Que el camino budista al despertar siga existiendo en su totalidad en el mundo depende exclusivamente de que haya seres que no solo cuenten con una comprensión intelectual de las enseñanzas, sino que también hayan generado los logros del camino en su continuo mental, esto es, que lo hayan integrado en su ser. Así son los maestros del linaje, a los cuales invocamos al realizar la práctica que tenemos entre manos: empezando por Buda Shakyamuni mismo, invocamos también a los maestros del linaje del camino gradual, que extendemos hasta incluir los maestros del presente que nos hayan mostrado el camino. Al realizar la práctica, les rendimos homenaje, les hacemos ofrecimientos y les pedimos, a cada uno de ellos, que inspiren nuestro continuo mental con los mismos logros que ellos mismos generaron, peticiones que, realizadas sinceramente, nos ayudan a madurar la mente para que recibamos las bendiciones completas del linaje y generemos lo más rápidamente posible los logros necesarios