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MARTíndelos Ríos, MiGuel “MiGuel MonTeneGRo”

una vida dedicada al toreo. Felicidades Maestro”.

Curro Montenegro fue un diestro respetado por los toros y tuvo pocas cornadas, y las que tuvo –en valencia, Madrid (las ventas), Barcelona, Mozambique–fueron de poca importancia. como dato curioso, diremos para finalizar este epígrafe, que por ser portugués su apoderado, facilitó que toreara nada menos que en el congo, Angola y Mozambique varias tardes, en tres viajes que hizo.

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MARTíndelosRíos, MiGuel “Miguel Montenegro” Matador de toros y posteriormente banderillero, hermano del también matador de toros Curro Montenegro, del banderillero Rafael y del becerristas José. nació en Granada, en la calle Horno de la corteza, paralela a la de elvira, frente a la parroquia de san Andrés, el día 14 de febrero de 1936, en una familia en la que existía un antecedente taurino, el banderillero de toros Francisco Montenegro, tío materno de su padre.

Miguel, en cuanto tuvo edad, ingresó en la escuela Taurina que por entonces existía en su ciudad natal, y como alumno, actuó en la primera clase práctica que se celebró en la Monumental granadina el 12 de marzo de 1950, con becerras de la ganadería de Pelayo, en unión de Pitorate, Pepito González, Juan Reinoso, Manuel García Galdeano y Miguel Muñoz “el quiqui”, siendo precisamente el joven Miguel Montenegro, el más joven de todos, el que destacó, aunque sus compañeros, también estuviesen muy bien, con valor y voluntad. debido al éxito obtenido en su primera salida a los ruedos, fue incluido en la segunda clase práctica de la escuela, celebrada el domingo, 23 de abril del mismo año, alternando en la lidia de cuatro novillos de d. Francisco Moreno santamaría, con Rafael Mariscal, José María Bernedo “Bojilla chico” y Juan Reinoso. curiosamente, ese día se anunció como Miguel Martín de los Ríos “Montenegro chico”. volvió a triunfar, y el éxito obtenido le facilitó que vistiese por primera vez el traje de luces el día 2 de julio de 1950 en Granada, en contra de lo que dice la monumental obra “Los Toros”, que da la fecha del 8 de julio de 1951 en valladolid, fecha en la que ciertamente toreó en aquella ciudad, pero un año después de que lo hiciera en su ciudad natal. debutó de luces, como decimos, en Granada, el día 2 de julio, con novillos de la ganadería de d. Gerardo Morcillo, alternando con otros dos chaveas granadinos, Bojilla Chicoy Jiménez Atarfe,y su debut no pudo ser más prometedor, pues Montenegro cortó dos orejas y un rabo y salió de la plaza a hombros. como es lógico, la empresa, ante la expectación que el incipiente torero había despertado en el público, volvió a repetirlo en novillada sin picadores el inmediato día 23, con erales de Pelayo, alternando con enrique vélez, Jiménez

Atarfe y Pepito González, sin que esa vez ninguno de los actuantes tuviese suerte. comenzó la temporada de 1951 toreando en Granada el 15 de abril una novillada sin picadores con ganado de Flores Tassara, con Rafael Mariscal y Antonio Gallardo, que fue el triunfador del festejo al cortar dos orejas y salir a hombros de la plaza, mientras que sus compañeros, eran aplaudidos.

Pese a ello, debió gustar su actuación, porque repitió en el mismo coso el 20 de mayo con erales del ganadero d. Francisco Gallardo, alternando con enrique vélez y el triunfador del festejo anterior, Antonio Gallardo, sin que esa vez se le escapase el triunfo, porque Miguel Montenegro cortó dos orejas y abrió de par en par la puerta grande de la plaza.

Aún torearía ese año otra vez en la plaza granadina. Fue el día de navidad, 25 de diciembre, en el festival del club Taurino, en el que con erales de Pelayo, participaron Rafael Fandila, Miguel Montenegro, Rafael Mariscal, Antonio Fernández “Antoñete”, Pepito González y Antonio liñán. ese día la novedad era que el club Taurino había puesto en liza un trofeo, consistente en una medalla de la virgen de las Angustias, Patrona de la ciudad, que la ganó Mariscal. los demás participantes estuvieron decorosos, dándose la simpática circunstancia, que mientras los toreros daban la vuelta al ruedo, iban recogiendo mantecados y polvorones que les arrojaban los espectadores. la temporada de 1951 fue muy buenapara el novillero, pues toreó ese año en buen número de plazas españolas, continuando su carrera ascendente en la siguiente temporada, llegando a sumar 22 novilladas, habiéndose presentado en plazas de importancia, como valencia y Barcelona. en Granada, como no podía ser menos, toreó la primera novillada picada de la temporada, el 20 de abril, con utreros de la ganadería de Belmonte, con Antonio vázquez y Juanito Belmonte, que cortaron cada uno una oreja, mientras que él, se hizo con los máximos trofeos de uno de los novillos y salió a hombros de la plaza. después de ese éxito, su presencia en la Feria del corpus era obligada. Así pues, toreó la novillada picada del viernes, día 13 de junio, segunda corrida de abono, con ganado de la divisa de d. Juan Belmonte, alternando con Antonio vázquez y Juanito Belmonte, es decir, el cartel anterior íntegro, con la diferencia de que esa tarde el único que cortó orejas –tres– fue Montenegro. Por supuesto, salió nuevamente a hombros de la plaza ante el delirio de sus enfervorecidos seguidores. la empresa, ante el clima de pasión que el joven novillero había creado, no dudó en montar otra novillada picada para el día 22 de junio en la que debutase con caballos Rafael Mariscal, incluyendo en el cartel a Miguel Montenegro y a sus dos compañeros de anteriores festejos, que pese a no haber cortado trofeos en el festejo del corpus, habían demostrado sus buenas maneras. ese día fue el debutante quien les mojó la oreja a sus compañeros, cortando la única oreja de la tarde.

la pasión estaba servida. la afición pronto se dividió en dos bandos claramente diferenciados: Montengristas y Mariscalistas, viviéndose la rivalidad más grande que ha existido nunca en Granada desde aquella de Lagartijo y Frascuelo. el 14 de septiembre del mismo año, el club Taurino de Granada organizó en la Monumental, un festival con picadores con reses de santa coloma y los espadas Mariano Martín “carriles”, Miguel Montenegro y Antonio Gallardo, sin que los dos últimos tuviesen suerte. Carriles, sí, y salió a hombros, tras cortar dos orejas, las únicas que se concedieron esa tarde. el 28 del mismo mes, se celebró una novillada picada en la misma plaza, con reses de la ganadería de Montalvo, y la terna formada por Pedro Martínez “Pedrés”, Juan Montero y Miguel Montenegro. Montero salió a hombros al cortar dos orejas, los únicos trofeos concedidos. sus compañeros estuvieron discretos y el público salió contento.

Aún torearía otra vez en Granada, el 26 de octubre, en la novillada picada organizada por el cuerpo General de Policía, con novillos-toros de conrado, mano a mano con su rival Rafael Mariscal. el público volvió a divertirse, sobre todo los seguidores de Montenegro, que vieron como salía de nuevo a hombros al cortar dos orejas, mientras que Mariscal, se conformó con un solo apéndice. en 1953 fue madrugador y toreó el festival celebrado en la plaza de Granada el 25 de enero a beneficio de la cofradía de la Aurora. se lidiaron cuatro becerros de Pelayo, poco colaboradores, por Perete, Miguel Montenegro, enrique vélez y Curro Montenegro, que ya estaba dando sus primeros pasos en el toreo. los toreros hicieron cuanto pudieron, pero no hubo trofeos por las dificultades presentadas por los astados. el 5 de abril se inauguró oficialmente la temporada en Granada con una novillada con picadores, en la que se lidiaron reses de la ganadería de saltillo, por los espadas de moda entonces: Miguel ortas, Miguel Montenegro y victoriano Posada, sin que los toreros se pudieran lucir ni el público, divertir. ni una vuelta al ruedo.

Acto seguido se presentó en la plaza de Vista Alegre, en carabanchel, a las mismas puertas de Madrid; fue el 10 de mayo, y en tal ocasión alternó con Mirabeleño, (padre del matador de toros Juan Mora), y Pirri, luego banderillero de lujo en las mejores cuadrillas, en la lidia de novillos de Bernaldo de quirós. su actuación fue elogiada por el público y la crítica, por lo que fue repetida en el mismo coso. de nuevo en Granada, y ahora, en sustitución de la corrida que se había programado para el 6 de junio, sábado de feria, con toros de santa coloma para los matadores Antonio ordóñez, Pedro Martínez “Pedrés” y Antonio chenel “Antoñete”. Ante las escasez de entradas vendidas, la empresa pensó en cambiar el cartel por una novillada picada en la que interviniesen los toreros de la tierra Montenegro y Mariscal,

acompañados por Antonio vázquez, hermano de Pepe luis, que ya había triunfado otras veces en esta plaza. y no se equivocó d. luís Miranda, porque las taquillas dieron un vuelco en lo económico, y en lo artístico, los tres espadas salieron a hombros de la plaza al cortar las orejas a las reses de Guardiola. el 28 de junio el club Taurino de Granada organizó en la plaza Monumental de la capital, una novillada picada con reses de la divisa de Albaserrada, en la que de nuevo intervino Miguel Montenegro, ahora alternando con los hermanos corpas, carlos y Paco, y con el prólogo ecuestre de Rafael Peralta. los triunfadores de la tarde fueron los hermanos corpas, que cortaron cada uno una oreja.

A pesar de haber sufrido dos cogidas que lo dejaron postrado, una el día 3 de septiembre, en Priego (córdoba), en el muslo izquierdo, y la otra, el día 13 del mismo mes en una ingle, en la plaza de Jerez de la Frontera (cádiz), sus actuaciones llegaron a 24. en la temporada siguiente Miguel Montenegro fue el novillero de moda. Actuó el 28 de febrero con Antonio Borrero “chamaco” en Málaga con corte de un apéndice auricular. Repitió el 28 de marzo y salió a hombros de la plaza, y en Barcelona, también con Chamaco, el 1 de abril, cortó otra oreja. en Huelva, el 19 de abril, con Chamaco de nuevo, salió a hombros de la plaza. es un breve mosaico de cómo llevaba la temporada antes de su intervención en Granada en la novillada picada que se celebró el 15 de abril, segunda de la temporada, con novillos de saltillo, alternando con césar Faraco y Juan Bienvenida, sin que ninguno de los actuantes tocase pelo por las dificultades de los astados. el 9 de mayo toreó Miguel en sevilla logrando cortar una oreja. Poco después resultó cogido en Antequera (Málaga), de cierta gravedad, y reapareció el 13 del mismo mes en Algeciras (cádiz), siendo herido de nuevo, esa vez de gravedad, por un novillo de Flores Tassara, que le infirió una cornada en la ingle que le ocasionó la salida de los intestinos. se presentó ante el público madrileño de las ventas el 25 de julio con novillos de la vacada de sánchez Arjona, alternando en su lidia con Manuel cáscales y Madrileñito, que también era nuevo en esa plaza. su actuación fue discreta y repitió en la misma plaza el día 1 de agosto, con igual resultado. el 12 de septiembre hizo un nuevo paseíllo en la plaza de Granada, con Rafael Mariscal y el malagueño Manolo Segura, lidiando novillos de la ganadería de Bohórquez. los aficionados viejos aún tienen presente aquella actuación. Miguel Montenegro cortó cuatro orejas, dos rabos y una pata; Mariscal, tres orejas, rabo y pata; y el malagueño, pese a no cortar trofeos, fue muy aplaudido y del agrado del público, que llenó la plaza hasta la bandera, colgándose en taquilla el consabido cartelito de “no hay billetes”. ese día, los seis novillos murieron de seis estocadas, y el trofeo “Frascuelo” que estaba en liza fue a parar a las manos de Montenegro.

los mentideros taurinos de Granada eran una olla a presión, y ante ese ambiente tan propicio, el Gobernador civil, d. servando Fernández victorio, aprovechó la ocasión y montó una novillada picada el 10 de octubre, con objeto de recaudar fondos para la campaña de invierno. se lidiaron utreros de la ganadería de d. cándido García, y Miguel Montenegro volvió a demostrar el gran momento por el que atravesaba al cortar cinco orejas y dos rabos, frente a las dos orejas y rabo que cortó su rival Rafael Mariscal. de todas formas, los dos toreros, volvieron a salir a hombros de la plaza, así como sus incondicionales, dando pases por la avenida del dr. oloriz.

A pesar del contratiempo que supone una cogida, que corta la temporada e influye psicológicamente en el torero, sumó en la presente temporada 29 festejos, dejando su cartel en alza y su prestigio incólume. comenzó Miguel Montenegro la temporada de 1955 en Barcelona el día 9 de enero, en una novillada picada en la que se presentaba ante aquella afición el sevillano Curro Romero, con Antonio Gallardo completando la terna. Montenegro y Curro cortaron una oreja y dejaron muy buena impresión. el 22 de mayo, toreó en Granada con Mariscal y el catalán Joaquín Bernadó, que se las entendieron con novillos de la divisa de Guardiola, ofreciendo otra extraordinaria tarde de toros, ya que ambos granadinos salieron a hombros del coso, al cortar Mariscal tres orejas, y dos y rabo Montenegro. el catalán, pese a sus dos faenas artísticas, no cortó trofeos. la espada siempre fue su cruz. de nuevo repetiría en Granada el 10 de junio, segundo festejo del ciclo ferial del corpus, con reses de domecq, alternando con Paco Corpas y Rafael Mariscal; a los dos granadinos esa tarde la suerte les dio la espalda, y no dieron ni una vuelta al ruedo, mientras que corpas, salió a hombros al cortar dos orejas y un rabo. en 1955 vimos a Miguel Montenegro en la novillada picada que organizó el club Taurino de Granada el 17 de julio con un cartel eminentemente granadino con reses de la ganadería de doña enriqueta de la cova, de desigual juego y presentación, con enrique Molina, que abrió plaza y Rafael Mariscal. Pese a no redondear un triunfo apoteósico, los tres espadas fueron muy ovacionados y el público, en general, se divirtió.

Rafael Mariscal fue repetido el 25 de septiembre, y Montenegro, el 9 de octubre, lidiando novillos de Marañón, con Manolo Zerpa y su hermano Curro, que debutó ese día con picadores. el festejo, que cerraba la temporada granadina no pudo ser mejor. Miguel cortó una oreja y Currito Montenegro, las dos y el rabo.

Miguel cerró la campaña con 26 actuaciones, muchas de ellas, con grandes éxitos, pero en contrapartida recibió otra grave cornada en el muslo derecho el día 12 de octubre en Motril (Granada), iniciándose ya su inexorable declive, pues, en la siguiente temporada, sus contratos se espaciaron de tal

forma que solo se vistió de luces en 10 ocasiones, resultando nuevamente cogido, esta vez en la plaza de toros de Granada, el día 30 de septiembre, festividad de la virgen de las Angustias por un novillo de d. Julio Garrido. el pronóstico fue grave. de las dos veces que toreó en Granada en 1956, la primera fue en el segundo festejo de la Feria del corpus, una novillada picada celebrada el día 2 de junio con novillos de Guardiola, alternando con Rafael Mariscal y Curro Puya, que empataron a una oreja por coleta; y la segunda, el referido 30 de septiembre, el último festejo de la temporada granadina, día que resultó cogido gravemente por un novillo de d. Julio Garrido. Alternó con Torcu Varón y Rafael Jiménez “chicuelo”. el valiente torero de Guadix, Torcu Varón, fue el único torero de la terna que consiguió cortar una oreja, poniendo de manifiesto el gran momento que atravesaba. en 1957 Miguel Montenegro toreó el festival que organizaron conjuntamente la Peña Taurina del Bar sevilla, el club Taurino y cervecerías el Águila, para el 10 de febrero con la participación de Rafael Mariscal y después, algunos socios, como Juanini, Francisco osuna, eduardo Hoces, y luís Gómez “el diamante Rubio”, que hizo de Don Tancredo.

Mariscal, que ya había tomado la alternativa en Almería el 27 de enero de manos de enrique vera, cortó una oreja, igual que Montenegro.

Poco después, Miguel decidió tomar la alternativa y la fecha elegida fue la del 21 de abril, en Granada, fecha en la que se inauguraba oficialmente la temporada taurina en la capital de la Alhambra. el cartel fue de lujo, nada menos que Rafael ortega, que en presencia de Miguel Báez “litri” le cedió el toro Pajarito, número 94, negro, de la ganadería de d. Marceliano Rodríguez, irregulares en todos los órdenes: tamaño, casta, peso y bravura, e incluso, más aun, hasta en sus formas de embestir. como se esperaba, a la hora de hacer el paseíllo la plaza registraba un lleno absoluto y se colgó en la reja de la ventana de taquilla el cartel de “no HAy BilleTes”. las cuadrillas hicieron el paseo entre una clamorosa ovación de los granadinos que de esta forma querían alentar al toricantano, primer diestro que se doctoraba en la monumental granadina.

Miguel Montenegro recibió la borla de doctor de manos de Rafael ortega, que le cedió los trastos toricidas para que diera cuenta del ya citado toro Pajarito, negro bragado, número 94, que Miguel había recogido de salida con cuatro verónicas y media que fueron muy ovacionadas. en el tercio de varas, hizo un quite por chicuelinas rematado con una revolera que enardeció a los asistentes, que aún se entusiasmaron más cuando el diestro cogió las banderillas y colocó dos magníficos pares de frente.

Montenegro, vestido de blanco y plata, brindó el toro al público desde el mismo platillo de la plaza e inició la fae-

na junto a las tablas con cuatro estatuarios que levantaron a los aficionados de sus asientos. continuó la faena entre música y oles. Mató de una gran estocada en el hoyo de las agujas y el público pidió para él la oreja, que el presidente concedió. Miguel Montenegro dio una vuelta al ruedo devolviendo prendas entre el fervor de sus paisanos. en el segundo toro, manso de solemnidad que huía de los caballos, Montenegro se dobló con él por bajo, macheteándole, tocándole las orejas para ahormarlo para la muerte. Pinchó tres veces antes de dejar una estocada que fue suficiente. la lidia de este toro transcurrió en una estruendosa bronca del público que protestaba la mansedumbre del pupilo de d. Marceliano. cuando el toro fue arrastrado el gentío irrumpió en una clamorosa ovación al nuevo matador.

Rafael ortega tuvo en su lote a los mejores toros de la corrida, pero en honor a la verdad, hay que reconocer que el diestro gaditano los toreó hasta la saciedad con capote y muleta, sacándoles todo el partido que tenían con el clasicismo que siempre le caracterizó. Al primero, media estocada algo caída. ovación y oreja.

Al segundo, pinchazo y estocada entera en su sitio que bastó. la presidencia le concedió otra oreja con la que paseó el anillo.

Litri, en su primero, un toro bravo y noble, fue muy ovacionado durante su faena, larga y variada, con la que entusiasmó a los presentes. Pinchazo, otro hondo que acostó, pero el puntillero lo levantó. descabello al segundo intento. A pesar del desaguisado con la espada el presidente le concedió la oreja que el público pedía. en el quinto de la tarde, segundo de su lote, la lidia transcurrió, como en el segundo de la corrida, en medio de una tremenda bronca por su escasa presencia. Litri abrevió –se cambiaron los tercios de varas y de banderillas con una entrada y un par–por lo que la bronca arreció, y el onubense, armado de muleta y estoque, lo trasteó por la cara para cuadrarlo. Pinchazo con salto de estoque catapultado a gran altura, otro pinchazo, éste, hondo, y descabello. la bronca, que no había cesado, aumentó de nuevo, ahora haciéndola extensiva al presidente, ganadero y torero. el padrino y el ahijado salieron a hombros de la plaza entre la alegría de todos, que vieron como el nuevo doctor, tan querido por toda la afición granadina había visto su sueño de ser matador de toros hecho realidad. la bronca que casi llegó a ser escándalo público tuvo sus consecuencias, que no se hicieron esperar. días después el Gobierno civil dio la siguiente nota:

“Después de practicadas las oportunas informaciones sobre las irregularidades observadas en la celebración de la corrida de toros que tuvo lugar en la plaza de esta capital el domingo 21 del corriente, se ha dispuesto por el excelentísimo señor gobernador civil el cese tanto del presidente y asesores que actuaron en la misma como del delegado de Espectáculos, habiendo asimismo sancionado

con arreglo a lo dispuesto en el reglamento, al veterinario que intervino en el pesaje de los toros.

Para sustituirlos han sido nombrados: Delegado de Espectáculos, Don José Rodríguez Ruiz, inspector del Cuerpo General de Policía, asesor técnico taurino, al ex novillero Paquito Rodríguez; asesor veterinario, Don Alfredo Puiz Cerdó, y Delegado Gubernativo para presidir los espectáculos taurinos, Don José María Garrido Lopera, Jefe de Negociado de este Gobierno Civil.

En cuanto a otras responsabilidades de índole distinta, se ha elevado a la superioridad la oportuna propuesta sancionadora”.

la corrida de Pascua aún traería más cola, ya que la misma autoridad impuso una multa de 10.000 pesetas a la empresa de la Plaza de Toros por las irregularidades observadas en la corrida del domingo de Pascua de Resurrección. También impuso otra multa de la misma cantidad al ganadero d. Marceliano Rodríguez por razones de orden público, aparte de la sanción de 28.100 pesetas que por falta de peso del ganado le fue impuesta al mencionado ganadero por la dirección General de seguridad.

y sin embargo, a pesar de todo lo anteriormente dicho, el público pareció divertirse según se deduce del resultado artístico: Rafael ortega cortó dos orejas y un apéndice cada uno Litri y Montenegro.

Pese a tan buen resultado, la carrera de Miguel Montenegroya había iniciado la cuesta abajo, y la alternativa, recibida en el peor momento quiso que actuara como una tabla de salvación, pero todo fue inútil. se vistió de luces en esa temporada en cinco ocasiones sin llegar a confirmar la alternativa; de ellas, una en Granada, en la Feria del corpus, el día 30 de junio, último festejo ferial, con toros de Arauz de Robles, y Joselito Huerta y Rafael Mariscal, como compañeros de cartel, con el intermedio ecuestre de la gentil rejoneadora Beatriz cuchet. el mal juego de las reses impidió todo lucimiento por parte de los diestros. la otra, en Motril, el 11 de agosto, mano a mano con Rafael Mariscal, con toros mansos y cornalones, que dieron al traste con la ilusión de toreros y aficionados. en la siguiente temporada ya no actuó de matador de toros. los empresarios se habían olvidado de su nombre. ¡Triste final para un torero tan prometedor! las frecuentes cornadas sufridas durante su etapa novilleríl –10– de ellas, dos muy graves, hicieron sin duda mella en su ánimo.

Miguel Montenegrollegó a la alternativa con 21 años y un amplio bagaje como profesional. Actuó como novillero sin picadores solamente dos temporadas: 1950 y 1951 en las que llegó a sumar 60 festejos entre las dos, sumando desde esa fecha hasta el momento de su doctorado 119 novilladas con picadores. curiosamente, los dos toreros que despertaron más pasión entre los afi-

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