El dĂa para las personas que se dedican al negocio de la venta de leche de cabra inicia cerca de las 3:30 de la maĂąana para venir a la capital a tempranas horas.
Luego de su llegada frente al parque Hula-hula, las cabras son bajadas por sus ayudantes en grupos de tres para dirigirse a los lugares aledaĂąos y de mayor trĂĄnsito de personas.
Cada vaso de leche tiene el valor de un dólar, costo que sus clientes no escatiman en dar inclusive cuando se trata de más de seis vasos por personas; además de eso le atribuyen propiedades curativas a leche que van desde dolores artríticos hasta la impotencia sexual.
De ser agricultor y ganadero Ovidio Ramírez (Derecha) pasó a ser negociante de leche en el centro de San Salvador, lugar en el que está ubicado el mayor porcentaje de la vida productiva informal de nuestro país y en el cual convergen todos los que no logran ser empleados ya sea en la empresa privada o el Estado.
Hasta ahora ya se contabilizan mรกs de cinco puestos donde se comercializa este producto en San Salvador, cosa que para muchos puede ser una manera irreverente de ganarse el sustento diario algo que no comparten quienes ven en este negocio como otra alternativa de tomar leche.
Estos animales generan de 2 a tres vasos de leche en el mejor de los casos y la leche que dan según Ovidio Ramírez, es de calidad gracias al mantenimiento en cuanto a la alimentación de pasto fresco y control veterinario que él mismo les proporciona.
A su llegada la aceptaci贸n de los dem谩s vendedores fue poca ya que no era bien visto por el hecho de que estos animales por su condici贸n hac铆an sus necesidades en el lugar, pero con el pasar del tiempo ha hecho amistades, mismos que hoy figuran entre sus clientes.
Gracias a la dedicaci贸n de Ovidio en el negocio los siete d铆as de la semana ha podido llevar el sustento diario para su esposa y dos hijos, residentes en el municipio de Comalapa, departamento de La Paz.
La notoriedad de sus compradores es que la mayorĂa de ellos son adultos y personas de la tercera edad, ya que la juventud es poca por considerar que la leche tiene el mismo olor que las cabras, cosa que desmienten quienes la consumen a diario.
Las ganancias diarias suman al mes lo que un empleado estatal con tĂtulo universitario estĂĄ percibiendo, algo que gratifica a su propietario y quien piensa seguir creciendo con el negocio.
El reflejo de que “Querer es poder” se evidencia en casos como este, puesto que en sus inicios el propietario de dicho negocio trajo consigo solo dos cabras y poco a poco fue adquiriendo más y con ello un nuevo vehículo para transportarlas.
El negocio de la leche de cabra, una alternativa que alimenta a muchos .
Personas como esta pareja de ancianos, suelen pasar todos los dĂa a tomar sus repectiva leche y disfrutarla ahĂ mismo para luego dirigirse a su lugar de trabajo.
Este negocio es fruto de la poca disponibilidad que se cuenta en el paĂs para tener empleos formales que garanticen el pleno desarrollo de las personas en las condiciones necesarias para poder sacar adelante al paĂs; algo que Ovidio ya empezĂł.
El reloj marcó las 8:30 am y eso significa que es hora de regresar a Comalapa, pensando que el día siguiente será mejor que el de ahora , esa convicción es la que permite que todos sus clientes capitalinos tengan asegurada su leche día a día.