fanzine flores en la basura, número 14

Page 1






UN NIÑO ARTIFICIAL Me habían dado de alta esa misma noche. Recuerdo los ojos de los enfermeros y enfermeras, los doctores… a su vez tan humanos… pero más allá percibía los pasillos vacíos… recordaba la gente y su susurros en mi mente… Pero aun así me dieron de alta esa misma noche… el cielo y su luna inmensa desde la carretera roja como el ojo de un conejo bajando contra la confianza de que jamás se caerá de allí desde su péndulo. Me dolía la cabeza, y mi cuerpo no era mi cuerpo. Acciones en mi recuerdos recordaban la primera vez que vi animales semejantes a los reptiles… y esos recuerdos me hacían matarlos, herirlos con piedras… recordaba ahogarlos en baldes de agua, y sus colas se me partían en las manos… estos seres se me escapaban pero para su bien era correspondido ser un monstruo para jugar con una vida de tal forma. Recordé la playa, el océano y sus orillas llena de grumos llamados rocas… estás se alimentaban de diversa luz del sol y por las noches, al igual pendía la luna roja sobre el cielo… recuerdo el dolor de cabeza que me aquejaba como si hubiese sido hace mucho. Y aun me dolía. Recuerdo romper con cada regla y pensar que el ser humano es repugnante… recuerdo tantas cosas… mientras me llevan a casa… oigo las noches en silencio… oigo como los perros ladran a través de los espejos sus alaridos. Y percibo las sombras de los gatos abajo… en la casa de madera superpuesta a la tierra. Ahora estoy despierto pero ante el recorrido a casa, me he quedado dormido… Me recuesto en la cama y estoy débil. Y mi cuerpo no es mi cuerpo. Vuelvo a pensar en la gente que me despreció. Vuelvo a pensar en el precio de la vida, y el gasto que es la muerte… vuelvo a pensar nuevamente en mi sudor… vuelvo a pensar en el desierto, y los recuerdos se superponen con diversas cosas que me dicen que no estoy bien… Recostado en la noche… oigo aullidos de lobo recortarse, y percibo en mi rostro la piel calentando sus poros… el sudor se siente helado… frío. Y mis dedos se alargan. Veo luces, luego en mí diversos sonidos fuertes que emanan una desesperación cromática ante mis ojos… Lentamente van in crescendo, y desde el interior de los sonidos un grito tan fuerte hace que lamentos de mí reaccionen a un grito semejante y pienso luego que cada cual funciona mal a medida que pasa el tiempo, envejecen… yo estoy envejeciendo ahora… recuerdos de reptil, soy autor de muchas cosas… y sí, soy un asesino que paga su condena como niño. Me duele la cabeza pero siento que no es mi cabeza. Me duelen las manos que se alargan como una pintura de Modigliani y siento como comienzan a endurecerse, como lo que fui antes se vuelven ahora, y de cómo las vidas que suponen ser anteriores las vivo en el presente… y entonces quién soy… un infierno más, el aullido de lobo se acorta, pero nadie de la habitación de mamá sale, porque de allí viene el aullido de lobo… y pienso ¿siempre pensando cierto? pienso en toda la maldita ironía que es el componer del dolor en el cuerpo tirano de la noche opaca. Sólo hay juegos en mí, sólo gritos… sólo dolor, sólo bosque en la habitación de mamá… pero qué es lo que me sucede… si toda esta energía que acumulo es solamente bastedad de lo que tengo… qué sucederá con lo que pronto me oponga el subconsciente… y entonces… pienso en la cosa… la cosa que opone mi destino a esto… qué es… qué vi entonces, en mí, sobre mí cargan un poder que no puedo controlar… y caigo ante todo… mis gritos son gritos… pero no se oyen… esa es la


mis gritos… en sí mis gritos no se oyen… y palpan la puerta los dedos que no son mis dedos… que son de madera… y se funden en transpiración. Tiemblo… y entiendan… mis gritos no son mis gritos… mi cuerpo no es mi cuerpo. Desde la escalera… Percibo el tiempo de un ciego pasar ante mis ojos… todo lleno de probabilidades de otras cosas… de otro mundo. Modigliani actúa en mí, porque de sueños ni hablar… y si todo lo ha sido ya… mi vida un sueño de mala gana… qué puedo manipular… qué sucede entonces con mi persona y con la persona que no soy yo. Veo mis venas moverse dentro de su piel… y percibo cómo mis ojos se llenan de obscuridad… como lianas que se oponen estirándose en ellos… desde hace cuánto tiempo que paso aquí parado fuera de la cama, oyendo al lobo tartamudear… pero qué es el lobo. Y nadie sale de la puerta… sólo mis gritos contra la muralla de Cholguán. Siento como una música resuena en mi interior… y como muchos significados se pierden… y no siento nada, sólo que mi cuerpo no es mi cuerpo. Doy un paso contra la escalera y trato de bajar lentamente contra ella… sólo algo corto, vamos son doce escalones. Uno, desde mi oído derecho el chirrido de una trompeta que acumula el dolor de mi tímpano… (Que no es mi tímpano) Se esclarece de monumentos a la lealtad de mi persona que se pierde. Dos. Bajo las escaleras muchos ojos y caras de inframundo nacen de mí… gritos a los lejos que con eco se repiten una y otra y otra y otra vez… resuenan en mí los cánticos de gritos en mi mente… de gente, de niños y de bebés, de ancianos que no gritan y gimen fuertemente de la transformación de mi cuerpo… ¿soy acaso yo creado por algo? Soy otra cosa que un humano ¿es eso? Tres… tercer escalón y la cosa empeora… oigo la puerta, sombras blancas rodean la casa, desde el primer nivel… el baño a un lado de la puerta suena de sonrisas… de aullidos y silencio… el lobo sigue tartamudeando y destruyendo mi mente de a poco… y entonces la prosperidad se me va, se me ha ido siempre. Cuarto escalón y me toman los pies suavemente ninfas de ojos negros y rostro tan blanco que no capto quienes son, deidades que vienen por mí… y de cómo todo se pierde… cinco centímetros de capas y capas que se queman con el frío de mi sudor… y si soy realmente un humano… que es lo que ha entrado en mí… ¿es alguien más? ¿Lo es? Quinto escalón… veo por fin la ranurita de la puerta y la luz se acorta… hay alguien allí esperándome. Y las niñas que son ninfas me toman los pies y grito fuertemente… pero mis gritos no se oyen, porque mis gritos no son mis gritos. Y pronto un dolor cromático supera mi nivel de soportar el dolor… desde la tierra que está afuera oigo que suben cosas metálicas… que suben al cielo en acto de no reanimar a mi persona si no de canjear mi vida tras pasar la puerta… pero ¿mi vida es mi vida? ¿Soy yo acaso yo? Y qué soy entonces ahora… en este momento de cosas… de cosas que suceden sin una explicación… de anomalías. Y, entonces, bajo mi pie al sexto escalón, y las manos de las ninfas se trizan y quiebran sangrando colores y cables eléctricos chispean a su fuego creando que sus ojos se apaguen en una oscuridad abrasadora.


En el sexto escalón, yace la perspectiva de la casa… pero no puedo mover mi cuello… está duro y se impacta de electroshock… y pienso ahora… qué me han hecho los médicos del hospital… ¿eran médicos realmente? Cuando veo que un hombre está colgado en el living… Su piel se pone verde lentamente, se llena de escamas y su piel es áspera, su rostro se alarga, sus dedos de los pies se ponen puntiagudos y su cola se aparece. Allí colgado la cola se le ha caído. Y abro fuerte mis ojos sin la creencia de lo que estoy viendo. El cielo se rompe y una mano gigante llena de pintura entra… y toma al hombre convertido en lagarto… Veo su rostro… y el escalón comienza a doblarse… ¡a doblarse! Y me toma los pies, estos comienzan a sangrar pero no siento dolor… estos comienzan a brotar del escalón y percibo como bajo fuertemente mi otro pie al séptimo escalón cuando este se vuelve cóncavo y caigo por las escaleras… mi cuerpo guía rodando por las escaleras y caigo en la puerta, en la entrada. Donde mis ojos ven sin ver ante la ceguera insulsa de mi persona… a alguien que dice ser mi padre, y dice ser padre de todos… mi cabeza tiene una abolladura… ¡pero qué soy ahora! Y no sangro, la yema de mis dedos es obscura… y la tierra se nota blanca… todos es blanco con negro… cuando me toco la abolladura y mis ojos cambian sus colores a un morado obscuro y aun morado claro… sólo dos colores… dúo cromático. Percibo como el hombre me toma del pelo y me tira al suelo… me comienza a patear la cabeza pero yo no siento dolor. No lo siento. Salen máquinas de la tierra a los costados de la casa. Salen fuertemente que bajan y suben, bajan y suben y ocupan mi persona como señuelo para morir. El hombre que dice ser mi padre me toma del pelo nuevamente… y yo no puedo decir nada. Sólo voces cóncavas, sólo dolor… el hombre sigue pateándome la cabeza y suena como metal a cada golpe… al ritmo del grito del bebé de mi oído… Fuertemente comienzo a sangrar, y desde la ventana mira mi mamá y alguien de metal… ese alguien la nada pronto… alguien mecánico. Desde la ventana aparecen luces obscuras negras como si fuesen sólido, y no dudan en mirar sin saber lo que ven… cuando miro con precisión allí no hay nadie y sólo estoy yo. Mi presencia no es mi presencia… mi ausencia tampoco, ni mi autoridad sobre nada. Percibo que me duele el estómago… y veo que el reptil está en el agua ahogado. Desde mi cuerpo en la tierra percibo como la sangre baja por los escalones, pero no es sangre. Es obscura, es combustible... De cómo mi cuerpo ocupa un centro de energía y de cómo se acaba en la caída desde la ventana… mi madre sale a la puerta y revisa mi cabeza, le abre y presiona un interruptor en el que dice <<autodestrucción>>… lo presiona… y mis ojos se apagan… Cuando digo que mi cuerpo no es mi cuerpo…

ELEAZAR



Y QUÉ TAL Y qué tal si una ya está viviendo su vida antes de terminar una carrera, antes de tener una profesión, incluso un sustento económico, algo así como un trabajo, o un trabajo como tal. Qué tal si una ya está viva antes de todo eso, y con viva me refiero a feliz, a ya hecha, ya dada para darse al resto y sus propias vidas. Y qué tal si puede no sólo estar viva una sino que ya siendo, siendo lo que siempre soñó, lo que siempre quiso, su máxima aspiración, y así, tan así, estar con sus deseos cumplidos, sus sueños hechos realidad, y antes que eso que dicen sí es la realidad llegue, así tan así, tan qué tal, tan una, viviendo su vida antes de terminar, de concretar, de alcanzar los objetivos, las metas, las esperanzas, los fines, los por qué. Qué tal si ya una y todas estamos vivas antes de comenzar a extinguirnos, antes de ponernos la soga al cuello, el cañón en la sien, la gillette en la vena, los pies al borde de la nada, tan así y porque sí, sin preguntas ni respuestas, sin ningún cuestionamiento de por medio, con dolores y miedos, y con la completa y total dicha de sentirse plena, a campo abierto, a cascada contra el cielo, vertiente de ideas e idas y venidas, así tan qué tal, tan una, tan porfía, tan campante, tan tanto ganando, tan tanta derrota. En fin, como echada al mundo por vez primera, sin saber, sin ánimos, con todo por delante y por atrás y por los lados para explorar y perderse. Y qué tal si una ya está viviendo su vida antes de encontrarse en otro, y asociarse “hasta que la muerte nos separe”, también.

FLORA ACRACIA


UN TRÉBOL EN EL PALADAR

Necesito enviarle un trébol y le mostraría el rostro. Le agradeceré mañana fácilmente su expresión grandilocuente. El pueblo interminable esta cerca de la casa. sale un tren para que salves solo al tiempo. Yo voy verdaderamente abandonado no tenemos circunstancias escondidas. Amigo vaso me recordabas al hambre. Deseo hospedarme en el frío para emanar su talento rojo. Es necesario el vacío simulacro en el estado actual y maravilloso. Por el andamio de la soledad, las noticias fundadas del presente sueño, son una puerta ligera en el paladar.

Jorge Caucoto G.


LA CANCIÓN DEL VERANO

ya llegará la canción del verano el hit que todos bailaremos y hablará de amor de esperas que no desesperan de risas que no desfiguran ni de mensajes crípticos como tu imagen se desfiguró, nadie se va a desfigurar nada, lo bailarán los chetos y los cumbieros los que tienen el cerebro hinchado con botox y los que se tatúan frases de amor en la sombra lo bailarán los imitadores de sandro que no tienen vida propia también los cultos los cool las fotógrafas que retratan a sus amigas lesbianas dándose masa. atentos nadie blasfeme a la canción del verano que los poetas que escriben libros de ensayos se callen la boca apunten sus críticas a los que se quejan por los cortes de luz, cuándo entenderemos que el sacrificio de algunos es el salvoconducto a la paz de otros. bailaremos el tema del verano hasta que el sol nos avise que estamos al borde de la deshidratación de que nos confundan con bandadas de zombis que buscan cerebros para comer en un mundo en el que sus habitantes solo tienen un chip en el marulo con información determinante para alcanzar un nivel de vida estándar: dni, número de celular, grupo sanguíneo, tarjetas de crédito, twitter, facebook, la máxima de salir a la calle con la ropa interior limpia y sin agujeros grabada a fuego. cantaremos el estribillo pegajoso como mejilla transpirada y no nos detendremos a pensar en la métrica la rima y la hipotenusa y la existencia de las musas y si el diego dejó definitivamente la papusa, será nuestro himno contra los que les venden espejitos de colores a los indios que se mueren de hambre por no transar con la soja con la tecnología con su atractiva turísticamente forma de sobrevivir. el hitazo será nuestro oasis en este verano que sí o sí necesita un hitazo al que dejemos libre así como la marcha peronista que se canta con un bombo golpeando en el corazón


quizás nos ahogue un hipo de incoherencia y nosotros los chicos con musculosas y las chicas con soleras asoleadas no queremos coherencia ni cohesión ni inclusión ¡queremos bailar! si nos dicen que el hit es la canción del poder la partícula con la que nos adoctrinan y someten nos tinelizan la mirada los genitales les decimos: sí, tienen razón con el hit del verano se come se educa se cura, ah, y por supuesto, nos cojen nos adulteran los sentidos hasta el punto de la risa risa que soltamos ante una tragedia ambiental ante la movida solidaria que caretean los famosos y nosotros. nosotros bailaremos bailaremos porque si nos derriban el tema del verano con máximas que nacen de la modernidad líquida cagamos la fruta quedaríamos parados en los bafles preguntándonos cómo mierda puede ser que siempre nos encuentre el aburrimiento que la velocidad nos despinte la belleza que desparramos en los álbumes de instagram. que no se demore más la canción del verano necesitamos un hit al mejor estilo cachete, pechito y ombligo, que ningún argentino salga ileso de sus efectos, no es chiste queremos bailar (después vemos si cojemos, pero por ahora nos apremia bailar), porque cuando llegue el atardecer del último domingo de verano la profana melancolía alcanzará a los aburridos a los estudiosos del complejo de inferioridad que ellos mismos sufren en los huesos alcanzará a los que se niegan a bailar mientras nosotros nosotros sí, bailando frente a los espejos que de borges hablan pestes, felices como nene con dos blackberrys.

ANTONIO PEÑALVA


¿ADÓNDE VAS?

A competir todas las vidas que tengas por sentir los gritos de las olas en los intestinos Tal vez a vertirse en crema de aire vivo Color amarillo y sonata de piel mayor con vuelo sostenido Te propongo acompañarnos el tramo que coincidimos A ver si enanchamos el labio de un arpía Con un anzuelo de nubes de oro A ver si sacamos brisas descomunales del muerto En la orilla de su sueño de verano A ver si tocamos la figura desnuda de la tranquilidad Frotándole la cintura mientras corremos del sol Que requiere nuestra electricidad para sufrir No sé si corriendo llegue a herir la mano que me persigue Tengo una plaga en los bolsillos y en la lengua Tengo disparos disparates y balas perdidas Sonidos estruendosos Momentos brillantes y otros a media luz ¿Qué tal si vamos hasta donde nos aguantemos? Total no importa la ruta Cuando la muerte se enamore de nuestro movimiento.

DEL POEMARIO *RADIANTENOCHE*


MARABUNTAS

Vamos haciendo nuestras vidas al modo de las hormigas marabuntas Vamos deshaciendo nuestras muertes del mismo modo tal Mientras los dioses traman a su tiempo Que es m谩s largo que el nuestro Traumas de los que son ajenos Terremotos salidas de mar tempestades de todo tipo desolaci贸n Y por abajito ac谩 en el suelo Nosotros sin darnos por enterados por desesperados Ignorancia sagrada es lo que nos brinda nuestro conocimiento No caernos al pozo de lo cierto y por ello por cierto catastr贸fico total Vamos haciendo nuestras vidas al modo de las hormigas marabuntas Vamos deshaciendo nuestras muertes al mismo modo tal

Cero Contador


POESÍAS 2 Sur se desdobla pienso, sur, en la tempestad y pienso, en el rumor de las espigas al sol pienso, sur, prohibido sur en racimos, sur, de unas manos que extrañan la lluvia del vino, y la flor del río 3 Ausencia y sol la hojarasca llena con el viento lo que digo con un sonido gris como un cascabel ebrio y como intentar llenar mi tumba, así, se vuelve el reto de desanudar de desnudar, así y todo así con mis manos llenas de palabras que se me escapan y como el barro escurridizo de tu sonrisa así, intento salir, de esa brujería atando mi cuerpo ya oculto a ese poste escandaloso que hoguera llamaban en el siglo XVI

6 Lo extraverbal (aquello que suele darse por obvio) es la conjetura que el oficio poético transforma en posibilidad.

7 Silenciosa es la magia que forja la inmensidad errante del viento y abandona en un simulacro de vida las pretensiones de estar anclado a certezas fugitivas a contraviento inclino el plano de esta fuerza que no caduca y me obliga a saltar del precipicio saltar para encontrar mientras caigo la resistencia del aire que soplan mis propias palabras.

ROLANDO BAEZ


RUMIA LA NOCHE

entre lo onírico y lo vigílico la escucho pariendo con su respiración sobresaltos en mi alma casi truena como una vaca negra y ancha salpicada por estrellas qué bien sólo podrían ser mosquitos petrificados

rumia la noche y parece ser lo único que habito por tanto lo que me deshabita con su tronar de jadeos tremebundos la noche ésta noche me traga lo que le vierto lo que me comparto con ella vaca ancha vaca negra de cuyas ubres marrones me chorrea vino.

Carmen Arvale


CASI ONOMATOPEYA No tengo una barra sucia para restregarte mis insultos No tengo un vaso fiero para emancipar mi crueldad No tengo tu silencio para enloquecer escuchándote no decir nada No tengo un mal poema para dedicarte otro grandioso que te aniquile en suavidad No tengo culpa ni martirios cristianos para renunciar a la dedicación de tu desdicha No tengo odio reprimido porque te odio a cada instante Te tengo aquí Odiándote en memoria sin olvido.

Carlos COPANEGRO


cuánto pesa recordarlos/recordarlas, manosearlos a todos como un idea fija alterada en una sola situación de desquicio quiero decir que se presenta sublimada aquella idea en cada espacio en que celebro mis vicios, todos. aun así permitirlo es peligroso y posiblemente consiga con ello lo preciso de difuminar cada contorno de lo no sublimado hasta entonces, o que se entienda mejor dicho, a cabalidad lo retorcido de la idea, supongan ustedes lo que trato de exponer aquí, imaginen el peso de lo que concibo como preciso y exacto, la dialéctica troquelada en una mera suposición que se alterna discontinuamente de lo determinado de sus imágenes, que yo mismo les exijo como sublimación de todo lo perverso que hay en ello. tal vez no debí partir con recordarlos/recordarlas... (algo totalmente objetivo para mi gusto), debí partir simplemente con una situación menos desdichada de mi visión subjetiva, entiéndase en todo caso como un prejuicio ulterior de mi desquicio, pongamos una situación al troquel y comencemos a desmembrar parte por parte lo que se arroja a la imaginación. lamentablemente no he dicho nada hasta el momento, lo que ocurre bien seguido para mí, digamos....irritabilidad psico-negación. deseo conjeturar aquí en pocas palabras aquello que posiblemente no han entendido o quizás mal interpretado. tensar la soga es una idea increíblemente sentenciable, quiero decir, exquisitamente estimulante, si, como ustedes muchachas se frotan el clítoris o ustedes muchachos se manosean el glande, aun así, esto va más allá de esa idea ordinaria y humana....

DOMINGO


Poema sin nombre eskrito kon despecho, solo y sobrio. Nicolás Martel Kansado de mirar tu foto, de verte tan inmóvil, tan intocable, de verte con tanto deseo como en las mañanas en las que despierto con el sabor a vino aun fermentando en mi boca y necesito un vaso de agua de la lejana cocina, mis manos tiemblan tanto al ver como tu piel se muestra en esa foto, te ves tan suave, tan cálida, tan llena de lo que yo tanto quería, pareciera que el sol te mirara con envidia, pero no puedo tocarte, ni siquiera cuando paso las tardes enteras tratando de rekonstruir los momentos en que estuvimos juntos y termino masturbándome, ni siquiera en esas largas noches en las que no puedo dormir y me doy millones de vueltas en esa cama en la que nunca estuviste, no puedo tokarte, no puedo arrankarte de mi memoria y traerte hasta este kuarto oskuro, frio y solitario donde te eskribo, no puedo tenerte aki, no puedo tenerte para lamer kada centímetro de tu kuerpo y hacerte reventar en gemidos, no puedo tener ahora mismo tu cuerpo, con todas sus imperfecciones malditas, temblando por la mezcla de sensaciones en las que yo te hacia sumergir. Maldigo, y lo hago kon todo el odio, la rabia y la frustración, al hijo de puta que ahora duerme desnudo a tu lado, lo maldigo en todos los idiomas que konozko y todos los que yo mismo he inventado, lo maldigo porque lo envidio, lo maldigo porke aunke me rekuerdes, aunke yo venga a tu memoria kada vez ke pueda kolarme en ella, estas kon él, y mientras mis manos se kongelan, mientras me emborracho rekordandote, mientras rekuerdo ke odiabas el saber de las drogas ke por TU KULPA ahora son mi refugio, estas kon él, sonríes kon él, lo miras kon esa misma mirada ke veo ahora en tu foto, esa mirada que hasta los ángeles más bellos envidiarían, esa mirada que parecía dormirse frente a mis ojos, esa mirada que parecía suplicarle a mis labios, esa mirada que tanto extraño. Pero sabes hermosa mía? aun no entiendo, nunka me explikaste porké, todavía me retuerzo kuestionándome y hasta hoy no he logrado komprender… Dime , tú ke posees la sonrisa dibujada por estrellas, dime: ¿por ké? Por ké mierda me dijiste ke ya no!? Kómo fue ke todo en ti se borró tan rápido? ¿Tan frágil es acaso el rekuerdo de mis karicias?


Oh rabia infinita ke naces de mí al rekordarla, Bórrala! Desaparece kada segundo de nuestro existir, Destruye sin espanto su rekuerdo tan amargo, Porke sólo así no se presentará más akella sed, Oh! esa sed infinita ke nace de en mi garganta al rekordarla, Esa sed de vino, besos y karicias, Sed de nuestros kuerpos deshaciéndose, golpeándose uno kontra otro…

Maldita!, maldita seas tú también, Maldita al obligarme a escribirte kon despecho, He roto tantas kartas al kerer regalarte la hermosura, Pero no mereces ni el silencio. Perra, Zorra, Puerka, bellas animales, tan bellas, no me atrevería a insultarlas al llamarte komo a ellas. Pero sabes tú hermosa mía? El aletear de una mariposa, grande, negra; Ha golpeado mi ventana, De infinitas destellos son sus reflejos, Buscando la luz de esta vela ke me alumbra ha venido a mí, Si abro la ventana entrará y morirá en esa luz ke la ha llamado, Si no abro mi ventana eskapará, komo lo has hecho tú.





Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.