

FOTOGRAFÍA BÁSICA

UN MANUAL PARA CREAR
Diseñadora Fotográfica
Sofía Dután


FOTOGRAFÍA BÁSICA
UN MANUAL PARA CREAR
Fotografías y texto:
Diseñadora Fotográfica, Sofía Dután
Edición y maquetación:
Diseñadora Fotográfica, Sofía Dután.
Director Editorial:
Msc. Xavier Granja Cedeño.
Asignatura:
Foto Documental y Contextos Sociales II.
Instituto Metropolitano de Diseño
Quito - Ecuador 2024
Queda prohibida la reproducción e incorporación total o parcial de este documento por cualquier medio, sistema informático o precedimiento, ya sea electrónico o mecánico, sin la autorización previa y escrita del titular. En caso de violación a lo establecido, podrá considerarse una infracción a los derechos de propiedad intelectual.
LA ATMÓSFERA DEL
ENTORNO
Al tomar una fotografía, no importa de qué tipo sea, hay que entender las condiciones atmosféricas en la que se desarrolla para optar por el encuadre más efectivo. De esta manera, la fotografía puede ser interpretada de distintas formas y se puede observar a la misma, desde un punto de vista más crítico. Ya que creará sensaciones y emociones dependiendo la manera en cómo transmitamos el mensaje. En estas imágenes del Museo del Carmen Alto, podemos observar la atmósfera melancólica, religiosa y de reverencia gracias a la iluminación ténue y concentrada en el crucifijo.




IDEALIZACIÓN DEL
ENTORNO
La selección del encuadre depende de la intención de lo que queremos transmitir con nuestra fotografía.
Cada tipo de encuadre puede favorecer a ciertos escenarios; por eso hay que fijarse en el espacio y lo que éste transmite para así componer de la mejor manera posible. Incluso, la iluminación nos dará contexto de lo que hay detrás de la imagen o en dónde ésta se sitúa.



LAS PERSONAS Y SU MUNDO/1
Cuando hablamos del retrato, nos referimos a capturar, de la manera más auténtica, la esencia de una persona o la esencia del concepto en base a esa peresona, es por eso que al empezar con el retrato, se sugiere hacerlo en un lugar o ambiente en el que la persona a retratar, se desenvuelva de manera natural, como lo puede ser su casa, ya que se dice que no solo se refleja el caracter de una
persona por su aspecto, sino por la manera en cómo decora y mantiene su hogar. Además, es importante ser empático y respetar el espacio del otro, es por eso que hay que crear una relación entre el equipo fotográfico, el sujeto y el lugar, ya que si llegamos a ser invasivos, la persona se sentirá incómoda y eso se notará en la imagen.


LAS PERSONAS Y SU MUNDO/2
Existen otras maneras de crear retratos significativos sin necesidad de convertir el retrato en reportaje. Por ejemplo: en lugar de ahondar en la vida privada de nuestros retratados podemos usar objetos que los rodean o representan como fondos, situarlos en lugares que enriquezcan la silueta de las personas.
También, se puede aprovechar las acciones que realizan o el lugar en donde las realizan, es decir, aprovechar el ambiente en el que uno se encuentra. De esta misma manera, es importante seleccionar el formato (ya sea vertical u horizontal), ya que uno exigirá seleccionar un fondo interesante sin distracciones y el
otro, mantener a nuestro centro de interés de una manera potente, en donde no existan elementos irrelevantes en el fondo que quiten fuerza a nuestra imagen.




RETRATOS
Un retrato es una manera de capturar la esencia de una persona de manera pensada. Este puede ser formal, convencional o semiformal dependiendo el caracter y concepto. Antes de realizar un retrato, es menester conocer a nuestro retratado, entender cómo es su personalidad, saber sobre su vida, en qué
se está desenvolviendo en ese momento, todo lo que se necesite para capturar la esencia de esa persona; es más, se sugiere escoger un escenario representativo en donde la persona se sienta cómoda.
Para crear una imagen potente, es necesario hacer que la persona se sienta tranquila, es por eso que hay que dejar-

los fluir con las poses y movimientos en primera instancia, además, capturar sus expresiones es esencial, pero sobre todo, hay que saber tratarlos con empatía, no tratarlos como estereotipos.
Recordar que un retrato puede darse en cualquier lugar y ocasión, no solo en un estudio fotográfico.










LA POSE EN EL RETRATO
Continuando con la idea de tratar bien a nuestro sujeto y permitir que éste fluya, hay que entender que el retrato tiene su proceso. Al inicio, nuestro sujeto puede que esté más pendiente de la cámara, por lo que estará más rígido, no obstante, comenzará a fluir a medida que la producción se desarrolle, comenzará a crear sus propias poses y a mostrar expresiones de acuerdo a su personalidad. Para esto, nuestra misión es vigilar aquellos movimientos, sobre todo las manos, la dirección de la mirada y la posición de la boca.
Por nuestra parte, le sugeriremos posiciones como lo es de frente, de perfil y tres cuartos. Como ya conocimos a nuestro sujeto, ya sabemos la intención de nuestra fotografía y por ende, el tipo de iluminación y fondo que irá acorde a lo que queramos transmitir.
Hay que recordar que no es necesario crear retratos en un estudio fotográfico o crear una producción bien elaborada, los retratos se pueden dar de manera espontánea, sin hacer uso de un equipo de alta gama.










GRUPOS
Una fotografía grupal puede ser formal e informal, como se puede dar de manera espantánea o puede estar previamente planeada. Sea como esta se realice, es importante aprovechar cada oportunidad, es decir, tomar fotografías no solo cuando la gente esté en su lugar posando, sino al colacarse, así se verán menos rígidos. Dependiendo el tipo de grupo, será el fondo, para que estos tengan cohesión y transmitan mayor armonía.


Por otra parte hay que observar las condiciones ambientales en que se realizan, si es en interior, en exterior, la posición del sol y de las personas, etcétera. Si bien es recomendable que las personas altas vayan atrás y las peresonas de menor estatura adelante, hay que dejar que el grupo se sitúe y luego realizar los cambios, de esta manera se sentirán cómodos y podrás capturar el caracter y esencia del grupo y también de cada uno como individuos.


ENSAYO FOTOGRÁFICO
Para realizar un ensayo fotográfico es importante tener una idea clara de lo que queremos hacer, para así investigarlo y tener un acercamiento más riguroso hacia el tema y todo lo que lo rodea. Para ello, se crea una narrativa y un concepto para saber qué podemos fotografiar, los posibles escenarios, cuál será nuestra atmósfera y en qué nos vamos a centrar.
Hay que tener en cuenta que, si bien nuestro ensayo fotográfico puede acompañarse de otros elementos, como textos explicativos, hay que procurar que las fotografías hablen por si mismas. En este caso, podemos evidenciar un ensayo fotográfico sobre el proceso de creación de un tatuaje.







ARQUITECTURA
Como en todo, se requiere de una investigación previa o conocimiento del lugar al que vamos a fotografiar, de esta manera, sabremos qué detalles podremos incluir y qué podrá enriquecer nuestra imagen.
En el caso de la fotografía arquitectónica, es imprescindible mostrar todos los ángulos posibles de la construcción, incluyendo el lugar en el que se sitúa y qué hay en su entorno, ya que al involucrarlo dentor de la imagen, puede cambiar la perspectiva que se tenía sobre la edificación. Una buena recomendación es realizar fotografías en distintos horarios del mismo lugar, para así observar cómo incide la luz en el material dependiendo la hora.










INTERIORES AMPLIOS
Para realizar fotografía en interiores, es importante empezar por lugares pequeños que tengan una buena iluminación natural, para así adquirir experiencia suficiente para realizar fotografías en interiores amplios.
Al ser interiores amplios, la luz de una ventana no es suficiente para iluminar todo el lugar; razón por la cual se hace uso de flash, aberturas de diafragma pequeñas y largas exposiciones, exposiciones suficientemente largas como para ir de un lado a otro creando destellos e iluminando toda la habitación. También es importante usar grandes angulares y tener objetos en primer planos si es que deseamos dar una sensación de profundidad.




LA NATURALEZA: PAISAJES
Una buena fotografía de paisaje captura lo que se ve y lo que se siente. Si bien existen lugares espectaculares que se prestan para ser fotografiados sin más, la presencia humana y el reflejo de la relación del hombre y la naturaleza, resulta muy interesante.
Antes de hacer una fotografía de paisaje hay que saber que la hora en que se va a realizar, va a determinar el resultado final.

Si bien puedes volver al mismo lugar, las condiciones climáticas no serán las mismas, incluso si los dos días fueron soleados, la presencia de una pequeña nube puede hacer la diferencia. También, el uso de distintos planos y escalas puede aportar volumen y dinamismo a la imagen, ya que las figuras en primeros planos nos ayudan a comparar tamaños y aportan interés.




LA NATURALEZA: EL ACERCAMIENTO
Se recomienda empezar a tomar fotografías con un lente normal a objetos inmóviles, luego, puedes experimentar con objetivos macros, fuelles o tubos de extensión. El viento puede afectar el movimiento de nuestro objeto, por lo que velocidades rápidas, apertura de diagrafma para destacar el sujeto respecto al fondo y tener en consideración la distancia de enfoque mínima de nuestro lente a trabajar. Este tipo de fotografías ayuda a destacar detalles y texturas que no se toman en cuenta a menudo.











LA NATURALEZA: EL CIELO Y EL AGUA
Cuando hablamos de fotografía de paisaje, siempre hay que considerar el horario en que uno realiza la fotografía. El sol como fuente de luz, las nubes y la manera en cómo están se colocan, pueden crear iluminaciones poco usuales dentro de nuestros escenarios, permitíendonos crear imágenes significativas. El cielo es importante, ya que será nuestra fuente lumínica, mientras que la tierra y el


agua (mar, laguna, río, etcétera), serán nuestro complemento, en donde se encuentran la mayoría de elementos.
El agua refleja lo que se encuentra en la tierra y en el cielo, además, su movimiento puede agregar textura y color a nuestra imagen; mientras que la tierra nos ayudará a crear simetría o nos guiará en la composición. Para este tipo de fotografía, dependiendo la intención, se recomienda probar con tres tipos de lentes, un angular (28mm), un lente
normal (50 0 55mm) y un teleobjetivo (135mm), ya sea para abarcar todo el paisaje, o para jugar con la escala de los elementos del fondo. También se puede jugar con los planos, colocar el centrado arriba o abajo, y hacer uso de distintos filtros dependiendo el lugar, eso si, si tienes un filtro nd, te ayudará en días de mucho sol y también, en cuanto al agua, te permitirá utilizar velocidades lentas y podrás observar el movimiento del viento en el agua.




REFLEJOS
Los reflejos son una manera de experimentar y jugar con la ilusión, con lo real y con lo imaginario. Los reflejos se pueden dar por espejos, la luz o por el agua, sea como sea, siempre dan una sensación irreal.
Se puede hacer uso de ella de distintas maneras, ya sea mostrando el objeto reflejado y su reflejo, solo el reflejo o incluso, jugar con la exposición, luces y sombras, para pretender que el objeto real y su reflejo son el mismo. Incluso, se pueden mostrar marcos que encierren al sujeto para que el espectador se dé cuenta que hablamos del reflejo de un sujeto, no del sujeto en si. Dependiendo el material en donde se refleje, el concepto puede cambiar, incluso si este está desgastado, roto o nuevo.










LA MODIFICACIÓN DEL AMBIENTE
El estilo de un fotógrafo es el conjunto de ideas, experiencias y visión que desarrolla a lo largo de su trabajo. Como en todo, la experimentación es algo crucial al momento de tomar fotografías, en especial si se va empezando, ya que no solo determina la forma de trabajar de uno, sino, te invita a ver nuevas perspectivas y a usarlas en el caso que amerite. En este caso, la manera en cómo presentamos al sujeto, el lugar, su posición, el plano, el ángulo y la manera en cómo nos comunicamos con
el, transmitirá una sensación y representará algo simbolicamente queramos o no. Estos desplazamientos de una posición a otra o la relación que tienen los objetos dentro del encuadre, pueden abrir paso a una fotografía surrealista, de fantasía. Hay que recordar que la interferencia o modificación de los elementos altera el resultado de la atmósfera, por lo cual se debe experimentar y ser crítico con lo que uno realiza, ya sea que uno realice fotografías por motivos personales o laborales.









FANTASÍA
¡Es momento de usar nuestra imaginación! Estos escenarios fantásticos pueden darse por casualidad o pueden ser armados.
Cuando uno pretende hacerlos, es bueno inspirarse de otros autores, ya sean literarios, compositores, músicos, teatristas, directores de cine, etcétera; incluso, puedes inspirarte de leyendas o historias. No importa la manera en cómo lo hagas, ya sea literaria, irónica o cómica, todo sirve. Lo importante es que tengas en cuenta todo lo aprendido en esta guía de fotografía, así podrás crear fotografías fantásticas en todos los sentidos. Como en estas imágenes que representan “Alicia en el país de las maravillas como ”Alicia en el país de los juegos“ y “Metamorfosis floral“ con personas.





PRONTRUARIO TÉCNICO
En esta última sección encontrarás un breve repaso a las diferentes cámaras y objetivos fabricados hasta la actualidad, lo cual será clave para la averiguación del origen de los fallos de las fotografías.




Cámaras para fotografía instantánea
La ventaja de una cámara Kodak o Polaroid para fotografía instantánea, es que después de medio a 8 minutos (según el tipo de película) ya que puede verse la copia. El formato de la misma varía, situándose en torno a una media de 8 × 8 cm. Las desventajas son una calidad de copia mediocre, cámaras voluminosas (aunque ligeras), películas más bien caras, e imposibilidad de obtener copias exactamente iguales sin recurrir a procedimientos especiales (esto no se aplica a la Polaroid 665, que da también un negativo). La mayor
parte de las cámaras son «sólidas», y unas pocas plegables, más cómodas de llevar. Hay dos modelos de réflex de un solo objetivo. Los procesos en que no hay que despegar ni tirar nada resultan obviamente más cómodos. Casi todas las cámaras llevan un control claro-oscuro para ajustar la exposición si los resultados de la medición automática no son aceptables. Hay accesorios de acercamiento.



Pocket 110 sencillas
Son las más pequeñas de las cámaras ampliamente usadas y aceptan cartuchos de 110 que dan negativos de 13x17mm. Son casi las cámaras más sencillas y más baratas en venta, centrándose sus ventajas en el pequeño tamaño y la comodidad de carga. La desventaja básica es el pequeño formato negativo, que hace casi imposible la obtención de buenas ampliaciones de más de 9x12cm. Casi todos los modelos son de foco y exposición fija. Algunos incorporan un flash electrónico integrado ya hasta un doble objetivo deslizante.



Cámaras de Disco
Estas cámaras, planas y ligeras, caben perfectamente en el bolsillo. Los negativos de 8x10mm, son algo más pequeños que una uña, pero, utilizados con cuidado, pueden admitir una ampliación superior a 12x20cm. La mayoría de cámaras de este tipo llevan lentes fijos, pero muchas tienen exposición automática y poseen un flash incorportado.

Cámaras para el formato 126








Las cámaras 126 son las sucesoras en cuanto a popularidad de la conocida Brownie. Tienen la ventaja de la comodidad de carga, aunque van perdiendo terreno ante las 110, más pequeñas. La calidad de las copias obtenidas a partir del negativo de 26 × 26 mm es algo mejor que la de las hechas a partir del 110, si bien éstas son cámaras igual de fáciles de manejar y con frecuencia más flexibles. En las cámaras 126 no se puede controlar casi nada, mientras que las 110 se benefician constantemente de nuevas mejoras técnicas.
Compactas de 35mm
Después de las 110, las cámaras compactas para chasis de 35mm son probablemente las de uso más extendido. Hay muchas, como la Olympus Trip 35, con control automático de la exposición, mientras que las más clásicas permiten el ajuste manual de la abertura y velocidad y llevan exposímetro acoplado o las correspondientes manecillas. Casi todas son de óptica no intercambiable y con obturador central. La Prinz 35ER tiene un excelente objetivo. El formato 24x36 mm es el
La integración del flash en cámara es un recurso para aumentar la popularidad de este formato. La alimentación procede por lo general de dos pilas, que dan para varios cientos de destellos automáticos. La potencia no menor a partir del que se puede hacer una buena copia de 24×30 cm, siendo la oferta de películas para el mismo muy amplia. Casi todas las cámaras compactas llevan telemetro para enfocar a través del visor actuando sobre el anillo de distancias: el enfoque es perfecto cuando las dos imágenes coinciden.

Compactas de 35mm con flash integrado
es mucha, pero llega hasta 3-6 m, según la sensibilidad de la película. Casi todos se conectan apretando un botón que de paso los desplaza a la posición de disparo, si bien algunos permanecen fijos. Hay modelos con exposición automática y otros con control manual de la abertura y, por tanto, de la profundidad de campo.





Compactas de 35mm con enfoque automático
La automatización de las cámaras ya ha alcanzado al enfoque. Esta cámara es igualque cualquier otra, pero enfoca lo que hay en el centro del visor en una fracción de segundo al presionar el disparador y antes de que el obturador se abra. L aclave está en un sensor electrónico que lee el contraste entre dos imágenes superpuestas formadas por el telémetro; este contraste es máximo cuando ambas imágenes coinciden, es decir, cuando el enfoque es perfecto. Los problemas surgen cuando el sujeto está descentrado o carece de contraste.
Cámaras técnicas plegables
Emplean película en hojas, por lo general de 9 × 12 cm, cargada en un chasis deslizante que, en algunos modelos, puede sustituirse por otro para rollos. Este formato permite ampliaciones excelentes. El objetivo intercambiable con obturador central y el visor están unidos por un fuelle. El panel en el que va montado el objetivo es desplazable y basculante, permitiendo el control de la perspectiva. La base con los raíles que soportan el objetivo puede fijarse al visor por detrás o con el telémetro acoplado y no lleva ningún espejo. En cuanto a peso, se ha ido usando cada vez más cámaras de una base SLR de 35 mm. La principal ventaja de todas las cámaras es el control de la imagen que permiten, aunque como son grandes y pesadas se emplean casi siempre con un trípode y en el estudio.




Cámaras de monorraíl
Este tipo de cámara casi no se saca del estudio. Sus más importantes ventajas son un negativo muy grande (hasta 24 × 30 cm) y una serie infinita de combaciones de movimientos de los paneles anterior y posterior que permiten el control casi absoluto de la perspectiva. Ambo paneles basculan alrededor del monorraíl, lo que permite corregir la convergencia de verticales e introducir deformaciones controladas (por ejemplo, una esfera puede convertirse en una forma ovoide y viceversa). Se contruyen de aluminio y acero inoxida-



Réflex de un solo objetivo de 35 mm-manual
Aparte unas pocas compactas de 35 mm, las SLR son las únicas de este formato que permiten el cambio de objetivos, una de las ventajas más importantes sobre cualquier otra clase de cámara. La otra es que el visor ve exactamente la misma escena que aparecerá en la película. Muchas SLR de 35 mm reciben el nombre de sistemas fotográficos por la enorme cantidad de accesorios que disponen y que posibilitan la realización de casi cualquier tipo de fotografía. El término manual se refiere al control de la exposición: el fotógrafo tiene que fijar la abertura y velocidad de obturación para lograr la exposición correcta. Hay modelos muy baratos, ble, utilizando fuelles para unir los paneles anterior (del objetivo) y posterior (de la película). El panel portaobjetivos es intercambiable, y va provisto de un obturador central. El enfoque se hace reemplazando el chasis del panel trasero por un cristal esmerilado que, tras la operación, vuelve a cambiarse por el chasis de la película. La cámara debe montarse en un trípode muy sólido. Aunque es grande, ocupa muy poco una vez plegada y desmontada, o que facilita el almacenamiento y traslado.
como la Praktica L2, que carecen de exposímetro, instrumento presente en casi todas y dispuesto para leer luz reflejada por el sujeto una vez que ha atravesado el objetivo. En el visor puede haber muy diferentes medios de presentación de la información, siendo el más sencillo una aguja y un par de referencias de centrado.






SLR de 35 mm automática y manual
Muchas SLR de 35 mm disponen de exposición automática como manual. En un sistema de prioridad a la abertura, el fotógrafo fija esta variable, eligiendo la cámara automáticamente la velocidad de obturación necesaria. Cuando es de prioridad a la velocidad, el fotógrafo elige ésta y la cámara, la abertura. Y si la cámara es automática y manual, queda la posibilidad de que el fotógrafo decida los dos valores. Algunas ofrecen la posibilidad de elegir el tipo de prioridad. Y casi todas disponen de motor de arrastre, que pasa la película a una cadencia de 1,5 a 2 fotogramas por segundo.
Cámaras SRL de 35 mm-autofoco
Una célula de alta sensibilidad mide el momento en que la imagen enfocada ofrece el máximo contraste. Junto al enfoque, la mayoría de estas cámaras poseen diversos sistemas altamente tecnificados para el cálculo correcto de la exposición así como una amplia variedad de objetivos y accesorios. Presentan la posibilidad de elegir entre varios tipos de enfoque e incluso, algunas de ellas, permiten seguir a un sujeto en movimiento manteniéndole siempre a foco.
SLR 645
Estas cámaras de medio formato presentan todas las características de las SLR de 35 mm con la ventaja adicional de un formato de 6x4,5 cm. Emplean película en rollos 120 (para 15 exposiciones) o 220 (para 30 exposiciones). Es un formato empleado en estudio y en fotografía comercial. Hay modelos para usar a nivel de cintura y a nivel de ojo (con pentaprisma), Estos úl timos pueden transformarse en automáticos, aunque la mayoría simplemente llevan un exposímetro.




Disponen de chasis intercambiables para 110 y 220, pero no de respaldos que permitirían cambiar la película a medio hacer. En comparación con las mayores de 6x6, las 645 toman un 25 por 100 más de exposiciones so- bre la misma película (15 en lugar de 12). Además del modelo ilustrado, Mamiya fabrica varias más de este mismo formato.
Réflex de dos objetivos
Este tipo de cámara lleva dos objetivos: uno forma la imagen en el visor y el otro en la película, cuyo formato es de 6x6 cm. El visor es réflex, a nivel de cintura y presenta una imagen similar a la que recoge la pelí cula, hacia arriba pero lateralmente invertida, lo que dificulta el seguimiento de sujetos móviles (para ello la cámara lleva también un visor de recuadro plegable).
Las TLR emplean rollos 110 y 220, sobre los que hacen 12 y 24 exposiciones respectivamente. Es el tipo de cámara para 6x6 más barato, aunque tiene nume- rosas desventajas frente a las SLR para el mismo for- mato. Sólo hay un modelo con óptica intercambiable (que sale cara, porque hay que cambiar un panel con dos objetivos y un obturador); éste es central, con la ventaja de sincronizar con el flash electrónico a cual- quier velocidad, aunque casi nunca pasa de una velo- cidad máxima de 1/500 s.
El error de paralaje de las TLR es apreciable cuando se trabaja de cerca, siendo igual a la distancia que se- para el objetivo de encuadre (superior) el de toma (in- ferior), lo que exige hacer una corrección, para que en la película aparezca la parte del sujeto que nos intere- sa.
Algunos modelos incorporan en la pantalla de en- foque un dispositivo de corrección; en caso contrario, lo mejor es encuadrar normalmente y a continuación elevar la cámara en una medida igual a la que separa los objetivos.






SLR de 6x6
Este es el tipo de cámara que más emplean los profe sionales, por el considerabl tamaño del negativo y por la gran cantidad de objetivos y accesorios intercam biables de que dispone. Los objetivos incoporan un obturador central, que sincroniza con el flash electrónico a cualquier velocidad. Hay varios tipos de visores, incluso con pentaprisma, aunque la mayoría de los fotógrafos prefieren el de nivel de cintura. Hay modelos, la Bronica ilustrada entre ellos, que aceptan respaldos de formatos diferentes, como el 6x4,5 por ejemplo. Una cortinilla opaca permite cambiar la película antes de acabarla. E incluso hay respaldos Polaroid para ver instantáneamente el resultado de, pongamos por caso, la iluminación, antes de proceder a la toma definitiva.
SLR de 6x7
Para los fotógrafos que prefieren el formato rectangular y consideran pequeño el 6x4,5 queda todavía el 6x7.
Si tienen una cámara técnica, pueden equiparla con un respaldo ad hoc, aunque disponen también de unas pocas SLR para este formato, que pueden emplearse sin trípode. Los dos modelos fabricados por Asahi Pentax tienen visores, pantallas de enfoque y objetivos intercambiables. En uno de ellos el respaldo es giratorio, para fotografiar en horizontal o en vertical sin necesidad de mover la cámara. El del dibujo lleva un obturador plano focal y dispone de una docena de objetivos, mientras que el otro lleva objetivos con obturador central incorporado. En este formato salen 10 exposición de un rollo 110, y 21 de un 220. La Bronica 6x7 tiene chasis intercambiables para diferentes formatos y para Polaroid. Estas cámaras son muy caras quedando en general fuera del alcance de los aficionados.

