Libro Ernesto Bertani - Edición Laboratorios Bagó by Laboratorios Bagó S.A.

BERTANI Ignacio Gutiérrez Zaldívar

Coordinación Editorial Laura Moskovich Paula Sarachman Investigación Paula Sarachman Diseño Gráico Laura Moskovich Eugenia Otero Fotografía Katerina Morgan Néstor Paz Colaboración Ignacio Gutiérrez Zaldívar (h) María Gutiérrez Zaldívar Mariela Jaunsolo Walter Pérez Pablo Quinteros Gustavo Roldán Jonathan Sandoval Gabriel Sarmiento Javier Zenteno Fotocromía e Impresión Arcángel Maggio - Selección Maggio Boutique Reproducciones de Sobrecubierta “Tejiendo” (tapa). “Apertura Global” (contratapa). No está permitida la reproducción total o parcial de este libro, ni su tratamiento informático, ni la transmisión por ninguna forma o método, sin el permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright. Los infractores serán reprimidos con las penas de los arts. 172 y concordantes del Código Penal (arts. 2, 9, 10, 71, Ley 11.723). © Zurbarán Ediciones, 2015 . Gutiérrez Zaldívar, Ignacio Bertani / Ignacio Gutiérrez Zaldívar. - 1a ed. . - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Zurbarán Ediciones, 2015. 200 p. ; 30x22 cm. ISBN 978-987-596-063-3 1. Arte. I. Título CDD 708

Hecho el depósito que marca la ley 11.723 2015, Zurbarán Ediciones Cerrito 1522 (C1010ABF) Buenos Aires | Tel./Fax: (54-11) 4815-1556 e-mail: igz@zurbaran.com.ar | www.zurbaran.com.ar | República Argentina Impreso en Argentina | Printed in Argentina

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A Ernesto, con quien compartimos 25 años de amistad y de trabajo conjunto. Escribiendo este libro, fue un placer recordar con él las vivencias de estos años. Gracias a Juan Carlos y Sebastián Bagó, quienes desde hace 20 años editan y distribuyen mis libros en los 5 continentes. Desde que nos ocupamos de promocionar y hacer conocer la obra de Bertani, hemos tenido en los coleccionistas una acogida que supera siempre nuestras expectativas. Ellos han logrado que su obra sea conocida y admirada por muchos. Sin el equipo de Zurbarán este libro no hubiera sido posible. Ellos ordenan y guardan toda la información sobre nuestros artistas, catalogan las obras y nos permiten, con el equipo de investigación y de diseño, presentar los libros sobre los artistas argentinos que admiramos con pasión. Son Marga y mis hijos, los fanáticos incondicionales de Bertani y siempre nos acompañan en sus exposiciones, mis visitas a su taller y en todas las acciones de promoción de su obra.

Un constante compromiso Desde 1934, en Laboratorios Bagó trabajamos día a día para consolidar nuestro compromiso esencial: cuidar y mejorar la salud y la calidad de vida de las personas, ofreciendo nuevas respuestas terapéuticas y productos de excelencia en los más de 47 países en los que estamos presentes. Para cumplir esta misión, nuestros profesionales, técnicos y colaboradores vuelcan su esfuerzo a la investigación y a fortalecer e impulsar nuestra ilosofía de calidad e innovación. Esto nos permite contar en la actualidad con 85 patentes en el mundo y situar nuestros productos a la vanguardia terapéutica, convirtiéndonos en una de las principales compañías de la industria farmacéutica internacional. Con el objetivo de mejorar la calidad de vida, sumamos nuestra experiencia cotidiana a construir una mejor Argentina, considerando el cuidado de la salud una prioridad y promoviendo la difusión de nuestra cultura, nuestros valores e identidad nacional. Consecuentes con este desafío, año a año celebramos la cultura, el arte, la ciencia y tradición argentina en los títulos de nuestra colección de libros. En esta nueva edición, homenajeamos la obra de Ernesto Bertani, referente de la pintura argentina y elogiado internacionalmente por su ingenio y su mirada crítica y profunda sobre el mundo contemporáneo, nuestra identidad, el hombre, el trabajo, el amor y la sociedad. Los invitamos a disfrutar de la obra de este genial artista.

Sebastián Bagó

Juan Carlos Bagó

A permanent commitment Since 1934, at Laboratorios Bagó, we have been working every day to consolidate our fundamental commitment: to care for and enhance the health and quality of life of people, offering new therapeutic responses and excellent products in more than 47 countries in which we are present. In order to accomplish this mission, our professionals, technicians and workers devote their effort to research and to strengthen and foster our quality and innovation philosophy. Therefore, we currently have 85 patents worldwide, our products are placed ahead of modern therapeutics, and we have become one of the major international pharmaceutical companies. Aimed at enhancing the quality of life, we contribute our everyday experience to build a better Argentina, considering health care a priority and promoting the dissemination of the Argentine culture, values and national identity. In line with this challenge, every year we celebrate Argentine culture, art, science and tradition in the titles of our book collection. In this new edition, we pay homage to the work of Ernesto Bertani, referent of Argentine painting and internationally praised for his inventiveness and for his critical and profound view of contemporary world, our identity, man, work, love and society. We invite you to enjoy the work of this brilliant artist.

Sebastián Bagó

Juan Carlos Bagó

Creo irmemente que los artistas son personas extraordinarias y también unos privilegiados que van a perdurar a través de las creaciones que han realizado. A través de cinco décadas he tenido el placer de convivir con centenares de ellos y en muchos casos poder ocuparme que sus obras sean conocidas por la mayor cantidad de personas. En menos de cuatro décadas hemos realizado más de mil exposiciones, visitadas por millones de personas, pero no sólo alcanza con esto, es necesario también realizar publicaciones, libros y videos sobre las artes visuales. Con Ernesto Bertani, nos une una vocación de mutua colaboración, no sólo creo que es el más original y creativo de los artistas del Arte de los Argentinos, sino que además de ser un trabajador incansable y apasionado, siempre aporta ideas, no sólo en cuanto a la difusión de su obras, sino generosamente también para sus colegas. Pertenecemos a una generación que ha vivido un país muy cambiante y su obra es un relejo de sus sentimientos frente a la realidad que vivimos. Sus obras son un testimonio de ello. Ser original en el arte del Siglo XXI parece una utopía, pero contemplando su trayectoria vemos que “Bertani habla un lenguaje personal llamado Bertani”. Tiene una capacidad de trabajo envidiable, su taller es su hogar y no conoce ines de semana o feriados, busca siempre nuevos caminos y elude los fáciles o ya transitados. Es universal, aunque también podemos decir que es un pintor de Buenos Aires y sus obras parecen acoger la música de un bandoneón. Sus personajes somos todos nosotros, es por ello que generalmente no tienen rostro, son también personajes contemporáneos, hombres de la city o de tribunales con corbatas y trajes grises que se convierten en la “segunda piel”, que nos hace respetables a nuestra sociedad de consumo. Nuestros trajes “Príncipe de Gales” están presentes en muchas de sus obras, son tan reales que efectivamente son géneros y no fondos pintados. Sus damas son las preocupadas por la estética, con alguna intervención quirúrgica que puede observarse tanto por delante como por atrás. Como también su personalidad está presente en las vestimentas que el pintor crea para ellas. El humor y la sorpresa siempre están presentes, como si fuera un mago, juega con el observador haciendo una especie de “trompe l’oeil”, que nos lleva a pensar que un papel, resulta un lienzo y que una supericie rayada está pintada y es un género de confección o bien de tapicería. Utiliza el lápiz como símbolo de creación y con él no sólo dibuja, sino que nos habla de las “arrobas”, de Banderas y hasta en épocas de las Malvinas de “misiles”. No usa corbata, pero las mismas son personajes propios en sus obras, como una manera de marcar las diferentes tendencias en la imagen de políticos y personajes mediáticos, cambios producidos a través de estos años de cambios permanentes. El Obelisco, el tango y su baile son también sujetos de sus obras y algunas nos recuerdan a Discépolo y aquello de “en un mismo lodo todos manoseaos”, pero a diferencia de la música y sus letras, no hay nostalgia, ni tristeza en sus obras.

Nos habla de la corrupción a través de sus señores que meten la mano en el bolsillo ajeno, no elude los datos de la realidad. Cuando parece que no hay salida todo está lleno de nudos, pero cuando hay esperanza aparecen los entramados que nos llevan a superar los problemas en equipo. Hoy también la escultura está presente en su trabajo y las hace experimentando con materiales no tradicionales y con el color, policromando las mismas. Soy feliz de acompañar a este creador en su camino y de ser testigo de sus hallazgos y de sus alegrías y también de sus preocupaciones y tristezas. En este libro trato de compartir con ustedes toda la trayectoria y su original obra, ojalá logre inocularles mi pasión sobre su obra.

Ignacio Gutiérrez Zaldívar

B IOGRAFÍA

Infancia y Juventud Ernesto Bertani nació el 3 de febrero de 1949, en el barrio porteño de Villa Devoto, donde han morado tres generaciones de su familia. Allí Ernesto vivió tres décadas. “Era un barrio tranquilo, residencial, de casas bajas, con algunas calles de tierra en donde jugábamos a la pelota, andábamos en bicicleta, cazábamos mariposas y hacíamos la fogata de San Juan...”, recuerda con nostalgia. Es el segundo hijo de una típica familia de clase media porteña, producto del cruce de varias generaciones de inmigrantes llegados de Italia, Francia y España antes de la Primera Guerra Mundial. El padre, René, era argentino, hijo de padre italiano oriundo de Reggio Emilia, y madre francesa. Era kinesiólogo, profesión poco común entonces. Perteneció a la primer camada recibida en la Universidad de Buenos Aires. Era muy deportista, fue preparador físico y luego kinesiólogo de All Boys, Vélez Sarsield y otros equipos de fútbol como Huracán y Argentinos Juniors. “A mi casa venían los jugadores. Me acuerdo de Bianchi, Willington... Eran los años 60, años del Vélez campeón.” El padre hacía teatro independiente, como actor, también hizo de extra en algunas películas. Escribía poemas en lunfardo y de tradición gauchesca. Recitaba junto a su primo Hugo del Carril y se presentaban en las radios de la época. René se dedicó luego a su carrera universitaria, aunque nunca dejó de escribir. Hugo continuó su carrera artística convirtiéndose en un famoso actor, cantante, guionista y director de cine.

Ernesto con 5 años, junto a su hermano mayor, 1954.

Sus padres, recién casados.

Ernesto a los 11 años, 1960.

El padre tenía el consultorio en la casa familiar, que por las tardes convertían al living en sala de espera y a la madre en secretaria y asistente. La madre se llamaba Adela, y le decían Beba. Siempre fue ama de casa y se gratiicaba tomando diferentes cursos y clases de cerámica. Su hermano mayor es arquitecto; también se recibió de profesor de dibujo y pintura en una academia del barrio. Ernesto tomó allí algunas clases, pero abandonó porque le aburría la enseñanza tradicional. “Desde muy chicos, mi hermano y yo fuimos alentados por nuestros padres para hacer lo que quisiéramos, tuvimos toda la libertad imaginable...”, recuerda Ernesto.

Poema en lunfardo de René Bertani.

La familia en su casa de Villa Devoto, 1957.

Fue un buen alumno en la escuela primaria, pero no así en la secundaria… Ernesto se aburría y en lugar de escuchar a los profesores dibujaba o ilustraba el último partido de fútbol, y cuando le saltaba la vena romántica se dedicaba a motivos eróticos. El resultado fue un bachillerato que completó a duras penas. Las artes plásticas estaban presentes en la casa familiar. Eran amigos y tenían varias obras de Osvaldo Mario Venturi, acuarelista que hacía también aiches para las películas de la época. También tenían obras de Eugenio Daneri, compradas a través de Bertha Rioboo, hermana de Hugo del Carril y una copia de un paisaje de Luis Cordiviola sobre la chimenea. La tía Bertha fue un gran estímulo para Ernesto. Ella era pintora y tenía la galería Rioboo donde exponían Víctor Chab, Raúl Russo, Miguel Diomede, Eugenio Daneri y Leopoldo Presas, entre otros. Con ella y sus primas recorrían galerías y visitaban exposiciones. Recuerda especialmente el Instituto Di Tella: “lleno de cosas nuevas y atrevidas, un lugar deslumbrante para un adolescente de barrio, como era yo.”

Los ines de semana Ernesto la visitaba en su casa de Avenida Santa Fe y Suipacha, y viéndola pintar descubrió que también él podía ser pintor… Pero se inclina al mismo tiempo por el estudio de una carrera tradicional y en 1968 comenzó arquitectura. “Fui buen alumno en lo referido a diseño, pero matemática y física nunca las pude aprobar…” Paralelamente cumplía con su servicio militar en el Regimiento de Granaderos, en la Avenida Luis María Campos, del que no guarda buenos recuerdos… La Argentina atravesaba la dictadura militar de Juan Carlos Onganía. Luego de cursar durante 30 meses, abandonó la carrera de arquitectura en segundo año y eligió “la libertad de pintar todo el tiempo...” Pero además de pintar, necesitaba ganarse la vida y lo hizo ejerciendo los más variados oicios: vendió desde polenta hasta lanes instantáneos, fabricó velas artesanales y en la Feria de San Telmo ofrecía sus dibujos que combinaba con poesías de Neruda o Whitman. Logró tener una pequeña empresa, con quince empleados, dedicada al diseño y la confección de muñecos artesanales. En 1975 llegó el Rodrigazo, la gran devaluación de nuestra moneda durante la gestión del ministro Celestino Rodrigo, que lo dejó en la ruina. Paradójicamente en el caso de Bertani, el Rodrigazo tuvo la virtud de devolverlo a la pintura: “Si voy a sufrir con la economía, que sea haciendo lo que es mi vocación…” Autodidacta hasta los 24 años, en 1973 estudia escultura con Leonardo Rodríguez, ayudante de Antonio Pujía, quien estaba residiendo en el exterior. A su vuelta, Pujía lo orienta y estimula. Con algunos compañeros, alquila una vieja casona en la calle Humahuaca, frente al Abasto. Buscando dar color a sus yesos, en 1975 comenzó a tomar clases con Víctor Chab, con quien profundizó el dibujo como obra autónoma y le dio el estímulo que necesitaba para dedicarse a la pintura.

Ernesto a los 27 años, 1976.

Realizando esculturas en el taller de Pujía, 1974.

Primeras Exposiciones En 1976, con 27 años, expone sus obras por primera vez en una muestra colectiva de 15 integrantes del taller de Víctor Chab, entre los que se encontraba también Guillermo Kuitca. Fue en octubre en la Galería Lirolay, cuya directora era Germaine Derbecq (viuda del escultor Pablo Curatella Manes). Presentó allí dibujos de las series Censura, Suicidas y Gangsters. Imágenes que revelaban las circunstancias de la Argentina, que atravesaba la dictadura militar. Las prohibiciones, el autoritarismo y la represión que afectaban la vida y la producción de los artistas de la época. “En esa muestra lo mío gustó mucho. Aldo Galli hizo mi primera crítica y destacó mis dibujos. Eran obras chicas. Esa nota fue un gran aliento.” Estas imágenes, nacidas en blanco y negro, fueron llevadas también al lienzo, pintadas al óleo.

Serie Censura lápiz sobre papel . 30 x 20 cm . 1976

Serie Censura 6 lápiz sobre papel . 18 x 12 cm . 1976

Serie Gangsters óleo sobre lienzo . 70 x 50 cm . 1976

Serie Suicidas lápiz sobre papel . 70 x 50 cm . 1976

Serie Gangsters óleo sobre lienzo . 70 x 50 cm . 1976

Serie Censura 10 lápiz sobre papel . 70 x 50 cm . 1979 Primer Premio en la Universidad de Belgrano

Autorretrato óleo sobre lienzo . 70 x 60 cm . 1976

En 1977 realizó su primera individual en la Galería Birger, ubicada en la calle Florida y dirigida por Pablo Birger y Gabriela, la hija de Leopoldo Presas. El querido Antonio Pujía lo presentó, escribiendo el prólogo: “Hoy se incorpora al elenco de artistas argentinos y así como él se brinda entero, generoso y sincero, nosotros le daremos la respuesta equivalente para darle el lugar que merece.” Expone exclusivamente dibujos, de 100 x 70 centímetros los más grandes, y sorpresivamente se venden todos. Desde entonces Bertani realizaba envíos a todos los salones, ya que era la oportunidad para que la gente conozca su obra, entre ellos el Salón Marcelo De Ridder (1977), realizado en el Museo Nacional de Bellas Artes. Recibió ininidad de premios, que eran un estímulo… ¡y a veces con el plus del efectivo! Primer Premio en la prestigiosa Sociedad Hebraica Argentina (1977); Mención en el XIV Salón Nacional de Grabado y Dibujo (1978); Primer Premio en la Universidad de Belgrano, curiosamente con una obra que otros hubieran censurado (1979); y Primer Premio en el Salón de la Sociedad Argentina de Artistas Plásticos (1979), en la calle Florida, en el cual los jurados fueron sus colegas. Siempre en la categoría de Dibujo, su disciplina favorita en esos años. “Para mí el dibujo es el elemento de expresión más natural y más fácil.” También comienza a dar clases de dibujo y pintura en el taller de la calle Boulogne Sur Mer, en el barrio de Balvanera. Durante 1977 y 1978 trabaja en las series Nudos y Sillas, en las cuales los personajes se escapan de la cruel realidad cotidiana y se cierran sobre sí mismos, ocultando sus rostros o bien parecen esfumarse en el papel, hasta desaparecer.

Serie Nudos lápiz sobre papel . 30 x 25 cm . 1977

Serie Nudos lápiz sobre papel . 100 x 70 cm . 1977

Serie Nudos lápiz sobre papel . 30 x 25 cm . 1977

En su taller de la calle Boulogne Sur Mer, 1981.

Las “sillas” fueron expuestas en la galería Hoy en el Arte en junio de 1978. La mayoría de las obras eran dibujos. Vuelve a exponer en octubre en la galería Praxis, incorporando óleos sobre lienzo, y recibe excelentes críticas.

Serie Sillas óleo sobre lienzo . 100 x 70 cm . 1978

En 1979, en una de sus inauguraciones, conoció a Mirta D’Andrea, dibujante y escultora, admiradora de su obra. Ellar era muy joven entonces, Ernesto en cambio, ya había pasado el umbral de los 30 y venía de un matrimonio que no resistió la comezón del 7° año. Al año siguiente se van a vivir juntos: “Al principio vivíamos en un pequeño departamento que nos prestaba mi hermano en Vicente López y con el tiempo empezamos a construir ladrillo a ladrillo y premio a premio nuestra casa en Ituzaingó, comenzando por supuesto por el taller. Aquí nacieron nuestros hijos Mauro y Martín y aquí trabajo todos los días y sólo aspiro a seguir trabajando y a darle a mis hijos la misma libertad que yo tuve para elegir mi camino.” En 1979, ante el éxito de su primera muestra, vuelve a exponer en Galería Hoy en el Arte y también, en la Galería Carlos Rosenbuch, ubicada en Belgrano. Al año siguiente es seleccionado para el Premio Braque en el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, recibe el Primer Premio de Dibujo en el Salón de San Fernando y participa en una muestra colectiva en la Galería Durban de Caracas, Venezuela, y en la exposición “El dibujo argentino contemporáneo”, organizada por Marcos Curi en el Museo Nacional de Bellas Artes. Aunque no tenía gran interés en emprender una carrera internacional, en estos años realiza por invitación, sus primeras exposiciones individuales en el exterior. En 1980 lo hace con gran éxito en la Galería 9 de Lima, Perú, donde presenta dibujos de las series Censura y Amor. Y en marzo de 1982, en la Galería Arteaplicada de San Pablo, Brasil, donde anteriormente había vendido algunos de sus dibujos y expuesto en forma colectiva. Esta vez, se presenta de forma individual, y con una novedad: sus pinturas sobre casimir.

Sastre Pintor Un día en que se quedó sin lienzo para pintar, ni dinero para comprarlos, decidió montar sobre el bastidor un trozo de un viejo pantalón con el clásico diseño “Príncipe de Gales”. La idea era “convertirla” en lienzo dándole una base blanca, pero se decidió a dejarla así, entusiasmado por la textura y diseño del género, ideal para vestir a los personajes que pintaba al óleo en esa época. No imaginó entonces que los casimires quedarían deinitivamente asociados a su pintura. Mucho más que un soporte para sus obras, el casimir es uno de los elementos que contribuyen con mayor eicacia a la originalidad de su trabajo. “Fue un momento importante, porque trabajar sobre casimires me dio una identidad muy rápida. Todo el mundo me reconocía como el pintor de los casimires…”

Bolsillo Cosido lápiz, franela y collage . 25 x 25 cm . 1981

Cosido lápiz, franela y collage . 25 x 25 cm . 1981

Cosido 2 lápiz, franela y collage . 25 x 25 cm . 1981

Cosido sin Botón lápiz, franela y collage . 25 x 25 cm . 1981

Bertani en los ‘80.

Bragueta con Boca óleo sobre casimir . 40 x 30 cm . 1979

Es la tela que representa al hombre urbano, al hombre del microcentro porteño, como los abogados de tribunales, los bancarios y oicinistas. Una de las primeras obras pintadas sobre casimir fue “Bragueta con boca”, a ines de los 70, que dio inicio a su serie de “braguetas”, símbolo del machismo criollo, autoritaria metáfora de la castración. Nos dice el artista: “Fue casual / casual como aparecieron los casimires como soporte. Me sedujo la textura, los sutiles hilos de colores que forman los grises. Las tramas ortogonales que estructuran aún más a los hombres que los visten; el hecho de producir un realismo tan contundente, utilizando un soporte también real (¡realismo al cuadrado!). También, la posibilidad de crear imágenes imposibles y que el realismo del casimir ayuda a hacerlas creíbles. En las exposiciones notaba que la gente se detenía a ver si eran telas reales o pintadas. Trabajo sobre casimires no sólo porque son bellas y sugestivas telas, sino también por su carga de realidad, y porque simbolizan al ser urbano y su trama social...” Y agrega un recuerdo de su niñez: “Los días de lluvia, cuando no podíamos andar en bicicleta nos refugiábamos en la sastrería de Don Marcos, enfrente de la casa de mis padres. Él estaba casado pero no tenía hijos y con su esposa eran muy cariñosos con los chicos del barrio.” Los muestrarios de géneros eran la “atracción fatal” del precoz proyecto de artista: “Una de esas tardes mirando los muestrarios de telas descubrí los casimires. Y con el tiempo, luego de experimentar distintas técnicas, aprendí a coser con el aerógrafo y a sacar la hilacha con el tiralíneas...”

El aerógrafo se convirtió desde entonces en su herramienta casi exclusiva, ya que el óleo con pincel no servía para pintar sobre casimir, y lo cambió por el acrílico. Logra así sorprendentes efectos ilusionistas. Es una técnica que le exige absoluta precisión, por lo cual es fundamental todo el trabajo preparatorio, es decir que realiza ininidad de bocetos antes de llevarlo a la tela. Compró su primer aerógrafo hacia 1980. “Yo no sabía si algún otro artista pintaba con él en esa época. Sí lo usaban algunos ilustradores de publicidad...” El primero en usarlo en la Argentina fue el artista rosarino Julio Vanzo, motivado por las experiencias del mexicano David Alfaro Siqueiros. Con esta nueva herramienta, y para aumentar los ingresos, con su mujer Mirta pintaban tarjetas y láminas para vender como regalos de in de año. También realizaba, utilizando plantillas, obras múltiplos sobre aglomerado, que numeraba del 1 al 14, y a las que pegaba botones y lápices reales. También, con un seudónimo irmaba obras geométricas que vendía

Curioso acrílico sobre casimir . 30 x 24 cm . 1982

Homenaje a René Magritte acrílico sobre casimir . 115 x 140 cm . 1991

en casas de decoración. “Todo esto me ayudó a aprender a utilizar el aerógrafo. Cuando le tomé la mano al dominio de la herramienta empecé a trabajar con la misma precisión que el lápiz, pero con el acrílico, que me daba más opciones de colores.” En 1982 Bertani fue el único representante argentino en pintura, en la XII Bienal de París de Arte Joven, realizada en noviembre, en el Grand Palais. Su amigo Pablo García Reinoso, representante en escultura, se ocupó del montaje de sus tres grandes obras sobre casimir de 3 x 1,5 metros. La selección del envío estuvo a cargo del escritor, crítico de arte y gran apoyo de Bertani, Guillermo Withelow, quien expresó sobre el artista: “Técnicamente reúne el talento del dibujante con el reinamiento del colorista.” Las obras despertaron el interés de la crítica europea, y lamentablemente, debido a la distancia y a la situación política en la

Argentina, Ernesto no pudo sacar partido de algunas propuestas que surgieron a propósito de la muestra. Para dar color a los casimires aparecen los lápices, que también “juegan” con la vestimenta. Símbolo de la creatividad, la imaginación, el vuelo, los lápices se destacan en oposición a ese mundo “chato” y gris de los casimires. “Me siento un privilegiado porque tengo una vocación y puedo desarrollarla. Creo que el arte es uno de los pocos caminos en que un hombre puede realizarse plenamente en estos tiempos.” Con la Guerra de Malvinas, los lápices se transforman en misiles y proyectiles, armas que agreden y destruyen. “El lápiz, como la creatividad humana, también sirve para destruir.” Ese nivel de violencia lo expresa el artista, quemando, cortando o rompiendo las telas con las que trabaja, como sucede en “Abril 1982”. Ese mismo año prepara una muestra con el Grupo 5, junto a Pablo Bobbio, Guillermo Kuitca, Miguel Melcon y Osvaldo Monzo, en el CAYC, pero las obras de Bertani son censuradas por el director y inalmente no son expuestas. El grupo se disuelve, y esas obras, que representaban unas señoras gordas pintadas sobre gasa, son expuestas en una muestra individual en galería Ática. Desde 2011 que no pinta sobre casimires, los reemplazó por telas estampadas, pero “amenaza” con que los retomará, haciéndonos felices a los que disfrutamos de los mismos.

Serie Lápices acrílico sobre casimir . 120 x 80 cm . 1980

Abril 1982 acrílico sobre casimir . 110 x 80 cm . 1982

Como respuesta a esa serie referida al mundo del hombre porteño, naturalmente surgieron “Las mujeres” pintadas sobre las telas con las que se confeccionan las prendas femeninas, telas transparentes: gasa, seda, encaje y lamé. “Telas que visten y a la vez desnudan, texturas sensuales que apenas contienen el erotismo de los cuerpos...” Con sus formas contundentes, “las mujeres” de Bertani me recuerdan su gusto por la escultura. “Su monumentalidad responde en parte a la intención de confrontarlas a los poderosos hombres de casimir, ya que las mujeres nacieron como respuesta y como complemento de dicha serie, de manera que tenían que tener formas fuertes. Pero además me gustan las formas redondeadas y sensuales. Creo que las mujeres gorditas son muy femeninas, muy maternales y también ostentosas y voluptuosas…” Eran mujeres naturales, sin operaciones estéticas, no dependientes de dietas y gimnasios, como muchas mujeres “intervenidas” del Siglo XX… “Me alegra la importancia que tiene la mujer en las últimas décadas. Es de justicia su lugar de igualdad en la sociedad actual. El hombre parece estancado y la mujer avanza…” Con una obra de esta serie, de grandes dimensiones y pintada sobre jersey, sin bastidor, como una cortina, obtuvo en 1982 el Primer Premio de Pintura en el Salón Municipal de Artes Plásticas “Manuel Belgrano” de la ciudad de Buenos Aires. Tenía sólo 33 años de edad. En el mismo salón, al año siguiente (1983), recibe el Primer Premio en Dibujo con una tinta y utilizando como soporte, curiosamente, una sábana blanca en la que insinúa una pareja de amantes, a manera de un sudario pagano. Estas obras pertenecen a la colección del Museo Sívori de Buenos Aires.

En los 80, aerógrafo en mano, pintando la obra ganadora del Premio Municipal de Pintura de 1982.

Ernesto y Mirta junto al Premio Municipal de Pintura, 1982.

Serie Encajes acrílico sobre encaje . 30 x 40 cm . 1980

Pimpollos acrílico sobre género . 30 x 40 cm . 2006

El Lunar acrílico sobre lienzo y gaza . 50 x 35 cm . 1996 . Colección Privada

En abril de 1983 expone dibujos y pinturas en la galería Ática, en la calle Paraguay de Buenos Aires. Importantes críticos lo elogian; como Rafael Squirru quien sintetiza: “un artista que piensa y hace pensar.” Y Alberto H. Collazo: “Su pintura se apoya en las habilidades del dibujante y en un acabado conocimiento del instrumento, el aerógrafo, y logra por este medio sutilezas en la representación que transmiten calidez y sensibilidad.” Recibe el 1° Premio de Pintura otorgado por la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, con su obra “Compactado”. Pertenecía ésta a una serie en las que trabaja con iguras geométricas, envueltas en casimires. Entre cubos, pirámides y otros prismas se encuentra con la forma de obelisco, nuestro Porteño Obelisco… Deriva entonces en la serie de símbolos de Buenos Aires. El obelisco como símbolo del porteño se viste de casimir, exaltando su masculinidad. Como contraigura, surgen las “solaponchas”, iguras femeninas formadas por dos solapas de traje. Estas imágenes están presentes también en la obra titulada “Paisaje”, que recibió Premio Mención en el Salón Nacional de Artes Plásticas, en 1983. En 1984 es invitado a participar en la Bienal de La Habana, Cuba. Concentrada al principio para artistas de América Latina y el Caribe, nació mucho antes del boom de las bienales que comenzó a mediados de los 90.

Sin Título . acrílico sobre jersey . 200 x 140 cm . 1982 Colección Museo Sívori Primer Premio en Pintura en el Salón Manuel Belgrano, 1982. Fotografía: Otilio Moralejo.

Solaponcha acrílico sobre casimir . 90 x 60 cm . 1982

Sábana . tinta sobre lienzo . 150 x 100 cm . 1983 Colección Museo Sívori Primer Premio en Dibujo en el Salón Manuel Belgrano, 1983.

“Compactado” Boceto del 1º Premio de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, 1983.

Paisaje . acrílico sobre casimir . 100 x 150 cm Premio Mención en el Salón Nacional de Artes Plásticas 1983

Obelisco acrílico sobre casimir . 90 x 110 cm . 1983 Colección Privada

Obelisco acrílico sobre casimir . 120 x 35 cm 1996 . Colección Privada

El contacto con la directora de la Bienal, curiosamente, fue a través de la crítica y galerista peruana Elida Román, por las obras que Ernesto había expuesto en Lima en 1980. Bertani acepta la invitación, entregando la obra seleccionada a la Embajada de Cuba en Buenos Aires. Recibe por ella el Premio Casa de las Américas, que incluía la invitación a hacer una exposición individual en esta prestigiosa institución cubana, que se concretó tres años después. Ernesto estaba en esos años atareado y concentrado en la construcción de su casa y taller en Ituzaingó (Parque Leloir). Habían comprado con Mirta un lindo terreno, alejado del centro. Poco a poco, con proyecto de su hermano arquitecto, erigieron su vivienda, que estuvo casi terminada para la llegada de su primer hijo Mauro, en 1985. Martín, el menor, nació cuatro años después, en 1989.

Desde que se habían mudado, hacia 1984, Ernesto no tenía teléfono, por eso se diicultó la comunicación con los anitriones cubanos y recién se enteró de la adjudicación del premio dos años después. En septiembre de 1987 viaja a Cuba junto a una veintena de obras, para la preparación de su exposición en la Galería Latinomericana, perteneciente a la Casa de las Américas. En junio de 1985 expone nuevamente en la galería Ática, que inauguraba con su muestra su nueva sala de la calle Libertad. En sus obras Bertani continúa jugando con una visión especial de la realidad: sus pinturas sobre casimires y las nuevas, pintadas sobre lienzos imitando las telas, costuras y pespuntes desconciertan al observador sobre lo real y lo pintado. “El arte es comunicación. Siempre busco que el visitante se detenga a observar.” Rafael Squirru y otros críticos publican estupendas y halagadoras notas, pero la situación económica y inanciera del país, con la implementación del Plan Austral, no era la más propicia para la venta de obras de arte, no había compradores… Desencantado con el medio y los costos de exponer (catálogo, fotos, prensa, marcos y vernissage), durante los próximos 6 años se dedica a dar clases en su taller y sólo envía obras a muestras colectivas en el exterior y a salones y premios locales. Lograba vender alguna obra en forma particular en el taller que mantenía en la calle Boulogne Sur Mer. Aprovecha también para experimentar con nuevas técnicas y materiales realizando obras que permanecen inéditas, pero que fueron el germen para otras futuras, con mejores resultados.

Bertani Vuelve a Exponer Hacía muchos años que me deslumbraba con la obra que exhibía Ernesto en distintos premios y salones, y siempre me parecía que debería haber sido el que recibiera el primer premio. No lo conocía y inalmente un día del año 1989 que estaba comiendo en un restaurante italiano, quiso el destino que frente a mí estuviera una obra que él había enviado años antes al Salón Nacional de Artes Plásticas. Era el destino el que me ponía en esa circunstancia, así que me levanté y me ijé al dorso si estaba el teléfono y la dirección del artista. Fue así que lo llamé esa misma tarde y me manifestó que no tenía interés de exponer, que solamente estaba enviando obra a muestras del exterior y a premios. Entonces le manifesté que al menos tenía interés de comprarle algunas obras y ver cómo funcionaban en nuestras salas y también ver si en las muestras que realizábamos en el exterior su obra provocaba interés. Hoy Ernesto me reconoce que la palabra que lo decidió, fue la palabra “comprar”. “Palabra casi inexistente en el vocabulario de los marchand en esas épocas”, cuenta Ernesto. En los últimos 6 años había sobrevivido gracias a los alumnos y a algunas pocas ventas que le dejaban algunos ingresos mínimos. Así que al día siguiente embaló 3 cuadros y los puso en el porta-equipaje de su viejo Citroën Ami 8, y ante su sorpresa le compré las 3 obras. Como éstas eran muy grandes, le pedí que me enviara algunas medianas para mostrar a los clientes y ver si localmente sus obras concitaban interés. En ese momento pensé que lo que debía hacer con la obra de Bertani era promocionarla en el exterior y que no tendría mayor éxito entre mi clientela local. Una vez más me equivoqué, y me alegro que haya sido así.

Eiciente Ernesto, al día siguiente me trajo 3 obras de 70 x 100 cm y las dejó en consignación. Enorme fue su sorpresa cuando al día siguiente Sonia Decker, quien era mi secretaria, lo llama y le dice que una de las obras dejadas ya había sido vendida. Y Ernesto, que venía poco al centro, batió todos los records al venir nuevamente. Cuando Sonia le da el recibo y el sobre con el dinero, Ernesto le maniiesta que está equivocada, que lo que le estaba dando no era por una, sino por las 3 obras, en razón de los precios con los que él se manejaba. Ante lo cual Decker le manifestó que si el Doctor le había dado una instrucción, le había dejado el dinero y habían confeccionado el recibo correspondiente, que no se hiciera dramas y se llevara el dinero… Un coleccionista y amigo australiano era el que había comprado la primera obra de Bertani en Zurbarán. Y durante la siguiente década ya ha incorporado a su colección una decena de obras que tiene tanto en Buenos Aires como en Sidney. Realmente fue un golpe de suerte para ambos. Ernesto no conocía Zurbarán y consultó con Marcelo Pacheco, quien había adquirido algunas obras, y con Raúl Alonso quien integraba nuestro staff. Ambos le manifestaron su alegría por mi interés y que no dudara en aceptar mi propuesta de ser nuestro artista exclusivo. Hoy los dos, luego de 26 años juntos, no podemos menos que alegrarnos de las felices coincidencias. Hemos realizado más de 50 exposiciones y expuesto más de 500 obras.

Ernesto junto a Rafael Squirru.

Bertani vuelve a exponer, luego de 6 años en Buenos Aires, 1991.

Ernesto en su taller de Ituzaingo.

Dos años después (1991), en ocasión de un almuerzo que realizamos con los artistas en una de las tantas Casa Foa, grande fue la alegría de Ernesto cuando me escuchó contarles a sus colegas presentes que el artista que había tenido mayor éxito en el año había sido Bertani. Sin duda que las buenas cosas que nos pasan son gracias al trabajo y creatividad de Ernesto y a la seducción que produce su obra entre nuestros clientes y amigos. Cuando concretamos nuestro acuerdo verbal de promocionar y manejar su obra, él me recuerda que le dije: “una vez que tengamos 300 obras bien colgadas, en buenos lugares y en buenas colecciones, habremos logrado consolidar tu obra y todo será mucho más fácil…” Esto resultó mucho antes de lo esperado. En menos de una década cumplimos con lo soñado y hoy, ante la capacidad creativa de Ernesto, es el único de nuestros artistas que exponemos anualmente. Sin duda es quizá el más trabajador y es feliz en su taller creando y poco afecto a venir al centro. Pero debo reconocer que con los años también se ha convertido en un buen socio de relaciones públicas y recibe a los coleccionistas tanto en Parque Leloir como en su estudio del barrio de Boedo, donde en una magníica casa podemos exhibir más de un centenar de sus obras realizadas a través de los últimos 30 años.

Ernesto y su familia junto a Gutiérrez Zaldívar en 1995.

Cuando visité por primera vez su taller del barrio de Balvanera, seleccioné unas 20 obras que eran mis preferidas y comencé a llamar a mis mejores clientes y a entusiasmarlos con su obra. Cuando ya me retiraba vi que había unas telas contra la pared, como si estuvieran “en penitencia”, y le pregunté por qué no me las había mostrado. Me dijo que eran un mero experimento y que no estaba aún entusiasmado con exponerlas. Igual me las mostró y el que sí se entusiasmó fui yo. Era una serie de pinturas en celeste y blanco, a la manera de banderas que había realizado a partir de su molestia por las privatizaciones que se estaban realizando y él lo manifestaba a través de esas pinturas que estaban arrugadas, deshilachadas, con roturas, quemaduras y hasta con manchas de sangre. Debo reconocer que fue lo que más me entusiasmó de su obra. Y así fue que también me las traje. Y cuando realicé su primera exposición en 1991 una de ellas fue la tapa del catálogo. En el prólogo lo comparé con Florencio Molina Campos: “Considero a Bertani un cronista de Buenos Aires de hoy, de la misma manera y con la misma vigencia que, en su momento y en su ámbito, lo fuera Don Florencio Molina Campos relejando la vida y las costumbres de nuestro campo. Y la analogía no es nada caprichosa. En ambos, el humor se maniiesta como el recurso solidario para mostrar hasta las situaciones más patéticas, crudas y dolorosas, aunque no por ello menos cotidianas.” Ernesto desenmascara en sus obras los mitos de la clase media de la gran ciudad. Ese culto por la apaciencia, ese apego por ciertas formalidades, como por ejemplo la ropa, que muchos llegan a estimar como una suerte de segunda piel. Desde aquél día, debo reconocer que Ernesto me tiene miedo… no me deja ir a su taller nada más que una vez al año, y allí me muestra su rica producción. No quiere que lo condicione ni

Ernesto en su muestra de 1992.

que le diga qué es lo que más me gusta de lo realizado en el año; sólo ese día puedo elegir, y generalmente la mitad de sus obras son expuestas y las otras son guardadas y quizá serán conocidas en las próximas décadas o en las muestras retrospectivas que hemos hecho o haremos de él. Cuando voy a Parque Leloir siempre me acompaña Margarita, mi mujer, y también Ignacio Jr., y es ya un clásico en nuestras vidas. Normalmente es en la primera semana de julio. En los primeros años coincidíamos con el artista en algunas de sus mejores obras, pero ya luego de 26 años, prácticamente coincidimos en casi todo. Al año siguiente (1992), vuelve a exponer. El prólogo lo escribió Fermín Fevre, quien analizaba: “Bertani al mismo tiempo que alude a la realidad relexiona sobre ella” y lo evidencia en recursos como “el cuadro dentro del cuadro”, los cambios de escala, la creación de distintos espacios dentro de una misma obra, el sentido escenográico… Es interesante ver como los críticos destacan el juego creativo que hace Ernesto a través del trompe l’oeil (engaña al ojo, en francés). Cuando pensamos que está pintando sobre un papel, lo está haciendo sobre un lienzo; y cuando creemos que ha pintados los fondos, los mismos son géneros o telas de tapicería. Esa ambigüedad y el humor ácido de su obra es una constante.

Naturaleza Muerta con Boceto acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 1992

En mayo una de sus obras integra la exposición “A Century of Argentine Art”, que organizamos en la prestigiosa Hammer Galleries de New York. La suerte nos sigue acompañando y ese mismo año (1992) recibe el consagratorio Primer Premio de Dibujo en el Salón Nacional. Quería el destino que yo que lo había conocido con sus obras en el Salón, lo pudiera acompañar para recibir uno de los premios que más alegría le brindó a Ernesto. Antes los premios eran sinónimo de algo de efectivo que entraba a sus escuálidas inanzas, hoy era el honor aquello que él valoraba. Al año siguiente, en 1993 es el brillante Nicolás Rubió quien escribe el prólogo de su exposición y dice: “Ernesto Bertani cuando pinta, habla en ‘bertani’, lengua ciudadana que se escribe en imágenes. Una lengua para contar la historia del hombre gris, sin rostro y metido dentro de un traje de casimir planchado.” Inteligentemente, ve como Ernesto en sus obras nos habla de una “segunda piel”, son los trajes para sus personajes de la city porteña o de tribunales. Es como que la vestimenta, el aspecto exterior es aquello que valoriza al prójimo. Los sacos, chalecos, corbatas nos hablan de gente “destacada”, es como la carta de presentación para poder trabajar o hacer negocios.

Enmarcado acrílico sobre casimir . 100 x 50 cm . 1997

Cruce de Brazos acrílico sobre casimir . 100 x 80 cm . 1997

Ese mismo año también llevamos su obra a Washington y otras seis ciudades norteamericanas, en una memorable exposición que acompañé con un libro en inglés titulado “23 Argentine Artists Now”. La presentación de la exposición y del libro fue en el Fondo Monetario Internacional. Inolvidable fue la inauguración. Luego de unas cálidas palabras de Michel Camdessus, el Director francés del FMI, llegó la hora de los agradecimientos, y como responsable de la exposición, fui el orador. A mis espaldas estaba una obra de Ernesto titulada “Sorry, no funds”, en la cual unos personajes metían las manos en los bolsillos ajenos; era como un llamado de Bertani a nuestros ministros de economía y al organismo para que no nos dieran más fondos, que no nos endeudaran más… A partir de ella manifesté que traíamos lo mejor de la Argentina que eran nuestros artistas, pero que desgraciadamente no traíamos fondos… Dicha obra fue adquirida por la institución y se encuentra en el despacho del Director.

Sorry, No Funds acrílico sobre casimir . 100 x 70 cm . 1993 . Colección F.M.I. , Washington, EE.UU.

También se interesó por las otras obras de Bertani, Katharine Graham, propietaria del diario The Washington Post, quien me invitó a su casa y me mostró su estupenda colección y el lugar donde estarían las obras de Bertani, junto a la cabeza de Madame Pogany, de Constantin Brancusi. Al año siguiente (1994) realiza una monumental obra de 6 paneles de 230 x 150 cm. La misma estaba a la entrada de la XX Feria del Libro de Buenos Aires. Y con sus 9 metros de ancho era el lugar escogido para todas las fotografías de los visitantes. A través de estas 6 obras Bertani relexiona sobre la importancia de la lectura, tanto para niños, jóvenes y adultos. Creo que es una de las obras más importantes de su trayectoria, aunque años después realizó obras de similares tamaños, obras épicas que cada vez que veo un museo de arte moderno en el exterior con sus estupendas salas, sueño el verlas allí.

Ignacio Gutiérrez Zaldívar y Ernesto Bertani junto a la monumental obra en La Feria del Libro.

Sinceramente creo que Bertani es uno de los grandes artistas contemporáneos en el mundo, y si no fuera por su poca vocación para viajar y por culpa mía que me encanta viajar, pero no trabajar en los viajes, hoy su obra estaría expuesta en los mayores museos del mundo. Ese mismo año Ernesto obtiene el Gran Premio Adquisición “Presidente de la Nación” en la sección Dibujo en el XXX Salón Nacional de Grabado y Dibujo 1994. En 1997 realizamos su primera retrospectiva en el Museo municipal Eduardo Sívori de la ciudad de Buenos Aires, en el Rosedal de Palermo. Fue una experiencia única para el artista ya que mantuvo contacto con miles de visitantes, realizó numerosas charlas y visitas guiadas y se dio el lujo de pintar en vivo y en directo.

El Encuentro técnica mixta . 120 x 150 cm Gran Premio Adquisición “Presidente de la Nación Argentina” XXX Salón Nacional de Grabado y Dibujo 1994. Patrimonio del Palacio Nacional de las Artes - Palais de Glace, Ministerio de Cultura de la Nación. Fotografía: gentileza Palais de Glace.

En 1998 retoma a las corbatas como el tema de sus obras. Estas habían nacido a partir de una insólita fotografía que había salido en la revista Gente, en la cual Raúl Lastiri, entonces Presidente de la Nación, tras la renuncia de Héctor Cámpora y Vicente Solano Lima en 1973, mostraba centenares de corbatas que tenía en el ropero de su casa. Ernesto y muchos otros quedamos “espantados” ante esta manifestación de frivolidad por parte de un político, que respondía a un cambio de costumbres en nuestra sociedad. Los empresarios y políticos mostraban su vida privada, su vida íntima. La característica de una vestimenta gris y opaca, ahora era cortada por la realidad de colores estridentes y dibujos en las corbatas, todo un símbolo de distinción en la nueva generación de funcionarios y personajes. Recuerda el artista: “Eran corbatas comunes, que todavía luchaban por imponerse a los moñitos que usaban los poetas. Con el tiempo fueron ganando protagonismo en la indumentaria masculina y también en mi obra. Creo que son lo contrario a la libertad, ajustan, aprietan, ahorcan, contienen...” Será por eso que Ernesto no usa corbata… En sus obras las corbatas adquieren y develan la personalidad de quien las usa: toma la forma del signo pesos en el ambicioso y del signo de pregunta en el inseguro. Y hasta se permite obviar al personaje y representarlo sólo por su corbata, y multiplicarlas en caóticas reuniones a la manera de ondulantes reptiles. Es una de las series más coloridas, con fuertes contrastes de colores saturados. Al año siguiente (1999) el amor y la relación de las parejas y el matrimonio se hacen presente en una muestra titulada “Un hombre y una mujer”, a la manera del famoso ilm del francés Claude Lelouch estrenado en 1966. Las parejas se miran, se seducen, se abrazan y se atraen. Ahí curiosamente vuelve el “engaña ojo”, nos hace pensar que son géneros y sus personajes están pintados. No llevan telas de confección, las ropas están pintadas sobre el lienzo.

Exceso acrílico sobre casimir . 100 x 70 cm . 1997 . Colección Privada

Las corbatas invaden sus casimires.

Escapadita acrílico sobre lienzo . 50 x 35 cm . 2000

Fervorosos acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 2000

El amor es una constante en su obra, ya que lo ve como un valor fundamental en la vida. Es el motor del mundo, uno lo busca y lo da; el hombre y la mujer (los humanos) se mueven por emociones… Las obras que presenta en Zurbarán en el año 2000 nos muestran numerosas iguras que forman remolinos, son sus parejas “arremolinadas”. Los rostros muy rara vez aparecen, son anónimos, no es nadie en particular y a la vez puede ser cualquiera de nosotros, quiere que el espectador se sienta parte de la obra. Relexionó Rafael Squirru sobre ellas: “Si hubiese que caliicar las pinturas de Ernesto Bertani que componen su última muestra, no vacilaría en emplear el caliicativo de eróticas. Tan sólo que en este caso el erotismo tiene la particularidad de mostrarnos a todos sus personajes totalmente vestidos al punto que, salvo en dos excepciones, no vemos un solo centímetro dedicado a la piel humana; y en esos dos casos apenas asoman envueltas en encajes unas discretas nalgas.” Bertani admira la prosa de Gabriel García Márquez y por eso su muestra del año 2002 se titula “El amor en tiempos de cólera”. Hay un cambio radical en la imagen de su obra. De los grises, blancos y tonos neutros que utilizaba, pasa a utilizar el color, como si la calidez del colombiano se lo exigiera. El Arte de los Argentinos generalmente son tonos grises, neutros y tranquilos. No hay estallido de color como podemos ver en el arte de América Latina. Esto se puede ver claramente en las ferias internacionales donde el color estalla cuando uno ve la obra de los centroamericanos, colombianos, venezolanos, y hasta en los brasileros; y cuando llegamos a la sección de artistas argentinos es como que hay una paz y serenidad y el color está ajeno. Además de García Márquez, yo creo que al ser el centro de su obra Pasión, de la serie Los Amantes, es que necesita del color, de la intensidad, de la pasión que se genera en los personajes de sus obras. Sin duda que el erotismo está presente en las mismas.

Ernesto, bajo la lente de Aldo Sessa.

Pasión acrílico sobre lienzo . 120 x 100 cm . 2000

La pareja, símbolo del amor, está hoy condicionada por la crisis pero cuando hay pasión hay un fuego que no se apaga y que es la fuerza vital que demuestra que la llama siempre está viva, como su serie de “encendidos”. Siempre está el contacto de las bocas, los besos que se multiplican y lotan amorosamente entre los protagonistas. Esta exposición me recordó una película que se llamaba “Cuerpos ardientes”, en la cual los físicos se conectan y hasta generan llamas en la relación pasional. Grande fue mi sorpresa cuando antes de la inauguración recibí el llamado de dos Arzobispos, que objetaban la exposición de la obra “Cruciicados”. Debo reconocer que nunca había visto nada objetable en ella, es más, era la obra que más me gustaba… Bertani no hacía referencia a nada religioso, sino a la cruciixión de la pareja en una época de crisis, en la cual se ve castigada por el entorno a veces alienante de la sociedad. Ese mismo año recibe el mayor premio que se otorga en la Argentina, que es el Gran Premio de Honor de Pintura en el Salón Nacional de Artes Visuales, por su obra “Beso profundo”. Durante todos estos años y en reiteradas ocasiones lo han invitado a Ernesto a participar en exposiciones en el exterior y concurrir a ellas. Siempre ha mandado obras pero no le gusta viajar, y no lo hace, ya que preiere estar en su casa-taller y no desconcentrarse con aviones, aeropuertos y relaciones públicas. Es una pena porque tanto en Estados Unidos como en Europa siempre han tenido interés en hacer exposiciones individuales de él, pero la presencia del artista es una condición sine qua non. Logramos convencerlo que fuera a Italia, donde participaba en el 53º Premio Bienal Michetti que se realizaba en Francavilla al Mare, a partir de mes de julio. Para convencerlo le dijimos que todos los que participaban eran más importantes que él y que no podía dejar de ir.

Cruciicados acrílico sobre lienzo . 150 x 100 cm . 2002

Beso de Profundo acrílico sobre lienzo . 200 x 140 cm . 2002 Gran Premio de Honor Salón Nacional de Artes Visuales 2002 Patrimonio del Palacio Nacional de las Artes - Palais de Glace, Ministerio de Cultura de la Nación | Fotografía: gentileza Palais de Glace.

Participaban Juan Carlos Distéfano, Julio Le Parc, Marta Minujín, Luis Felipe Noé, Miguel Ocampo, Rogelio Polesello, Mario Pucciarelli, Alejandro Puente, Joseina Robirosa, Guillermo Roux y Antonio Seguí, entre otros. Otro joven que había sido invitado era el recién incorporado a Zurbarán Enrique Burone Risso. Bertani presentó allí obras sobre géneros y coloridas corbatas que generaron interés por su obra. Ernesto recuerda con alegría dicho viaje y curiosas anécdotas con Marta Minujín y otros de sus colegas. También la alegría de ver sus obras expuestas junto a “capo lavoros” de Lucio Fontana, el rosarino que todo el mundo considera “artista italiano nacido en Santa Fe”. La muestra del siguiente año es claramente optimista. Luego de la crisis del 2001/2002 siente que hay un renacer. Luego de tiempos inciertos y dramáticos pareciera que “siempre que llovió paró”. La obra de Ernesto me parece a mí que simplemente maniiesta sus sentimientos en un momento dado. Lo veo como un cronista de su época. Sus obras maniiestan su sentir en un momento dado y utiliza un “realismo mágico” para manifestar sus sentimientos y su forma de ver la realidad. A ningún artista le gusta que lo encasillen en un movimiento plástico. Cuando le dicen a Bertani que es hiperrealista, se equivocan, ya que dicho movimiento busca trabajar a partir de la fotografía y en un principio engaña al observador que piensa que está viendo una foto y

no una obra pintada. Cuando le dicen que es surrealista, también están cayendo en un lugar común; su obra es racional y no busca manifestar lo onírico, el inconsciente o sus sueños. Sin duda que a partir del realismo nos trasmite sus sentimientos e ideas, no se ata a un modelo real, pero lo distorsiona para potenciar su imagen y llegar con más eicacia al espectador. Es por ello que el termino REALISMO MÁGICO es quizás el que mejor se ajusta a la totalidad de su obra. En su exposición del 2003 sus obras nos muestran parejas que se besan, se acercan, es como si estuvieran “fundidas” entre sí. Hasta aparecen rostros, algo que hacía dos décadas que no estaban en su obra. Es como que la sociedad ya no se esconde, ya “da la cara”. Hace 20 años eran caras tristes, censuradas, tortuosas, violentas, como la sociedad en que vivíamos. Pero en esta muestra hay color y hay alegría. Una de las obras, titulada “¿Hay Primavera?”, es un deseo, una esperanza de que todo lorezca, de que todo sea mejor.

¿Hay Primavera? acrílico sobre género . 200 x 140 cm . 2003 . Colección Privada

Como siempre, el hombre y la mujer son los protagonistas de sus obras, y aparece por primera vez los géneros de tapicería, producto también de una casualidad. Cuando fue a su proveedor habitual a elegir géneros Príncipe de Gales, u Ojo de Perdiz, se enamoró de unos géneros de tapicería estampados, alegres y brillantes, y comenzó a trabajar con ellos y los expuso por primera vez. Al año siguiente (2004) toda su obra está realizada sobre telas de tapicería. Tituló su exposición de ese año “Colección Primavera – Verano”, como si fuera la presentación de una colección de un modisto y un desile. Curiosamente los hombres de la city no abandonan el saco y la corbata, no hay estaciones para ellos. Pero las mujeres se deshacen de los abrigos, y los escotes y las siluetas con telas livianas inundan Buenos Aires y acentúan su sensualidad. La sensualidad femenina es lo primero que se destaca y los vientres de las mujeres tienen forma de corazón como símbolo de la fecundidad y la capacidad de contención de la mujer.

El Bouquet acrílico sobre género . 100 x 120 cm . 2004

Decó acrílico sobre género . 100 x 120 cm . 2005 . Colección Privada

El Ramillete acrílico sobre género . 100 x 150 cm . 2004

En el año 2005 habíamos convencido a Roberto Sánchez (Sandro) que escribiera el prólogo de la exposición de Ernesto, ya que la misma estaba integrada por telas en las cuales las

rosas eran el motivo central. Desgraciadamente nuestro romántico y querido amigo no pudo hacerlo debido a su salud, pero la muestra fue titulada “Rosa-Rosa” en su honor. Ernesto nos contaba: “Y de pronto, todo loreció en Buenos Aires… con lores que nunca se marchitan, como esos amores que se prometen eternos… con ramos, ocultando besos que no se ven, caricias que no se concretan, miradas que se pierden, perfumes que no se huelen. Florecieron sillones, cortinas, cuadros, vestidos, empapelados… buscando una armonía ‘compossé’, decorada, de icción. Y los porteños, ‘sin arreglo’, jugando a la naturaleza, desde el sillón de la sala ‘arreglada’ como en una revista Decó, para las visitas…”

Rosita acrílico sobre género . 70 x 50 cm . 2005

Mirada Compartida acrílico sobre lienzo . 70 x 50 cm . 2003 . Colección Privada

Acertadamente Eduardo Villar realiza una crítica en la que nos maniiesta que pese a los cambios: “Bertani sigue siendo Bertani.” Y para el brillante Alfredo Serra la sensación es que las lores y las hojas se comen a los personajes como si fueran plantas carnívoras… Creo que esta muestra fue la apología de Bertani a la clase media, a los ambientes de su infancia. Es su recuerdo de la casa de Villa Devoto, con el living o sala inmaculado esperando la llegada de visitas, y ahí no podían jugar los chicos. Festejando quince años de trabajo en conjunto, para la exposición del 2006 necesitó de dos salas para mostrar las 28 obras. En ellas se entabla un juego en el cual el observador se incorpora a las mismas, transformándose en el protagonista. En los fondos se ve como retoma el trabajo con pincel, espátula y mucha materia a la manera de un artista abstracto que se contrapone con el exacerbado dibujo de las iguras, que somos nosotros contemplando sus obras. Los espectadores se convierten en los protagonistas dentro del cuadro. Es la mujer aquella que recibe el homenaje de Bertani en su siguiente exposición (en 2007). La vestimenta y la moda no sólo cambian por razones comerciales, sino también se convierten en un relejo de la personalidad de quien la lleva. Por eso con humor Bertani nos habla de esas mujeres que parecen de piedra y que son de difícil acceso, o aquellas que se engalanan de dorado y nos seducen con algo de oropel. Qué hablar de las ‘”iesteras”, para las cuales las estrellas están a la orden del día; las pasionales que parecen como encendidas; las seductoras y perfumadas y por qué no aquellas que parecen ambiguas, con cuerpo de mujer y ropa de hombre. Pero la mujer siempre lorece, siempre parece “primaveral”, el romanticismo está a la orden del día y Bertani lo maniiesta con su “Corazón de Arco Iris”. 42

El hombre de Buenos Aires vuelva a participar en las obras que realiza en el 2008, pero es la mujer la que domina la imagen. En sus obras “Venus del Plata” y “Sirenas y tiburones”, ellas a la manera de Boticelli son las protagonistas y a sus pies se rinde el hombre, representado por solapas, que acarician sus tobillos. Ese mismo año se presenta una gran retrospectiva con ochenta obras, en el Teatro Argentino de La Plata, gracias al auspicio de Laboratorios Bagó. Fue una gran alegría ver como el público platense conocía y admiraba la obra de Bertani. El gran espacio permitió la colocación de obras de hasta ocho metros de largo y fue una experiencia memorable, ya que el autor jamás las había visto desplegadas, ni siquiera cuando las realizó, ya que su taller no le permite contemplarlas en su totalidad. La gran muestra se repitió al año siguiente (2009) en el Museo Municipal de Bellas Artes de Tandil, y en el de Junín.

El Enrosque acrílico sobre género . 100 x 50 cm 2007

Venus del Plata acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm 2008

Corazón de Arco Iris acrílico sobre lienzo . 100 x 150 cm 2007

Sirenas y Tiburones acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm 2008

Pelo Sintético acrílico sobre lienzo . 60 x 30 cm . 2005

Tatoo acrílico sobre género . 100 x 50 cm . 2004

Rollinga Stone acrílico sobre género . 100 x 50 cm . 2005

El lápiz, símbolo de la creación, vuelve como protagonista de sus obras en la exposición del año 2009. En algunas de ellas pareciera que el caos se apodera de la imagen, pero no es así. Pienso que ante la saturación de información el hombre se propone una tormenta de ideas, que luego se canaliza en aquello que perdura en el imaginario de la sociedad. El romanticismo también está presente; como lo demuestra su obra “Colores luidos”. A veces las ideas se contradicen con las necesidades, y toman direcciones opuestas, como ocurre en “Doble mano”. En otras los colores simbólicos del “bien” y del “mal” se entrelazan equilibradamente. Ojalá todos fuéramos un “Remolino de ideas” o una “Lluvia creativa”, como se maniiesta en cada una de las obras de Bertani. Memorable fue la muestra de la Sala Cronopios del Centro Cultural Recoleta en el verano 2009/2010. Más de cien mil personas la visitaron y sin duda debe haber sido el mejor montaje de una de sus exposiciones. Como en sus obras, nosotros los visitantes éramos pequeños personajes conmovidos ante la majestuosidad de sus mega-lienzos. Fue una gran satisfacción poder ver una decena de sus gigantes obras que nos recibían en el Centro. “Siempre me interesó sacar de escala a mis personajes, para potenciar esas imágenes y generar mayor presencia ante el espectador.” El año del Bicentenario (2010), algunos de sus lápices pierden la punta, ya no son símbolos de creatividad, sino de una maraña de nudos que nos impiden evolucionar. También es un momento de cuestionamientos y los símbolos de interrogación lo maniiestan. Luego de décadas expone también coloridos dibujos sobre papel, donde fusiona y genera el maridaje entre el soporte adecuado y el instrumento correcto.

Doble Mano acrílico sobre lienzo . 100 x 70 cm . 2008

El Bien y el Mal acrílico sobre lienzo . 100 x 50 cm . 2009

Remolino de Ideas acrílico sobre lienzo . 100 x 50 cm . 2008

Lluvia Creativa acrílico sobre lienzo . 100 x 50 cm . 2008

Colores Fluidos acrílico sobre lienzo . 120 x 100 cm . 2009

Enredándose acrílico sobre lienzo . 120 x 80 cm . 2010

Seguir la Corriente acrílico sobre lienzo . 80 x 120 cm . 2010

El escultor, el que trabaja tres dimensiones se presenta al año siguiente (2011), sin abandonar al lápiz que ahora cobra volumen, y genera formas femeninas diseñadas por algún cirujano de turno… También el lápiz atraviesa el lienzo y sublimando su vocación de “trompe l’oeil”, se conjugan lápices reales con otros creados o imaginados por el artista. Sus esculturas las realiza con resinas y parte, en algunos casos, de maniquíes que se utilizan en la moda y los interviene generando mujeres llenas de abundancia siliconadas como “Alimonada”, son mujeres para ser exhibidas y admiradas y que nos llaman la atención.

Alimonada resina poliester . 75 x 30 x 28 cm . 2012

Arco Iris . madera y acrílico sobre lienzo . 30 x 60 x 5 cm . 2011

Adoquín . resina poliester . 43 x 75 x 53 cm . 2012

Con Bertani tenemos diferencias en como presentar sus exposiciones. A él le interesa mostrar diferentes temas y técnicas y a mí me seduce más la unidad. El Blanco y Negro se hacen presente en sus últimas obras. A la manera de presidiarios, sus personas están atrapadas por sus conlictos y el medio ambiente que los rodea. Una obra que resume sus inquietudes es “A Rayas”, donde aparecen los señores que nos meten las manos en los bolsillos y en este caso son argentinos, ya que es el celeste y blanco el que corta las rayas blanco y negro. También comienza una serie de “entramados” como una aspiración a reconstruir aquello que se ha perdido de unión en la sociedad.

A Rayas . acrílico sobre lienzo . 100 x 150 cm . 2013

S US S ERIES

M UJERES

Una mujer debe ser seductora, coqueta y ardiente, debe darse al amor… Cuando veo a las mujeres de Bertani siempre me acuerdo de los versos de dicha canción. Ernesto es un fanático de la mujer y disfruta de su crecimiento social y del lugar que ocupa actualmente. Se fastidia cuando las modas y la cirugías la llevan a uniformarse y perder su individualidad. La ve como lo sólido de una pareja y el sostén de la misma. Ellas son llamativas y contundentes, lucen gasas, tules y seductoras vestimentas, el corazón siempre está presente en ellas. Cuando su mujer estaba embarazada en 1985 realiza una serie sobre la maternidad, luego en los noventa, dejan de ser los rostros el símbolo de lo femenino, y en la publicidad y los medios son las colas y los pechos con siliconas mediante, el objeto del deseo. Bertani capta este cambio y lo enmarca en sus obras, pasan a ser retratos contemporáneos, donde el rostro pasa a un segundo plano o bien desaparece. La ropa interior, en encajes destacan la seducción corporal. Su crítica a la presunta calidad estética de las cirugías lo llevan a generar seres con múltiples pechos, y el daño en la piel se traduce en tatuajes deinitivos que con seguridad la moda los hara efímeros. Una serie de obras del mismo formato realizadas a partir del 2004, nos muestran las diferentes personalidades de las féminas, a través de vestimentas originales como un vestido de rocas, las lentejuelas doradas, el loreados de generos de tapicería. Luego se ocupa de la pasión y de sus mujeres ardientes y también la relación de ellas con el dinero. A falta de hija mujer, ahora su nieta cumple la tarea de recrear nuevas visiones femeninas.

Obra reproducida en Apertura de Mujeres Curvas Peligrosas . acrílico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 2010

Evita . acrílico sobre lienzo . 35 x 50 cm . 1996

Pancita . acrílico sobre encaje . 95 x 55 cm . 1981

Noche Dorada acrílico, oro y gasa . 100 x 50 cm . 1998

Maternidad III . acrílico sobre lienzo . 80 x 120 cm . 1985

Panzola acrílico sobre género . 100 x 70 cm . 2004

Corazoncito acrĂlico sobre gasa . 50 x 35 cm . 1996

Tímida acrílico sobre género . 100 x 50 cm . 2004

Perfumada acrílico sobre género . 100 x 50 cm . 2005

Canastita acrílico sobre género . 100 x 50 cm . 2005

La Pintora acrílico sobre género . 100 x 50 cm . 2004 Colección Privada

Todo Color acrĂlico sobre lienzo . 100 x 50 cm . 2007

El Eje acrĂlico sobre lienzo . 100 x 70 cm . 2007

Maja Paisaje . acrĂlico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 2007

Dudando acrĂlico sobre lienzo . 100 x 60 cm . 2009

Beso Peso acrĂlico sobre lienzo . 100 x 70 cm . 2010

H OMBRES

Bertani se ocupa del porteño del centro, del hombre preocupado por su imagen y no tanto por su contenido. Creo que representa como nadie al porteño, individualista, pretencioso, soberbio, ”canchero” y el que se siente más “vivo” que su prójimo. En 1991 trabaja en lienzos como si fueran papeles, frágiles siluetas de gente desaprecida y de hombres que están “dibujando“ su futuro, saliendo del fondo ajado y arrugado, como en su obra “El diseñador”. La tecnología también es abordada como un cambio de hábitos y costumbres y realizó una serie donde confronta al libro con la computadora. El hombre de inales de los noventa, parece ajeno al prójimo, se encierra en sí mismo y se imposibilita de generar cosas con terceros. El humor se hace presente en hombres formales que en sus rostros maniiestan sus intereses como en “El Picarón” y “El Celoso”. A la manera de un Archimboldo moderno, Bertani nos cambia el panorama y aparecen colores optimistas en “El creativo”, la relación del hombre con el dinero está también presente y siento como una apología del inventor su obra “Al abrigo de su Luz”, donde pareciera que a su hombre “se le prendió la lamparita”. El hombre pensante se hace preguntas y Bertani las releja en sus simpáticos retratos. En los últimos años aparece la idea de equipo, de hombres entramados para buenas y malas causas, algunos son coloridos y otros nos recuerdan las cárceles donde deberían estar.

Obra reproducida en Apertura de Hombres Pabellón . acrílico sobre lienzo . 150 x 200 cm . 2014

Ausente acrílico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 1991

El Diseñador acrílico y lápiz sobre lienzo . 100 x 80 cm . 1996

Doble Identidad acrílico sobre lienzo . 120 x 100 cm . 1996

El Celoso acrílico sobre casimir . 100 x 50 cm . 1996

Ausente II acrílico sobre lienzo . 30 x 24 cm . 1991

El Picarón acrílico sobre casimir . 100 x 50 cm . 2008 . Colección Privada

El Creativo acrílico sobre lienzo . 100 x 50 cm . 2008

Sin Luz acrílico sobre lienzo . 200 x 150 cm . 2004

Preguntando acrílico sobre lienzo . 100 x 60 cm . 2009

Al Abrigo de su Luz acrílico sobre lienzo . 100 x 60 cm . 2009

Capitalismo Salvaje acrĂlico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 2009

Pesos y Medidas acrĂlico sobre lienzo . 100 x 70 cm . 2010

Rayados y Trenzados acrĂlico sobre lienzo . 150 x 200 cm . 2014

C ASIMIRES

A veces la necesidad nos lleva por caminos de gloria, eso es lo que me produce la historia de los casimires de Ernesto. Desde chico jugaba en Villa Devoto frente a su casa y la sastrería de Don Marcos, quien recibía con alegría a los jóvenes ya que él no tenía hijos. Bertani soñaba con los muestrarios de géneros y eran su atracción en el local. Recibía de regalo algunos retazos y quiso el destino, o como decía el genial Federico Peralta Ramos: “Dios dirige el tráico”, que cuando Ernesto tenía 30 años y quería pintar pero no tenía lienzos, rescató uno de estos generos y quiso pintarlo de blanco y convertilo en lienzo, pero en el proceso “descubrió” que el noble material era un aporte a su dibujo y a su obra. Así de forma casual nacen sus famosos CASIMIRES. Los primeros fueron intervenidos con óleo, que no era el medio adecuado, luego de varias frustraciones llegaron el acrílico y el aerógrafo que dieron personalidad a la serie. Sobre franela gris (que me hace acordar a los pantalones que usábamos en el Colegio Champagnat), dibujaba con lápiz y aplicaba hilos y agujas, siempre tomando el sector de la bragueta, como desaiando al espectador a mirar aquello que por pudor no se miraba. Eran siempre pequeños géneros, entusiasmado compra una pieza grande y dos años después realiza “liquidación Otoño-Invierno” en 1982, donde ya son una decena de cuerpos apilados en tonos bajos y pequeños lápices que guían a la mirada. La mujer aparece en la serie “Solaponchas”, donde el contorno femenino es a la manera de solapas masculinas.También experimenta romper el formato rectangular de las obras y aparece el típico “trompe l’oeil” que será una constante en su obras, son sacos, abrigos y sillones que se corporizan. El hombre de la city también comienza a ser su sujeto con sus chalecos y su “segunda piel”. La crisis económica la maniiesta con “Confusión en la City” y aparecen por primera vez sus corbatas que simbolizan el mundo inanciero. El color recién aparece una década después a manera de paisaje surreal donde el hombre urbano aparece aislado del mundo rural que simboliza el paisaje. El hombre “poderoso” se ve relejado en

Obra reproducida en Apertura de Casimires Sacos con Lápices . acrílico sobre casimir . 115 x 151 cm . 1991

su propio retrato que se continúa en el sillón en el cual recibe a sus subordinados. La ecología se hace presente en una de mis obras preferidas, “Homo”, en ella nos muestra un Arbol que ve que su cuerpo se va desgranando en fósforos, y es el hombre que lo representa, quien lo quema y destruye. El campo y el hombre urbano vuelven a aparecer en un homenaje a Molina Campos, el típico “tramonto “ del horizonte se hace presente. “Un marido maravilloso” es el irónico título de una de sus obras, donde el hombre poderoso somete a la frágil mujer. También realiza algunas obras con temática gastronómica, a pedido del Gato Dumas, y los almuerzos de negocios hacen que los lápices se conviertan en tenedores, objeto que fue creado por Leonardo Da Vinci. Preocupado Ernesto porque no dejo de fumar, realizó algunas obras donde me muestra el deterioro que me hace el vicio. El tema del vino es también abarcado por el autor y en “Descorchando” nos muestra el maridaje perfecto entre el tirabuzón y el corcho. Espero ansiosamente que Bertani vuelva sobre los generos y nos brinde esa personal y lúcida visión del hombre porteño.

Un Marido Maravilloso acrílico sobre casimir . 100 x 120 cm . 1996

Saco acrílico y tweed sobre aglomerado . 100 x 80 cm . 1983

Virilidad acrílico sobre casimir . 100 x 70 cm . 1988 . Colección Privada

Confusión en la City acrílico sobre casimir . 100 x 120 cm . 1989

Homo acrĂlico sobre casimir . 150 x 120 cm . 1993

La Marca acrĂlico sobre casimir . 100 x 120 cm . 1996

Todo un Señor acrílico sobre casimir . 100 x 120 cm . 1992

Mientras Fumo acrílico sobre casimir . 60 x 40 cm . 1997

Descorchando acrílico sobre casimir . 100 x 120 cm . 2006

Almuerzo de Negocios acrílico sobre casimir . 100 x 120 cm . 1997 . Colección Privada

P AREJAS

Para Ernesto el mundo avanza porque los hombres y mujeres funcionan como un equipo y es el amor el mejor vínculo entre ellos. Se complementan y se encuentran, ya sea de manera estable como en el matrimonio o casualmente como los amantes. Hace más de tres décadas que están presentes en sus obras, ya sea en géneros como en presuntos papeles arrugados. Uno necesita del otro como podemos ver en “Cebándole el mate”. También con los años nos mimetizamos y Ernesto lo maniiesta, como en “Aniversario”. La intimidad está presente en sus parejas que están cubiertas por frazadas, pero marcando su presencia como si fuera un bajorelieve. La pasión se maniiesta con el fuego que está en el contorno de los cuerpos. También el encuentro de las personas, que se eligen mágicamente pese a las multitudes que habitan las ciudades, es una constante en la obra de Bertani. Algunas de sus obras parecen ilustraciones de algún bolero, como en “Beso de Fuego”, que pareciera que fuera la última vez… En otros es el tango el que motiva, como en “Encendidos”. La mayor unión la veo en sus obras con géneros de tapicería para las mujeres que se prolongan en el traje del hombre. La maternidad está presente en sus obras donde el hombre protege y cuida amorosamente el vientre de las féminas. En otros casos, con un sano humor, nos muestra el “Macho porteño” que supone que atrapa a la señorita y realmente es él quien estará atrapado y sin salida. La armonía del matrimonio se ve manifestada magistralmente en “Colores luidos”. La razón, la emoción y la pasión se ven conluir en el ida y vuelta que forma un arcoíris-corazón, que habla a las claras de una perfecta fusión de la pareja. La capacidad de seducción de la mujer se hace presente en muchas de sus obras, pareciera que son ellas las que “tienen la manija”... El contacto de las parejas es permanente en su obra, sus parejas dialogan.

Obra reproducida en Apertura de Parejas Verdolaga . acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 2006

El Beso acrĂlico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 1992

Besos de Papel acrĂlico sobre lienzo . 100 x 73 cm . 1993

Serie Matrimonio acrílico y encaje sobre casimir . 90 x 110 cm . 1980

Aniversario acrílico sobre casimir . 130 x 100 cm . 1997 . Colección Privada

Cebándole el Mate acrílico sobre casimir . 200 x 120 cm . 1994

Romance Frondoso acrílico sobre lienzo . 120 x 100 cm . 1992

Bodas de Plata acrílico y plata sobre lienzo . 180 x 100 cm . 1998

La Visita acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 2002

Encendidos acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 2002

Beso de Fuego acrílico sobre lienzo . 30 x 24 cm . 2001 . Colección Privada

Línea de Fuego acrílico sobre lienzo . 100 x 150 cm . 2002

Fuego Vertical acrílico sobre lienzo . 100 x 50 cm . 2002 . Colección Privada

Azul Fuego acrĂlico sobre lienzo . 150 x 100 cm . 2003 . ColecciĂłn Privada

Perfume de Mujer acrílico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 2004

El Encuentro acrílico sobre lienzo . 120 x 150 cm . 2001 . Colección Privada

La Venganza acrílico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 2004

Te Llevo Bajo mi Piel acrílico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 2005

Primavera Verano acrílico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 2004

El Corbatón acrílico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 2004 . Colección Privada

Ambigua acrílico sobre género . 100 x 50 cm . 2004

El Abrigo acrílico sobre género . 100 x 70 cm . 2004

Cielo en Flor acrílico sobre género . 100 x 70 cm . 2004

Acunando acrílico sobre género . 100 x 70 cm . 2004

Sin Límites acrílico sobre género . 70 x 50 cm . 2004

Uno para el Otro acrílico sobre género . 100 x 120 cm . 2005 . Colección Privada

Haciendo Juego acrílico sobre género . 70 x 100 cm . 2005

Falda Florecida acrílico sobre género . 70 x 100 cm . 2007

Sin Salida acrílico sobre género . 100 x 120 cm . 2005

Retratango acrílico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 2006

Acosador acrílico sobre lienzo . 100 x 70 cm . 2012

Mellizas acrílico y resina 95 x 108 cm . 2013

Enfranjados acrĂlico sobre lienzo . 100 x 70 cm . 2015

Ondas acrĂlico sobre lienzo . 100 x 70 cm . 2015

Engrisados acrĂlico sobre lienzo . 100 x 70 cm . 2015

L ÁPICES

No recuerda Ernesto que edad tenía cuando comenzó a dibujar, pero piensa que sería cuando contaba 3 años y utilizaba los lápices y tizas que tenía su hermano mayor. Eran los comics y las historietas el modelo a seguir. Ya de adolescente recuerda a los parientes que viajaban y le traían aquellas fabulosas latas con lápices Caran D’Ache. Por lo tanto sus primeros trabajos no fueron pinturas sino dibujos e incluso era aquello lo que tenía mayor éxito en sus comienzos. Era su forma natural de expresión y sus admiradores le adquirían dibujos. Curiosamente su maestro, Víctor Chab, lo lleva a dedicarse más a la pintura y ya vemos en la década del setenta que muestra sus primeras pinturas al óleo. Años después descubre el acrílico y el aerógrafo y cambia su forma de expresión, pero manteniendo al lápiz como símbolo de origen de la creación plástica. Cuando la guerra de las Malvinas, los mismos se convierten en misiles, ya no son origen de creación, sino de destrucción. Poco afecto a pintar rostros, los lápices en la última década sirven también como símbolos de sus personajes. Así “El creativo” es representado por una decena de ellos de varios colores, y ante la cantidad de ideas se convierten en un “remolino”. Luego se convierten en lápices autónomos, carentes de iguras y así aparecen los caóticos “Nidos de Ideas” y hasta el remanso de los ríos de lápices que luyen con la corriente del mismo. Hasta brotando en lápices son “Como yuyos”. Finalmente los lápices cobran tridimensionalidad y los utiliza junto con el lienzo, saliendo y entrando en el mismo, dejando su huella en la tela. El lápiz es el símbolo perfecto de la creación, no es necesario ser un artista para expresarse a través de él. Cualquiera de nosotros lo utilizamos para manifestarnos ya sea a través de la escritura o a través del dibujo, pero algunos pocos pueden llevarlo a la categoría de Bellas Artes. Algunas obras me recuerdan a Arcimboldo, aquel genial artista que construía rostros con verduras, animales y lores, Bertani va directo y nos coloca lápices.

Obra reproducida en Apertura de Lápices Como Yuyos . acrílico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 2011

El Creativo acrĂlico sobre lienzo . 100 x 70 cm . 2008

Sólo Lápices acrílico sobre casimir . 90 x 109 cm . 1984

Misil Amarillo acrílico sobre casimir . 100 x 120 cm . 1982

100

Nido de Ideas acrĂlico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 2009

101

Creativa acrílico sobre lienzo . 110 x 60 cm . 2009

Pinturita acrílico sobre casimir . 100 x 50 cm . 2008

102

Creativos acrílico sobre lienzo . 120 x 100 cm . 2008

A Toda Luz acrílico sobre lienzo . 120 x 80 cm . 2010

De CorazĂłn acrĂlico sobre lienzo . 100 x 80 cm . 2009

103

Ideas Enredadas acrĂlico sobre lienzo . 80 x 50 cm . 2009

104

Enjambre de Ideas acrĂlico sobre lienzo . 80 x 50 cm . 2009

105

Enredado acrílico, lienzo y madera . 35 x 50 x 5 cm . 2011

Fábrica de Lápices acrílico, lienzo y madera 50 x 30 x 5 cm . 2011

106

Big Bang acrĂlico sobre lienzo . 150 x 200 cm . 2010

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B ANDERAS

Los símbolos patrios, son como “sagrados” y por lo tanto están ajenos a su utilización fuera de ceremonial y protocolo. Sólo recuerdo su uso plástico en el artista americano Jasper Jhons. Bertani aplicaba el celeste y blanco para darle nacionalidad a sus personajes. Siempre buscando nuevas formas de expresión, a principios de los noventa comienza una serie de la cual no estaba muy convencido, pero mi entusiasmo por la misma nos llevó a exponerla y tener una amplia adhesión por parte de los coleccionistas, que suelen colocarlas no sólo en sus casas, sino también en sus oicinas. Algunas de fusión de dos banderas como la española y argentina, titulada “Hermanados” se encuentran en la Embajada de España. Como Bertani sólo representa sus sentimientos, las mismas varían en su imagen de acuerdo a los vaivenes de nuestro país. Así algunas están arrugadas, por las barbaridades que cometemos, otras están manchadas de sangre. Pero también están las que relejan su ilusión de unidad y de esperanza en nuestro futuro, y son cintas que se entrelazan y que forman una red patriótica difícil de ser vulnerada. Cuando no, también los lápices integran sus banderas celestes y blancas, manifestando su optimismo en reconstruir nuestro símbolo luego de la crisis de comienzos del siglo XXI. Un lugar especial tienen sus “Árboles”, que se integran como las raíces de nuestra identidad, formada por los colores de sus abuelos italianos, franceses y españoles. En ellas la copa de los árboles se convierten en cintas argentinas, que provienen de nuestros antepasados europeos.

Obra reproducida en Apertura de Banderas Tejiendo . acrílico sobre lienzo . 100 x 150 cm . 2013 . Colección Privada

Al Gran Pueblo Argentino acrĂlico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 1990

Hermanados acrĂlico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 1991

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Árbol Familiar acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 1997 . Colección Oviedo

Los Frutos acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 1997

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Árbol Porteño acrílico sobre casimir . 120 x 100 cm . 1998

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Bandelápices II acrílico sobre lienzo . 80 x 100 cm . 2009

Crepúsculo acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 1993

Bandelápices III acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 2010

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Nudorigen acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 2014 . Colección Privada

Chorreante acrílico, resina y madera 49 x 48 cm . 2013

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C ORBATAS

El término deriva del italiano “crovatta” y del francés “cravate” y signiica “propio de Croacia”. Los reyes franceses en el Siglo XVII contrataban mercenarios croatas que llevaban en el cuello un pañuelo que, cuenta la leyenda, se los daban sus mujeres como recuerdo de su amor a ellos. Bertani lo comienza a utilizar como recurso plástico, siendo el símbolo del hombre urbano. Maniiesta elegancia y prestigio y su uso hasta hace pocos años era casi obligatorio en eventos formales y hasta en los tribunales de justicia. Curiosamente Ernesto nunca la utiliza, es como su rechazo a las normas protocolares. A partir de 1996 se convierten en protagonistas de sus obras. Enroscadas y anudadas nos maniiestan las autolimitaciones de sus personajes, que desaparecen del lienzo, pero que están presentes sin duda alguna. Bertani se interesó en las mismas, ante la importancia que cobraron en la época y su cambio de diseño y colores estridentes. En sus obras parece que las mismas son el símbolo de conianza y de auto-valor de los personajes que las utilizan, e incluso las mismas invaden la tela y son el símbolo de ostentación de una generación de políticos y empresarios. También las mujeres son atrapadas por las corbatas masculinas, a manera de momias modernas. Hasta el hombre pierde su rostro y pasa a ser la corbata enroscada él mismo, como ocurre en “Al solcito”, obra extraordinaria de esta serie. La ambición de llegar a ser “alguien”, simbolizada por las corbatas, está presente en “Árbol”. “El Corbatero” remite a la absurda ostentación de uno de nuestros olvidables presidentes. Y el ganador mediático está representado en “El triunfador”.

Obra reproducida en Apertura de Corbatas Todo un Estilo . acrílico sobre lienzo . 150 x 200 cm . 2001

Al Solcito acrĂlico sobre casimir . 200 x 150 cm . 1997

119

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Nudo Rojo acrílico sobre lienzo . 40 x 30 cm . 1996

Nudo acrílico sobre lienzo . 40 x 30 cm . 1996

Nudo Verde acrílico sobre lienzo . 40 x 30 cm . 1996

Nudo Morado acrílico sobre lienzo . 40 x 30 cm . 1996

Trepando acrĂlico sobre casimir . 100 x 70 cm . 1997

121

Entramado acrílico sobre casimir . 100 x 120 cm . 1997

El Triunfador acrílico sobre lienzo . 100 x 150 cm . 2001 . Colección Privada

122

Ă rbol acrĂlico sobre casimir . 200 x 150 cm . 1998

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Zona Bancaria

acrĂlico y resina . 58 x 85 cm . 2013

Periles acrĂlico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 2003

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El Corbatero acrĂlico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 2001 . ColecciĂłn Privada

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BUENOS AIRES

Es Rafael Squirru quien ha deinido, como valor de importancia en nuestro Arte, la Escuela de Buenos Aires. Bertani es puntal de la misma y no se preocupa cuando le dicen que es un artista porteño. Él maniiesta sus vivencias, y las mismas están vinculadas a su ciudad. Desde las milongas y bailongos que creara hace ya 25 años, hasta su representación de la clase media de los últimos trabajos. Hace unos años, siendo Fernando de la Rúa alcalde de Buenos Aires, me convocó a seleccionar un símbolo de la ciudad. Yo hubiera querido que una obra como “Buenos Aires” de Bertani fuera el mismo, ya que el obelisco, los géneros grises, el buzón y el bandoneón me parecían lo más típico de la ciudad, pero no pudo ser porque había que respetar el escudo original con navíos de los fundadores y la protección del Espíritu Santo. Nada más porteño que el tango, y con su juego de trompe l’oeil está presente en “El baile”, donde el bailarín parece corporizarse desde el fondo de la escena. Tan porteño es el obelisco que se convierte en el rostro del ciudadano y en el personaje de la obra. Luego vienen las parejas bailando con optimistas colores, como saliendo del gris porteño y reconociendo la integración de la ciudad con Latinoamérica. El tango era bailado entre hombres, pero siempre pensaban en las féminas como en la obra “Practitango”. Y la pasión de la danza también cobra fuerza con las llamaradas de los contornos de sus cuerpos.

Obra reproducida en Apertura de Buenos Aires Milongueros . acrílico sobre lienzo . 120 x 150 cm . 2003

El Baile acrĂlico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 1995

Bailongo acrĂlico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 1991

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Porteño y Ganador acrílico sobre paño . 160 x 122 cm . 1989 . Colección Privada

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Buenos Aires, Julio 95 acrĂlico sobre casimir . 150 x 120 cm . 1995

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Serie Obelisco III, Atardecer Porteño acrílico sobre casimir . 100 x 50 cm . 1997

Porteño al Fin acrílico sobre lienzo . 120 x 35 cm . 1997

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Contraluz Porteño acrílico sobre casimir . 100 x 50 cm . 1997

Nudo Porteño acrílico sobre casimir . 100 x 70 cm . 1997

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Apretango acrílico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 1999

Gran Baile Gran acrílico sobre lienzo . 70 x 100 cm . 1999 . Colección Privada

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Practitango acrĂlico sobre lienzo . 145 x 100 cm . 2000 . ColecciĂłn Privada

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EN EL MISMO LODO

A un porteño de ley, “La Cumparsita” y “Cambalache” le parecen los himnos de la ciudad. Enrique Santos Discépolo supo ver como un gurú a nuestra sociedad y en sus admirables versos nos dice “Vivimos revolcaos en un merengue y en un mismo lodo todos manoseaos”. Esta igura ha inspirado muchas obras de Bertani. La masiicación de la sociedad ciudadana, hace que el hombre pierda su individualidad y entre en un “remolino” a seguir la corriente, dejando de lado los valores fundamentales. Las pasiones, el amor, las ilusiones, sueños y fantasías quedan muchas veces de lado en el vértigo de la vida cotidiana. También algunos ven la Divina Comedia en estas obras, pero sin duda que sin proponérselo, Bertani interpreta magistralmente al admirado Discépolo. En sus obras recientes Ernesto apunta a la gente que “sigue la corriente”, sin reparar en las consecuencias de lo mismo.

Ondulantes acrílico sobre lienzo . 100 x 150 cm . 2015

Obra reproducida en Apertura de En el Mismo Lodo Remolino de Pasiones . acrílico sobre lienzo . 150 x 200 cm . 2000

Remolino de Amor acrĂlico sobre lienzo . 100 x 150 cm . 2002

Una acrĂlico sobre lienzo . 150 x 200 cm . 2008

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Multicolor acrĂlico sobre lienzo . 150 x 200 cm . 2014

Fuga y Misterio acrĂlico sobre lienzo . 150 x 200 cm . 2013

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Rayamores acrĂlico sobre lienzo . 120 x 150 cm . 2013

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Buenas Ondas acrĂlico sobre lienzo . 150 x 150 cm . 2015

Atrapaditos acrĂlico sobre lienzo . 120 x 150 cm . 2015

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Amarcoiris acrĂlico sobre lienzo . 150 x 120 cm . 2015

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BOTELLAS Y BOTELLONES

Cuando en 1992 presentamos EL LOFT DEL ENÓLOGO en Casa FOA, le pedimos a Bertani que policromara y pintara algunas botellas de vino. A partir de dicho pedido Ernesto experimentó con la difícil tarea de trabajar sobre una supericie curva y sobre vidrio. Luego en el 2006 aumentamos la apuesta y para decorar el wine-bar de El Casco Art Hotel en Bariloche, hicimos “soplar” botellas de vidrio a su máximo tamaño de 86 cm de altura. Nadie nos las podía proveer, salvo un artesano con la técnica y paciencia de un veneciano. Debo reconocer que sólo la amistad y cariño de Ernesto hacia nosotros lo llevó a realizar la ardua tarea de pintarlas, respetando el color del vidrio y así poder disfrutar también de los tonos del líquido elemento. Motivador fue para el artista el desafío, ya que el vino es también un símbolo de nuestra identidad y en las últimas décadas es una de las industrias que más ha evolucionado y es orgullo de todos los amantes de Baco. Sus “gorditas” sensuales y peligrosas como el vino están presentes, y también los sobrios señores con trajes y más alegres con solo camisa y corbata. Todas las temáticas de Bertani están presentes, con sus géneros, corbatas, lápices y con su irónico humor, a algunos los presenta como “presos” de la bebida, o al histórico “vino patero”, calzado de cuero. Hasta, por primera vez, una corbata se convierte en mujer como en “Champú”. El amor también está presente en forma nostálgica. Espero que Bertani retome este arduo y difícil trabajo en sus creaciones futuras.

Sensual acrĂlico sobre vidrio . 87 x 24 x 24 cm . 2006

Tintos Relejos acrĂlico sobre vidrio . 85 x 25 x 25cm . 2006

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Patero acrĂlico sobre lienzo . 100 x 35 cm . 2006

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De Guardia acrĂlico sobre lienzo . 100 x 35 cm . 2006

Champú acrílico sobre lienzo . 100 x 35 cm . 2006

Malbec acrílico sobre lienzo . 100 x 35 cm . 2006 . Colección Privada

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El Sobrio acrílico sobre casimir . 100 x 35 cm . 2008

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Sobremesa acrílico sobre género . 100 x 35 cm . 2008

Tinto y Blanco técnica mixta sobre papel . 50 x 35 cm . 2014

Dibujando Vinos técnica mixta sobre papel . 50 x 35 cm . 2014

Tirabuzón acrílico sobre vidrio . 87 x 20 x 20 cm . 2014

Dibujando Tinto técnica mixta sobre papel . 50 x 35 cm . 2014

151

La Corchita acrĂlico sobre vidrio . 86 x 24 x 24 cm . 2008

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Corbatinto acrĂlico sobre vidrio . 86 x 24 x 24 cm . 2008

Cogotuda acrĂlico sobre vidrio . 86 x 24 x 24 cm . 2008

Botellones en El Casco Art Hotel, Bariloche, Patagonia Argentina

153

BOLSILLOS AJENOS

Desgraciadamente la corrupción y sus derivados son una constante de nuestra querida Argentina. Un exceso de individualismo y la maligna “viveza criolla” nos han llevado a esta circunstancia, con el agravante que no hay premios y castigos, y los que entran por una puerta, salen raudamente por la otra. Es una de las temáticas más representativas del artista. Sus hombres que llevan sus manos a bolsillos ajenos, no sólo como un acto individual, sino incluso colectivo, como en el caso de “La trenza”, donde roban y se dejan robar, en un pacto no escrito entre ellos. La apariencia externa y la postura de “Cualquiera es un señor”, nos habla del ladrón de guantes blancos. Espero que Bertani no deba hacer más de estas obras y que inalmente luego de décadas, sus personajes vayan a donde deben estar como en la obra “A rayas”.

Del Mismo Paño acrílico sobre casimir . 120 x 200 cm . 1993

La Trenza acrĂlico sobre casimir . 120 x 180 cm . 1993

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Cualquiera es un Señor acrílico sobre casimir . 120 x 100 cm . 1998

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Manos MĂĄgicas acrĂlico sobre lienzo . 100 x 70 cm . 2008

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NUDOS Y

ENTRAMADOS

Uno de los grandes desafíos de un artista, es encontrar su momento creativo. No sé si existe la inspiración, pero es fundamental estar frente al lienzo en ese momento y no tomando vino con amigos. Todos los artistas tienen sus buenos y malos momentos y se trasmiten en la calidad de su obra. Bertani es un buscador incansable, siempre sorprende con sus imágenes. Los NUDOS representan en él, esos momentos en que nos sentimos “Atrapados sin salida”. Es cuando pensamos que estamos tan enmarañados que no podemos asumir las circunstancias. En cambio en los ENTRAMADOS nos muestra la necesidad de trabajar y unirnos solidariamente para lograr nuestros propósitos. En su obra “Utopía”, el colorido de las cintas nos hablan de un acuerdo entre los países, a la manera de una eiciente Naciones Unidas. Esta sensación de unidad se ve relejada en sus últimas obras, realizadas en el 2015.

Nudo Rayado . acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 2013

Obra reproducida en Apertura de Nudos y Entramados Global . acrílico sobre lienzo . 100 x 120 cm . 2014 . Colección Privada

UtopĂa acrĂlico sobre lienzo . 100 x 150 cm . 2013

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Fibras acrĂlico sobre lienzo . 150 x 200 cm . 2012

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Enredo acrĂlico sobre lienzo . 120 x 150 cm . 2014 . ColecciĂłn Privada

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MEGA OBRAS

Siempre Bertani ha disfrutado de los grandes tamaños, pero lo reducido de sus primeros talleres y el costo de materiales no le permitieron durante mucho tiempo poder darse el gusto. Generalmente cuando presentaba obras grandes, los jurados se interesaban por ellas y los premios eran bienvenidos. Así ocurrió con las Bienales de París y de La Habana, con géneros de casi tres metros. Una obra fundamental de su trayectoria son los seis gigantes paneles de la entrada a la Feria del Libro (1994), allí está la crítica literaria, la ciencia y la técnica, la educación, el teatro y el cine, la poesía y la comunicación. Es como un gran pantallazo a la cultura que nos enriquece a través de los libros. Para mí es la apología de la lectura. Con una ampliación de su taller en Parque Leloir pudo acometer a lienzos de ocho metros, que fueron exhibidos en su gran muestra del Centro Cultural Recoleta y en algunos museos del interior y el exterior. Mi obra favorita es “El amague”. No entendía el título y Ernesto no sólo hizo la obra sino que debió explicármela; es la representación de aquel que cuando llega la cuenta, comienza a revolver sus bolsillos y nunca encuentra su billetera…

El Amague acrílico sobre género . 445 x 142 cm . 2005

Dedos de Oro acrílico sobre género . 142 x 445 cm . 2007

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Gordas Recortadas acrílico sobre jersey . 150 x 100 cm . 1982

Agobiados acrílico sobre lienzo . 800 x 150 cm . 2007

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La Madrina acrílico sobre lamé dorado . 250 x 150 cm . 1987

Primaveral acrĂlico sobre gĂŠnero . 280 x 140 cm . 2002

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Suicidio de los Lápices acrílico y tinta sobre casimir . 270 x 150 cm . 1981 Bienal de París

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Basta acrílico sobre tweed . 260 x 155 cm . 1981 Bienal de La Habana

Bajarse los Lienzos acrílico sobre género . 300 x 142 cm . 2003

Recorte acrílico sobre género . 350 x 150 cm . 2005

Sumisas acrílico sobre género . 150 x 600 cm . 2007

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Encintados acrílico sobre género sublimado . 142 x 610 cm . 2007

Mis Modelos acrílico sobre género . 150 x 800 cm . 2007

177

Simbióticos acrílico sobre género sublimado . 450 x 150 cm . 2009

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Uterino acrĂlico sobre gĂŠnero . 450 x 150 cm . 2005

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DIBUJOS

El dibujo es el lenguaje universal. Es expresar ideas a través de imágenes que son entendibles por todos. En las artes plásticas es la estructura fundamental tanto en la pintura como en la escultura y ni hablar en el grabado. Lo normal es que un artista dibuje toda la vida, aunque luego sus obras sean abstractas, las mismas requieren del dibujo. Ernesto durante mucho tiempo se consideró más dibujante que pintor, recién en los últimos años está conforme con su obra pictórica. Con modestia sostiene “Soy un dibujante que colorea”. Sus primeras exposiciones fueron de dibujos y recién hace unos pocos años volvió a expresarse con dibujos sobre papel, siendo los mismos un homenaje a los lápices. Sorprendentes son aquellos donde el fondo de la obra actúa como un falso telón de papeles arrugados como en “Vernissage” (1990). Algunos cobran aparente tridimensionalidad, como en “El Dibujante”, de grandes dimensiones y que solía enviar Ernesto a los Premios de Dibujo, siempre con éxito. En los últimos trabajos el color es protagonista, los tamaños ahora son pequeños y hay un conjunto inédito donde el Abecedario es el protagonista.

Peril de Dibujante técnica mixta sobre papel . 50 x 35 cm . 2011

Frutos técnica mixta sobre papel . 40 x 30 cm . 2014 Obra reproducida en Apertura de Dibujos Primarios . técnica mixta sobre papel . 29 x 39 cm . 2010

Vernisage acrĂlico sobre lienzo . 100 x 130 cm . 1990

El Dibujante graito y acrĂlico sobre lienzo . 150 x 150 cm . 1992

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Ensillados II acrílico y pastel sobre lienzo . 100 x 120 cm . 1993 . Colección Privada

El Dibujante II acrílico sobre lienzo . 145 x 120 cm . 1994

184

Árbol técnica mixta sobre papel . 40 x 30 cm . 2014

Disparando técnica mixta sobre papel . 40 x 30 cm . 2014

De Frente técnica mixta sobre papel . 40 x 30 cm . 2014

De Atrás técnica mixta sobre papel . 40 x 30 cm . 2014

185

Encuentro técnica mixta sobre papel . 39 x 29 cm . 2010

Peso Color técnica mixta sobre papel . 39 x 29 cm . 2010

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Firulete técnica mixta sobre papel . 39 x 29 cm . 2010

El Gris técnica mixta sobre papel . 40 x 30 cm . 2014

GeGe técnica mixta sobre papel . 40 x 30 cm . 2014

SSS técnica mixta sobre papel . 40 x 30 cm . 2014

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ESCULTURAS

En el arte contemporáneo cada vez es más normal que los artistas no sólo trabajen en dos planos, sino que se interesen en la tridimensionalidad. Bertani comenzó a estudiar pensando en ser escultor y siempre era una asignatura pendiente el volver a trabajar en volumen. Hace cinco años que le dedica igual esfuerzo a la escultura y a la pintura. Trabaja con materiales modernos que lo seducen y le permiten experimentar y lograr un acabado de color que es un rasgo personal de Ernesto. El yeso y la arcilla ya son una etapa pasada para este artista. Hoy son las resinas (epoxy y poliéster) aquellas que reinan en su taller. Las ideas así se corporizan y la ambición desmedida del hombre por el dinero está presente en estas recientes obras. No podía faltar la mujer, representada como un modelo de consumo a la manera de los maniquíes de las vidrieras, con formas y medidas perfectas, que Bertani se encarga de potenciar. Una obra capital ha sido “Calentamiento global”, escultura de gran formato que expuso como pieza única en el Centro Cultural Recoleta. En ella el mundo no sólo se mueve sino que hasta “ruge”, como manifestando su fastidio por el descuido e irresponsabilidad del hombre frente al planeta. Como todo está monetizado este “globo-mundi” está formado por signos pesos… Sus últimas obras permanecen inéditas, una de ellas, “Arbolito”, no se reiere a la madera, sino a los autóctonos personajes que comercializan papel verde a precio azul en la City porteña. La otra es “David” que parece que se nos desangra frente a nuestro ojos, manifestando su impotencia ante los economistas y lo surreal de sus acciones. Son ellos desgraciadamente los Goliat de nuestra época.

Obra reproducida en Apertura de Esculturas Quinientos Pesos . 500 módulos de resina poliester . 2014

Calentamiento Global resina . Ă¸130 cm . 2014

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Corazón de Artista resina y acrílico . 37 x 32 x 9 cm . 2011 . Colección Privada

Inti Mango resina . 60 x 60 x 60 cm . 2013 . Colección Privada

192

Cien Pesos 100 mรณdulos de resina poliester . 2012

193

Arbolito Verdi Blu resina poliester . 190 x 75 x 75 cm . 2015

194

David Vencido resina poliester . 190 x 80 x 50 cm . 2014

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ÍNDICE PRÓLOGOS

BIOGRAFÍA Infancia y Juventud

Primeras Exposiciones

Sastre Pintor

Bertani vuelve a Exponer

SERIES Mujeres

Hombres

Casimires

Parejas

Lápices

Banderas

108

Corbatas

116

Buenos Aires

126

En el Mismo Lodo

136

Botellas y Botellones

144

Bolsillos Ajenos

154

Nudos y Entramados

160

Mega Obras

166

Dibujos

180

Esculturas

188

Este libro se terminó de imprimir el 16 de octubre de 2015, día de Santa Margarita María de Alacoque