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OPINIÓN

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ANC RUGBY

ANC RUGBY

Rugby y empresa

Aprendizaje a lo largo de la vida

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En los modelos clásicos de aprendizaje, se nos comenzaba a formar cuando somos niños y lo habitual era finalizar esta formación entre los 20 y 30 años, con sus evidentes variantes. A partir de ahí comenzaba nuestra carrera profesional y derivado del modelo de mercado laboral: puestos fijos, en la misma empresa y para toda la vida, estabilidad geográfica, etc… y el concepto formación pasaba a un segundo plano de forma que parecía que nuestra necesidad de aprender había terminado.

Al cambiar el modelo laboral en las empresas donde el mercado ha derivado en un modelo más cambiante, menos “seguro” en la conservación del trabajo, más global, sin límites geográficos y ello nos ha obligado a tener una formación continua a lo largo de toda nuestra vida laboral.

La barrera de los 50 años, donde una persona ya es “demasiado vieja para que la contraten pero demasiado joven para que la jubilen”, tiene que dejar de ser un hándicap para lograr la capacitación profesional multidisciplinar; sin duda, las generaciones actuales tendrán más fácil el acceder a puestos de trabajo diferentes y en diferentes condiciones si mantienen la formación permanente como un estilo de vida. Todo ello sobre la base de ampliar y adquirir las competencias para la vida y el trabajo, la transición digital y el cambio social inclusivo, siendo estos los pilares en EPALE, plataforma electrónica dedicada al aprendizaje de adultos en Europa de la Comisión Europea.

Mismamente, durante este período discontinuado de estado de alarma semi-permanente la necesidad de disponer de competencias digitales básicas y capacitación tecnológica se ha hecho imprescindible: en muchos casos, la pervivencia de una empresa ha pasado por la adaptación tecnológica de los trabajadores de la misma.

Análogamente, en el caso del rugby, siendo la “vida laboral” de un jugador de rugby de un período que podríamos estimar de unos 30 años, de los 5 a los 35 años de edad, la necesidad de ese aprendizaje o esa formación continua se vuelve imprescindible para seguir jugando a un gran nivel hasta el fin de la carrera deportiva.

La pandemia ha mostrado que ha habido que adaptarse. Los equipos se han reinventado y se han seguido formando/ entrenando, en la medida de lo permitido, de forma que se ha conseguido sacar adelante el proyecto. Nuestro caso en el club ha sido muy revelador: gracias al aprendizaje continuo y permanente recibido por los jóvenes de categorías inferiores, El Salvador ha armado equipos robustos, cada vez más sólidos, y muy motivados que a pesar de las muchas incorporaciones provenientes de la cantera. De esto es “culpable” el equipo directivo, el cuerpo técnico, por supuesto, pero también el aprendizaje que los jóvenes han ido atesorando desde las categorías inferiores.

Así vemos que los equipos masculino de división de honor, femenino y Sub-23 han empezado a mostrar el talento formativo y ya estamos en puestos de pelear todos los trofeos en disputa en cada categoría de forma similar a años anteriores donde el talento venía del exterior. Todo un acierto.

Esta experiencia es totalmente trasladable a las empresas y organizaciones dado que la formación deportiva y en valores se transferible al 100% a las organizaciones, aprovechando las cualidades deportivas, de esfuerzo, trabajo en equipo y capacidad de sufrimiento para aumentar el rendimiento en las empresas conservando el bienestar personal de los equipos.

En este sentido, el Club de Rugby El Salvador se ha comprometido con el “aprendizaje a lo largo de la vida” mediante una propuesta de alto valor añadido diseñada por área de Formacion del Club y que consiste en tres programas formativos muy especializados, intensivos y de alta capacitación destinados a empresas, organizaciones y profesionales de todos los ámbitos. Estos son:

Liderazgo para mandos intermedios: la experiencia del rugby trasladada al mundo de la empresa. Toma de decisiones bajo presión: ¿Y si tengo que decidir en el minuto 80? Nuevas formas de trabajo en equipo: Flexibilidad, eficacia y técnicas avanzadas.

En ellos, se aporta el conocimiento y la experiencia de los profesionales del equipo deportivo y gestor para dotar a las empresas de formación y conocimientos asumibles y asimilables en cualquier organización para elevar su rendimiento.

Por último, para no olvidar y recordando a Henry Ford – “Sólo hay algo peor que formar a tus empleados y que se vayan. No formarlos para que se queden”

Ramón Zayas

Director de Innovación del Grupo ASPASIA, Grupo de Consultoría de RRHH y Formación de personas.

¡¡Feliz final de temporada!!

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