambiamos el ritmo ecológico por el de los relojes y la puntualidad; volvimos a entrar en la dinámica de “no tengo tiempo”, como si el tiempo fuera absoluto. ¡Qué contradicción esta de comprender tantas cosas y no aplicarlas en la vida cotidiana! *** Vinieron tiempos de cerámica y de ceramistas, investigación, trabajo en grupo, la maravilla de descubrirme en la creatividad, un rato de mucha alquimia, de fusión del fuego, el agua, y el barro con el alma; fueron también tiempos de conexión con los ancestros. Mis manos dieron forma a pequeñas y medianas piezas, mi espíritu lleno de gozo amasó, comprobó la magia cósmica que tiene el fuego. La vida cotidiana se tornó difícil por la falta de plata, y entré en el ritmo de complementar la profesión de antropóloga con la cerámica. El ritmo y los tiempos que exige el trabajo en el modo actual de vida me fueron alejando en la práctica de la cotidianidad de hacer cerámica.

*** El regreso a la ciudad estuvo motivado también por las dudas que teníamos sobre la educación de nuestras hijas, sobre su pertenencia; la selva era nuestra locura pero ¿Sería la de ellas? Aconsejados por el chamán, nos fuimos de la selva para darles educación contextualizada en nuestro mundo occidental. Buscamos alternativas, un colegio diferente, y lo encontramos. Sin embargo sigue siendo escuela occidental, basada en apreciaciones cuantitativas sin escuchar la melodía de los seres

*** encuentro con la espiritualidad, de apertura a Hicimos juntos, Nicolás y yo, la maestría en una sanación por males enquistados. Comprendí Planeación y Administración del Desarrollo que cada persona debería ejercer su poder de Regional, (esta maestría se entrelaza con mi decidir cómo educarse, viví cómo la academia sistema familiar, con mi historia de vida: hija de un es restrictiva y separa el saber cotidiano del saber padre planificador, todos mis hermanos experto y da toda la importancia a la enseñanza, terminamos relacionados con el tema de la experimenté el poder de la jerarquía y también el planificación). La maestría placer de las decisiones me aproximó a la autónomas que por su alternatividad al desarrollo, autenticidad logran salir ¿Cómo ser, estar y actuar en me ayudó a ubicarme adelante. todos los ámbitos de la vida dentro del paradigma científico, a reconocer mis *** a partir de una visión disonancias con el mismo. Esta sanación me ha ido relacional y no esencialista? Aprendí sobre las trampas llevando a explorar caminos del lenguaje, sobre las fascinantes de verdades y realidades que autoconocimiento, de emergen desde los lugares del poder, desde los autoorganización del yo, de comprensión de mi pensamientos hegemónicos. Identifiqué mi interés corporeidad en unidad de cuerpo, emoción por rescatar el saber que se consolida en la espíritu. experiencia a través de la sistematización de experiencias sociales, para escuchar y evidenciar La pedagogía sistémica basada en las las voces de los que no tienen la palabra. La idea constelaciones familiares me ayudó a entender instrumental que inicialmente tuve de obtener un que tengo un lugar para ocupar, hago parte de título de maestría terminó siendo un proceso un sistema familiar cuyos campos mórficos están interno de transformación profunda, de representes en mi vida. Me aproximé a la

pedagogía sistémica y desde allí tuve nuevos alumbramientos.

Resultado de muchos hologramas semejantes 27 , de campos mórficos sistémicos, de resonancias y sincronicidades.

*** Llevo muchos años en los que me he *** experimentado como un ser escindido, que Resuena en mí el planteamiento de Francisco debía decidirse por la ciencia o por el arte, Varela28 sobre el “sí mismo”, él plantea que éste dando al arte siempre un no existe sustancialmente, pero lugar secundario, pues el tampoco es una vaguedad, el privilegio del saber “sí mismo” es emergente; tiene la ¿Cómo lograr que la científico sí podría cualidad de poder manifestarse educación mire al ser garantizarme una y desvanecerse, y manifestarse integralmente y comprenda sobrevivencia digna en mi como otro “sí mismo” al mismo sus campos mórficos inscritos contexto (tal era la instante. El concepto de definición de éxito que me alumbramiento también es en sus sistemas familiares? guiaba). Así, en lugar de pertinente para comprender: cultivar a la tejedora, cada vez que hago conciencia teatrera, declamadora y alfarera de mi ser se alumbra un nuevo yo, esa que se simultáneamente con la médica, la antropóloga acopla estructuralmente con el contexto. y la investigadora, permití que en mi ser interior resonara la exigencia social de escoger y hacer Abordar el concepto del “sí mismo”, me lleva a con rigor una sola cosa. Así hubo una etapa de pensar en el principio de no localidad y de mi vida para la médica, otra para la teatrera, interconexión. Yo soy en este momento la otra para la antropóloga, que no podían 27 Laszlo, E. 2004. La ciencia y el campo akásico. Una teoría conciliarse y estar integradas con esas otras que integral del todo. también seguía siendo. En esta que soy yo. 28 Varela, F. 2000. El fenómeno de la Vida.

configuración emergente de mis múltiples yo paralelos, de mis yo cuánticos, que invoco de acuerdo con los referentes que me están haciendo emerger esa “mí misma”. No obstante ahora mismo puedo ser yo, otra yo, evocando otros referentes y dando lugar a la emergencia de esas nuevas interconexiones que me configuran.

lo que descubro, con el contexto en el que vivo. Resueno mucho con Brian Swimme (1998:51) cuando propone “empezar por lo que encanta, por los vínculos, porque lo que encanta lleva a darle vida a lo que nos rodea.” *** Este yo cuántico tiene otras múltiples facetas además de las del oficio y aquí surgen otros relatos, el de María Victoria vegetariana, ambientalista, indigenista, la que practica otras medicinas diferentes de la alopática, otra espiritualidad con respecto a la católica en la que fui educada. La María Victoria alternativa, la que busca ser consecuente con otras maneras de vivir en el mundo. Todas ellas soy yo, todas apasionadas, todas buscando y buscando y siempre con el interrogante de ¿Cómo participar en la creación de mundos mejores?

*** Resuenan también planteamientos de Fritjof Capra (1998: 172) sobre la identidad. “La principal característica de un sistema autopoiésico es que experimenta cambios estructurales continuos, mientras que preserva su patrón de organización en forma de red […] A pesar de este cambio constante, el organismo mantiene su identidad total o patrón de organización.” *** Mi chifladura consiste en recuperar la mirada holística y relacional; trascender la fragmentación, integrarme, reconocerme y continuar mi camino con magia y con encanto; quiero comprometerme conmigo y actuar consecuentemente con lo que me encanta, con

En el apartado sobre el mar del libro “El universo es un dragón verde” encontré algunos alumbramientos: se trata de lograr comprender qué significa que yo, María Victoria, soy un estado cuántico. Hoy no soy la que he sido porque he “absorbido” en mis interrelaciones y

eso me ha llevado en cada momento a ser otra. A eso me gusta llamarlo la alquimia que he experimentado.

Me gusta la idea de evocar la vida. Tal vez así pueda reconocer mi destino y entregarme a él “con la misma devoción de las estrellas”. Esta necesidad de integración y comprensión ha despertado preguntas que se relacionan con mi vida actual.

*** Por su parte, Thich Nhat Hanh me centra en la necesidad de incorporar, como lo hace el budismo, el hecho de que no hay nada que sea esencia en el universo, todo está interconectado y en esas interconexiones nada es absoluto.

¿Acaso esta conciencia de la interconexión es clave para la educación que tenemos que inventarnos en el presente en Colombia para construir una sociedad en paz donde el respeto por la vida sea un principio que todos compartamos?

HEXÁGONO 3. SEMILLAS DE TOTALIDAD En este texto exploro las resonancias que he experimentado con el holismo y la complejidad, con la teoría del caos, con la propuesta de Laszlo para comprender la teoría unificada del todo y el campo akásico, con Rupert Sheldrake y los campos mórficos, con David Bohm y el orden implicado, con Brian Swimme y la nueva cosmología, con Carlos Castaneda y su propuesta de cambio de sintaxis, con Varela y Maturana en su aporte de la autopoiesis y de la biología del amor, con Peat y la sincronicidad, con la espiritualidad que me conecta con el cosmos siguiendo al Dalai Lama y a Thich Nhat Hanh. Los múltiples caminos del diálogo con autores, compañeros, familiares, amigos, conmigo misma, han visto nacer algunas reflexiones en torno a una mirada integradora, de totalidad.

Me siento naturaleza orgánica, resonancia, interconexión, campos mórficos, sincronicidad, hologramas y fractales, autoorganización, autopoiesis, complejidad.

La naturaleza orgĂĄnica que somos

Imagen 155 Madre del agua-biologĂa del amor

antropocéntrica hablar de “recursos”: recursos naturales, recursos humanos, medio ambiente, uso y manejo de la naturaleza. En este contexto antropocéntrico hoy se explotan los recursos naturales en detrimento de todas las creaturas y seres existentes, le estamos haciendo daño a la madre tierra en pro del desarrollo y sin considerar la destrucción y la pérdida de diversidad en todos los sentidos. Actualmente en Colombia el motor del desarrollo económico sigue siendo la explotación minera. Bajo una comprensión orgánica de la naturaleza surge la voz de alarma que nuestros pueblos indígenas han lanzado al planeta: hay que detener el daño que genera para la madre tierra el continuo desangre que significa este tipo de explotación. Estamos interrumpiendo el curso creador de la naturaleza orgánica, estamos generando nuestra propia enfermedad, la cual tampoco somos capaces de manejar pues en este paradigma de la separación, como nos recuerda Julio Cesar Payán, tratamos a la enfermedad como un objeto del cual se hace cargo un tercero, y no somos conscientes de la profunda relación que existe entre nosotros mismos, nuestra forma de vida, la alimentación que consumimos, nuestras

*** Soy naturaleza, esa iluminación me la produjo en un primer sentido la lectura de Sheldrake. De alguna manera siento diferente decir soy parte de la naturaleza. Ahí encuentro una separación. En los paradigmas emergentes la sintaxis tiene que cambiar. La manera como hemos aprendido a hablar, es un reflejo de una cosmovisión basada en la fragmentación. Expresarse en términos de soy parte de implica que concibo el mundo formado por partes, no están implícitas las relaciones. El cambio de sintaxis tiene que ver con una cosmovisión basada en las interrelaciones y no en los componentes, mucho más transformador si entendemos con Capra que las interrelaciones en la vida se dan entre procesos de los componentes y no son interrelaciones entre componentes estáticos. La naturaleza mecánica, separada de la humanidad pertenece a la visión construida con la modernidad en occidente. Así la naturaleza separada de la humanidad funciona como una máquina, es un objeto de dominación. Por eso ha sido posible desde una perspectiva

relaciones humanas, con los seres sensibles, con la madre tierra y la enfermedad.

como naturaleza orgánica, poderosamente creativa.

Nuestra cultura occidental escogió un camino antropocéntrico, la humanidad se consideró superior a todos los demás seres existentes y perdió la conciencia de la conexión profunda. Que loca humanidad ésta que cree que lo importante es mantener vivas las leyes de la economía, el camino hacia el desarrollo, la urbanización sin límites, el confort y el bienestar materiales, y que se ha olvidado de las emociones, de la intuición, del bienvivir, de la libertad y la alegría. Sé que crecí y me formé en esta cultura, pero dentro de mí resuenan otros vínculos, otras aproximaciones; siento que estoy inmersa en la cultura occidental y a la vez conectada con culturas ancestrales, con la madre tierra. Voy comprendiendo como cuerpo y espíritu han estado separados en mí misma, me doy cuenta de esa dualidad que he vivido de ser parte de y al mismo tiempo no pertenecer. También me doy cuenta de la falsedad de esa dualidad y con esta chifladura voy recuperando dentro de mí los legados ancestrales que me permiten comprenderme como dice Sheldrake,

*** Esa ampliación de la conciencia de lo individual a lo colectivo me ayuda a integrar mi ser. Dejo de buscarme como ser esencial, me desprendo de esa necesidad de encontrar mi identidad como algo absoluto, logro comprender que soy en interrelación, no existe el otro, no existe la tierra separada de mí, soy la madre tierra. Esa conciencia que llevan inscritas las culturas indígenas se amplía con Leonardo Boff y todas sus consideraciones sobre las implicaciones que tiene concebir a la tierra como madre que hoy necesita nuestro amor, nuestro compromiso, y sobre todo una ética del cuidado. Entiendo que esa ética del cuidado da origen a nuevas formas de convivencia, surge entre la comunidad de la tierra, se despliega y actualiza en la atención plena a mi forma de ser, hacer y estar en el mundo, como lo propone Boff: estando atenta a que cada uno de mis actos respete a mis otros humanos, respete a todos seres sensibles, y respete la dignidad de la vida.

espontánea

Complejidad: soy un misterio mi cuerpo, en mi piel morena, se expresa en mi lenguaje, en mis gustos, en mis ropas, en mis mochilas. Amo la guitarra, el vino tinto y el fuego en la chimenea así como el baile de pescado, el guarapo de piña y la maloca de tierra. Soy de aquí y soy de allá. Soy todo esto sin que sea una contradicción, soy todo sin negar lo uno o lo otro. Todo esto que soy de acuerdo con Morin se expresa en las tres trinidades: individuo-sociedadespecie; cerebro-cultura-mente y razónafectividad-pulsión. El juego de factores que se configuran cada día para ser quien soy es un misterio. Hoy soy una, mañana otra y al mismo tiempo sigo siendo la misma. Soy también lo que los otros ven en mí, soy lo que resuena con los otros. Soy árbol, soy laguna, soy nube, soy cosmos. Soy orden y desorden.

Este apartado lo escribo de la mano de Edgar Morin (2003) quien con su escritura me hace revivir la multiplicidad de yoes que soy y he sido. Con Morin puedo hablar de la sutileza de la complejidad viendo la naturaleza de mí misma tal y como ella es y no como me la ha mostrado el pensamiento lineal para simplificarla y volverla un objeto sin reconocerla. Tantas historias confluyen en la creación de la María Victoria que soy, que he sido y que estoy por ser. Soy emoción, soy cuerpo, soy cultura, soy alma gemela, soy mamífero, soy devota, soy chamana, soy artista, soy sentimientos, soy sanadora, soy antropóloga, soy madre, soy hija, soy descendiente, soy geniosa, soy despaciosa, soy yo: múltiple y compleja. Soy homo sapiens, faber y economicus, también soy homo demens y consumans. Soy la de aquí y ahora creada a partir de la de mañana y ayer. Soy un fractal de mi familia, soy al mismo tiempo mis ancestros, soy mi descendencia. Soy chibcha, negra y española. Soy a la vez suramericana, asiática y lunática. En mi late la diversidad, se manifiesta en

Sólo el misterio, el holismo y la complejidad me explican que soy desde un óvulo y un espermatozoide que se interpenetraron para desplegar el misterio del ADN que me hace humana. Al mismo tiempo soy desde siempre. Soy desde una mórula, desde una blástula, desde un embrión. Ya está configurada mi muerte, mi

trascendencia. Mi corazón y mi cerebro, mis manos, mis dendritas, cada una de mis células existen en potencia desde que mis padres crearon la vida al concebirme. Soy lo que el campo mórfico de ellos me transmitió en resonancia con mi germinación. Soy el amor de ellos, sus miedos, sus logros. Desde ese mismo momento potencialmente soy delirio y cordura, soy contención y exceso, en mi coexisten la creación y la disolución, la vida y la muerte.

paradojas. Nuestro pensamiento lineal, que se acostumbró a señalar lo paradójico como no válido hoy tiene que replantearse las maneras de mirar el mundo. Ya sabemos que el observador es creador de lo observado. La muerte es una tragedia de acuerdo con la cultura en que se vive. He aprendido de corrientes espirituales a ven la muerte como parte de la vida. He comprendido con Sheldrake que la regeneración (vida) tiene implícita la destrucción (muerte). La autopoiesis de Varela y Maturana, nos lleva al mismo lugar de la creatividad, de la dinámica, del cambio, de lo nuevo que permanentemente está emergiendo y simultáneamente al de la disolución, la destrucción, lo que está dejando de ser para permitir que algo nuevo emerja.

Soy ADN, convergencia de amor; agarre de dos hélices29.

*** Retomando a Sheldrake, es impactante ver como la vida en realidad es también la muerte. La regeneración implica que el todo vive y renace, mientras una parte de sí mismo muere. Es reveladora la sugerencia de Bohm para que los niños desde ya se formen con la comprensión de que en la vida se presentan constantemente 29

*** La charla del dharma que dio Thich Nhat Hanh en EIAB en agosto de 2014 me ayuda a comprender esto de la co-existencia de vida-muerte, él dijo: “De acuerdo con la primera ley de la termodinámica la naturaleza de la materia y la energía, es la misma naturaleza de la no muerte y no nacimiento. De acuerdo con esta ley, no se

Wagensberg, J. 2004

Interconexión: Unidad en la diversidad trascendental

puede crear la materia ni la energía, no se puede destruir la materia ni la energía. Se puede transformar una forma de materia en otra forma, se puede transformar una forma de materia en energía, se puede transformar una clase de energía en otra clase de energía. Es muy claro que la verdadera naturaleza de la materia y la energía es la naturaleza de la no muerte y el no nacimiento. Lavoisier decía muy claramente nada se crea nada se destruye, todo cambia. No nacimiento, no muerte: solo transformación. Uno puede aplicar esta clase de conocimiento en tecnología, pero si uno aplica esto en nuestra vida diaria en orden de transformar las emociones y sentimientos podemos sufrir menos del miedo, la ira, la discriminación, se trata de aplicar la ciencia como se aplica en la tecnología.

Somos el todo y el todo está en cada una de nuestras células. Esta gran diversidad que aún no hemos logrado integrar, en lo trascendental no está separada. Somos unidad y nuestro destino es la vibración conjunta en las frecuencias en las que estamos creando nuestra realidad planetaria y cósmica. Wilber nos dice que David Bohm desde “la física subatómica nos muestra como las entidades físicas que parecían separadas y discretas en el espacio y en el tiempo realmente están vinculadas o unificadas de una manera implícita o subyacente.” Fritjof Capra nos muestra la trama de la vida, la red, la maya, la matriz donde todo está interconectado, nada se escapa, nada existe realmente separado, toda separación es apariencia e ilusión. Ervin Laszlo nos aporta la conciencia del campo akásico, campo de información que está ahí desde el origen, códigos que se descifran por identidad, por semejanza.

Aplicar este tipo de insight en la vida espiritual y emocional, permite tocar la naturaleza de no nacimiento y no muerte.

***

Imagen 16 Fractales y hologramas

Amarillo y rojo de fuego original, Azul profundo del infinito, agua sagrada Verde de algas, árboles, bosques y montañas Seres vivientes, pájaros, bacterias y protozoarios La naturaleza orgánica que somos Miles de seres sensibles parecen separados en el tiempo y el espacio Unificados, vinculados Todo conectado e interconectado Universo holográfico interpretado por cerebros hologramas Serpientes cósmicas, pura creatividad Cadenas de ADN Autopoiesis Escaleras que ascienden al cosmos y descienden a las profundidades Fractales de fractales Lo macro y lo micro Bejuco del alma presente en todo el universo Movimiento, dinamismo, generación y regeneración Campos mórficos que resuenan Todo al tiempo, en el pasado, el presente y el futuro Araña símbolo Red tejida en la comunidad de la tierra Trama de la vida, matriz hologramática en el cosmos Campo akásico, in-formado Notas musicales que se disuelven en el caos, orden implicado, ¿Cuándo vamos a escuchar la Sinfonía del Universo?

En el doctorado logré una nueva comprensión de la biología del amor leyendo a Humberto Maturana (2002:116) un párrafo resonó en lo más profundo:

la emoción. Bien diferente es comprender el origen de la humanidad a partir del perfeccionamiento de la mano, como órgano sensual, que logra acomodar la caricia en cualquier parte del cuerpo, propio, o el del otro u otra. Me pregunto ¿Cómo sería la convivencia, dónde estarían el diálogo y la relacionalidad en un mundo cuyo relato generalizado fuera este de la biología del amor? Ojalá nuestros hijos crecieran con ésta comprensión, pues concebir el origen de la humanidad desde la caricia y el afecto crea otros referentes, otras redes conversacionales en torno al sentido de lo humano. Siento que es esencial incorporar la biología del amor como parte de la educación de quienes nosotros seremos sus ancestros.

“No hay duda de que la mano es un órgano manipulativo, pero la historia evolutiva que da origen a lo humano, en mi opinión, no tiene que ver primariamente con el uso de herramientas, sino con la sensualidad, la ternura, la colaboración y la caricia. Y no con la caricia como una cosa abstracta, sino con la caricia como un fenómeno de la corporalidad que hace de ella, además, un acto psíquico con fundamento fisiológico.” Este texto me permite comprender cómo la mirada desde la biología puede cambiar la mirada misma del mundo. Una cosa es ver la mano como un órgano funcional, para la producción y el trabajo, que es capaz de manejar una herramienta gracias a la oposición de los dedos. Esta comprensión con la que fui educada es una manera de ver la biología humana en la que no caben ni la sensualidad, ni

Imagen 17 Madre del agua-biologĂa del amor

*** Desde mi encuentro con Nicolás, mi alma gemela, comprendí que había algo más allá del mundo material visible y explicado por la ciencia. Sin tener elementos para explicar el “fenómeno que nos permitió encontrarnos”, mi respuesta estaba dada por la gracia de la intervención de las “fuerzas sobrenaturales” de la selva amazónica. Hoy puedo leer nuestro encuentro como un ejemplo de no localidad.

interconexión y la no localidad. La vibración que ellos produjeron en el Amazonas llegó a resonar y hacer vibrar mis células para despertar en mi conciencia la necesidad de ir al Amazonas.

*** El descubrimiento de la física cuántica de la superposición de estados potenciales me permite comprender la multiplicidad de posibilidades de mi yo cuántico. Soy onda y partícula a la vez, pero depende de quién sea la María Victoria que está observando puedo verme en un estado o en el otro. Puedo estar viva y al mismo tiempo estar muriendo. Puedo ser médica y artista, puedo ser antropóloga y sanadora, también teatrera y ceramista. Todos mis estados posibles no son excluyentes, dependen del momento en que decido abrir la caja y de las herramientas que utilice para observarme.

Estando yo en Paris sentí la necesidad de volver a Colombia para ir al Amazonas, en mi autobiografía lo he nombrado como “el llamado de la selva”. En Araracuara, en un territorio uitoto, Alicia, Nicolás y Tomás sembraban al mismo tiempo una chagra para que yo llegara a cuidarla. ¿Cómo es posible que en medio de mi admisión en la carrera de teatro en Paris, me surgiera de la nada esa necesidad de volver al Amazonas?, ¿Cómo me hicieron llegar ellos el mensaje de que una chagra me esperaba? No intervino el tiempo, no intervino la distancia, no hubo cartas, no existía el correo electrónico… Este suceso de nuestras vidas lo puedo explicar a través de la comprensión que he logrado de la

No hay una contradicción, no hay fragmentación, soy una y soy todas a la vez y eso es posible desde la mirada cuántica, mis estados se superponen, se manifiestan en el momento en el que se abre la función.

*** De acuerdo con el principio de incertidumbre cada vez voy aclarando que no existe una sola María Victoria: soy un ser complejo, puedo ser y no ser al mismo tiempo. No hay una verdadera, hay múltiples yoes cuánticos que se configuran de manera diferente de acuerdo al momento emocional, físico, intelectual, sentimental en el que me posiciono para observarme. ¿Cómo integro todas las partes que van apareciendo a medida que me reflexiono a mí misma? Quizás no es necesario integrarlas, tal vez basta con comprender lo que he sido, lo que he resultado siendo luego de cada punto de bifurcación. En últimas existe la unidad no sólo en mis células, y en mí misma, sino entre mi ser aparentemente

discreto y separado y el cosmos con todas sus partículas. Cada una de las in-formaciones que encuentro sobre mí misma se tornan interrelacionadas, interconectadas, en la trama oculta de la vida. No hay incompatibilidades; que delicia comprender que no estoy ante realidades excluyentes. Hoy comprendo que yo misma he creado con mis observaciones identidades diferentes. Cada vez que me reflexiono, en cada bucle voy construyendo mi identidad, mi ser pasado, presente y futuro. Cada vez uno diferente aparece de acuerdo a los ojos con los que me estoy mirando. Dependiendo del ángulo en el que me estoy posicionando para verme, y descubrirme.

HEXÁGONO 4. RECONOCIENDO LA IN-FORMACIÓN FEMENINA QUE ME CONSAGRA: ROJO CREATIVO, ROJO SANGRE, ROJO NEGADO, ROJO INTEGRADO Rojo sangre, rojo ancestral, rojo negado Se funde mi sangre con todos mis ancestros. Están presentes las rocas negras: son vida, anaconda que se despliega en la forma del vórtice creativo. La mujer recién parida practica la biología del amor, acaricia. Sangre y agua están en interconexión. La mujer de la rosa y su caballo es la fuerza de occidente también presente en mí. Su sangre fluye con el agua, en las raíces somos una, yo y mis ancestros. La savia del árbol de la vida es sangre, agua, fuego. Las plantas carnívoras crean mariposas, sucede la transformación.

Imagen 18 Rojo sangre, rojo ancestral, rojo negado

OTRAS INTERPRETACIONES

Vórtice muy fuerte, puede ser un hoyo negro que se chupa la vida o un bosque que da origen a la vida. Está la figura de una mujer cuidando a un bebe, amamantando… como que la maternidad está salvando la vida.

Invito a quien tiene en sus manos estas narrativas para escribir su propia interpretación de lo narrado.

Judith Prevalencia de lo oculto, de lo que está bajo tierra, veo esas interconexiones profundas bajo tierra, es fuerte, pertenece al mundo de lo oculto. Veo, mucho del mundo subterráneo hay una exageración de la raíz debajo del agua hay una planta acuática. El azul evoca agua. De pronto combinado con cosas rojas. La mujer arriba es vida, es un árbol fuerte, vital, y al lado una mujer de la dimensión de los seres humanos tan débiles frente a la gran masa de otros seres. Luis Guillermo Fuerza, presencia viva interactuando con otros seres, los colores cálidos como esa fuerza del amor conectando por las raíces que muestran un tejido polifónico de aguanaturaleza-cielo-aire-oxigeno, es una mujer fresca, radiante y prolongadora de vida…me hace pensar en el sombrero del principito que es una boa y un sombrero. Bertha Mujer interconectada con estos rostros y otros seres. Las dos interconectadas, mariposa, caballo, muy conectada con la raíz y el árbol. Son dos formas de existir del mismo ser, no alcanzo a ver qué es lo que ella tiene en el pecho…una flor. Es como una gran hemorragia. Nicolás

*** En este camino de aprendencia me he ido reconciliando con mi feminidad. Ha sido difícil reconocerme en todo lo negado: intuición, creatividad, ternura, conocimiento sutil, expresión de las emociones, ciclos menstruales, razón en el corazón; esa manera tan femenina de conocer el mundo, de habitarlo, de comprenderlo, de compartirlo, y crearlo. He ido viendo como recupero la ritualidad, la magia, la autenticidad, me nutro con consciencia de la in-formación femenina que me consagra.

*** Ser madre me ha permitido experimentar eso de ser humana con la capacidad de reflexionar y de admirarme por el misterio de la vida 30 , por la magia del amor, de la solidaridad y la cooperación. Quiero rescatar el poder del útero por ser hogar de la creatividad. Ser mujer me hace sentir poderosa, amorosa, abrazadora. Ser mujer me permite hoy expresar mis emociones sin vergüenza, y estar en el mundo con la sensibilidad despierta, atenta a la intuición. Este camino de aprendencia me volvió a contactar con mis pasiones, con el fuego y la alquimia, con las energías femeninas transformadoras que me conectan con la magia de la vida, con el descubrimiento de la manera como la energía femenina en mutua colaboración con la energía masculina genera un mundo con sentido; este camino me ha ayudado a hacer consciencia de mis puntos de bifurcación, me ha develado mi autoorganización emergente, me sorprendo, me rindo ante la incertidumbre. Dejo fluir.

Mi integración me deja ver la emergencia de mi ser mujer y todo el poder que tiene ganar conciencia de mi género, del útero, de la creatividad, de los valores femeninos negados por el patriarcado. Me encuentro con la bruja, la maga, la sacerdotisa, la mujer sensual, la mujer sexual, la que lee campos sutiles, interpreta, e integra la vida con sentido. Esto me lleva a re-vivir el encantamiento de la vida, a identificarme como ser trascendente y experimentar la conexión profunda con la unidad en donde se desvanecen las diferencias de género.

Brian Swimme 1998, me inspira para mantener abierta en mí la posibilidad de dejarme admirar por las maravillas que se me presentan ante el milagro de la vida. 30

Madre del agua-biología del amor Placa en cerámica 1260º María Victoria Rivera Páez Agosto 2015 En mi chifladura surgió esta obra cuando en el taller de cerámica me conecté con la in-formación femenina que me consagra. Invito a las personas que tomen en sus manos este texto, a dejar escrito en este espacio lo que interpretan, sienten, la reflexión que surge al ver la imagen:

Imagen 19 Madre del agua-biología del amor

Transitar por esta andadura cognitiva me hace plenamente consciente de la necesidad de una educación no patriarcal. Donde haya cabida para todas estas manifestaciones de la información y valores femeninos que han sido negados y excluidos tanto en la educación como en los ámbitos más íntimos de la aprendencia.

Campos mórficos y energías femeninas

Este contexto patriarcal moldeó mis sueños, mi personalidad, mi manera de aprender y de conocer en la vida. Las constelaciones familiares me revelaron que tengo dentro de mis genes, mis emociones y mi experiencia de familia, la memoria dolorosa de muchas mujeres que han sido invisibilizadas; he tenido en la vida la necesidad de decir “mírenme, existo, aquí estoy”. Esto forjó mi personalidad, una forma de ser rebelde, inconforme, de buscar un lugar, querer ser vista, aceptada, de que otros legitimen lo que hago.

Mi sistema familiar ha sido patriarcal como la mayor parte de los sistemas familiares de mis amigos y de las personas que tengo alrededor mío. En nuestro núcleo familiar mi madre replicó el patriarcado en el que fue criada. A ella le tocó vivir la vida que decidieron su padre y sus hermanos. Ella quería ser abogada, pero sus hermanos decidieron que esa no era una carrera para mujeres, eso sucedió en Santander hacia 1950. Le permitieron estudiar para ejercer como anestesista, un oficio de servicio al personal médico, que en su época eran en su mayoría hombres. Mi padre, quien murió siendo yo muy joven también nos educó en el patriarcado, esto lo vine a realizar muchos años después de su muerte. Durante mucho tiempo pensé que yo tenía que imitarlo siendo intelectual y validando mi lugar en el mundo al demostrar mi inteligencia y capacidad racional y analítica. Eso me causó mucho sufrimiento; oprimí mi creatividad, negué mi intuición, me perdí tratando de imitar lo que no hacía parte de mi naturaleza femenina que clamaba por expresarse.

*** En esta andadura he descubierto que también tengo en mis campos morfogenéticos otra información que me alimenta. Mis ancestros aborígenes se relacionaron de manera diferente con la naturaleza, han conversado con las piedras, han respetado la sacralidad de la tierra, han honrado a la madre y al padre. Desciendo de mujeres que fueron respetadas, que conocieron relaciones solidarias, recíprocas, que tuvieron su lugar desde donde pudieron actuar en su mundo de manera que su energía fluía con la naturalidad de su ritmo armónico. Vengo de

mujeres que fueron hijas de las hijas de la tierra, *** que con sus manos la labraron y produjeron Con Leonardo Boff (2004), comprendo cómo la alimento para dar vida, que moldearon la arcilla diferenciación sexual de la primera célula para dar forma a los recipientes que lo contienen. garantizó la diversidad y por ende la vida. Es la Esa memoria está en mis unidad y la diversidad juntas. células y me llama a No es sólo unidad ni sólo El cambio de paradigma recuperar ese lugar donde diversidad, es la unidad en la implica una experiencia lo cotidiano y lo sagrado diversidad. Mujeres y hombres, hace parte vital de la diferentes géneros, somos la gilánica desde la diversidad, sociedad, donde “ser misma materia manifestada donde los valores femeninos y hombre o ser mujer son dos de diferentes maneras. Esta masculinos se vinculan en modos distintos y diversidad se realiza en la procesos de co-creación y relacionados de ser creación de una nueva vida, colaboración, donde ninguno humanos” (Boff 2004: 53). es la diferenciación de la de los géneros ejerce poder Esta parte de mí, me abre unidad sin fracturarla. El las puertas al recambio de paradigma sobre el otro. encantamiento, a la implica una experiencia esperanza de que otros gilánica desde la diversidad, mundos son posibles, donde no exista el donde los valores femeninos y masculinos se machismo, y donde no sean necesarias las vinculan en procesos de co-creación y reivindicaciones feministas. Donde cada uno colaboración, donde ninguno de los géneros ocupa su lugar y en relaciones amorosas y ejerce poder sobre el otro. Donde existe ese “lazo reciprocas es posible recrear y encantar la vida. de placer” entre ellos y ellas y se refuerza el sentido de mutualidad entre hombres y mujeres31. 31

Eisler Riane 2006: 44

*** Con mi pareja, mi esposo Nicolás, estamos caminando cogidos de la mano, creando vínculos para una relación de cooperación, solidaria, respetuosa, y recíproca. Hemos disfrutado del amor maravilloso y creativo, y del sexo también. Hemos experienciado la biología del amor, hemos sentido como el amor es una fuerza religante, que se evidencia en la atracción y compenetración de óvulo y espermatozoide, es la experiencia sublime que puede crear nueva vida. Nicolás y yo, engendramos y trajimos a la vida tres hijas, fractales de nuestros fractales. Cada una con su propio carácter, con su identidad, tan diferentes y tan parecidas. Hologramas vivientes de nuestro encuentro. Observo la sincronicidad y comprendo. Me pregunto ¿Qué aprendizajes me corresponden al ser madre de estas tres energías femeninas? Me siento feliz de ser madre de tres hijas, he aprendido mucho de ellas acerca de los valores femeninos. También, en el mundo actual ellas nos ayudan a comprender de maneras más complejas lo que significa para ellas el género; cuestionan la dicotomía masculino/femenino, nos invitan a reconocer expresiones e identidades de

género que pueden ser bisexuales, transexuales, gay. Los asuntos del género son más complejos. En el acto educativo es necesario integrar el respeto por la diversidad. ¿Cómo es posible que actualmente sea aún tema de debate la adopción de hijos por parte de parejas homosexuales? ¿Cuándo vamos a ver esa sociedad emergente donde no hay androcracia, ni patriarcado, tampoco matriarcado, donde la diferencia de sexo no implica la dominación de uno sobre el otro, donde se pueda realizar la diversidad de géneros, de culturas, de la naturaleza misma? *** Reconozco que tenemos en lo más profundo incorporados aún muchos comportamientos patriarcales. Es difícil descubrir cuando estamos repitiendo el modelo. El lenguaje violento, las posiciones no dialogantes, y la poca valoración al trabajo doméstico han sido formas de mantener el paradigma patriarcal en el seno familiar.

Hemos tratado de ser conscientes, de formar una El género relacionado con el territorio. familia desde otras epistemologías donde se valora y respeta la diversidad cultural y de la Reconstruyendo mi historia de vida recorrí mi naturaleza que somos. En nuestra familia tenemos cuerpo como primer territorio y me encontré con un imaginario de éxito ligado a la realización del algunas cosas que quisiera compartir. Al intentar ser, valoramos las expresiones auténticas de definir mi territorio identifiqué que en muchos cada una de nuestras hijas. A pesar de que momentos de mi vida mi cuerpo ha estado vivimos como dice María Novo en una sociedad desterritorializado. Me preguntaba donde el éxito es poder, dinero, cuál ha sido mi territorio y no triunfo profesional, individual, El cambio paradigmático encontré una respuesta. ¿De mercado, hemos vivido con implica resignificar el éxito: dónde soy?, ¿Cuál es mi origen? nuestras hijas una vida Pensaba que como mujer hablar de plenitud; alternativa, ellas crecieron en latinoamericana he tenido una asociarlo con la felicidad, comunidades indígenas donde gran confusión sobre mis referentes la colectividad y la han aprendido en la vida de corporales, confusión sobre la todos los días que el éxito está participación belleza y la bondad. asociado con el compartir, con cooperativa. la felicidad colectiva. Me invaden las imágenes de niña, cuando me sentía discriminada por tener la piel morena y los cachetes rojos. El referente de mujer bonita era de piel blanca y ojos claros. En esa época de mi vida no noté la diferencia de ser mujer o ser hombre, pero si noté la diferencia de tener la piel morena. Mi cuerpo fue desterritorializado. Viví la negación de mis ancestros, sentí el peso de la pretendida

El éxito en la naturaleza es un llamado a revisar los conceptos y formas de convivencia social que existen actualmente en la red conversacional del patriarcado. Comprendiendo el éxito en la naturaleza, podremos visibilizar el valor de cooperar.

universalidad de occidente, experimenté exclusión en mi territorio más íntimo.

De joven el lenguaje de mi cuerpo causaba rupturas, me gustaba ser provocadora, reivindicar la diferencia y la diversidad con mis maneras de vestir, de portar la cultura indígena, las mochilas, las telas, los collares. Siendo amazónica experimenté un renacimiento del cuerpo, me reinventé en mi primer territorio; me di cuenta de que el género, las feminidades y las masculinidades se expresan de manera diferente en cada contexto, entendí que son construcciones culturales. Me pregunto ¿Cómo integrar en la educación la lectura de las feminidades y masculinidades en código de diversidad y de inclusión? Para los Letuama una mujer robusta, con senos grandes, con piernas gruesas, con cabello largo, es una mujer sensual. En medio de ellas yo era de verdad sensual. En mi contexto occidental mi cuerpo ha sido discriminado, fragmentado, he tenido que descolonizar mi propia percepción de mí misma para poderme ver hermosa y abrazar a mis ancestros.

¿Cómo integrar en la educación la lectura de las feminidades y masculinidades en código de diversidad y de inclusión?

*** Recordé el impacto que sentí ante los Kogui de la Sierra Nevada de Santa Marta, cuando llegué a Dumingueka y de inmediato se evidenció el género de una manera muy estética. Ellas portaban un collar rojo en su cuello: rojo ancestral, rojo menstrual, rojo de parto, rojo de útero creador y procreador. Estéticamente la imagen es hermosa y la comparto en este texto.

No entendía eso de que la sangre menstrual “contamina”. Me tocaba respetar la indicación del maloquero y la maloquera, pero me sentía confrontada. Después de doce años de andar entre ellos terminé naturalizándolo.

Imagen 20 Niñas y niños Koggi

*** En mi aprendencia, volví a experimentar distintas épocas de mi vida relacionadas con este tema tan femenino de menstruar y de ser mujer. Recordé con horror cuando en mi primera fiesta de adolecente la falda de color tabaco se manchó con mi sangre roja. Quedó inscrita en mi corporeidad la vergüenza, el horror de evidenciar mi naturaleza femenina. En ese momento de mi vida María Victoria estaba separada de esa naturaleza. Fue tan traumático ese episodio que de ahí en adelante y por mucho tiempo rechacé la menstruación y la viví como un castigo y un símbolo de inferioridad. Examinando esta experiencia en mi chifladura, comprendí que desde entonces empezó a crecer esa semilla que relaciono con la negación de la creatividad, la intuición y la ternura. Hasta los 27 años afirmé contundentemente mi voluntad de no procrear. También traje a la memoria el trabajo interior que tuve que hacer para sanar y llegar a ser madre de tres hijas mujeres, portadoras del rojo ancestral, rojo menstrual.

*** Entre los Tanimuka en el amazonas, el mito cuenta que originalmente las mujeres manejaban el yuruparí (fuente de conocimiento y de manejo de los mundos de abajo y de arriba), ellas tenían el poder. El yuruparí les fue robado, y en adelante fueron los hombres quienes tenían el poder. Desde entonces, se realiza una ceremonia de iniciación cada año, para los niños, jóvenes y adultos hombres, quienes “miran” el yuruparí y resultan fortalecidos para la vida en la selva durante el siguiente ciclo anual. Las mujeres no pueden mirar el yuruparí, ellas no van al monte, pero participan en el ritual desde la maloca, cumpliendo todas las restricciones que se requieren ante la fuerza energética que se despliega en el ritual más importante del año. Una mujer tiene el poder de dañar a los hombres de la maloca si no observa las restricciones que ordena el chamán, por ejemplo si no cumple la dieta y come pescado ahumado, sus hijos pueden ser víctimas de un accidente en el monte o de una mordedura de culebra. Todos los instrumentos que utiliza el chamán, sus plumajes quedan cargados con la fuerza del yuruparí. Estos

son guardados celosamente dentro de la maloca, y las mujeres con menstruación no pueden entrar en ella, pues “dañan” con su calor de menstruación los poderes que tienen todos estos elementos rituales. Así, cada mes, cuando la mujer sangra, tiene que salirse al monte. Yo viví inicialmente esta experiencia como una discriminación. Me sentía incómoda y retada por una cultura que me hacía sentir “contaminante” en ese momento de mi ciclo menstrual.

reencantamiento, la comprensión del poder de la sangre, lo rojo, la creatividad, la salud, el útero, el cuerpo… ahora, ya en el ocaso de mi menstruación, estoy visibilizando y acogiendo todo lo que eso significa.

*** Un buen baile en la selva amazónica es posible gracias a la colaboración mutua de hombres y mujeres, quienes en un arduo trabajo conjunto se convierten en los mejores anfitriones de sus invitados. En este contexto cultura y naturaleza están tan intrínsecamente relacionados que el baile se celebra como una actividad ritual para curar el mundo; los dones que la naturaleza ofrece en cada época del año son así celebrados, integrados, valorados. Los seres humanos piden permiso para consumirlos, y devuelven energéticamente lo que han tomado, así se crea el equilibrio, se armoniza la vida. Con la población Letuama experimentamos referentes de éxito más cercanos a la naturaleza. Con ellos comprendimos la identidad ser humano/naturaleza.

Las mujeres Tanimuka y Letuama no cuestionan esos días por fuera de la maloca, está naturalizado y son ellas las primeras que se encargan de hacerlo cumplir. Esos días por fuera de la maloca no son vividos como una exclusión; es un tiempo para ellas mismas: no cocinan, no arrancan yuca, es tiempo de ellas. Un día, después de escuchar un mito de origen de cuando las mujeres eran quienes tenían el poder, comprendí el significado de “contaminar”: lo que realmente significa es que la sangre menstrual de las mujeres es tan poderosa que le quita el poder al chamán. Existe un enorme temor por parte de los hombres de que las mujeres recuperen el Yuruparí. Ese fue un momento de

Invisibilizaciones naturalizadas: la religión y el patriarcado Cada día develo esto de estar invisibilizada en tantos ámbitos que terminan por naturalizarse. Como lo plantea María Novo, mujer y naturaleza hemos sido invisibilizadas en nuestras sociedades patriarcales. La dominación de la mujer y de la naturaleza nos deja ver hoy sociedades desequilibradas, sin armonía, en las cuales está en riesgo la pervivencia de la vida. Sin diversidad no hay posibilidad de vida.

En paradigmas emergentes debe proponerse una re-ligación diferente: recuperar la espiritualidad como fuente de sentido; religar lo femenino y lo masculino a través del poder del amor, dejar renacer a la Diosa y sus valores femeninos que están inmersos en una ética del cuidado.

*** Algunas invisibilizaciones las he ido haciendo conscientes a lo largo de mi vida: por ejemplo, aquella del poder del útero y la sangre menstrual que nos identifica como mujeres pro-creadoras; otras las realice en el diálogo con los autores, por ejemplo, Riane Eisler me evidenció la invisibilización de las diosas, me llevó a preguntarme sobre la presencia de la mujer en la religión católica, me llevó a ver la naturalización

Rizoma CDT claves en la educación para la sostenibilidad

de las relaciones patriarcales explicadas desde lo sagrado.

diferenciados pero no separados. Sin esa diferencia no sería posible la vida, no existiría la diversidad. Hay que recuperar las fuentes de religación no sólo entre humanos sino con el cosmos, Morin (1986) afirma: “El amor es la religación antropológica suprema”. Tendremos que llegar a la comprensión de que la materia que somos es la misma energía del origen, luego somos uno, necesitamos ser simbióticos, cooperativos, creadores, recíprocos, respetuosos. Tendremos que trascender desde la biología del amor32.

*** En mi experiencia, la religión católica no ha cumplido con su papel de re-ligar. Ha separado, ha jerarquizado: cuerpo y alma, hombres y mujeres, chamanismo y espiritualidad, bueno y malo. La religión católica ha invisibilizado y condenado. Condenó a la sacerdotisa, a la bruja, la maga, la hierbatera, la hechicera. Condena la diversidad, lo indígena, el sexo, el placer. Condena en últimas el amor. Condenó para siempre a la Diosa y excluyó a las mujeres. La religión católica se constituyó en un instrumento más de dominación y de reproducción del paradigma patriarcal. A partir de mi vivencia católica encuentro una enorme dificultad de conciliar y reintegrar. Comprendo que a la religión le falta recuperar la espiritualidad.

Somos naturaleza, somos una realidad materialespiritual que se re-crea desde la diversidad para dar vida.

***

*** Hombres y mujeres somos la misma materia, estamos diferenciados para realizarnos en el amor, en el vínculo al crear nuevas vidas. Estamos

Humberto Maturana trae este concepto de la biología del amor. Las sociedades se van configurando en torno a la atracción, a la caricia. 32

Aquí estoy, Me siento33 chamana Mujer Bruja Médica Alquimista Sanadora Experimento ser madre Procreadora Ceramista Creativa Educadora Aprendiente Maga en la cocina Hacedora de mundos Me siento encantadora. Cambio el “yo soy” por el “yo siento”. Entiendo con Michael Gelb (1999:98) que las afirmaciones desde la emoción, me permiten llegar a un nivel más profundo de cognición. “Aunque las afirmaciones que empiezan con yo soy pueden ser de gran utilidad, tienden a generar una reacción básicamente intelectual, cognitiva. Podemos hacer que nuestras afirmaciones funcionen en un nivel más profundo, si las planteamos de una manera más emocional, más centrada en el corazón…”. La Inteligencia Genial de Leonardo da Vinci Pag 98. 33

Imagen 21 Chamana, bruja, alquimista, sanadora

Mi pócima de vida me remite al origen al vórtice creativo Movimiento de mi vientre-cuerpo De mi vientre-vasija de barro. Vórtice amoroso que reconoce en el otro a un legítimo otro34. Me descubro aborigen. Me conecto con la tierra. Me siento simultáneamente “yo misma” y mis ancestros. Siento que soy el presente de una historia de cambios.35 Sigo mis instintos, mis emociones. Me reconozco racional y a la vez intuitiva. Me posee una energía amorosa, curadora. Me siento sol, vórtice energético. “En esta historia la emoción fundamental es el amor como dominio de las acciones que constituyen al otro como un legítimo otro en la convivencia”. Maturana H (2002: 262). El sentido de lo humano. 35 “En el momento en que la historia humana comienza, cuando se comienza a conservar el vivir en el lenguajear y el emocionar entrelazados en el conversar, los cambios en la anatomía y fisiología posibles en el suceder de las generaciones, se ven acotados en esa conservación, y nosotros somos el presente en esa historia de cambios”. Maturana H (202:113) Transformación en la Convivencia. 34

Imagen 22 Chamana, bruja, alquimista, sanadora

La sexualidad y el amor son poderosos para la vida en el universo. La memoria sexual, la aparición de la sexualidad en los humanos hace surgir el amor, la fuerza más poderosa en la vida. Una nueva ética emerge en medio de la riqueza de la diversidad, de espiritualizar y sacralizar las relaciones entre los géneros. Rizoma CDT claves en la educación para la sostenibilidad

Ciencia reflexiva que integre creatividad, intuición y saber cotidiano Mi formación dentro de la cultura patriarcal La ciencia médica y la manera como se enseña occidental me llevó a negar mi potencial reproducen el paradigma patriarcal. En su seno creativo dando prioridad a mi intelecto y no se acepta el conocimiento cotidiano; se racionalidad. Me decidí por estudiar medicina, niegan los saberes tradicionales. Se desconocen pasé por exámenes y entrevistas los saberes pragmáticos de las donde mi condición de mujer me mujeres madres, que han ponía en desventaja: “las mujeres aprendido a ser sanadoras La religión, la ciencia y la le quitan el cupo a los hombres y intuitivas en el día a día. tecnología con valores después se retiran”. En ese patriarcales, han sido proceso experimenté la *** elementos que se han discriminación de género. En ese La ciencia se ha apropiado de desarrollado para la contexto académico viví cómo la verdad, los desarrollos dominación y la las mujeres teníamos que científicos y tecnológicos están transformarnos, ser competitivas. orientados hacia dominar y invisibilización de la Ganar respeto en la academia someter al otro, en últimas la diversidad. significó sacrificar ciencia ha negado la espontaneidad, emocionalidad, diversidad. La ciencia está lejos intuición, dejar de ser auténtica. La medicina se de su pretendida neutralidad. Como lo afirma enseña sin conciencia. El saber médico de la Harding (1996:73) “la ciencia es axiológicamente academia se construye a partir de la separación. neutral en el peligroso sentido epistemológico y Se separa cuerpo y emoción, cuerpo y espíritu. Se social de que se haga permeable, transparente atiende al riñón no al paciente. Se ignora la con respecto a los significados morales y políticos emoción porque “no se puede establecer una que estructuran sus esquemas conceptuales y su relación con la persona enferma”. metodología”.

fundamentos, tendremos que reinventarnos y crear nuevas epistemologías, así como lo hicieron con la biblia, el cambio de escribanas a escribanos, vamos a crear nuevas narrativas, narradas con otras sintaxis, nuevas realidades gilánicas donde el conocimiento esté conducido hacia la verdad, la bondad y la belleza.

*** En los paradigmas emergentes se requiere la recuperación del valor de los saberes diversos, de los que provienen de la vida práctica, de los saberes que tienen significado existencial. No se trata de negar la ciencia, se requiere transformarla. Es necesario un conocimiento integrador y holístico. El conocimiento tácito y experiencial que está cargado de emoción y subjetividad, aquel que resuelve los problemas de la vida, que es aprendido en el contexto, que es diverso, que proviene desde lo intuitivo, y es participativo tiene que ser valorado y adquirir un status epistemológico. Para Maturana las fuentes del cambio son la reflexión y el amor que configuran lo ético. Por eso propone una ciencia reflexiva.

*** En esta chifladura he recorrido apartes de mi historia de vida con el foco de mi experiencia de género. Ha sido un ejercicio profundo, intenso, doloroso. Con este foco he dialogado con autoras y autoras como María Novo, Leonardo Boff, Riane Eisler, Clarisa Pinkola, Miranda Gray; muchas de estas reflexiones maduraron y emergieron en conversaciones con mi grupo del doctorado. En el camino he podido nombrar, evidenciar, resignificar y dignificar mi condición femenina. Ha sido un camino experiencial, de aprendizaje y por lo tanto de transformación; parte de lo que he ido descifrando y comprendiendo sobre lo que está inscrito en mis campos mórficos y se ha ido manifestando ha sido narrado (en acuarelas y piezas de cerámica), y ahora va a quedar escrito; otras

La ciencia debe apuntar a la creación de un mundo de convivencia centrado en lo estético, en la diversidad y en la armonía con la naturaleza. El valor del conocimiento enfocado nuevamente en la vida y no como ha sido propio del patriarcado, en la destrucción, el dominio y la muerte. Tendremos que reescribir la ciencia y sus

partes han quedado en mi conciencia, en la comprensión que adquirieron mis células, mi ADN, mis emociones.

Reconozco que este tema de la experiencia del género es muy doloroso; están comprometidas las emociones y hay una herida abierta que aún *** genera mucho dolor por la dominación y el He descubierto mis identidades de género patriarcado. Pienso que nos corresponde asumir complejas, mis vivencias, y mis maneras diversas la reivindicación de los valores femeninos con de conocer. Este texto es un una nueva visión que se aleje fractal de mí misma, es una de la lógica patriarcal que ha manifestación presente de lo generado la herida; tenemos Reconozco que este tema de que he sido y de lo que seré. que estar atentas al deseo de venganza e inculpación, pues la experiencia del género es Hoy puedo decir que la forma estaríamos repitiendo los muy doloroso; están como he vivido mi identidad de modelos que imposibilitan la comprometidas las emociones género no es estática. emergencia de una sociedad y hay una herida abierta que Reconozco en todo este distinta. Abogo por el aún genera mucho dolor por la camino la complejidad que equilibrio, la comprensión, la dominación y el patriarcado. plantea Leonardo Boff (2004) en solidaridad, la cooperación. cuanto a la construcción He aprendido con Riane Eisler concreta del género. Soy onda sobre las sociedades y partícula a la vez, soy gilanicas, me identifico. Esa es continuidad y discontinuidad. Soy femenino y mi búsqueda, quisiera ver integrados las energías masculino simultáneamente. No hay y valores femeninos en la educación, no en competencia, ni polaridad, ni competencia con las energías y valores complementariedad, hay solidaridad, comasculinos sino en esa relación de vinculación, creación, unidad en la diversidad. de mutua colaboración.

por cambiar estructuras de comportamiento y relaciones patriarcales hacia relaciones donde haya respeto y no mera tolerancia por las diferencias, donde la diversidad sea una apuesta de todos para garantizar la vida, no sólo de los humanos sino de todos aquellos otros seres con quienes conformamos la unidad planetaria, y más allá, la unidad cósmica. Seguiría trabajando porque se logre la comprensión de que la vida, como lo enuncia Boff (2004:27), está “tejida de cooperación, del intercambio profundo de toda sexualidad que crea una fusión y da lugar a la diversidad”. Pienso que urge cambiar esa relación básica de competencia, dominación, lucha, confrontación, planteada en el paradigma patriarcal, como la manera de relacionar lo masculino y lo femenino. Es necesario salir de la polaridad, de esa dicotomía que niega la complejidad para lograr una sociedad emergente donde prime la diversidad.

*** Me gusta esto de abordar el tema de género desde la biología del amor como lo plantea Maturana, a partir de allí, intentando salir de las redes conversacionales patriarcales, creando nuevos lenguajes que no son los de la confrontación y la lucha, teniendo claro que no hay un sólo paradigma verdadero, que somos uno y diversos a la vez y que no podemos apropiarnos de la verdad porque ello niega la diversidad. En ese camino he aprendido y comprendido muchas cosas. Entre ellas la relación profunda que existe entre género, diversidad y trascendencia. En la enacción de las interrelaciones entre esta triada vislumbro una posibilidad de re-encantamiento. *** Hoy declaro que me encanta ser mujer. Declaro que me gustan los hombres y que he disfrutado la vida con ellos. A pesar del paradigma patriarcal tan instalado en mi cultura y en las redes conversacionales de diferentes culturas indígenas con quienes he convivido, repetiría la experiencia de ser mujer en otras vidas. Seguiría trabajando

*** Veo la necesidad de una educación gilánica que integre los valores femeninos y permita el vínculo y la cooperación entre lo femenino y lo masculino; una educación que desestimule la

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competencia, que atienda a la intuición y a la creatividad. Una educación donde cada quien desde su género no dicotómico logre realizarse como ser. Mi experiencia es la realización de mi ser femenino, mi encantamiento tiene que ver con romper los esquemas patriarcales que me han llevado a dar prioridad a la razón, al intelecto, sentándome encima de mi creatividad y de mi magia. Sobre esto he querido hablar porque es mi bioaprendizaje, por eso este capítulo cobra sentido para mí. En este recorrido he experimentado lo que Francisco Gutiérrez llama hacer sentido, he podido resignificar y encontrar coherencia en mi experiencia de ser mujer, por eso también afirmo que la “vida es un proceso permanente de educar-se y hacer sentido”.

Veo la necesidad de una educación gilánica que integre los valores femeninos y permita el vínculo y la cooperación entre lo femenino y lo masculino

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HEXÁGONO 5. HONRANDO A LOS ANCESTROS En este hexágono que invoca y reverencia a los ancestros quiero conversar sobre la memoria, la sincronicidad, los campos mórficos. Soy la continuidad de la poesía del universo 36 , en mis células físicas están inscritas las memorias de quienes me anteceden, en el ADN de mis mitocondrias puedo reconocer genéticamente a las generaciones de mujeres de quienes provengo. Quisiera conversar con mis antepasados indígenas, y también quisiera integrar las resonancias celtas que hay en mí, la sangre que vino de occidente, mis campos que resuenan con las brujas quemadas en la hoguera 37 en la edad media. Así traigo a la conciencia mis interconexiones más profundas, comienzo a entender que no se trata de reconocer sólo mis ancestros indígenas de este territorio, incluyo e integro la totalidad y me remonto al origen, todos pertenecemos a la

Imagen 23 Arquetipos ancestrales

Inspirada en Thich Nhat Hanh y en Ervin Laszlo, quienes resaltan la poética del cosmos. 37 La cacería de brujas según Eisler (1987) fue uno de los elementos esenciales para imponer y mantener la androcracia; este modelo se apodero de la iglesia. 36

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totalidad. Comienzo a comprender el principio de no discriminación que aprendo con el budismo. *** Una educación que despierte a esta conciencia ancestral permite un cambio de valores. Si somos continuidad de los ancestros y hay interconexión, podemos observar las resonancias que nos ayudan a relacionarnos en este mundo físico con valores de solidaridad y cooperación. Una educación que renueva la continuidad de la poesía del cosmos, renueva en las personas la conciencia de la pertenencia a la totalidad. Si reconozco que soy porque la otra es, mis relaciones están mediada por el amor y el respeto. Ese tipo de educación incluye la transformación en la convivencia de Maturana, y el diálogo de David Bohm.

vida he planteado que me siento marciana. Otras muchas he dicho que siento que pertenezco a otro tiempo. No es casual decir que las mujeres somos venusianas. Voy comprendiendo aquello del “Universo en un Átomo”. La resonancia es memoria, la resonancia es pasado, presente y futuro al mismo tiempo. No hay tiempo ni espacio absoluto. Resuenan vibraciones universales, van más allá de nuestro planeta tierra. *** En mi dimensión terrestre, cada vez que sentada en mi cojín de meditación hago sonar el gong, me conecto con las montañas del Tíbet. Desde niña he dicho que quiero ir al Tíbet y de alguna manera esa campana que me alerta y me ayuda a situarme en mi aquí y ahora me hace volar a lo profundo de un monasterio en donde alguna vez produjo ese sonido mágico originado en la vibración de sus materiales. Ese mismo monasterio donde algunas de mis células ancestrales meditaron con el paisaje montañoso. De alguna manera comprendo que ya conozco el Tíbet.

Resonancia: desde siempre resuenan en mí los ancestros Es claro que soy la creatividad evolutiva, siento mis raíces ligadas a ancestros que incluso no son del todo de este planeta. Muchas veces en la

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La memoria estรก inscrita en los campos mรณrficos, se manifiesta por resonancia de las similitudes.

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Imagen 24 Ancestras y descendientes: chamanas, magas, brujas quemadas en la hoguera

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NARRATIVA INTERPRETATIVA Somos dos y al mismo tiempo somos la misma, ¿Simultáneas en mundos paralelos?, ¿Hologramas en tiempos y vidas diferentes?, ¿Observadas por otros seres desde diferentes estrellas e instrumentos?, ¿Pertenecientes al futuro solidario y gilánico imaginado?, ¿Diosas del pasado?, ¿Manifestaciones presentes de los valores femeninos que emergen aún con la opresión y el patriarcado?, ¿Fractal de mis ancestras?Se manifiestan en mí los campos mórficos de las Diosas, de magas y hechiceras quemadas en la hoguera, se manifiestan simultáneamente los campos mórficos de chamanas aborígenes de territorios amerindios. Con esta obra honro mis ancestras, mi feminidad, mi fecundidad, mi capacidad de procrear, crear y transformar, de encantar la vida. Enactúo la educación que quisiera para mis descendientes. Del cosmos, del infinito descienden seres, emergen de las estrellas rosas, pájaros, mariposas, delfines, humanos, todos constituidos por los mismos materiales, el mismo origen, diversidad y unidad al tiempo. La maga se conecta con la luna menguante, tiene en sus manos el cáliz simbólico, la olla de barro, la varita encantadora, la fuente de vida. La serpiente, -anaconda ancestral, cadena de ADNalimenta la olla con su poder transformador; la mujer brilla, camina suspendida sobre ella, mujer y serpiente también son dos y una, descifran códigos ilegibles para la racionalidad moderna. Se comunican a través del campo akásico, resuenan entre ellas similitudes que las interconectan. Hacia el cosmos infinito ascienden figuras, seres que pueden ser humanas y libélulas, semillas, células, flores, autopoiesis. Pura trascendencia. No tienen género, pertenecen a la unidad de todo lo diverso. Ella, la hacedora, cocina el barro y crea la vasija, experimenta la alquimia de su ser; ella la alimentadora, con el poder del fuego transforma en su olla de barro el veneno en alimento. El agua fluye y ella la consagra, se interconectan cristales de amor y agradecimiento. Esta chamana experimenta la ritualidad cotidiana, invoca la vida, es también la madre tierra, descendiente de la anaconda, experimenta el inter-ser, su interconexión con todo lo existente, su ser naturaleza, su conocimiento, su impermanencia. Esta chamana practica el ritual, la curación de mundo, es holograma de aprendencia.

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*** Me conmueven las montañas de Guayabal de Síquima. Al preguntarme por el significado de “síquima” retorno a mis ancestros, los chibchas que recorrieron el territorio de Cundinamarca, que trazaron los sitios sagrados, los sitios de pagamento, que recorrieron en carreras las montañas y sus lagunas, agua sagrada y purificadora. Antes ellos se purificaban con el agua, ahora tenemos que purificar el agua para poder tomarla…ese es el absurdo de la vida de occidente, esa es la fragmentación de mi espíritu ligado a mis ancestros que no logra encontrarse en la vida actual, en una ciudad llena de caos, pavimentada, con huecos en cada esquina, y en medio de ese valle maravilloso que se observa desde Monserrate, cerro sagrado, chacra del mundo, punto crucial de la sabana de Bogotá. Que bien sería volver a hacerle pagamentos a la madre, producir vibraciones de sanación, de amor; transformar la vibración de la ciudad a través del agua que baja de sus cerros. Pienso y siento, soy agua y su resonancia. Si soy un cuerpo conformado en un 60% por agua, qué maravilla comprender que no hay forma de verme separada ni diferente del resto de creaturas

existentes. El agua circula por todo lo que existe y en ese proceso lleva la información y la memoria. Mi memoria ancestral se conecta a través de las formaciones del agua con mi presente. Que impresionante poder comprender que hoy puedo ver aquello que sucedió hace más de 400 millones de años, lo puedo percibir, lo puedo actualizar, revive y renace cada día en mí y en todos los seres que me rodean. Estas milésimas de instante de conexión profunda se ven interrumpidas por el ruido callejero. Vuelvo a mi aquí y mi ahora como un ser nuevo, con otra mirada que me permite saber que el encantamiento y la reconexión son posibles. *** Hago un homenaje a Masaru Emoto en todos mis dibujos, el agua presente sin duda produciendo sus cristales más hermosos. Necesitamos reivindicar las emociones, invocar el amor en la educación, la ternura, el agradecimiento. Muchas personas educadas en la biología del amor que propone Maturana, tendrán en sus cuerpos cristales de agua maravillosos; establecerán nuevas relaciones, diferentes,

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interconectadas. Harán pagamento a la madre tierra, sentirán la conexión profunda consigo mismas, con el planeta, con el cosmos. Agradezco el aporte de Emoto al llamar la atención sobre las emociones y su resonancia. Invito a sembrar una educación cargada de agua programada, con emociones elevadas, que nos permitan cambiar la forma en la que hoy vemos natural vivir en el planeta. Volvamos a nuestras lagunas sagradas, reverenciemos el agua dulce, ese milagro que tanto hemos maltratado; dejemos fluir el agua en las cascadas, sembremos árboles.

Imagen 25 Agua sagrada

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Campos cotidiana

Mórficos

Sincronicidad

mórfico se reproduce en una sesión y allí emerge lo que no es visible a los ojos del presente. He podido ver e interpretar los factores de desorden, he podido leer las interconexiones que son incomprensibles para la razón, he logrado desatar algunos de mis nudos, mis lealtades, mis ataduras, para fluir y seguir siendo naturaleza viva, orgánica, espontánea y creativa. He podido así mismo reconocer el dolor de las mujeres que me antecedieron. Honro a todas mis ancestras.

Me apasiona el tema de la resonancia y de lo que se deriva de la misma en la creación de las sincronicidades y los campos mórficos. Sheldrake (SF:70) afirma que el concepto de “la herencia como una forma de memoria orgánica inconsciente” se había ido desarrollando, hasta que en 1920 aparece la herencia explicada en función de los genes que obra de manera mecánica. He comprendido que los campos mórficos son esa memoria orgánica que toma forma y se manifiesta en contextos culturales, familiares donde hay resonancias por similitud.

*** Las sincronicidades son coincidencias significativas, son convergencias. Hoy me lo puedo explicar de una manera más clara con las lecturas realizadas. David Peat (2003) dice que son “puente entre la materia y la mente” lo entiendo cuando veo el fenómeno sincrónico y lo puedo interpretar, le doy significado. En mi vida cotidiana, con mi alma gemela me pasa muy seguido que sin estar conversando sobre un tema de repente los dos al mismo tiempo resultamos haciendo mención del mismo, es muy seguido vernos diciendo “no te puedo creer yo estaba pensando exactamente lo mismo”. Nos sucede lo mismo con la música y las canciones, de repente

En pedagogía sistémica he experimentado la aplicación de los campos mórficos en mi sistema familiar. Las constelaciones familiares son biopedagogía; es una mediación posible de aplicar en la vida para la aprendencia, ya que existen estas resonancias que han creado campos dentro de cada sistema familiar. El tiempo y el espacio no intervienen, el campo

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yo tarareo una melodía que él está escuchando en su interior, es como si tuviéramos canales de comunicación materialmente inexistentes: vivimos en sincronicidad cotidiana.

conduce al universo hologramático. Siguiendo a Pribram (1986) entiendo que la sincronicidad existe porque estamos en un universo hologramático, porque existen “simetrías subyacentes”. El tiempo y el espacio desaparecen en la esfera de las frecuencias que resuenan. Pribram nos dice que la ciencia explica los fenómenos a partir de la causalidad. La vida puede comprenderse de manera integral y mucho más amplia recurriendo “a las sincronías, las simetrías y a las dualidades como principios explicatorios.” La maravilla de descubrir la sincronicidad y los campos mórficos está en buena parte en su potencial poder explicatorio a sucesos de la vida que por ser racionalmente incomprensibles quedaban por fuera de la realidad nombrable.

Las sincronicidades son también complejas, tienen diversas facetas, son como un cristal que adquiere el significado para quien lo está leyendo, tienen matices, aparecen con colores. La sincronicidad es el fenómeno que nos ha permitido interpretar la taza reveladora en nuestra mediación pedagógica. Enlazo este tema con la resonancia, pues si lo observado por mi, al ser interpretado resuena en mi interior me encuentro ante una sincronicidad. Las sincronicidades existen aún sin que nosotros, las personas, podamos percibirlas, converge el llanto de los árboles, converge el canto de las aves, En nuestro lenguaje se nombran, se convierten en sincronicidades en cuanto son significativas y los son porque están inmersas en el campo akásico, se revelan, se develan por resonancia. Entre los seres sensibles se presentan fenómenos sincrónicos, entre los animales, con las piedras, con los árboles…no sólo los humanos experimentamos la sincronicidad. Este tema nos

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La mayor sincronicidad que he experimentado en mi vida sucedió en un ritual de curación de mundo, en una maloca amazónica, cuando fui invitada a bailar por la anciana mayor quien estaba completamente integrada en el círculo que resonaba al unísono. En ese baile, en ese instante sentí la identificación profunda de la que habla la ecología profunda, me sentí música, planta, árbol, pescado, tigre… Todo resonaba en un solo ser, una sola especie, unidad indivisible y trascendente. Esa experiencia me permitió experimentar el holismo.

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Imagen 26 Campo mórfico

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He aquí la información oculta en la cadena de ADN, todo aquello que está inscrito dentro del 90% desconocido.

Campo in-formado que ha sido y resonancias descodificado, sincronicidades que dan sentido a todo lo vivido.

Cadena de ADN, comunicación, antena que sintoniza la información. Transformación y códigos que se descifran. Aliento vital, alianza cósmica.

Una palmera, a la vez escalera que asciende o que desciende. Un rio que se entrevera con esa palmera y es árbol y océano. Pájaros, peces, humanidad tomando forma. Culturas diversas donde se manifiesta la morfogénesis.

Campo Mórfico Mosaico en placas de cerámica 1260º María Victoria Rivera Páez Septiembre 2015

Hologramas y fractales y las antiguas culturas que hablan de la realidad como una gran ilusión. Me pregunto ¿Qué El ADN es un fractal, las partículas subatómicas significa para la humanidad comprender que son fractales, la realidad que alumbramos es estamos en un universo hologramático, y que fractal, el cosmos entero es un fractal de fractales nuestro cerebro es una parte de y así…ascendiendo o ese holograma? Le pondríamos descendiendo en la escala atención a otro tipo de nos encontramos ante la Campo akásico: en ese realizaciones. Importaría menos la evidencia de la configuración campo está presente todo lo cantidad de bienes que de fractales que permiten que se ha creado y lo que se poseemos, importaría más la entender cómo operan los disuelve calidad de lo que nos comemos. Si principios holográficos. Desde el holograma del universo es una el micromundo hasta el matriz que existe desde todos los macrocosmos opera la tiempos, estamos hablando del mismo campo realidad holográfica. Por eso podemos akásico de Laszlo. En ese campo está presente comprender que el agua se configura y responde todo lo que se ha creado y lo que se disuelve. a las emociones; entender que el universo con un Desde siempre hay una continua transformación mensaje de gratitud puede cambiar en un hologramática, que trasciende el tiempo y el segundo; pensar en el re-encantamiento, en la espacio, es una interpretación de frecuencias. regeneración de la naturaleza y de la vida. Todo lo que emerge es fractal de lo que le precede. Somos fractales de fractales. En el *** macromundo vemos esa posibilidad infinita de Esa realidad dura y mecánica que muestra la expansión de los fractales y en el micromundo ciencia es tan solo un holograma que depende vemos la posibilidad infinita de contracción de los del cerebro hologramático que la observa. Es mismos. maravilloso ver como sintonizan la física moderna

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*** El paradigma hologramático me permite hablar del orden implicado de David Bohm. Me permite entender por qué se desarrollan diferencialmente las células del embrión conformando riñones y piel con tanta perfección. Todo está implicado en un orden que se despliega de manera paradójica, a veces incomprensible, a veces con la apariencia del caos y finalmente siempre con sentido, siempre con precisión, siempre con incertidumbre. Ferguson (1987) se pregunta ¿Qué es lo que nos fragmenta? ¿Qué nos hace un todo? Si la humanidad puede integrar la comprensión de este paradigma y con ello generar resonancias armónicas podríamos cambiar el curso del planeta en menos de un segundo. ¡Cuánto falta para que la educación en nuestra cultura occidental logre integrar, y vivir la experiencia de la realidad hologramática!

Thich Nhat Hanh en sus enseñanzas plantea que visitar el nivel cuántico no es más que habitar el mundo espiritual donde no existe la dualidad. Regresar a la plena conciencia para vivir plenamente es tan fácil como inspirar y espirar

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Conversación sobre la mediación estética. ¿Qué conversaciones surgen de esta imagen sobre hologramas y fractales?

Imagen 27 Mujer traza holográfica

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Me siento rama, pájaro, canasto. Fibra contenedora. Mujer chagrera que produce con las manos. Mujer sensual de pelo largo, gris, lacio y abundante.

Realizo la interacción de información instantánea: el campo akásico.38 Me siento una con las plantas. Me siento mar y rio, vertiente de Amazonas. Me siento ciudadana planetaria39. Punto de bifurcación. Traza holográfica.

Condensación de años y sabiduría. Corporeidad tangible. Trascendencia. Con mi arte Invoco a la mamá de yuca brava. Invoco a la dueña del canasto. Invoco el encanto maloquero, la integración del “pensamiento”.

Me siento uno de tantos estados en universos simultáneos40.

“La esencia de la no localidad es la acción a distancia sin mediación… La interacción no local es una interacción informativa instantánea (…) es mejor considerarla como la acción de un campo informativo físicamente real” Laszlo, E. (2004: 78). 39 “La lógica del sentir, de la percepción, del bien-estar, nos conduce a la interdependencia y relación armónica con los otros seres que nos descubre el verdadero sentido de lo que es el ser humano y de cuáles habrán de ser sus funciones dentro del conjunto de los otros seres del cosmos.” Gutiérrez, F. y Prado, C. (SF:59) 40 Laszlo, E (2004:68) 38

Alumbro el ser total que soy y me comprendo. Imprimo la relación virtual que me conecta.

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*** Mi conexión con la naturaleza y con mis ancestros me ha permitido vivir la experiencia de espiritualidad y trascendencia. Esta experiencia no niega al otro, abarca la diversidad, caben las Diosas y los Dioses. La identificación profunda de la ecología profunda es una experiencia de trascendencia, al comprendernos naturaleza llegamos a comprender que vida y muerte son el mismo proceso. Volví a pensar en Sheldrake, en la regeneración y el sacrificio de unas células para que otras vivan. No hay principio ni fin. Al morir nos convertimos en el todo que somos, allí la polaridad y la escisión de masculino-femenino no cabe.

orígenes. Somos unidad con la naturaleza y por lo tanto no necesitamos dominarla. El amor es la experiencia fundamental religante y trascendente de los seres humanos y la naturaleza.

Tendremos que volver a la espiritualidad de los ancestros (tanto aborígenes amerindios como los de la Creta antigua), a sacralizar cada uno de nuestros actos en la vida. Tendremos que integrar que no hay una única verdad trascendente. Trascendencia y diversidad están íntimamente ligadas. La espiritualidad no es un territorio de negación del otro; la espiritualidad es la realización de la unidad cósmica; es la comprensión de que somos unidad desde los

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Resonancia armónica Placa en arcilla Emalte a 1260ª María Victoria Rivera Páez ¿Acaso en la meditación y el silencio logramos escuchar la sinfonía del universo?

Imagen 28 Resonancia armónica

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Imagen 29 Tomo refugio en mi isla interior

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HEXÁGONO 6. ENCANTAMIENTO ES ALEGRÍA, CONEXIÓN, ESPIRITUALIDAD, CONCIENCIA CÓSMICA Mi bioaprendizaje ha estado inscrito en una “cultura occidental” donde el patriarcado se manifiesta a través del predominio de la razón, de una cosmovisión centrada en la superioridad de la humanidad frente a todos los seres existentes y por lo tanto en la dominación de la naturaleza; también en la concepción de una superioridad de lo masculino frente a lo femenino y en consecuencia una dominación a las mujeres y los valores femeninos. Aprendí también en una religión antropocéntrica, jerarquizada, que discrimina y excluye a las mujeres, que separa cuerpo y espíritu, y que en lugar de religar fragmenta. Con esa narrativa, mi vida carecía de encanto, desterré a la maga, a la sacerdotisa y me sentí por mucho tiempo en una soledad agobiante. Sólo el amor como fuerza religante iluminó nuevamente mi camino.

nos lleve a vivir de otra manera, practicando la ética del cuidado, siendo conscientes de nuestras interrelaciones y cuidándonos mutuamente. Esa cosmovisión me despierta a la conciencia cósmica, que no es más que la remembranza en la vida cotidiana del origen de la vida hace cuatro mil millones de años, esta remembranza actualizada me hace sentir piedra, planta, árbol, agua, loba y me permite reconocerme en cada ser, en cada persona que cruzo en mi camino. Es la remembranza de hace 20 mil millones de años cuando el hierro por saturación generó el estallido que dio origen al pluriverso. La educación debe resonar con la nueva conciencia cósmica y el acto educativo debe invitarnos a celebrar la sacralidad de la vida cotidianamente, debe evocar nuestro origen cósmico y por tanto nuestra interconexión con el todo.

La vida de la madre tierra y la supervivencia de todas las especies incluida la humanidad están clamando por un cambio en la cosmovisión que

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Del antropocentrismo al ecocentrismo comunidad, de los ancestros, es de todos los seres que lo habitan, es de sí misma. Una vez está escogido, es necesario el diálogo con los espíritus y guardianas que habitan el terreno, para lo cual el chamán hace un ritual de “curación”, ofrece mambe y tabaco, negocia para que haya abundancia en salud, en alimento para todos. Ese ritual refleja el respeto por todas las formas de vida y por todo aquello no visible que lo habita. Son muchos los seres a los que hay que pedir permiso, a los que se honra con la curación. Cada momento que sigue para la chagra: el de talar, tumbar, quemar, sembrar y cosechar tiene su propio ritual de curación, también cuando se deja enrastrojar para que renazca nuevamente la selva.

Mi tránsito del antropocentrismo al ecocentrismo comenzó hace más de 20 años, cuando pude conocer culturas indígenas amazónicas que vivían con una cosmovisión muy diferente de la mía. Conocer sus formas de vida, su manera de pensar y actuar me hizo replantear el concepto de lo social. Participar por ejemplo en el ritual para sembrar una chagra y vivenciar la forma como se ocupa ese lugar para producir alimento me permitió ver la diferencia de cosmovisiones. En la cultura Letuama no existe el concepto de “tierra baldía”, porque la selva está habitada por los espíritus y guardianas que no pertenecen a esta dimensión física visible. Se manifiestan como seres que hacen parte de lo social, pueden ser espíritus de plantas, de animales, incluso espíritus que habitan las piedras. En su cosmovisión lo social está ampliado, la humanidad es otra más dentro de los seres existentes; las plantas, los animales y las piedras son seres de este y de los otros mundos. Así, yo aprendí de ecocentrismo con los indígenas. Para sembrar una chagra, me decían: no se hace así no más. La familia busca un terreno, ese terreno es colectivo, es de la

*** Desde mi experiencia con los Letuama y Tanimuka mi conciencia ambiental se expandió hacia lugares insospechados, ni siquiera imaginados. La vivencia de una vida donde lo social es más amplio que los seres humanos me abrió hacia la comprensión de una conciencia menos antropocéntrica, una conciencia más

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ecocéntrica. No sólo los seres humanos, los Mi comprensión en su momento, me llevó a ver la animales y las plantas tienen conciencia, también diferencia entre una cosmovisión antropocéntrica y sobre todo las rocas, esos seres “inertes” que me y una cosmovisión ecocéntrica. Mi interpretación enseñaron en mis clases de biología que de esta práctica me llevó a pensar que para los pertenecen al reino mineral, son ni más ni menos Letuama, la conciencia de pertenecer a un la memoria del pueblo Arhuaco de la Sierra ecosistema les permitía ampliar su comprensión Nevada de Santa Marta. Las de lo social, así todos los seres piedras dan consejo, las hacen parte de esta piedras investigan, las categoría, desplazando la No sólo los seres humanos, los piedras tienen respuestas visión de superioridad de la animales y las plantas tienen prácticas para aplicar en la humanidad por encima de conciencia, también y sobre todo vida cotidiana. Es distinto otros seres existentes. las rocas, esos seres “inertes” que que los seres humanos no me enseñaron en mis clases de sepamos cómo *** biología que pertenecen al reino comunicarnos con su En mi tránsito por el camino de conciencia, a que lo que la conciencia ecológica, he mineral, son ni más ni menos la hemos llamado “seres podido entender la memoria del pueblo Arhuaco de inertes” sean seres carentes conciencia como acción. la Sierra Nevada. de conciencia. Esta discusión Aplicar en la cotidianeidad y la enriquecen los desde donde estoy, aportar planteamientos de Danah Zohar (1996), pues me para el cuidado del planeta, de la madre tierra. evidencia que el pensamiento científico en este cambio paradigmático, está llegando “tarde” a Un ejemplo de ello es que apago luces todo el comprensiones que tienen incorporadas culturas tiempo, sé que si mi consumo disminuye, ese es milenarias en los diferentes continentes. un aporte que favorece la continuidad del

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Conciencia cósmica

planeta, y por lo tanto mi propia continuidad en mis descendientes.

El camino de aprendencia que he seguido después de la experiencia amazónica, en donde incluyo los alumbramientos sucedidos en el doctorado a partir del cambio paradigmático, me han llevado a comprender que se requiere un cambio de cosmovisión donde no existan los centrismos. Se trata de integrar el holismo, la pertenencia al Cómo le haría de bien al cosmos; de entrar en otros Se requiere un cambio de planeta que la educación niveles de conciencia, integrar cosmovisión donde no existan los promoviera en la la mente compleja y adentrarse humanidad la conciencia centrismos. Se trata de integrar el en la mente hologramática. Con del cuidado planetario. Ervin Laszlo, Brian Swimme, holismo, la pertenencia al cosmos; de entrar en otros niveles Leonardo Boff y Mark Hathaway ¿Qué se requiere para que se alumbró en mí el llamado a de conciencia. eso pase? un cambio de conciencia, la integración de una conciencia ¿Cómo orientar la mirada cósmica. Mi chifladura me está de tantos seres humanos que están embarcados llevando por el camino de comprenderme en el mundo del consumo, del desarrollo unificada, de saberme total y a la vez simultánea. despiadado, en el mundo donde lo único que De comprenderme no sólo en mi humanidad sino importa es la riqueza material, el poder, y el en el sentido de mi pertenencia planetaria, y más individualismo? allá, en mi origen cósmico, siempre presente, intangible, conectada. Otro ejemplo es que no compro icopor, nada que venga en ese empaque hace parte de mi vida cotidiana. Otra acción consecuente con mi visión ecológica fue dejar de comer carne, ser vegetariana ha sido un acto de conciencia y de respeto por la vida.

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Conciencia planetaria cósmica Placa en biscocho 900º María Victoria Rivera Páez

Experimento el encantamiento. Mi propósito es auténtico. Estoy viva, cambio de apariencia. ¡Me asombra el cosmos! Soy también esa mujer con alas que trasciende; lluvia cósmica que no cesa de llegar a la tierra dando forma a todo lo existente. Pura creatividad, juego con un pez que navega en mi vientre. Soy masculino y femenino, mujer árbol, hombre rama. Soy flor y bejuco. Vengo del cosmos, mis ancestros están en cada uno de los vórtices suspendidos en mi historia de vida. Estoy conectada con el universo, trasciendo. Es otro el relato del sentido de lo humano al conectar cotidianamente la vida con esta dimensión planetaria, y cósmica.

Imagen 30 Conciencia planetaria y cósmica

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*** Este tríptico fue el resultado de una reflexión sobre mi pertenencia como ciudadana planetaria 41 y cósmica. Encuentro elementos recurrentes y recursivos con otras obras creadas con mis manos en el contexto de esta chifladura. Esa mujer soy yo, siempre estoy presente, me busco; en cada pieza que surge me resignifico. Reflexiono, miro hacia adentro y me expreso. Me encanta el relato del mundo que emerge cuando siento que soy naturaleza 42 . Me encuentro siendo agua, tierra, fuego, y viento. Mi espiritualidad se desenvuelve siendo cosmos. Soy mujer árbol de la vida. Tierra fértil. Rama y raíz que se alimenta del sol, se extiende hacia fuera y se profundiza hacia adentro.

Gutiérrez y Prado (s.f.), Ecopedagogía y ciudadanía planetaria 42 Sheldrake, R (s.f.) El renacimiento de la naturaleza. 41

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Nuestro origen común la totalidad

Tomo refugio en mi isla interior Placa en arcilla Esmalte 1260º María Victoria Rivera Páez Julio 2015 Tomo refugio en la meditación, regreso a mi isla interior, al árbol de la vida. Me comunico a través de mis cadenas de ADN. Somos uno desde el origen. Agua que refleja lo que es bello y verdadero. Con mi paz interior y mi conciencia del cosmos aporto paz al mundo.

Imagen 31 Tomo refugio en mi isla interior

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Me siento red, pupa, mariposa Me siento al mismo tiempo tangible e intangible. Semilla, pรกjaro que canta. Onda de agua. Embriรณn. Lluvia infinita. Experimento el encanto de la vida. Provengo de esa perfecta coherencia cรณsmica43. Somos red entrelazada. Humanos, animales, plantas, rocas, bacterias Siento el enorme potencial del campo akรกsico que nos conecta. Cooperaciรณn, Solidaridad, respeto entrelazados.

Laszlo, E. 2004.

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Imagen 32 Autopoiesis

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Destello de un instante.

Estoy aquí y ahora observándome.

Ajuste fino44 que permite la emergencia de la vida.

Estoy allá y en otra parte, otros son mis observadores.

Reencantamiento de la espiritualidad y la sacralidad.

Soy masculino y femenino, expresión auténtica de vida.

Retorno a mis ancestros, a mi sentido de lo humano45.

Ofrezco mis dones para la transformación en la convivencia47. Celebro el ritual, bailo con la danza de la vida.

Me siento una con el cosmos. Soy espiral, continuidad que se despliega 48. Apertura y autoorganización en un planeta sostenible.46

Soy remolino y turbulencia. Soy expresión del cosmos con conciencia49.

Notas musicales que simbolizan resonancia. Soy huella, memoria. Holograma de universos precedentes.

Sinfonía del metaverso multicíclico. Múltiples estados y posibilidades.

Maturana (2002:269) “Así, no vemos que lo espiritual es un estado de conciencia y, por lo tanto, un modo de vivir en nuestra corporalidad.” 48 Ibid 49 Lazlo, E. 2004. 47

Laszlo, E. 2004 Maturana, H. 2002. 46 Gutiérrez, F. y Prado, C. Ecopedagogía y ciudadanía planetaria. 44 45

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Imagen 33 Ajuste fino, reverencia y evocaciรณn

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*** Siguiendo las enseñanzas budistas de Thich Nhat Hanh, hemos podido fortalecer esa cosmovisión trascendente; más allá del planeta está el cosmos, nuestro origen común, la totalidad. Así en nuestra andadura hemos ido ampliando esta experiencia de sentir la pertenencia al todo, de mirarnos fundidos con el universo, y comprender así la impermanencia y la transitoriedad, la no existencia de nacimiento y muerte, la revelación de un campo in-formado que se decodifica en las resonancias, la evidencia de su manifestación en campos mórficos contextualizados en nuestro aquí y ahora. La experiencia de re-ligación ha ido naciendo a partir de una práctica espiritual en lo cotidiano, manteniendo la atención plena, respirando, aterrizando en la acción esta comprensión de las interconexiones, respirando profundo para enactuar en cada respiración nuestro ser cósmico, interconectado, interrelacionado e interdependiente. Esa conciencia cósmica de interdependencia e interconexión es lo que me ha permitido descubrir la magia de la vida y recuperar la memoria del encanto. Yo soy porque tú eres, y tú eres porque

yo soy. De esta experiencia surgen algunas piezas de cerámica, esta obra da cuenta de una experiencia de trascendencia. *** Entiendo que yo, María Victoria, como humana que soy, tengo la capacidad de reflexión, y estoy habitada por la conciencia. Cada ser humano desde su historia es habitado por la conciencia. Resueno con el Dalai Lama cuando afirma que la conciencia no es sólo un fenómeno neurofisiológico, sucede en primera persona y existen técnicas que nos aportan tradiciones de oriente para comprenderla. ¿Cómo emerge una conciencia colectiva de cuidado planetario?, ¿Qué se requiere para que se expanda y realmente haya cambios en la manera de pensar, y actuar en el mundo? Me respondo con la práctica, cuando integro a mi vida cotidiana en mis actos acciones conscientes, cuando en el acto educativo integro la conciencia planetaria y cósmica, estoy creando campos resonantes con campos de otras personas que están creando realidades en la misma vibración.

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Conciencia cósmica Placa en arcilla a 1260º María Victoria Rivera Páez 2015 Está presente y fundida en una sola imagen la totalidad: humanidad, naturaleza y cosmos. Estoy yo mujer, naturaleza femenina, tronco ancestral de un árbol, planeta tierra, universo, masculino y femenino fundidos, vinculados, sin discriminación. Provengo del cosmos y a la vez me fundo en el mismo; provengo de las “devoción con la que se donan las estrellas” para dar origen a la vida. Soy a la vez serpiente cósmica, anaconda ancestral, cadena de ADN en constante movimiento. Soy equilibrio dinámico, caos, autopoiesis. Círculo. Vacío. Vacío de separación y pleno de interconexiones. Soy manantial de agua dulce que brota de las entrañas de la tierra viva; soy cascada y río. Los cristales vivos son estrellas que pertenecen a múltiples universos unidos por el amor, por la totalidad desde el origen. Estoy en la loba y ella está en mí; en las serpientes que son mis piernas expandidas. Soy holograma del círculo, a su vez hexágono: molécula que se manifiesta en geometría sagrada, forma de flor de la vida. Cada cristal es un fractal de lo observado. Imagen 34 Conciencia cósmica

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*** Thich Nhat Hanh, maestro budista en su charla del dharma en EIAB agosto de 2014 me inspiró para lograr esta mirada del vacío.

partículas?, ¿Qué significa que en realidad no exista solo nuestro universo, que exista un pluriverso, un metaverso?, ¿Qué significa que todo lo que existe en la tierra hace parte del origen?, ¿Cómo cambiará mi vida cuando integre en mi cosmovisión una conciencia cuyo referente sea el cosmos? Siento que por ahí está el camino de la espiritualidad y de la trascendencia, un camino integrado, donde como humanidad comprendamos que no somos el centro, que nuestra ética es la de la vida en todas sus manifestaciones, incluso la de la vida de las piedras.

“También está la enseñanza del vacío; vacío es un gran objeto de meditación, vacío no es no ser. Este vaso está vacío pero este vaso no está vacío, en orden de estar vacío o no para verlo el vaso tiene que estar acá, por eso la noción de vacío no es igual a la noción de no ser. Es una noción que tiene que ver con el interser, no puede estar acá por sí mismo necesita interser con lo demás. Vemos la flor y la flor está llena del cosmos: el sol brilla, el jardinero, la semilla, todo está en la flor, la flor está hecha de elementos no flor, el sol es un elemento no flor; todos estos elementos no flor deben estar para producir la flor. Podemos decir que la flor está llena del cosmos. Todo está lleno de cosmos y vacío de una entidad separada; vacío de una existencia separada y por eso vacío puede al mismo tiempo ser lleno.” Con las lecturas del doctorado se amplió mi mirada hacia el cosmos, hacia los múltiples universos… ¿Qué significa que somos ondas y

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Sí, tienes razón, pero eso no es más que un reflejo de lo limitado de nuestro entendimiento. Sólo cuando tomamos a todo el Universo como marco de referencia empezamos a reconocer el sentido cósmico que tiene el agua dulce. Sólo cuando tomamos conciencia de la evolución del cosmos empezamos a comprender el sentido y el significado de las cosas comunes y corrientes. Swimme (1998:22)

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Alianza cósmica y justicia de las cosas sagradas Homenaje a Leonardo Boff Acuarela María Victoria Rivera Páez Enero 2015 Un instante de trascendencia, de conciencia cósmica, de encantamiento. Océanos y líquido amniótico. Música, reverencia, inclinación ante la sacralidad del todo. Celebración del agua dulce, planeta azul. Pertenencia cósmica. De las primeras burbujas aparece la vida. Bacterias, membranas, diferenciación, diversidad. Azul agua y manto protector. Rosado atardecer, sol, amor, erotismo, sensualidad y sexualidad. Amarillo fotones, estrellas, luz, desierto, arena. Verde, verde, selva húmeda tropical, dragón. Huella de viento y movimiento. Repito con Leonardo Boff ¿Cómo es posible que la humanidad logre destruir toda la belleza que proviene de la alianza cósmica que tardó tanto tiempo en crearse? Imagen 35 Alianza cósmica, justicia de las cosas sagradas

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Encantamiento, trascendencia Placa en arcilla Esmalte a 1260ª María Victoria Rivera Páez

Meditación, consciencia. Encanto, espiritualidad. Comprendo el misterio de la vida. Soy yo misma. Expresión femenina de todo lo creado. Soy mujer-vasija-árbol. Desde mi corazón trasciendo. Me experimento interconectada. Reconozco mi corporeidad. Soy un fractal entre fractales. Soy vórtice emocional y creativo. Me enraizó y me elevo. Estoy arriba y abajo. Adentro y afuera. Soy flor y lagartija. Soy movimiento. Autopoiesis.

Imagen 36 Encantamiento, trascendencia

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CONDENSACIÓN

dicotómicas sobre lo que antes percibía como opuesto.

A lo largo del doctorado, he podido asomarme desde el holismo y la complejidad a la comprensión de mí misma como un ser múltiple, cuántico, resonante, con registros akásicos que vienen del pasado y del futuro. Soy una manifestación del campo in-formado y puedo ser a la vez onda y partícula. Así mismo, mi práctica espiritual me ha permitido experimentar el interser, lo que significa que yo soy porque tú eres, luego no soy esencia, soy interrelación.

Todo ello se lo agradezco al doctorado, a las lecturas, al diálogo con los autores, a lenguajeos y reflexiones con mi grupo, a los Tanimuka, Letuama, Yukuna y Matapí de la selva amazónica, al budismo y a los maestros y maestras, a Thich Nhat Hanh, a las narrativas escritas, pinturas y piezas de cerámica que han tenido lugar en el contexto de la andadura que emprendimos.

En este tiempo de chifladura, he ido alumbrando la comprensión de que las múltiples manifestaciones de mi identidad siempre han estado interconectadas e interrelacionadas, me he manifestado en la vida obedeciendo a cambios estructurales de autorrenovación, de creación de nuevas estructuras y de acoplamiento estructural a mi entorno. He ido comprendiendo que el mundo no es una realidad aparte sino una realidad creada a partir de mi experiencia, y he ido transformando mi percepción de fragmentación y mis miradas

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Imagen 37 Campo akรกsico, ancestralidad y encantamiento

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Campo akásico: ancestralidad y encantamiento Mosaico de placas en arcilla Esmalte 1260º María Victoria Rivera Páez

Agua agradecimiento, milagro del cosmos, inicio de la vida. Petroglifos ancestrales, conexión profunda. Presencia de todos los continentes del planeta, mitocondrias que tienen el registro del primer ADN. Ritual, celebración, sinfonía del universo. Rocas-vida, plantas-vida, animales-vida, humanidad-vida. Madre tierra: naturaleza orgánica. Masculino y femenino en relación gilánica, vinculante. Caricia maternal de padre y madre, biología del amor. Amor como fuerza religante. Meditación, interconexión. Sacralidad de la vida. Encantamiento.

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Mi propósito se relaciona con el cambio de sintaxis, con la cognición estética, con extender las alas verdes y libres, con crear nuevas realidades. Soy una manifestación de la madre tierra, soy su autoconciencia, mis actos están guiados por el sueño de dignificar la vida en todas sus manifestaciones.

*** Descubro la necesidad de enactuar mi conciencia cósmica, de vivir en atención plena. Estoy aquí y ahora resonando con el mensaje de Ervin Laszlo, aun cuando quizás nunca pueda darle nombre a mi propósito, tengo la intuición de que mi andadura es profundizar en la conciencia de la pertenencia cósmica, las interrelaciones, la interdependencia, la transformación.

En cada pieza de cerámica se manifiesta mi ser, la que hoy soy, la que se está integrando para comprenderse, la que se ha ido comprendiendo como ser emergente, ciudadana planetaria, holograma en el cosmos, memoria infinita que proviene desde el metaverso.

*** Mi propósito tiene que ver con la imaginación y el ensueño, con la creatividad, con alumbrar la esperanza de otros mundos posibles. Soy una más en esta red de resonancia amorosa y agradecida que aporta en la ampliación de la conciencia cósmica colectiva.

Mi propósito tiene que ver con la celebración, con realizar mi camino alegre del corazón.

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En el ensueño converso con María – La Madre del manto azul - María tu imagen siempre me recuerda la verdad, la bondad y la belleza. ¿Qué tienes hoy para decirme? - Cree en tu instinto, deja salir toda la fuerza femenina que hay en ti, siéntete mujer y permite a tu ser femenino manifestarse. MUJER-MADRE-ÚTERO-REGAZO-AMOR La fuerza de lo femenino es amorosa, encárgate de cultivar esa fuerza creativa, procreadora. - ¿Cómo entender cuál es el sentido? - El sentido eres tú misma y tus manifestaciones, en el amor que proyectas, en la paz que construyes, ahí está el sentido. Es estar en conexión contigo misma y con el universo. Tomado de mi diario personal intensivo Capítulo de diálogos con mi sabiduría interior

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Imagen 38 Dragรณn verde, conciencia cรณsmica, sacralidad de la vida

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