Estefanía Catalán
¿Qué es el aburrimiento? Papá, mamá estoy aburrido/a, ¿qué hago? «El aburrimiento es un estado afectivo desagradable y transitorio en el cual el individuo siente una falta generalizada de interés y dificultad para concentrarse en la actividad actual” • El aburrimiento es una emoción, debemos primero entender qué son las emociones y qué funciones desempeñan en nuestras vidas. • Las emociones primarias son universales y que todas las personas, sea cual sea su cultura, exhiben y reconocen. • La ira, el miedo, la tristeza, la alegría, el asco y la sorpresa. El aburrimiento no. • Emociones secundarias, se aprenden.
¿Qué es el aburrimiento? Cómo aprendemos las emociones • Nuestras reacciones fisiológicas: cómo reaccionan nuestros cuerpos; por ejemplo, sudando, acelerando el ritmo cardíaco, etcétera. • Nuestros conocimientos: es decir, lo que pensamos y nuestra interpretación de los acontecimientos. • Nuestros sentimientos: etiquetamos lo que sentimos como enfado, tristeza, etcétera. • Nuestro comportamiento: como huir, golpear a alguien o algo, abrazar a alguien, etcétera.
SENSACIÓN - PENSAMIENTO - EMOCIÓN - COMPORTAMIENTO
Identificar nuestra emociĂłn para poder regularla Nuestras experiencias emocionales dependen de: - Notemos cambios fĂsicos en nuestros cuerpos - Atribuyamos una etiqueta emocional apropiada - InterpretaciĂłn de los hechos y del ambiente
El estudio del puente tambaleante
¿Cómo sabes que es aburrimiento?
Aprendizaje vicario, modelado. Aprenden por imitación ¿Cómo gestionamos el aburrimiento los padres?
¿Cómo sabes que estas aburrido? Conciencia corporal → Todo emoción se apoya en el cuerpo. Se inician experiencia de reflexión a su mundo interior Identifican sensaciones y pensamiento. Cuestionan lo aprendido Ayuda a que sepan identificar estado de ánimo y buscar estrategias para regularlos más adaptadas. Trabajamos Autoconocimiento TAREA DE PADRES/MADRES : rastrillar el fondo y ayudar a nombra adecuadamente lo que nos pasa para poder regularse ¿Niños/as aburrimiento o Niño/as, tristes?
La experiencia de aburrirse El aburrimiento es, en parte, independiente de la tarea, situaci贸n o individuo. Se describe como un estado emocional en que el nivel de estimulaci贸n se percibe como insatisfactoriamente bajo. Esta falta de estimulaci贸n externa es lo que conduce al aumento de la excitaci贸n neuronal en busca de variedad, y si eso no se cumple, conduce a la experiencia del aburrimiento.
La experiencia de aburrirse
El aburrimiento es un estado de baja excitaciรณn: no puedes estar excitado al mismo tiempo que aburrido.
La sociedad actual refuerza el aburrimiento ¿Por qué estamos todos tan aburridos hoy en día?
A pesar de tener recursos infinitos de ocio sin precedentes para satisfacer nuestros deseos, internet, aparatos digitales, moviles, tablets..Parece que cuantos más estímulos tenemos, la capacidad de hacer frente a la rutina, la repetición y la falta de excitación mas facil nos aburrimos. Nuestros hijos, que siempre tienen actividades que hacer, agendas muy marcadas y estructuradas. Durante el curso no paran. Cuando terminan su jornada escolar tienen deberes y después, actividades extraescolares. Casi no tienen tiempo para jugar o para, simplemente, no hacer nada.
La sociedad actual refuerza el aburrimiento El miedo de la sociedad, a que nuestros hijos se aburran es impulsado por una fuerte motivación para estimularlos con el fin de aumentar su capacidad cerebral. Los nuevos padres son bombardeados con mensajes por los medios de comunicación y la publicidad que les dicen que deben estimular a nuestros hijos. Los populares juguetes preescolares parecen estar sobrecargados de funciones para enseñarles a los niños que los objetos cotidianos por sí mismos no son simple y suficientemente emocionantes. Versiones infantiles de los aparatos para adultos. El primer teléfono inteligente para bebés de o «Mi primera tablet» les permiten habituarse a las pantallas desde muy temprano.
La sociedad actual refuerza el aburrimiento Cuanta más estimulación les damos a los niños, más desean y esperan. Al proporcionarles esta estimulación constante, estamos creando una nación de niños aburridos, y también de futuros adultos aburridos. No se trata simplemente de que nos apartemos de cada amenaza de aburrimiento que se nos presenta en la vida, sino que estamos criando a nuestros hijos en un mundo que rehúye el aburrimiento. La desventaja de esto es que los niños de hoy no saben cómo crear su propia estimulación y dependen de un modo pasivo de los proveedores externos de entretenimiento y de compromiso.
Sobreestimulación externa • ESTRUCTURA: nuestra actividad diaria esta ESTRUCTURADA. Seguimos horarios y rutinas que nos marcan qué hacer en cada momento. • Demasiadas actividades estructuradas y programadas hacen que los niños tengan poco tiempo para reflexionar, pensar y ser creativo. Se vuelven agentes pasivos.
Sobreestimulación externa SOBREESTIMULACIÓN: Por desgracia, la televisión, el teléfono o la tablet se han convertido en los recursos mas habituales para luchar contra el aburrimiento, los usamos con demasiada frecuencia como herramienta principal para saciar esa necesidad. La estimulación de los niños es necesaria para su desarrollo , pero en este punto hablamos de SOBRE estimulación , excesiva . Lo que conlleva que los niños y niñas sufran consecuencias que en el futuro pueden convertirse en un problema. No solo eso, sino que la estimulación constante de actividades, clases y eventos sociales significa que estamos criando a niños que esperan una dieta de excitación constante.
RECOMPENSA INMEDIATA No entienden la espera, este tipo de conductas y juegos les otorga una estimulación sin fin e inmediata. Por lo que ellos aprenden que la vida es así.
FALTA DE CONTACTO PERSONAL Y SOCIAL Todas estas cosas con las que estamos en contacto a través de las nuevas formas de jugar, de vivir nuestro día a día con las rutinas y exigencias, nos impiden tener un momento donde “ no hacer nada“ para contactar con ellos mismo , cómo se sienten , qué necesitan , descubriéndolo por ellos mismos . Si por ellos mismos no saben qué les pasa o que necesitan cómo van a gestionarlo o solucionarlo en su vida personal y social.
BAJA TOLERANCIA A LA FRUSTRACIÓN También repercute en que no entienden ni comprenden la frustración. No les hemos enseñado a que gestionen eso. Intentamos sobreprotegerlo para que no experimenten esa emoción . Qué es real. Si no les entrenamos a manejar de niños esa emoción luego de adultos lo sufren , porque no tienen herramientas . Y eso también se lo enseñaremos con el aburrimiento. No siempre tendrás al alcance todo, y debemos enseñarles cómo vas a hacer en esas circunstancias.
DEPENDENCIA Otra de las consecuencias es la dependencia que se crea a estar siempre haciendo algo y con mucha excitación. Necesidad de estar siempre muy estimulado por cosas de fuera , extrínsecas. Dependerán para resolverlo de la búsqueda de sensaciones o estímulos . Vulnerables dependencia o conductas de riesgo.
FALTA DE AUTONOMÍA Y MOTIVACIÓN Lo que nos lleva es a una falta de autonomía y motivación. Por mi solo , no hay nada que me estimule o me distraiga o me motive. Me lo tienen que dar. Incapacitándolos y mermando su capacidad creativa , que en la infancia es cuando mas se tiene. Su capacidad de imaginar.
Funciones del aburrimiento El poder conectar con uno mismo y buscar actividades o acciones por uno mismo que puedan sacarlos del aburrimiento hará que sean: 1. Más flexibles cognitivamente, resolver conflictos, buscar estrategias. 2. Más tolerantes a la frustración. 3. Más creativos. 4. Más resolutivos. 5. Autonomía personal, no agentes externos que les guíen. 6. Pensamiento propio. 7. Desarrollo de imaginación.
Si un niño se aburre y nadie le dice qué hacer, él mismo acabará dando con una forma de entretenerse. Entrenarles al mundo real generando factores de protección para la adolescencia y la adultez.
Objetivo: Dejar que se aburran Los padres actuales aprendemos que el aburrimiento es algo tan negativo que hacemos casi cualquier cosa para evitarlo. El aburrimiento significa infraestimulación y, como hemos visto, la estimulación es vista como algo que debemos darles a nuestros hijos, tan importante como el amor y el alimento. Estamos tan atrapados en la búsqueda de la estimulación, en llenar su tiempo de actividades significativas dignas, que nos hemos olvidado de lo beneficioso que puede ser el tiempo de inactividad, de aburrimiento.
Qué hacer como padres frente al aburrimiento Dar herramientas, no soluciones: Que los pequeños tengan a su alcance medios y posibilidades de hacer cosas. Es decir, material de manualidades, juegos de construcción o cosas que puedan potenciar esa libertad y creatividad, para que no recurran siempre a la tele o a los videojuegos ( recompensa sin demora , excitabilidad prolongada , falsa sensacion)- generar espacios estimulantes para la creación y el juego en familia, y oportunidades para poder practicarlos.
Objetivo: Dejar que se aburran Dotar de los recursos, materiales, espacios, pero no de las ideas. El juego libre, imaginativo y no estructurado es esencial para el desarrollo infantil. Un ejemplo: se le da un palo al niño y se le pregunta: "¿Qué podemos hacer con él?". Y que el niño diga mil cosas, no sólo una. Favorecer juegos creatividad, que les entrenarles en pensamientos activos y proactividad mental, pensamiento lateal (objeto metaforico). Educar mediante modelado Cómo gestionamos nuestro propio aburrimiento será esencial para educar a nuestros hijos. Por lo que reflexionar sobre cómo os sentís vosotros con el aburrimiento, os lo permitís, qué hacéis cuando os sentis aburridos. Permitiros estados de aburrimiento.
Qué hacer como padres frente al aburrimiento • Evitar el exceso de ruido de fondo. Encender el televisor solo para ver programas específicos, cuidadosamente seleccionados. • Limitar el tiempo frente a la pantalla. Esto incluye la televisión, los ordenadores, las consolas, los teléfonos inteligentes, etcétera. • Entrenar en la tranquilidad, la calma y la reflexión, como cualquier clase o actividad estructurada «estimulante». • Dejar que los hijos adquieran la estimulación del mundo real, interactuando con la naturaleza, observando girar la lavadora, golpeando cacerolas, etcétera. A nuestro alrededor existen muchas maneras de estimular a los niños, no necesitan aprender a necesitar más. • No sobreprogramar a los niños. Algunas clases y actividades extraescolares son geniales, pero asegúrate de que, cualquiera que sea su edad, también tienen tiempo de inactividad. • Ayudar a que den significado a lo que sienten. Acompañando. • Preparar a los niños para la realidad de la edad adulta, cuando la vida no es siempre emocionante y divertida.