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IV. En cuanto al resto de los años
IV
En cuanto al resto de los años, también es posible apreciar falta de continuidad en la información, lo cual se debe a varios factores, a saber:
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Imposible olvidar los tiempos propios en que transcurrió el movimiento revolucionario que si bien, comenzó en 1910 y se extendió al menos hasta 1917, las condiciones del síntoma postrevolucionario trajeron consigo una serie de reacomodos políticos, militares, pero también sociales y económicos, pasando por procesos que, como la “Cristiada”, también encontraron en Guanajuato un excelente caldo de cultivo.
Llama la atención la forma en que el Sr. Agustín Lanuza integró el que ahora es para nosotros ese grupo documental, expediente que debe haber integrado un legajo en el que es posible apreciar no sólo la presencia de carteles. También se encuentran una serie de recortes de páginas de algunas publicaciones periódicas que pudieron haber sido extraídas para enriquecer con sus notas, el balance de más de un festejo. Es posible que entre las páginas de esas publicaciones periódicas estuviesen integrados algunos ejemplares del semanario El Arte de la Lidia, cuya edición se conoció en nuestro país entre los años de 1884 y 1909. Su aparición en papel era intermitente, y aunque hoy día no se tiene idea exacta de una colección del mismo, mi presupuesto apunta al hecho de que Julio Bonilla, su director iba publicando sus ejemplares de acuerdo al ritmo de las temporadas, pero sobre todo de la capacidad económica que permitiera tal esfuerzo. En otro sentido, el propio Bonilla, cuyo seudónimo era “Recortes”, intercalaba su trabajo periodístico, en otras publicaciones periódicas como El Chisme, El Diario del Hogar, El Imparcial, El Monitor Republicano, El Mundo, El Nacional, El País, El Partido Liberal, El Popular, El Siglo Diez y Nueve, El Tiempo, La Iberia, La Patria o La Voz de México. En cuanto a las españolas, ahí están fundamentalmente El Enano y El Toreo (de Madrid) con las que realizaba labor de corresponsal.
Se desconoce hasta ahora, si el Sr. Lanuza, y dada su revelada afición a los toros que puede comprobarse a través de la composición de este legajo, pudo haber formado otros de similar contenido. A pesar de ser el único que conserva el Archivo Histórico Municipal de la ciudad de Guanajuato, se agradece en estos tiempos el hecho de su existencia.
Como parte del soporte informativo, conviene traer hasta aquí la reproducción de la “Guía del Fondo”, localizado en la Hemeroteca, bajo el título: Colección Agustín Lanuza. “Corridas de toros”.
Guía General del Archivo Histórico de Guanajuato, p. 241