Entre Nosotros
Sade: Filial Los Toldos
Entre Nosotros
DE ESCRITORES
GENERAL VIAMONTE
© Copyright 2022 – Etel Carpi ... [et al.]
"Entre Nosotros, S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos "
Hecho el depósito que marca la Ley 11.723
Impreso en Argentina Printed in Argentina
ISBN 978-987-656-521-9
ISBN libro físico: 978 987 656 520 2
Reservados todos los derechos. Queda rigurosamente prohibida, sin la autorización escrita del titular del "Copyright", bajo las sanciones establecidas por las leyes, la reproducción, almacenamiento o transmisión parcial o total de esta obra por cualquier medio mecánico, fotoquímico, electrónico, magnético, electroóptico, por fotocopia u otro procedimiento establecido o a establecerse, comprendidos la reprografía y el tratamiento informático, y la distribución de ejemplares de ella mediante alquiler o préstamo público.
Entre nosotros : S.E.G.V. SADE : filial Los Toldos : 2021 2022 / Etel Carpi ... [et al.]. -
1a ed. Junín : De Las Tres Lagunas, 2022.
Libro digital, PDF/A
Archivo Digital: descarga y online ISBN 978 987 656 521 9
1. Poesía Argentina. I. Carpi, Etel.
CDD A861
Fotografías de Leandra Mancini:
Tapa: “Viernes” Contratapa: “Buen día”.
Epílogo: “Magia en el campo” y “Migración” Compilación: Silvia Oliverio. Corrección: A cargo y responsabilidad de cada autor.
Ediciones de las Tres Lagunas
España 68 - Telefax 54-236-4631017 - 154 648213
Junín (6000) Pcia. de Buenos Aires Argentina E-mail: ediciones@delastreslagunas.com.ar
Impreso en el mes de Septiembre de 2022
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
PRÓLOGO
Esta nueva Antología “Entre Nosotros”, nace de un conversatorio pos pandemia, cuando nos volvemos a encontrar en forma presencial con la consigna de llevar obras escritas en PANDEMIA para compartir entre nosotros.
Allí nos encontramos con que todos habíamos escrito como una terapia, donde se reflejan las emociones, los sentimientos, el dolor y la incertidumbre que tuvimos que vivir esos dos años “diferentes”; donde cada uno volcó en su relato o poesía parte de su experiencia de esos años. Y así, en medio de un silencio cargado de emoción, fuimos escuchan do lo que cada uno presentó, muchos nos emocionamos casi hasta las lágrimas, y pudimos compartir ese instante de encuentro con tantas historias para contar. Se abrió un espacio donde todos pudimos expresar lo que nos llevó a escribir y lo que cada obra generó. Obras que expresan dolor, miedo, sufrimientos, angustia… pero también esperanza y deseo de un futuro mejor.
Alguien sugirió el nombre “Entre Nosotros” y nos pareció ideal interpretación del momento para titular nuestra Antología 2022. Allí está en parte, la vida de cada uno de nosotros en esos años de PANDEMIA, y que pudimos compartir nuevamente “entre nosotros” el arte maravilloso de escribir; (barbijo y alcohol en gel de por medio, ya incorporados en nuestra cotidianidad).
Sabemos, como escritores, que la escritura es terapéu tica y ayuda en todos y cada uno de los momentos de nuestras vidas. En este libro compartido, abrimos nuestro corazón a todos los lectores, tal como lo hicimos “entre nosotros”. Esperamos que se emocionen con la lectura de cada obra y que puedan llevarse mensajes positivos y de esperanza, que nos ayuden a seguir transitando esta vida y a delinear un mundo algo mejor cada día.
ETEL CARPI SADE FILIAL LOS TOLDOS
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
RESPIRO
ACRÓSTICOS EN PANDEMIA
Crece el silencio mientras el Humano se guarda.
Un coro de voces amigables, cada día nos abraza.
Aire más puro, más diáfano, respiran las ciudades.
Renace naturaleza, salen a pasear los animales.
Encierro para el Homo, castigo a sus maldades.
Nunca más grita el Planeta, resuena su voz potente.
Tiempo obligado de búsqueda, de paz y misterio.
En tanto los patios y las plazas, se llenan de trinos.
Nosotros adentro; mientras afuera, germina la simiente.
Alabada la TIERRA enferma, porque al fin, tiene respiro.
SIN TIEMPO
Pulso alterado de un mundo en estado terminal.
Atrofiado por la falta de empatía con natura.
Nauseabundo, maltrecho, oculto detrás de las puertas.
Disuelve su alma negra en el lodo putrefacto.
Envuelto en un destino sin tiempo para escapar.
Mientras el ego se va autodestruyendo.
Infectados de odio, vamos muriendo.
Atormentados habitantes de sueños imperfectos.
SOBREVIVIENTES
Conspiración del universo.
Oráculo del terror, consagración del miedo.
Ridículos humanos clamando piedad.
Otrora poderosos, dominantes, superiores…
Nuestro Planeta podrá recuperarse, Amparado en su capacidad de resiliencia. Volveremos al polvo y no quedarán huellas.
Invasión silenciosa de un ejército invisible, Reimplantará nueva vida sobre la Tierra. Unidas en el amor, todas las especies reprimidas, Sobrevivirán.
28 de marzo de 2020.
APRENDER
Obligados nos guardamos…
La Tierra tiene un respiro, se limpia el aire en el cielo, se acompasan sus latidos.
Se pinta el dulce silencio con los colores dormidos, cada nuevo amanecer nos recibe con sus trinos.
Hacía falta que nosotros hiciéramos un retiro así la naturaleza recupera lo perdido.
No importa si es un virus atacando los dominios del humano que apurado deambulaba sin sentido.
Importa borrar sus huellas, dejar limpios los caminos, así retornan los pasos de los otros seres vivos.
Esos que a través del tiempo empujamos al abismo. Entonces habrá un mañana donde puro crezca el trigo.
Obligados nos guardamos cada uno en su negro nido.
Hasta que llegue ese día, en que al fin se vaya el virus.
¿Se aprenderá la lección? ¿Cambiará nuestro destino?
Ojalá ocurra el milagro proclamando lo aprendido.
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
Marzo 2020
CAMBIO DE PARADIGMAS
La naturaleza está de fiesta. Los seres humanos, obligados a guardarse. El planeta reclama un cambio de paradigmas o nuestra especie, será aniquilada sin piedad. El mensaje de natura es contundente. Tenemos que aprender la lección, y será en modo veloz, el que indica el reloj de la Tierra, ya que todo lo veníamos haciendo mal.
Se han silenciado las voces altas y los ruidos humanos. Y se amplifica la manifestación del sabio silencio. Entonces…triunfan, dulces y alegres, las voces de toda la naturaleza: viento, mar, aves… la danza sublime de los árboles y el agua. Ocultos, aislados… desde nuestro asfixiante refugio, estamos obligados a escucharlas.
Se aplaca la soberbia. Crece un silencio nuevo que nos invita a la solidaridad. Cada uno, en soledad, tendrá que hacer frente al gran desafío: escuchar su voz interior.
Los humanos llegaron al límite. Desde allí ya no hay retorno. Es hora de que la naturaleza descanse del acoso de nuestra especie. Después de la peste, los que sobrevivan… serán convivientes de un planeta nuevo que se salvará de la anticipada destrucción.
Estamos obligados a cambiar de paradigmas. Estamos obligados a escuchar, (si queremos sobrevivir) las verdaderas voces del amor.
Marzo del 2020
En Cuarentena por el avance implacable del Coronavirus.
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
LA VIDA DESPUÉS DEL CORONAVIRUS
Una pandemia más (que algún día pasará) desde la existencia del Hombre. Anclados en la cuarentena: muchos sobrevivirán. El Planeta se defiende, necesita equilibrar sus ecosistemas. Hay un límite que, al sobrepasarlo, la armonía se rompe y se activa el sistema de autoprotección de la naturaleza agredida sin pausas. Cuando se aleje el peligro conviviremos mejor con el universo; urge que aprendamos bien la lección.
¿Cómo será la vida después de la cuarentena? ¿Cómo será el amor? ¿Cómo será el odio?
Algo ya es seguro: los que sobrevivan serán distintos, resurgirán más puros de las sombras del miedo y del dolor, deseosos de compartir el espacio con los otros seres vivos.
Olvidados de la competencia inútil, hermanados y sin grietas, un mundo purificado que fundará una sola Nación, sobre pilares de respeto, solidaridad y amor.
Si así no lo hicieran: los árboles, los animales, el planeta sanado y el universo todo… los demandarán.
Pascuas 2021.
Como el deseo no se está cumpliendo, “el universo todo…” lo está demandando.
Marzo 2022
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
UN DÍA MÁS
“La mitad del mundo se encuentra en cuarentena”. “Única vacuna para combatir al enemigo invisible: CORONAVIRUS”. (Noticias del mundo).
Un día más para los hombres ocultos.
Un día más de angustia y miedo.
Un día más de rápido aprendizaje.
Un día más de sublimes silencios.
Un día más de respiro para la Tierra. Mientras…
mejora el aire que nos abraza, la soledad se torna mágica, se amplifican los trinos de los pájaros saludando cada nueva mañana, y reviven los árboles de los bosques que dejan de ser arrasados, se para la deforestación.
Otros seres, otrora ocultos, salen a la luz, olvidando sus temores.
Un día más para los humanos que esperan.
Un día más de asfixia y de muerte.
Un día más de esperanza.
Un día más de escucha interna.
Un día más de noches silentes.
Un día más de alboradas calmas.
Mientras…
el Planeta respira mejor, sus pulmones verdes se expanden, se limpian los ríos y los mares. Las calles están desiertas y vacías, con ausencia de ruidos, de voces, de sirenas anunciando alguna tragedia. Grandes urbes aletargadas se tornan fantásticas, alucinantes. Los pequeños pueblos, desolados, destilan poesía y belleza, amigados con los campos, bosques y montañas…
Un día más de aislamiento social. Un día más para producir el cambio. Un día más de oportunidades para aprender.
Un día más para el descanso de natura. Un día menos de contaminación letal. Un día más para soñar… para soñar un futuro mejor, en armonía con nuestro Planeta.
5 de abril de 2020
Hoy, lamentablemente, se está saliendo mucho peor de la pandemia, y el planeta vuelve a estar amenazado por la destrucción. Marzo de 2022.
EL LENGUAJE DEL AMOR
A la Ballena Franca Austral (poema ecológico)
“No es fácil tu vida en los mares Australes, Ballena Franca, ser supremo de un mundo salvaje y bello… tu mundo azul; invadido por los ruidos y las redes del humano depredador”.
Año tras año, los grandes cetáceos regresan al único santuario protegido donde nacen y crecen sus ballenatos: son las aguas calmas y transparentes de las bahías del Mar Argentino en el lejano y misterioso Sur.
Vivieron caóticos años de muerte y depredación; pero lograron emerger, como esos hielos que rodean la inmensa Antártida para encontrar el dulce paraíso que hoy las cobija bajo el cielo abierto donde conocen seres distintos llenos de amor. Seamos muchos más los que luchemos por defenderlas de la extinción, y protejamos el gran ecosistema azul que las cobija. ¡Tristes humanos viviendo la consecuencia de tantos errores con el castigo de una sindemia atroz!
Necesitamos verlas llegar cada año para admirar la belleza de sus saltos.
Y esos tiernos juegos que preparan a sus hijos para la dura vida en el mar.
Reconocemos a cada una de ellas por los callos de su piel: que son sus huellas dactilares: todas diferentes, ninguna es igual.
“Ballena Franca Austral: por tu coraje, simpatía y ternura te esperamos cada año para practicar ese maltratado lenguaje universal del amor”.
Octubre 2020
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
SER FELIZ a “MI LUGAR”: LOS TOLDOS
Llego al campo: “mi lugar” dentro de mi “otro lugar” el pueblo elegido y amado que pasa cada día por mi corazón.
El aire de febrero hamaca las lánguidas hojas del sauce llorón. Son mi compañía, las voces alegres de los pájaros. Intento estirar el tiempo y obtener una prórroga de felicidad.
Entre hierros oxidados durmiendo a la intemperie y viejas higueras cargadas de brevas me quedo en modo nada, afilando las garras de los sentidos para atrapar en mi agujero azul las migajas de vida que quedan por vivir.
Coexisto con el aire y con el sol. Intuyo tantos mundos simultáneos al mío existiendo ahora mismo, mientras busco al silencio bajo un cielo azul, sintiendo el dulce mimo del viento, acariciador serial de los hilos de inspiración, que, como telarañas, se desprenden de mi mente tejedora de sueños.
De repente… el verde intenso se abre paso en la oscuridad que obnubila y se abre la puerta del alma permitiéndome ver una vez más lo que vi toda la vida desde este mismo lugar de paz y de amor.
Como un velo que se abre, en diáfana claridad, comprendo que ser feliz… es apenas un poco más que vivir este momento: es celebrar la naturaleza que rodea la belleza dulce de mi pueblo.
Sade: Filial Los Toldos
CATALINA CIMINO
Los ToldosAMOR
Tengo miedo que haya un día sin mañana ¿Llegaré a tiempo?
No te dejes robar el mañana ni tampoco el silencio, ni la soledad, ni las risas ni tan siquiera la noche ¡No temas!
Déjate llevar por el sonido camina siempre hacia adelante cierra los ojos y súbete a esa nube en lo alto, y míranos desde allí.
Y veras que pequeños, indefensos e ignorados somos. No temas por el mañana, recuerda: el Amor es la energía más pura y transformadora del universo, los milagros son posibles y frecuentes. Pregúntate ¿Qué hay más allá del amor?
SE TÚ MISMA
No permitas que el mundo te domine, ni tampoco que el dolor te haga débil Nada puede opacar tu vida.
No dejes que la soledad te acompañe ni que la amargura te robe tu dulzura no permitas tener miedo, inténtalo todo.
¡Se vos misma!, mantente alegre, sonriente orgullosa de que lo eres. No dejes de planificar tu futuro, es tu vida.
No dependas de otros, naciste para ser libre, fuerte, única, nadie tiene derecho a decidir por vos.
¡Se tú misma!, que nadie apague esa luz que irradia tu ser. Recuerda eres luz propia, única, que se ve a la distancia, allá en el horizonte, donde nace el sol.
Filial Los Toldos
CAPULLITO DE ALGODÓN
Capullito de algodón asomó su naricita por la ventana ¡frío muy frío comentó para sí y nuevamente se metió en su camita, calentita para continuar leyendo su librito de cuen tos. No podía concentrarse, la claridad del hermoso día alum braba su habitación, cerró el libro, cerró sus ojitos pero no pudo conciliar el sueño. Entonces decidió vestirse y comenzar su día haciendo de las suyas.
Como su nombre lo indica capullito era como un ovillito de lana pero muy muy apenas se veía, era de color blanco, vivía feliz, no era un muñeco, tampoco un animalito ¿se imaginan lo que es? Creo que no… capullito es una pelusita que se encuentra en todos lados, no molesta, no es pesada, te acompaña siempre, nunc a se enferma, no tiene olor, no es mala, solo quiere estar contigo en tu ropa, si vos salís a pasear ella sale con vos, no ocupa lugar, solo se posa y es como una caricia que te abraza, te cubre, te protege...
Capullito de algodón así quiere que lo llamen solo le tiene miedo al cepillo, cuando lo ve en manos de su dueña cierra los ojitos fuerte muy fuerte porque sabe que lo sacaran de ese lugar que él eligió.
Capullito sueña mucho solo quiere juntarse con sus amiguitas pelusas y juntas armar un gran batallón, no para pelear sino para jugar. Cuando sale el sol ellas son felices las vemos por todos lados se mezclan con todo y sus colores varían no tienen problemas, juntas son una gran familia peluchera. Convivir con ellas es facilísimo, pero no todo es jugar y jugar como capullito cree, hay que descansar, hay que dormir, hay que disfrutar.
Y así capullito de algodón se hace un ovillito pequeñito y duerme como un angelito.
Colorín colorado que este capullito te haya conquistado y así mirar la vida desde otra dimensión, desde lo pequeño, insignificante, todo es más fácil y todo se puede.
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
PARA DIEGO
Naciste en cuna de potrero, él fue tu techo, tu mesa, tu cama, tu todo.
La pelota tu amiga incondicional, llenó todos tus días, tus horas, tus vacíos.
Ella era el sueño del tiempo, tu tiempo, del futuro de un niño que lloro en silencio por tener hambre, hasta quedarse dormido.
Tu nombre ¿hoy quien no lo conoce? ¿Quién no te nombra? ¿Quién no te llora?...
Niño… joven… adulto.
Creciste con muchas carencias pero no te falto amor. Ellos tus padres a quienes siempre recordas con respe to y admiración, te dieron lo que pudieron
Y mucho más, vos lo sabias y así aprendiste a gambetear.
Gambetearle a la vida, no fue nada fácil. Gambetearle al mundo fue muy perjudicial. Gambetearle a la pelota fue el don mayor que te regalo Dios.
El tiempo es el único testigo que te acompaño siempre, dándote alegrías y tristezas, nada de esto te hizo aflojar, la lucha fue siempre desigual, pues los que decían ser tus amigos, no lo fueron cuando más los necesitaste, no estaban.
Hoy solo en tu habitación, miras alrededor ¿y quién te acompaña?
Tu débil mente piensa que ahí están unos botines viejos y sucios, una camiseta con el número 10 transpirada y
descolorida. No podes moverte, tu estado semiinconsciente hace que tus ojos llenos de lágrimas, tus puños quieren y cerrarse de impotencia y no te respondan.
Por momentos tus recuerdos vuelven nuevamente, y piensas que esto va a cambiar y así forjando tu mente, tu cuerpo sin fuerzas pero luchando como un león enjaulado, porque no queres estar en ese lugar ni verte en ese estado de dolor y esclavitud sobre todo en soledad.
Diego, emprendes un viaje. Ese viaje es eterno descan sarás y volverás a gambetear pero en otro tiempo y en otro lugar. Allí la paz, la serenidad, el silencio, la luz, los recuerdos de una vida que no fue fácil te acompañaran.
Diego, ahora no aflojarás, gambetearás con alma y vida y cometerás ese gol que te convertirá en el cielo en el gran campeón. 25/12/2020
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
QUIZÁS MAÑANA
Quizás mañana cuando despierte vea con más claridad este dolor, dolor que nunca imaginé pasaría por mi vida.
En mi mente se agolpan mil sonidos creo enloquecer.
Mis ojos abiertos no ven nada mi voz muy suave, ni se escucha.
Todo mi ser solo ve tinieblas mi cuerpo inerte, no entiende nada. Quizás mañana pueda comprender esta pesadilla atroz.
Mis manos se retuercen de dolor mi respiración es agitada. Siento que mi cuerpo es un nudo y no sé cómo deshacerlo.
Quizás mañana con la luz del día pueda ver todo más claro, más nítido. Quizás mañana todo sea diferente quizás mañana esto sea un mal sueño.
MUJER
Todas las cosas en la vida tienen un porque, se diferencian entre sí, buenas, malas, mediocres, hay un ser que no tiene derecho ni revés, fue creada para dar vida y vida para siempre.
Ella no tiene límites, ama hasta morir.
Camina erguida cuando es joven y en la vejez su espalda se doble, aun así, su lucha siempre tiene una consigna: Amar y dar hasta que duela.
Cuida y protege lo suyo, lo embellece si puede y corrige cuando es necesario.
Llega la noche, el sueño la vence y aun dormida sigue despierta.
Ante el dolor y el sufrimiento se hace fuerte como el roble, cada lágrima es una caricia, sus manos rústicas y cansadas todo lo pueden, su dedicación no tiene fronteras, la sencillez de la vida cotidiana la hace única y diferente entre todas. “Se llama mujer”.
Sonriamos juntas… la vida es bella y Dios nos eligió a cada una con su nombre.
MIRTA MANSILLA – Los ToldosJUANA
Los años cuarenta, gran parte de la población del país se afinca en Buenos Aires, en busca de nuevas perspectivas laborales, con el comienzo de mano de obra fabril.
El campo y los nacientes pueblos carecían de trabajo y lo que había, de escasa remuneración, fue el detonante.
La radicación de los inmigrantes no fue tarea fácil en los primeros tiempos, no disponían de una vivienda digna. Comenzaron a construir de chapa y cartón sus propias casas, así, nacen las villas.
Juana con 16 años recién estrenados y con un bagaje de sueños, hace su pequeña valija, sube al tren, se despide de sus hermanos, hay una infinita tristeza, la saludan con los bracitos en alto, se llena de besos el aire puro de aquel otoño.
Al llegar se encuentra con un mundo nuevo, los tranvías, el asfalto empedrado, las luces, todo impacta en sus ojos color del cielo.
En aquel edificio, estilo colonial, la nueva patrona la espera, una mujer elegante de unos cincuenta años.
Juana llega con la recomendación de la dueña de la estancia “Los Tréboles”. La señora le indica todos los quehaceres, luego le muestra el dormitorio, que se encuentra en la parte superior de la casa, ese será su lugar íntimo.
Los domingos, son parte del descanso de Juana que no tiene familiares en la gran ciudad. Por las tardes camina por Florida, mira vidrieras, vestidos con los colores de antaño, las veredas perfumadas de los azules jacarandás y en una esquina cualquiera, suenan las melodías de un viejo organito, todo es una nota de nostalgia y melancolía que embarga su corazón.
Ese verano fue distinto para Juana, la señora le pidió si era posible su compañía en las vacaciones, ya que su salud era muy frágil.
Por las tardes, le agradaba correr por la arena hasta llegar a orillas del mar, el día era muy caluroso, se introdujo para refrescarse, las olas estaban enfurecidas, rujían como un león, las gaviotas se ausentaron en el paisaje gris de esa tarde.
Juana se despertó en los brazos de aquel valiente joven. La perspicacia de su mirada lo delató y Juana entendió el mensaje, las palabras no fueron necesarias, así comienza este amor.
Salvador también carga una mochila de tristes recuer dos, porque viene de un país donde los conflictos dieron lugar a una guerra insostenible.
Se casaron en primavera, fueron padres de seis hijos, tres mujeres y tres varones, bellos por dentro, crecieron en un hogar humilde, Villa Soldati, con valores y amor como los que sentían en lo más profundo de su ser.
Él era trabajador, deseaba lo mejor para su familia, ahorraba porque quería tener una casa con su Italia lejana.
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
La felicidad no perduró por mucho tiempo, Salvador padecía una enfermedad sin retorno.
Juana nuevamente sola, sin el amor y el apoyo del ser más amado, tiene que enfrentar la vida con sus pequeños.
Nuevamente sale en busca de trabajo, comienza en una textil, el mayor cuida de sus hermanos.
Así van pasando los años, sus hijos estudiaron carreras universitarias, Juana se jubiló.
Lograron con un crédito comprar una hermosa casa y ese fue el regalo de cumpleaños para su mamá, una mujer que nunca fue vencida en los momentos de tempestad.
Juana con voz pausada llamó a sus seres queridos, se despidió con tiernos besos. Se retiraron hacia el jardín de la casa.
Comenzaron a caer las primeras gotas del cielo, que se entrelazaron con el llanto de esos seis capullos nacidos del amor.
Rosas, jazmines, nardos y violetas, son su perfume dieron el último adiós.
Juana la musa inspiradora de esta historia cerró sus ojos va en busca del Caballero Errante Italiano que fue su gran amor.
ENGRANAJES
Todos hemos sido creados con las mismas posibilidades, pero los avatares han marcado las diferencias…
Algunos de los privilegiados hicieron usos y abusos, y sin importar el qué ni el cómo pisotearon el pasto y las flores, aplastaron caracoles, sometiendo hormigas, y exterminando otras.
Usaron todo tipo de bastones: materiales, orgánicos, químicos, humano, de luxe…, para conseguir sus fines sin piedad ni descanso.
Muchas veces, su caminar aciago los llevaba por laberintos siniestros y hostiles, cuyas paredes amenazaban con cernirse sobre ellos.
Por medio de artimañas creían ver la luz y la usaban. Tinieblas para otros, los no privilegiados, que lamían las migajas de sus mesas…
Muchos quisieron bajarse de algunos peldaños, mirar para abajo, y hacer algo al respecto… Y lo hicieron, marcando una sutil pero muy valorada diferencia…
Mientras tanto, en su trono, el Supremo observaba su obra, la gran cantidad de pintura caída del trémulo pincel.
Juntarla no podía, y ya todo estaba hecho…
No quería cometer otra vez el antiquísimo error cuando al agacharse a recoger los trozos del suelo, mandó sobre su creación un diluvio de lágrimas.
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
Eso no sirvió y Él le prometió a un solo hombre no volver a hacerlo.
Él lamentaba no haber sido un buen maestro, y hubiera querido no haber proferido lo que ahora le impedía realizar una nueva limpieza: la Palabra prometida...
Y cuando quiso ver a sus estrellas, se quitó las nubes de las pestañas, y se dio cuenta que les había dado un brillo intensamente dañino.
Ellas comenzaron a titilar, primero, y luego a desplazarse y caer vertiginosamente por todo el tiempo y el espacio…
¡Qué pena sintió aquel que las había creado…! Y la aguja humana seguía su monotonía eterna…
El hombre, al probar la manzana y digerir su bocado, se le hizo presente todo aquello que le había sido vedado. Y sintió sed, y quiso beber más allá de lo permitido. Y tuvo hambre, y quiso probarlo todo. Y deseó gritar, emitiendo un estridente aullido de libertad… Comenzó a usar el mundo que lo rodeaba, el mismo que desde un principio fue destinado para él. Y con su mítica media naranja creó herramientas. Luchó, trabajó, formó familias, en agrupaciones establecieron costumbres, crearon culturas, y utilizando cada vez más tecnologías, realizando avances y retrocesos como humanidad…
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
El tiempo los azotaba y ellos, lejos de rendirse, mostraban y exponían aún más su flanco costillero, inconscientemente…
La naturaleza, que en sus principios era un obstáculo, fue completamente dominada y sometida…
Pero el tiempo, aunque Previsible por sus signos, escapó de sus controles, la lluvia y el sempiterno ciclo del carbono… Las larvas metamorfoseándose en su mundo para mariposear por breve tiempo; trémulas ramitas que devienen en imponentes monumentos naturales; las golondrinas y su emigración hacia la calidez; las hormigas y el incansable trabajo ya de su estilo;
el cardo que es cruel cardo y muere en suave panadero; las rosas rozagantes y en su fin marchitas…
¿Y dónde estaba el hombre en todo esto…? Dónde encajaba…?
No encajaba.
Y empezó a idear sueños, Anhelos, metas, leyes, Fórmulas, teoremas y toda clase de acertijos para que resuelvan su cómodo existir…
Llegar hasta el fin de toda incógnita…
Logró mucho pero no alcanzó otro tanto.
Entonces, nuevamente el mismo interrogante pero magnificado. Y los eslabones de una cadena que nunca acababa…
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
La duda no aflojaba y persistía la natural curiosidad humana…
Y el natural miedo… Y el inoculado egoísmo humano…
Hubo reuniones, pactos, intereses, desacuerdos, treguas, pero también guerras. Las voces se tornaron graves, fuertes, roncas…
El murmullo, de arrullo adulador pasó a blasfemia cínica y amenazante.
La mano abierta pronto se tornó en un puño nudoso, y los ojos perdieron su cristalino en inquietud y huida.
La rueda comenzó a retroceder su giro, paulatinamente… Vertiginosamente…
Ya no Se quitó las nubes que opacaban, oscuras, su frente, ya que el fulgor terrenal hería notablemente su iris biónico. Directamente ya no miraba, Y volteó dolorosamente, una vez más, como tantas otras veces, su cabeza albina. Vio todo empañado, y sus ojos habíanse tornado ciegos…
Eternamente ciegos, ya…
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
MIGUELITO, UN PERSONAJE
Miguelito, era un verdadero personaje pueblerino, pues era un gran ajedrecista y estudioso de las matemáticas con sus jóvenes 30 años. Siempre tenía una sonrisa y un chiste a flor de piel, de origen muy humilde, con un gran espíritu solidario, terminó sus estudios primarios con mucho esfuerzo, intercalando trabajo y estudio. Formó rápidamente su familia, la llegada de un hijo, fortaleció el vínculo hoga reño, no pudo seguir estudiando. Porque era el único sostén de la casa, tuvo la suerte de ingresar al andamiaje municipal del pueblo junto a otros cinco compañeros, al cuidado de la plaza principal, orgullo de todas y todos los vecinos.
El anecdotario cuenta que su madrina, quien era oriunda de una ciudad balnearia, lo visitaba en las vacaciones de invierno y verano, esta persona era de muy buena posición económica, regenteando una cadena de importantes super mercados.
En una ocasión cuenta la historia, que Miguelito, pudo ir a visitarla a su ciudad, fue un fin de semana largo, cuando regresó a su pueblo, a su puesto de trabajo en la plaza, en la tradicional rueda matera, sus compañeros se reían contando distintos contenidos del fin de semana.
Miguelito estaba triste, casi al borde de las lágrimas, cuando sus compañeros se dieron cuenta de dicha situación
dijeron, ¿Miguel por favor, contanos que te pasa?, entonces Miguel les cuenta: el pasado viernes viajé a visitar a mi madrina, la cual cerca del mediodía, murió de novio. EHHH, ¿cómo de novio? Expresaron sus amigos. Sí, continua Miguel, fue a cruzar la calle y no vio el colectivo que avanzaba a toda velocidad.
Por supuesto todo era ficticio, una sonrisa se dibujó en sus labios, quería ver la reacción de sus compañeros.
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
HUGO
TIEMPO
Tiempo que pasa, inexorable para vos, para mí para todos.
Tiempo de los niños que pasa lento de adolescentes, se inquieta se acelera, nos lleva a vivir vertiginosamente; todo es bullicio y alegría amor, pasión.
El tiempo es ahí, ahora está y yo también lo aprovecho para hacer esas pequeñas grandes cosas que me fortalecen, y alegran la vida. Cosas que trascenderán en el tiempo…
Baigorrita-
ESCRITORES Y MAESTRAS
Fue una reunión constructiva de escritores y maestras, nos dejaron una muestra muy solidaria y creativa, clase especial selectiva tratan un tema importante, romper la roca gigante ¡Esa que trunca la vida! materia que al ser rendida se recupera el diamante.
La sociedad de escritores del partido de Viamonte tiene claro el horizonte de los poetas y autores, escritores y profesores que dicen si a la cultura, paso a paso con mesura solo el querer es poder, y en el arte de aprender ¡Qué herramienta la lectura!
Bueno es darle al semejante la propuesta en positivo, con un sentir afectivo que puede ser confortante,
por el futuro… el aguante se puede cambiar de horma, respetando algunas normas se renueva el pensamiento, valdrá la pena el intento y es posible una reforma.
TINTA Y PUEBLO
Brota tinta de este suelo y no está tu casa turco el tiempo dejó su surco los dos levantaron vuelo, se percibe y sigue el duelo del ranchito y su poeta dejó décimas, cuartetas jamás… un poeta eclipsa, mil veces todo revisa y lo pasa a su carpeta.
El ser poeta es tu premio guitarrero y cantautor con actuaciones de actor acoplaste varios gremios, lo ideal para un bohemio disfrutar de día y noche recargado de trasnoches cada velada… fue un finde, tu pueblo… honor te rinde ¡Cuánto que vale ese broche!
CÁRCEL DE JUNIN
Que largos son los pasillos del pabellón de la trece, túnel del tiempo parece transitarlo no es sencillo, parece que trastabillo al ver las rejas de hierro y a la birome me aferro y quiero que se renombre, la historia esa… de hombres que soportan el encierro.
Todas las leyes son duras cuando se cumple condena entre concreto y cadena la mente se torna oscura, pero el humano madura lo adverso lo fortifica y con el tiempo se ubica para no entrar en caída, es un tigre con heridas ¡Ni desangrado se achica!
Todo es historia de vida y por etapa se muestra sumándole algunas extras que con uno van prendidas,
el humano en su medida va tirando su aparejo es una opción el consejo visto del lado virtual, y así nadie piense igual uno solo es el espejo.
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
SOLEDAD
La soledad es un castigo si uno se deja atrapar, no quiere nadie a la par todos son sus enemigos, el tiempo será testigo verás que tiene maldad se mueve en la oscuridad ésta si… que no perdona, se alimenta de neuronas ¡y su nombre es Soledad!
Soledad que estás conmigo del principio hasta el final de que somos todo igual no lo dudo y te lo digo, nutridos por el ombligo nueve meses en soledad y al tomar la identidad a este mundo bienvenido, y con el ciclo cumplido ¡Única opción… la deidad!
La soledad es un invento su sintonía es muy fina para esquivar la rutina, esa… que corta el aliento vale la pena el intento
bien se puede consultar y al ponerse a meditar es muy formal el acierto, para llegar a buen puerto a veces… hay que restar.
S.E.G.V.
Sade: Filial Los Toldos
AMOR ALADO
Corazones destrozados se la vienen rebancando y solo están esperando un radiante amor alado que ya… los vaya curando.
Sea el amor… Luz, primavera corazones estén alertas esperen que a su puerta vendrá esa flecha certera la que de una se inserta.
Ya estarán enamorados una vez más en esta vida hermoso amor si se anida serán bien acompañados por la persona elegida.
Corazón no quedes preso puedes volar como el ave llegando a la nube suave será una luz al receso si el amor… gira la llave.
LUIS EDUARDO CAMPOS
EL TIEMPO
Zavalía
Difícil es que puedan conocer mi destino en pocos días, deberán usar la vida para saberlo... Yo en ella me he de quedar y jamás volveré a ser lo que era; ni recor darlo... ¡Soy el tiempo!...
Esta corta frase la escribí hace mucho cuanto tenía tan sólo, quince años. Desde entonces vivo con la intriga de, ¿Qué es realmente EL Tiempo?
¿Es una substancia? ¿Es una materia? ¿Es un gas? ¿es vacío? ¿Es un bloque? Y en todo caso ¿Podría ser un Ente?
Coincidentemente, buscando la definición de la pala bra Ente, vemos que significa El que ES. Nos advierte que algo está Siendo por simple deducción, y que entonces, debemos pensar que puede tener vida.! ¿Podemos entonces, quedar nos con la explicación de que nuestra vida es accionada por este Ente?
Años atrás, cuando no existían los viajes espaciales, Albert Einstein descubrió que, El Tiempo en el espacio varía su comportamiento según se encuentre cerca de un cuerpo celeste, donde se manifiesta en forma curvada o lejos de estos, donde viaja en forma rectilínea. Por tanto, una persona en La Tierra, a sus 80 años de edad, puede lucir muy anciana en tanto que, si a la par de esto, otra persona de la misma edad, viajara en ese espacio exterior, sin pasar cerca de los
cuerpos celestes, luciría mucho más joven que la que habita en la tierra.
Pensando en esto, Pasado, Presente y Futuro, son tres instancias inventadas por El Hombre para poderlo manejar en su mente y así poderlo ordenar. Imaginemos que cuando caminamos, damos un paso hacia adelante y súbitamente eso, se convierte en pasado para dar lugar al otro paso que es futuro cuando a la vez, ambas acciones corresponden a un pasado, dejando sin lugar al presente pues, ese Presente es quien Camina y que tiene Presencia por ser quien origina la acción; pues sin ejecutor, la acción jamás existiría.
Hasta aquí, hay alguna certeza sobre algún punto, sin embargo, la segunda incógnita es; en aquellas épocas que no existían métodos electrónicos… ¿Cómo hizo Einstein, para averiguar y certificar esto? Entonces ¿Habrá sido que en realidad El Tiempo, ciertamente es un Ente, y el amigo Albert fue visitado por este Ente? De allí, podemos imaginar que todo ese misterio, le fue transmitido en forma verbal, excep tuándolo de tener que basar sus estudios en algún medio electrónico, lo cual en aquellas épocas no existía.
Esto es sólo parte de una historia imaginaria pues, entonces si no fue así ¿Cómo logró saber y afirmar todo esto, a tal punto en que hoy su teoría, resulta cierta?
Si elegimos una opción de lo que puede ser El Tiempo, prefiero tomar una; según ciertas experiencias personales, raras que tuve, opto por la del Ente. Imagino que ese Ente, nos va guiando; más o menos, en la medida en que lo tengamos en cuenta por ejemplo al caminar, como si fuese un amigo al que le vamos contando nuestra vida y nuestros proyectos. Así de simple, entonces ese Ente, se nos va
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
compenetrando en nuestras vidas para no dejarnos jamás, sin opciones.
Imagino que, si nos sentamos todo el día mirando lo que sucede afuera de nuestra ventana, veremos que todo se mueve. gente que pasa, hojas de árboles que mueve el viento, sin embargo, hay objetos quietos tales como las casas o columnas de alumbrado. Todo es útil y todo elemento tiene una ubicación, una secuencia en reciprocidad. En definitiva, dan forma al paisaje que nos incluye y con el que también tenemos acción recíproca.
Hasta ese instante, sólo somos espectadores modifica dores de esa escena por el simple hecho de que la estamos viendo, es decir, nuestra mente ya tiene imagen de todo eso, sin vuelta atrás, digamos que, ni yo puedo borrar ese registro del derredor y el derredor ya me cuenta ahí, dentro de sí mismo. sin embargo, al salir y caminar dentro de esa escena, yo mismo voy modificándola con mi andar y sucesivos pasos que pueden ser, tocar un árbol o simplemente, modificar las ondas del viento que van corriendo, mientras que antes, ese viento no enfrentaba el obstáculo que ahora; cuando camino, ese viento encuentra para seguir su curso.
Si tomamos un cronómetro y medimos, las secuencias de los objetos que se mueven, obtendremos lecturas diferentes, sin embargo, regidas por la ley de ese medidor y todo se reflejará de forma idéntica en términos de lo que cada secuencia encierre de acuerdo a esos parámetros que nos marca aquel cronómetro, basado en la división del tiempo en segundos o minutos, según estamos acostumbrados a calcular.
Hasta aquí esto nos muestra evidencia de que todo y todos, somos cautivos de ese Ente; que nos compagina las
acciones; es decir, nada puede suceder de dos formas dife rentes al mismo tiempo. Por ejemplo: Una persona, cami nando hacia la izquierda, jamás puede al mismo tiempo, estar caminando hacia la derecha y viceversa. Todo debe obedecer a la secuencia en la que El Tiempo nos permite y nos condiciona.
Con esto en mente, imagino que nada es casual como mucha gente dice, y que es Causal; pareciera ser que, ese Ente nos ubica de tal forma según el ordenamiento que él necesita. Aquí podemos sacar conclusiones hacia varios puntos pues, a este Ente muchos lo pueden llamar de diferentes formas y ponerle nombres cortos o largos, según más cómodo quede entonces algunos lo llaman Destino, otros lo llaman Karma, algunos otros lo designan como una Causalidad o simple mente Lo que debe ocurrir, algo así como Lo que Dios ordena.
En mi caso al Tiempo, lo designo como un Ente o materia Maleable, elemento que, según mis pasadas experiencias, no es tan absoluto como la mayoría de la gente suele tomarlo o más bien, calcularlo mediante el sólido cuadrante de un reloj para no caer en estos cuestionamientos; hasta que en determinado día pasen por alguna experiencia Rara, entonces ahí, empiecen a tomarlo con mayor detenimiento que apuro; admitiendo en algún punto, que hay un vértice que no se están comprendiendo muy bien.
Una década atrás, estaba cruzando a pie una avenida muy ancha con la luz verde aún encendida en mi favor. Sucedió que, faltando aun dos carriles para llegar a la vereda, los conductores largaron antes de tiempo y ahí quedé entre medio de un colectivo y un camión. En el último carril, había un taxi y nadie de los tres conductores parecía advertir mi presencia.
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
Al principio de esa escena y parado ahí en ese instante crucial, me desesperé. Aunque súbitamente entre en un estado muy raro donde todo se desarrollaba lentamente y también curiosamente mi desesperación había desaparecido. Recuerdo perfectamente haber captado que los ojos del camionero, estaban fijos hacia adelante y que para nada advertían mi presencia. Recuerdo también que pensé en tres tipos de acciones para salir de ese aprieto. La primera fue, mientras todo seguía desarrollándose dentro de esa lentitud, en ver y quedarme entre el camión y el colectivo; a fin de que me superaran mientras yo, quedaba ileso y ellos supuesta mente, se iban.
Volviendo a reflexionar me dije a mi mismo; eso es imposible y evaluando la situación me dije otra vez, Ya se, salto esos dos carriles y listo; entonces, volviendo a reconsi derar el estado de mi situación una vez más, la emprendí con una tercera idea que consistía en, apoyar mi mano derecha sobre el camión y salir corriendo hacia adelante, acompañando el movimiento.
Esto fue lo que, en definitiva, me salvó de morir aplastado pues, ahí fue cuando el chofer bajó su vista para verme entonces, seguramente debido a la gran fuerza que yo mismo ejercía sobre el vehículo, al detenerse bruscamente, Salí impulsado hacia adelante rodando por el piso, debido a lo cual, solamente me raspé un codo. Fue en ese preciso instante en que el panorama de todo lo que sucedía, volvió a la velocidad normal.
De este lapso saco la conclusión de que todo esto sucedió, en sólo un par de segundos en que el chofer del camión estaba mirando hacia adelante; luego bajó su vista para verme y frenar, sin embargo, la realidad externa nos dice que, transitar toda esa situación, pensar esas tres opciones y
llegar a tres conclusiones para adoptar la que resultara correcta, cronometrado desde afuera tomaría mucho más tiempo del que en realidad físicamente tuve para hacer todo eso en ese apretado momento.
No obstante, aparte de no sentir miedo ni apuro, en esa lentitud temporal o Atemporal en la que entré ¿cómo se entiende la relación respecto de lo que llamamos entonces, Tiempo? Midiéndolo desde afuera o desde dentro de lo sucedido! ¿Cuál es la real medida o estimación de los hechos y secuencias que nos plantea ese Ente que llamamos Tiempo?
Unos años después, lo hablé con un amigo que es Psicólogo y me explicó que, eso es y actúa como una defensa psicológica ante un episodio traumático que causa tremenda desesperación. Comprendo que así ha de ser desde el lado interno de una persona, sin embargo ¿Qué hay y como se relaciona o se mezcla con la secuencia, que nada tiene que ver con lo que la persona siente y que es puramente lo que afuera de esa persona ocurre y se desarrolla? En la secuencia de ese momento ¿en dónde habité yo? ¿Cómo pudo un mismo episodio ocurrir en dos diferentes frecuencias y en un mismo lapso? ¿En qué cavidad atemporal estuve habitando, mientras en el afuera transitaba todo eso?
Luego de este episodio, talvez por que debía ocurrir, encontré una persona que también había transitado por una situación límite que le había causado ese “Inexplicable enlentecimiento del tiempo”. Esto me confirmó que, esa experiencia lejos de ser y servir como defensa Psicológica, nos muestra algo mas y es que todo lo que sucede está atado a un proceso de existencia que se debe cumplir pues, si no existiéramos, no habría sentido en que hubiese proceso de existencia y viceversa, seríamos inmóviles; nosotros tampoco
S.E.G.V.
Sade: Filial Los Toldos
seríamos lo mismo sin ese “mandato” y, por otro lado, certificar que en realidad La vida no existe como tal, sino que solamente existe El Viviente, o sea Nosotros.
Lo que designamos como Amor, tampoco existe pues, solamente existe El que Ama y desde ahí se desprende todo el resto de lo que ocurre y desde esa pendiente, se desenca denan todos los cruces de caminos de los seres que habi tamos el planeta. Por tanto, no hay Mal ni Bien, que sean según lo creemos porque, Mucho mal, termina generando un Bien y mucho Bien, genera un Mal; es la ley de los opuestos, uno interactúa con el otro y lo va regulando pues de no tener algo su opuesto, sencillamente NO EXISTE.
Esa es la clave de porque, debemos ser sometidos al cruce de los caminos de las personas, sean del modo que han venido a ser. Cada quién en su rol, da sentido el uno al otro y alimenta la elaboración de, nada menos que saber por qué hemos venido a este mundo.
Sin ir muy lejos ni complicarme mucho, pienso y siento que nosotros, al nacer, llegamos llorando y que venimos con la carga justa que ya conocemos, sin embargo, no sabemos que ya lo sabemos y que los cruces de nuestros caminos de los unos con los otros son lo que nos van haciendo cada día, saber que ya lo sabemos para que al final, nos vayamos hacia allá, en donde ese Ente que nos guía existe, digitándonos todo.!
Evidente es que la noción que sostenemos de lo que llamamos Tiempo, es muy sesgada, cuando en realidad no tiene una sola cara, sino que son dos, Anverso y Reverso, al igual que nuestras manos o el espejo cuando lo enfrentamos a otro espejo y entremedio nos reflejamos para vernos infinitamente repetidos. Mano sobre Mano, Anverso y Reverso;
Reverso y Anverso, reiteradamente hasta que unamos todos los cabos que nos componen y de esa forma finalmente, podamos saber que somos y que es ese Ente maleable que nos rige y que permanentemente nos va modelando hasta hacer de nosotros, no lo que éramos o fuimos sino aquello que, en definitiva, hemos venido finalmente a SER.
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
¡EDAD…!
¿Cuál es el dolor de la edad o la edad del dolor?
¿Qué es dolerse? ¿A qué le tememos más, al dolor o a la edad?
¿Qué es doler o dolor? ¿Cómo es la idea de dolor?
¿Cuáles son los componentes y como son, para armar esa estructura y referida hacia dónde?
¿Cuántas veces repetiremos la experiencia ya pensada, para empaparnos en lo que no podemos enjuagar?
¿Qué es estar? ¿Estar duele?
¿Cuál es la rendija que filtra esa luz del sentir y que hace doler?
¿Qué materiales la forman?
Las horas que pasamos figurándonos, son más que aquellos momentos en que somos más reales y eso duele; cuando finaliza.
¿Son, en definitiva, los minutos más valiosos que las horas?...
¿Por qué, si los minutos forman aquellas horas que jamás corren cuando duele...?
EL ENEMIGO INTERNO
Difícilmente logremos saber quiénes somos si vivimos de acuerdo a lo que creemos que somos, en lugar de actuar, según lo que realmente somos. Entremedio de estas dos conductas, habita el enemigo interno. Es ese que se alimenta del afuera, es decir de la sociedad. Sin embargo, siendo que nuestros enemigos son los que mejor conocen nuestras debilidades porque su misión es atacarnos, contrariamente a lo pensable, para alcanzar nuestro equilibrio, deberemos hacernos amigos de ese habitante; a fin de ir achicando su espacio de acción y llegar a ser, quienes realmente somos y finalmente… ¡Vivir en Paz!...
EL LEGADO
¿Amanecer que es? Según para que o quien. Después de mucho tiempo, comprendí que, aunque tenga una gran familia, amigos y mucho trabajo o simplemente, no tenga nada de eso y esté solo, lo único que tengo es Tiempo. Es de lo único que soy dueño y que eso que llamamos Tiempo, es algo así como una ropa que uno se calza entonces eso, nos lo hemos calzado allá lejos, en el momento en que hemos nacido. ¡Justo, ahí en ese momento…!
Un momento puede equivaler a una vida entera, a un simple segundo o a la continuidad que hay desde un segundo al otro. Sin embargo, siempre me queda la cosquilla de la duda al pensarme como víctima o afortunado poseedor de ese correr de los instantes porque, en realidad ¿Qué es El Tiempo y cómo está compuesto? ¿qué es lo que lo determina? y la otra duda que me causa más cosquillas es....
¿Corre o nos corre? ¿Cuánta energía hay en esa substancia que parece inagotable, aunque sea invisible? así, tal cual como el viento... ¡Nos va corriendo, y a veces puede soplar fuerte o débil o tal vez, no soplar, sin embargo, estar ahí, intentando ver que costado le ofrecemos para que entonces nos mande una mano y esa mano pueda ser de empuje o de aplastamiento hacia un lugar beneficioso o de muy difícil digestión...!
De todos modos, ahí estamos siempre, en esa disyuntiva que nos da mucho más que cosquillas. nos perfecciona el miedo; para que aprendamos a cuidarnos y nos asegura la vergüenza para que seamos más celosos de revelarnos o también; nos asegura un pudor que nos sea tan firme que
hasta frente al espejo, nos cueste revelárnoslo a nosotros mismos.
Eso es, nos va formando para saber que somos y como somos. Entonces así, crear nuestra propia intimidad. Nuestra cajita de regalo para los momentos en que, de veras, poda mos abrirla y presentarnos para decir ¡Hola... ¡Acá estoy, mucho gusto, Esto soy yo! pensándome y sin regalarme a creencia alguna, solamente, siendo eso que soy a la hora señalada; sin más ni menos que ese Yo, que soy, Sin más que eso que me contiene y nos mueve...El Tiempo o sea, La mano de Dios...!
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
MI OTRO YO
Solemos llamar problema a algo que intentamos resolver, cuando en realidad el factor problema, no es más que un proceso que quiero iniciar, para lo cual miro a mi derredor y siento una sensación nada placentera entonces, de ahí, quiero huir.
Esto me genera un montón de dudas; que me hace intuir que puedo caer en cualquier puerto, menos en el que deseo. Ese es el punto en que empiezo a sentir que me divido en dos, sin regreso.
Camino y camino; miro y miro, pero nada me genera una solución al reflejo de querer huir. Ahí, me pregunto ¿de qué o quién voy a huir si no es de mí? entonces surge la otra pregunta más profunda ¿cuál será la clave para poder ver en dónde es el lugar de mi división, para poder separarme de mi mismo y ser dos a la vez, sobre los mismos zapatos?
Siento algo evidente y paradójico, a lo que sólo puedo encontrarle una única explicación y es que estoy sumergido en un río en donde cada orilla me muestra dos conceptos diferentes; una me intenta seducir con lo que creo ser, en tanto que al mismo tiempo la otra orilla, me intenta demostrar lo que realmente soy y eso no me convence, pero al menos, veo que es de lo que intento huir.
En esa orilla veo oscuridad, sin embargo, intuyo que hay algunos detalles que me pueden ser útiles para percibir cuanto de la realidad me resulta muchas veces dudoso, aunque siento que, para llegar ahí, hay muchas rocas en las que puedo golpearme y sufrir heridas que me arranquen la
piel que me cubre y así, vea mis reales interiores, aunque derrame sangre.
Mientras tanto, sigo nadando, sumergido en este río, que no me arrastra pero que me va hundiendo, mientras no logro llegar a una solución, para saber, en que orilla debo habitar. Me siento desconforme porque la otra orilla, me ofrece mostrar sentimientos, que son ajenos; que los he ido adquiriendo a medida que me iba maquillando para no pensar en eso que intuyo; que ahora mismo en la orilla oscura, ¡puede estar...!
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
ROJO
Ahora que puedo elegir, me permito ver los atardeceres. Es simple, solamente tengo que levantar la vista por la ventana. Me guío por la radio. En verano, cuando está termi nando la música de jazz; en invierno, apenas comienza el programa de tango ya me preparo. Termino otra costurita, y dejo de traquetear en los pedales de la Singer. Le calculo que más de cien años tiene, la heredé de mi tía Etelvina. El otro día encontré el recibo de pago dobladito al fondo del cajón de los hilos… Y ella la compró usada… Por un rato me olvido de las telas y los alfileres… Hace tanto frío… Le agrego leña a la salamandra… Todos los ocasos son distintos… Y ahora aprovecho, por los que no pude mirar…
Hoy el crepúsculo es rojo. Tan rojo que da miedo. Quizás sea el contraste con esas nubes de un gris oscuro que flotan intercalándose en el cielo.
Tantos años, estuvo el recibo ahí y nunca lo había encontrado. Con estampillas de colores pegadas… Sería el impuesto a los sellos de antes… Que iba a tener tiempo de ordenar… Cortando, hilvanando y cosiendo… Todo el día… Y cuantas noches también… Que me olvido de las telas y los alfileres en las puestas de sol es un decir… Porque recuerdo perfectamente… Como cambió la moda… Esos trajecitos, los vestidos de novia, las camisas de encaje perfectas… Desde que me jubilé ya no tomo encargues difíciles, ni de gente
complicada… Puedo elegir… Ya saqué el cartel de modista y puse una maceta de suculentas colgantes para tapar el cuadradito de distinta pintura… Cuando cobre el aguinaldo, tal vez llame a los pintores… No sé, por ahí tengo que comprar otra cosa.
Ahora el rojo tiene la fluorescencia del fuego, como brasas encendidas sobre el horizonte. Impactante. Tan rojo que me acuerdo de vos, Agustina… Se me viene a la mente la palabra “prófugas”, es un sinónimo, no es lo que decían.
Todas esas pitucas eran las que nos desprestigiaban… Mis clientas… Ya no vienen más… Están viejas ahora… Cuando voy al pueblo las veo vestidas con esa ropa comprada de mala hechura… Tanta exigencia conmigo… Que surfilado, que ojales bordados a mano, que justito al talle, que el hilo sea del tono… Y ahora andan con batones de bolsillos chanfleados y escotes desprolijos… Cuanta hipocresía. Lo que pasa es que lo que algunas cosas que criticaban les pasó en su familia… Y tuvieron que cerrar la boca. Y eso que nunca supieron todo. Nunca sentí la obligación de contar. Supuestamente, yo era tu suegra… Y nadie más que yo, conocía tan bien a mi hijo. Te lo dije, Agustina, te lo dije, no te cases con Leonel. Tan violento y desamorado como el padre. No pude hacer nada. No lo pude cambiar. Es mi fracaso.
Ya es de noche. Intensa la negrura. Agrego leña. Está helando.
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
Pienso si habrán pasado frío, si habrán sentido hambre… No sabía dónde estaban. Nadie sabía… Les pregunté tantas veces a tus padres…
De todos modos, me imagino que pudiste derretir escarchas con tus pasos… Como yo, esa madrugada conge lante de la huida de la casa de mi marido. Todo dejé, las sábanas bordadas, las cortinas tejidas al crochet, la mesa, el juego de cubiertos, la sopera de porcelana… Pobre diabla la que disfrutó de mis cosas y padeció a mi marido. Nunca me divorcié, por eso lo llamo marido… Hace ocho meses que soy viuda, y la mujer, se me apareció hace poco… Tal vez no se animaba… Vino a agradecer que nunca le reclamara ni un repasador… Me trajo un pañuelito ribeteado en macramé con punto vainilla. Se lo acepté porque me juró que era lo único que no había usado. Lo tenía escondido del ogro de tu suegro. Está amarillito por el paso del tiempo. Lo guardé en el cajón del medio de la máquina de coser. Brilla la madera. La lustro, como siempre, con un poquito de cera. De cera verdadera de los panales de los apicultores irlandeses. A veces abro el cajoncito del medio acariciando el pañuelo. Me trae nostalgias…
Nostalgias de una época linda. Cuando con mi hermana Rosaura, íbamos a aprender con Dorina. Ella nos enseñó a coser, a bordar y a tejer. Me da ternura recordar a Mamá que vendía huevos y gallinas para comprarnos retazos, hilos y lanas… Y Papá atando el sulky con orgullo para que fuéramos al pueblo a la Academia de Dorina… La tía Etelvina, que cocinaba exquisito y nunca supe porque encendía sus alertas cuando se le acercaban los hombres. Todos están muertos
ahora. También ese ramito de violetas, me viene a la mente. El ramito y el perfume con que me sedujo tu suegro. Yo estaba tan enamorada. El primer beso fue en la vereda de la panadería… Hacía tanto frío ese día… Como hoy… Como la noche que corrí derritiendo los cristales de rocío… Abandoné la casa, con lo puesto y mi hijo envuelto en una pañoleta. Apretaditos los dos. Los dos llorando. Los dos con moretones de una explicable furia descargada.
Por eso, esta carta, Agustina, necesito que perdones…
Yo no pude cambiar nada… Leonel heredó esa furia, se le contagió en la sangre… No creo que recordara… Tenía menos de un año el tiempo que vivimos con su padre… Y ni siquiera dos, las siete veces que vino a buscarnos… Las siete veces que mi tía salió con la escopeta… Después se olvidó… Nos olvidó… Se juntó con Ernestina, pobre mujer, venir a devolverme un pañuelito después de las cosas que pasaron… Si hacía tanto tiempo que habíamos quedado viudas las dos, y todavía tenía esos rasgos del pánico. Ese temor arraigado que no quería para vos… Por eso te dije que no te casaras con Leonel.
No voy a llorar… Así que nunca estrenaré el pañuelo…
Al menos me diste tu dirección…Y todos pudimos saber que están bien. Qué bueno que pudiste encontrar otra estan cia para cocinar. Cuando vinieron de visita, el otro día, me olvidé de contarte. Es que con la sorpresa, la alegría y tantas emociones, se me pasó. El día que enterramos a Leonel, entre las personas que se acercaron a darnos el pésame a tu suegro y a mí, estaba Gregorio. Gregorio, el pelirrojo, el guitarrista, el de la colonia irlandesa, el que vende miel y cera. Al poco
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
tiempo me trajo un trabajo, que le hiciera unas bombachas de campo. Que eran para actuar me dijo. En un festival, no me acuerdo de donde… Es uno de los pocos clientes que conservo. Ahora que puedo elegir. Hay que agradecer al des tino, a veces es bueno tener a alguien para compartir unos mates. Especialmente si fue amigo de mi hijo en tiempos felices. Vos también eras de su grupo en la adolescencia. Por eso te lo cuento. Por lo menos para que sepas que tan sola no estoy... También pasan a saludar otros compañeros de escuela, o del trabajo… Pero Gregorio viene más seguido, yo consumo mucha miel… Como no uso azúcar… Y Gregorio pasa todas las semanas vendiendo… A veces tengo la sensación de que sin preguntar, anda averiguando tu paradero. Está igual que antes, con pecas y ese pelo colorado.
Por más que no tuve noticias en tantos años, todos los días me acordaba un poquito en silencio de ustedes. No lo podía comentar con nadie, Rosaura ya había tenido el accidente, y jamás se me ocurrió mencionarlas delante de Leonel. Desde que te fuiste, todos los años que siguieron, nunca te nombró, ni mencionó a Graciela. Como si jamás hubiesen existido. Igual que el padre. Como si algo al hacerse hombres les arrebatara los sentimientos. De chico era tan bueno y cariñoso… Nunca entendí el cambio… Fue mucho antes de conocerte. No te culpes... Vos bien lo sabrás... Yo lo sé muy bien… A los golpes y gritos una se va desenamorando.
A quien le iba a decir que fue en una de mis noches de insomnio. Una de esas noches que quedaba acelerada de tantas puntadas, del giro vertiginoso de los carreteles, de la preocupación de un vestido de quince.
Fue en el mes de noviembre. De eso estoy segura, las fragancias de las flores de tilo invadían la casa con las ventanas abiertas. Yo te vi en el corral de los caballos en las primeras luces del alba separando a Capiquí y preparando el sulky. ¿Vive la Capiquí todavía?... Eso fue lo poco que declaré en el juzgado de paz cuando te buscaban. Eso, y que de mi casa no te habías robado nada. El sulky y la yegua los compró de soltera con el sueldo de cocinera en la estancia. Eso men cioné. Nunca dije que me llamó la atención que encararas el camino opuesto a tu trabajo. No iba a ser yo cómplice de que te encontraran. No todas tenemos una tía que nos proteja a los tiros.
Me dijiste tres días y dos noches andando… Es ir muy lejos… Quien lo hubiera imaginado. Al menos te llevaste la manta rosa que tejí para Graciela ¿no?... Nunca más la vi, supongo que la cargaste en el sulky… Algunas noches de primavera refresca… Era tan pequeña mi nieta…
Quizás por intuición, o no sé porque miré como se alejaba el sulky al trotecito… Y seguí mirando un rato largo, hasta que la polvareda se aplacó y el camino quedó quieto disfrutando las lamidas de un sol tibio. Era una mañana muy linda, en el patio se podía sentir… Pero yo tuve que entrar a preparar dos pantalones… Se usaba la gama de los marrones ese año… Así estaba en las revistas… Y claro, todas querían tener uno con urgencia…
Algo raro pasaba desde la semana anterior. Ahora me doy cuenta, que lo venías pensando. Ni siquiera el domingo habías juntado las hierbas, ni las ramitas de nogal para pre parar eso con que te oscurecías el pelo… Ese té que hervías ratos de los ratos en el brasero. De ese que me separabas un poco para disimular mis primeras canas… También le ponías
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
al cabello de la nena… Que linda está ahora con sus doce años.
Ahora ato cabos y supongo. No porque alguien me lo dijera.
Tranquila, Agustina, mi hijo nunca lo supo. Se colgó del molino porque sí. Por esa furia incontrolable que tenía en la sangre. Mirá si va a esperar tanto tiempo con un secreto así… No lo hubiera aguantado… Solamente lo sabías vos, Agustina… Solamente vos, hasta que yo me di cuenta el día que te fuiste, y no se lo conté a nadie. Fue cuando me acercaste a Graciela para que me despidiera. Besos y abrazos que extrañé una década… Esa piel tan suave y blandita que se aferraba a su abuela.
Estoy tomando un té con limón… Del limonero que plantamos juntas… Está inmenso… ¿Te acordás que lo compramos de las cuatro estaciones?... No reíamos con la duda…
Al final fue cierto… Se llena de flores… El perfume de azahares es delicioso… Adoro ese árbol… No hay que acercarse tanto para ver los frutos amarillos… No me di cuenta de darte el otro día…Siempre ando regalando por los vecinos… Yo solita no puedo consumir tantos limones…
Punto y aparte. Empecemos de nuevo. Vuelvan. Necesito redimirme del fracaso como madre.
Yo podría ocultar, pero no es necesario. Yo podría mentir, pero no quiero. Se podría inventar una nueva teoría de transmisión de genes, pero no tiene sentido. Solamente lo sabíamos las dos y ahora que todos lo sepan. Nada cambiará mi cariño.
Por las dudas y si es estrictamente necesario, ya limpié el cañón y el percutor de la escopeta. Nunca es bueno acumular viejos residuos de pólvora de distintos tiempos.
En nuestra casa no hay que cocinar tinturas de hierbas y nogales. A mí ya no me importan las canas y es preciso liberar el cabello de Graciela.
Yo recuerdo el color… Rojo furioso.
El fulgor del crecimiento que no pudiste teñir prepa rando tu huida. Rojo incandescente. Tan rojo. Tan brasita encendida. Tan rojo como los atardeceres de fuego. Vuelvan para siempre. Nosotras sabemos que no lleva mi sangre, pero es mi única nieta.
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
LOS HUESOS
Sin mapas, desde los pueblos cercanos
Los senderos sinuosos te van llevando…
Sin tiempo, pura llanura, puro recuerdo
Puro galope del corazón y del encanto…
Allí,
Pisas la tierra, caminas sueños, llegas al cielo…
Allí, ando buscando…
Allí, donde los horneros eligen horquetas
Y poco a poco, arman redondos ranchos
Allí, donde los caballos agitan los vientos
Y las tranqueras de alambre se desmayan…
Allí, donde la luna es misterio de las heladas
Y se desarma en polvo un castillo de barro…
Allí, donde el sol poniente acaricia el agua
Y las minúsculas olas se tiñen de naranja…
Allí, donde los juncos esconden nidos
Y las totoras, seda y semillas desparraman…
Allí, donde las luces son buenas, y a veces malas
Y el sudor riega surcos que brotan de mañana…
Allí, ando buscando…
Allí, donde flota el alma invisible de la balsa
Y aún las rosetas pinchan los pies descalzos…
Allí, donde se atrapan panaderos de los cardos
Y hay flores de colores que tapizan memorias…
Allí, la ando buscando…
Donde se juntan palabras y aparecen estos versos
Donde me espera la música de trinos, iluminada
Precisamente allí, en un cañadón de Los Huesos
Donde quedó perdida mi risa… despreocupada…
CARLOS SALVADOR MAC DONNELL Los Toldos
ALMAFUERTE: EL MAESTRO
Cuando escribe el misionero le rinde un homenaje a los que luchan y lucharon por un ideal en cualquier región de la tierra… y en aquella lucha o perecieron o perecen!
¿Y no anduvo Jesús entre los pecadores y no salvó al ladrón en el Gólgota? Se pregunta el poeta y recuerda con afecto a San Vicente de Paúl. Increpa a Asís, pero no lo niega “Si, Dios es caridad; mas sobre todo, es Suma Voluntad de lo Perfecto”
Quiere influir sobre las masas, ser símbolo de la democracia, para finalmente expresar: “¡Solo quiero saber que soy tu hermano!”
Acosado como siempre por la pobreza, escribe para La Nación, Caras y Caretas y Pebete.
Pero firme en sus ideas. Porque cada hombre dice nace con su consigna. Y porque quien se modifica se suprime. Sentía la amistad hasta un grado inherente al sacrificio. El amor fraterno es el fundamento esencial de su existencia.
Rechaza el ser tildado de bohemio. No deja de vestir con decoro cuando la circunstancia le resulta propicia y gusta la sabrosa comida italiana. Pero le bastan un trozo de pan,
unas nueces, unas sardinas o un poco de queso, sin descuidar el mate y los cigarrillos.
En una época y para inspirarse bebió caña, hesperidina y anís, hasta que rodeado en su casa de niños y para darles ejemplo terminó con la bebida.
Sabía ser crítico y censor de sus escritos: En la noche del homenaje que la ciudadanía tributó a Mitre pronunció célebres palabras “Señores: las tumbas de los grandes no se riegan con lágrimas, no se pueblan con gemidos: son templos de meditación”.
Practicaba el culto del coraje y se estimaba en alto grado civilizado.
S.E.G.V. Sade: Filial Los Toldos
I - AZOTE
Los ToldosFLORES DE PANDEMIA
TRINI URQUÍA
Aquí estamos, inmóviles y mudos/ el orbe entero sumido en el dolor, nuestros amados, en dolorosa instancia/ están partiendo hacia un mundo mejor. Pandemia que se lleva lo que amamos en desquiciada muerte solitaria, desolación, asombro, llanto y pena es la pesada y triste carga diaria. Es triste ver a los indiferentes que ven morir a los demás como si nada, ¿se creerán inmunes al azote que en todo el mundo dejando va su marca? Seamos solidarios con los otros la empatía es lo mejor que nos hermana dejemos que el dolor nos vaya uniendo para así mejorar la raza humana.
A JORGE
Estoy aquí, pensando y te recuerdo sentado frente a mí, tranquilo y grave, hablando de mil temas diferentes y tu mirada tan penetrante y suave...
Estoy aquí, extrañando aquellas charlas sobre la Pachamama, el devenir, la vida y muerte, sobre los sentimientos que, en el alma, juegan su desafío a la buena suerte. Pero es como decías, el destino jugó una mala pasada y tu presencia se volvió nube, se volvió sol, se volvió tierra y yo me quedé aquí, con esta ausencia...
Te pienso en cada yuyo, en cada planta, me siento en el lugar que tú ocupabas e imagino que estás, sé que aquí estás con tu filosofía hecha palabra...
Vuela alto y hasta cualquier momento, yo no puedo evitar esta tristeza pero sé que estás bien, con tus ancestros, envuelto en su amor y su tibieza...
III - A MIS AMIGOS
Cuando todo esto pase y de nuevo te vea no será este momento un momento cualquiera. Porque ya no seremos los mismos de hace tiempo, esto que nos ocurre debe servir de ejemplo para ser más sensible, para ser más humano, para mirar al otro y tenderle la mano. Y lloraremos juntos por los que ya partieron y nos prometeremos ser más justos y buenos. Todo será distinto, más auténtico y serio cuando todo esto pase y te vea de nuevo.
LA PUERTA DE CASA
Me pidieron que describa someramente mi casa y encaré, con mucho empeño, la tarea encomendada pero, al pretender hacerlo, me pasó una cosa rara.
Descubrí que, no podía solamente con palabras describirla pues, se mezclan las vivencias, los recuerdos, todo lo que fui guardando, por años, dentro del alma.
Quise hablar, en primer término, sobre la puerta de entrada y, locas las emociones, en el pecho galopaban pues, no es sólo un rectángulo de madera dura y clara.
Me vio llegar siendo novia dichosa y enamorada, la traspuse siendo esposa, después mamá emocionada, trayendo en brazos los hijos que el Amor me regalaba.
Algún portazo me vio partir veloz, apurada y, otras veces descansé en su umbral cuando, cansada, busqué escapar de los ruidos, intentando hallar la calma.
Sabe de risas de niños, de suspiros, de nostalgias, de penas de adolescentes, de visitas impensadas, testigo mudo de dichas, testigo mudo de lágrimas.
Lugar que registra todo, las partidas, las llegadas, si todo ésto me provoca sólo la puerta de entrada ¿cómo quieren que describa someramente mi casa?
CRISTINA MANQUILLÁN
VIAJE
Hoy me mira la luna blanca y desmesurada. Es la misma noche la misma mañana. Pero es otra, que nunca, fue tan grande y tan pálida, tiemblo como las luces tiemblan sobre las aguas, tiemblo como en los ojos suelen temblar las lágrimas. Tiemblo como en las carnes sabe temblar el alma. ¡Oh!... la luna ha movido las tres viejas palabras “muerte, amor y misterio”.
Los Toldos-
INFANCIA
Tarde verano en el campo... mi infancia, ¡Qué feliz pasaba bajo el sol!
Caliente verano, trozo de pan con miel que nunca olvidaré, mate cocido, fuego la siesta perdida de niños corriendo por el campo bajo el sol.
Campos llenos de vida, de canto, de nostalgias amarillentas... bajo el trigal que los envolvía en las tardes de verano, que se hacían interminables y que ya pasaron. No sé cuándo se esfumó todo aquello, tan lindo, tan mágico. Fueron mis días más hermosos mi infancia en el campo, nunca la olvidaré... me quedará por siempre guardada en mis recuerdos.
SUEÑO
Sueño que viajo hacia una galaxia en una nave de colores transparente como el agua y que me pierdo en el horizonte buscando una luz, un espejo en donde mirarme. Una mariposa se me posa, como un abanico yo la miro con ternura Ella es mi cómplice en mi aventura en mis sueños infinitos sus alas son de color canela luego se pierde en la lejanía del rio. El rio es mi signo, quien me dice… Que pronto llegará el atardecer Y yo sigo soñando.
SOLDADOS DE MALVINAS
A ustedes les escribo, que con caras de niños asombrados conocieron el infierno de la guerra desatada por alguien o algunos que se dejaron llevar por impulsos terribles.
Hoy les llegaran saludos, reconocimientos, Palabras, medallas, nada más… Pero en ustedes permanecerá el miedo, las huellas marcadas del tiempo interminable de guerra. Solo Dios sabe si algún día podrán borrarlas. Pero yo les digo desde lo más profundo de mi alma, que ustedes son y serán héroes inolvidables de nuestra patria, por siglos y siglos…
MAMERTO MENAPACE Monasterio de Los Toldos
HACIENDO MADERA1
El edificio del monasterio consta de varios cuerpos que se fueron construyendo en distintos momentos y con distintos materiales. El cuerpo inicial es el que actualmente constituye gran parte de la capilla y de los salones que lo rodean, que se levantaron entre los años 1942 y 1945. Se distingue de los demás edificios por su solidez. Las paredes son del doble de espesor del que tienen las que se edificarían después. Las ventanas están protegidas por hermosas rejas fraguadas a bigornia en la herrería de la misma estancia. Pero la nota principal es el uso abundante de la madera. Sobre todo, en la capilla. Todo el maderamen, tanto de tirantes como de techumbre está trabajado prolijamente a hachuela. Y el dato más curioso es el que cuenta la historia. Toda esa madera fue traída de Escandinavia durante el último período de la guerra. Y la razón es muy sencilla. Aquellos países tenían una gran riqueza forestal, pero carecían de trigo. De allá venían los barcos a buscarlo a nuestras pampas. Y traían como lastre de sus buques un cargamento de madera, que aquí dejaban a poco precio a fin de llevarse el alimento que necesitaban imperiosamente. Esa madera se almacenaba en el puerto y era comprada por las empresas constructoras a un costo más que accesible a nuestro dinero de aquellos tiempos.
libro: Ansiedad
Ancianidad.
Patria Grande.
De chico sentí muchas veces contar que la señora María Marenco, por consejo del arquitecto, había hecho traer en tren hasta la estación de El Tejar todo un cargamento de esas maderas para la construcción que estaba haciendo en su estancia. Eso explica que desde hace casi ochenta años no haya habido problemas de deterioro por insectos en estas maderas, como suele pasar a menudo con las que se traen desde el norte argentino, más tropical.
Por eso cuando levanto la mirada hasta esas grandes vigas, tirantes y tablas, pienso en los años que les llevó el ir haciendo madera por dentro. Desde su nacimiento allá en los bosques nórdicos fueron haciendo carne la tierra natal para incorporarla a sus troncos, sin imaginarse que un día tendrían que cumplir con una misión a miles de kilómetros al sur, en una geografía totalmente distinta a la suya que los vio crecer. Tendrían que sostener la techumbre de una construcción de estilo colonial, en un clima totalmente nuevo. Y todo eso lo podrían cumplir en plenitud gracias a la paciencia de su fidelidad a la tierra que les dio su savia y al clima que les infundió su temple.
No sé si esos árboles en su vida sintieron ansiedad, o si sufrieron de nostalgia cuando los hicieron madera. Pero su historia, ¡es tan parecida a la de los humanos! Lo que sí sé es que la plenitud de sus vidas de árboles, les permite hoy cumplir plenamente su misión de sostener la techumbre de la iglesia en la que nos reunimos para rezar. Y sólo Dios sabe por cuánto tiempo aún tendrán que cumplirla. Ciertamente allá quedó su follaje para hacerse nuevamente humus de sus bosques, cobijados durante meses en las nieves invernales. Y la mayor parte de su ramaje se habrá vuelto calor familiar en los hogares. Lo que llegó hasta aquí, y hoy cumple su misión entre nosotros, fue el corazón de sus troncos.
Filial Los Toldos
“
EPÍLOGO
Todo concluye al fin, nada puede escapar Todo tiene un final, todo termina…”
Ricardo Soulé – Presente
Así culmina una antología que se inició en pandemia… Esa pandemia que nos separó y nos unió en la distancia. Que nos enseñó a entendernos con los ojos… Los ojos que lagrimean y también sonríen. Miradas lejanas buscando respuestas, acompañando sensaciones…
Cada cual reaccionó distinto con el encierro… Lo bueno es poder expresarlo. Sobrevivientes de tantas batallas con el enemigo invisible, llegamos al punto final de “Entre noso tros”, compartiendo retazos de ilusiones, relatando vivencias, dibujando con palabras ficciones, imaginando recuerdos futuros…
Despejadas las neblinas y libres de toda nube, como la luna y el sol que vuelven a brillar, nos volveremos a encontrar, compañeros en las letras.
Silvia Graciela Oliverio