Descubre el mundo de la acampada y el excursionismo con el experto en senderismo Iron Tazz.
Explora veinte paisajes diferentes (desde montañas nevadas hasta senderos de costa o bosques milenarios) en este libro ilustrado que es una introducción ideal para empezar a disfrutar de la naturaleza.
Este libro también está repleto de información útil. Los jóvenes aventureros aprenderán a:
* Orientarse y saber qué hacer si se pierden.
* Llevarse solo lo esencial.
* No dejar rastro y proteger el entorno.
* Hacer sus necesidades en el bosque.
* Protegerse del calor, de la nieve y de la lluvia.
* Tener cuidado con el fuego y montar un campamento.
* Saber actuar cuando se encuentren con la fauna del lugar.
* Encontrar la estrella Polar y leer el firmamento.
Este libro, lleno de consejos y trucos para disfrutar de la naturaleza, es perfecto para aprender a hacer senderismo.
ISBN: 978-84-19262-64-6
EN RUTA! ¡
Una guía completa para pequeños senderistas
Una guía completa para pequeños senderistas
Iron Tazz · Martin Stanev
Iron Tazz Martin Stanev
Una guía completa para pequeños senderistas
Texto de Iron Tazz Ilustraciones de Martin Stanev
9 Prólogo
11 ¿Por qué deberías hacer senderismo?
12 Rutas costeras y litorales
14 Los Diez Imprescindibles
16 Prados primaverales
18 Los siete principios del No Dejes Rastro
20 Zonas boscosas y bosques ancestrales
22 Ir al baño en el bosque
24 Desiertos calurosos y secos
26 La importancia del agua
28 Escalada y montañismo
30 Encuentros con animales
32 Cielos nocturnos
34 Encuentra la estrella polar
36 Paseos de ensueño por lagos
38 Velar por tu seguridad en la nieve
40 Rutas de montaña
42 ¡Hora de subir de marcha! Prepárate la mochila
44 Montar el campamento
46 Ten cuidado con el fuego
48 Rutas por valles fluviales y desfiladeros
50 Herramientas de orientación y habilidades
52 Hacia tierras salvajes
54 Bayas silvestres
56 Formaciones rocosas
58 Qué hacer si te pierdes
60 Praderas y pastizales
62 Guía de provisiones para mochileros
64 Colina y rutas de montaña
66 Condiciones extremas
68 Paisajes prehistóricos
70 Consejos para practicar senderismo
72 Cascadas y pequeñas pozas
74 Prestar atención a la naturaleza
76 Páramos y zonas de arbustos
78 Viajar ligero
80 Ríos en deshielo
82 Senderismo de larga distancia
84 Paseos por el bosque
86 Haz tuya la ruta
88 Bosques de hoja perenne
90 ¡Muy bien, pequeños exploradores!
ADVERTENCIA
El objetivo de este libro es ayudarte a conectar con la naturaleza. No pretende ser un manual de supervivencia. Asegúrate de que te acompaña un adulto experimentado cuando te animes a descubrir el mundo que te espera ahí fuera.
Prólogo
¡Me encanta hacer senderismo y viajar de mochilero!
Así de simple. He recorrido más de quince mil kilómetros y he pasado más de cuatrocientas noches en plena naturaleza. Estos viajes han mejorado mi vida en más de un sentido.
Este libro pretende descubrirte los múltiples estilos de senderismo y excursionismo que existen, y enseñarte los trucos esenciales que te ayudarán a desenvolverte en la naturaleza.
Los lugares que aparecen aquí abarcan todo tipo de climas y terrenos en los que podrás practicar senderismo o irte de viaje con tu mochila: desde los más accesibles hasta algunos con condiciones extremas y con los paisajes más impresionantes del mundo.
Sea cual sea el reto que te propongas, espero que esta guía te motive a acercarte a la naturaleza y vivir tú también experiencias increíbles. Sólo recuerda estar preparado, respetar el medio ambiente y pasártelo en grande.
¡Nos vemos en el sendero!
¿Por
qué deberías hacer senderismo?
En cada caminata sucede algo mágico.
Mis mejores recuerdos los he construido haciendo senderismo: pescando con mis amigos en lugares salvajes, nadando en ríos alimentados por glaciares, contemplando puestas de sol en lo alto de una montaña o alcanzando metas que me parecían imposibles. He conocido a gente estupenda por el camino. Estaré eternamente agradecido por estos recuerdos que puedo revivir una y otra vez.
¡La persona que serás en un futuro también te lo agradecerá si encuentras una actividad física que te fascine! El ejercicio físico es clave para disfrutar de una vida larga, plena y equilibrada. Los bosques, las cimas de las montañas y las costas son mi gimnasio.
Sin embargo, lo más importante es la manera en que el senderismo te obliga a disfrutar del presente. Esta actividad te hará salir de tu zona de confort y te ayudará a desconectar de la rutina. Te verás obligado a reconectar con tu yo interior y con la naturaleza, lo que favorecerá tu salud mental. ¡Aquí es donde reside la verdadera magia!
No importa el sendero que elija, siempre me ocurre lo mismo: al terminar una excursión, siento que he subido de nivel física, emocional y espiritualmente.
Nunca me atasqué en el porqué. Empecé a caminar y ya no pude parar.
Rutas costeras y litorales
Recorrer un camino que abraza la costa es como retroceder en el tiempo.
Nuestros antepasados más antiguos utilizaban las costas para desplazarse por la Tierra. Vivían en cuevas excavadas en el mar y buscaban comida, cazaban y pescaban en las orillas. Un paseo por la playa puede transportarte atrás en el tiempo.
Busca fósiles: huellas de animales o plantas prehistóricas, de hace millones de años. O busca seres vivos: colonias de aves marinas que anidan entre los acantilados; nutrias, delfines y focas que cazan bajo las olas. Y no te olvides de mirar en el agua que se estanca entre las rocas que hay bajo tus pies, donde danzan criaturas que viven en las corrientes.
Los Diez Imprescindibles
¡Esta lista de diez elementos imprescindibles se remonta a la década de 1930 y te sorprenderá lo útil que sigue siendo hoy en día!
Todo senderista debería llevar encima estas diez cosas imprescindibles, por corta o sencilla que vaya a ser su caminata. Esta lista puede parecer excesiva para una excursión de un día, pero el objetivo es estar preparado para todo. He visto a gente perderse en más de una ocasión incluso en excursiones cortas. Además, nunca sabes cuándo alguien podría necesitar tu ayuda.
1. Rumbo
Un mapa, una brújula y un dispositivo GPS pueden ayudarte a mantener el rumbo o a encontrar el camino de vuelta a la civilización si te pierdes.
3. Ropa adicional
Una o dos capas adicionales, como un forro polar o una chaqueta, te mantendrán abrigado. Llévate alguna prenda impermeable si hay probabilidad de lluvia.
5. Botiquín de primeros auxilios
Suministros básicos como vendas, gasas y analgésicos te servirán para tratar heridas y dolencias leves.
2. Protección solar
Protector solar, unas gafas de sol, un sombrero y manga larga te protegerán de los intensos rayos del sol. A veces, cuando hago senderismo en zonas muy calurosas sin sombra, incluso me llevo una sombrilla.
4. Iluminación
Es imprescindible que te lleves una linterna si vas a practicar senderismo después de la puesta de sol. Yo siempre llevo pilas de repuesto.
6. Encendedores
Un mechero o unas cerillas te ayudarán a encender una hoguera para entrar en calor o para pedir ayuda en caso de emergencia. Yo siempre llevo dos encendedores por si uno me falla o se queda sin gas.
7. Kit de reparaciones
No olvides un pequeño kit de reparaciones con cinta aislante, pegamento y una herramienta multiusos para que te sea más sencillo recomponer cualquier cosa averiada o rota.
Imprescindibles modernos
Hay otros dos objetos que considero esenciales cuando hago senderismo:
11. Kit para hacer caca ¡Ya hablaremos de esto más adelante!
8. Comida
Recuerda llevar comida más que suficiente para no perder la energía durante el viaje. Hay gente que se lleva comida para un día más por si se pierden.
12. Un móvil Un teléfono puede salvarte la vida si te pierdes (aunque no tengas cobertura). También me gusta guardarme mapas en el móvil para usarlo como GPS. Además, me encanta hacer fotos de todas mis aventuras. ¡Ponlo en modo avión para ahorrar batería!
9. Agua
Una botella de agua o una mochila de hidratación para mantenerte hidratado todo el camino. Yo, además, también llevo un filtro para poder beber agua de fuentes naturales.
10. Refugio de emergencia
Una lona pequeña y ligera o un saco de vivac te ofrecerán cobijo si ocurre algo inesperado y tienes que dormir al aire libre una noche. Incluso un par de bolsas de basura extragrandes o una manta térmica de emergencia pueden serte útiles.
Prados primaverales
El final de la primavera y el inicio del verano son las mejores estaciones para salir a explorar senderos rodeados de prados.
Coloridas flores silvestres se abren paso entre la hierba. Si te fijas bien, incluso encontrarás alguna orquídea poco común. Las praderas están repletas de polinizadores, como mariposas y abejas, que se dan un festín de néctar y transportan el polen de flor en flor.
Presta atención a los pájaros que se alimentan de insectos y escucha a los conejos, liebres, ratones de campo y lagartijas que corretean entre la maleza.
En esta época del año, algunos bosques esconden praderas mágicas, llenas de delicadas flores azules, las campanillas, que sólo duran unas semanas.
Los siete principios del No Dejes Rastro
Siguiendo estas siete reglas, contribuiremos a la protección de la belleza natural de nuestro entorno y ayudaremos a preservarlo para futuras generaciones. Podrás sentirte orgulloso al saber que estás cuidando los recursos de la Tierra.
1. Planifica con antelación y prepárate bien
Antes de salir de excursión, planifícalo todo y prepárate para cualquier imprevisto.
2. Viaja y acampa sobre superficies resistentes
Ayuda a proteger la Tierra evitando caminar o acampar sobre plantas o vegetación. Usa sólo los senderos y campamentos establecidos siempre que puedas.
5. Cuidado con el fuego
Comprueba que esté permitido hacer fuego antes de encenderlo. Si está permitido, asegúrate de que sea en un pozo de fuego designado para ello. Utiliza palos que ya estén en el suelo.
IMPORTANTE
Asegúrate de que el fuego esté completamente extinguido antes de abandonar el campamento.
6. Respeta la fauna
Disfruta observando a los animales desde lejos; no les des de comer ni te acerques demasiado.
3. Tira la basura en los lugares indicados para ello
Todo lo que llevas tiene que volver a irse.
¡Incluidas las cáscaras de naranja y plátano!
4. Déjalo como lo encontraste
Preserva el pasado dejando las rocas, plantas y otros elementos naturales tal y como los has encontrado. Esto incluye no dejar por ahí torres de piedras.
7. Sé considerado con los demás
Recuerda que probablemente haya más personas en el lugar donde te encuentras. Sé respetuoso y baja la voz para que todos puedan disfrutar de la belleza del entorno (la música alta puede resultar especialmente molesta).
Otra gran idea es recoger la basura que veas tirada por los senderos. ¡Recoger envoltorios de caramelos o botellas de plástico te traerá buen karma!
Zonas boscosas y bosques ancestrales
Sentirse pequeño puede ser algo muy bueno.
Desde siempre, los humanos hemos escalado árboles en busca de cobijo, alimento o simplemente un poco de paz y tranquilidad, igual que muchas otras especies animales.
Si te adentras sin prisas en un bosque, verás ardillas, ciervos o jabalíes. Al amanecer y al atardecer podrás disfrutar de algún encuentro sigiloso con un zorro, un tejón, un murciélago o un búho fantasmagórico.
Puedes visitar un bosque en cualquier época del año, pero a principios de verano podrás ver hojas de helecho enredadas en el suelo mientras las mariposas revolotean cerca de tus pies.
Ir al baño en el bosque
Muchas rutas de senderismo y campamentos disponen de aseos portátiles. Si es así, ¡utilízalos! Si no, aquí tienes una guía por si tienes una emergencia.
4. Se va contigo
Utiliza la menor cantidad posible de papel higiénico para limpiarte y guárdalo en la pequeña bolsa con cierre. También puedes utilizar hojas de árbol para limpiarte.
Kit para hacer caca
1. Bolsa pequeña con cierre
Guarda el papel higiénico usado aquí.
2. Papel higiénico
Lleva suficiente para recoger cada caca que hagas en el camino.
1. Elige un rincón
Encuentra un rincón a una distancia mínima de cien metros de cualquier sendero, campamento o fuente de agua.
2. Cava un hoyo
Cava un hoyo de unos diez centímetros de profundidad. Puedes usar un bastón de senderismo o un palo.
3. Bolsa grande con cierre
Guarda aquí todo tu kit para hacer caca.
4. Desinfectante de manos Úsalo después de hacer caca.
5. Lávate las manos Tapa el hoyo con tierra y luego desinféctate las manos.
3. Colócate en cuclillas ¡Colócate en cuclillas y libérate!
6. Deja una señal
Si es posible, coloca dos palos cruzados en forma de X encima del hoyo tapado. Esto indicará a la siguiente persona que no debe cavar ahí.
Hacer pipí
Algunos hábitats son muy frágiles, así que deberás recoger también tus cacas. También tendrás que hacerlo si estás en una zona donde ha nevado mucho, pues no podrás llegar al suelo a través de las capas de nieve para cavar un hoyo.
Orinar en la naturaleza es mucho más fácil. Si estás en una zona alpina, intenta hacerlo en las rocas en lugar de sobre la vegetación, pues las cabras y los ciervos se sienten atraídos por la sal que contiene la orina y arrancarán las plantas para llegar a ella.
Desiertos calurosos y secos
Estos paisajes sacados de otro mundo te dejarán huella mucho después de que el viento se haya llevado tus pasos.
Los desiertos presentan muchas formas: puede que dejes tus huellas sobre unas dunas o sobre una salina, que levantes polvo en un campo de lava volcánica o cráteres, o puede que deambules por un desierto.
Los vientos cambiantes crean formas espectaculares en la arena y las rocas, y las puestas de sol y amaneceres suelen ser espectaculares. Sin embargo, si te embarcas en una aventura en un desierto caluroso, debes prepararte a conciencia: ¡es muy fácil perderse en un lugar donde todo parece igual y el intenso calor del día suele dar paso a noches muy frías!
La importancia del agua
No hay que tomarse a broma la deshidratación, sobre todo si se practica senderismo en zonas desérticas, que pueden encontrarse en todos los continentes del planeta.
Todos los años mueren personas deshidratadas en mitad de una caminata. Es el peor de los escenarios. Beber mucha agua es vital para mantener un nivel alto de energía, y conviene aprender a purificar la que te encuentras.
¿Cuánta agua me llevo?
Lo normal es llevarse al menos un litro de agua por hora de caminata por cabeza. Por tanto, deberías llevarte al menos dos litros de agua para una caminata de dos horas. Si hace mucho calor o las condiciones son complicadas, duplica la cantidad. Más vale prevenir que curar.
Camellízate
Antes de una caminata, bebe un poco de agua. Para comprobar que estás hidratado, observa tu orina. Esta debería tener un tono amarillo claro y tú deberías hacer pipí con regularidad, más de seis veces cada veinticuatro horas. Una orina más oscura podría ser una señal de que empiezas a deshidratarte.
Electrolitos
¡¿Crees que sudarás mucho?! Los tentempiés salados o los polvos de electrolitos te ayudarán a reponer minerales esenciales como el sodio, que se pierde con el sudor.
Agua natural
Puedes enfermar mucho si bebes agua sin tratar. Con un filtro es muy sencillo purificar el agua. Esto te permitirá beber con tranquilidad de arroyos, ríos y lagos.
Filtro de agua
El agua pesa mucho más de lo que crees. Por eso, yo siempre llevo mi filtro de agua a las excursiones más largas y en mis viajes de mochilero. Es pequeño, ligero y se acopla a cualquier botella.
Escalada y montañismo
¿Cansado de caminar siempre a nivel del suelo? ¿Te apetece algo distinto? ¡¿Qué tal escalar por una superficie rocosa?!
Ir de escalada es una forma divertida y emocionante de ver el mundo desde una perspectiva completamente distinta.
Puede llevarte a descubrir una vista impresionante o una habilidad nueva, a vencer miedos o desarrollar una fuerza increíble.
La escalada puede resultar peligrosa, así que empieza poco a poco, en compañía de un adulto experimentado y con el equipo adecuado. ¡Conocerás el impresionante sentimiento que te embarga al llegar a lo alto de una cima!
Encuentros con animales
Imagínate que estás de excursión, doblas una esquina y en medio del sendero te encuentras a un animal enorme a tan sólo cinco
metros de ti. ¡Aaaah!
En la mayoría de los casos, es poco frecuente que un animal ataque, pero aquí tienes algunos consejos sobre cómo mantenerte seguro cerca de la fauna salvaje.
No importa si te cruzas con un ciervo enorme, un jabalí, un toro o con animales marinos en la costa: debes aplicar las mismas normas.
Mantén las distancias
Siempre es mejor mantener una distancia más que prudencial con los animales salvajes. Por muy tentador que sea, jamás te acerques a ellos.
No corras
¡La mayoría de los animales grandes pueden correr más que tú! Jamás de los jamases intentes huir.
Mantén la calma
Intenta mantener la calma en la medida de lo posible y no hagas movimientos bruscos que puedan asustar al animal.
Que te oigan
Levanta las manos y dirígete al animal con voz tranquila y firme. Hazle saber que eres una persona y no una amenaza. Márchate lentamente, sin darle la espalda. Intenta alejarte al menos unos cien metros.
Senderismo con perros
Si vas de excursión a una zona donde hay animales como jabalíes o ponis salvajes, lleva a tu perro con correa. La mayoría de los animales huyen de las personas, pero pueden ponerse agresivos si se sienten amenazados. Sobre todo en primavera, cuando suelen proteger a sus crías.
Serpientes
La mayoría de serpientes te tendrán más miedo que tú a ellas y se alejarán rápido. Lleva a tu perro con correa si caminas por una zona con serpientes. Las mordeduras de las víboras pueden resultar fatales para los perros.
En caso de que una serpiente te muerda, es fundamental que mantengas la calma y laves la mordedura (¡no intentes hacer un corte y chupar el veneno!). Mantén la zona en la que te ha mordido por debajo del nivel del corazón (siéntate con la extremidad hacia abajo). Llama a los servicios de emergencia y quítate los accesorios o la ropa ajustada que aprieta la extremidad afectada mientras esperas a que llegue la ayuda.
Planifica con antelación
Las recomendaciones de los parques nacionales sobre qué hacer si te encuentras a un animal salvaje varían dependiendo del lugar, así que infórmate antes de ir.
Cielos nocturnos
Cuando sales a pasear por la noche, el ambiente tiene un aire especial.
Elige una ruta salvaje que conozcas bien, encuentra un lugar despejado y seguro, apaga la linterna y deja que tus sentidos se adapten a la oscuridad.
El tiempo es más lento, tu oído se agudiza y las siluetas y sombras ocultas pronto empiezan a surgir en la penumbra.
Los animales nocturnos son recelosos y se sienten más seguros cuando está oscuro. Con suerte, un manto espectacular de estrellas se desplegará en el cielo.
Llévate unos prismáticos para ver mejor los planetas, cúmulos estelares y galaxias. Si tienes suerte, ¡puede que hasta veas una lluvia de meteoritos!
Encuentra la estrella polar
Puedes utilizar la estrella polar para orientarte, sobre todo si vas de excursión o acampada. Encontrarla es un proceso sencillo que puedes llevar a cabo en unos pocos pasos. Además, ver una de las estrellas más brillantes del cielo nocturno es una experiencia sobrecogedora. Aquí te explicamos cómo buscarla.
1. Busca el Carro
Localiza la constelación de la Osa Mayor, también conocida como el Carro. Busca en el cielo un grupo de siete estrellas brillantes que forman un gran cazo.
2. Localiza las dos apuntadoras
Una vez hayas encontrado el Carro, busca las dos estrellas en la parte delantera del «cuenco» del cazo. Estas son las dos estrellas «apuntadoras» que señalan directamente a Polaris, la estrella polar.
Osa Mayor (El Carro)
3. Sigue las apuntadoras
Traza una línea imaginaria entre las apuntadoras y extiéndela cinco veces la distancia entre estas dos estrellas. La estrella más brillante al final de esta línea es Polaris, la estrella polar.
4. Comprueba la posición
La ubicación de la estrella polar cambia un poco dependiendo de la inclinación de la Tierra, pero sigue estando relativamente cerca del polo norte celeste, por lo que, si la encuentras, podrás saber en qué dirección está el norte.
Osa Menor (El Carro Cielo)
Polaris (La estrella polar)
Guiarse por la estrella polar
La gente lleva miles de años orientándose gracias a esta estrella. Es la única que permanece más o menos en el mismo lugar, mientras que el resto de estrellas giran sobre nuestras cabezas a lo largo de la noche.
Paseos de ensueño por lagos
Algunos de los mejores cuentos de hadas de la historia están ambientados en lagos. Cuando se está junto a una misteriosa estampa de aguas abiertas y profundas, es fácil entender por qué.
Desde El lago de los cisnes o La princesa rana, pasando por la dama del lago y las ninfas, y llegando a la bestia acuática más conocida, Nessie del lago Ness, ¡la lista de cuentos de hadas y bestias míticas asociadas a lagos es interminable!
Los lagos son más mágicos en invierno, cuando el paisaje se convierte en un país de las maravillas de nieve y hielo. Deja volar tu imaginación porque nunca se sabe: ¡puede que descubras a tu propio monstruo del lago o a un espíritu del agua!
Velar por tu seguridad en la nieve
Entra en un mundo mágico donde todo brilla. Hacer senderismo en la nieve es como explorar un país de cuento de hadas.
Cuando nieva, todo es paz y tranquilidad. Es una belleza difícil de describir con palabras, así que espero que logres verla con tus propios ojos. Además de los Diez Imprescindibles, aquí te dejo otros consejos para evitar accidentes y disfrutar al máximo de tu estancia en el país de las maravillas invernal.
Ponte raquetas de nieve o calzado de tracción
En el calzado de tracción, las puntas de acero se deslizan por la suela para proporcionarte una tracción adicional en la nieve dura o el hielo. Las raquetas son ideales para la nieve blanda o en polvo.
Protégete del sol
Las peores quemaduras de mi vida las he sufrido haciendo senderismo en la nieve, cuando parecía que no había sol. La nieve refleja los rayos UV, así que no olvides tus gafas de sol ni tu crema solar.
Deshazte de las capas
Hacer senderismo por la nieve puede ser un reto físico muy exigente y lo más probable es que sudes. Asegúrate de empezar a quitarte capas en cuanto notes que empiezas a sudar. Si no lo haces, el sudor se enfriará mucho cuando dejes de moverte y provocará que tu temperatura corporal descienda peligrosamente.
Utiliza una bolsa WAG
Son bolsas especiales en las que puedes hacer caca para no contaminar el medio ambiente.
Asegúrate de llevar una encima. Llévate una batería portátil
Las baterías se agotan muy deprisa cuando hace mucho frío. Es importante que lo tengas en cuenta, ya que es posible que necesites el GPS para orientarte. Yo llevo el teléfono cerca del cuerpo para que no se enfríe y, además, una batería portátil.
Cuidado con las avalanchas
Asegúrate de investigar la zona por la que quieres hacer senderismo antes de salir. Si hay posibilidades de que se produzcan avalanchas, cambia tus planes. Las avalanchas pueden ser mortales y siempre es mejor ir sobre seguro.
Huellas en la nieve
Abrígate
Cuando hay nieve, puede hacer mucho más frío (¡por supuesto!), así que recuerda llevar suficientes capas de abrigo: ropa interior térmica, forros polares, abrigos acolchados, gorros cálidos y guantes. Asegúrate de que tus botas sean impermeables.
Aísla el agua
Cuando la temperatura es inferior al punto de congelación, yo suelo guardar la botella de agua en la mochila, envuelta en alguna de las capas de ropa extra que me llevo por si acaso. Así, se mantiene aislada y se evita que el agua se congele.
Busca huellas de animales
Estate atento a las huellas que veas en la nieve. Puede que encuentres huellas de conejos, ciervos o incluso zorros. Siempre cuentan una historia, así que deja volar tu imaginación. ¡Es como ser un detective de la nieve!