REVISTA DE POESÍA
EDICIONES O
BISTRÓ
POEMAS DE SEBASTIÁN DÍAZ BARRIGA Y BETH GUZMÁN
RECOMENDACIONES PARA LOS CERTÁMENES LITERARIOS FER DE LA CRUZ CELEBRACIÓN DE LA FIESTA: SOBRE PARTY ANIMALS, DE SERGIO PÉREZ TORRES
1
XVIII
Bistró. Revista bimestral de poesía. No. 18, Jun-Jul 2018. Es un proyecto editado en Mérida, Yucatán, México. Director: Daniel Medina / Edición: Ediciones O / Consejo editorial: Mary Carrillo, Fernando Sierra, Laura Espejo, David Bonilla / Artes Visuales: Mariana Pacho de la Vega
CONTENIDO Poesía CANASTA DE FRUTAS Beth Guzmán // p.5 GUANTES DE LÁTEX Sebastián Díaz Barriga // p.8 Ensayo RECOMENDACIONES PARA LOS CERTÁMENES LITERARIOS
Fer de la Cruz // p.10 Reseña CELEBRACIÓN DE LA FIESTA: SOBRE PARTY ANIMALS DE SERGIO PÉREZ TORRES // p. 20 Obra visual Alfonso Carrillo
2
PRESENTACIÓN Como cada dos meses, queridos amigos, les traemos un nuevo número de Bistró bajo la misma apuesta editorial: la brevedad y la unión de la experiencia con las nuevas voces. Estamos inciando proyectos nuevos tras tres años como proyecto de divulgación literaria; nuevas personas se van agregando tanto al equipo de trabajo como a la excelente familia de colaboradores que número con número nos brindan el lujo de su compañía. En esta ocasión, traemos nuestro número 18 cuya portada corresponde a Alfonso Carrillo, alumno de Artes Visuales de la Escuela Superior de Artes de Yucatán. En lo correspondiente a la poesía, traemos dos poemas: Canasta de frutas, y Guantes de látex, escritos por Beth Guzmán y Sabastián Díaz Barriga respectivamente. Textos que reflejan realidades y rupturas, alientos desgarrados con un alto nivel poético. Del mismo modo, y siendo uno de los temas más recurrentes en México, traemos un texto sobre los certámenes literarios, los tan cuestionados Premios que en nuestro país dan siempre decisión dividida. Fernando de la Cruz trae a colación el tema explorando no sólo una polémica reciente sino dando en el clavo con ciertas recomendaciones a los cuerpos gubernamentales o privados que organizan estos certámenes. Un texto imperdible.
Finalmente, y con nuestra intención de aportes a la crítica, inauguramos nuestro Reseñario: un espacio en el que nuestros colaboradores y equipo editorial comentarán libros de poesía publicados recientemente en México. Para abrir la sección, nuestro equipo trae una interesante reseña sobre Party Animals, libro reciente de Sergio Pérez Torres. Nos vemos, como cada dos meses, entre letras como estas.
3
Poesía Beth Guzmán Sebastián Díaz Barriga
4
Poesía
Canasta de frutas BETH GUZMÁN ■ A mi madre, que aún me quita vidrios de los pies. A Joss, que me mostró un espejo. I Hoy me desperté con una gran canasta de frutas en las manos. Las frutas relampaguean en el fondo quejándose del estado de su recipiente. Y yo las amo como amo la canasta. La arreglo. La pinto. Le coso listones de colores que tienen nombre propio. La lleno de mí misma. La canasta me da nombre y Yo Soy Todas, La mujer. Y yo las amo como me amo. 5
Mi jardín se volvió amarillo de tanto llorar, así descubrí que es mi color favorito. Dejé de comerme los girasoles para plantármelos en las manos. II Me voy caminando. (¿Quién quiere darle gusto a Girondo?) Llevo por delante, orgullosa, en la cabeza, mi canasta de frutas. La voy luciendo porque es inagotable. Porque es bella y me ha costado tanto tenerla. Las frutas ermitañas que llevo encima comienzan pero no terminan. Caminaré hasta el mercado. No habrá otra canasta como la mía. La verás y tomarás con tus manos hasta el último resquicio de color. Mi olor de quimera frutal irá contigo. Mi sabor hortelano y terroso será en tu papilas. Mi canasta se fundirá en tus huesos 6
y no habrá más sequía. III Sigo caminando.
______________ Beth Guzmán (1995) es mitad tepatitlense y mitad tapatía. Actualmente es pasante de la licenciatura en Letras Hispánicas por la Universidad de Guadalajara. Poeta, promotora de la lectura, docente, traductora del portugués, y todo lo que se encuentre en el camino. Tiene publicaciones en revistas literarias como Ahuehuete, Engarce, Ágora 127 y Luvina. Ganó el VII Concurso Literario Luvina Joven 2017 en la sección de Poesía Luvinaria. 7
Poesía
Guantes de látex SEBASTIÁN DÍAZ BARRIGA ■ Mi papá usaba guantes de látex Pero no planchaba su ropa. Rasuraba su cabeza dos veces por día. Confeccionaba una nueva cabellera cada agosto. Salía en motocicleta, La mostraba en los barrios, En los bares, En los clubes, Con las prostitutas. [Compraba 20 gramos, Aspiraba los 20 gramos.] Le sangraba la nariz y reía, lloraba, se orinaba, sobre sí mismo, y de nuevo reía (sobre sí mismo). Mi papá usaba guantes de látex, Pero nunca se vistió de marinero. Fumaba mucho, Pero nunca se inyectó. Mi papá olía a amapola recién horneada. 8
Lavaba sus calcetas a mano, Se ponía camisa y corbata, y salía a lucir su cabellera recién confeccionada. Mi papá usaba guantes de látex, Mi papá nunca tuvo unos guantes de látex.
______________ Sebastián Díaz Barriga (1998): En el ámbito cinematográfico ha sido seleccionado en festivales de cine nacionales e internacionales. Actualmente cursa la Licenciatura en Pedagogía por parte de la UNAM en la Facultad de Filosofía y Letras. 9
Ensayo
Recomendaciones para los certámenes literarios FER DE LA CRUZ ■ Un poeta ha ganado cantidad de premios literarios. Años atrás ya se le había descalificado de alguno de ellos, de manera no oficial, cuando un jurado perspicaz notó la misma dedicatoria (a su esposa e hijo o hijos, con todo y nombres) en más de uno de los poemarios participantes, en flagrante violación de las bases, según me fue revelado en declaración anónima de primera mano. El año pasado, a dicho poeta le revocaron un premio que había ganado en Palenque tras descubrirse que acababa de ganar otro premio en Ciudad del Carmen con el mismo trabajo, en idéntica violación de las bases. Este poeta, nacido en Champotón, Campeche, no tuvo reparo en volver a participar en la nueva edición del mismísimo premio de Ciudad del Carmen, los LX Juegos Florales, con el ilegal envío de siete trabajos firmados con sendos seudónimos. Entrando en los territorios de la especulación, en sus ansias de ganar por las buenas o por las malas, este poeta, de nombre José Landa, envió poemarios que apelaran a diferentes preferencias estéticas posibles del jurado calificador, aumentando muchísimo la posibilidad de resultar victorioso. En los hechos, prácticamente el veinte por ciento de los 38 trabajos valorados por el jurado eran libros suyos. La prensa campechana ya registra que, tras abrirse las plicas, los organizadores descubrieron la violación a la primera de las bases que textualmente limita la participación a “un libro de poemas”. Hace unos días, un poeta yucateco recibió la llamada de los organizadores de los LIX Juegos Florales de Ciudad del Carmen anunciándole que, de acuerdo con el laudo, el jurado calificador le otorgaba una Mención de Honor. Este poeta yucateco —nacido en los 10
ochentas, me limitaré a revelar— rechazó dicha mención tras escuchar que el ganador había sido el ya célebre Landa. Sabiamente, el yucateco buscó evitar que su nombre se asociara al de Landa cuya fama es precisamente de tramposo, como queda sobradamente evidenciado; digamos que “por higiene”, como al respecto señala el maestro Manuel Iris. Tras la acertada descalificación del Landa, los organizadores debieron haberle otorgado el Primer Lugar al poeta yucateco autor de la Mención Honorífica. Sobre este caso, el maestro jalisciense Luis Armenta Malpica —ganador, en años anteriores, de los Juegos Florales de Ciudad del Carmen y jurado veterano en los principales premios de poesía del país— ha expresado en redes sociales lo siguiente: “las menciones honoríficas se conceden a los trabajos finalistas que están casi a la par del libro ganador. Ante la descalificación del ganador, deberían ser consideradas para sustituirlo, si es el caso, únicamente el o los libros que hayan merecido tal distinción”. Desconocedora de estos protocolos, la institución convocante, malamente, optó por seleccionar a otro poeta, cuyo trabajo no constaba en el laudo, para declararlo Primer Lugar y extenderle la Flor Natural y los ochenta mil pesos correspondientes, despojando a un excelente poeta yucateco de la distinción y el monto monetario que legalmente le correspondían. Supongo que se habrá tratado de una decisión política de los organizadores, sintiéndose despechados por el justificado rechazo de la mención y desoyendo el criterio de los miembros del jurado, cuya honorabilidad no pongo en duda. Yo no participé en este concurso. Con esta aclaración busco evitar que se cuestione la imparcialidad de mis palabras. Sin embargo, he participado en otros concursos que han sido ganados por el champotonero y, conociendo sus tácticas, sospecho que en aquellos premios también jugó con los dados cargados y de que nos cometió
11
fraude tanto a mí como a la totalidad de los escritores participantes, así como a los organizadores. En el espíritu de combate a la corrupción que se espera que impere en las administraciones entrantes a nivel nacional, y para evitar participaciones y premiaciones fraudulentas, a continuación planteo las siguientes RECOMENDACIONES PARA LOS ORGANIZADORES DE CERTÁMENES LITERARIOS: Sobre las bases generales. 1. Que las bases especifiquen, de manera clara e inequívoca, que cada participante podrá enviar un solo trabajo; que las obras enviadas no podrán estar participando en otros certámenes; que no podrán participar los ganadores del Primer Lugar de ediciones anteriores, más otras restricciones que se consideren pertinentes para cada premio en particular. 2. Que se faculte al Comité Organizador para que, luego de la entrega del laudo por parte del Jurado Calificador, se cerciore de que ningún autor haya participado con más de un libro, mediante la apertura de plicas en presencia de un notario, en estricta confidencialidad, sin la participación del Jurado Calificador y sin dar a conocer las identidades de los participantes. 3. Que se evite la prohibición de usar epígrafes porque esto inhibe el dialogismo y la intertextualidad, efectivas estrategias disparadoras de discursos poéticos. Para prevenir guiños reveladores de la identidad del participante, que la prohibición se limite a las dedicatorias y alusiones sospechosas. 4. Que se difundan siempre las obras ganadoras, en ediciones impresas o digitales. Este es un derecho del escritor ganador como de toda persona que quiera conocer cualquier trabajo premiado. 12
5. Que se especifique en las bases que se demandará penalmente a los escritores participantes o miembros de jurados calificadores a quienes se les compruebe fraude. Sobre los miembros del jurado calificador. 1. Que sean foráneos de la región que abarca el certamen, para disminuir al máximo la posibilidad ya sea de favoritismos o de que, de manera honesta y casual, resulte ganador algún conocido de un miembro del jurado. Si la convocatoria es escolar, que los jurados sean estatales o municipales; si es estatal o municipal, que sean de otro estado no contiguo; si es regional, que sean de otra zona del país, y así sucesivamente. 2. De ser posible, que además de ser escritores con experiencia y oficio en el género literario que corresponda, sean académicos en literatura. Esto amplía el conocimiento de las formas válidas de literatura en todos sus géneros y subgéneros, a lo largo de las vastísimas tradiciones y posibilidades experimentales, y reduce el influjo de los dogmas reduccionistas prevalentes entre algunos connotados maestros de los talleres literarios del país que carecen de bagaje académico en literatura. 3. Que sean profesionales. Contrario a la concepción popular del escritor, y del artista en general, como un ser de talento innato, radiante de sensibilidad, sobre quien no se aplican los convencionalismos mundanos de probidad ética, y a quien se le pasan por alto impuntualidad, neurosis, alcoholismo, servilismo político, etc., es perfectamente válido exigir profesionalismo de cualquier escritor, en términos de cumplimiento y rigor argumentativo, en tiempo y forma, del quehacer literario que se le encomiende. 4. Que en todo caso se les ofrezca a los jurados un emolumento proporcional al trabajo requerido, según la exigencia y magnitud de la convocatoria. Que las instituciones convocantes contemplen en su 13
presupuesto, no solo los fondos para el premio monetario y el transporte, hospedaje y alimentación de los autores premiados —y de los bocadillos, brindis de honor, música y flores de la ceremonia—, sino también el pago puntual y sin contratiempos burocráticos de los honorarios de los jurados, y que este pago se haga efectivo a más tardar el día de la premiación. Por esta misma razón, que a los jurados se les exijan argumentos específicos y concretos —en vez de declaraciones genéricas— para defender a sus propuestas de obras finalistas por sobre los demás trabajos participantes. 5. Evitar que el ganador de un premio automáticamente se convierta en jurado de la edición siguiente, por el simple mérito de haber ganado. Sobre tiempos y plazos. 1. Que la institución convocante revise las bases cuidadosamente y que las publique, en papel y en medios electrónicos, con suficiente tiempo para su difusión (sugiero un mes), y para la recepción de trabajos (sugiero otro mes), y para que los miembros del Jurado Calificador puedan leer cada trabajo desde sus casas así como discutir por correo electrónico, dictaminar y firmar el laudo por ese mismo medio (sugiero otro mes), más dos semanas como mínimo para la notificación a quien resulte ganador (quien requerirá de este tiempo para planear el viaje a la ceremonia de premiación); o bien, en su caso, para resolver situaciones como imputaciones o descalificación de trabajos. De este modo, un jurado compuesto por escritores profesionales no requerirá prórroga. La idea de reunir a los miembros de un jurado para que en un día lean cuarenta, ochenta o doscientos trabajos es absurda, y resulta humanamente imposible que la designación de primer lugar sea certera en dichas condiciones. Además, un premio no debe planearse de la noche a la mañana. Los organizadores tienen un año entero para organizar la siguiente edición de sus concursos. Que no actúen como
14
colegiales procrastinadores que hacen la tarea de última hora, ya que el profesionalismo también se espera de ellos. 2. Anunciar el nombre del escritor ganador inmediatamente después de emitido el fallo, a través de medios electrónicos, con el mismo ahínco con el que se publicitó la convocatoria, y anunciar también, entre otros datos relevantes, los nombres de los jurados. Hay que considerar que sólo entonces los participantes que no resultaron ganadores quedarán libres de mandar sus trabajos a otros concursos. Sobre certámenes específicos en Yucatán. 1. En el caso del Premio Nacional de Poesía Experimental “Raúl Renán”, que la administración estatal entrante lo reactive como merecido tributo al maestro —junto con los demás premios de la extinta bienal—, y que sus jurados sean, además de los puntos arriba señalados, realmente conocedores de las vastísimas posibilidades de experimentación poética. 2. En el caso del Premio Internacional de Poesía “Ciudad de Mérida”, que la administración entrante lo reactive. Que se permita la entrega de trabajos por e-mail, en Word o PDF, ya que sólo así se posibilitará la participación de poetas merideños (de Mérida, Venezuela) y se facilitará la participación, igualmente importante, de poetas emeritenses (de Mérida, España). Que se acepten trabajos ya sea en tamaño carta o en A4, común en España. Que eliminen la ridícula exigencia de un mínimo de 10 versos por cuartilla; mejor que se exija un número total de versos en la totalidad del libro, como se estila en España, en lugar de pedir número de cuartillas. Antes de insistir en el requerimiento de una carta de vecindad, que se aseguren de que dicho documento sea fácilmente accesible en Venezuela. 3. En el caso de los Juegos Florales de Progreso, que la administración municipal entrante los reactive, sobre todo ahora que existe ese vacío de premios estatales entre los certámenes literarios de 15
Yucatán, ya que los premios que eran estatales han pasado a ser regionales o nacionales o han desaparecido. 4. En el caso de los Juegos Literarios Nacionales Universitarios de la Universidad Autónoma de Yucatán: Fueron excelentes las medidas asumidas en la edición pasada en tiempos, en formas de prevención de fraude y en la elección de jurados que procesaran la gran cantidad de trabajos recibidos. Sigan así. 5. En el caso del Premio Regional de Poesía “José Díaz Bolio”, su convocatoria sobresale por la facilidad brindada a los poetas participantes, al recibirse los trabajos por e-mail, y también a los miembros del jurado calificador por concederles suficiente tiempo para deliberar. Sigan así. 6. Sobre los concursos de poesía y cuento en las escuelas primarias, secundarias y preparatorias públicas y privadas: Que los directores proyecten la creación permanente de talleres literarios antes de pensar en concursos. En otras palabras, como buenos pedagogos, que piensen en procesos antes que resultados.
Anticipo que habrá escritores del país que estarán en desacuerdo con algunas de mis apreciaciones o con la totalidad de ellas, sobre todo cuando tengan cola que les pisen o se conciban como vacas sagradas acostumbradas a la reverencia personal y a la descalificación de quienes no los reverencien, o bien, porque consideren que sólo los practicantes de una determinada estética o los creyentes en una determinada ideología —o sus imitadores y cortesanos— tendrán la posibilidad de llegar a recibir algún mérito. Me tiene sin cuidado y celebro el derecho de disentir. Aquí apelo a la buena voluntad de las y los funcionarios de Cultura que lleguen a tener a su cargo la organización de algún certamen literario. Que cada quien tome lo que le sirva de estas recomendaciones 16
y las adapte a sus necesidades, limitaciones y alcances específicos con criterios éticos y literarios por igual.
______________ Fer de la Cruz, M.A. Poeta yucateco nacido en Monterrey, Nuevo León, México, en 1971. Tras graduarse del Máster en Español por Ohio University, fue profesor fundador de la Escuela de Creación Literaria del Centro Estatal de Bellas Artes, en Mérida, Yucatán, donde laboró por cuatro años. También impartió dos semestres del Seminario de Escritura Creativa en la Universidad de Quintana Roo. Actualmente coordina el plantel Centro Histórico del Centro de Idiomas del Sureste. Es autor de varios títulos de poesía y ha recibido dos premios nacionales, dos regionales y dos estatales. En sus libros, publicados e inéditos, transita del poema lírico al narrativo, de la tradición a la ruptura, del amor a la sátira (mejor reír que llorar) y viceversa. 17
18
CelebraciĂłn de la fiesta: Party Animals, de de Sergio PĂŠrez Torres
19
Reseña Party Animals Sergio Pérez Torres CONARTE Monterrey, 2017 104 p.p.
Premio Nacional de Poesía Carmen Alardín 2017 DANIEL MEDINA ■
La poesía de Sergio Pérez Torres, ya materializada en diversos libros, se caracteriza por el protagonismo de la imagen y la brevedad que se construye en capítulos poéticos, es decir, que una de las grandes virtudes de su obra es este sello personal completamente independiente del registro. Obras como Los nombres del insomnio o Cortejo fúnebre lo comprueban. Así, en esta creciente lista de publicaciones, Sergio trae para los lectores Party Animals, libro ganador del Premio Nacional de Poesía Carmen Alardín 2017, poemario que renueva sus votos con la brevedad y la imagen y añade, a la manera de la poesía reciente, una línea conceptual que página tras página va alimentando y desenvolviendo, en este caso, la experiencia dionisiaca de la celebración. El libro se compone por una serie de poemas o registros de bitácora (in)titulados con horas o momentos de la fiesta: esta comprende de las 10 p.m. hasta las 7 a.m. Del mismo modo, el poeta nos presenta una serie de fotografías –leámoslas como otros poemas cuya naturaleza es visual– que potencian los pasajes escritos. Pensar en la fiesta es pensar en el exceso, en aquello de Dionisio; sin embargo, la propuesta de este libro es ser El Libro de la Fiesta y no analizar comportamientos humanos o estudiar sus mecanismos. La sinceridad, aquí, se presenta en esta especie de diario express que contiene nueve horas de experiencia “nocturna”. La luz, el alcohol, los cuerpos, las miradas y la oscuridad ambientan esta narrativa del exceso. En buena medida, este libro es un tras bambalinas del reventón cotidiano: “Éstas son las sillas y botellas, / éste no es su 20
uso habitual, / las astillas y cristales me quiebran el corazón” (p. 52). La virtud de estos poemas es el cuestionamiento de qué es lo que corre por la cabeza de un sujeto en el momento lúdico. Sergio devela, desde un sujeto lírico, los trances iniciáticos del alcohol durante la velada, posteriormente la progresiva absorción hacia el ambiente festivo y el amor desenfrenado y, sin embargo, parcialmente imposible: “Estoy resignándome / como el ciego ama al sol por su calor / y no por lo que le han dicho de su luz” (p. 73). Otro de los elementos fundamentales que toma presencia parcial y, líneas después, total control, es el erotismo: “jugamos a deshacer el silencio con las manos” (p. 70); en otros versos, dice: “En este cuarto oscuro / él lee mi cuerpo en voz alta” (p. 72). La narrativa poética nos presenta un sujeto amoroso en el recorrido celebratorio. Los poemas, entonces, se convierten en espasmos verbales, en cuerpos desnudos cuyo fin es el amanecer y la muerte. Vale la pena, aquí, recordar estas líneas brillantes de Octavio Paz presentes en La llama doble: amor y erotismo: “La muerte es inseparable del placer; Thanatos es la sombra de Eros. La sexualidad es la respuesta a la muerte: las células se unen para formar otra célula y así perpetuarse. Desviado de la reproducción, el erotismo crea un dominio aparte del regido por una deidad doble: el placer que es muerte”. Precisamente la conclusión de la fiesta es la celebración del Thanatos: “La muerte se alimenta de cosas como este adiós” (p. 80). Party Animals es, sin más, una celebración del placer y el dolor oculto tras las máscaras. Sergio Pérez Torres vierte aquí la experiencia de la vida nocturna vista desde ángulos oscuros y no convencionales. El poeta sólo narra en el verso y, justo en el fondo de las cosas, van develándose las heridas y los encuentros, todos los adioses.
21
Edicionesomx.blogspot.com Facebook.com/Edicionesomx Issuu.com/EdicionesO
22