Libro Lascano - Edición Laboratorios Bagó by Laboratorios Bagó S.A.

Ignacio Gutiérrez Zaldívar

L ASCANO Siglo XXI

Ignacio Gutiérrez Zaldívar

L ASCANO Siglo XXI

Coordinación General Paula Pedrotti Coordinación Editorial Laura Moskovich Paula Sarachman Investigación Mariela Jaunsolo Paula Sarachman Diseño Gráfico Laura Moskovich Eugenia Otero Fotografía Katerina Morgan Néstor Paz Colaboración María Gutiérrez Zaldívar Daniela Iramain Agustina Mazzini Walter Pérez Gustavo Roldán Gabriel Sarmiento Javier Zenteno Fotocromía e Impresión Brapack S.A. Reproducción de Sobrecubierta “Mis Favoritas”, Colección J.C.B. y M.S.B. (tapa). “Violeta sobre Amarillo”, Colección Zurbarán (contratapa). No está permitida la reproducción total o parcial de este libro, ni su tratamiento informático, ni la transmisión por ninguna forma o método, sin el permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright. Los infractores serán reprimidos con las penas de los arts. 172 y concordantes del Código Penal (arts. 2, 9, 10, 71, Ley 11.723). © Zurbarán Ediciones, 2013.

Gutiérrez Zaldívar, Ignacio Lascano siglo XXI. - 1a ed. - Buenos Aires : Zurbarán Ediciones, 2013. 160 p. ; 30x22 cm. ISBN 978-987-596-061-9 1. Arte. 1. Título CDD 708

Hecho el depósito que marca la ley 11.723 2013, Zurbarán Ediciones Cerrito 1522 (C1010ABF) Buenos Aires | Tel./Fax: (54-11) 4815-1556 e-mail: igz@zurbaran.com.ar | www.zurbaran.com.ar | República Argentina Impreso en Argentina | Printed in Argentina

FOTOCOPIAR LIBROS ES DELITO

A Jorge Bergoglio S.J., hombre ejemplar y modelo para la humanidad.

GRACIAS Juan Carlos y Sebastián Bagó, Miriam S. de Bagó, María Elena González, Gregorio Lascano, María Josefina Lascano, Margarita O’Farrell de Gutiérrez Zaldívar, Luis Ibarra García, Guillermo Roux, Estudio Alegria, Buey Fernández, Fissore & Montemerlo, Jorge del Luján Gutiérrez, Claudio Stamato.

Laboratorios Bagó es reconocida como una de las compañías farmacéuticas más prestigiosas e importantes de Argentina y Latinoamérica, y cuenta con una consolidada presencia en más de 47 países de todo el mundo.

Esta posición privilegiada es el reflejo del compromiso que asumimos cotidianamente con la calidad y la ética como principios fundamentales para concretar nuestra misión empresaria de brindar productos de vanguardia y excelencia para una mejor calidad de vida. Esta es la filosofía de trabajo que nos acompaña desde nuestros inicios, en 1934, y que proyectamos hacia el futuro en cada actividad que emprendemos y en cada nuevo desafío que afrontamos. En el ámbito de la cultura, nos propusimos –hace ya más de 20 años– promover activamente la identidad de nuestro país, su patrimonio y las diferentes expresiones artísticas que lo hacen único. Este es parte de nuestro aporte a la comunidad, como empresa argentina, y es también un legado para las futuras generaciones. Con este objetivo, para la edición anual de nuestro libro elegimos como protagonista a Juan Lascano, considerado el pintor realista contemporáneo más importante de la historia argentina, quien trabaja con innovación y gran entusiasmo para concretar sus metas, tal como lo hacemos en Bagó. Desde Bariloche (Argentina), este reconocido artista pinta su “aldea” y la hace global. En sus lienzos plasma los paisajes del sur argentino y propone una nueva forma de mirar la naturaleza, el cuerpo femenino y los objetos cotidianos a partir de una visión de la realidad modificada y condicionada por la incidencia de la luz, lo que le otorga una magia única y profunda a las cosas simples de la vida. Los invitamos a deleitarse con este nuevo título que, consideramos, enriquece nuestra colección de libros que buscan rescatar e impulsar lo mejor de nuestro país y su cultura.

Laboratorios Bagó is known as one of the major and most prestigious companies in Argentina and Latin America, with consolidated presence in over 47 countries of all over the world.

Such a privileged status is the consequence of the commitment we assume, day after day, to quality and ethics as the key principles that guide us in fulfilling our corporate mission, which consists in providing state-of-the-art and excellent products for a better quality of life. This is our work philosophy, which has distinguished us since the early times of our company, in 1934, and which we apply to each and every activity we start, and each and every challenge we have to face. As part of our commitment to culture, we decided -more than 20 years ago- to actively promote our country´s identity, its heritage and the different artistic expressions that make our country unique. This is part of our contribution to the community, as an Argentine company, and it is also a legacy to future generations. To such end, we have chosen Juan Lascano as the leading character in the annual edition of our book. Lascano is considered the major Argentine contemporary realist painter; he is an innovative and enthusiastic artist who always strives toward his goals, as we do in Bagó. From Bariloche (Argentina), this renowned artist paints its “village”, making it global. His paintings reflect the landscape of the south of Argentina and propose a new way to look at nature, female body and daily objects, from a view of reality that is modified and conditioned by incident light, which gives simple things of life a single and deep magical atmosphere. We are pleased to invite you to enjoy this new book that, in our opinion, enriches our collection of books intended to recover and promote the best expressions of our country and culture.

Lic. Sebastián Bagó

Dr. Juan Carlos Bagó

FELICIDAD, PAZ Y LUZ

Desde hace cuatro décadas somos amigos, y casi treinta años que tengo el honor y placer de difundir su mágico trabajo. Juan es un hombre del Renacimiento, con un saber superior y tal vez lo más importante, es un hombre feliz, nos trasmite su dicha en sus obras y con su ejemplo de vida. Con voluntad innata, perseverante y constante nos comunica alegría en toda su actividad, nos brinda luz con serena claridad, es esperanzado sin jamás buscar darnos mensajes o conceptos literarios en su obra. Desarrolla un impresionante talento con actitud positiva haciendo de cada una de sus obras, una creación única, como lo es un recién nacido, tierno y bondadoso. Me gusta definirlo como el “Mago de la Luz”, pues sabe atraparla con oficio y pasión, sorprendiéndonos en cada realización, donde no hay secretos ni nada oculto, primando simplemente la belleza de lo cotidiano. En sus trabajos es el silencio el protagonista, nos arrastra a un remanso de paz, sin condicionarnos, alejándonos del mundanal ruido. Juan es un privilegiado, nos da todo, sin pedir nada a cambio, nunca hay quejas, todo en él es agradecimiento. Escribir este libro me ha otorgado un inmenso placer, es éste el testimonio de su vida dedicada a una vocación, voluntad de transmitir no sólo a través de sus obras, sino también con actitud hacia los demás, logrando entre otras cosas, comunicar con claridad y simpleza en clases magistrales como en visitas guiadas, disfrutando cada momento y compartiendo su felicidad con los demás. Es para mí un hombre ejemplar y un gran modelo para la sociedad. Soy testigo directo de su evolución y del amor que trasmite en sus trabajos, manteniéndose ajeno a las modas, haciendo un arte universal y atemporal. El compartir mi profunda admiración con ustedes debo agradecérselo a quienes hacen posible que este libro llegue a miles de personas, y a todos los que trabajan con nosotros y que sienten un inmenso cariño por Juan.

Ignacio Gutiérrez Zaldívar

2000 Mega Exposiciรณn en el Palais de Glace La Adoraciรณn de los Pastores

“Reflexiones Intimas” (arriba izq.), “Porcelana” (abajo izq.), “La Adoración de los Pastores”.

No fue un año de muchas obras, pero sí fueron realizadas dos fundamentales: “La Adoración de los Pastores” y “Reflexiones Íntimas”. Esta última fue la portada de su libro y nos muestra la intimidad del artista pintando a su mujer María Elena y la imagen de Juan trabajando, que se refleja en el espejo. Fue pintada en su taller de Martínez. Los paños sobre la mesa son los que usaba para tapar la luz de la ventana, cuando la misma era muy fuerte. “Porcelana” fue un bodegón que pintó en varias sesiones de clases magistrales en su taller montado en el Palais de Glace.

MEGA EXPOSICION EN EL PALAIS DE GLACE

l comienzo del siglo XXI encuentra a Lascano en un momento de gloria. Entre el 18 de abril y el 14 de mayo de 2000, cuando contaba con 53 años de edad, se realiza la Mega exposición de sus obras en el Palais de Glace de Buenos Aires. En menos de un mes (27 días), 75.000 personas visitaron la muestra integrada por más de 150 obras que abarcaban 30 años de sus creaciones.

Portada del catálogo.

Lascano e Ignacio celebrando en el taller.

La muestra, titulada “Homenaje a la mujer” y declarada de interés por la Secretaría de Cultura de la Presidencia de la Nación, contó con el auspicio de Lux, de la firma Unilever. Además de las obras referidas al desnudo, Juan presentó bodegones, paisajes, flores y retratos, como los de Bernardo Neustadt y Mirtha Legrand, entre otros.

Lascano y Neustadt junto a su retrato.

“Naturaleza en Verde”. Colección Zurbarán.

“El Cántaro”. Colección Zurbarán.

Luis Mario Castro, presidente de Unilever y Lascano.

También se podían ver en el microcine dos películas, una en la que Juan enseña a pintar flores y otra sobre su vida y su obra. En el marco de la mega exposición presenté un libro sobre su vida y su obra. El crítico de arte y poeta Rafael Squirru nos acompañó en ese evento presentándolo.

la visita de la Primera Dama Inés Pertiné de De la Rúa y numerosos artistas colegas, con los que Lascano disfrutaba charlar sobre la visión que cada uno tenía del arte, aunque no tuvieran el mismo lenguaje pictórico. Entre otros, Leopoldo Presas, Ernesto Bertani, José Marchi, Marcos Borio, Norberto Russo, Rikelme, Carlos Alonso y Guillermo Roux, quien supo ver en Juan a un pintor que, aunque con un enfoque técnicamente clásico, tiene una visión moderna. “Cosa que me encantó, porque una de las condenas que he tenido siempre, como soy un pintor tradicional, es que la gente diga: eso ya se hizo. Pero no es lo mismo, no se hizo lo mismo, porque vos sos diferente. Guillermo se dio cuenta de eso y fue muy importante para mí”, recuerda Juan.

Rafael Squirru, Ignacio Gutiérrez Zaldívar y Juan Lascano en la presentación de su primer libro monográfico.

Junto a la Primera Dama Inés Pertiné de De la Rúa.

Juan firmando ejemplares de su libro luego de la presentación.

El día de la inauguración, en un pequeño escenario, Juan dirigió unas palabras, y aún recuerda el concepto principal: “la pintura es el arte del silencio y de la luz. Por eso no diré nada más…” “Lo bueno si breve, dos veces bueno”, decía el Padre Gracian S.J. En el Palais se vivía una verdadera fiesta, era lugar de reunión y encuentro con amigos, hombres y mujeres de la cultura y los medios de comunicación. Recibimos también

“Tonos Claros”. Colección R.J.

Lascano es un pintor actual. Y lo es porque, más allá de los ejemplos clásicos (Velázquez) que él sigue, no puede mirar de otra manera que la que le permite el mundo de hoy. Como sabemos, el arte nace del arte. Y todos tenemos nuestros referentes. Pero naturalmente, no podemos dejar de vivir en el tiempo que nos toca, pertenecemos a él. Y nuestro tiempo, a pesar de la tecnología, tiende a aislarnos cada vez más. Lascano tiene fuertes convicciones y por lo tanto cree en lo que hace. Fiel a sus referentes, no puede, como ninguno de nosotros podemos, dejar de percibir tal como es el mundo que nos rodea. Se pinte lo que se pinte o de cualquier manera que se haga arte, siempre seremos actuales. Y Lascano no es una excepción, sólo que su manera de ser actual, que no es hiperrealista, es un mirar y hacer cargado de afectividad. De esta manera se coloca en un lugar personal en la plástica de nuestros días. Guillermo Roux

Por las mañanas, como en todas nuestras mega exposiciones, el Palais estaba abierto sólo para las escuelas; niños y jóvenes de 3 a 17 años participaban de las visitas guiadas, dándole sin duda otro enfoque y lectura a sus obras y tomando contacto con la pintura realista.

Visitas guiadas para los niños de las escuelas.

Al ver sus obras desplegadas en un lugar estupendo, como son las salas de Palais, Juan sintió también algo extraño: “sentís que no sos vos el que pintó las obras. Mirás y te sorprende ver todo lo que hiciste, parece increíble que hayas hecho toda esa obra. Sos perfectamente consciente que son tus pinturas, simplemente te asombra ver todo junto ahí, tal vez porque el proceso del artista es de a poco, termina un cuadro y pinta otro, y otro, pero todo el conjunto impresiona muchísimo.” Esta exposición fue un shock tremendo para Lascano. Aunque ya había hecho tres decenas de exposiciones, y disfrutado el contacto con la gente que le mostraba su admiración, fue la primera vez que tomó noción de la enorme cantidad de gente que había visto sus obras y de la atracción masiva que estas tenían. Una exposición en una galería de arte puede ser visitada por 2.000 personas, pero 75.000 personas (¡el estadio de River Plate lleno!) significó un gran impacto. Lascano se transforma en un fenómeno popular, un “personaje” al que se acercan para sacarse fotos, charlar, pedir autógrafos. Y Juan los complace paciente y gustosamente. Aún recuerda con una sonrisa un día en que un matrimonio le pide le dedique unos grabados: “para mi hija tal…, la otra para mi hija tal… ¡tenían 8 hijas! y les firmé 10 grabados en total, una para cada hija y otras 2 para el matrimonio.” 15

La prensa se hace eco del enorme éxito y se multiplican las notas y reportajes al artista en diarios y revistas. “Yo creo que la realidad es inmensamente rica, y trato de reflejar su riqueza, aunque siempre me quedo con la sensación de que lo que estoy viendo es mejor que lo que pinto”, expresaba Juan. Aldo Galli, en La Nación, sentenció: “La fidelidad representativa de su pintura no exige mayores elucidaciones ni la búsqueda de sentidos ocultos: al pan, pan, y al vino, vino. (…) La acción de Lascano es tan sincera como carente de rasgos especulativos. Interpreta la realidad y ésta, a su vez, se hace intérprete de su propia persona.”

“Lozas y Paño”. Colección G.F.

Junto a su familia en la casa de Martínez.

“Porcelana”, pintada en el Palais de Glace, 2000. Colección Zurbarán.

CLASES MAGISTRALES Siempre intuí que Juan es un excelente comunicador, tiene un don especial para explicar, hablar sobre los materiales y los procesos creativos. Muchísima gente también quería tomar clases con él, pero Lascano nunca quiso tener alumnos. “No sé por qué… me da la impresión que estaría demasiado tiempo encima de los discípulos y eso los perjudicaría, o simplemente me pondría muy ansioso al sugerirles un color o cómo manejar el pincel, te digan ‘sí, sí’, y lo hagan de otra forma. El proceso de aprendizaje es lentísimo, y me consta porque yo lo sufrí también. O sea la incorporación de la enseñanza es tremenda, dolorosa y muy lenta, puede ser que eso me haya desalentado.” Es así que para la exposición en el Palais de Glace le propuse trasladar su estudio a una de las salas del Palais e invitar a la gente a visitar el taller del artista. Pusimos unas gradas, para 100 personas. Le dije a Juan: “Vos ahí pintá, con o sin modelo, a la hora que quieras, hablá o no, hacé lo que quieras…” Lascano pensó que la idea era una locura, y el primer día sintió un pánico horrible e invitó a toda la familia, porque pensó que no iba a ir nadie… Pero desde el principio las clases fueron un tumulto de gente. Las gradas que habíamos puesto no alcanzaban y la gente hasta se peleaba para entrar. Entonces pusimos una pantalla gigante en la sala central del Palais para que más gente pueda verlo, y transmitíamos en vivo con cámaras, sus clases. La primera vez, superado el pánico y los nervios, se paró frente al público, y con la paleta en la mano se puso a hablar y mostrar los colores que había puesto en ella. Inmediatamente empezó a salir todo en forma espontánea y natural. Y ratifiqué mi intuición, descubriendo el gran talento que tiene Juan para comunicar, también con la palabra. Una rareza en un artista, que se expresa mejor con sus obras. En diferentes días pintó flores, un paño, un bodegón,

Clase magistral de desnudo.

explicando paso a paso sus pinceladas. También, un desnudo con modelo vivo: “La punta inferior del omóplato de María da una sombra muy marcada, que me parece muy interesante. Hacia la zona de los glúteos, todo el cuerpo es más rosado. Por lo menos en este caso; esto no quiere decir que todos los cuerpos sean iguales”, explicaba Juan. En una hora y media Lascano deja casi terminada la obra, y mucha gente quiere comprarla, pero él se niega ya que la considera un simple estudio realizado con luz artificial, cosa que Juan no usa en sus obras, siempre pintadas con luz natural. De allí en adelante las clases magistrales se transformaron en un clásico de sus exposiciones, siempre con un éxito extraordinario. Ha realizado casi 60 en estos 14 años, en Buenos Aires, Tandil, Punta del Este, La Plata, Bariloche, Pinamar, La Rioja, Mendoza, Pilar y Rosario, entre otras ciudades. Nos confiesa que aún se pone un poco nervioso minutos antes de comenzar, pero enseguida se le pasa y comienza a disfrutar y hasta divertirse con estas charlas, en las que no faltan infinidad de historias de pintores y anécdotas. Lascano despierta la pasión de la gente, que admira su obra y descubre a través de las “clases magistrales” a un gran docente. Esto sorprende al propio artista, acostumbrado al silencio y la soledad del taller. “Yo siempre digo que los pintores somos bichos silenciosos, que estamos trabajando en el estudio, no tenemos un contacto directo con el público, el contacto directo lo tiene la obra, nosotros no. Y yo hasta ese momento sólo había hablado en alguna oportunidad, alguna charla o conferencia…”, dice hoy Lascano. Juan se convirtió en un estupendo orador ante el público masivo. Quizás el secreto de la “atracción fatal” que ejerce la obra de Lascano es que pinta la verdad, un bien sencillo aunque raro de encontrar en el siglo XXI.

Juan pinta un bodegón ante el público.

LA ADORACIÓN DE LOS PASTORES

n noviembre se realiza en el Palais de Glace la VIII Bienal de Arte Sacro. Recuerdo el estupendo nivel de las obras seleccionadas, entre las mil que se enviaron a concurso y que Marcos Borio y Mario Pérez recibieron el Primer y Segundo Premio. Con motivo del Jubileo se invitó a participar, fuera de concurso, a los destacados artistas argentinos Ary Brizzi, Eduardo Mac Entyre, Pérez Celis, Leopoldo Presas y Lascano, quien pintó especialmente para esta ocasión “La Adoración de los Pastores”. Juan nos cuenta detalles de esta obra de gran aliento. Fue la obra más grande que realizó (250 x 170 cm) y se propuso pintar todo del natural, incluso él mismo armó el vestuario que llevan los modelos. Para ella posaron varios miembros de su familia. En su taller de Martínez reunió a todos para realizar la composición y el primer boceto; luego pintó

cada una de las figuras, y al final los volvió a reunir para dar los retoques finales. El ángel, en primer plano, a la derecha, es su hija Josefina que, a propósito, la hizo levitando. Para pintar las alas recuerda que pidió prestada una paloma blanca, para hacerlas también del natural. Para la figura de la Virgen María posó Cecilia, una de las hijas de María Elena, su mujer, que tiene en sus brazos al niño Jesús, que era en realidad una beba recién nacida, a la que Juan llamaba cariñosamente “Jesusa”. San José, de pie al fondo de la escena, es su ahijado Lucas Gaynor. El Pastor con chaleco de piel es su hijo Gregorio. Finalmente, en primer plano, el otro pastor que hace el gesto de arrollidarse frente a la Virgen, es Ricardo Lanfranco, un amigo y excelente modelo.

Cecilia, hija de María Elena como La Virgen María.

María Josefina, hija de Juan, personificada como el Angel.

“La Adoración de los Pastores”, 2000.

2001 Tandil Punta del Este La Plata: Regreso con Gloria Zurbarรกn: Nueva Visiรณn Vocaciรณn de Grandeza Bariloche Poliglote Carilรณ

“Dulce Terciopelo” y “Tentación de Verano”, 2001.

Este año Juan solicitó unos lienzos ovoidales para realizar varias obras “agrandadas”, como si viera al modelo con un lente zoom. Se destaca una con ciruelas como protagonistas, que Lascano tituló “Tentación de Verano”, ya que son su fruta preferida en dicha estación. La otra es “Dulce Terciopelo”, donde lucha frente a la difícil piel de los duraznos

TANDIL

uego del rotundo éxito de su muestra en el Palais de Glace, todos querían ver las obras de Juan, es por eso que realizamos cinco exposiciones durante el año 2001. Siempre acompañadas de videos, charlas y conferencias.

Hasta el 25 de febrero de 2001 expuso en el Museo Municipal de Bellas Artes de Tandil, provincia de Buenos Aires. La muestra estaba integrada por 44 obras que abarcan treinta años de trayectoria.

“Ave María, Tandil”, acuarela, 2001.

Juan junto a sus retratos.

En el Museo Municipal de Bellas Artes de Tandil.

En Ave María, pintando las sierras tandilenses.

PUNTA DEL ESTE

ara el verano, el Banco de Galicia, a través de su Presidente Eduardo Escasany y Luis Ibarra García, gerente de Relaciones Públicas, nos solicitó una exposición para su sucursal de la calle 18, en pleno centro de Punta del Este. Era la sexta exposición que realizábamos en ese lugar, y ya era un clásico del verano. En esa temporada nos dieron el Premio Punta del Este 2001 por la exposición de Juan y por haber realizado la edición del libro “La Tierra Purpúrea”, de Guillermo Hudson, quien narra una épica historia transcurrida en Uruguay y está ilustrado por Florencio Molina Campos. Se inauguró el 7 de enero, elegimos un día domingo ya que si se hacía un sábado la cantidad de gente hubiera desbordado la sala. Igualmente así, en sólo cuatro horas nos visitaron mil trescientas personas. Recuerda hoy Luis Ibarra García: “La noche de la inauguración no cabía un alfiler y fue un éxito total que duró hasta altas horas, con una renovación constante de público. Pero la experiencia más increíble y gratificante fueron las clases de Juan abiertas al público, a la noche en el jardín de la casa, con un lleno total. Además debo destacar muy especialmente su bonhomía y su llaneza, comparables con la magnitud de su talento.”

“Lascano deslumbró en La Mansa”, diario La Nación.

Las 50 obras, óleos y acuarelas, daban una visión retrospectiva de tres décadas de trabajo y mostraban todas las temáticas abordadas por Juan: bodegones, algunos paisajes de Cariló y de Punta Ballena (donde pasó dos veranos), flores y desnudos. También se expuso el retrato de Susana Giménez, finalizado cerca de la noviembre. Esta obra fue pintada en la casa de Barrio Parque de la diva, quien posaba para el artista por la noche, al terminar su programa de televisión.

Amigos y entusiastas de la obra de Juan, como el Embajador de Uruguay en la Argentina Alberto Volonté Berro, y el artista uruguayo Carlos Páez Vilaró, entre tantos otros, también nos acompañaron. Recuerdo que, luego de la inauguración, “salí corriendo” a Mar del Plata, donde inaugurábamos una mega-exposición de Quinquela Martín, con más de cien obras, en el hall del Teatro Auditorium. Con respecto al montaje y distribución de las obras en sus exposiciones, Lascano no suele participar y dice que confía en la sabiduría de quienes lo saben hacer; además “me gusta la sorpresa agradable que me dan cuando llego”, agrega. Durante casi dos meses (finalizó el 25 de febrero), más de quince mil personas visitaron la muestra. El periodista Mariano Wullich, enviado especial del diario La Nación, remarcaba que era el evento del verano y en la nota del 13 de enero, titulada “Lascano deslumbró en la Mansa”, refleja maravillosos momentos transcurridos y dice que allí “estuvo todo Punta del Este”.

“Susana”, 2000.

Pasamos en Punta del Este unos lindos días de verano, con mucho golf y poca playa, ya que la piel de Juan no aguanta mucho el sol. Y a las 9 de la noche hacíamos visitas guiadas en la muestra, que estaba abierta de 17 a 22 hs.

Juan continuó con sus mágicas y milagrosas clases magistrales que superaban la capacidad del lugar y tuvieron que hacerse en el jardín. Recuerdo que una señora quería a toda costa comprar el desnudo de espaldas que había realizado Juan en noventa minutos, con luces artificiales, y no podía creer que Juan sostuviera que no era una obra terminada, sino simplemente un ejercicio realizado con luz eléctrica y por lo tanto no la sentía como propia y no se vendía. El 4 de febrero hicimos una re-inauguración para los turistas de dicho mes, durante el cual todos los jueves, yo brindaba visitas guiadas, charlas y conferencias sobre “La pintura de Juan Lascano”. Juan vivía en esa época en Martínez, provincia de Buenos Aires y estaba terminando de edificar su cabaña en Cariló, así que alternaba sus estadías en la costa uruguaya y la bonaerense.

Charlas en la muestra.

Trabajando frente al público.

Sede del Banco Galicia en Punta del Este en el que se realizó la exposición.

LA PLATA: REGRESO CON GLORIA

a Municipalidad de La Plata lo invitó y organizó la muestra en el Pasaje Dardo Rocha, sede del Museo Municipal de Bellas Artes. Juan recuerda que, de niño, en ese edificio funcionaba el correo y él iba asiduamente a despachar cartas. Para Juan su lugar preferido es el Museo de Ciencias Naturales y sus hijos Gregorio y Josefina siempre lo acompañan a visitarlo. Desde que se mudó a Buenos Aires, en su adolescencia, durante muchos años Juan volvía a La Plata sólo el día de su cumpleaños, el 6 de enero, Día de Reyes, lo hacía en solitario y con nostalgia visitaba su colegio San José, la Catedral, el bosque, el zoológico y su querido Museo de Ciencias. Pasaba también por el cementerio, a rendir tributo a sus abuelos.

Con sus hijos Gregorio y Josefina, visitando el Museo de Ciencias Naturales de La Plata, el lugar preferido de Juan en la ciudad.

La Plata es una de las ciudades con más interés por la cultura y todas las exposiciones que hemos realizado allí convocan muchísima gente. Simultáneamente a la muestra de Juan, y a pocas cuadras de distancia, en el fabuloso edificio del Teatro Argentino, realizábamos “Fader”, con un centenar de obras del maestro. Realmente era un momento único en la ciudad. Muy importante fue, para nosotros, la presencia de un fanático de Juan como es el querido amigo Monseñor Héctor Aguer, Arzobispo de La Plata. El periodista y poeta platense Jorge Héctor Paladini expresó que la exposición fue una “genuina lección de belleza y vocación” y que en sus obras dedicadas a los desnudos “erige un canto genuino de amor a esta carne que sabe habitar de alma, belleza y magia. Sus cuerpos palpitan y comunican su voz secreta, su quietud, tensión y esperanza.” Yo creo que, en un mundo donde desgraciadamente se ignoran los grandes valores, la obra de Lascano nos transmite

Juan durante sus clases magistrales.

sinceridad, amor, honestidad, franqueza y ética. Él sabe mirar donde tan sólo vemos, no emplea golpes bajos y se ocupa de las cosas sencillas, de aquellas cosas cotidianas que nos rodean y a las que quizás no le prestemos atención. La prensa local brinda gran difusión, hablan de su “regreso con gloria”, 34 años después de su primera exposición juvenil. Juan no puede ocultar lo que se siente volver: “Para mí es algo muy emocionante y movilizador, aunque quizás no se me note. Es como volver al pago chico, encontrarme con gente que hacía mucho no veía y reencontrarme de algún modo con el clima en el que me inicié en la pintura”. Más de diez mil personas disfrutaron viendo la ajustada selección de una veintena de obras que representaban lo mejor de su creación. Impresionante era la concurrencia a sus clases magistrales. El diario El Día habla de la “masiva clase de pintura” con modelo en vivo que Juan dictó, a la que concurrieron ¡más de cuatrocientas personas! Como el salón tenía espacio sólo para doscientas treinta (incluidas los que se sentaron en el piso), proyectó otra para la semana siguiente, y ¡fueron quinientas!, pese que a la misma hora las selecciones de fútbol de Argentina y Brasil jugaban un partido por las eliminatorias para el Mundial. En ambos casos doscientas personas quedaron afuera… El diario Hoy le dedica una importante nota sobre su vida y su obra, y numerosas anécdotas que surgen al recorrer, junto al periodista, lugares de su infancia. En el Colegio San José se dio el gustito de sentarse nuevamente entre los estudiantes, visitar la capilla y buscar en el armario del laboratorio de ciencias naturales aquella víbora coral que había atrapado un verano en Córdoba y donado a la escuela dentro de una botella.

“Ecos del Mar”, 2001. Colección J.M.

ZURBARÁN NUEVA VISION

urante el año 2001 Juan se abocó en su taller a trabajar en una nueva visión que quería dar a sus obras, como ampliando el modelo, como si tomara un sector del mismo e hiciera una vista ampliada con su ojo, como el zoom de una cámara fotográfica. Y reflexiona sobre “la maravilla, el desafío y el drama” de ser un pintor realista: “Uno tiene delante algo insuperable que es la luz real, las texturas, los materiales reales, y uno se acerca, presuntamente, cada vez más; pero de ahí a llegar de verdad estoy dudando que llegue alguna vez. Entonces, es al mismo tiempo un desafío y una decepción. Uno tiene siempre el deseo de llegar y luego se da cuenta de que le falta algo.” El 27 de septiembre inauguramos en Zurbarán su muestra titulada “La Nueva Dimensión”, y Juan en el prólogo del catálogo nos explica el por qué de este título: “El pintor tiene la extraña virtud de ver las cosas con la luz de la primera vez. Por eso vive permanentemente enamorado de la realidad. Su obra es el fruto de ese amor. Esta nueva dimensión de las cosas es el resultado de mi fascinación de siempre. Es un acercarse aún más a los objetos cotidianos con una mirada personal, casi secreta. Mis cuadros son una conversación íntima, de igual a igual, con todo lo que me rodea. Quisiera que fueran también una expresión cabal de ese diálogo entre la luz y el silencio que es, para mí, el arte de la pintura.”

Su madre, hermanos, esposa e hijos lo acompañaron durante la inauguración de su muestra.

Eran veinticuatro bodegones, pintados en los últimos dieciocho meses, en los cuales, ciruelas, duraznos, verduras, panes o cacharros están representados en primer plano, a gran tamaño. Esta monumentalidad pone de manifiesto la gran capacidad de observación de Juan, esa genialidad que le permite rescatar la belleza más profunda de las cosas simples y cotidianas y transmitir silencio en sus obras. Así lo había hecho también en 1995 con un conjunto de flores. Juan nos ratifica que estas obras surgieron con la misma idea y nos cuenta que surgieron de una notable observación de Rafael Squirru: su tendencia natural a agrandar las cosas; “por eso esas exposiciones fueron tan divertidas para mí, porque le di rienda suelta a esa tendencia... Me divierte agrandar las cosas. Me gusta el

golpe que producen los objetos ampliados. Creo que de esta forma el espectador se acerca más a la obra”, decía Juan en una nota del diario Clarín. El diario BAE también publicó un lindo reportaje, en el cual ratifica su carácter de pintor realista y su admiración por Velázquez, Rembrandt, Vermeer, Sorolla y sus contemporáneos Andrew Wyeth, Claudio Bravo, Lucian Freud y Antonio López García. Fuera de este lenguaje, le interesa el Cubismo, sobre todo las obras de Braque, el impresionismo (al que considera una forma de realismo) y rescata la ingeniosidad del surrealismo. Cuenta que probó hacer abstracción, pero que no lo siente. Los sábados y domingos a las siete de la tarde, hacíamos visitas guiadas para el público.

“Rincón de mi Cocina”, 2001. Colección Zurbarán.

“Sólo Nácar”, 2001. Colección Zurbarán.

“Bien Maduras”, 2001. Colección C.S.

“Sopa Castellana”, 2001. Colección Zurbarán.

VOCACIÓN DE GRANDEZA

afael Squirru, en La Nación, publicó una crítica titulada “Sin medias tintas”, en la que define a Lascano como un “pintor rebelde”, que “se mantiene firme a los dictados de su propia sensibilidad.” Aplaude su gran talento y dice de sus obras: “Bellas estas pinturas de Juan Lascano, rotundas como su nombre. Magistral en el manejo de los blancos, domina como pocos el tema de frutas y bodegones.” En otra nota, Rafael expresaba que Juan pinta cosa desmesuradas porque tiene vocación de grandeza. Juan acepta el halago, pero dice que “pintando en grande, las

superficies son más simples y todo se hace más fácil”. Y agrega: “Lo que hago es reproducir la realidad, y reproducir significa volver a producir, a crear la realidad a partir de mí”. En el mismo artículo del diario La Nación, Juan reconoce que es “fiaca” para pintar detalles, que es ansioso e impaciente; y que para preparar las obras de esta exposición las verdulerías del barrio fueron uno de los lugares donde iba a buscar sus modelos. Las modelos más fáciles para pintar son las berenjenas, porque brillan y tienen una superficie lisa, en cambio los duraznos, con su piel opaca y aterciopelada, son los más complicados.

“Oro y Porcelana”, 2001. Colección Zurbarán.

BARILOCHE

l 12 de octubre, a pedido de Telefónica, inauguramos una exposición de Juan en el Centro Cívico de Bariloche, como parte de los festejos por la apertura de una importante sala en la planta baja de la Intendencia donada por la compañía telefónica. La muestra también continuaba en la Sala Frey, donde el arquitecto Estrada realizó los planos del centro. También en El Patacón, una sala del kilómetro 8 de la Avenida Bustillo, y en el lobby del Hotel Panamericano. Fue una lindísima experiencia y se repitió el éxito de las clases magistrales, con más de cuatrocientas personas en el Hotel Panamericano.

Juan decía: “La luz es el motor fundamental de mi pintura. Por eso soy un viejo enamorado de Bariloche, porque acá hay mucha luz. Espero que con esta exposición pueda devolverle algo de esa luz a esta ciudad entrañable. Quiero dejar acá un mensaje de alegría, esperanza y amor”. No sospechaba que cuatro años después se radicaría allí. Michel Camdessus, director del Fondo Monetario Internacional y su mujer, Brigitte, visitaron la exposición. Hacía unos meses que Juan había terminado su retrato. Es costumbre del FMI que cuando un director general se retira, quede su retrato en la sala del Consejo Directivo, en Washington. Los anteriores siempre fueron pintados por artistas de su misma nacionalidad. Para retratar al francés Camdessus, que estuvo trece años a cargo de la dirección, el Consejo eligió a Juan, con experiencia en retratar a personalidades locales e internacionales. Michel posó en el atelier porteño de Lascano (en la calle Montevideo) durante cuatro sesiones de tres horas cada una. Y se cimentó una amistad que aún perdura.

Carlos Fernández Prida, Juan Lascano, Alberto Volonté Berro, Atilio Feudal e I.G.Z. en Bariloche.

Lascano retratando a Michel Camdessus en su estudio de Buenos Aires.

María Elena, Michel Camdessus, Brigitte Camdessus, Juan Lascano e I.G.Z.

“Manos”. Colección Michel Camdessus.

Lascano retratando a Michel Camdessus en su estudio de Buenos Aires.

“Maternidad”. Colección Zurbarán.

Su muestra coincidió con el 25º Aniversario de la fundación de Zurbarán, que festejamos a lo grande y trabajando más que nunca, con ocho exposiciones: las de Lascano en nuestras salas y en Bariloche, Quinquela Martín en Mendoza y Rosario, Carlos Alonso en Santa Fe, Graciela Genovés en

Colección Alvear de Zurbarán, Fernando Fader en el Palais de Glace y nuestra participación en Casa Foa. El 21 de octubre, día de la madre, el diario Los Andes de Mendoza, regaló doscientas mil reproducciones de “Maternidad”, una obra de Juan.

“Esperando al Artista”, 2001. Colección M.C.

POLIGLOTE

n noviembre recibió un encargo especial: retratar a un caballo. Desde niño le gustaba dibujar equinos y otros animales, pero en este caso se trata de un gran óleo que reúne la calidad y características propias de la obra de Juan. Es el padrillo Poliglote, del Haras Firmamento de Juan Carlos Bagó, en Sierra de los Padres, provincia de Buenos Aires. Hasta allí viajó el artista con sus pinceles y colores, para pintarlo del natural. “Lo pusieron en un galpón grande, uno de los peones lo tenía del bozal y el caballo posó de lujo… una paz total”, nos cuenta Juan. Al terminar la figura se la mostró a otra gente que trabajaba en el haras, grandes conocedores de caballos, quienes le dieron su visto bueno y supieron reconocer las características particulares de Poliglote. Luego, agregó de fondo un paisaje quebrado y verde, como el de Sierra de los Padres. El padrillo campeón se fue a Francia a las 48 horas, y hoy es el padrillo galo número uno en el mundo.

Poliglote.

Tapa del libro “El Caballo”, Edición Haras Firmamento.

“Poliglote”, 2001. Colección J.C.B. y M.S.B.

CARILO

uan conoció Cariló hace muchos años, solía ser lugar de vacaciones en familia durante el verano y de “escapadas” con su mujer, María Elena, durante todo el año. “Siempre me gustó muchísimo porque me encanta el bosque, los árboles, que haya desniveles. No soy fanático del mar ni de la llanura, me gustan los lugares con contrastes. Cariló era el lugar más cercano a Buenos Aires que cumplía esas condiciones”, nos cuenta. Hacia el año 2001 compró un lote en medio del bosque, lejos del mar y empezó a idear una cabaña, que fue construida con cipreses traídos de la Patagonia, mágico preludio de su futura mudanza a Bariloche. El plano de la cabaña lo hizo él mismo y la concibió como un estudio de pintura, es decir que, con brújula en mano, diseñó los ventanales del taller con orientación Sur, la mejor luz natural para pintar, ya que no da el sol directo. También tiene una galería enorme, con vista al bosque. “Esta cabaña, y Cariló, para mí fueron y siguen siendo un gran placer. Es el único lugar que extraño cuando estoy en Bariloche”, nos dice Juan. Allí pintó bodegones e infinidad de paisajes: “Mis paisajes son sin personajes; además, siento que es un paisaje salvaje”. Mientras vivía en Martínez (hasta el 2005), pasaba casi la mitad del año allí. “Al estar tan cerca, no pasaba un mes sin que me escapara a buscar el silencio y la paz de Cariló”,

Juan pintando en el bosque de Cariló.

“Día de Viento, Cariló”. Colección Zurbarán.

protegerse y cubrirse de la luz y, sobre todo, del viento, ya que es imposible plantar un caballete en las ventosas playas. Encontró allí un paisaje salvaje que le fascina, se forman pequeñas lagunitas de agua dulce donde crece alguna vegetación que contrasta con el dorado de la arena y los infinitos matices de verdes y azules del mar.

Junto a su jeep en la playa.

expresa Juan. Es decir que pintó el paisaje en las cuatro estaciones del año. El verano es la que menos le gusta; se levanta muy temprano para estar solo, y cuando empieza a llenarse la playa de gente, él se va. Además no le gusta ni el calor ni el sol sobre su piel. Entre otoño, primavera e invierno no siente gran diferencia, sólo quizá cambia los horarios para pintar. Desde el punto de vista del paisaje no hay grandes cambios, el bosque de coníferas permanece siempre verde, y sólo nos damos cuenta si es otoño, por ejemplo, si hay algún otro árbol que se tiñe de marrón o amarillo. Le interesa más la tierra que el agua: “para mí el mar es el equivalente a la pampa, llega un momento en que me cansa esa cosa horizontal”, y confiesa que las olas son muy difíciles de pintar. Sus motivos preferidos para pintar son el bosque y el enorme medanal, totalmente estéril y desértico, que hay entre Cariló y Villa Gesell, por donde se mete con su viejo jeep, devenido en taller ambulante. Lo acondicionó con unas lonas para

“Nubes en Cariló”. Colección Zurbarán.

“Pinos y Médanos”. Colección Zurbarán.

“Nubes y Arena, Cariló”. Colección Zurbarán.

2002 Pinamar Valores

“Bodegón con Rojos”.

Este año realizó “Bodegón con rojos”, donde el color compite con el dibujo y la luz que entra por la ventana. A Juan siempre le molestó lo plana que está la sandía, porque cuando la trajo se le pegó el papel en la misma. A mí me encanta el equilibrio y la composición casual de la obra, como si estuviera así en la mesada de su cocina…

PINAMAR

n enero de 2002 expone en Galería Altera, de Pinamar, 30 obras: bodegones, desnudos y paisajes de playa y bosque pintadas en Cariló. Lascano brindó también dos de sus ya clásicas “clases magistrales”. Ese mismo verano realiza el retrato de Andrea Frigerio, quien posó dos largas tardes en el balcón de su cabaña de Cariló, con el bosque de fondo. Pero, luego de diez años aún no lo terminó.

Sus obras son elegidas para decorar el Four Seasons Hotel, de Buenos Aires. En mayo viajamos a España y conoce a Antonio López García, el otro gran realista que hay en el mundo. Pasaron varias horas charlando en su taller en Madrid. Me resultó emocionante ver a estos dos genios intercambiando impresiones.

Andrea Frigerio posa para Lascano en su cabaña de Cariló (gentileza de Editorial Atlántida).

“Médanos Eternos, Cariló”, acuarela, 2001. Colección A.M.

“Otoñal, Cariló”, óleo, 2002.

Pintando en las playas de Cariló, enero de 2002 (gentileza de Editorial Atlántida).

VALORES

l regresar pinta “Justicia”, para la muestra “Valores” que hicimos durante el mes de septiembre en Casa Foa 2002, en el Buenos Aires Design de Recoleta. Treinta artistas y destacados pensadores argentinos dieron su visión sobre los verdaderos valores de la vida, y doscientas mil personas disfrutaron de la muestra. Había obras de Carlos Alonso, Ary Brizzi, Carlos Cañas, Miguel Dávila, Jorge Demirjián, Carlos Gorriarena, Eduardo Mac Entyre,

Josefina Robirosa, Pérez Celis, Guillermo Roux y Aldo Sessa, entre otros. Félix Luna, Monseñor Héctor Aguer y Juan José Sebrelli fueron algunos de los que escribieron sus reflexiones. Oca hizo tarjetas postales reproduciendo algunas obras, entre ellas la de Juan, que se podían enviar gratuitamente desde los buzones allí dispuestos.

“Justicia”. Colección S.G.

“Tesoros de Barro”, 2002. Colección El Casco Art Hotel.

“Jarrones a la Luz”, óleo sobre lienzo, 60 x 80 cm, 2002. Colección L.D., E.E.U.U.

“Bodegón con Naranjas”, 2002. Colección M.J.I.

2003 Tres Talleres Van Gogh Lascano x 2

“Blandura”. Colección M.G.Z.

También fue un año de pocas obras, pero una verdadera “joya” es el pequeño desnudo que tituló “Blandura”. La piel es “mórbida”, dan ganas de tocarla. El toque de color de los almohadones celestes es el contraste necesario ante esta pura y diáfana piel.

TRES TALLERES

n enero de 2003, por segundo año consecutivo, expone en la Galería Altera de Pinamar. Esta vez la riqueza de los paisajes de Cariló, con sus médanos, bosques, playas y arboledas, son los protagonistas exclusivos. Como de costumbre, Lascano brinda charlas y clases magistrales.

En esta época Juan tenía tres talleres donde pintaba: la cabaña de Cariló, su casa de Martínez (donde vivía desde 1992) y el estudio de la calle Montevideo, frente a la Plaza Vicente López, de la ciudad de Buenos Aires, y en los tres se sentía muy cómodo.

En su taller de la calle Montevideo.

Pintando en su taller de Cariló.

Entrada de su cabaña en Cariló.

VAN GOGH

n abril y mayo realizamos en Zurbarán una exposición en Homenaje a Vincent Van Gogh, al cumplirse ciento cincuenta años de su nacimiento (30 de marzo de 1853). Destacados artistas argentinos se inspiraron en la vida y la obra del genial pintor holandés, entre ellos Pérez Celis, Leopoldo Presas, Guillermo Roux, Carlos Alonso (que le ha dedicado una importante serie) y, por supuesto Juan Lascano, que presentó una obra titulada “Querido Théo”. Su amigo Ricardo Lanfranco, como lo había hecho para “La Adoración de los Pastores”, posó para él, esta vez encarnando a Vincent, con su cabeza vendada. Nos cuenta Juan: “Es una grisalla, es decir que está pintada en tonos de grises y blancos; lo único de color es la paleta y la obra que está en el caballete. Al fondo aparece la cama (tomada

de la que pintó el holandés en una de sus obras) y agregué algunos “toques personales”, por ejemplo, el cuadrito que está al fondo es un autorretrato de Velázquez, mi pintor favorito, y arriba de la mesa hay una carta que dice: ‘Juan Lascano me está pintando un retrato, no está mal, pero los colores…’ y queda en suspenso. Pedí en la embajada de los Países Bajos que me la tradujeran al holandés y así la escribí.”

Catálogo de la exposición, obra de Graciela Genovés.

En mayo realiza una exposición individual integrada por 16 obras en Fortune International, en Miami, Estados Unidos, organizada por el Embajador Luis María Ricchieri. Recuerdo que en la inauguración nos visitaron Pérez Celis, Andrea del Boca y Raúl Valdés Faulí, entre otros amigos.

“Mi Querido Theo”, óleo sobre lienzo, 100 x 70 cm, 2003. Colección C.C., Houston, E.E.U.U.

Pérez Celis, el Embajador, Andrea del Boca y I.G.Z.

LASCANO X 2

ste año “duplicamos la apuesta”, y Lascano expone simultáneamente en nuestras dos salas de Buenos Aires (Zurbarán y Colección Alvear de Zurbarán), durante casi dos meses (junio y julio), un conjunto de 43 obras realizadas en cuatro años y de temáticas variadas: flores, bodegones, desnudos y paisajes de Cariló. Hacía dos años que no exponía en la ciudad de Buenos Aires. Todos los viernes el artista ofrecía visitas guiadas al público, a las 19 horas en Av. Alvear y más tarde en Cerrito; siempre más de cincuenta personas lo seguían al caminar las cuadras entre una y otra sala. La revista Viva, de Clarín, hace una selección de los conceptos más importantes de Juan sobre sus diferentes temáticas y él menciona que le gusta que sus modelos tengan el pelo largo, “lo asimilo a la sensación que me produce el agua corriendo en un arroyo.” Rafael Squirru publicó en el diario La Nación: “Lascano

nos brinda esa realidad que podríamos calificar de clásica en términos de una rotunda modernidad”, y agrega: “Parece asimilarlo todo a ese ojo implacable para traducir el modelo con una franqueza que podría parecer excesiva. Aquí la carne es carne, el durazno es durazno, el cacharro es cacharro y el paño blanco es paño blanco. La realidad ha llegado a su MÁXIMA DESNUDEZ…” En el diario El Cronista, Juan confiesa que no es metódico para trabajar, salvo los lunes que va la modelo a su taller. Una de cal y una de arena: tiene la virtud de la prolijidad y, por más cansado que esté, al finalizar su jornada lava y ordena sus materiales: “Comprobé que la prolijidad del ambiente colabora con la creatividad.” Le gustaría que lo definan como un “perseguidor de la luz” y sentencia, como decía Leonardo Da Vinci, que “el verdadero pintor trabaja con su mente.”

Obras de Lascano en la trastienda de Zurbarán.

“Piel de Coral”, 2003. Colección P.C.

El Cadete Gúiraldes, Tachi y Juan durante la inauguración.

En agosto viaja a Las Leñas para dar una charla y por supuesto, lleva sus pinceles y su “caballete de campaña” para pintar los maravillosos paisajes nevados del sur mendocino.

“Siesta”, 2003. Colección El Casco Art Hotel.

Pintando en Las Leñas (gentileza Revista Gente).

“Clara Luz”. Colección J.C.B. y M.S.B.

“Sobre la Mesa”, 2002. Colección C.I.

“No habrá ninguna Igual”. Colección J.C.B. y M.S.B.

“Las Tres Rosas”, 2003. Colección T.A., Arabia Saudita.

2004 Mendoza Una Noche Surrealista Boston

“Mar Bravo” y “Otoño, Boston”, Colección del Autor, 2004.

Logró maravillas en Cariló, una de ellas es “Mar Bravo”: la rompiente de las olas, con el artista como amo y señor en la playa, con la única compañía de sus pinceles y óleos. También logró lindísimos paisajes urbanos en Boston.

MENDOZA

ecibe el año 2004 junto a su familia en Cariló y disfruta de un enero de trabajo y vacaciones familiares en su refugio de la costa.

Junto a su hijo y su hermano recibiendo el 2004 en Cariló.

En febrero, por invitación de la Bodega Nieto Senetiner, viaja por primera vez a Mendoza. Durante una semana visita los viñedos, conoce los alrededores, pinta y planea una exposición como homenaje a la provincia cuyana, que se inaugura al año siguiente. Juan se encontró desde un primer momento cómodo y feliz, y manifestó su alegría al decir: “Un buen vino es como un cuadro pintado en equipo.” También dio una memorable clase magistral al aire libre, en los jardines de la bodega en Vistalba, Luján de Cuyo. Ese 29 de febrero llovió a cántaros todo el día, pero al atardecer, casi milagrosamente, la tormenta cesó. Habían alquilado doscientas sillas y recuerdo que cuando Juan las vio dijo: “Saquen cien, ¡son muchas!”. Pero fuera de todos los cálculos concurrieron ¡Seiscientas personas! Se llevó a cabo una misa, en la que su obra “La Adoración de los Pastores” encabezaba el altar. Luego comenzó su clase. Habían montado un escenario, una cámara de video y una pantalla gigante para que se vea bien desde todos lados. La retratada fue Charo, una querida empleada de la bodega, ya jubilada, que, cuando fuimos a proponerle la idea, aceptó encantada: “¡Ah!, usted es el pintor de la radio”, dijo. Hacía días que todos los medios promocionaban el evento. En uno de los reportajes publicados por la prensa, Juan sostenía: “No me importa la realidad física del modelo, a mí me interesa la luz sobre un objeto de la realidad... Soy un pintor de la realidad visual, que es atemporal”. Al día siguiente, en la misma bodega, se reunió a charlar, a intercambiar experiencias, con cerca de treinta artistas mendocinos.

“Desde la Loma”, 2004. Colección Zurbarán.

Clase magistral en la Bodega.

Misa en la Bodega.

Lascano y su modelo .

â&#x20AC;&#x153;Retrato de Charoâ&#x20AC;?, pintado durante la clase magistral.

Cosechando en el viĂąedo.

UNA NOCHE SURREALISTA

sí llamamos a la fiesta de apertura de la muestra Homenaje a Salvador Dalí de los Artistas Argentinos, que realizamos en Zurbarán en abril. Fue para celebrar el centenario del nacimiento del genial pintor catalán, contó con el auspicio de la Embajada de España y estaba integrada por las obras de 18 artistas: Adolfo Nigro, Miguel Ocampo, Pérez Celis, Leopoldo Presas, Guilermo Roux, Hermenegildo Sabat y Lascano, entre otros. Juan realizó una composición, cargada de símbolos, aunque mantuvo su lenguaje realista. Nos cuenta: “Busqué darle un aire surreal, por ejemplo las agujas del reloj, que recuerdan a los bigotes de Salvador, no dan ninguna hora. En lugar de números están las doce letras de su nombre y en el segundero uso el anagrama de Paul Eduard con el nombre de Salvador Dalí: ‘avida dollars’. La mano es la mía y el paisaje es de Cariló, desértico como los paisajes del catalán. Las huellas en la arena comienzan siendo dos y terminan siendo una, a la manera de un sueño. El caracol simboliza a su musa Gala, que está levitando sobre el espíritu de su marido”. También durante este año 2004 participa en Arteamericas, realizada en Miami con el auspicio de Merrill Lynch, y realiza una exposición en el Club Social de La Rioja, en mayo, integrada por 18 obras entre bodegones, paisajes y desnudos. Juan viajó a la ciudad para brindar una clase magistral.

“Reloj de Arena”, 2004. Colección Zurbarán.

“Naturaleza Muerta”, óleo sobre lienzo, 80 x 90 cm, 2004. Colección F.T., E.E.U.U.

“Sencillez”, 2004. Colección Zurbarán.

“Nobleza Mendocina”, 2004. Colección M.J.I.

“En la Bodega”, 2004. Colección Molinos Río de la Plata.

BOSTON

n la primavera (otoño en el hemisferio norte), Juan y su mujer se instalan en Estados Unidos durante dos meses. “De Boston me gustó todo, es una ciudad caminable, rica culturalmente, linda física y geográficamente y me sentí muy cómodo”, nos cuenta. Allí pintó varios paisajes, vistas desde la ventana y la terraza que tenía desde el departamento que alquilaron.

Pensaron incluso en irse a vivir allí, Juan estaba buscando otros rumbos: “No es que quisiera irme de Buenos Aires, ciudad que adoro, pero tenía ganas de paisaje, de algo más cercano a la naturaleza, sin embargo no me decidí a estar tan lejos de mis hijos…” Recién al año siguiente Juan encontrará su lugar soñado.

“Tarde de Sol, Boston” Colección del Autor.. “Esquina Blanca, Boston” Colección del Autor.

“Dulces Reflejos”, 2004. Colección S.J.E.

“Zapallos”, 2004. Colección Zurbarán.

“Pentagrama”, 2004. Colección F.CH.

“Naturaleza y Blancos”, 2004. Colección E.G.

2005 Homenaje a Mendoza, Zurbarรกn Bariloche, su casa y El Casco Art Hotel Exposiciones en Cรณrdoba y Mendoza

“Otoño, Bellevue”, abril de 2005. Colección M.G.Z.

Sin duda, su primera obra pintada en Bariloche es un hito fundamental en su trayectoria. Realizada en un estupendo mes, en cuanto al clima: abril fue extraordinario y mayo, repleto de lluvia. Este “Otoño” es de los mayores paisajes, pleno de color y una lujuria de verdes.

HOMENAJE A MENDOZA, EN ZURBARÁN

urante abril y mayo, trabaja en Bariloche, en Bellevue, la famosa casa de té en la costa del Lago Moreno con vista a los cerros Tronador y López, que alquiló para pintar el otoño en la Patagonia. Ahí se entusiasma y busca casa para radicarse en esta ciudad. El 14 de junio inaugura su nueva exposición individual, en Zurbarán: “Homenaje a Mendoza”, integrada por 27 obras pintadas en los últimos quince meses, algunas en Mendoza y otras en sus talleres de Cariló, Martínez y Buenos Aires. También presenta las primeras realizadas en Bariloche. Recuerda el artista: “Pinté un bodegón en la bodega Nieto Senetiner, compuse el modelo con elementos de allí, como unos toneles. Los puse junto a una puerta por donde me entraba la luz y también el bullicio de los camiones que descargaban uva en los lagares, ¡estaban en plena época de cosecha y yo pintando!”

En la inauguración de la muestra.

Varios paisajes pintados en la Patagonia.

Los lunes y jueves Juan ofrecía visitas guiadas en la exposición, que se acompañaban con una degustación de vinos. Nos decía Juan en el prólogo del catálogo: “Un buen vino es como un cuadro pintado en equipo. El cuadro tiene la ventaja de que cuanto más lo bebe uno, más queda en la botella. Pero no se puede regalar a todos los amigos el mismo cuadro. Tal vez lo mejor sería tomar un buen vino entre amigos, con la pintura delante. Y este es el sentido de mostrar mi obra de Mendoza, realizada en los últimos meses. Igual que la viña, quiero que la gente ‘cate’ mi arte. Al fin y al cabo no es otra cosa que el resultado de años de cuidado respetuoso y entusiasmo, buenos aceites y pigmentos y mucha luz en la tierra fértil del espíritu”.

“Bodegón con Paño Azul”, 2004. Colección L.P.C.

“Simpleza”, 2005. Colección M.M.S.

“Pura Cepa”, 2005. Colección Molinos Río de la Plata.

BARILOCHE, SU CASA Y EL CASCO ART HOTEL

l 25 de agosto compra su casa de Bariloche, “Villa Llao Llao”, ubicada frente al Lago Moreno. Allí pinta su serie “Las Cuatro Estaciones” para El Casco Art Hotel; comienza en primavera del 2005 y finaliza en el invierno del 2006. Son cuatro obras de una misma vista pintada en

cada estación. Recuerda hoy Lascano con una sonrisa: “Cuando pinté ‘Invierno’ el hotel estaba en plena remodelación, aún no tenía colocadas las ventanas, y tuve que lidiar contra la nieve que se metía adentro y el viento que golpeaban sobre la tela que estaba pintando”.

“Invierno”, 2006. Colección M. M.

“Verano”, 2006. Colección El Casco Art Hotel.

“Primavera”, 2006. Colección El Casco Art Hotel.

“Otoño”, 2006. Colección El Casco Art Hotel.

Juan esternando su casa de Bariloche.

Disfrutando del paisaje ofrecido por su casa.

Los huéspedes del Hotel disfrutan de su obra en todos los espacios.

Sus obras decoran el restaurant del Hotel.

“Las Cuatro Estaciones” en el lobby del El Casco Art Hotel.

EXPOSICIONES DE CORDOBA Y MENDOZA

l 7 de septiembre, con el auspicio de Laboratorios Bagó, realiza en Zurbarán Córdoba una exposición retrospectiva integrada por 80 obras. En la Docta también ofreció sus Clases Magistrales, tanto en nuestras salas como en el Hotel Sheraton. Recuerda Juan: “La galería, ubicada en el primer piso

del Dinosaurio Mall, era enorme, pero las mil quinientas personas que fueron superaron el espacio. Entonces se colocaron pantallas gigantes en la planta baja, que pasaban imágenes de lo que yo estaba haciendo arriba, para que pudiera verla toda la gente gente”.

Multitudes en sus clases cordobesas.

El 29 de septiembre se inaugura en el Chateau Carreras de Córdoba ARTE & VINO, con la presencia de veinte bodegas, cada una con un pintor que los representaba: Seguí, Bonevardi, Carlos Alonso, Lascano, Bertani, Miguel Ocampo, Pérez Celis, Polesello, y los maestros Quirós, Fader, Malanca, Molina Campos, Soldi, Berni, Quinquela y Pettoruti, entre otros. El 15 de noviembre inaugura su quinta exposición retrospectiva, ahora en Mendoza como había prometido el año anterior a los mendocinos. Cien obras se lucieron en Palmares Open Mall, en un espacio de mil quinientos metros cuadrados. La ciudad estaba empapelada con afiches de Lascano gracias a Orlando Terranova, un mendocino generoso y fanático de su obra. Juan, haciendo referencia al momento en que conoció la ciudad, dijo:

“Mendoza es para mí uno de esos casos felices en los que la idea se ve ampliamente superada por la realidad… Encontré ganas de hacer, apoyo y buena voluntad”. Se proyectaba la película sobre su vida y su obra, realizada por el hijo de Raúl Soldi: Diego. También brindó varias clases magistrales, con un promedio de quinientas personas, y las modelos eran personajes mendocinos. La prensa se hizo eco del gran éxito y lo llaman “El dueño de la luz” y también “El mago de la luz”.

Juan preparándose para su clase magistral

“Días de Vino y Tango”, 2006. Colección Zurbarán.

Visitantes a la exposición.

2006 Y siempre Buenos Aires... La Cata

“La Cata”, 2006. Colección Peters, Saint Louis, E.E.U.U.

Sin duda, “La Cata” es la más excepcional obra de este año. Su primera temporada en su nueva casa patagónica, y la de mayor producción del artista en este siglo.

Y SIEMPRE BUENOS AIRES...

l año 2006 fue un año de transición, de adaptación a su vida en Bariloche. El 21 de marzo se inaugura “Otoño” en Zurbarán, con obras de 32 artistas. Entre ellos: Gorriarena, Testa, Roux, Carlos Alonso, Brizzi, Nigro, Pérez Celis, y una obra de Juan pintada en mayo del año 2005 en Bellevue, Bariloche, en la Patagonia, lugar que sería desde ese año “su paisaje”.

Desde entonces suele viajar, al menos un par de veces en el año, a Buenos Aires: “Me encanta venir e ir al cine, a librerías, a exposiciones y caminar la ciudad. Además, tengo buenas modelos y trabajo con placer. Mis hijos y nieta están en Buenos Aires y estar con ellos, volver a ser ‘padre presente’, me fascina.” Disfruta también caminar por el barrio de San Telmo, visitar los museos Fernández Blanco, Larreta, e Yrurtia en Belgrano y el Nacional de Bellas Artes. Allí se detiene especialmente en tres obras: “La sopa de los pobres” de Reinaldo Giudici, “El despertar de la criada” de Eduardo

Inauguración de la muestra “Otoño”. De izq. a der.: Daniel Kaplan, Juan Lascano, Norberto Russo, Silvana Robert, Ignacio Gutiérrez Zaldívar, Graciela Genovés, Ernesto Bertani, Jorge Dándolo, Fernando Romerro Carranza y Daniel Soldi.

Encuentro de dos artistas, Juan y Mario Sanzano.

“Pureza”, 2006. Colección M.G.Z.

Sívori y “Sin pan y sin trabajo” de Ernesto de la Cárcova, que le parece un cuadro bárbaro, según declara a Revista Viva, en el mes de enero. También cuenta que no pinta más de cinco horas seguidas y recuerda que cuando le dijo

a su padre (que era abogado) que estudiaría abogacía, él le contestó que era una estupidez, que era bueno dibujando y pintando y ¡que se dedicara a eso!

“Placidez, Bariloche”, óleo sobre lienzo, 60 x 100 cm, 2006.

“De Tarde, Bariloche”, óleo sobre tabla, 30 x 60 cm, 2006.

“Cacharros del Norte”, óleo sobre lienzo, 70 x 110 cm, 2006.

“Texturas”, 2006. Colección Zurbarán.

“Parque, Bariloche”, óleo sobre tabla, 30 x 50 cm, 2006.

“Sencillez”, 2006. Colección T.A., Arabia Saudita.

LA CATA

a idea nació cuando Juan recorría el Casco Art Hotel, antes de su inauguración, y planificábamos donde pondríamos bodegones y paisajes. Le pareció que faltaba la presencia humana, es así que ideó esta obra, que el llama “la de los amigos”, ya que son cuatro amigos suyos los que aceptaron contentos posar. Recuerda Juan: “Los llevé a mi estudio, puse mi mesa de trabajo y les dije que se sentaran como quisieran. Hice un boceto al carbón y, basándome en este boceto, después fueron viniendo y posando en diferentes etapas hasta terminar la obra”. Está Eduardo Torres, casado con una amiga de toda la vida de María Elena, Teresa Echevers; viven en Bariloche hace mucho y tenerlos allí los impulsó a mudarse a esta ciudad. También están Henri Collard – Bovy, un belga, muy buen tipo; su vecino, Miguel Martínez, y Osvaldo

Grimoldi, un pintor con el que se reunía a pintar compartiendo la modelo. Es, sin duda, una obra excepcional. Son cuatro retratos en una misma obra, que componen una escena plena de sugerencias para el espectador. Ya no son Eduardo, Henri, Miguel y Osvaldo, sino cuatro amigos compartiendo la mesa. “La obra tenía mucho gancho porque es un grupo de gente que está con una botella de vino, uno con una copa, y la gente imaginaba historias: que era una cata y este era el dueño de la bodega, aquel el jefe de marketing y el que probaba el vino estaba viendo si lo compraba o no… Cada uno imaginaba historias diferentes”, dice Juan. Estuvo en exposición en el lobby de El Casco Art Hotel y luego partió a una colección privada de Saint Louis, Estados Unidos.

Boceto de la obra al carbón.

Henri Collard-Bovy y Miguel Martínez posando.

La obra en proceso.

Detalle de la obra en proceso.

La obra en proceso.

Juan dando los Ăşltimos toques.

La obra expuesta en el lobby de El Casco Art Hotel, 2006.

2007 Patagonia Las Cuatro Estaciones Lujuria de Colores

“El Alba” (arriba izq.), “La Noche” (arriba der.), “Las Tres Luces” (abajo).

Pocas, pero destacadas obras este año: tres desnudos monumentales. Uno de ellos rápidamente se fue a Kentucky y tuve poco tiempo de disfrutarlo. Los otros dos son “El Alba” y “La Noche”, obras cumbres. Y un bodegón que me recuerda a genios como Velázquez, Zurbarán y el tapete, a Vermeer: “Las tres luces”.

PATAGONIA

l 6 de enero de 2007 cumple sesenta años y lo festejamos en El Casco Art Hotel de Bariloche, reinaugurado tres semanas antes, con sesenta amigos. Durante la primavera europea de 2007, Lascano viajó a Holanda a participar de la Semana del Arte, que se realiza

anualmente en Domburg, una pequeña ciudad de veraneo en la costa del Mar del Norte. Recuerda Juan: “Había pintores argentinos, franceses, ingleses, holandeses, rusos. Nos quedamos quince días trabajando y después se hace una exposición con las obras que pintamos allí”.

Juan junto al grupo de artistas en Holanda.

En octubre y noviembre realiza una nueva exposición individual en Zurbarán, titulada “Patagonia”, en la que presenta 31 obras realizadas en Bariloche: bodegones, interiores, desnudos y 16 paisajes.

“Bodegón con Manzanas”, 2007. Colección M.A.

Juan en la inauguración de la muestra junto a Sergio Grooskopf, Margarita O’Farrell de Gutiérrez Zaldívar, I.G.Z. y Freddy Chaoul.

Juan es un pintor de luz, y sin duda la luz de la Patagonia es diferente a la de Martínez, Cariló, Mendoza y Buenos Aires, donde trabajó los últimos años. Hoy Juan está integrado a la naturaleza. Desde su casa taller tiene una visión permanente del lago Moreno, de la Cordillera y de los bosques que lo rodean, sus motivos preferidos. Tiene también un bello jardín que desciende a una pequeña playita del lago, donde tiene un muelle. Desde allí disfruta el paisaje y a veces se divierte pescando. No es fanático de la pesca, pero le resulta placentero el “no hacer nada, mirar los cerros, el agua…”. También recorre las cercanías con su camioneta, deteniéndose a pintar allí donde lo atrapa el paisaje.

Juan descubrió la Patagonia en 1981, cuando tenía 34 años, y Villa Traful fue su primer deslumbramiento. Después volvió varias veces, generalmente en enero: “Cargaba mi auto 4L (como el del Papa Francesco), en el tren a Bariloche. Luego de 36 horas encontraba finalmente el silencio y me metía en el bosque a pintar...” En abril de 2005, alquila una casa hasta que en agosto compra la suya, donde vive hasta la actualidad. Nos dice hoy: “Estoy lejos del mundanal ruido, pero en Bariloche tengo el placer de tener a mis amigos como vecinos y nos juntamos semanalmente. Además los hago posar y son muy buenos ‘amigos modelos’ ”.

Juan pescando en su muelle. Vista de la casa de Juan con el banco que llevó desde Martínez.

Otra vista desde su casa.

Bajada a la costa desde la casa de Juan.

“Cielo y Tierra”, 2008. Colección M.O.

LAS CUATRO ESTACIONES

esde la comodidad del taller, sin sufrir las inclemencias del clima, ha pintado los bellos paisajes que ve desde la ventana de su estudio: el lago Moreno, los cerros López, Capilla y Tronador y también su jardín, en las cuatro estaciones del año.

Los paisajes de invierno se identifican claramente con la presencia de nieve, y los de verano por su ausencia, y por la vegetación de color verde más brillante. También el verano le da la posibilidad de pintar al aire libre, cuando no está ventoso.

“En la Cima”, 2007.

“Nieve en mi Jardín”, 2007. Colección T.B.

“Tiempo Tormentoso”, 2006.

“Cumbres Nevadas, Bariloche”, 2009.

“Cumbres Borrascosas”, 2006.

“Cerro Capilla”, 2009.

“La Cascada”, 2011. Colección Zurbarán.

“Lago Moreno”, 2010. Colección Zurbarán.

“Colores de Verano”, óleo sobre hardboard, 20 x 40 cm, 2011.

“Camino a la Cima”, óleo sobre tabla, 30 x 50 cm, 2009.

“Lago Moreno”, 2008. Colección Zurbarán.

“Sol de Verano”, óleo sobre tabla, 40 x 40 cm, 2007 (arriba izq.), “Verano”, óleo sobre hardboard, 40 x 50 cm, 2008 (abajo izq.), “Frescura de los Alpes”, 2003. Colección J.C.B. y M.S.B. (derecha).

La primavera en los jardines estalla con el colorido de los lupinos, con sus flores que varían desde el blanco al azul.

“Jardín Florido”, óleo sobre lienzo, 60 x 70 cm, 2005.

“Botijos Norteños”, 2009. Colección Zurbarán.

“Siesta, Bariloche”, 2008. Colección Zurbarán.

“Mis Favoritas”, 2010. Colección J.C.B. y M.S.B.

“Anfiteatro”, 2009, Colección Zurbarán, y “Sol de Mañana”, óleo sobre tabla, 50 x 30 cm, 2007.

El otoño tiene una gran riqueza cromática, en las laderas de las montañas se ven franjas de colores según la vegetación, en las partes bajas coihues y cipreses mantienen el verde, mientras que a partir de los mil metros de altura, los bosques de lengas y ñires se tiñen de óxidos y colorados. El otoño tiene también para Juan una característica “psicológica”: “En verano la vida social de Bariloche es muy activa, es cuando más gente hay. El otoño marca el fin de la estación social, y la ciudad y yo entramos en un período de paz. Los días se presentan y vos no tenés nada que hacer ni a quien ver, con todo el placer que me dan los amigos, pero te da una sensación diferente...” Fernando Fader también prefería el otoño para trabajar.

“La Ladera”, óleo sobre hardborad, 20 x 40 cm, 2011.

“Tarde Dorada”, óleo sobre tabla, 20 x 60 cm, 2008.

Los otros paisajes los pinta generalmente desde adentro de su camioneta, lo cual limita su tamaño, por supuesto. Este año 2013 ha logrado pintar uno de un metro: “Es todo un montaje… me pongo en la parte de atrás del auto, con unos alambres sujeto la tela contra los respaldos de los asientos de adelante”, grafica Juan la situación. Normalmente pinta obras de hasta setenta centímetros y lo hace desde el asiento del acompañante, aunque a veces deba pintar la punta izquierda de la tela con su mano izquierda, porque no tiene espacio. Recorre con su camioneta las rutas, se detiene y empieza a

caminar buscando cuál es el mejor ángulo para pintar, lo que a veces le ha generado más de una anécdota. Recuerda que una vez se metió en un camino en los alrededores del aeropuerto, una zona que le gusta mucho, y en pleno trabajo ¡lo interrumpe la Policía Aeroportuaria!, que hacía rato lo observaban con largavista desde el aeropuerto: “Veíamos que avanzaba cien metros, giraba a la izquierda veinte, a la derecha treinta, retrocedía cuarenta…” y decidieron acercarse a ver que pasaba. Al contarle Juan que estaba “buscando el ángulo de un paisaje para pintar”, le pidieron disculpas y lo felicitaron.

Buscando el ángulo para pintar en la estepa cerca de Bariloche.

En el anfiteatro, Bariloche.

Pintando en el auto.

Con su auto, al costado de la ruta.

El impedimento para pintar con el caballete al aire libre es el viento, muy fuerte que arrasa con todo. Por eso la mayoría de las obras están pintadas en el interior, con vista al paisaje. A veces también se instala en las casas y estancias de amigos que se la prestan para la ocasión. Juan se las ingenia para pintar siempre del natural. En Bariloche hay tres zonas bien definidas: el bosque cordillerano, la estepa y el ecotono. La primera es donde él vive, es un paisaje bellísimo con lagos, bosques, verdes… La estepa patagónica, también le resulta muy linda. Dice: “Es zona desértica, muy árida, pero pictóricamente muy rica, con mucho color tierra y ocre; mucha piedra y coirón, que

es típico pasto patagónico bien amarillo”. El ecotono es una transición entre ambas, es una zona de pradera, donde están los grandes cotos de caza de ciervos colorados, que no es un animal autóctono, sino importado de Europa. A su paleta de colores, en la que primaban los colores tierra, ahora ha sumado azules y verdes para reflejar los lagos y la vegetación del lugar. Incluso un nuevo violeta, que es el color de las sombras de las montañas. Confiesa que aún le sigue costando pintar las nubes y el agua, tema que admira en la obra del sueco Anders Zorn.

“Tiempo de Caza”, óleo sobre lienzo, 40 x 70 cm, 2011.

“Tormentoso”, óleo sobre hardboard, 30 x 60 cm, 2008.

“Estepa Dorada”, óleo sobre madera, 30 x 70 cm, 2011.

“Paz, Bariloche”, óleo sobre hardboard, 20 x 50 cm, 2007.

“Se va el Invierno”, óleo sobre lienzo, 27 x 70 cm, 2007.

“Primavera”, óleo sobre hardboard, 20 x 60 cm, 2007.

“Camino a Pilcaniyeu”, óleo sobre hardboard, 30 x 70 cm, 2008.

LUJURIA DE COLORES

ice Juan: “Desde el punto de vista pictórico el gran cambio ha sido la luz. El aire en la Patagonia es más seco y esto quiere decir que las luces y las sombras son más nítidas y perfiladas. Se ve claramente a mucha más distancia. Por otra parte, la riqueza cromática, tanto del bosque como de la estepa patagónica, es superior a la de la llanura. Aquí, en Bariloche, la primavera y el otoño son una fiesta de colores. En mi paleta han aparecido azules, verdes y violetas que no estaban antes. Tengo el lago Moreno todos los días frente a mí y puedo asegurar que es muy raro encontrar momentos iguales a otros, aún en períodos de varios meses. Y en invierno viene la nieve, con sus blancos deslumbrantes…Como valor agregado al paisaje patagónico he de mencionar una vida social mucho más activa que la de Buenos Aires. Tal vez la gente está más disponible aquí porque el tiempo se vive de manera diferente… El hecho es que es común reunirse con amigos varias veces por semana. ¡Y para hacer todo más agradable en la mayoría de las casas se cocina bien! No soy partidario de las decisiones definitivas pero me parece que mi vida en Bariloche tiene para rato”. Cuando yo veo la inmensidad de la Patagonia me parece imposible “meterla” en una tela de 1 m. x 1 m., pero Lascano logra plasmar esa sensación. Nos dice: “Cuando uno se enfrenta al paisaje, o a cualquier otra cosa, uno recibe un impacto. Ese impacto es lo que importa, no la cantidad de cosas que hay ni el tamaño de la obra. Puede ser una obra

como las de Corot de la época romana, de 24 cm. x 30 cm. y en ese paisajito tenés la sensación del aire y la distancia, igual que la recibiste cuando viste el gran paisaje. Eso es la cosa mágica de la pintura...” Una experiencia muy particular es la que viví con Juan cuando lo acompañé mientras pintaba su obra “Eclipse”. Nos juntamos a las ocho de la noche en la terraza de El Casco Art Hotel y era impresionante ver como permanentemente cambiaban las luces y colores que se veían, parecía imposible atrapar un momento. Por eso creo que Juan tiene razón cuando dice que nunca ha logrado reflejar la belleza de lo que ve. Para mí, muchas veces sus obras son más bellas que el modelo, como ocurre con sus desnudos o sus bodegones, pero él no está de acuerdo con mi opinión.

Juan y la inmensidad.

“Eclipse desde El Casco”, óleo sobre lienzo, 20 x 50 cm, 2007.

2008 Pilar China

“Quesos” , Colección Bodega Piattelli, Cafayate, Salta.

Buen año de trabajo y otra obra extraordinaria: “Quesos”. Un maravilloso bodegón para El Casco Art Hotel, que ahora se encuentra en el lobby de una bodega en Cafayate, Salta.

PILAR

n marzo de 2008 expone en el Hotel Sofitel, en Cardales. También organizamos una retrospectiva en Zurbarán Pilar (en Sheraton Hotel Pilar), inaugurada el 29 de marzo e integrada por 60 obras. En los reportajes que publican diarios y revistas, Juan cuenta que se mudó a Bariloche para vivir con más silencio y que, simplemente, “pinto lo que veo”. Dice que la fórmula del éxito es “primero suerte, segundo un buen marchand y, tercero, talento”. En el mes de julio brinda charlas en El Casco Art Hotel de Bariloche, sobre el arte de Emilio Pettoruti y Antonio Berni. Juan es un gran lector y conocedor de las técnicas

pictóricas. ¡No sólo habla sobre su obra, sino que comenta la de los demás! Durante este año pinta 26 obras: paisajes, desnudos y bodegones, incluida una composición con quesos. La realizó en su estudio de Bariloche, que reconocemos por sus paredes de machimbre. Compró para ella la silla y una tabla; la cuchilla se la pidió prestada a unos amigos. Hoy recuerda con una sonrisa que, al terminar de pintarla, hizo varias degustaciones en su casa, y “cuando mis amigos se iban les regalaba una bolsita con quesos, el único que no fragmenté fue el provolone que lo sorteé…”

Pintando “Invierno” desde El Casco Art Hotel, 2008.

CHINA

n octubre viaja a China con María Elena y unos amigos. Nos cuenta Lascano: “Surgió por curiosidad personal, la idea de conocer un mundo nuevo, insólito, que de alguna forma conozco plásticamente porque la pintura oriental siempre me ha gustado mucho”. Recorrieron Beijing, Xi’an (donde están los Guerreros de Terracota), Hong

Kong, Shangai. Regresaron vía Estados Unidos, con una estadía en la ciudad de Chicago. Posiblemente, en abril del 2014, exponga en China.

Tratando de ubicarse en Beijing.

“Alistándome en el ejército de Terracota. No me aceptaron”.

“Espacio”, 2008. Colección El Casco Art Hotel.

2009 Retratos Pilar, Rosario y nuevo libro Lascano Intimo Desnudos

“Cruzando el Lago” (arriba), “Recostada” (abajo).

“Cruzando el lago”, un paisaje de la costa de enfrente de su taller en el Lago Moreno en julio, es una sinfonía de blancos y verdes. También algunos desnudos en el interior de su casa me seducen, como “Recostada”.

RETRATOS

os primeros meses del año 2009 compartimos en Bariloche encuentros, comidas y también pintó mi retrato. Posar para él significó también tener oportunidad para charlar y hacer un balance de estas casi tres décadas trabajando juntos, y llegamos a la conclusión que cosechamos más de lo soñado. Me contaba que, cuando era joven, le decían que del arte no se come y ¿de qué vas a vivir?, pero su padre lo hizo dedicarse a la pintura y no a la abogacía. Y Juan ha logrado vivir exclusivamente de su arte. Recuerdo que luego de posar, nos íbamos a jugar al golf. En esta última década Lascano ha realizado también los retratos de Michel Camdessus (Director General del Fondo Monetario Internacional, en 2001), de Andrea Frigerio (en 2002), de Constancio Larguía (al que después le cambió en fondo neutro por un paisaje de su estancia Las Barrancas, en Córdoba), de María Murchinson (que posó en el jardín de su casa de Olivos), de Maite (una ejecutiva de bancos española, que era esgrimista), de Silvina de Sierra (que posó maravillosamente, con su marido Damián presente), de su hijo Gregorio, entre otros. Durante este año 2013 pintó el de Juan Carlos Bagó, en tres divertidas sesiones.

“Maite”, 2003. Colección M.B.

“Retrato de María Murchison”, 2003.

“Zubin Metha”. Colección Privada.

Juan comenzando el trabajo.

“Retrato de Juan Carlos Bagó”, 2013.

Juan pintando y Juan Carlos Bagó posando.

“Silvina”.Colección D.S.

“Constancio Larguía”.

“Retrato de I.G.Z.”, 2009.

“Michel Camdessus”. Colección F.M.I.

“Gregorio Lascano”. Colección G.L.

PILAR, ROSARIO Y NUEVO LIBRO

l 23 de junio la revista GENTE regaló setenta mil ejemplares de un libro sobre su obra, perteneciente a una colección de veinte libros sobre pintores argentinos, como Quinquela Martín, Antonio Berni, Raúl Soldi, Cesáreo Bernaldo de Quirós, Xul Solar, Cándido López, Fernando Fader y los contemporáneos Bertani, Pérez Celis, Guillermo Roux y Carlos Alonso, que tuve el honor que me encargaran. Juan pintó especialmente para ilustrar la tapa, una obra que representa la estantería de su taller, con sus típicos cacharros. En julio se realiza en Zurbarán Pilar, la exposición

“Lascano sobre papel”, integrada por 32 acuarelas y dibujos: paisajes de Bariloche, Cariló y Córdoba, y desnudos. “La acuarela es a la pintura, lo que la orquesta de cámara es a la música”, dijo poéticamente Rafael Squirru, y yo coincido. Le solicitan que 12 de sus paisajes decoren la sucursal del Banco Galicia de Av. Alvear. El 28 de octubre inauguramos una exposición antológica integrada por 20 obras en Rosario, en San Cristóbal Seguros, festejando su 70º aniversario. Juan viajó a la ciudad a ofrecer una clase magistral.

“Córdoba”, acuarela, 23 x 30 cm, 2010.

“Cotidiano”, 2009. Colección del autor.

“Agua y Piedra”. Colección J.P.O.

LASCANO INTIMO

n noviembre realiza en Zurbarán una fabulosa exposición individual, en la cual presenta 33 obras pintadas en Bariloche los dos últimos años. En esta muestra Juan se “desnuda” ante nosotros, nos muestra su atelier, su casa, su parque, sus afectos y su entorno: nos deja contemplar su vida cotidiana. En todas Juan pinta “el silencio”. Por eso la titulamos “Lascano íntimo”. En sus bodegones aparecen colores y matices a los que no estábamos acostumbrados. Su paleta de “tierras” se ve enriquecida con los azules, bermellones y dorados, como las manzanas que cada otoño le regala un vecino, o las calabazas que va a buscar especialmente a El Bolsón.

“El Botijo”, óleo sobre hardboard, 50 x 50 cm, 2008. Colección Zurbarán.

“Rojas Manzanas”, óleo sobre lienzo, 60 x 70 cm, 2008. Colección Zurbarán.

“Calabazas del Bolsón”, óleo sobre lienzo, 70 x 80 cm, 2009. Colección Zurbarán.

“Verdes Manzanas”, 2007. Colección D.S. y S.S.

También nos trae la visión del interior de su casa, que reconoce es muy cómodo para pintar porque no importan ni la temperatura, ni el viento de afuera y siempre está

disponible. Es un placer captar la atmosfera del interior, como lo hacía el genial Vermeer. “Rincón de trabajo” es sin duda una de sus obras cumbre. No podía faltar la gata, compañera de su taller y fiel testigo de sus pinturas. En sus paisajes nos muestra el mundo que lo rodea: su

parque, la entrada de su casa, la estepa y las cumbres de la cordillera, en las cuatro estaciones. El producto de sus sesiones semanales de desnudo está presente también en esta muestra.

“Rincón de mi Estudio”, 2008. Colección Zurbarán.

“Rincón de Trabajo”, 2009. Colección S.P.L.

“Desde el Lago”, 2009. Colección Zurbarán.

“Felino”, 2009. Colección S.E.

“Anochecer en mi Jardín”, 2009. Colección Zurbarán.

DESNUDOS

a pureza y ternura de la piel de sus modelos nos muestra a un artista sereno, seguro y contundente. Para mí es lo mejor de la obra de Juan. El desnudo de mujer tiene todo: volumen, textura, poder, armonía, color… Es el color de la piel lo que le deslumbra, producto del juego de la luz sobre los volúmenes de sus modelos, que siempre deben tener curvas y armonía, muy diferentes a las actuales modelos de pasarela. Prefiere a las modelos que no toman sol, ya que en las pieles blancas, como de marfil, se reflejan tonos insólitos: grises, verdes, lilas. Busca rescatar la sencillez y naturalidad de la modelo. Piensa que sus desnudos son “retratos del cuerpo de ellas”, pero no es el rostro lo que destaca en los mismos, todas parecen mujeres anónimas a nuestros ojos. Pero si los observamos detenidamente en cada una de sus obras hay

“El Reposo”, 2009. Colección Zurbarán.

individualidad, ya que destaca él, aquello que lo deslumbra, no son ideales, son “sus mujeres”. Cuando vivía en Buenos Aires tenía a dos modelos con las que trabajaba siempre, y aún lo sigue haciendo cuando está en la Capital. Al mudarse a Bariloche, unos pintores vecinos que se reunían a pintar, y contrataban una modelo, lo invitaron a unírseles. En determinado momento esta chica dejó de posar, y se quedó sin modelo. Enseguida enviamos una gacetilla a toda la prensa de Bariloche diciendo que Juan buscaba modelo y “empezó a sonar el teléfono de casa a cada rato. Enseguida tenía una lista de veinte modelos, todas de primer nivel, edades y cuerpos diferentes, con profesionalidad y seriedad extraordinaria”.

“Desnudo”, 2007. Colección Zurbarán.

“Recostada”, 2006. Colección C.P.B.

Actualmente trabaja con cuatro modelos. A todas Juan, suele preguntarle ¿por qué posan? El 90% de las mujeres le contestan: porque es una experiencia nueva. Pero una se tomó el tiempo para contestarle con una hermosa carta, con un nivel de elaboración fantástico y razones muy serias. Dice que: “comparto el valor que Juan otorga al cuerpo esencialmente femenino, ese cuerpo que es saludable tanto física como psicológicamente”. “(...) Como mujer de cuarenta y pico siento que mi cuerpo está ‘a punto’ y siento la imperiosa necesidad de hacerle un homenaje a mi cuerpo”. “(...) Juan ‘crea’, y a mí me complace ‘verme’ convertida en una buena obra de arte: mi narcisismo se nutre (no posaría para un pintor ‘malo’…)” Culmina diciendo: “Estoy segura de que ambos, artista y modelo, enriquecemos nuestra subjetividad al participar de un acto creador”.

Rafael Squirru escribió un interesante análisis sobre sus desnudos, dice que son sensuales y eróticos, pero no provocativos. “Se trata de Evas que aún no mordieron la manzana, y que no sienten el pudor de ocultar su bellísima desnudez”. Juan pinta desnudos grandes y pequeños, a la acuarela y al óleo, verticales, horizontales, ovalados y hasta redondos: “meter una figura dentro del círculo es bastante complicado, pero muy lindo”, dice. En estos, generalmente se concentra en una porción del cuerpo y nos dice que así, más que nunca, se pueden comparar las formas y curvas del cuerpo femeninos con las de una vasija. Los volúmenes y las transiciones de luz y sombra, las trata como lo hace cuando pinta un bodegón.

“Pureza”, 2004. Colección C.P.B.

“Desnudo”. Colección C.P.B.

La mayoría de las veces están acompañadas de telas de diferentes colores y texturas. Y en pocas agrega otros elementos a la composición: “no suelo agregar cosas a los desnudos, para mí la presencia del cuerpo es tan grande que me cuesta ponerle algo al lado, alguna vez una silla…” Una de las excepciones es “Arte y Música”, en la que incluyó una mandolina que le prestó un amigo.

“El día” y “La noche” tienen la particularidad de incluir a la modelo en el paisaje, situación que a Juan le atrae mucho: “Quiero que la modelo pose en la naturaleza. Es extremadamente complejo por el viento, los bichos, el sol y además tiene que hacer calor. Tengo rincones apartados en mi jardín donde podría posar bien, seguiré intentando...”, nos dice.

“Arte y Música”, 2004. Colección C.P.B.

“El Día”, 2005. Colección C.P.B.

“En el Bosque”, 2011. Colección Zurbarán.

“Descanso”, 2009. Colección G.G. Kentucky, E.E.U.U.

“El Descanso”, óleo sobre lienzo, 100 x 120 cm, 2013. Colección Zurbarán.

2010 Cinco Exposiciones Noroeste

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“Perchero”, 2010.

“Perchero” es un autorretrato de Juan, es su intimidad, es la entrada de su casa, su campera, sus sombreros y guantes.

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CINCO EXPOSICIONES

l 2010 fue un año excelente, de mucho trabajo, exposiciones y viajes. ¡Pintó 30 obras y 20 acuarelas! Siempre con la misma convicción: “Pinto lo que creo bello. No creo en el arte que juzga al mundo, creo en el que lo refleja…” En su taller de Bariloche pinta una composición de interior que tituló “Perchero”, y que justamente representa un bello mueble de madera de donde cuelgan sacos, sombreros, guantes y bufandas, algo típico en las casas sureñas. Además, éste tiene un espejo en el cual se ve reflejado el cuerpo del artista.

A principios del 2010 pasa unas vacaciones en Río das Pedras, Brasil, junto a su mujer María Elena y sus hijos y nietos. Como de costumbre, lleva sus acuarelas y pinta algunos paisajes al aire libre.

“Brasil, Rio das Pedras”, acuarela, 15 x 24 cm, 2009. Colección Zurbarán.

Caminando con Luca, nieto de María Elena, en Rio das Pedras.

En su taller de Bariloche.

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Con María Elena, Lucía, Cecilia y Pablo con su mujer María, en Brasil.

El 20 de marzo inaugura una exposición individual en Zurbarán Pilar. Se trata de una selección de “Paisajes” de Cariló, Bariloche y las sierras cordobesas, adonde viaja asiduamente a visitar al hijo de su mujer que vive en El Huaico, un paraje del valle de Traslasierra, a diez kilómetros de Mina Clavero. En estos viajes aprovecha para recorrer también lugares más alejados, como Capilla del Monte y Merlo, en la provincia de San Luis.

“Córdoba, El Huaico”, acuarela, 2010. Colección Zurbarán. Cerca del Museo Rocsen en Nono.

“Capilla del Monte”, acuarela, 2010. Colección Zurbarán. En Merlo, San Luis, junto al Algarrobo Abuelo.

Con Felipe y Luca Stefanoni, en Merlo, San Luis.

“Córdoba, La Quebrada”, acuarela, 2010. Colección Zurbarán.

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En abril expone en Zurbarán Santa Fe un conjunto de obras realizadas en la última década y brinda una clase magistral con modelo vivo, en el Centro de Convenciones.

“Cerro López, Alta Patagonia”, 2009. Colección Zurbarán.

El 11 de septiembre viaja a Tucumán para inaugurar su exposición en la sede de la Sociedad Rural. Realizó para el público una visita guiada en la que contó detalles y anécdotas de las 16 obras expuestas que fueron realizadas a lo largo de una década.

“Meditando”. Colección E.B.

Lascano en visita guiada Tucumán.

El 2 de julio realiza una exposición antológica en el Museo de la Catedral de La Plata, integrada por 37 obras que representaban treinta años de trabajo, desde “El Armario” de 1979, hasta los paisajes pintados en Bariloche en 2009, pasando por una selección de sus flores y bodegones.

En la inauguración de La Plata junto Monseñor Aguer.

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Catálogo de la muestra.Tucumán

En noviembre realizamos en Zurbarán una exposición antológica de veinte obras de sus últimos 20 años: bodegones, paisajes, flores y desnudos, que pudimos disfrutar hasta marzo de 2011. Elba Pérez escribe una excelente crítica en la revista ADN del Diario La Nación, dice que la luz es más nítida en las obras pintadas en Bariloche, y que “(...) El de Lascano es un arte deliberado, reflexivo, atento al comportamiento del modelo en el devenir lumínico de la jornada y a los tiempos -físicos y químicos- de la materia, el óleo”. Pinta especialmente una composición para el Estudio Alegria,

Buey Fernández, Fissore & Montemerlo, en el que Juan buscó que estuvieran simbolizados todos los integrantes del estudio: Héctor Alegria representado por sus libros; Buey Fernández está representado con la escultura de bronce de un buey, que tiene la base rota y arreglada, ya que el estudio es especialista en el tratamiento y solución de las quiebras. Miguel Montemerlo está simbolizado con un paisaje de la comuna italiana del mismo nombre, cerca de Padua, en la región del Véneto. Finalmente, la obra está firmada “Fissore”, otro de los miembros.

“Estudio Alegria, Buey Fernández, Fissore & Montemerlo”, 2010. Colección del Estudio.

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NOROESTE

fines de 2010 y principios del 2011, recorren con María Elena el Noroeste en auto, partiendo del norte de Córdoba donde visitan a los nietos de ella y al pintor Mario Sanzano, en Deán Funes. Siguen hacia el norte hasta Salta y Jujuy, donde Juan queda deslumbrado por el Cerro de los Siete Colores. Regresan por los valles Calchaquíes, conociendo Molinos, Cafayate y continúan hasta el Parque Nacional Talampaya, en La Rioja. En sus viajes siempre

lleva como mínimo una cajita con acuarelas, pero reconoce que no siempre encuentra el momento o se dan las condiciones para pintar. “Para pintar tenés que estar solo o con una persona que pueda acompañarte, en el sentido de darte los tiempos. Cuando hay mucho para conocer y hacer, no se puede… no lo disfruto, porque siento que puedo incomodar a los demás si me tienen que esperar”, nos cuenta Juan.

Pintando en la Hostería de Molinos, Salta 2011.

“La Vieja Hostería”, óleo sobre tabla, 70 x 50 cm, 2011. Colección Zurbarán.

En el Parque Nacional Talampaya.

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“Iruya, Salta”, acuarela, 2010. Colección Zurbarán.

“Membrillos”, óleo sobre lienzo,

“Sombras”, óleo sobre lienzo,

70 x 90 cm, 2009. Colección Zurbarán.

120 x 70 cm, 2010. Colección Zurbarán.

“Cerro de los Siete Colores, Purmamarca”, 2011. Colección Zurbarán.

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2011 Paisajes y Desnudos ÂżQuĂŠ es el Arte?

“Desnudo”, “Cerámicas” y “Fantasma”.

Un año para recordar: una espalda fabulosa “Desnudo”, el mejor de sus bodegones “Cerámicas” y el primero de sus paños “Fantasma”.

PAISAJES Y DESNUDOS

n septiembre realiza una nueva exposición individual en Zurbarán, integrada por 38 obras: 17 paisajes de Bariloche y Cariló, 15 desnudos y sólo 5 bodegones pintados en los últimos dos años, lo que demuestra sus actuales preferencias. Cuando vivía en Buenos Aires era mayor el número de bodegones, y los paisajes eran muy pocos. También incluye por primera vez un paño, al que titula “Fantasma”. Juan, como de costumbre, realiza visitas guiadas recorriendo la muestra, en las que cuenta al público su forma de crear.

“Tres Manzanas”, 2010. Colección M.A.E. y Sra.

“Bodegón con Quesos”, 2011. Colección D.M. y Sra.

Visita Guiada.

“Serenidad”, 2011. Colección J.P.

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Jorge Bertellotti, Lascano e I.G.Z.

Es que, en Bariloche, además de la inevitable atracción por pintar sus paisajes, Juan ha logrado tener cuatro modelos, con las que se volcó a pintar más asiduamente el desnudo. Para terminar una obra necesita generalmente tres sesiones de tres horas, y luego, en una cuarta, ajusta el fondo. Dice:

“No pinto desnudos por erotismo sino por estética: nada supera el cuerpo de una mujer”, y agrega: “Yo no reflejo en mis obras una mujer desnuda, yo pinto mi visión de una mujer desnuda, si cuarenta pintores están pintando la misma modelo, tendrás cuarenta visiones diferentes…”

“Entretelones”, 2011. Colección Zurbarán.

“El Despertar”, 2011. Colección E.E. y C.E.

“Mañana de Verano”, 2011. Colección Zurbarán.

“Desnudo sobre Fondo Blanco”, 2011. Colección Zurbarán.

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“Pelirroja”, óleo sobre lienzo, 80 x 60 cm, 2011.

“Marfil”, óleo sobre lienzo, 120 x 70 cm, 2011.

Colección Zurbarán.

“Arabesco”, óleo sobre lienzo, 50 x 90 cm, 2011. Colección Zurbarán.

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¿QUE ES EL ARTE?

l arte “es aquello que alegra la vida y el espíritu”, decía Santo Tomás de Aquino. Para Michel Camdessus es “aquello que me emociona”, y para Henri Matisse “el arte es un cómodo sillón para contemplar la vida”. Para Juan Lascano: “El arte es armonía, algo sensorial y espiritual, no intelectual o conceptual”. Lo llaman “el dueño de la luz” o “el poeta de la luz”. Es que para él, el impacto visual de la luz, es lo primero para la construcción de una obra.

Yo prefiero llamarlo “el mago de la luz”, ya que me sorprende siempre. En el mismo mes de septiembre, en la exposición “Vinos y Bodegas” en La Rural de Buenos Aires, invitamos a un grupo de artistas a pintar toneles. Juan pintó en vivo a una modelo de espaldas. En octubre visita Puerto Madryn y la península Valdés, en la provincia de Chubut, con María Elena y unos amigos.

El artista, la modelo y la obra.

Pintando una acuarela en Península Valdés.

“Puerto Madryn”, 2012. Colección Zurbarán.

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2012 Viaje a Italia Acuarelas Gregorio

Varias acuarelas de gran calidad como “Médano, Cariló”, “Cerro y Lago, Bariloche”, “Sol y Nieve, Bariloche”, “Colonia, Uruguay” durante este año de viajes.

VIAJE A ITALIA

n mayo de 2012, Lascano viaja a Italia junto a su mujer y su hija Lucía. Recorren Roma, donde Juan se entretiene tratando de encontrar el lugar exacto desde donde su admirado Velázquez pintó dos paisajes, durante su estadía en la Villa Médici. Toman el tren hacia el norte y visitan Florencia, Venecia, Vicenza, Verona, Cremona, Bérgamo, con sus maravillosos museos e iglesias. Luego pasan unos días en el sur, recorren Sicilia: la ciudad de Palermo, y las bellísimas construcciones griegas de Agrigento y Taormina. Durante este viaje Juan desgraciadamente no pintó obras. ¡Había mucho para recorrer y conocer!, pero sí aprovechó para comprar pinceles y pigmentos: “Italia es un país de

piedra prácticamente, tiene montones de tierras, de óxidos naturales que tienen unos tonos fantásticos. Con esos pigmentos en polvo se hace el óleo, al mezclarlo con aceite, que puede ser de lino, de nueces, girasol. A veces los incorporo a mis obras.” Lascano es un gran conocedor de las técnicas, y si él se lo propone podría perfectamente fabricar sus pinceles y pinturas, y hasta el papel. Nos cuenta: “de vez en cuando me hago mis colores, con el mortero como se hacía antiguamente, y obtenés una textura diferente. Igual, creo que los colores modernos son fantásticos, yo soy un enamorado de la técnica moderna.” Hace años residió en Venecia y pintó algunas maravillosas obras.

Plaza San Marcos con Lucía.

En Venecia.

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En Florencia, Santa María Novella, con María Elena y Lucía.

ACUARELAS

urante este año no terminó muchas obras, sólo cuatro óleos y una veintena de acuarelas. En julio realizamos en Zurbarán la exposición “150 Años del Arte de los Argentinos”, con una selección de importantes obras de nuestra colección: Pueyrredón, Della Valle, Fader, Quirós, Pettoruti, Figari y Soldi, entre otros. Juan nos dio en forma didáctica, a través de visitas guiadas, su visión sobre estos grandes artistas.

Juan junto a María Gutiérrez Zaldívar en la inauguración.

Visita guiada de Juan Lascano en la muestra “150 años del Arte de los Argentinos” en Zurbarán.

“Rompiente, Cariló”, acuarela, 20 x 40 cm, 2012. Colección Zurbarán.

Como lo había hecho también en 1999, este año Juan dedica una exposición individual a las acuarelas. Se inauguró el 15 de agosto en Zurbarán Selección, bajo la dirección de María Gutiérrez Zaldívar. Titulada “Cuaderno de Viaje”, esta vez fueron los paisajes los protagonistas absolutos, producto de sus viajes por Puerto Madryn, Bariloche, Cariló, Patagonia, Brasil, Colonia y Córdoba. Expresó el artista: “Siempre que viajo llevo conmigo un pequeño equipo de acuarela y me las ingenio para encontrar el lugar y el momento para pintar. Más que por diferentes países viejo por diferentes luces. La atmósfera húmeda y salitrosa del mar, la sequedad vibrante de Córdoba, la nítida precisión de los lagos y bosques de la Patagonia, la pesada luz de una tormenta brasilera son mi alimento. Soy un coleccionista de luces…”

“Valle Encantado, Neuquén”, acuarela, 2012. Colección Zurbarán.

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El 14 de noviembre, con la organización de Zurbarán Santa Fe, inauguró una exposición de acuarelas en el Lawn Tennis Club, que cumplía 101 años y lo festejaba con su muestra. La ciudad pudo disfrutar de una riquísima jornada con el artista, titulada “Un día con Lascano”, en el Hotel Los Silos y brindó una conferencia en la Bolsa de Comercio.

Lascano en Santa Fe.

“En los Bosques de Cariló”, acuarela, 2012. Colección Zurbarán.

“En la Mañana en Cariló”, acuarela, 2012. Colección Zurbarán.

“Capilla del Monte, Córdoba”, acuarela, 2012. Colección Zurbarán. “Piedra y Madera, Bariloche”, acuarela, 2012. Colección Zurbarán.

“Rincón de mi Jardín”, acuarela, 2012. Colección Zurbarán.

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“Bosque y Montaña, Bariloche”, acuarela, 2012. Colección Zurbarán.

GREGORIO

l día 4 de diciembre se casa su hijo Gregorio, quien el 12 de septiembre de 2013 le da a su primera nieta: Joaquina. Ese mismo día Gregorio escribe unas palabras para su padre.

Mi papá es lo que hace y lo que hace es lo que él es. Es realista, honesto, tiene luces, tiene sombras, tiene figura, tiene fondo, tiene reflejos, tiene matices y tiene naturaleza. Pero, tal vez, los aspectos que más se mimetizan entre mi papá y su obra son la libertad, la transparencia y el silencio. Silencio para observar, no sólo mirar. “Aburrite. Te hace bien”, me dijo miles de veces cuando era chico y más ansioso de lo que hoy soy. Esa idea, detestable e inentendible para mí en aquellos días, significaba –en realidad- pensá, creá y, sobre todo, conocete. Cuando mi papá deja perdida su vista en el horizonte de un lago patagónico o en las páginas de un libro, en realidad, está más alerta que nunca. Su momento de mayor lucidez. Tal vez, la reacción después de ese momento de contemplación, es su arte. Dejar que sus manos interpreten la realidad que va tallando la luz, sin que ninguna idea o preconcepto interfieran. Libertad para hacer y transformar. Hace poco leí a un autor que decía que el trabajo es la mejor herramienta que tiene una persona para desarrollar su personalidad y transformar al mundo que lo rodea. Si es así, y yo creo que realmente lo es, mi papá es un gran trabajador. Como toda artista, mi papá tiene el don y el yugo de tener la posibilidad de sublimar su existencia sin necesidad de otras cosas o estructuras más allá de los colores, los pinceles, una tela y la luz. No hay jefes, compañeros, éxitos o proyectos que hablen por nosotros. Es cuestión de tener el valor de enfrentarse a un espacio en blanco y expresarse. Transparencia –bien podría ser, también, honestidad- para hacer que las obras no pasen mensajes más allá de lo que muestran. Y que, si alguien se emociona con un cacharro, un horizonte, una espalda o una flor, sea por algo íntimo y personal de su propia vida y no por una consigna buscada o un símbolo explícito en la obra. A Papá le gusta que sus obras gusten, pero no las hace para eso. Mi papá pinta para ser honesto con sí mismo. Por eso es tan exigente, por eso nunca está pintando como a él realmente le gustaría. Porque mi papá sigue siendo un joven platense que pinta lo que ve sin pretender que eso sea la realidad. Sino, simplemente, un nuevo suspiro de arte para que el mundo sea cada vez más lindo.

Gregorio Lascano 12 de septiembre de 2013 Gregorio y Juan.

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2013 Dos Artistas, dos miradas Bodega Ortega Fournier Exposiciรณn en Zurbarรกn Finale

“Valhalla” , Colección J.C.B. y M.S.B.

Sin duda, las 24 obras firmadas este año son el mejor conjunto que presentó en una exposición individual. Su “Valhalla”(paraíso vikingo donde se cazaba y se libraban las batallas) es su mejor paisaje. Sus paños son un derroche de luz y creatividad, en fin, todo me gusta. Valió la pena esperar dos años para disfrutarlas.

DOS ARTISTAS, DOS MIRADAS

l 29 de mayo de 2013 Juan invitó a Juan Manuel Jaimes Roy a su taller de Bariloche, a pintar un bodegón. Uno al lado del otro, cada uno con su caballete, su tela y sus pinceles, frente al mismo modelo: un botijo y unos panes. Queríamos poner en práctica y demostrar la teoría de Juan: que frente al mismo modelo, todos hacen cosas diferentes. El Papa Francesco opina igual; expresó en septiembre de 2013: “(…) Y por tanto el hombre, con el tiempo, cambia su modo de percibirse: una cosa es el hombre que se expresa esculpiendo la Niké de Samoracia, otra la de Caravaggio, otra la de Chagall y, todavía, otra la de Dalí. Las mismas formas de expresión de la verdad pueden ser múltiples…” Juan Manuel Jaimes Roy nos cuenta sobre este encuentro: “Esta experiencia fue muy enriquecedora, la buena ventura

de poder trabajar a la par con un gran maestro de la pintura realista actual, como es Lascano ya es todo un placer. El poder compartir experiencias personales de técnica, color, materiales, siempre es grato. Él tiene una técnica realmente fabulosa, ya que logra manejar de forma exacerbada la luz. Tiene el virtuosismo del pincel para plantear la obra ‘alla prima’. Yo, en cambio, primero hago un dibujo y voy, desde una improvisación de grisalla, puliendo cada vez más lo que estoy pintando, para asemejarme a la realidad del modelo a tratar. Más allá del procedimiento, vimos que el resultado tiene diferencias notorias, haciendo a cada obra única y distinta de la otra. La impronta pictórica y personal sea quizá como el ADN del artista, único”.

Los artistas distendidos con la tarea ya cumplida. Fotografía: Tamara de Vanssay

Juan y Juan Manuel pintando en Bariloche. Fotografía: Tamara de Vanssay

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El modelo. Fotografía: Tamara de Vanssay

“Artesanal” , Juan Manuel Jaimes Roy, Colección Zurbarán.

“Artesanal”, Juan Lascano. Colección A.T.

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BODEGA ORTEGA FOURNIER

l 1º de junio viajó a Mendoza para la inauguración de su exposición en la Bodega Ortega Fournier. Diez grandes obras de las dos últimas décadas, lucen en las cavas, y abarcan las temáticas del bodegón, la figura y el paisaje. Los invitados recorrieron la muestra con una visita guiada que ofreció Juan.

Concebida desde un nuevo concepto, la bodega presenta una arquitectura fantástica al pie de la cordillera, un lago artificial rodea un deck desde donde podemos observar los Andes reflejados en el agua. Tiene también una gran actividad gastronómica y artística.

Juan y José Manuel Ortega.

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Juan, María Elena y familia Bordón.

Obras de Lascano en el interior de la bodega.

La obra “El Descanso” expuesta en la bodega .

Juan dando la visita guiada.

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EXPOSICION EN ZURBARAN

l 13 de septiembre inauguramos su exposición, en la que presenta 24 nuevos óleos, entre desnudos, figuras, paisajes de la Patagonia, Córdoba, Salta y Jujuy. Se destacan dos bellísimas vistas del jardín de su casa, pintadas desde el interior.

“Desde mi Ventana”, 2013. Colección M.S. y A.S.

tonos, matices y valores. Mis paños parecen detallados, pero si te acercás son muy espontáneos y sueltos. Hay pocos retoques. Es el antiguo estilo ‘alla prima’”.

“Adentro y Afuera”, 2013. Colección Zurbarán.

Pero, sin duda, lo que más nos sorprende es su nueva serie de paños. Nos cuenta Juan: “Pintar paños me desliga por completo del tema del ‘parecido’. Yo pongo el modelo, lo pinto y, una vez terminada mi obra, éste desaparece. No existe presión de retratar algo reconocible. Es un tema completamente abstracto y sin connotaciones, por lo menos de mi parte. Su significado o ‘mensaje’, si lo tuviera, carece de peso ante la presencia de la luz. O sea que ése es el mensaje. En una palabra, es pintura en estado puro. Pintura de primera intención, juego libre de pinceladas,

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Los Simonián en la inauguración.

Juan Carlos Bagó, IGZ, Juan Mirenna y Juan.

La familia Gutiérrez Zaldívar junto al artista.

“Verdes Nuevos”, 2013. Colección M.S. y A.S.

“Vasijas”, 2012. Colección Zurbarán.

“Sierras Grandes de Córdoba”, 2013. Colección Zurbarán.

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“Monte Tronador”, 2013. Colección Zurbarán.

“Limay Arriba”, 2013. Colección Zurbarán.

“Viene la Nieve, Cerro Capilla”, 2013. Colección Zurbarán.

“Cerros Nevados”, 2013. Colección Zurbarán.

“Tarde en la Montaña”, 2013. Colección Zurbarán.

“Piel de Cebolla”, 2013. Colección Zurbarán.

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“Ensimismada”, 2013. Colección Zurbarán.

“Pieles”, 2012. Colección Zurbarán.

“Balcón de Verano”, 2013. Colección Zurbarán.

“Afrodita”, 2013. Colección Zurbarán.

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“Blanco sobre Azul”, óleo sobre lienzo, 100 x 120 cm, 2013. Colección Zurbarán.

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“Blanco sobre Verde”, óleo sobre lienzo, 80 x 160 cm, 2013. Colección Zurbarán.

“Blanco sobre Rojo”, óleo sobre lienzo, 80 x 160 cm, 2013. Colección Zurbarán.

“Violeta sobre Amarillo”, óleo sobre lienzo, 80 x 160 cm, 2013. Colección Zurbarán.

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FINALE

n el prólogo del catálogo de su muestra Juan sintetiza su pensamiento actual: “En el año 2000 se publicó el primer libro sobre mi obra. Han pasado catorce años y mucha vida, pero la pasión de volcar en un papel o una tela mi manera de ver el mundo no ha cambiado. Y, como van las cosas, sospecho que no cambiará mientras viva. “He pensado muchas horas acerca de los motivos y las razones que mueven mis pinceles. Se puede especular largo y tendido sobre el tema, pero nunca se llega a la raíz. No he encontrado un por qué y mucho menos un para qué. Creo que es mejor así. Pinto simplemente porque soy pintor. La importancia y la dimensión de ser artista son muy superiores a cualquier explicación que pueda imaginar.

Tenemos muchas herramientas para vivir lo que nos toca. La razón es solamente una de ellas y, aún con el inmenso respeto que me inspira, no creo que sea la indicada para lidiar con el fenómeno artístico. “El arte nació con el hombre y en el hombre, y sucede cada vez que alguien trata de expresar el impacto tremendo de la belleza sobre el alma. Sé que no hay otra definición de lo bello que la que cada uno haga, pero es esa presencia la que está en el origen del arte. “El artista vive deslumbrado. No tengo otra explicación para lo que hago, ni la necesito. Si alguna vez logro trasladar a la tela aunque sea un reflejo de ese deslumbramiento, me daré por satisfecho. Hasta tanto, sigo intentando”.

Juan en el taller de Montevideo con el retrato de su hijo Gregorio.

En 47 años, desde su primera exposición en 1967, ha realizado 58 exposiciones. En nuestro país expuso en catorce ciudades: Bariloche, Buenos Aires, Córdoba, La Plata, La Rioja, Mar del Plata, Mendoza, Pilar, Pinamar, Rosario, San Antonio de Areco, Santa Fe, Tandil y Tucumán. En el exterior, lo hizo en siete ciudades de Estados Unidos de Norteamérica (New Orleans, Washington, New York,

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Santa Mónica, Houston, Boston y Miami), dos de Europa (Madrid y Cádiz), y dos de América (Punta del Este y Panamá). En cincuenta años ha realizado aproximadamente mil doscientos cincuenta óleos (un promedio de veinticinco por año), y unas cuatrocientas acuarelas, lápices, tintas y sanguinas.

SUS ULTIMAS OBRAS DE SEPTIEMBRE DE 2013

“Matinal”, óleo sobre lienzo, 100 x 100 cm, 2013. Colección Zurbarán. “Madre”, óleo sobre lienzo, 110 x 100 cm, 2013. Colección Zurbarán.

“Recostada”, óleo sobre lienzo, 60 x 120 cm, 2013. Colección Zurbarán.

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CRONOLOGÍA 1947-1999

1947 Juan Gregorio (bautizado igual que su padre) Lascano nació en la ciudad de La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires, Argentina, el 6 de enero. Su padre, abogado y poeta, era descendiente de vascos, con una larga tradición dedicada al Derecho. Su madre, María Sara Szelagowski, descendía de inmigrantes polacos y ejecutaba muy bien el piano. Juan tuvo dos hermanos: Fernando (un año mayor, destacado periodista del Diario La Nación) y Laura (dedicada a la danza clásica). Toda la familia manifestaba sensibilidad y entusiasmo por el arte. Su abuelo materno, Eduardo, era profesor de dibujo del Colegio Nacional de La Plata aunque, curiosamente, nunca fue su maestro. Su abuelo paterno, Juan José, fue su coleccionista casi monopólico y, además, su mecenas, quien adquiría los dibujos del joven Juan.

Juan a los 11 años.

Sus padres, Juan Gregorio Lascano y Sara Szelagowski

Juan (6 años) en la playa con sus hermanos Laura y Fernando

1955 Ingresó al Colegio San José de La Plata, de los Padres Bayoneses, donde realizó sus estudios primarios y secundarios, con excelentes calificaciones. El dibujo era un hobby: copiaba fotos de revistas e inventaba historias y personajes. Los animales y las costumbres del gaucho eran sus temas preferidos.

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Primeros dibujos de Juan.

1957 Realiza su primera obra al óleo. Cuando cumplió los 10 años sus padres le regalaron pinceles, dos bastidores, un caballete y óleos. Un amigo de la familia, el artista Raúl Rivera, fue quien le enseñó a mezclar los colores y la base del oficio.

Juan a los 18 años.

1966

Primera obra pintada al óleo a los 10 años de edad.

1964 Comprende la necesidad de poder trabajar junto con otros estudiantes y comienza a viajar a Buenos Aires para estudiar con el gran maestro catalán Vicente Puig. Concurre a su taller de Callao y Lavalle durante unos veinticinco sábados; en uno de ellos, al llegar, se entera de que el maestro ha fallecido.

Gracias a una bolsa de estudios concedida por el Instituto de Cultura Hispánica de Madrid, Juan viaja a España donde permanece un año (desde el 6 de enero de 1966 hasta el 5 de enero de 1967). Vivía en el Colegio Mayor Hispano Americano Nuestra Señora de Guadalupe, en la Ciudad Universitaria. Toma algunas clases con Julio Moisés, gran pintor realista español. Visita frecuentemente y realiza copias en el Museo del Prado, donde descubre la obra del gran maestro del Realismo: Diego Velázquez. Cautivado por los magníficos paños y el resplandor de la luz en las texturas de los bronces, descubre el rumbo a seguir. Zurbarán, Murillo y El Greco, son también sus maestros preferidos.

1965 Cuando termina el colegio secundario su familia se muda a Buenos Aires, al barrio de San Telmo, y el living de la casa se convierte en el taller del joven artista que recuerda con cariño cómo sus padres soportaban semanas de modelos inmóviles que alteraban la vida familiar. Comenzó a estudiar Derecho en la Universidad del Salvador, pero, luego de rendir algunas materias, le surge la posibilidad de viajar a España por una beca de estudios. Este viaje ratifica su vocación artística, luego abandona la abogacía.

Juan en España a los 18 años .

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1967 Se edita en España el libro “Pedraza”, con 24 dibujos y comentarios de Juan Lascano y prólogo del Marqués de Lozoya. Los dibujos de este libro habían sido realizados en 1966 en el pueblo de Pedraza de la Sierra, provincia de Segovia.

“Cerámica de Pomaire”, grabado, 1969.

Libro ilustrado por Juan Lascano.

Realiza el Servicio Militar. En septiembre inaugura su primera exposición individual en el Instituto Platense de Cultura Hispánica, integrada por 21 obras. Son óleos y dibujos, paisajes de España, bodegones, y 2 retratos de amigos que se prestaron gentilmente como modelos. En noviembre expone 15 dibujos en San Antonio de Areco, como “Homenaje a la Semana de la Tradición”.

Invitación a la inauguración de Galería Velázquez.

1969

En agosto expone en la prestigiosa Galería Velázquez de Buenos Aires 42 obras (entre bodegones y retratos), siendo ésta su primera muestra profesional. Su director, Jorge Luis Cassani, le presta algunos objetos de plata de la colección de la galería para que compusiera sus bodegones. Con sólo 22 años, obtiene un gran éxito de ventas y críticas. Practica también técnicas de grabado.

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“Recuerdo de España”, 1969. Colección Zurbarán.

1970

Gracias al General de Brigada Tomás Sánchez de Bustamante, presidente de la Comisión de Cultura del Círculo Militar, viaja por segunda vez a España, a recorrer los lugares donde había vivido el General Don José de San Martín, y realiza 27 obras que son expuestas en el mes de noviembre de 1970 en el Círculo Militar de Buenos Aires. Simultáneamente, y a tan sólo cien metros, en la Galería Velázquez, realiza su segunda exposición. Integrada por 64 obras, entre bodegones, retratos, paisajes españoles y argentinos, tímidamente expone su primer desnudo.

Catálogo de su exposición en New Orleans.

1972

Viaja a España por tercera vez. En mayo expone en la Galería ISA, de Madrid (30 obras) y en julio lo hace en la Galería Monigry, de Cádiz (12 obras). Luego de pasar una temporada en las Islas Canarias, vuelve a Buenos Aires.

“Bailén”, donde vivió el General San Martín.

1971

En marzo viaja a Estados Unidos de Norteamérica y realiza una muestra individual en la International House of New Orleans, en dicha ciudad del estado de Louisiana. Componen la exposición 23 obras: algunos bodegones y paisajes que llevó desde Buenos Aires y otras pintadas allí (paisajes del Río Mississipi y retratos de personalidades del lugar). Viaja a Washington, donde descubre la obra del gran acuarelista Andrew Wyeth y estudia con pasión las obras de Rembrandt y de Vermeer que se encuentran en la National Gallery.

Juan en la exposición de Madrid.

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Dos de las obras expuestas en Monigry. Juan junto a Beatriz de Borbón e Isabel Pinilla en la inauguración de ISA.

1973

Durante el mes de septiembre expone 15 temples en la Galería Serra, de Buenos Aires. El gran poeta y crítico de arte Rafael Squirru escribe el prólogo del catálogo, en el cual rescata su honestidad estética y la perfección espiritual de las composiciones.

Invitación de la Galería de Arte Monigry.

Juan junto a Cristina Serra y Diana Bassat, dueñas de la Galería Serra.

Patio de Cadiz, obra realizada durante su estadía en España.

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“Hojas de Hierba”, expuesta en Galería Serra.

“Desnudo”, temple, 1974. Colección Zurbarán.

“Ventana a la Terraza”, expuesta en Galería Serra.

1975

En enero viaja nuevamente a Estados Unidos. Expone en Circle Gallery, en New Orleans, paisajes de Buenos Aires, y sus característicos bodegones. En julio expone en The Vaughan House, de Washington DC, y realiza algunos retratos por encargo. La técnica del temple era su preferida en estos años. También trabajaba con óleo, acuarela y lápiz. Rafael Squirru lo incluye en su libro “Pintura-Pintura, Siete valores argentinos en el arte actual”, junto a De Marziani, Giuffré, Mara Marini, Salatino, Laham y Pablo Suárez. Expone con ellos en el Salón Grand Hall del Plaza Hotel, Buenos Aires.

Juan en Galería Serra junto a algunas de sus obras.

1974

En el mes de diciembre sus obras integran la exposición “Seis expresiones de arte”, en la Galería Lagard, Buenos Aires.

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“Uruguay y Viamonte”, temple, 1974. Colección Zurbarán.

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1977

En abril realiza una exposición individual en la Galería Palatina de Buenos Aires, integrada por 20 obras. En noviembre participa de la exposición colectiva “Desnudos”, en la misma galería.

1978

Exposición individual en la Galería Gutiérrez y Aguad y Domingo Biffarella, Córdoba, inaugurada el 25 de agosto. El 7 de diciembre contrae matrimonio con María Lidia Stefanoni.

1979

En abril expone 20 obras en la Galería Palatina, Buenos Aires.

Folleto de la muestra “Pintura Pintura”.

1976

Expone, en abril, 12 obras (temples y óleos) en la Galería Palatina, de Buenos Aires. Realiza el diseño del isotipo de Zurbarán El Arte de los Argentinos. Vive en San Telmo, donde había comprado un pequeño departamento.

Juan a los 29 años de edad.

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“El Armario”, 1979, Colección Zurbarán.

1980

En marzo participa de la muestra colectiva “Homenaje a la Fundación de la Ciudad de Buenos Aires”, en Galería Palatina. En el mes de abril expone en forma individual, por segunda vez, en la Galería Gutiérrez y Aguad y Domingo Biffarella, de Córdoba. El 10 de septiembre inaugura su exposición individual en la Galería Palatina. El 21 de julio nace su hijo Gregorio.

“La Ventana”, óleo, 1980. Colección Zurbarán.

1981 Tapa de catálogo de Palatina.

En enero realiza una exposición individual en la Galería Ta-Nisia de Punta del Este, Uruguay.

1982

Durante el mes de junio realiza una exposición integrada por 27 obras (óleos, témperas, dibujos y acuarelas) en la Galería Palatina de Buenos Aires. Presenta bodegones, desnudos y paisajes de la Patagonia; le atraen especialmente los arroyos y sombríos bosques de Villa Traful, que pinta al aire libre.

Tapa de catálogo de su exposición en Córdoba.

Juan en Villa Traful.

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Pintando en Villa Traful.

1983

Juan era un referente de jóvenes pintores. Agustín Viñas, hoy figura consagrada, le muestra sus trabajos.

“Caracolas”, óleo, 70 x 60 cm , 1982. Colección Zurbarán.

Viñas junto a Juan.

“Caracolas”, óleo, 50 x 100 cm , 1983. Colección Zurbarán.

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1984

El 12 de junio nace su hija María Josefina. Realiza su última exposición en Galería Palatina de Buenos Aires, durante el mes de octubre.

“Troncos”, acuarela sobre papel, 25 x 34 cm , 1985.

1986

Formaliza, en el mes de enero, un contrato de exclusividad con Zurbarán Galería. En junio diseña el isotipo de Colección Alvear de Zurbarán.

“El Bosque”, óleo, 1984. Colección Zurbarán.

Isotipo de Colección Alvear de Zurbarán.

1987

“Murmullos, Patagonia”, óleo, 150 x 100 cm , 1984. Colección Zurbarán.

Obras suyas decoran la sede de la Conferencia Episcopal Argentina: “La última cena”, naturaleza muerta de clara evocación eucarística, es elegida para el dormitorio de S.S. Juan Pablo II. Inaugura, en el mes de agosto, su primera exposición en

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Zurbarán Galería, integrada por 21 óleos con temática de bodegones y desnudos. En diciembre participa de la exposición colectiva “Dos Siglos de Venecia”, con paisajes pintados ese año en la ciudad italiana.

1988

Obras suyas integran la presentación de Zurbarán en Casa Foa ’88, realizada en el Palacio Larriviere.

Invitación de Zurbarán, Casa Foa ‘88.

Tapa de catálogo de su primera muestra en Zurbarán.

Casa Foa ‘88.

Juan junto a Gutiérez Zaldívar en la inauguración.

“Placidez”. Colección N.C.

1989 “Venecia”, óleo, 56 x 48 cm , 1987. Colección Zurbarán.

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El 6 de septiembre inaugura su segunda exposición en Zurbarán Galería, compuesta por 14 bodegones. Expone en Casa Foa ’89.

1990

En Casa FOA ‘90 expone cuatro grandes composiciones referidas a las estaciones del año. Exposición colectiva “Los Signos del Zodiaco” en Zurbarán, del 26 de noviembre al 29 de diciembre.

Algunas de las obras expuestas en Casa Foa. “Duraznos”, óleo sobre lienzo, 80 x80 cm, 1989.

“Nostalgias”, óleo sobre hardboard, 50 x 40 cm, 1989.

“Bosque”, óleo sobre hardboard, 35 x 27 cm, 1990.

“Homenaje a Zurbarán”, óleo, 30 x 155 cm, 1990. Colección M.G.Z.

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1991

Primera exposición retrospectiva, en el Museo Municipal de Bellas Artes, de La Plata, del 8 al 30 de junio. Tercera exposición individual en Zurbarán, en septiembre, integrada por 23 obras. Expone en Casa Foa ´91.

Casa Foa.

“Crisantemos”, óleo sobre lienzo, 70 x 60 cm, 1991.

“El Tonel de Malbec”, óleo, 130 x 100 cm, 1992. Colección Zurbarán.

“Pan”. Colección A.P.

1992

Obras suyas integran la exposición de Zurbarán en Casa Foa ’92, titulada “El loft del enólogo”. Lascano pinta especialmente “El tonel de malbec” para esta muestra. Exposición colectiva “A Century of Argentine Art”, en Hammer Galleries, New York, Estados Unidos, en mayo. Participa en la exposición colectiva “La Vida Silvestre en el Arte de los Argentinos”, en Colección Alvear de Zurbarán, Buenos Aires, en el mes de noviembre.

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Juan Lascano.

“Chianti”, óleo, 70 x 80 cm, 1992. Colección Zurbarán.

1993

Se muda a una casa en Martínez, provincia de Buenos Aires, junto a su mujer María Elena González Estrada. Entre el 9 de septiembre y el 9 de octubre realiza su cuarta exposición individual en Zurbarán, presentando 18 obras pintadas entre 1991 y 1993.

“Las Cosas Simples”, óleo, 100 x 80 cm, 1993. Colección Zurbarán.

Juan, María Elena e I.G. Z. Condecorado.

“Azucenas”, óleo sobre lienzo, 70 x 60 cm, 1993.

“Descanso”, óleo, 100 x 150 cm, 1993. Colección Zurbarán.

Lascano es incluido en el libro “23 Argentine Artists Now”, de Ignacio Gutiérrez Zaldívar, con fotografías de Aldo Sessa y textos en inglés. En octubre viaja a Washington, Estados Unidos, junto a

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Ignacio Gutiérrez Zaldívar y otros artistas argentinos, para la inauguración de la exposición colectiva “Argentine Now”, en el Visitor’s Center del Fondo Monetario Internacional en Washington. Durante el año siguiente, la muestra se presenta en California, Texas, Massachusetts y Florida.

Juan junto a varios de los artistas incluídos en el libro.

Obra expuesta en Casa Foa 1993.

1994

Quinta exposición individual en Zurbarán integrada por desnudos y titulada “La Verdad Desnuda”, se inaugura el 21 de noviembre. Juan fotografiado por Aldo Sessa.

Participa en Casa Foa ’93, realizada en uno de los antiguos edificios de Puerto Madero, puesto en valor para este evento.

Juan en Puerto Madero, pintando la obra emblemática de Casa Foa.

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Tapa de catálgo.

“Angel”, óleo sobre hardboard, 50 x 30 cm, 1994 (derecha), “Intervalo”, óleo sobre lienzo, 100 x 70 cm, 1994 (izquierda). Juan trabajando para la exposición.

Participa en Casa Foa ’94, realizada en los lofts del Palacio Alcorta, con “Panes y vasijas”, entre otras obras. Lascano es incluido en el libro “El Paisaje en el Arte de los Argentinos”, de Ignacio Gutiérrez Zaldívar.

“El Sueño” óleo sobre lienzo, 50 x 110 cm, 1994. “Testigos”, óleo, 60 x 80 cm, 1994. Colección Zurbarán.

Presentación del libro El Paisaje con los artistas .

1995

El 3 de octubre inaugura su sexta exposición individual en Zurbarán, titulada “Primavera”, totalmente dedicada a la temática de las flores.

I.G.Z. junto a Bergara Leumann con el catálogo.

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Exposición colectiva “Martín Fierro”, en la XX Feria del Libro, Buenos Aires. Participa en Casa Foa ’95, en Acassuso, con“El Coleccionista en Parque Las Barrancas”.

Participa en la exposición “El Atelier de Zurbarán”, en Casa FOA ’96. Su obra “Mañanita Campera” participa en el “Homenaje a Florencio Molina Campos”, en la mega-exposición sobre el artista, en el Palais de Glace, Buenos Aires.

1996

En noviembre realiza la séptima exposición individual en Zurbarán, titulada “Los bodegones de Lascano”, en la que presenta 17 obras pintadas entre 1993 y 1996.

“Mañanita Campera”, óleo sobre lienzo, 100 x 81 cm, 1996.

1997 Tapa de catálogo.

Entre el 7 de febrero y el 9 de marzo realiza su segunda exposición retrospectiva, “Los Bodegones”, en el Museo Municipal de Arte “Juan Carlos Castagnino” de Mar del Plata.

“Nobleza Antigua”, óleo sobre lienzo, 65 x 96 cm, 1996.

También forma parte de la exposición colectiva “Don Segundo Sombra”, en la XXI Feria del Libro, Buenos Aires.

154

Invitación a la muestra “Los Bodegones”.

Realiza cinco grandes obras sobre “El libro en la vida cotidiana”, expuestas en el hall de entrada de la XXIII Feria del Libro, Buenos Aires.

“El Libro y el Estudio” , 1997. Colección Zurbarán.

En junio viaja a Panamá, junto a Ignacio Gutiérrez Zaldívar, para la inauguración de la exposición “5 Artistas Argentinos 5”, en la Galería Mateo Sariel.

Juan en la Feria del Libro.

Ignacio Gutiérrez Zaldívar y Juan en el Canal de Panamá.

“El Monje”, óleo, 150 x 150 cm, 1997. Colección Zurbarán.

Participa en la exposición colectiva “Tango”, en el Palais de Glace, que al año siguiente se hace itinerante en importantes ciudades de Estados Unidos. Sus obras ilustran el libro “Tango”, de Ignacio Gutiérrez Zaldívar. En noviembre realiza su octava exposición individual, “Piel” en Zurbarán, Buenos Aires, integrada por 19 desnudos (entre óleos y dibujos).

155

1999

La larga enfermedad de su padre, que falleció en agosto de este año, tuvo a Juan alejado de su trabajo cotidiano.

“Ambar”, óleo, 110 x 140 cm, 1997. Colección Zurbarán. Juan en Cariló pintando sobre su jeep.

“Descanso”, 1997. Colección M.T.S.

1998

Obras de Juan Lascano, Ernesto Bertani, Pablo Curatella Manes y José Marchi integran el stand de Zurbarán en ARTE BA, en el Centro Municipal de Exposiciones, Buenos Aires.

Juan junto a su modelo en el bosque de Cariló

Junto a Ernesto Bertani en ARTE BA.

Juan en el jardín de su casa en Cariló.

156

Exposición individual “Dos horas con Juan Lascano”, realizada el 5 de julio de 20 a 22 horas, en la Reunión Anual de ABA (Asociación de Bancos de la Argentina), en el Salón San Telmo PB, Hotel Sheraton, San Martín 1225, Buenos Aires.

Novena exposición individual en Zurbarán, Buenos Aires, entre el 16 de noviembre y el 31 de diciembre, integrada por 47 acuarelas de los últimos quince años.

Catálogo de la muestra “Dos Horas con Juan Lascano”.

“Día Gris”, acuarela sobre papel, 24 x 32 cm, 1999.

157

BIBLIOGRAFIA

Libros de Ignacio Gutiérrez Zaldívar “23 Argentine Artists Now”, Zurbarán Ediciones, Buenos Aires, 1993 “El Paisaje”, Zurbarán Ediciones, Buenos Aires, 1994 “Nuestra Argentina”, Zurbarán Ediciones, Buenos Aires, 1999 “Lascano”, Zurbarán Ediciones, Buenos Aires, 2000 “Lascano”, Editorial Perfil, Buenos Aires, 2000 “100 Pintores del Arte de los Argentinos”, Zurbarán Ediciones, Buenos Aires, 2006 “Lascano”, Editorial Atlántida, Buenos Aires, 2009

Prólogos de catálogos Cassani, Jorge Luis ( 1969-1970) Córdova Iturburu, Cayetano (1976) Gualdoni Basualdo, Adrián (1987) Gutiérrez Zaldívar, Ignacio (1989-1993-1995-1996-1997-1999-2000-2001-2004-2005-2007-2009-2010-2011 Marqués de Lozoya (1972) Pinasco, Carlos María (2010) Rodríguez de Pareja Nuñez, Olga (1977) Squirru, Rafael (1973-1991)

Críticas y comentarios Aizpeolea, Horacio Andón, Viviana Andrés, Alfredo Armando, Rose Marie Arteaga, Alicia Aubele, Luis Baliari, Eduardo Baxter, Ana Bergadá, Julie Braceli, Rodolfo Braillard, Miguel Brughetti, Romualdo Brunstein, Carolina Camandone, Julieta Casenave, Cecilia Castelar, Diana Castro Gache, Christine Cernadas, Alfredo Collazo, Alberto

Cukierkorn, Ariel De Cicco, María Eugenia Del Río, Andrea Dieguez Videla, Albino Fahsbender, Federico Fertonani, Ana Laura Fiel, Cecilia Galli, Aldo García, María Marta González Rouco, María González Toro, Alberto Gregorio, Luis Grinberg, Erika Gualdoni Basualdo, María Eugenia Guazzone di Passalacqua, Vicky Guillén, Oscar Gutiérrez Zaldívar, Ignacio

Isaac, Grisel Ise, Ernesto Langdon, Juan Francisco Ludueña, María Eugenia Magrini, César Mastromauro, Osvaldo Mateu, Jesica Miró, Gabriela Monzón, Hugo Mortati, Julieta Olivera, Lucila Ortega, Alejandro Paladini, Jorge Héctor Pasik, Daniela Pérez Porcio, Ana Pérez, Ana Laura Pérez, Daniel Pérez, Elba Pinasco, Carlos María

www.juanlascano.com.ar Sus videos más vistos: “5 Minutos con Juan Lascano”: http://vimeo.com/75881480 “Juan Lascano Biografía (Parte1)”: http://vimeo.com/49251917 “Juan Lascano Biografía (Parte2)”: http://vimeo.com/49256952 “Lascano, Bodegones”: http://vimeo.com/49250825 158

Procopio, Pablo Ramos, Carmen María Robles Urquiza, Judith Rotenberg, Alberto Jorge Roth, Pedro Sánchez Saravia, Carlos Scarpetta, Gustavo Serra, Alfredo Sevilla, Ariel Squirru, Rafael Talevi, Julia Vignoli, Beatriz Villafañe, Lorena Virginillo, Silvia Wiñazki, Nicolás Wullich, Mariano Zalazar, Nanu Zapiola, Clara

INDICE

PROLOGOS

10 12 18

2000

20 22 23 25 27 29 30

2001

32 34

Mega Exposición en el Palais de Glase La Adoración de los Pastores

Tandil Punta del Este La Plata: Regreso con Gloria Zurbarán: Nueva Visión Vocación de Grandeza Bariloche Poliglote Cariló

36 38 40

2002

42 44 45 46

2003

50 52 54 56

2004

58 60 62 64

2005

66 68 70

2006

72 74 76 83

2007

Pinamar Valores

Tres Talleres Van Gogh Lascano x 2

Mendoza Una Noche Surrealista Boston

Homenaje a Mendoza, en Zurbarán Bariloche, su Casa y El Casco Art Hotel Exposiciones en Córdoba y Mendoza

84 86 87

2008

88 90 93 94 96

2009

100

2010

102 106

Cinco Exposiciones Noroeste

108 110 113

2011

114 116 117 119

2012

120 122 124 126 132

2013

134

CRONOLOGIA

158

BIBLIOGRAFIA

Pilar China

Retratos Pilar, Rosario y Nuevo Libro Lascano Intimo Desnudos

Paisajes y Desnudos ¿Qué es el Arte?

Viaje a Italia Acuarelas Gregorio

Dos Artistas, Dos Miradas Bodega Ortega Fournier Exposición en Zurbarán Finale

Y Siempre Buenos Aires... La Cata

Patagonia Las Cuatro Estaciones Lujuria de Colores

159

Este libro terminĂł de imprimirse el 4 de noviembre de 2013 dĂa de San Carlos Borromeo