El Ágora - Alemania ya es Tetracampeón

nº 7 Julio 2014

Alemania ya es tetracampeón ArgentinA, Sin eL tÍtULO Y MeSSi, FUerA DeL OLiMPO A HOLAnDA nO Le BAStÓ rOBBen BrASiL: eL PeOr SCrAtCH De LA HiStOriA

Marco Sotomayor Periodista Gestor del proyecto El Ágora

Luis Urrutia O´Nell (Chomsky) Periodista, académico y escritor de nueve libros sobre el fútbol chileno

Julio Salviat Periodista, escritor y académico de la UNAB

Daniel Pérez Periodista

TAMB I É N

Carlos Pérez Historiador

Rodrigo Ried Periodista

Matías Alcántara Periodista, especializado en deportes y en comunicaciones corporativas

Francisco Coloane Sociólogo y comentarista internacional

E S C RI B E N:

Scarleth Cárdenas Periodista

Diseño y Producción Gráfica, VeoMarket

Ramón Reyes Periodista

E

D

I

T

O

R

I

A

L

M A R C O S O T O M AYO R , D I R E C T O R

El Ágora también sube al podio

P

or estos días, se marcan dos hitos importantes en el deporte: Alemania acaba de conseguir el tetracampeonato mundial en Brasil 2014, y El Ágora entró en una etapa de crecimiento y de consolidación definitivas.

Sé que la comparación parece desproporcionada, pero es una pequeña licencia que nos otorgamos en un momento tan especial de este emprendimiento: a partir de esta semana, nuestra revista estará a disposición de todo público a través de la página www.elagora.net La apertura de lo que hemos definido como un espacio de información y debate acerca de esta actividad nacional e internacional, no sólo captará la atención de un gran número de lectores, sino que le permitirá a los usuarios entregar su opinión en torno de diversas contingencias. Cumpliremos, entonces, con la segunda etapa del proyecto: generar un fluido y constante intercambio de ideas y de opiniones sobre la realidad deportiva.

Así, recrearemos el espíritu que reinaba en las antigua polis griegas, donde la plaza pública (el ágora) servía para decidir aspectos importantes para toda la comunidad.

Pero volvamos al siglo XXI. Para am-

pliar la base de lectores y de amigos de la revista, las redes sociales son actores importantes. Ya estamos instalados en cada una de esas plataformas y, desde allí, interactuaremos sostenidamente con ustedes: preguntas, noticias, trivias, concursos, informaciones varias... El flujo será constante.

Y, como semana a semana les ofrecemos buenos contenidos y agradables sorpresas, en esta ocasión podrán leer a nuestra nueva columnista: Scarleth Cárdenas, colega de Televisión Nacional y de radio Bío Bío, una enamorada del fútbol. Nuestro equipo ya cuenta con presencia femenina (las periodistas Lorena Pedreros y Paula Salas, a cargo de la web y de las redes sociales, respectivamente), así que con la incorporación de Scarleth se está conformando la rama femenina de El Ágora. El ejercicio de inclusión, obviamente, comienza en casa...

En el presente número, además, verán un último vistazo a la Copa del Mundo: las grandezas y las pobrezas que dejó un torneo que estuvo a la altura de las expectativas. A partir del próximo martes, le hincaremos el diente al fútbol nacional, siempre dejando espacio para las otras disciplinas.

Porque en eso, también somos inclusivos.

ANALASIS

Deutschland ist

¡Alemania, campe Por Chomsky Con un gol de Mario Götze en el segundo lapso de la prórroga, la selección germana superó 1-0 a Argentina en el nuevo Maracaná y sumó su cuarto Mundial, después de Suiza 1954, Alemania Federal 1974 e Italia 1990. Es la primera vez que Europa se queda con la Copa en un torneo disputado en América.

4

Weltmeister

eón del mundo!

L

as finales suelen ser duelos tácticos donde los rivales no regalan un centímetro y los nervios se imponen por sobre la belleza del espectáculo. La Copa del Mundo Brasil 2014 no fue la excepción y desde el inicio se vio a Alemania y Argentina con un cuchillo entre los dientes y dispuestos a asestar el golpe apenas tuvieran la ocasión. Cada uno con sus armas, los germanos con énfasis en la posesión del balón para moverlo a ras del césped en forma vertical y diagonal, los transandinos, cerrando los caminos

para proteger su arco con dos líneas de cuatro y de ahí buscar la salida para la aventura en campo ajeno.

La Argentina de Alejandro Sabella arrastraba dos desventajas: un día menos de descanso y el desgaste del tiempo suplementario contra Holanda. A ello se sumaba la ausencia por lesión de Ángel di María. En el calentamiento de Alemania quedó fuera de carrera Sami Khedira. Curiosamente, ambos pertenecen a Real Madrid, otra prueba de la exigencia a que fueron sometidos los jugadores que definieron sus ligas Sigue

5

ANA

Philipp Lahm, el mejor lateral derecho del torneo, deja en el camino a Lucas Biglia.

hasta última hora. Christoph Kramer sustituyó de emergencia a Khedira.

A través de Bastian Schweinsteiger y Toni Kroos, la Alemania de Joachim Löw tocaba más la pelota, lo que obligaba a retroceder a los volantes de contención de Argentina, Lucas Biglia y Javier Mascherano. Mientras, intentaba llegar por las orillas y en la derecha se asociaban Philipp Lahm y Thomas Müller para tomar en superioridad numérica a Marcos Rojo, pese a la colaboración de Enzo Pérez, y desde allí centrar para Miroslav Klose, el máximo goleador de los Mundiales pero en rigor un ex jugador de 36 años. En el medio de la defensa, Martín Demichelis y Ezequiel Garay repetían su labor sin fallas ofrecida ante Suiza, Bélgica y Holanda.

El talón de Aquiles de Alemania se hallaba en su lado izquierdo, porque Benedikt Höwedes es defensa central y tenía que actuar de lateral, y por la frialdad del zurdo Mesut Özil. Ezequiel Lavezzi empezó a trabajar en esa zona y también lo hizo Lionel Messi, quien se llevó en velocidad a Mats Hummels.

La primera oportunidad de gol estuvo en los pies de Gonzalo Higuaín luego de un error mayúsculo de Kroos, quien devolvió de cabeza el balón hacia su campo. Mano a mano con Manuel Neuer, el Pipita le pegó muy mal y desvió (20’). La salida de Kramer (30’), conmocionado tras un choque con el hombro derecho de Garay cinco minutos antes, vino a solucionar los problemas de Löw en la izquierda: ingresó

6

André Schürrle y entonces Özil pasó al medio, donde estuvo más en contacto con la pelota y sin tanto sacrificio para marcar. En el cierre del primer tiempo, se produjo la llegada más peligrosa de Alemania, cuyo dominio carecía de profundidad: Höwedes conectó con golpe de cabeza un tiro de esquina de Kroos y el vertical izquierdo de Sergio Romero evitó

la c E de c obj Me L la i

SAMPAOLI

LISIS

caída de su valla.

En la reanudación, Sabella modificó sus dos líneas cuatro al meter a Sergio Agüero por Lavezzi con el jetivo de que el propio Agüero, con la rotación de essi, tapara la salida de Schweinsteiger.

Luego de un buen pase de Biglia, Messi entró por izquierda a espaldas de Jérôme Boateng y estuvo

Los gritos de Mario Goetze y de Thomas Müller sintetizan el momento más importante de la final.

Alemania se ponía en ventaja en el alargue, gracias a una notable definición del volante ofensivo del Bayern Münich, y mantendría, con propiedad, ese resultado hasta el minuto 120.

Sigue

7

ANA

mano a mano con Neuer, pero su tiro cruzó frente al arco (46’). En otra habilitación desde atrás, ahora de Pablo Zabaleta, Neuer llegó primero que Higuaín al que atropelló aparatosamente tras darle con el puño derecho a la pelota (56’).

Si la primera fracción había pertenecido por puntos a Alemania, la segunda correspondió a Argentina, también por puntos. La llegada más clara fue la de Höwedes, quien quedó solo en el punto penal, pero Garay lo trabó oportunamente (79’).

A partir del tiempo suplementario, Alemania sacó provecho del cansancio de Argentina y volvió a primar Schweinsteiger. Así y todo, la ocasión más nítida fue de Rodrigo Palacio (entró a los 76’ por Higuaín) al bajar con el pecho un trazo largo de Rojo, se le escapó y ante la salida de Neuer intentó levantarle la pelota, pero le dio mal con la tibia derecha (96’).

Tanto va el cántaro a la fuente que al final termina

quebrado. Schürrle subió por la izquierda, desbordó a Mascherano y antes de que interviniera Zabaleta hizo el centro que recogió en el área chica Mario Götze (ingresado a los 87’ por Klose). Entre Demichelis y Garay, Götze brincó, amortiguó con el pecho y de izquierda superó la salida de Romero, que se jugó a su derecha, ¡gol! (113’). Minutos antes, Löw había abrazado y arengado a Götze: “Muéstrale al mundo que eres mejor que Messi y que puedes decidir el partido”.

Ya casi no había tiempo de nada, aunque en el último descuento Messi contase con un tiro libre cerca del área y a la derecha, su mejor perfil. Con todos los hinchas argentinos rezando por el milagro, Messi elevó por mucho.

Si alguien pensaba que en la final Alemania iba a repetir su brillante tarea frente a Brasil, desconoce el fútbol porque era muy difícil que tuviese enfrente un adversario que ofreciese tantas licencias y de tan escasa solidez sicológica como el Scratch.

Alemania quedó a una Copa del Mundo del pentacampeón Brasil. Al reparar en los procesos que han seguido uno y otro, con los germanos imitando el juego histórico de los brasileños y éstos dando la espalda a sus raíces, el futuro apuesta por Alemania.

Messi El zurdo volvió a quedar en deuda en los Mundiales, por mucho que la FIFA le haya dado el premio de consuelo de mejor jugador de la Copa. En la primera fase, cuando Argentina no se armaba, resultó decisivo con sus goles y con el pase de gol a Di María ante

8

La infantil entregar la Rousseff, y el inefab timonel de capitán Ph

LISIS

O P I N I Ó N Por Rodrigo Ried, Editor deportes radio Bío Bío

¿Y si los arcos fueran más grandes?

l disputa por a Copa, entre Dilma presidenta de Brasil, ble Joseph Blatter, e la FIFA. La recibe el hilipp Lahm.

C

Suiza. Más tarde, tuvo que alejarse del área y aunque debió tomar a algún rival, igual alcanzó a asistir a sus atacantes. Pero lejos de la explosión y dribbling del Messi que encandila. Pagó tributo a su falta de descanso; recuérdese que en sus vacaciones se dedicó a hacer giras con un equipo denominado “Los amigos de Messi”, supuestamente con fines benéficos. Después hubo acusaciones de lavado de dinero de por medio.

Es increíble que un deportista de elite no haya valorado su reposo, es como si un pianista no cuidara sus manos y en vacaciones se fuera con un hacha a cortar árboles…

El Mejor y el "Invento": Neuer exhibe el premio como el portero más calificado de la Copa. A su lado, Messi sostiene el trofeo como el Jugador del Mundial. Hasta la "Pulga" sintió pudor por esa designación.

Hinchas argentinos se dirigen al Obelisco de Buenos Aires para presenciar la gran final. A esa hora, la afición trasandina apostaba por el triunfo (Fotografía: Francisco Coloane).

inco centímetros más arriba. No pido nada más. Con eso era suficiente para -tal vez- disputar un título del mundo. Cómo explicar la desazón de un país frustrado por un disparo en el travesaño, que estuvo a un tris de poner a la Roja en la gloria y mandar rapidito al “infierno” a los brasileños, que terminaron siendo el gran fiasco de este Mundial?. La historia se escribe con resultados, pero también con sueños. Y más allá de cualquier reparo, Chile cumplió. Si nos ponemos a pensar todo lo que hizo en el Mundial, el saldo es más que positivo. No es menos dejar eliminado al campeón vigente en ese momento (España) y “collerear” ante una Holanda pragmática y letal -con Robben a un nivel superlativo-. No es poca cosa poner nerviosos a los brasileños en su propia casa y estar a un travesaño de eliminarlos en la ronda de octavos, ni menos irrelevante haber propuesto un estilo ofensivo y hacia adelante en un torneo que no precisamete lució este tipo de fútbol. O sea, hay que estar tranquilos y esperanzados. Hoy nos tocó bailar con la fea -como siempre-, pero al final del túnel se ve la luz: la Copa América 2015. Es el momento ideal, con una selección madura y con una tremenda sed de triunfo. Ah, y con un Vidal en su nivel real. Es que con un equipo aceitado y sin bajas importantes, nuestra Selección, de local, tiene la obligación de bailar con la más bonita el año venidero.

9

LA NUEVA MOD HUMILLAR AL S

10

DA: SCRATCH

Por Matías Alcántara

E

l primer minuto pareció ser la prolongación de la pesadilla brasileña del Mineirao, con una Holanda que le escondía el balón a los locales y que iniciaba el primer ataque con un pase preciso a Robben. El delantero fue derribado a centímetros del área por Thiago Silva y aunque el juez argelino Djamel Haimoudi le perdonó la vida al capitán de Brasil, cobró penal. Este error de apreciación lo aprovechó Van Persie para abrir la cuenta desde los doce pasos.

El encuentro por el bronce parece ser un castigo para las selecciones que aspiran a la corona, incluso en la previa el entrenador Van Gaal fue categórico al enSigue

BRASIL-H

tregar su opinión: “más allá de perder 7-1 o perder por penales, los partidos por el tercer lugar no deberían ser jugados y eso lo vengo diciendo hace quince años”.

Sin embargo, el premio de 22 millones de dólares fue un gran aliciente para el cuerpo técnico y jugadores, que superaron en todo momento al Scratch.

Por su parte, Scolari se mostró tranquilo en la víspera del encuentro. “No estoy nervioso porque el principal objetivo ha desaparecido”, dijo Felipao, que respaldó a algunos de sus referentes, porque sólo hizo tres modificaciones pese a la debacle ante Alemania.

Sin embargo, ese nerviosismo sí se apreció en sus jugadores.

A los `17 Robben profundizó con Wijnaldum que estaba ligeramente adelantado. El jugador del PSV envío un centro a un área poblada por brasileños, el

La goleada que recibió la verde amarela ante Alemania fue noticia planetaria.

En español, en portugués y en muchos idiomas, las palabras vergüenza y humillación acompañaban las crónicas.

12

OLANDA

que fue despejado a medias por David Luiz. El balón quedó en los pies de Daley Blind, que controló de zurda y definió de derecha ante los estáticos defensores que sólo reaccionaron para lamentarse por la conquista. El hijo del gran Danny Blind le propinaba una nueva estocada a Brasil. El mismo jugador que marcó con dureza y por toda la cancha a Alexis Sánchez, que cumplió como volante de quite y que se transformó en un destacado lateral izquierdo. El mejor polifuncional del Mundial.

El 2-0 liquidó el partido, pese a los intentos de Óscar, el mejor de Brasil ante Holanda; o unas subidas casi sin sentido de David Luiz, que trataba de cambiar la suerte de su equipo con jugadas que parecían impresionar más a la galería que al buen portero Cilleseen. Van Gaal supo administrar la ventaja, pese a no

contar con su principal volante para tener una mayor posesión. Wesley Sneijder se lesionó en el calentamiento, pero fue bien reemplazado por el mediocampista del Swansea Jonathan de Guzmán.

La sentencia final llegó en los descuentos luego de una gran jugada colectiva definida por Wijnaldum.

Julio César recibía su décimo gol en dos partidos, y Brasil por primera vez encajaba 14 tantos en un mundial. Además Van Gaal se dio el lujo de ser el primer entrenador en utilizar la totalidad de los jugadores de la plantilla, porque después del 3 a 0 ingresó el arquero Michel Vorm, el último holandés en debutar.

Holanda por primera vez se quedó con el tercer lugar. Por su parte, el anfitrión finalizó un mundial que será recordado por mucho tiempo como el torneo en el que se le perdió el respeto a Brasil.

13

Y D

14

BRASIL FUE COMPARSA DEL CARNAVAL ALEMÁN

El planeta futbolero aplaudió la consagración germana en un torneo de destellos y decepciones, donde Neymar, Ronaldo ni Messi aportaron su magia a la fiesta y Argentina se quedó sin título ni consuelo.

Por Daniel Pérez Pavez

L

a resaca de la Copa de Brasil 2014 dejó al mundo con la cabeza revuelta, igual que cualquier fiesta multitudinaria donde se mezclan los sabores embriagantes que casi siempre catalizan una alegría o atenúan una amargura. La vida misma se retrata, al fin, en el epílogo contradictorio del Mundial, que a pocas horas de la coronación de Alemania mostraba en directo por TV los incidentes en Río de Janeiro o la paliza de la policía bonaerense a los revoltosos del Obelisco.

Vamos bajando la cuesta, que arriba en mi calle se acabó la fiesta, canta el eterno Joan Manuel Serrat para graficar esa dura vuelta a la realidad después de un “trasnoche” largo de cuarenta días en que los medios criollos valoraron más un asalto en una favela de Río de Janeiro, que un incendio en una población de Sigue

15

Santiago, y en que los chilenos se fundieron sin grand distinciones en la misma masa televisiva mundialist La eliminación de Chile ante Brasil en una definici épica por penales, la desgraciada lesión de Neyma manos –y rodilla- del colombiano Juan Camilo Zúñig la tremenda decepción del Scratch y, por cierto, el p mio absurdo a Lionel Messi con el Balón de Oro a man nítidamente en el balance de un torneo t inolvidable como todos…

Primer campeón europeo en tierras sudame canas, y nada menos que clavando su lanza Brasil, la Selección de Alemania se llevó el trof y el reconocimiento de la crítica especializa por su potencial colectivo y un estilo genero en tiempos de la mezquindad defensiva. El 7 que le propinó a los locales en su peor jorna de medio siglo, entregó a los germanos las l

16

des ta. ión ar a iga, preasotan

erien feo ada oso 7-1 ada lla-

ves del cielo para volver a Berlín con la cuarta estrella en su estandarte de conquistadores universales.

La distinción que la FIFA entregó a Messi –entre compungido y avergonzado por la farsa- debió tener al holandés Arjen Robben como destinatario y emblema de la Holanda que repasó a Brasil en el duelo por el tercer lugar, consagrando la potencia de un equipo que nunca decepciona…

En un Portugal de luces titilantes, Ronaldo se quedó en promesa y su paso por la Copa del Mundo fue tan desencantador como la dramática caída de Neymar frente a Colombia. En rigor, ninguna de las tres estrellas sagradas irradió algo de aquella luminosidad con que encandilan en el Real Madrid y el Barcelona español.

Una Argentina tibia, que avanzó a tropezones y se golpeó contra el espejo de su realidad actual, no pudo

cambiar el destino alemán en su tránsito a la corona.

La vieja metáfora bélica del “tanque” que aplasta todo a su paso recobró vigencia en el recorrido del campeón hacia el podio, en una consagración tan meritoria como limpia en su expresión técnica y táctica.

Incluso, aquella imagen de los jugadores celebrando con sus parejas e hijos en la cancha del Maracaná, sin estridencias y desbordes emocionales tan tropicales como se vieron a menudo, será una estampa imborrable del único Mundial en que Brasil, devenido en comparsa, vio pasar el carnaval sin poder disfrutar su alegría.

Al fin, la estela se desvanece con el paso de los días mientras la FIFA inicia la cuenta regresiva para la seductora Rusia 2018, y el planeta se sacude la resaca para convencerse de que sí hay vida después del Mundial…

17

REGALO HISTÓRICO

MEDALLA ORIGINAL PRIMER CAMPEONATO MUNDIAL DE FÚTBOL URUGUAY 1930

Exclusivo Suscriptores A quien traiga la mayor cantidad de nuevos suscriptores hasta el 14 de julio de 2014, *recibirá de regalo esta fantástica reliquia, que conmemora el Campeonato Mundial de Fútbol Uruguay 1930, donde los charrúas ganaron el primer título de la historia. *En caso de empates se realizará un sorteo para elegir al ganador.

MÁS INFORMACIÓN

MAIL: marco.sotomayor@yahoo.es SUSCRIPCIONES: http://www.elagora.net/xregistro/

O

P

I

N

I

Ó

N

Por Scarleth Cárdenas, periodista de TVN y radio Bío Bío

De colada en el Maracaná

Y

o nunca fui a un Mundial... Y pensar que cuando era niña, mi mamá me perseguía con la escoba cada vez que me veía jugando a la pelota ¡Menos mal que mi pasaje terminaba en rotonda! La vieja nunca me logró pillar.

En fin… Con todo lo que amo el fútbol, ya convertida en periodista ni siquiera me enviaron a cubrir alguno.

Así que esta vez lo fui a disfrutar . Y sin entrada, en el mismísimo Maracaná, me colé igual. Recuerdo que antes viví dos emociones fuertes en los estadios. De pequeñita, iba con el marido de mi mamá a entrenar al Sánchez Rumoroso. El marcador era de cholguán, y me ponía detrás del arco porque me fascinaba el gesto técnico de los futbolistas al cabecear. Me llegaron mil pelotazos, hasta que un día por fin –al final del entrenamiento- me dieron pelota. Mi tío lanzó un córner y en el arco estaba el “Loco” Rodríguez. Al frente, mi primo y yo. Recuerdo que vi venir el balón, como en cámara lenta. Tenía seis años y me lancé en palomita. ¡¡¡Goooool!!! ¿Y qué hice yo? Tiesa como soy, igual me fui a la esquina, junto al banderín, a bailar samba, como cada domingo veía a Torino y a Liminha. Todo Coquimbo Unido se reía, doblado en el suelo, por mi festejo.

Mi primera emoción fue cuando aprecié el mismo recinto, convertido en estadio mundialista para la Copa Femenina de Fútbol 2008. Se me llenaron de lágrimas los ojos… No pude evitar recordar el marcador de cholguán y la samba.

La segunda fue cuando conocí el Estadio Nacional. Ya tenía ocho años y mi tío Carlos –de Coquimbo- me compró un sándwich de potito y una Coca Cola. No me duró nada, pues cuando la UC le anotó al equipo "pirata" en posición off side, según mi tío, éste agarró mi botella y se la lanzó al árbitro. Hasta ahí llegó el partido para nosotros.

Una pareja de carabineros me levantó “de una ala” y me llevó al carro policial. Terminé escu-

chando la derrota de Coquimbo en la comisaría.

Perdimos uno a cero y con ese gol en posición de adelanto. Todo mal.

Vuelvo a Brasil 2014: ir al Maracaná en un Mundial, aun de colada, tiene todo eso y más. El himno nacional, eliminar al campeón vigente y salir corriendo a celebrar. También se me llenaron los ojos de lágrimas. Pensé: “del Sánchez Rumoroso al Maracaná”.

Nos falta mucho para que seamos campeones mundiales (o quizás nunca lo seremos), pero vaya que sabemos alentar. Y celebramos lo que pocos celebran: la eliminación temprana en el torneo.

Pero pienso que Brasil sí que debe llorar. Casi tanto como el presidente del París Saint Germain, que compró a David Luiz en 50 millones de dólares – el central más caro de la historia- y que se comió 10 goles en dos partidos. Nasser Ghanem Al-Khelaifi: ¡Vaya que pagaste mal! ¿Y que así y todo, junto a Thiago Silva, esté en el equipo ideal? Raro, ¿no?

Como que en Brasil, el único de verdad fue Neymar. Y cuando comenzaba la final, miré a Messi y dije: “Aquí vamos a saber si tú también eres de verdad”. Nada. Maradona está muy por sobre la "Pulga". Pero la Fifa le puso la lápida y le otorgó el Balón de Oro. En España le criticaron "no haber jugado" el último campeonato, cuidándose para un Mundial en que ganó lo fácil y se perdió cuando el escenario se puso cuesta arriba (ante Holanda y Alemania). Hoy se ha ganado un rechazo planetario.

Insisto: Maradona era mucho más.

Y a propósito de España, Barcelona se llevó a Luis Suárez y vendió a Alexis para “hacer caja” y pagar el traspaso del “Dientecito de Oro” ¿Dónde quedaron los valores de los que tanto habla el club?

En fin… Así, con la FIFA y todo, amo el fútbol igual. Y no he tomado mejor decisión en la vida que ésta: vivir un Mundial.

O

P

I

N

I

Ó

N

Por Luis Urrutia O’Nell (Chomsky)

El Mundial de las tonterías

L

a Copa del Mundo Brasil 2014 puso de moda muchas tonterías. Por ejemplo, la fiebre de calificar cualquier cosa como lo más grande que ha sucedido. Recién se disputaba una semana de partidos y sobraban quienes decretaron que era el mejor Mundial de la historia, antes de definir los grupos, es decir cuando había transcurrido apenas la mitad del torneo, sin los octavos ni los cuartos de final.

Después de la debacle de Brasil a manos de Alemania, los medios competían entre sí para postular que se trataba de un drama superior al Maracanazo de 1950. Todos los entrevistados a quienes se ponía la respuesta en la boca tenían menos de 30 años, por lo tanto no habían nacido en 1950 y no se hallan en condiciones de establecer comparaciones.

No está demás recordar que en 1972 el líder chino Chou Enlai le señaló a Richard Nixon, presidente de Estados Unidos, que era “demasiado pronto” para analizar el impacto de la Revolución Francesa (ocurrida entre 1789 y 1799).

También llamó la atención el llanto y la exhibición que hicieron de él y de su fe los futbolistas brasileños. Lloraban en los himnos, antes de la definición desde los 12 pasos, luego de los penales y después de la paliza alemana. Todo en medio de la cancha y frente a las cámaras de televisión que proyectaban las imágenes en las

pantallas gigantes. Se arrodillaban brazos en cruz, se persignaban media docena de veces, lucían los ojos rojos y las lágrimas recorriendo las mejillas…

Ya en el primer tiempo de la goleada de Alemania, nos imaginamos que más de alguien en La Moneda se habrá ruborizado por el triunfal recibimiento preparado a la selección tras su eliminación ante Brasil. Que, además, obligó a retrasar en un día el viaje de la Presidenta de la República a Estados Unidos… ¿Y qué decir de la enfermiza moda de bautizar a varios de los jugadores de la Roja como el mejor de su puesto en todas las épocas? Que el arquero Claudio Bravo haya ofrecido su mejor actuación en Brasil y haya firmado en Barcelona no le alcanza para destronar a Roberto Rojas. Los que lo ensalzan en el presente, son los mismos que lo criticaron sin medias tintas durante la Copa América de Argentina 2011 y las eliminatorias con Claudio Borghi en el banco. En ese lapso, Bravo estuvo parejito al comerse un gol por encuentro durante muchas fechas. En el arco de Chile, Bravo ha recibido 96 goles en 83 partidos, un promedio de 1,16 gol: Rojas, 45 goles en 49 partidos, promedio 0,92 gol. En la estadísticas de los duelos contra Brasil, Bravo jugó ocho partidos, no ganó ninguno, con 26 goles en contra, mientras que el Cóndor Rojas disputó siete, ganó dos, con siete goles en contra.

LOS MEJORES Y LOS PEORES DEL MUNDIAL Por Julio Salviat

LA SELE DE LOS B

Un intento de r por función, increíblemen razones-, aparec jugador que la como el mejor

F

ueron tantos los buenos arqueros de este mundial, que finalmente hubo que arnear bastante para dar con el mejor. Vaya contando: nadie atajó más disparos de gol que Tim Howard, el portero de Estados Unidos… ¿Se podrá olvidar todo lo que tapó el mexicano Gabriel Ochoa en el partido con Brasil, o lo bien que anduvo David Ospina en el arco colombiano?... El nigeriano Vincent Enyeama, el argelino Rais M’Bohl y el suizo Diego Benaglio regresaron a sus países sin muchos reproches, lo mismo que el italiano Gianluigi Buffon y el belga Thibaut Courtois…

El alemán Manuel Neuer fue elegido por la Fifa como el más destacado del Mundial, y está bien. El arquero del campeón sólo fue batido 4 veces en 8 partidos.

Pero, en su momento, hubo otros candidatos serios.

Entre ellos, Claudio Bravo, al que le faltó superar una instancia más en el campeonato para dar la pelea. En ese mismo rango estuvieron Keylor Navas, de Costa Rica, y Jasper Cillesens, de Holanda.

LOS DEFENSORES Aunque algunas selecciones se plantearon con cinco defensores, otros con cuatro y no faltaron los de tres, vamos a entender como tales los que se dedicaban exclusivamente a defender, valorando sus capacidades de quite y sus recursos técnicos.

El carrilero más eficiente de la Copa fue uno que comenzó como volante y que, por necesidades del equipo, se fue a la banda derecha: Phillip Lahm, de Alemania. Por el otro sector, los aplausos más nutridos fueron para el holandés Daley Blind, cuya capacidad sólo fue puesta en duda cuando enfrentó a Alexis Sánchez, al que tuvo que molerlo a patadas para detenerlo. Otros destacados en esas funciones fueron el

22

MANUEL N (Aleman

PHILLIP LAHM (Alemania)

STPEHAN DE VRIJ (Holanda)

JAVIER MASCHERANO (Argentina) AARJEN ROBBEN (Holanda)

TONY KROOS (Alemania)

belga Toby Albderweireld, el argentino Pablo Zabaleta, el francés Patrice Evra y el colombiano Pablo Armero.

Entre los buenos centrales hubo de todo: espigados como el holandés De Vrij, bajtos como el chileno Gary Medel, desordenados como el brasileño David Luiz, técnicos como el belga Vincent Kompani , eficientes como el argentino Ezequiel Garay y el alemán Jerome Boateng. Pero no hubo una posible dupla mejor que la constituida por el holandés Stephan De Vrij y el alemán Mats Hummels.

DUROS Y SABIOS En el mediocampo transitas dos tipos de jugadores:

ECCIÓN BUENOS

ranking, función , en el que – nte, pero con ce marginado el a Fifa consideró r del Mundial.

NEUER nia) MATS HÜMMELS (Alemania)

DALEY BLIND (Holanda)

BASTIAN SCHWEINSTEIGER (Alemania)

JAMES RODRÍGUEZ (Colombia)

KARIM BENZEMA (Francia)

los que fundamentalmente tienen que ser colaboradores con su defensa y los que se encargan de abastacer y acompañar a los atacante.

Entre los primeros , el más destacado fue el argentino Javier Mascherano, que cumplió labores de muy buen nivel en todos los partidos, pero que fue gigantesco en el duelo con los holandeses. Similar calidad, e incluso más aporte ofensivo, mostraron los germanos Byron Schweinsteiger y el alemán Sami Khedira , además del holandés Nigel de Jong y el colombiano Juan Guillermo Cuadrado. Y no faltaron los que le pusieron algunas fichas a Charles Aránguiz, considerado entre los mejores de la ronda inicial por prestigiosas revistas especializadas europeas.

Los creativos lucen más. Y el racimo en estas funciones es más grande: el francés Paul Pogba, el holandés Wesley Sneijder, el costarricense Bryan Ruiz, el belga Kevin de Bruyne, el mexicano Héctor Herrera … Pero hubo que sacarse el sombrero con Tony Croos, el alemán que manejó los hilos en la masacre de Alemania sobre Brasil, y con James Rodríguez, el colombiano, que también resultó goleador del torneo.

LOS ROMPERREDES Para hacer goles están los de adelante. Y fueron varios los que respondieron. El alemán Thomas Müller, el caso principal. Otro destacado: su compatriota Miroslav Klose, no por la cantidad, sino por la importancia del gol con que se constituyó en el máximo anotador en la historia de los mundiales. También cumplieron Robin Van Persie y Luis Suárez, que venían saliendo de lesiones complicadas; el suizo Zherdam Shaquir, autor de una tripleta, y el brasileño Neymar, lesionado prematuramente y cuya importancia se reveló más que nunca en sus ausencias.

De todos modos, la mejor dupla de ataque, de acuerdo a rendimientos individuales, la forman Aarjen Robben, de Holanda, y Karim Benzema, de Francia. ¿Y Lionel Messi…?

La Fifa lo designó como Balón de Oro, el mejor futbolista de Brasil 2014… Si lo ponemos de volante creativo, queda debajo de Kroos; si de volante de enlace, James Rodríguez fue más trascendente; si lo ubicamos de puntero derecho (para que haga sus diagonales famosas), Robben lo supera ; como atacante en punta, Benzema y hasta el propio Múller le dan cancha, tiro y lado… ¿Puntero izquierdo, entonces? Por ahí podría ser, dada su calidad, pero nunca ocupó esa posición.

La Fifa, en todo caso, no reparó en ninguno de esos aspectos.

23

EL EQUIPO CHAMB

Eran muchos los que llega a buscar su consagración aplausos. El caso más not

IKER CAS (Españ

DANI ALVES (Brasil)

DIEGO LUGANO (Uruguay)

SERGIO BUQUETS (España)

S

e lamentó mucho la ausencia de grandes jugadores, capaces de aportar por sí solos al gran espectáculo del Mundial. El más añorado: Zlatan Ibrahimovic, figura del Paris Saint German francés y elemento clave en su selección. Suecia quedó fuera, y arrastró a su máxima estrella. Casos similares ocurrieron con el delantero galés del Real Madrid Gareth Bale, el arquero checo del Chelsea Petr Cech y el ariete polaco del Borussia Dortmund Robert Lewandowski.

Ellos sufrieron por quedarse en casa. Pero hubo otros que habrían preferido eso, después de sus opacas –en algunos casos desastrosas- actuaciones en canchas brasileñas.

Se esperaba mucho, por ejemplo del español Iker Casillas, considerado por muchos como el mejor arquero del mundo: atajó cero y propició dos goles holandeses y uno chileno. Otro que nunca más podrá dormir tranquilo es el brasileño Julio César: le hicieron diez goles en los últimos dos partidos. El inglés Joe Hart venía también con buena fama, y le

24

ANDREA PIRLO (Italia)

FRED (Brasil)

quedó grande.

Integrante del Barcelona y figura mundial, el lateral brasileño Dani Alves apareció inicialmente como titular en el Scratch, y nunca más se supo de él. Los bonos del inglés Leyton Baynes también quedaron por el suelo.

Entre los centrales, las decepciones fueron varias.

Del italiano Giorgio Chielini nada se habría sabido si no fuese por el mordisco de Luis Suárez. El croata Vedran Korluca llegaba con buenos antecedentes en el Lokomotiv ruso y paó inadvertido. Diego Lugano,

O DE LOS BONES

aron a la Copa del Mundo n universal y se fueron sin table, Cristiano Ronaldo.

SILLAS aña) SERGIO RAMOS (España) LEYTON BAYNES (Inglaterra) LUIZ GUSTAVO (Brasil)

DIEGO COSTA (España)

CRISTIANO RONALDO (Portugal)

con pergaminos de caudillo uruguayo tampoco hizo historia. Pero la peor decepción fue la del español Sergio Ramos: el central del Real Madrid fue un pasadizo ante los holandeses y no encontró nunca el tono frente a Chile.

Si Sergio Busquets hubiese empalmado mejor el centro cruzado de chilena el español Diego Costa en el partido con Chile, tal vez hubiese cambiado toda la historia. Pero el volante del Barcelona desvió con el arco vacío y quedó entre los “chambones” del Mundial. Mucho se esperaba el talento de Andrea

Pirlo, pero el armador italiano ni siquiera tuvo suerte en los tiros libres (uno dio en el travesaño), que son su especialidad. Otros volantes en deuda fueron Luca Modric, el croata del Real Madrid, Steve Gerrard, el cerebro del Liverpool inglés. Y como bloque, el gran fiasco fue el de los brasileños Paulinho, Luiz Gustavo y Oscar, aunque este último por lo menos le hizo empeño. ¡Tanto que se habló de la elección de Diego Costa, que prefirió defender a España, y no a su natal Brasil!

En realidad, en la otra selección también se habría equivocado… El candidato a “scorer” se fue del Mundial sin ningún festejo. También quedaron con enorme deuda el inglés Wayne Rooney, el uruguayo Edinson Cavani, el italiano Mario Balotelli, el bosnio Edin Dzeko.

Por falta de gol y nivel de juego, el peor atacante fue el brasileño Fred.

Y otro que regresó a su país con deuda absoluta fue Cristiano Ronaldo, que llegó con el cartel del mejor jugador del mundo y se fue con poquísimos aplausos.

25

ESTADI

1

El encuentro final entre Argentina y Alemania representó la séptima ocasión en que ambas escuadras se enfrentaron por Copas del Mundo. Se igualó así a Brasil y Suecia que también han jugado siete veces en Mundiales.

Brasil 2014 finalizó con 181 tarjetas amarillas, lo que convirtió a este Mundial en el sexto histórico en esta materia, lejos del primer lugar, que lo ostenta Alemania 2006 con 307 amonestaciones.

Se jugaron ocho prórrogas en Brasil, igualando el registro de Italia 90. Son los torneos en que más se han jugado estas instancias.

Holanda finalizó su incursión disputando siete partidos y marchándose invicto desde Brasil. Se suma así a Brasil en 1978; Italia en 1990 y Francia en 2006, que también actuaron en siete partidos, retirándose invictos y sin el máximo trofeo.

Rashman Irmatov, de Uzbekistán, se convirtió en el juez con más partidos dirigidos en la historia de los Mundiales, con nueve partidos. Este registro lo alcanzó en el duelo de cuartos de final entre Costa Rica y Holanda.

El gol de Mario Götze, en la final, supuso el gol 171 de Brasil 2014, igualando a Francia 1998 como el campeonato con más anotaciones.

2 3 4 5 6

7

Las semifinales del torneo fueron “extremas”: por un lado, se registró el partido con más goles en estas instancias: ocho (Alemania-Brasil) y por otro se observó por primera vez un partido de estas características con empate 0-0 (Argentina-Holanda).

En Brasil se anotó el tercer título consecutivo para Europa, hecho que no se había observado hasta el momento en la historia de la Copa.

James Rodríguez, de Colombia, se consagró goleador del mundial con seis tantos. Es el quinto jugador que se despide antes de las fases finales (semis y finales) del certamen. ¿Los otros? Florian Albert, de Hungría, y Valentín Ivanov, de Unión Soviética, en 1962, Gary Lineker, de Inglaterra, en 1986 y Oleg Salenko, de Rusia, en Estados Unidos 1994 (fase de grupos).

Sergio Romero, arquero de Argentina, completó la tercera mejor racha de imbatibilidad de un portero en los Mundiales, alcanzando 477 minutos. Por detrás de Walter Zenga, de Italia (517) y Peter Shilton, de Inglaterra (499).

La final de Brasil 2014 fue la séptima que debió recurrir al tiempo extra para definirse.

Costa Rica se despidió del torneo en cuartos de final, en condición de invicto, y con 2 goles en contra, siendo la selección menos batida del torneo.

Brasil igualó a Corea del Norte (2010) y Arabia Saudita (2002) como las únicas seleccio-

8 9

10 11 12 13

Brasil en 20 datos 26

Ha finalizado la la FIFA. El camin aquel lejano 15 d clasificatorio entr victoria de 5-2 p

STICAS

nes que han recibido al menos 12 goles en una participación mundialista.

Otra de Brasil: desde la Copa de 1966 que el Scratch no enrielaba dos derrotas al hilo en una edición del torneo (aquella vez 3-1 con Hungría y 3-1 con Portugal). Además, fue el único seleccionado que recibió dos dígitos de goles en contra: 14.

Sobre el partido por el tercer lugar; desde España 1982 que esta final de consuelo registra más goles que el juego decisivo. Sólo en Francia 1998 hubo igualdad de tantos (3).

Brasil 2014 registró 3.429.873 espectadores, convirtiéndose en el segundo torneo con más público en los estadios (el primero es Estados Unidos 1994, 3.587.538) Luis Felipe Scolari se convirtió en el tercer entrenador con más partidos dirigidos en la Copa del Mundo, con 21. Helmuth Schön (Alemania, 25) y Carlos Alberto Parreira (Brasil, 23) ocupan los primeros lugares.

Miroslav Klose, a su marca de goleador histórico de las Copas del Mundo, sumó otra: 24 partidos jugados en Mundiales, quedando a uno de Lothar Matthäus (Alemania). De haber actuado en el primer partido, ante Portugal, hubiese igualado al capitán alemán en Italia 1990. Además,

14 15 16

Klose, con 36 años se convirtió en el tercer jugador más viejo en alzar el trofeo, tras Dino Zoff, de Italia (40) y Nilton Santos, de Brasil (37).

Holanda se convirtió en el primer equipo en hacer jugar a sus 23 integrantes en la Copa del Mundo. Grecia lo había hecho en Estados Unidos 1994, en tiempos en que la nómina incluía a 22 jugadores.

Por último, a no decaer, tenemos Copa América en 2015 y 2016; Eurocopa y Juegos Olímpicos en 2016, Mundial sub 17 en 2015, y cuatro años, o sólo 1.426 días, para el puntapié inicial de Rusia 2018.

19 20

Por Carlos Pérez Twitter: @puertomontt25

17 18

vigésima edición de la Copa del Mundo de no contempló más de 800 partidos, desde de junio de 2011, con el primer encuentro re Monserrat y Belice, que terminó con para los últimos. Tras ese partido, hasta el

pasado domingo, cuando se jugó la final en Maracaná, se vivieron múltiples emociones, que tuvieron a nuestra selección protagonizando 20 encuentros del proceso (16 en juegos clasificatorios y cuatro en Brasil). A continuación, 20 datos que nos deja el campeonato mundial de fútbol.

27

O

P

I

N

I

Ó

N

Por Ramón Reyes A. Periodista

Otra tragedia, nuevos culpables

M

oacir Barbosa Nascimento, Barbosa, fue la imagen de la mayor tragedia del fútbol brasileño. Y en medio del torrente informativo, de escudriñar estadísticas, del llanto desbordado de jugadores y torcedores, y de la incredulidad del mundo entero, la fantasmal figura del llamado "arquero maldito", ese del Maracanazo de Uruguay, en 1950, fue reflotado de sus pobres cenizas luego de la humillante goleada que sufrieron los pentacampeones ante Alemania. Un sufrimiento que, días más tarde, se prolongó con Holanda.

Porque más allá del dolor infinito que provocó en el pueblo brasileño esa histórica caída del Scratch con los uruguayos, cuando a 11 minutos del final Alcides Ghiggia le dio la victoria a los visitantes, lo que ocurrió el 8 de julio de 2014, en el estadio Mineirao, de Belo Horizonte, para los analistas locales se constituyó "en el mayor vejamen en la historia del fútbol brasileño". Y, claro, si fue la mayor goleada en cien años del "futebol", ese del juego bonito.

Todos recordaron que tuvieron que pasar 64 años para que la escuadra verde amarela volviera a vivir tamaña vergüenza. Pero esta vez no fue en una final de la Copa del Mundo. Porque dio la sensación que algo indeseable sucedería para los hombres de Felipão -ahora condenado como el mayor causante de la afrenta-, en la medida que Brasil avanzaba a los tropezones en la primera fase. Ya mucho antes del desastre ante los germanos, sectores de la prensa calificaban a esta selección como "la peor desde la post guerra". Así, con todas sus letras.

Pero los torcedores, el "povo" brasileño, no llevaban en el apunte lo que opinaban los críticos. Los barrios se llenaron de banderitas, se volcaron por miles a los estadios con sus caras pintadas, los atuendos más vistosos y cantaron el himno de la "Patria amada" casi con el corazón. Nada les quitaría el sueño de ver una sexta estrella en su laureada y victoriosa camiseta. Gozaron a medias en la victoria por penales con Chile y un poco ante Colombia. Pero persistieron en mantener en alto la ilusión de 200 millones de seres. Sin embargo, el golpe fue letal. Tras

el 7-1 propinado por los pupilos del técnico Joachim Loew, a las lágrimas de Julio César, Thiago Silva, David Luiz y el resto de sus compañeros, se unió el llanto al borde de la histeria en las tribunas del Mineirao y en los hogares brasileños.

Y en la televisión y medios en general las entrevistas fueron para los especialistas en emociones. Sicólogos y siquiatras intentaron explicar las consecuencias del desastre en el alma y mente de los torcedores, especialmente, en los más jóvenes.

"Deben entender que el fútbol es como la vida, en la que a veces se gana y, también, muchas veces, se pierde. Es una lección para tratar de ser mejores cada día", fue la reflexión de un especialista. Quizás Neymar, ya fuera del Mundial por la fractura que le provocó el colombiano Zúñiga, escuchaba en su hogar de Santos.

No obstante, la agonía no terminó con el 3-0 ante los holandeses en el "Mané" Garrincha de Brasilia y la consiguiente pérdida del tercer lugar, ya magro premio de consuelo. Los brasileños no querían sufrir otro desaire al ver alzar la Copa a los argentinos, sus más enconados rivales en Sudamérica; aquellos que se mofaron al cantarles en su propia tierra ese corito insultante del "Brasil, decime que se siete...". Sería como demasiado. Por eso se volcaron con su apoyo hacia la selección que le provocó la mayor humillación de su historia. Banderas de Brasil y Alemania asomaron en los barrios de Sao Paulo, Río y otras ciudades. Y también torcedores con la camiseta germana. Había que aferrarse a una dosis de alegría, aunque fuese ajena. Por fortuna para ellos, la sufrida victoria de los ahora tetracampeones, suavizó el trauma de una Copa del Mundo organizada para ganarla, tal como hace 64 largos años. Por eso, igual los juicios lapidarios para el bochorno copero de las voces más críticas no tienen límites: "Los luchadores del 16 de julio de 1950 no fueron vengados, pero están todos más que perdonados. Barbosa, definitivamente, descansa en paz".

El peso de esta nueva tragedia para el fútbol brasileño, ya la cargan otros hombres.