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Alabado sea Jesús Sacramentado

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del Valle

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Corría el mes de mayo de 1997 cuando un grupo de hermanos concluía el proyecto de reglas para la Archicofradía Sacramental de Osuna. Desde entonces, ¡más de veinte años ya!, han sido innumerables las modificaciones de reglas, cuantiosas las reuniones en el Arzobispado de Sevilla, varios párrocos y no pocas trabas las que hemos tenido que solventar los hermanos de la cofradía del Santísimo para, al menos, ver presentadas las nuevas reglas en Palacio.

Nuestro caso no ha sido una refundación de la hermandad, como el de alguna cofradía hermana de Osuna, sino que ha consistido en la recuperación de unas reglas perdidas. La Sacramental y sus hermanos nunca han cesado en su actividad, nunca han dejado de festejar y procesionar el Corpus Christi y, lo más importante, nunca han cesado de rendir culto al Santísimo Sacramento.

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En el año 2008 varios hermanos de la Archicofradía, al frente de los cuales se puso Diego Campo Moreno, tomamos el relevo con el firme propósito de demostrar documentalmente la vida de la cofradía en los últimos cinco siglos, ya que sin estas pruebas se nos “invitaba” a perder la antigüedad y los enseres propios para aprobarnos las reglas.

En Osuna tenemos constancia documental de la celebración de la fiesta del Corpus Christi desde el año 1525 y desde entonces no deja de haber referenciasen las actas capitulares del archivo municipal, durante los siglos XVI, XVII y XVIII; dejando patente la creciente devoción hacía Jesús Sacramentado. El Concilio de Trento (1545-1564) dedicó gran parte de sus sesiones y decretos al estudio de los siete Sacramentos, tratando de infundir en la Iglesia una piedad sacramental. Toda esta doctrina tuvo, sin lugar a dudas, múltiples efectos sobre las Cofradías, inculcando en los cofrades la práctica sacramental; pero, especialmente, su influencia estuvo en el desarrollo de las Cofradías del Santísimo Sacramento. Fecha importante en el devenir histórico de la Cofradía del Santísimo es el 12 de junio de 1606, en la que el Papa Paulo V concede la Bula de Constitución Canónica “en la Iglesia Colegial de la Villa de Osuna Diócesis de Sevilla, una piadosa y devota cofradía de fieles cristianos así hombres como mujeres, en el altar del Stmo. Cuerpo de Cristo”. También por especial Bula del Santo Padre Paulo V, expedida en Roma el 8 de agosto de 1606, la Sacramental de Osuna está agregada a la Iglesia del Señor Santiago de los Españoles de Roma concediéndole las mismas facultades y privilegios que goza la Archicofradía de la Santa Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. A modo de anécdota decir que la bandera que actualmente representa la Archicofradía luce los colores de la bandera pontificia del papa Paulo V.

Pero el problema al que nos enfrentábamos no era certificar la antigüedad de la Archicofradía ni su devenir histórico por los siglos pasados, ya que esto quedaba sobradamente probado con la infinidad de documentos que consideran a la Sacramental de Osuna como una de las más señeras entre las hermandades de la localidad, sino demostrar su vida a lo largo del siglo XX. Esta tarea aunque en apariencias más factible que la que la de siglos pasados se nos antojaba más hosca por lo inaccesible.

Don Desiderio Salas, párroco de la Asunción desde 1957, por palabras de don Manuel Sánchez de Heredia su sucesor al frente de la parroquia, dijo que sobre la Sacramental no existía documentación alguna salvo algunos “papelitos sueltos” y que en uno de ellos, de mediado de los años cincuenta del siglo XX, se hacía referencia a la entrada de la primera hermana en una cofradía de Osuna.

Pocos eran los hilos de los que poder tirar para esclarecer el pasado más reciente, ya que cualquier búsqueda de indicios indefectiblemente nos llevaba a escritos de siglos pasados: ya salía a la luz una bula pontificia del siglo XVII, ya aparecía ingente número de testamentos de los siglos XVIII y XIX con donaciones a la Sacramental. Ora se encontraba un documento de 1746 con censo de hermandades, ora un legajo de 1805 con la confirmación de ser la Hermandad Matriz de alguna de la localidad, unas veces se

encontraban unas reglas del XVIII, otras un pleito de indemnización de sus bienes…; pero pocos datos de lo reclamado desde el Arzobispado de Sevilla para atestiguar la vida de la Sacramental durante el siglo XX.

Fue entonces cuando decidimos realizar una investigación “boca a boca”, preguntando a las personas que nos precedieron y así realizar una “genealogía” de la Cofradía en los últimos tiempos.

Todas las personas inquiridas no hacían otra cosa que constatar la falta de cualquier tipo de documentos (reglas, libro de actas, listados de hermanos, recibos,…) arguyendo que debido a la Guerra Civil toda esta documentación fue guardada en casas particulares no siendo devueltas posteriormente. Poco a poco fueron saliendo datos a la luz.

En el reverso del marco de la bula de Su Santidad, que se conserva en la Colegiata, se lee el siguiente texto: “Esta Bula que dedica el Papa Paulo Ven el año de 1606 a la Archicofradía Sacramental de la Villa de Osuna (Sevilla) ha sido encontrada en el año de la fecha en el archivo de la I.I. Colegial por D. Cristóbal de Torres y Castro Hermano Mayor honorario de dicha Archicofradía y Caballero Maestrante de la Real de Sevilla y costeó este marco disponiendo que se pusiera en la Capilla Sacramental de dicha Iglesia. Osuna y junio de 1930”.

También encontramos un recorte de prensa necrológica en el podíamos leer que don José de Soto y Castro fue hermano mayor de la Archicofradía. Posteriormente fueron Hermanos Mayores don Manuel López de la Puerta, don Juan Peña de la Puerta, don Alberto Martín de la Hinojosa y don José Luis Fernández Pérez.

En otro artículo de “El Defensor. Folleto de información local [Osuna]” de junio de 1950, se hace referencia a la salida de los Hermanos de la Sacramental acompañando a Su Divina Majestad bajo palio desde la Iglesia de la Compañía tras la octava del Corpus Christi.

Del mismo modo, buceando en archivos de casas particulares, localizamos algunos papeles sueltos de los años cincuenta y sesenta del siglo pasado relativos a citaciones de acompañamiento al Santísimo en la visita de impedidos, cobro de cuotas, citación a misa de difuntos de la Archicofradía, … Toda esta nueva documentación, junto a la existente, ha sido compilada en un dossier adjunto a las reglas entregadas en el Arzobispado de Sevilla por nuestro director espiritual y gran impulsor del proceso de aprobación de reglas don Antonio Jesús Rodríguez Báez, para atestiguar la existencia ininterrumpida de la Cofradía del desde inicios del siglo. XVI hasta nuestros días, tiempo en el que el pueblo de Osuna no ha cesado de adorar al Santísimo Sacramento.

Sea por siempre bendito y alabado.

Ostensorio del monasterio de la Encarnación. Obrador trapanés hacia 1660. Bronce sobredorado, coral y esmalte. Expuesto en la exposición O

Francisco Javier de Soto Galván

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