UNIVERSIDAD YACAMBU VICERRECTORADO DE INVESTIGACIÓN Y POSTGRADO INSTITUTO DE INVESTIGACIÓN Y POSTGRADO PROGRAMA MAESTRIA EN EDUCACIÓN AMBIENTAL
Medicina de la Conservación (Ensayo)
Participante: Mariluz Calles Brito C.I: 14.878413
Caicara del Orinoco, Julio 2015 Medicina de la Conservación. En la actualidad, es importante detallar la crisis ambiental en la que se encuentra nuestro planeta, es por ello que los seres humanos deberían reflexionar sobre los efectos de cada una de sus acciones. Sin importar a que escala, el solo tirar un desperdicio al aire libre, ejecuta un efecto domino, debido a que muchísimos seres humanos realizan la misma acción en el mismo momento, aunque no se esté observando, eso está ocurriendo. Afectando no solo el ecosistema como tal, sino la salud de nosotros mismos, para mejorar la comprensión definiremos este término según una instancia de amplia trayectoria en el tema como la Organización Mundial de la Salud (2006); de esta forma
señala que es el completo bienestar físico, mental y social y no solamente la ausencia de enfermedades (p. 1). Tomando como base, la afirmación anterior es de vital importancia, que los seres humanos internalicemos, que estar saludable no es necesariamente; no presentar ningún tipo de patología, es de igual manera y según con lo anteriormente descrito el hecho de estar bien físicamente debe estar acompañado de un bienestar mental y de igual manera el estado social también afecta la vida. De lo anterior mente descrito, es imperante tomar con firme determinación, la decisión de darse cuenta que todo lo que conforma nuestro contorno, es decir, lo que está a nuestro alrededor nos afecta, así mismo el ejemplo antes citado de la persona que tira un papel en un sitio no adecuado para ello, no puede estar saludable sabiendo que lo que está haciendo está mal y que si millones de personas piensan de igual manera, acarreara un insostenible estado de insalubridad a gran escala, de lo cual seriamos victimas todos. En este marco de idea, el hecho de pensar que una acción que nosotros ejecutemos de mala manera, afectara a toda la sociedad, genera un estado de bienestar, sin embargo si la acción no es detenida por ese pensamiento, de igual manera y afianzando en la conceptualización antes detallada, tampoco podríamos estar sanos, puesto que por el hecho, de que el ser humano, necesita estar en contactos con seres iguales por ser un ser gregario, convierte el estado social en un indicador de salud. Es imperante, apelar a la solidaridad, honestidad, amor propio y por la naturaleza, entre otros valores a fin de poder desarrollar de optima manera lo que otros estudiosos denominaron la Medicina de la Conservación, con el fin de dar a conocer que todo lo que ocurre alrededor afecta de manera notoria el entorno y la salud de todos los seres vivos que conviven en el ecosistema llamado Planeta Tierra. La Medicina de la Conservación, toma para su estudio diferentes interacciones entre el hombre y su medio ambiente por ello Jiménez (2008); afirma que el medio natural, le ofrece a los seres humanos una serie de posibilidades, motivando la diversidad de actividades humanas con los recursos que le ofrece la naturaleza (p. 2). Dicha afirmación, permite señalar, que a diferencia de las acciones de los seres humanos la naturaleza en contraposición ofrece todos sus recursos, para que el hombre pueda desarrollarse de optima manera, utilizándolos para su bienestar, sin embargo, en el afán incansable de cubrir las necesidades que día a día se están acrecentando, el hombre no ha discernido y a cruzado el umbral, en su incansable e inagotable necesidad de cubrir sus “necesidades”, destruyendo los recursos que nos ofrece la naturaleza, desarrollando un síndrome de estrés ecológico, puesto, que se destruyen en mayor proporción los
elementos naturales; antes de que estos puedan producirse de manera exitosa nuevamente. Esto coloca a la naturaleza, en una posición bastante desvalida, puesto que no es capaz de producir los elementos necesarios para mantener el equilibrio y proporcionar no solo a los seres humanos, si no, a los seres vivos en general, alimento, agua, aire, protección y estabilidad climática. Organización Mundial de la Salud (2005) (p. 9). Es importante señalar, que la naturaleza no solo le brinda protección a los seres humanos, si no a la gran diversidad de seres vivos que se encuentran como por ejemplo desde los protozoarios que se encuentran en el mundo microscópico, hasta el gran elefante pasando por; reptiles, aves, anfibios peces y mamíferos de menor tamaño, de igual manera hacen vida e interactúan con el gran porcentaje de plantas, que bien cabe acotar están disminuyendo de manera notoria debido al calentamiento global y a la tala indiscriminada, todo esto efecto de las acciones del hombre. Arrivillaga y Caraballo (2009), en su revista, realizan un artículo referido a la Medicina de la Conservación y en el citan a Kock (1996) quien describe de una manera bastante acertada el termino Medicina de la Conservación, señalando que es la relación entre salud humana, salud animal y la influencia del ambiente. Esta especificación, la coloca como una rama multidisciplinaria, puesto que necesita de la unión de la medicina, la veterinaria y la ecología Arrivillaga y Caraballo (2009) (p. 56). La multidisciplinariedad, permite que cada una de las ciencias proporcione sus conocimientos y métodos a fin de enriquecer el desarrollo del objetivo en común, es decir, la medicina humana, la veterinaria y la ecología, aportan sus conocimientos y utilizando sus métodos, estudiando la parte que les corresponde, a fin de lograr la conformación de lo que se denomina la Medicina de la Conservación, que bien como su nombre indica intenta conservar el equilibrio que debe existir entre los componentes de este trinomio perfecto; los humanos, los animales y el ecosistema. El éxito de la rama antes mencionada, se vería reflejada en la conservación y aumento exponencial de la diversidad biológica, que beneficiaria tanto a los ecosistemas como al hombre en general, puesto que esta diversidad es el referente al equilibrio anteriormente señalado, de igual manera es importante señalar que la diversidad ecológica beneficia desde todo punto de vista al hombre; pues es explotada para proporcionar beneficios económicos y de salud entre otros. Anteriormente; se hizo referencia a la búsqueda que hace el hombre por mantener u obtener salud, sin embargo resulta ambiguo que las acciones realizadas por él, tienen los
resultados opuestos, puesto que la llamada crisis ambiental, representa un desequilibrio que favorece la aparición de enfermedades que aminora el estado de salud tanto de seres humanos como de animales, puesto que existen patología que afectan a ambas, pudiéndose hacer referencia de la Enfermedades Infecciosas Emergentes (EIE), Arrivillaga y Caraballo (2009), las define como enfermedades que recientemente han incrementado su incidencia y distribución geográfica incriminando nuevas especies hospedadoras, entre las que se puede mencionar; la Fiebre del Nilo Occidental, La fiebre del Ebola, El síndrome Respiratorio Agudo Severo, entre otras.(p. 56) De igual manera, los autores antes mencionados Arrivillaga y Caraballo (2009) mencionan las Enfermedades reemergentes (ERE), y las definen como; enfermedades que involucran a patógenos que habían sido controlados o erradicados (p. 56), es importante señalar que estas patologías, han aumentado sus regiones geográficas presentándose en zonas donde en la antigüedad no se habían presentado, de igual forma presentan cambios en cuanto a signos y síntomas de la patología original. Las condiciones que han permitido la reaparición y auge de dichas enfermedades, son debido a la destrucción o la mitigación de habitas, con fines de explotación agrícola, minera o de turismo e inclusive el cambio climático. De igual manera, es importante destacar, las zoonosis; son referentes para la ampliación de las enfermedades antes señaladas, puesto que la unión de especies animales domésticas y las salvajes en un mismo nicho ecológico, ha favorecido la propagación de las mismas y el contagio, de una especie a otra incluyendo en esta cadena transmisión al hombre; como es el caso de la Rabia, la Leishmaniosis, El Ebola, la fiebre Aviar, que en la actualidad se están convirtiendo en una de las principales causas de reducción poblacional debido a su alta tasa de mortalidad. La ERE y las EIE, se están convirtiendo en problemas de salud pública, por lo frecuente de sus epidemias que en ocasiones han alcanzado dimensiones de pandemias, conllevando al aumento de tasas de mortalidades, es importante destacar que muchos de estos problemas de salud son tomados en cuenta cuando afectan directamente al ser humano, como es el caso de las patologías antes señaladas, sin embargo, cuando dichos problemas de salud no atacan directamente a esta población si no solamente a una especie o a varias pero referente al sector animal, muchas veces pasa inadvertida o simplemente nos son tomadas en cuenta. Es por ello, la importancia de la Medicina de la Conservación, logrando desarrollar técnicas y estrategias que permitan la preservación de las diversas especies como las mencionadas por Arrivillaga y Caraballo (2009), en el caso de especies animales ellos
proponen: diseño de reservas, reproducción en cautiverio, entre otras, así como la inclusión de las ciencias veterinarias en los programas de salud pública. Es importante, la concientización de la población a fin de evitar o disminuir la destrucción de grandes extensiones de terrenos, porque con ello se generan graves consecuencias como destrucción de habitas, logrando que los organismos que hacían vida en las mismas puedan extinguirse o que migren a zonas que no conforman su nicho original, alterando el equilibrio magnifico de la naturaleza. Lo anteriormente descrito, proporciona razones para convertirse en agente multiplicador de la Medicina de la Conservación, como una excelente oportunidad para mejorar el manejo e interconexión de los componentes de la naturaleza y que todos resulten beneficiados aumentando su gran diversidad. Referencias Bibliográficas. Arrivillaga, J. y Caraballo V. (2009) Medicina de la Conservación. (Documento en línea) Disponible en:
http://www.revbiomed.uady.mx/pdf/rb092017.pdf [Consulta 2015, Julio,
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Edición
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http://www.who.int/governance/eb/who_constitution_sp.pdf [Consulta 2015, Julio, 16].
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