Una Edición. Texto de estudios de Centro Integral de Estudios Metafísicos (CIEM) INTRODUCCION Este libro contiene un trabajo ordenado por el Hombre que vino de la Estrella. También contiene la información necesaria para que sepas como apareció en mi vida este personaje y como, desde entonces, he dedicado mi tiempo a cumplir con la tarea que me encomendó. 1
No es necesario que creas, a pie juntillas, todo lo que aquí te cuento. Tú todavía tienes la maravillosa posibilidad de elegir entre lo que quieras tomar y lo que quieras dejar que pase. Sólo te pido que no descalifiques lo que vas a leer. No es bueno para tí, ni para nadie. Si estos escritos han llegado a tus manos no creas que ha sido producto de la casualidad. Algo hay, también en eso, que irás comprendiendo poco a poco. Por lo pronto piensa que no hay libro ni Maestro que te pueda obligar a tomar tus decisiones. LA VIDA ES BASTANTE MAS DE LO QUE PARECE. El Mensaje de Sirio ACERCA DE LAS ENFERMEDADES Y LAS MEDICINAS Las enfermedades atacan al hombre y, aunque la medicina progresa y progresa cada vez que logra detener alguna enfermedad, o paliar sus efectos, aparece una enfermedad nueva y el estrago entre la raza humana, sigue sin detenerse jamás. El hombre, en su afán de defenderse de este flagelo y prolongar su vida, ha buscado por todos lados el remedio 2
milagroso y ha terminado por medicinarse de diferentes formas y, de ese modo, ha creado una suerte de diversas técnicas medicinales, seguramente basándose en los resultados obtenidos por experiencia personal. Así nace la Medicina Naturista y sus medicamentos que no pueden (por orden de la Ley) llamarse así y circulan, se publicitan y se consumen como "complementos alimenticios". La hipocresía humana se manifiesta en este rubro, en todo su esplendor (?) y estos "complementos alimenticios" atiborran las estanterías de los Centros Naturistas y la gente, completamente desilusionada de los médicos alópatas, se amontonan para comprar "aceite de lobo marino", "uña de no sé qué", "aletas de tiburón en polvo", "complejos vitamínicos increíbles", "betacaroteno de zanahoria", "tranquilizantes de esencia de pasiflora" y recuerdo a mi abuela que para todo mal recetaba, humorísticamente, "valeriana con estrofanto ... ?" Los iriólogos nos miran un ojo, nos descubren la "enfermedad" y nos recetan un medicamento homeopático que es un veneno altamente concentrado. Tanto, que se convierte en remedio. 3
Los reflexólogos nos masajean un pie y nos "sanan de" cualquier dolencia en cualquier parte del cuerpo. Los impositores de mano invocan a San No sé cuanto y nos pasan las manos cerca de donde está la "enfermedad" y esta se va. Los Mentalistas cierran los ojos, se concentran, visualizan el órgano afectado y "lo sanan" con una orden mental que es como un láser invisible y mil veces más poderoso, dicen ellos. Hay Espiritistas que invocan a los Espíritus de grandes médicos o curanderos fallecidos, y estos "vienen", operan al paciente mientras este duerme, y el paciente se sana sin que le quede siquiera una cicatriz. (Así han desaparecido tumores, cálculos, vesículas con problemas, apéndices, etc. ) Los científicos, por supuesto, no aceptan este tipo de cosas, pero los "enfermos" que se han sanado recomiendan a todo el mundo que deje el hospital y haga lo que él. Personalmente tengo una experiencia al respecto:
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"Una vez me descubrieron que padecía de epilepsia El médico me recetó un medicamento alópata llamado Tegretal. Lo tomé hasta que leí en la Biblia que Jesús dijo que la epilepsia se curaba "con oración y ayuno". De ese modo dejé el Tegretal, me puse a ayunar y a orar y no sé si me habré sanado pero no he tenido problemas de tipo epiléptico desde entonces (de esto hace 25 años)." La medicina alópata pierde terreno, cuando los médicos recetan drogas y más drogas y aunque detienen la enfermedad (no sé si la curan) el paciente queda convertido en un fármaco - dependiente y tiene que consolarse con la idea de que "ya no está enfermo" aunque no puede prescindir de la droga recetada, a menos que se haga un tratamiento de desintoxicación que vale muy caro y sabe DIOS qué efectos secundarios tendrá. El Hombre que vino de la Estrella jamás descalifica a nadie y sostiene que todas las enfermedades se originan en la mente y que se curan "CON UNA SONRISA". Dice que ese es el Gran Secreto que oculta la Mona Lisa, pero que el hombre no es capaz de descubrir.
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El hombre que vino de la Estrella nos dio la clave para usar este "remedio", clave que entregaremos más adelante para que sea usada por todo aquel que tenga FE. El Hombre que vino de la Estrella nos enseñó muchas cosas, referentes al tema que tratamos, así es que las iremos compartiendo a medida que avancemos en este trabajo de traducir.
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