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LA BANDA MUNICIPAL DE MÚSICA DE HARO EN MI RECUERDO Por Ricardo López de Heredia Suso Ex-Componente de la Banda de Música de Haro y Ex-Subdirector de la Banda de Música de Miranda
U
n gran amigo mío, jarrero como yo, me dice que le gustaría que escribiera algo sobre mis recuerdos de la Banda Municipal de Música de Haro durante los primeros años como componente de la misma. Estrujando la memoria, paso a satisfacer en lo posible sus deseos.
Yo le contesté que encantado y a los dos días comencé a dar clases diariamente con él. Por lo que puedo decir, sin faltar a la verdad, que todo lo que he desarrollado con el oboe durante 12 años en la Banda de Haro y 52 en la de Miranda de Ebro, se lo debo única y exclusivamente a D. Miguel de la Fuente Álvarez.
llegando en ocasiones a ensayar todos los días de la semana: lunes y jueves, madera; martes y viernes, metal y percusión; y miércoles y sábados todos. En uno de estos ensayos se estaba preparando la obertura Oberón de C. M. Weber, que comienza con un solo de trompa, instrumento que entonces tocaba José Pérez Uriarte, popularmente conocido como Montoya. Empieza el ensayo y el Director corta y le hace unas observaciones a Montoya y éste le responde: • D. Miguel, que anoche se lo oí tocar a Morales en la radio y lo hacía así (Morales era el solista de trompa de la Orquesta Nacional de España, O.N.E.) • Mire, le contesta D. Miguel, Morales es Morales y Montoya es Montoya, y Morales lo toca como Morales y Montoya lo tiene que tocar como Montoya.
a gran Banda de Música de la década L de los años 40 y comienzos de los 50. Empezaré diciendo que mi gran afición a la música nació conmigo el día 15 de abril de 1936 en la calle Conde de Haro nº 18. O también puede ser genética, puesto que mi abuelo materno Ricardo Suso, al que no llegué a conocer, según referencias fue músico durante las dos últimas décadas del siglo XIX y los once primeros años del XX, llegando a fundar la Banda de Música denominada Santa Cecilia.
Haro Capital del Rioja
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Llevado de esta afición, al cumplir los nueve años, que era la edad que entonces se exigía para estudiar música, ingresé en la Academia Municipal de Música donde me fueron impartidos los conocimientos de Teoría y Solfeo por el Director D. Miguel de la Fuente y el Subdirector José María Bacigalupe, cariñosamente conocido como el Tío Mari. Estando a la espera de que me fuera asignado un instrumento, el día 12 de octubre de 1948 después de escuchar el concierto en la Plaza de la Paz, subía por el Taranco en dirección a mi casa cuando D. Miguel, que venía por detrás, me llama y me dice: • Pequeño, ¿te gustaría tocar el oboe?
Esta contestación siempre la he tenido muy en cuenta pues, efectivamente, cada uno debe de tener su personalidad propia e interpretar la música como la siente sin tratar de imitar a nadie por muy profesional que sea. icardo López de Heredia, con la Banda R de Miranda. Ya en febrero de 1950 me dijo que empezara a ensayar con la Banda, y el día 25 de junio, festividad de San Felices, ingresé como componente de la misma. La Banda contaba entonces con alrededor de 35 miembros, algunos de los cuales eran muy buenos músicos. Por aquel tiempo, y desde varios años atrás, desde noviembre hasta marzo se ofrecía un concierto mensual en el Teatro Bretón de los Herreros patrocinado y organizado por la Asociación cultural denominada Agrupación Recreativa Pro Arte, A.R.P.A. En estos conciertos se interpretaban obras de cierta dificultad lo que nos obligaba a tener ensayos extraordinarios
Poco pude disfrutar de estos conciertos de invierno, ya que en el año 1952 dejaron de realizarse por motivos que ignoro. Por aquellos años se interpretaban conciertos al aire libre todos los domingos y días festivos desde el Domingo de Pascua de Resurrección hasta el último domingo de octubre además de los días de Navidad, Año Nuevo, Reyes y San José, estos cuatro últimos en la Plaza de la Paz. Esto obligaba a que tuviéramos un repertorio muy extenso y muy bien preparado. Los ensayos se verificaban los martes y los viernes y si algún festivo coincidía con esos días de la semana se tocaba sin ensayar. Recuerdo un día 15 de agosto que me dirigía al concierto a la Vega y en las inmediaciones del kiosco estaba D. Miguel con un grupo de veraneantes. Al llegar a su altura me dice:
Fiestas de San Juan, San Felices y San Pedro • Del 24 al 29 de Junio de 2017