IBAGUÉ, JUNIO 27 DE 2010
FA CE
TAS CULTURA AL DÍA Cine
Sam Raimi
Andrés Ricardo Duque Historia
San Juan en Tolima Grande Entrevista Reseña
José Saramago Libardo Vargas
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Solaris: la novela y el filme Por Antonio Mora Vélez*
La relación del cine con la literatura no ha sido siempre exitosa. En más de una ocasión el filme resulta inferior al texto literario por muchas razones, porque no logra captar la atmósfera, el espíritu o el mensaje del autor, o porque la obra excede en dimensiones los estrechos espacios de tiempo de que dispone el cineasta. En el caso de Solaris, la novela de ciencia-ficción de Stanislaw Lem y la película basada en dicha novela del realizador ruso Andrei Tarkovski, no ha sido así. La obra cinematográfica -una de las mejores del cine de ciencia-ficción- deja al espectador con iguales o parecidas reflexiones acerca del futuro del hombre, con iguales cuestionamientos a sus pretensiones de llegar tan lejos en el conocimiento del universo, y mejora el final de la novela porque agrega una escena sorprendente y poética que se muestra más lógica, según la trama de la novela, que el final imaginado y escrito por el novelista polaco.
No obstante lo anterior, Solaris, la novela -uno de los clásicos de la -ciencia ficción literaria- es una de esas obras que dejan anonadado al lector cuando la termina. Hay en ella una profunda reflexión acerca del gran tema del hombre: la conquista del espacio en busca de un nuevo medio natural para salvar la vida. Y una erudita disquisición acerca de la naturaleza del planeta Solaris y de los avances en su conocimiento logrados por la ciencia que lo estudia. En Solaris el hombre se encuentra con algo insólito, impensable e inmanejable. Un planeta que es un océano de materia orgánica que piensa y que logra procesar el pensamiento de los hombres y utilizar tal procesamiento para crearles duplicados en la nave espacial, de seres que ellos amaron en La Tierra. A Kelvin, el personaje de la obra, el planeta pensante le duplica su esposa fallecida y lo obliga a replantear su papel en la vida, a hacerse una catarsis en torno a la muerte de ella y a querer
quedarse al lado de su doble en Solaris, llamada Harey como su esposa, en lugar de regresar a La Tierra. Pero la doble de Harey toma una decisión que lo desconcierta, se hace matar, desintegrar para ser más exactos, para que él pueda regresar sin ella, dado que su naturaleza material diferente -neutrónica- era incompatible con el ambiente de La Tierra. No obstante lo anterior, y este es el aporte de la película de Tarkovski, el astronauta Kelvin no regresa a La Tierra sino a un mimoide, una isla artificial construida por el planeta Solaris en un lugar de su sustancia proteica, y en él encuentra Kelvin su vieja casa de campo paterna y a su padre -fallecido en La Tierra- que lo espera ocupado en sus labores domésticas. Pero no se trata de un final feliz, como pudiera pensarse, la isla es en verdad una cárcel y el aparente padre, otro duplicado; toda una mise en scéne creada por Solaris para evitar que Kelvin a su regreso a La Tierra le lleve a los solaristas -los expertos
en el planeta- el mensaje de la impotencia humana frente a la superior inteligencia
del cosmos.
*Escritor colombiano
Palabra del día Pánico Pan era el dios de los pastores y de los rebaños, oriundo de Arcadia, pero cuyo culto se generalizó en todo el mundo helénico. Tenía el rostro barbudo, con cuernos y una expresión animalesca, además de miembros inferiores como los del macho cabrío. Aunque se le atribuyeron diversos orígenes, era hijo de Hermes y de una hija de Dríope, según la leyenda más conocida. Cuando nació, su madre se horrorizó del hijo monstruoso que había traído al mundo, pero su padre lo envolvió en una piel de liebre y lo llevó al Olimpo, donde lo puso al
lado de Zeus y lo mostró a los demás dioses, quienes de inmediato simpatizaron con él. Pan amó a la ninfa Eco y a la diosa Selene. Como divinidad silvestre, se le atribuían los ruidos de causa ignorada en campos y bosques, que con frecuencia amedrentaban a campesinos y pastores. Por esa razón, surgió en griego la expresión deima panikón ‘miedo causado por Pan’, que se abrevió en la palabra griega panikós y que, tras pasar por el latín panicus, formó el castellano pánico, con significado similar: ‘miedo intenso por algo de origen desconocido’.
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Sam Raimi y las delicias de las películas de serie B Por Andrés Ricardo Duque Rincón *
Sam Raimi para muchos es reconocido como el director de la saga del hombre araña. Pocos conocen cuáles fueron sus inicios en el mundo del séptimo arte y, tal vez, su más reciente película, “Drag me to hell’’ (traducida al español como “Arrástrame al infierno”), se encuentra dentro del tipo de películas con las que se hizo reconocido y donde expone de la mejor manera su labor como director. Se inició, como muchos directores, con mucho sacrificio, ya que el primer filme, con el que alcanzó reconocimiento, fue financiado por él mismo y algunos amigos suyos de la universidad. Dicha película se tituló “Evil Dead” (en algunos países de habla hispana se conoció con diferentes nombres: “Posesión infernal”, “El despertar del diablo”, “Muerte diabólica” y “El libro de los muertos vivientes”), y se enmarcó en el cine de terror de serie B. Entiéndase como películas de serie B aquellos filmes
Evil Dead
“Lo terrible está encerrado en lo bello, lo mismo que lo bello en lo terrible’’ Andrei Tarkovski
de bajo presupuesto que no son considerados de alta calidad artística debido a que sus argumentos son demasiado planos, actuaciones sin matices y donde prevalecen las escenas truculentas y sangrientas. Con tan solo 85 minutos de duración, “Evil Dead” cuenta la espantosa aventura que tienen que vivir cinco estudiantes en una cabaña abandonada en los bosques de Tennessee. Los jóvenes al reproducir cierta cinta magnetofónica que se encuentran en la cabaña y en la cual se recitan apartes del Necromicon o Libro de los Muertos, avivan los espíritus que se encontraban dormidos. De ahí en adelante comienza la angustiante persecución que deben soportar los jóvenes por parte de dichos espí- ritus que quieren poseer sus cuerpos. Estrenada en 1981, sufrió en varios países la censura por sus escenas violentas, pero fue tal su éxito que le siguieron dos secuelas: “Evil Dead II” (1987) y “Evil Dead III, Army of Darkness” (1992). Aquí hay que dejar en claro que “Evil Dead
II” no se puede considerar exactamente una secuela de “Evil Devil” más bien parece una versión mejorada de la misma; ya que se cuenta la misma historia, pero con la participación ya no de cinco jóvenes sino tan solo de dos. En lo que sí puede existir cierta novedad es en el desenlace de la película, ya que en la segunda nos ofrece un final aún más inesperado que en el primer filme; mandando al protagonista a viajar por el tiempo y terminar en la edad media. Ahora bien, la siguiente película de Sam Raimi, “Evil Dead III”, Army of Darkness” sí se puede considerar una secuela, debido a que comienza la historia donde la había dejado “Evil Dead II”. El protagonista, que había sido transportado a la Edad Media, buscará afanosamente ser devuelto a su época, para lo cual deberá encontrar el Necromicon o Libro de los Muertos. Como hecho curioso Raimi debió filmar dos veces el final, ya que el que deseaba era demasiado apocalíptico para el gusto de los productores. Lo más reciente de Sam Raimi es “Arrástrame al infierno”, supone su regreso al tipo de películas que le dieron fama y donde nos parece se siente más a gusto. Dicho filme narra lo que puede considerase un argumento manido ya muchas veces en el séptimo arte y son los padecimientos que debe vivir el protagonista, en este caso una bella joven, al ser objeto de una maldición por parte de una anciana gitana. Todo se desencadena cuando la joven empleada de una oficina de préstamos,
Christine, le niega la ampliación de su hipoteca a una anciana, la señora Ganush. Aunque la joven Christine quiere extenderle el plazo que le solicita la anciana, al final se lo niega debido a que quiere impresionar a su jefe y de este modo conseguir un ascenso. No valen las súplicas de la señora Ganush y ante la negativa de la joven, la anciana le lanza un maleficio a la chica. De ahí en adelante Christine vivirá un verdadero desbarajuste en su vida y tan solo tendrá tres días para evitar ser llevada al infierno. Al igual que en sus primeras películas, es de resaltar en ésta su ingenio en mostrarnos escenas truculentas, pero con su particular manera de combinar lo escabroso con lo burlón, que le da esa especial atmosfera a sus trabajos y que lo distingue de otros directores. De esta manera Raimi ha logrado construir y ponerle ese sello personal a sus trabajos cinematográficos que lo hacen único. Es así como al salir de la sala de cine y ver el trabajo de Raimi, no lo haremos tan perturbados como con cualquier otro film de este estilo, considérese “Juegos macabros”, “Masacre en Texas”, “Hostal” y similares, en las que nos saturan de mares de sangre y desmembramientos a diestra y siniestra.
Sam Raimi Quienes vayan a ver este filme no esperen encontrar un guión exquisito, ni acercarse a los cánones que se establecen para una buena película, en muchas ocasiones se va a cine a pasar un rato agradable. Y esto parece suceder cuando nos acercamos a los filmes de Sam Raimi, ya que una vez iniciados los primeros minutos dejamos a un lado nuestra sesuda mirada crítica para darnos unos instantes de esparcimiento y dejarnos apabullar por una serie de escenas escabrosas, un sencillo argumento y actuaciones predecibles. Tal vez aquí sucede lo que asegura Jullier Laurent: “Hemos realizado una especie de contrato explícito que regula el trueque de una suma de dinero a cambio de la promesa de pasar un buen rato, y francamente en mi caso, las películas de Sam Raimi, me han permitido pasar varios momentos amenos.”
*Estudiante. Lic. en lengua castellana .U.T
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Historia de las fiestas
De la colonia al Tapa Roja
P
ara muchas personas, especialmente para los jóvenes, las fiestas del San Juan se han convertido en la excusa perfecta para tomar, bailar y pasearse ‘haciendo equilibrio con la botella’ por toda la Quinta. Cabe pensar entonces desde qué momento esta efeméride de fiesta patronal se convirtió en ‘las fiestas’ y por qué dejó de ser la celebración alrededor de San Juan Bautista, interrogantes como estos surgieron hace algunos años en la mente de Bernardo Tovar Zambrando, quien con el tiempo se convirtió en historiador y se dio a la tarea de responder a estas inquietudes. Y es que parece un poco extraño pensar que desde sus inicios una festividad cristiana girara en torno a la comida y al licor, que tuvieran reinados, desfiles y una carga folclórica tan alta, como la que se aprecia actualmente. “Como toda persona que ha vivido en el Gran Tolima crecí con las fiestas de mitad de año.
Siempre me intrigó el comprender lo que sucedía en ellas, por eso decidí acercarme a lo que incialmente dominaba el San Juan, que era la devoción, y así llegar hasta las formas diversión que encontramos hoy en día”, comentó Bernardo Tovar a EL NUEVO DÍA, en entrevista exclusiva, previo al lanzamiento de su libro “Diversión, devoción y deseo. Historia de las fiestas de San Juan. En torno a esto Tovar dirigió su mirada a España, pues es bien sa-
bido que como fiesta patronal el San Juan llegó junto a la colonización, de esta manera pudo descubrir que esta era la fiesta más importante de la cristiandad, desple-
gada por todo el territorio cristiano europeo, y que de la misma forma posteriormente se desplazó a cada una de las colonias españolas en América. Teniendo como referente las fiestas del Tolima Grande, Tovar empezó a comparar y a trazar la evolución de las festividades a lo largo de la historia cultural. Es así como logró discernir un periodo inicial
que comprende la época colonial, un segundo momento a mediados del siglo XX y el tercer estadio de los festivales que hace referencia a partir de la década de los 60, una vez creados los festivales de San Juan y San Pedro, tal como los conocemos ahora. De la primera etapa se resalta la importancia de la devoción y el recorrido que hizo esta tradición desde España hasta las colonias “Al estudiar esta tradición se amplió el estudio geográfico de la fiesta de
San Juan, pues en todas las colonias se celebraba esta fiesta, con diferentes actividades, hasta que se convirtieron en una fiesta popular”, agregó Tovar. Desde ir a misa hasta realizar un baño en ríos, recreando el proceso de bautismo efectuado por San Juan Bautista, incluyendo carreras ecuestres
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y peleas de caballos, hacían parte de la fiesta que se celebraba cada 24 de junio. Con el paso de los años y con la institucionalización de las fiestas pa-
tronales, Tovar cuenta que los conceptos estructurales de las mismas se modificaron logrando que la devoción se convirtiera en un goce pagano. “ S o n varios los factores
que influyen en la forma moderna de los festivales, el primero de ellos es el folclor, pues en esa época esas eran las formas normales de celebración, pero ahora son la temática central de unas fiestas inicialmente religiosas”, comentó el docente de historia de la Universidad Nacional. De otro lado, resalta el protagonismo que poco a poco fueron tomando los reinados, así la mujer se convirtió en una de las figuras más importantes de la festividad que ahora se toma cerca de 15 días, contrario al tradicional 24 de junio. Y este es otro aspecto subrayado por Tovar en su libro: el turismo y el comercio llevaron no sólo a realizar unas fiestas prolongadas, sino a que su fecha sea acomodada de acuerdo a las facilidades para los visitantes, pues viajar entre semana no sería fácil para muchas personas. Mucho ha cambiado entonces desde que se celebraba la fiesta de San Juan, a ‘las fiestas’ que actualmente atraen a turistas y locales. Del baño en el río, queda el licor que se derrama por las calles; de las actividades ecuestres, una cabalgata, y sin saber por qué jóvenes y adultos levantan una copa de aguardiente, brillante al sol de mediodía y evocan al patrono que jamás esperó una celebración, hoy se grita ¡Qué viva el San Juan!
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El cuento Hugo Con sombras Gutiérrez Vega tras las sombras Poeta mexicano
Por Melba Alfaro*
Paso ante la lápida esperando que me oigas, mas el cementerio está sordo y me es ajeno. No encuentro en él rastros del aire que tenías o de los sueños que, al menos, dejaras. En el aturdimiento busco mezclarme entre mochilas multicolores, semáforos y pasos apresurados. Te siento fuera del sepulcro. Cruzo frente a la iglesia. Las campanas, cada vez más agudas, provocan que las lágrimas desanden, regresenmás allá de la conciencia- al fondo de los remordimientos, a ése dolor hondo que hace tomar el aire a bocanadas, mientras el viento hiela las orejas y penetra resquicios del abrigo. Si hace tan solo una semana tú y yo compartimos el sol aporreado en los pilares de la envejecida casona y reñimos junto al grueso tronco del tamarindo. ¿Me acompañas? Hoy el laurel del campanario está muy verde y me quema el frío. Nos presentaron en otras circunstancias -recordaráslas de tu desparpajo ante la vida... ¡la vida! Y fuimos amigos y hablamos de tu piel y las osadías de la naturaleza, de las hazañas de las hormonas, de nuestras alegres jus
ticias e injusticias llorosas, de competencias y alianza, de chicos y de chicas, y fuimos amantes. Quisiera poder retroceder a las carretas y tinajas, a -¿recuerdas?- los primeros paseos en bicicleta hasta los cenotes del barrio y querría también olvidar la ponzoña que depositamos uno en el otro, hasta rugir como felinos acorralados, rabiosos que roen la vivencia y desean su exterminio. ¿Me acompañas? Paso an te camiones y pórticos. Circulan camisas a rayas, autos azules, letreros que deliran. Divago por la gente con sombras tras la sombra de las gafas, porque te dije que gente como tú no debería existir, que era mejor que murieras. Hace ocho días apenas, vestido de blanco, lejos de los pilares de la casona, miraste de reojo y con tristeza nuestra marcha, y yo de verde, toda verde, temerosa, deseé acabara la existencia. Tenías la misma convicción, así de grande el daño entre nosotros. Sin pronosticarme tus acciones fuiste hasta la soga para hacer de tí el cuerpo colgante que me trajeron como noticia unos labios. ¿Me acompañas? Duele. No podía saber. Es el tiempo de la ausencia.
Poesía
Habla poco, pero sabemos de su llegada a la isla con un marinero de Cefalonia, hace unos diez años.
Antes de partir A la izquierda está el mar. La alta montaña con su ermita y su senda entre los pinos se recorta en lo azul y las gaviotas van hablando de viajes, llegadas o naufragios. Recuerdo los primeros días en la isla, el verano de fuego y, en la alta madrugada, el olor de la sal, el aroma de los pinos y las voces de las muchachas escondidas entre las ruinas. Una de ellas, la más alta, flameó su cabellera al lado de una columna rota, irguió el pecho, abrió los brazos al cielo y me dejó, adolorido y deslumbrado, a merced del misterio. Los dioses rieron desde lo alto y se hizo el día. La muchacha comenzó a caminar y agua, fuego, tierra y aire vibraron a un tiempo. Era Afrodita o Helena o Friné, era la cautelosa Artemisa clavando su flecha para siempre en el corazón que se niega a envejecer.
El marinero se fue para no regresar. Aretí se quedó sola, con un hatillo de ropa y una casita cuya renta debía pagar puntualmente. Se ofrece por una precisa cantidad de dracmas, ajena a los regateos. Se entrega de una manera honesta y total y es amable y comprensiva hasta con los violentos y los despreciativos. No agradece nada ni espera agradecimientos. Hasta las más rezanderas de la isla aceptan su función indispensable, y Papa Yorgos jamás ha censurado su conducta. Cuando amanece, antes de irse sola a la cama, se queda en la pequeña terraza esperando el primer rayo del sol. Se retira cuando la isla es un juego de colores tenues y de nubes veloces.
Para Miltos Sajturis Aretí es la única y verdaderamente virtuosa prostituta de la isla. Tiene treinta y dos años y es alta y morena. Lo más notable de su rostro son las cejas pobladas y los ojos casi negros y siempre brillantes. Tiene senos pesados y redondos, anchas caderas y piernas largas e inquietas. Un ligero bozo agrega misterio a su boca de labios gruesos y húmedos.
Es entonces cuando Aretí llora un poco sin pensar en los motivos de sus lágrimas. Se limpia los ojos y, mientras bebe café, canta la vieja canción aprendida de su madre en la isla remota apenas dibujada en su memoria.
*Escritora mexicana
Obras del pintor y actor Camilo Medina
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Las novelas de Saramago Por Libardo Vargas Celemín*
José Saramago fue ante todo un novelista, a pesar de haber incursionado en otros géneros como la poesía, la crónica y el cuento. Con una admirable disciplina y una imaginación desbordante, este autor nacido el 16 de noviembre de 1922, en la aldea de Azhinaga, provincia de Ribetejo en la República de Portugal, nos legó sus profundas reflexiones sobre el ser humano y convirtió la literatura en una verdadera trinchera desde donde defendió sus convicciones, con una prosa casi poética y una propuesta estética compleja. La primera novela de Saramago la escribió a los 24 años: Tiempo de pecado (1947), de la que no quedó muy satisfecho y se condenó él mismo a casi treinta años de ostracismo hasta madurar lo suficiente para enfrentar el reto de escribir otras obras. Durante todo este tiempo se dedicó a ejercer oficios prosaicos hasta que desembocó en el periodismo. A partir de 1977 con su novela Manual de pintura y caligrafía, Saramago se convierte en un novelista de tiempo completo. Reivindica en Alzados del suelo (1980) a esos seres elementales de Ribetejo, campesinos como sus abuelos, sumidos todos en la miseria, explotados al máximo y engañados además “por una Iglesia cómplice como beneficiaria del poder del Estado”. Con El año de la muerte de Ricardo Reis (1985), además de novelar la hipotética vida del heterónimo de su admirado poeta Fernando Pessoa, nos sumerge en la Lisboa de la década del treinta con sus conflictos sociales, la represión oficial, el aplastamiento de la insurrección y los hechos imaginarios del encuentro entre dos seres, uno de los cuales sólo ha sido producto de la mente del otro. Con esta novela Saramago
rinde un homenaje a su poeta favorito y con él al grupo de heterónimos que han enriquecido como ningunos la literatura portuguesa. En La balsa de piedra (1986) Saramago plantea una dura crítica al ingreso de España y Portugal a la Unión Europea. La novela es un desborde de imaginación, por cuanto una isla se desprende del continente y comienza su periplo a la deriva, en busca de un sitio dónde anclar. Esta alegoría de la situación política que vive el mundo muestra las actitudes que se asumen ante la tragedia por parte de todas las capas de la sociedad para defender sus intereses. La calma regresa súbitamente, vuelve la normalidad y la balsa de piedra sigue sosteniéndose aferrada a un continente que no la quiere mucho. En El cerco de Lisboa (1989) Saramago de nuevo sorprende con la trama que se desarrolla en torno al trabajo de Raimundo Vargas, corrector de pruebas editoriales que, hastiado de leer y releer libros que “probablemente no merecerían ni una sola lectura”, decide dejar su huella mediante el sencillo acto al agregar el monosílabo “no”, que transformará la historia de Portugal a partir de la Edad Media. “Los cruzados no estuvieron en el cerco de Lisboa”, afirma el corrector y su vida, al igual que los manuales de historia, deberá enmendarse. “El problema de Dios no me preocupa. Me preocupan los problemas de los hombres que inventaron a Dios”, dijo alguna vez Saramago para reafirmar su ateísmo, en medio de una sociedad monacal como la lusitana. Su novela El evangelio según Jesucristo (1991) trata de modificar y explicar los imaginarios que yacen en la memoria colectiva del pueblo. Los dogmas del cristianismo caen bajo la pluma del novelista y producen la reacción oficial, el gobierno
conservador de Carvaco Silva se opone a que esta novela represente a Portugal en un concurso europeo de literatura, lo que hace que Saramago escoja el exilio voluntario en la isla de Lanzarote en las Canarias españolas. En el Ensayo sobre la ceguera el autor escudriña la reacción del ser humano expuesto a las máximas tensiones, que dan como resultado el dominio de los instintos primarios, la violencia que se erige como único poder y sólo el amor emerge como esperanza. Una epidemia de ceguera que se toma la ciudad es el punto de partida para penetrar en esa zona oscura donde florecen las pasiones humanas, las mezquindades y todo aquello de que es capaz el hombre. Saramago ha dicho que “estamos ciegos desde el día en que el hombre dejó de respetarse a sí mismo, cuando perdió el respeto que debía a su semejante”. Esta novela que, como su título lo advierte, bien pudiera leerse como un ensayo, logra dos aportes significativos para la literatura contemporánea: la dramática historia y la forma de ser contada. En Todos los nombres (1997) asistimos a la asfixiante cotidianidad de un empleado de Notaría que decide un día investigar la vida de una de las tantas personas cuyos datos reposan en los anaqueles. La intencionalidad que subyace en esta novela tiene que ver con la capacidad infinita del servilismo de un empleado. A partir de la intertextualidad con el mito de La caverna de Platón, el novelista nos presenta la historia del hombre contemporáneo, prisionero de los hipermercados y centros comerciales como el espacio donde nos toca vivir, aferrados al esclavismo de un consumismo compulsivo. En La Caverna (2000), el alfarero simboliza el pasado anacrónico, mientras el plástico encarna la idea de lo desechable, de lo efímero de
esta sociedad postmoderna. Afortunadamente siempre habrá un hilo de esperanza y es el amor que encuentra el viejo Cipriano al regresar a su pueblo que convierte en el último bastión contra el olvido y la intención homogenizadora. La increíble historia de Tertuliano Máximo Alfonso, un profesor de historia de un liceo que descubre un día a su propio doble en la misma ciudad, hace de El hombre duplicado (2002), más que un relato entretenido, la dramática historia del doble, escrito ya por otros autores, pero esta vez con un humor sórdido. El actor de cuarta categoría enreda al acartonado profesor, se aprovecha de su novia, muere con ella en un accidente de tránsito y se lleva la identidad de Tertuliano, haciéndolo desaparecer para la sociedad. En el año 2004 aparece Ensayo sobre la lucidez, una novela de claro corte político que le recuerda al lector latinoamericano toda la novelística que aquí se ha escrito sobre dictadores. Aquí Saramago, conciencia crítica de la democracia y los sistemas parlamentarios despliega, casi con rabia, su pluma para denunciar los atropellos contra el ser humano. Las intermitencias de la muerte (2005) es un texto lleno de humor y profundas reflexiones sobre ese hecho trascendental para el ser humano y para toda la sociedad, visto ahora desde los intereses económicos y culturales que
entran en juego el día que la muerte decide no ejercer su oficio. El caos aparece en los diferentes estamentos que ven amenazada su estabilidad: la Iglesia, los empresarios fúnebres, los aseguradores, periodistas, funcionarios de ancianatos y hospitales. El ser humano que ha tenido como una utopía la conquista de la inmortalidad, no sabe cómo reaccionar ante la evidencia de vivir por siempre. Las dos últimas novelas de Saramago: El viaje del elefante (2008) y Caín (2009), según los comentaristas de libros, no hacen más que reafirmar la capacidad imaginativa del autor, el sentido crítico hacia la condición humana y la ratificación de sus aportes formales al género de la novela con la inserción de los diálogos en el cuerpo del texto, las digresiones del narrador como si se tratara de un ensayo y su revisita a la historia para transformarla. Saramago murió el 18 de junio pasado, arropado por la calidez de Pilar del Río, la traductora de las mejores percepciones de su vida; leído por miles de personas en el mundo entero; vilipendiado por los críticos acérrimos de su posición política y religiosa y exaltado por cientos de personajes que desfilan por las páginas de sus novelas con sus conflictos y mezquindades, pero también con la utopía viva de lograr un mundo mejor. *Profesor de Literatura, U.T.
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MÚSICA
Mojo Tom Petty Mojo es el primer álbum de Tom Petty and The Heartbreakers en ocho años, desde el “The Last DJ” (2002), aunque Petty lanzó en solitario “Highway Companion” (2006). Es el duodécimo álbum de estudio de Tom Petty and The Heartbreakers, y se anuncia como “el sonido de una banda haciendo parte de su música más excitante”. “Con este disco quiero mostrar a la gente lo que escucho cuando toco con la banda. ‘Mojo’ es donde el grupo vive cuando toca para sí mismo”. El álbum contiene 15 canciones, con cortes como Good enough y First flash of freedom.
Desde el comienzo de Oasis con Supersonic hasta su último lanzamiento con Falling Down, el álbum contiene 26 canciones, ocho de ellas nº1 y 23 situadas entre las 10 primeras de las listas. Una edición de lujo de Time Flies… 1994-2009 añade 36 vídeos nunca publicados, algunos en versiones diferentes para Reino Unido y Estados Unidos, y el último concierto grabado por Oasis el 21 de julio de 2009 en The Roundhouse de Londres.
On the Rock Andrés Calamaro
Time Flies Oasis Time Flies… 1994-2009, es una colección de canciones de Oasis, un recopilatorio con sus singles desde sus inicios en 1994, hasta el final en 2009. “Oasis cambiará irreversiblemente su manera de andar, de hablar y de vestir. El futuro está asegurado, el pasado se fue. Oasis es el ahora. Escuchen. Aquí está la historia” (NME 1995). “Considero que Noel [Gallagher] es el compositor más fino de su generación” (George Martin). Las canciones de Time Flies… 19942009 contemplan 15 años con temas de siete álbumes: Definitely Maybe (1994), (What’s The Story) Morning Glory? (1995), Be Here Now (1997), Standing On The Shoulder Of Giants (2000), Heathen Chemistry (2002), Don’t Believe The Truth (2005) y Dig Out Your Soul (2008).
On the rock es el título del álbum de 2010 de Andrés Calamaro, que cuenta con la colaboración en la producción de Candy Caramelo, Guido Nisenson y Rafael Arcaute (Calle 13). También apoyado por Diego El Cigala, Niño Josele, El Langui (La excepción), Calle 13 y Enrique Bunbury El disco, además de la edición normal, tiene una “digipack deluxe”, con las 12 canciones, más dos bonus, y un CD con remezclas y temas inéditos. También tiene una edición en vinilo. La portada, que representa una alcantarilla, sale en diferentes colores según el país: rojo en España, celeste en Argentina, verde en México, Colombia y Venezuela, en Estados Unidos sale en azul oscuro. La edición en vinilo muestra un apagado gris.
LIBROS
Premios internacionales para Villegas Editores La editorial colombiana Villegas Editores triunfó en la última edición de la Feria del Libro que se llevó a cabo en Nueva York, la más importante de Estados Unidos y la segunda del mundo, en la que se entregaron los International Latino Book Awards. De estos galardones Villegas Editores obtuvo 10 primeros puestos, 14 segundos y cuatro menciones de honor. Estos premios son entregados a editoriales de cualquier nacionalidad que publiquen libros de autores latinos o de temas latinos. Entre los criterios de selección se incluyen características como calidad, originalidad e innovación tanto en contenido como en diseño, que hacen parte de las 46 categorías en las que más de cinco mil títulos participaron. Los títulos ganadores de primeros premios, editados por Villegas Editores, son: “Cocinando cuentos de hadas” de María Villegas y Jennie Kent, Mejor libro de cocina en español o bilingüe; “Amor a la colombiana” de Bejamín Villegas, Mejor portada ilustrada; “Colombia en flor” de César Martínez, Mejor diseño interior; “Hugo Zapata” de Juan Luis Mejía, Mejor libro de arte en español o bilingüe; “Mutis y la real expedición botánica del nuevo Reino de Granada” de Benjamín Villegas, Mejor libro de referencia en español o bilingüe; “Amazonía perdida. La odisea fotográfica de Richard Evans Schultes” de Wade Davis, Mejor libro de viaje en español; “Apalaanchi, pescador wayúu” de Santiago Harker, Mejor uso fotográfico, y “Las penumbras del general. Vida y muerte de Francisco de Paula Santander” de Víctor Paz Otero, Mejor novela hitórica en español o bilingüe.
DIRECTOR: Antonio Melo Salazar JEFE DE REDACCIÓN: Martha Myriam Páez Morales COORDINADOR: Benhur Sánchez Suárez, Redacción cultural EL NUEVO DÍA PERIODISTA: Nazly Johanna Pita López EDITOR: Billy Edison Zúñiga Valencia DISEÑO: Maria Carolina Ramirez Cardozo ILUSTRACIONES: obras del pintor y actor Camilo Medina FOTOS: suministradas, Internet, EL NUEVO DÍA. Carrera 6 No. 12-09 Tels. 2770050 - 2610966 Ibagué Tolima - Colombia Apartado Aéreo 5476908-K www.elnuevodia.com.co Todos los derechos reservados. Prohibida la reproducción total o parcial sin autorización expresa del Grupo Editorial Aguasclaras S.A.. ISSN: 021545-8.