Reservados todos los derechos para la lengua española. Queda prohibida la reproducción total o parte de este libro, ninguna parte del mismo puede ser sujeto de reproducción, difusión, impresión, almacenamiento, transmisión o utilización por ningún medio inventado o por inventar, ya sea electrónico, químico, mecánico, óptico, de grabación o electrográfico, sin previo consentimiento por escrito del autor. Título de la presente edición: La sabiduría de los chamanes Título original: Shaman’s Wisdom Autor: Tony Samara Primera edición en inglés: © 2009 Tony Samara 2009 by © Findhorn Press ISBN: 978-1-84409-159-1 Primera edición en español: © 2010 PNLbooks ediciones. Salvador A. Carrión, Editor. © 2010 by Tony Samara ISBN: 978-84-937875-0-9 Traducción: Eva González Rosales Maquetación y arte final: Albertina Castaño Melero Diseño de portada: William Adler Depósito legal: Impreso en España por PUBLIDISA
Índice
Prefacio ………………………………………………………….…... Introducción ……………………………………………………..… Desde la selva tropical a los Andes …………..……………… Cantos ..................................................................................... Respiración ...….………………………………………..…..……… Fuerza de voluntad e intención ……………………………… Separación ………………………………………………………….. Liberación …........................................................................... Los cuatro puntos cardinales y la Mesa ............................ Sur …………………………………………………….............. Norte ……………………….……………….……….............. Este ………………………………………..….………............. Oeste …………………………………..…………….............. Animales Tótems y elementos de la naturaleza ……........ Sueños ………………………………………..……...…….……….... Tipos físicos ………………………………………………………… Gente con cabezas redondas …………………………… Gente con cabezas alargadas y rostros con forma de óvalo ……………………………...
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La Sabiduría del Chamán
Gente con cabezas cuadradas y grandes y amplias frentes ………………………..…....... Alimentos …………………………..…....….……………………… Posturas de poder ……………………………………..….…….. 1. Limpiando la energía ………………………..…......... 2. Paseo de meditación ………………………..…........... 3. El ejercicio de afianzamiento ………………………. 4. El ejercicio del árbol ………………………..…........... 5. Fortaleciendo el corazón ………………………..…... 6. El ejercicio del hígado ………………………..…........ 7. La postura del oso ………………………..…............... 8. La meditación del tercer ojo ……………………….. 9. Los ejercicios de las glándulas ……………………… 10. El ejercicio del águila ………………………..….......... Epílogo ……….………………………………………..…..………… Glosario …………………………………………..……….……..…..
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Agradecimientos Mi más profunda gratitud a Christian Ghasarian por su tiempo y su trabajo, que ha sido vital para transformar mi manuscrito en este libro. Además, me gustaría dar las gracias a Muriel de Sydney, a Maery y a Venetia de “Morning-swood”, y al resto de personas que me ayudaron a encajar las piezas de este puzle; a quienes me ayudaron a llevar este ancestral conocimiento hasta el mundo moderno, para vuestro disfrute. Por supuesto, nada de esto hubiera sido posible sin la paciencia y comprensión de mi esposa, Sylvia, y de mis hijos, Sai, Shara y Tavi.
Prefacio
En esta extraña época de cambio en la que vivimos, la clave de la autoconciencia puede perderse entre los muchos mensajes, pasiones y sentimientos contradictorios a los que nos enfrentamos diariamente, y que a menudo nos provocan estrés, enfermedades, e infelicidad. Me he dado cuenta de que estos conflictos, que yo también he experimentado, se deben a que la cultura occidental no respecta el proceso interno que yo llamo curación. Este libro versa sobre ese proceso. Espero que este libro abra tu corazón, y te descubra el mundo que ha sido siempre valorado por las culturas chamánicas ancestrales. Además, espero que este libro te brinde herramientas eficaces y la sabiduría necesaria para alcanzar la felicidad. Gracias por recuperar tu conexión perdida con el universo.
Introducción
Durante mi infancia sufrí una enfermedad sanguínea similar a la anemia. Era un niño débil, y también lo era mi sistema inmunitario. Quizá fue esto lo que me permitió ver el interior de las cosas, de un modo inusual para un niño occidental de mi edad. En las culturas indígenas, estas enfermedades son consideradas, a menudo, como el inicio del profundo proceso que ha de guiar a la iniciación. Un día, un poderoso sueño me reveló que no es el mundo externo lo que nos sostiene, sino una profunda fuerza que viene desde el interior. En este sueño, vi una silla hecha de oro sobre la cima de una hermosa colina. Alguien, una de las personas con las que estaba trabajando, me preguntó si la silla era mía. Respondí negativamente, y me preguntó: «¿Por qué no te sientas en la silla?». Y lo hice. Entonces comencé a llorar. En aquel momento, todo mi ser comprendió que la vida nos nutre constantemente, y que el mundo nos pertenece. A través de este sueño, mi visión del mundo cambió, irrevocablemente y para siempre, y esto me preparó para ciertos sucesos futuros que en aquella época ignoraba que habría de vivir.
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La Sabiduría del Chamán
En mi adolescencia, sufrí un conflicto interno mientras me esforzaba por convertirme en “normal”, y adaptarme a lo que me parecía que era adecuado en el mundo occidental en el que vivía. A pesar de este esfuerzo, sentía que una parte de mí no quería ser obligada a tomar un camino que no era el suyo. Los médicos y los psicólogos no me ayudaron. Comencé a desarrollar cierto interés por la filosofía y la religión, y descubrí el budismo, en el que encontré un modo de nutrir mi corazón. Aprendí a meditar a los quince años y, más tarde, entré en un monasterio budista zen que estaba situado en la cima de una hermosa montaña californiana, cerca de San Bernardino, donde el aire era puro y la comida saludable. Me hice vegetariano, y no volví a enfermar nunca más. Esta experiencia me permitió descubrir que mis antiguos conflictos surgieron, sencillamente, debido la ignorancia de la cultura occidental sobre los procesos internos de sanación y desarrollo espiritual. Sin embargo, dos años más tarde, el budismo comenzó a parecerme demasiado fácil. A pesar de que el régimen era extremadamente severo (la meditación comenzaba a las tres de la mañana, y a menudo el día no terminaba hasta casi la medianoche), y de que durante los seis primeros meses sentarme en la postura del Loto era, para mí, una completa agonía. Me sentía bien en el monasterio, pero mi voz interior me decía que debía practicar la armonía que había encontrado en mí, en el mundo exterior. Y así fue como dejé el monasterio para marcharme a Nueva York, y después a Londres. El choque fue enorme. El budismo no me había dado una visión completa de las cosas. El mundo exterior estaba (y aun lo está) muy enfermo. Es fácil ver la belleza de las cosas cuando vives en un
Introducción
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lugar hermoso, pero es totalmente distinto cuando te encuentras en medio de la dureza y el caos de una ciudad como Nueva York. La armoniosa vida en el monasterio me había proporcionado paz interior. En aquellas “junglas de asfalto” me sentía incompleto y, como siempre había sentido un profundo amor por el mar y sus criaturas, me mudé a Australia para estudiar biología marina. Después de un año en la universidad, sentí la necesidad de llevar la teoría a la práctica. Me sentía atraído por “salvar” la selva tropical amazónica, y ayudar de un modo u otro a prevenir su destrucción. Escribí a una organización de protección medioambiental que estaba ubicada en Brasil. Seis meses después, recibí una carta procedente del norte de la Amazonia, cerca de Perú y Bolivia, invitándome a trabajar en una pequeña organización que se ocupaba de parte de la selva, que estaba siendo rápidamente destruida. Entonces abandoné Australia, con la intención de trabajar por la salvaguarda de la selva amazónica. Un poco después, en una aldea poblada por los famosos chamanes ayahuasqueros (chamanes que trabajan con una planta curativa del Amazonas llamada ayahuasca), pasé por una profunda experiencia de transformación. Poco a poco, descubrí que estos chamanes me habían llamado hasta allí, y que las distintas experiencias que había compartido con ellos se debían a su propósito de que llevara su conocimiento al exterior, y lo compartiera con el resto del mundo, concretamente con el mundo occidental.
Desde la selva tropical a los Andes
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i primera experiencia intensa en el Amazonas, en esta dimensión, y en otra dimensión de conciencia totalmente extraordinaria, tuvo lugar un par de días después de mi llegada. Estaba en una canoa que iba río abajo. Había mucha gente mirándome, y yo tenía muchas cosas en la cabeza. El tiempo parecía haberse detenido. Llovía muchísimo. Los sonidos de la naturaleza estaban por todas partes. Me sentía lleno de miedos y dudas. Antes de mi llegada, había pensado que estaba bien preparado para la selva tropical. Había pasado seis meses mejorando mi forma física en el gimnasio. Me había sumergido en el aprendizaje de la lengua española con la ayuda de libros y de cintas de audio. Había comprado un machete, una hamaca y una brújula pero, oh, los mosquitos me picaban constantemente. Nuestra canoa había sido un árbol un poco antes y, para evitar hundirnos, teníamos que sacar el agua continuamente. Cada vez que golpeábamos una roca o un