FOTOGRAFÍA MACRO Descubre todos sus secretos by Juan Carlos González Pozuelo

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La fotografía macro es un mundo desconocido y apasionante para el fotógrafo. Con esta obra aprenderá todo lo necesario para que sus tomas alcancen un nivel profesional. Esta técnica fotográfica va mucho más allá de elegir el mejor equipo para nuestras necesidades concretas; por eso más de 500 imágenes ilustran cada uno de los conceptos que se explican con claridad y precisión. Ninguna faceta importante se ha olvidado: conceptos básicos de fotografía, composición, iluminación, estética, edición, teoría del color, enfoque digital, trucos para aplicar en el día a día, esquemas aclaratorios, tablas informativas, vídeos de referencia… De este modo encontrará su propio camino entre sofisticadas herramientas y accesorios, entendiendo por qué se toma cada decisión y conseguirá resultados impresionantes con soluciones creativas. Fran Nieto otorga a cada detalle toda la importancia que se merece para que los resultados sean únicos; su amplia experiencia docente le permite conocer y responder a las necesidades más habituales. El lenguaje es claro y asequible para lograr que el proceso de aprendizaje sea serio, ameno y siempre fascinante. Si desea que sus fotos asciendan de nivel y se parezcan a las que rondan su imaginación, en sus manos tiene el libro que buscaba.

de la mano de grandes fotógrafos

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CONSIGUE PAISAJES ESPECTACULARES de la mano de grandes fotógrafos Saúl Santos, Jep Flaqué, Asier Castro, Antonio Real, Juan Santos Navarro

Foto a Foto 01, Javier Sánchez. 2ª Edición Foto a Foto 02, Tino Soriano Foto a Foto 03, Jorge Sierra Foto a Foto 04, Rosa I. Vázquez y José A. Fernández Foto a Foto 05, David Santiago

ISBN: 978-84-15131-69-4

FOTOGRAFÍA MACRO

NATURALEZA ASOMBROSA

DESCUBRE TODOS SUS SECRETOS

Fran Nieto

FRAN NIETO Fran Nieto es profesor de fotografía y especialista en macrofotografía. Forma parte del profesorado del primer postgrado universitario de fotografía en España. Imparte docencia sobre diferentes temas y por sus cursos han pasado miles de fotógrafos aficionados y profesionales. Sus imágenes han sido premiadas en más de 30 concursos. También organiza congresos de divulgación de fotografía y ha participado en muchos de ellos como ponente. frannieto.es

Consulta el material didáctico adicional creado por el autor Encontrarás tutoriales, esquemas y otros documentos que facilitarán tu aprendizaje.

/FotografiaMacro Con la participación de:

Índice 13 |

Lo básico para lograr fotos perfectas

entendiendo la luz 37 | Entender el histograma 39 | Valorar el histograma 41 | Rango dinámico

109 |

La estética en nuestras fotografías

44 | La exposición idónea

110 | ¿Qué es la composición?

46 | Ajuste de blancos

110 | Cultura visual

48 | Incremento de la exposición

112 | La realidad no es una fotografía

en macro

113 | El punto de vista

50 | Profundidad de campo

116 | La elección de la focal

54 | La difracción

118 | El formato 119 | Nitidez - Desenfoque

9 |

Nuestro equipo fotográfico

6|7

158 | La exposición y el revelado

233 | Acuarios y terrarios

159 | ¿Cómo miramos las imágenes?

236 | Fotografiando objetos transparentes 239 | Fotografiando objetos metálicos

167 |

La enorme importancia de la luz

242 | Reproducción de monedas 243 | Fotografiar flores 247 | Fotos paso a paso La previsualización es vital para progresar

168 | La calidad de la luz 170 | Orientación de la luz

249 | Fotografiar insectos

172 | Luz natural y flash

255 | Fotos paso a paso A veces encontramos bichitos colaboradores…

176 | Separar la cámara del flash 178 | Reflectores y difusores 181 | Modificar la luz del flash

259 |

185 | Modificar el color de la luz del flash 187 | Fotos paso a paso El color de la luz

La importancia de una buena edición

260 | Edición de fotografías macro

189 | Velocidad de sincronización del flash

260 | Revelado RAW

191 | El flash: número guía

262 | Control definitivo del contraste

194 | Sombras dobles

263 | Ajustando los niveles

195 | Fondos negros y ley del cuadrado de la distancia

264 | Curvas

200 | Fondos blancos

266 | El enfoque

202 | Esquemas de iluminación

267 | Acutancia

207 | Fotos paso a paso

267 | Enfoque de entrada

Trabajando con dos flashes y luz natural 210 | Fotos paso a paso Mejorando lo presente

268 | Enfoque de salida 268 | ¿Qué valores usar? 268 | Apilamiento de imágenes 272 | Fotos paso a paso

215 |

Se hace camino al andar

Reloj de bolsillo

274 |

Agradecimientos

Nuestro equipo fotográfico

cámara con unos cuantos anillos, una focal larga y un par de flashes. Es imprescindible que una vez apretados los controles no existan incómodas tolerancias que nos obliguen a nuevos ajustes para eliminar el cabeceo de la cámara. Es mejor que nuestra rótula disponga de un encaje rápido por medio de platos. Estos platos se unen a la cámara y quedan permanentemente en la misma, encajándose en la rótula para fotografiar. Para que el sistema sea realmente efectivo y “rápido” deberemos tener un plato en cada objetivo y en cada cámara que utilicemos, porque de lo contrario su eficacia es nula y perderemos incluso más tiempo que si enroscásemos directamente la cámara a la rótula.

Las zapatas en forma de L son muy cómodas para situar la cámara en vertical. El conjunto en esta posición es mucho más estable que si giramos la rótula de la forma habitual. Tengo que confesar que son muy adictivas, desde que las probé he adquirido una específica para cada uno de mis cuerpos. La rótula, una RRS, tiene liberación rápida de los platos mediante palanca. Otro gran avance: una vez que se prueba otros métodos se ven prehistóricos.

Como marcas de rótulas recomendaría sin dudarlo las Real Right Stuff, las Arca, las Foba, Markins y las Kirk. Si nuestro presupuesto es más ajustado podemos mirar el catálogo de Feisol, Benro, Giottos o Sunwayfoto. Cualquiera de estos fabricantes proporciona platos compatibles con el sistema rápido de Arca, al que podremos acoplar muchos accesorios. El sistema de platos hexagonales de Manfrotto no lo recomiendo por lo fácil que es que se caiga la cámara si no somos especialmente cuidadosos. La mejor ayuda que podemos brindar a nuestras fotografías es hacer uso del trípode siempre que sea posible. El trípode es esencial no sólo para evitar vibraciones y enfocar correctamente, sino a la hora de componer y poder realizar varias fotografías seriadas con la misma composición y distinta exposición. Además nos deja las manos libres para disponer los flashes, separar ramitas o accionar el disparador. Desde luego el trípode, para el aficionado avanzado y para el profesional, no es un accesorio. El trípode y la rótula serán nuestros compañeros durante mucho tiempo. Eligiendo uno de calidad nos ahorraremos dinero a la larga y trabajaremos con mayor comodidad desde su adquisición. También puede elegir uno malo e ir mejorándolo poco a poco hasta acabar adquiriendo uno de verdad como hemos hecho la mayoría de los fotógrafos. La mejor forma de probar si un trípode irá bien es subirlo todo lo posible, apretar todos los ajustes y girarlo haciendo torsión hacia los lados con energía. Si cabecea más de unos pocos milímetros debemos buscar otro más sólido. Otro buen sistema es situar una óptica pesada en la rótula, asegurar todos los ajustes y golpear el extremo del objetivo. Si apenas vibra será un magnífico aliado para fotografiar. Las fijaciones de las secciones se prueban presionando con ganas sobre ellas hacia el centro del trípode, no deben flexar más allá de unos pocos centímetros.

Railes de enfoque

Los raíles de enfoque son muy interesantes en situaciones donde el enfoque es muy crítico. A cambio exigen tranquilidad de uso. En la foto superior vemos un Real Right Stuff, un raíl que encaja en las zapatas tipo Arca. Es muy preciso en el movimiento axial pero tiene tolerancias que lo hacen poco recomendable para ratios elevadas, además su tornillo central puede manchar de aceite. Debajo un modelo muy asequible pero que me ha sorprendido muy gratamente por su relación calidad precio. De la marca Fotomate vale mucho más de lo que cuesta.

Los railes de enfoque, al igual que los fuelles, permiten un movimiento suave y preciso de la cámara. En los más sofisticados se puede variar tanto la posición longitudinal de la cámara como la lateral. Pero esto a costa de añadir complejidad al montaje y por tanto inestabilidad, por lo que yo los uso únicamente de una dirección. Son un gran refuerzo a la hora de enfocar cuando trabajamos con trípode. Combinados con la pantalla de la cámara garantizan una precisión difícil de conseguir de otra forma. Los de calidad son caros y no muy ligeros. Novoflex, Kirk y Real Right Stuff fabrican railes excelentes. Con ratios superiores a 2x se hacen casi imprescindibles, pero por debajo de ese aumento son realmente una ayuda excelente. Si lo vamos a necesitar, el Novoflex Castel está bastante bien. Se fabrican 3 modelos. El Castel L tiene un recorrido de 14 cm, si por alguna razón necesitamos mayor longitud el Castel XL nos permite un recorrido de 39 cm. Si disponemos en nuestra cámara de zapatas tipo Arca podemos comprar los Castel L y XL en sus equivalentes Q y XQ, compatibles con Arca (aunque la

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calidad de estos raíles no está a nivel de los L y XL y no son compatibles con cualquier zapata Arca). Si optamos por un modelo que permita el desplazamiento en dos ejes podemos adquirir el Castel Cross MC, compuesto en realidad por un Castel Q y un Castel L unidos. Para un presupuesto más contenido el Manfrotto 454 Micrometric Positioning puede ser una gran alternativa. Su perfil es muy bajo, lo que contribuye a la estabilidad y cada vuelta de tornillo la cámara se mueve un milímetro. Un precio más asequible es el del Velbon Super Mag Slider, es un carril sólido, no muy pesado y con buenos acabados. Tiene algo de holgura que puede ser un límite si lo queremos utilizar para trabajos con más de 3 aumentos. Si queremos invertir todavía menos podemos tener un rail Fotomate LP-01 macro con un recorrido de 100 mm. Si no tenemos prisa y nos gusta la calidad de antaño podemos buscar en eBay algún viejo rail de enfoque de Minolta como el que uso habitualmente, suelen venderse a precios muy razonables (100€) y su calidad y ajuste es indiscutible. Es un rail pesado que ayuda a absorber las vibraciones del obturador y del espejo. Otra buena opción puede ser el Pentax Macro Focus Rail III, otra pieza de gran calidad y robustez.

Cable disparador o autodisparador A pesar del poco uso que le damos el cable disparador es uno de los accesorios más importantes para macrofotografía, fotografía nocturna y en general siempre que situemos la cámara sobre un trípode, puesto que evita la vibración producida al apretar el disparador. Es tan necesario como el trípode, ya que la presión que realizamos sobre el disparador puede ser suficiente para producir

En trabajos muy precisos y con enfoques tremendamente críticos se hace casi imprescindible disponer de raíl de enfoque y cable disparador. Nikon D300 con MicroNikkor 105 mm 1:2.8 a f/2,8 y 1/250. Anillo de extensión Kenko de 20 y 12 mm. Flash a través de difusor y reflector. Raíl de enfoque y cable disparador.

La estética en nuestras fotografías

idea seguirla. Incluso cuando no la seguimos el efecto cultural se mantiene y por eso la toma resulta chocante para el observador. Esta disposición compositiva no es evidentemente ni la mejor ni la única, pero dado la enorme penetración que han tenido en nuestra educación las fotos que sí seguían esta regla hemos de tener un importante motivo para alejarnos de la “normalidad”. Procure que los ojos de su modelo, o los centros de interés se sitúen cerca de estos puntos, a no ser que tenga una buena razón para actuar de otra forma. La araña ocupa un punto aúreo y sus colores son adyacentes en el círculo cromático a los del fondo, lo que le da una continuidad tonal. Nikon D300 con MicroNikkor 105 mm 1:2.8 a f/8 y 1/1000. Flash desde el lado izquierdo algo elevado a través de difusor.

En realidad la norma de los tercios procede de otra más amplia que es la de la proporción áurea o divina. Podemos rastrearla ya en la cultura griega, obsesionada por encontrar la proporción perfecta del cuerpo humano para realizar las esculturas. Fue aplicada en arquitectura por los griegos para diseñar obras tan importantes como el Partenón, también usada por Leonardo o Miguel Ángel y ha llegado a influir tanto en la fotografía que hasta el formato del negativo de 35 mm se desarrolló bajo sus férreas proporciones. Matemáticamente fue precisada por Euclides (300-265 a.C.) que lo definió así: “Se dice que una recta ha sido cortada en extrema y media razón cuando la recta entera es al segmento mayor como el segmento mayor es al segmento menor.” Como la definición es algo árida podemos decir que es el valor numérico de la proporción que guardan entre sí dos segmentos de recta a y b que cumplen la siguiente relación: la longitud total a+b es al segmento más largo a, como a es al segmento más corto b. b/a= a/a+b

Si asignamos un valor unitario a b podemos simplificar esta relación, siendo el valor de a el número aúreo, con un valor aproximado de 1,61803398. Es un número irracional periódico y dada su importancia es de los pocos que tienen letra asignada en la ciencia matemática, concretamente φ (fi). De hecho es el número irracional que peor se puede aproximar mediante proporciones, por lo que sería el número más irracional de todos.

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Mucho más tarde la atracción por esta proporción continuaba y el gran pintor Durero publicó un libro titulado Instrucción sobre la medida con regla y compás de figuras planas y sólidas en el que describe cómo trazar con regla y compas la espiral basada en la sección áurea, que se conoce como “espiral de Durero”. Se asumía que esta proporción era la clave para entender el propio universo; incluso uno de nuestros grandes científicos experimentales, Johannes Kepler, se refería así a ella en su libro Mysterium Cosmographicum: “La geometría tiene dos grandes tesoros: uno es el teorema de Pitágoras; el otro, la división de una línea entre el extremo y su proporcional. El primero lo podemos comparar a una medida de oro; el segundo lo debemos denominar una joya preciosa” La verdad es que resulta un número lleno de curiosidades que ha arrastrado este enorme interés por parte de muchos estudiosos. Φ2 = Φ+1 Φ-1 = 1/Φ Φ3 = (Φ+1) / (Φ-1)

Podemos encontrar esta proporción de 1,618 en situaciones naturales tan diferentes como la tasa de reproducción de los conejos, la disposición de los pétalos de las flores (Ley de Ludwig), la distribución de las hojas en un tallo, la relación entre las nervaduras de las hojas de los árboles, la relación entre el grosor de las ramas principales y el tronco, o entre las ramas principales y las secundarias, la cantidad de espirales de una piña, la distancia entre el ombligo y la planta de los pies de una persona, respecto a su altura total, entre las falanges de la mano, el tamaño del fémur respecto a la tibia, la relación entre la distancia entre las espiras de cualquier caracol o del Nautilus y en otros objetos orgánicos como las piñas de los pinos. El mundo del arte no ha dejado de ser ajeno a esta proporción. Aparece en el cuadro Leda Atómica de Salvador Dalí, una colaboración con el matemático rumano Matila Ghyka; en las relaciones entre altura y ancho de los objetos y personas que aparecen en las obras de Miguel Ángel, Durero y Leonardo da

La norma más conocida dentro del mundo de la composición es la de los tercios. Se basa en dividir la fotografía por medio de dos líneas en tres partes horizontales y verticales. Los puntos de intersección de las mismas serían los centros de interés de la escena. Otra variante calcula estos puntos trazando una línea diagonal entre dos vértices opuestos y otra línea perpendicular a esta que pase por los vértices restantes. Los puntos de intersección serían los puntos fuertes. En este caso se sitúan algo más hacia el exterior. La espiral áurea, origen de las anteriores simplificaciones, es una espiral logarítmica. El punto de nacimiento de la misma sería el punto áureo.

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FOTOS PASO A PASO

Lo que cambia un fondo… Esta chinche se coló en nuestra casa, supongo que buscando comida entre las numerosas plantas que tenemos. Era un ejemplar muy hermoso, muy joven y sin desperfectos. Además se trataba de un bichito la mar de tranquilo, así que me lo llevé para el estudio. Empecé, como siempre, con una toma algo alejada. El enorme tamaño de captura de la D800 me permite grandes recortes y prefiero una foto recortada a un insecto incómodo con la cámara que huya justo cuando tengo todo preparado y a punto de apretar el obturador. En la segunda toma aumenté de forma significativa la cantidad de extensión y busqué una foto en el periódico que estaba usando de fondo que hiciese destacar la forma de mi invitada. Como no hacia ademán de moverse sustituí el fondo por una de las fotos que estaba esperando ser montada en nuestra exposición. Era una anémona de brillantes colores que combinaba muy bien con el verde del sujeto. Algunos pequeños cambios en la posición del fondo dieron como resultado una foto con una paleta de colores que van del verde al rojo, su complementario.

D800 con MicroNikkor 105 mm 1:2.8 a f/11 y 1/2. Anillo de extensión Nikon PN-11 de 52,5 mm. Flash con difusor de ventana de 60 cm.

La enorme importancia de la luz

¿Cómo podemos distinguir la luz suave y la dura? Para diferenciar una luz suave de una luz dura nos fijaremos en la forma en que aparece la sombra proyectada sobre el fondo. En una luz dura el cambio será repentino, sin apenas zonas de transición entre la parte iluminada y la que no recibe luz. Con una fuente de luz suave aparece un gradiente de sombra, llamado penumbra, entre la zona que recibe la luz y la que no. Pero no confundamos la forma en que aparece la sombra, más o menos abrupta, con su densidad. Podemos tener una luz muy dura con sombras más o menos oscuras. La densidad de la sombra depende, fundamentalmente, de la distancia a la que se encuentre el fondo y de las características del mismo, no de la dureza de la iluminación.

nuestra estrella se refleja en las nubes, en los árboles, en nosotros mismos… A esta fuente de luz, que ilumina mayoritariamente al sujeto, se la denomina como luz principal, al resto se las llama luces secundarias y su papel en el mundo de la fotografía será el de precisar mejor la forma del objeto, limitar su contorno o aclarar las sombras de la luz principal. Esta segunda fuente suele ser difusa en la naturaleza y hemos de procurar que lo sea también cuando la elegimos para nuestras fotografías, pues de lo contrario nos encontraríamos con un sujeto iluminado por dos fuentes iguales y eso produce resultados poco creíbles. De todas formas si nuestro deseo es crear una iluminación que sea chocante para el espectador puede ser una buena idea.

Orientación de la luz De la posición de la luz principal con el sujeto depende la forma y tamaño de la sombra que será proyectada. Y esta sombra es uno de los principales factores a la hora de determinar el aspecto de la imagen y la apariencia con que percibimos las formas y los volúmenes. Veamos los casos más habituales con detalle, dada su importancia.

La luz a 45º mantiene cualidades de la luz frontal y lateral: textura y saturación.

•

Luz frontal: Ilumina al objeto desde encima del punto de vista. Provoca sombras duras y cortas. Es la que produce el sol en verano. Modela muy poco pero destaca la simetría y oculta la estructura superficial.

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Luz de frente: Ilumina al objeto desde el punto de vista. No produce sombras sobre el mismo, desaparece el relieve y da colores vivos. Es la que producen los flashes de anillo y los flashes integrados en la cámara. Puede ser muy útil para fotografiar objetos huecos. Si la posición del flash es alta proporciona pequeñas sombras.

•

Luz desde abajo: Muy efectista dado que no se suele plantear en la iluminación natural. Puede ser interesante para llamar la atención o para resaltar características de los objetos transparentes.

•

Luz alta a 45º: Es la iluminación natural por excelencia a mediodía en los países cercanos a nuestra latitud. La han utilizado los artistas de todos los tiempos para sus obras. Permite una progresión de los tonos más altos a las sombras más densas, destacando los tonos medios. Es la que más acentúa la forma y estructura. La mayoría de las veces puede ser mejor, dado que en nuestra cultura leemos de izquierda a derecha, situar la luz sobre el lado izquierdo, proyectando las sombras hacia la derecha.

•

Luz lateral: Si se sitúa a la altura del eje óptico, subraya muchísimo las texturas, el volumen y la profundidad. Con ella conseguiremos generalmente un alto contraste que transmite fuerza, pero suele precisar de una segunda fuente difusa para aclarar las oscuras sombras que origina. Si la luz está a unos 45º del sujeto resalta mucho su materia, su

Nikon D300 con MicroNikkor 105 mm a f/11 y 1/6. Flash a través de difusor y un reflector blanco.

La luz lateral y muy baja es la idónea para conseguir la sensación de textura y relieve. Nikon D300 con MicroNikkor 60 mm a f/8 y 1/100. Flash rebotado en difusor plateado de pequeño tamaño.

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relieve. La mayor parte de los objetos iluminados con luz dura, intensa y rasante, desvelan una textura imposible de resaltar de otra forma. Se usa para monedas, bajorrelieves… •

Contraluz: El objeto se encuentra entre la luz y la cámara. Únicamente vemos su sombra y un halo de luz que lo delimita con precisión. Si el sujeto es opaco ha de tener una silueta muy clara para ser identificado. Este tipo de iluminación se adapta magníficamente a cristalería y porcelana traslúcida.

Es importante recalcar que en general deberíamos tener únicamente una luz principal con una orientación bien definida y estudiada. Esta será la fuente de luz que defina el aspecto y el carácter de la toma. Las otras fuentes de luz, sean reflectores, focos, flashes, difusores… han de jugar un papel accesorio y colaborar simplemente con la luz principal, reduciendo el contraste o matizando ciertas características que produce ésta. También las podemos utilizar como luz de efecto, por ejemplo a contraluz para proporcionar una luz alrededor del sujeto o transparencia.

El contraluz también satura mucho el color si es capaz de atravesar al sujeto. Nikon D300 con MicroNikkor 200 mm 1:4 a f/8 y 1/8.

Los estambres de la flor marcan el final de la diagonal que se inicia en la esquina inferior derecha. Están rodeadas de su color complementario y forman una tríada de color con el propio fondo. La atención se mantiene en la zona naranja en una composición cerrada, ya que el ojo no se ve impelido a seguir vagando por la imagen. Nuestro cerebro define a la flor como sujeto principal por ser la única zona nítida de la imagen y estar rodeada de un tono uniforme sobre el que destaca también por presentar una tonalidad más clara. Nikon D800 con MicroNikkor 105 mm 1:2.8 a f/11 y 1/250. Luz natural y reflector blanco.

Se hace camino al andar

Cuando llueve los insectos suelen refugiarse debajo de las hojas y flores. Si dedicamos un poco de tiempo a su bĂşsqueda el esfuerzo suele verse recompensado. En la composiciĂłn las gotas de agua equilibran la importancia y peso del insecto. El nervio de la flor dirige la mirada. D300 con MicroNikkor 105 mm 1:2.8 a f/11 y 1/40. Luz natural como relleno y flash sin difusor a travĂŠs de las gotas para darles volumen.

252 | 253 Cuando deseemos conservar todo el insecto nítido es vital mantener su paralelismo con el sensor, mediante la precisa colocación de la cámara. Luz de puesta de sol de relleno y principal aplicada con un flash en el que se montó un filtro cálido. La composición es muy centrada, creando algo de tensión la situación en diagonal de la espiga y el ángulo que se forma con el insecto. D800 con MicroNikkor 105 mm 1:2.8 a f/8 y 1/500 con ISO 400 ya que el animal corría más de lo que pueda parecer.

La importancia de una buena edición

Llega la hora de encargarnos del contraste. Lo regularemos hasta que veamos que empezamos a perder información en las luces altas o se empasten las sombras más densas, lo que antes suceda. Solo resta el control de claridad que realmente, pese a su nombre, es un ajuste de contraste, pero que en este caso afecta a los tonos medios, no como el anterior que es más selectivo con los extremos del histograma. El efecto que causa es de un incremento de la sensación de textura, muy agradecido en las tomas de macro, pero del que es fácil abusar y obtener resultados muy artificiales. Si es necesario ajustaremos intensidad y saturación. Ambos vuelven más vivos los colores, pero el primero afecta menos a los tonos ya saturados y a los cercanos a la piel humana.

Control definitivo del contraste Para ajustar exposición es importante centrarse únicamente en los tonos medios.

Estos cuatro ajustes nos permiten fijar con precisión los límites del histograma para recrear la escena como la vimos o con fines artísticos.

Estos ajustes son más personales que los anteriores que tienen un carácter más técnico.

Es posible que un revelado básico nos proporcione la fotografía que deseemos. Pero en ocasiones no tendremos otro remedio que recurrir a otras

262 | 263

herramientas para lograr ajustar a la perfección el contraste. Todos los programas de edición cuentan con la herramienta curvas, que nos proporciona una gran precisión. En Camera RAW y Lightroom tenemos una forma simplificada de trabajar con las curvas de forma paramétrica, un método muy intuitivo ya que solo necesitamos leer los tiradores para saber sobre qué parte del rango tonal trabaja cada uno. Así tenemos iluminaciones, claros, oscuros y sombras. La otra forma de trabajar con curvas en estos programas es en modo punto, que coincide (en el método de trabajo, aunque no en el algoritmo de edición) con las curvas de Photoshop que vamos a describir en detalle. Con ella podemos tener un control total de la tonalidad de nuestra foto. Pero antes haremos una parada para ver a su hermana menor: la herramienta niveles con la que comparte algunas características y que nos va a servir para entenderla mejor.

Ajustando los niveles Los programas de retoque suelen tener opciones automáticas, pero un ajuste manual proporciona un mayor control. Vamos a analizar el funcionamiento de la herramienta niveles con un ejemplo. Como podemos apreciar en la imagen prevalecen los valores tonales del centro del histograma, no existiendo tonos en las zonas correspondientes al negro (izquierda del histograma), ni al blanco (derecha del histograma). Esto significa que nuestra imagen tiene un contraste bajo.

Los huecos en el extremo del histograma reducen el contraste de la toma. Aunque tampoco es imprescindible que la información ocupe todo el ancho del histograma, esa decisión dependerá de las características de la imagen y de nuestra visión personal.

Para acceder a la herramienta niveles podemos utilizar el teclado (Control +l) o mediante el menú desplegable Imagen/Ajustes/ Niveles. La herramienta nos muestra una copia del histograma y tiene tres reguladores triangulares en su base: uno negro, otro gris y otro blanco. Moviendo el negro hasta el borde de la montaña de píxeles, haremos que todos los píxeles situados a su izquierda se transformen en negro puro. Si movemos el regulador blanco aclararemos la imagen, descartando los valores que se sitúen a su derecha, que se volverán blanco puro. Este proceso se llama establecimiento del punto negro y del punto blanco, o también recorte de los valores de entrada. Se puede efectuar visualmente, aunque si presionamos la letra ALT mientras movemos los deslizadores blanco y negro veremos qué zonas son afectadas. Con el tirador blanco la pantalla se

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