Mi Voz. Poesía (2017). Elizabeth Santiago Gómez

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Elizabeth Santiago Gรณmez

MI VOZ P O E S ร A

H E BHEELB E L


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Elizabeth Santiago Gรณmez MI VOZ POESร A HEBEL

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Elizabeth Santiago Gómez

MI VOZ P O E S Í A

Premio de Poesía «Alma del Campo» julio-octubre 2016 Grupo de poesía «Tu Voz»

HEBEL ediciones Humus | Poesía 5


MI VOZ | POESÍA © Elizabeth Santiafo Gómez, 2016. © HEBEL Ediciones Colección Humus | Poesía Santiago de Chile, 2016. www.issuu.com/hebel.ediciones Diseño y edición: Luis Cruz-Villalobos www.benditapoesia.webs.com Imagen de portada y contraportada: © Yerko Vuscovich Qué es HEBEL. Es un sello editorial sin fines de lucro. Término hebreo que denota lo efímero, lo vano, lo pasajero, soplo leve que parte veloz. Así, este sello quiere ser un gesto de frágil permanencia de las palabras, en ediciones siempre preliminares, que se lanzan por el espacio y tiempo para hacer bien o simplemente para inquietar la vida, que siempre está en permanente devenir, en especial la de este "humus que mira el cielo".

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PRELUDIO

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HAY QUIENES oda a este poemario

Hay quienes escriben palpitando Anunciando el verbo exacto Adjetivando el zumbido puro del paso y de la hora Como quien apunta con saeta a la manzana Sobre la cabeza del amado Y da en el blanco plenamente Hay quienes cantan En silencio Como dilusidando el corazón preciso De lo que las palabras ocultaban O difícilmente podían desvelar Hay quienes besan el oído del que escucha Del que lee Aunque miles de kilómetros y montañas de mares e islas Los separen Y saben ponerle nombre Sujeto predicante Artículo perfecto Tiempo y color propio Al instante que se vive sediento de su voz.

Luis Cruz-Villalobos Santiago de Chile, primavera de 2016

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MI VOZ

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ME BUSCO

Cuando se ausente la ausencia, me iré detrás de sus besos insípidos. Cortaré las aristas de su aurora doliente, y le secaré el sol debajo de los párpados. En algún miedo de sus pesares me debo estar esperando; en el corazón de alguna contienda en la que pierdes todo, y lo único que encuentras es a ti mismo.

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MI VERSO Y YO

Tuve cita con mi verso allĂĄ en el bar de mi almohada; bebimos tragos amargos en copas de madrugada. Una lĂĄgrima insistente me tirĂł abajo la puerta, llenando de sal los surcos de mis heridas abiertas. En los labios de mi verso me bebĂ­ sorbos de calma y vi flotar en su copa los pedazos de mi alma.

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NUBE DE DUDAS

Me despierto, te busco. La realidad me asalta: Murió otra vez tu amor en los brazos del alba. Tropiezo con un beso que dejaste en mi cama. Desayuno tu ausencia con mis ganas. Divaga mi mente en el tejado de tus palabras, que está lleno de agujeros por todas las que faltan. A la teja «te quiero» el viento la hizo Santa y la encerró en su convento como a tantas. Desde aquí se ve el cielo de tu alma, y las nubes de dudas que le nublan la cara. Esta noche te espero con mi traje de gala: no me importa si el sol te hace abrir las alas.

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SALVACION

Caminas entre las ruinas de una mirada mustia, sepulta en los recuerdos de un pasado sombrío. Buscas en tus bolsillos un puñado de paciencia: ¡Sé que has tenido tanta! Vuelve a caer el sol a los pies de tus abrazos, allá donde tus palabras me estrechan las manos. A veces le temo a tus necesidades.... Otras veces te necesito para salvarme de mis temores.

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NOSTALGIA

La vida condena a recuerdos los besos que jamás se dieron. Envejecen en las manos las caricias que no nacieron nunca. Somos granos de polvo en la retina del tiempo; un pesar que se retuerce en el vientre de la rabia. Caminos asfaltados con momentos perdidos; la sombra de una ilusión que resbala en la pared de la distancia. Felicidad injertada con ausencias. Sueños agujereados en la frente: heridos con pistolas de añoranzas. La vida se parece a una mentira... Tan corta y tan incierta mientras pasa.

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SI SUPIERA PINTAR…

Si supiera pintar, pintaría tus manos. Pintaría tus ojos como noche entre párpados; y el arco de tus cejas disparando asombros que asustan al semblante alegre de mi rostro. Si supiera pintar, pintaría tu sonrisa. Pintaría ese verso que se duerme sin rima; sentado en tu mirada como ajeno y distante, dando a luz un pretexto para besarte. Pero no sé pintar: ¡Qué verdad tan amarga! Mis trazos son huérfanos, mis líneas bastardas; mas si el mismo Picazo me prestara sus manos, sería imposible pintar cuánto te amo.

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INTIMIDAD

El viento de un suspiro nos apagรณ la luna. Nos sorprendiรณ el fulgor de este delirio; meciendo sentimientos en la cuna donde vimos nacer a nuestro idilio. Me embriago con matices y sabores de un beso que no conoce la inocencia; obligando a la noche a no hacer rumores para escuchar solamente tu existencia.

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RIDICULO

Y otra vez fui el payaso de este circo de arena. La gitana indigente vestida de princesa. La representación gráfica de una sonrisa abierta, estática y ficticia cuan mentira sin piernas. Otra vez fui el bufón de mi propia comedia, pidiéndole limones al árbol de cerezas. Esperando en la vida una respuesta diversa de esta lluvia de eventos con sabor a tristeza.

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INCERTIDUMBRE

Me asalta la verdad de que no sé hacer nada; apuñala a mi orgullo y lo lanza al andén. Me siento indefensa, inmóvil, desarmada. ¿Ante esta gran verdad qué puedo hacer? Brújula de mi vida que estás desajustada: ¿Por este laberinto a dónde llegaré? Espero se derrita la espera congelada, que me hizo prisionera de lo que un día fue. Y sigo con mi llanto de gitana asustada, leyéndole la mano al viejo atardecer; para ver si la noche engendra madrugada, y me regala el canto de un nuevo amanecer.

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PERSIGUIENDO UN SUEÑO

Realidad absurda que halas mis cabellos; me humillas, me atas, me impides actuar. Mis fuerzas se extinguen como en un destello y el cielo de mis ojos desata el temporal. Un verso indignado se ciñe a mi cuello. Reclama ser libre, que lo deje andar: A llenar miradas de momentos bellos, a llenar la vida de ganas de amar. Me grita: ¡Cobarde, persigue tu sueño! Si no tienes alas aprende a volar. Conquista al destino, vuélvete su dueño y aunque estés despierto continúa a soñar.

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MIENTRAS CAE UNA ESTRELLA

Mientras cae una estrella, el mundo cae a gotas sobre sus hombros. Una tristeza aguada inundada cada charco de su existencia. Él ha probado lluvias más amargas, pero esta llovizna ácida lo espanta. Mientras cae una estrella, las nubes grises se burlan de sus lágrimas. Las nubes nunca han visto las lágrimas de un hombre... Ser fuerte también cansa. La crueldad de la vida lo mira a los ojos, el mundo le resbala por la espalda. Mientras cae una estrella, la noche se avejenta en su garganta.

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AYER

Ayer sobre la ciudad un ángel desde su coche, regaba trozos de noche por toda la vecindad. Unicornios de verdad galopaban libremente, sobre el crepúsculo ardiente teñido de oscuridad. La luna: Su majestad, salió con sus trenzas largas y sus lágrimas amargas tejieron la claridad. Ayer la felicidad, secuestró al ángel del coche, cuando los trozos de noche bañaron la vecindad.

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CONTRARIEDAD

Un silencio que suda minutos aturdidos. El lecho que respira soledades anheladas. Mi verso dejó huellas de recuerdos en tus paredes blancas... El tiempo que vuela con las alas de un gesto; dolor que se revuelca entre mis sábanas. Desconsuelo que besa a mi luz apagada... Este instante se asemeja en lo amargo, al llanto que se esconde debajo de mi cama. ... Me incitas a ser yo y después me condenas... Y yo bebo y me ahogo en mi propia agua.

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TU MIRADA

Tu mirada sabe a sol, a vida viva, a jardĂ­n florecido, a verdad empapada de recuerdos y aĂąoranzas desveladas. Tu mirada huele a limpio, a cristal de lluvia y suelo empedrado de jazmines, a un verano lento... Tu mirada es un trozo de luz, tatuado en un folio blanco. El extracto de una inocencia espesa, encerrada en dos tulipanes negros.

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MONOTONIA

Dijimos " para siempre" sin mirarnos por dentro; sin cortarle las piernas a nuestros defectos. Nacieron las promesas del vientre del momento. Adornaron la escena frases y juramentos. Pensamos que los días serían parecidos a aquel febrero ingenuo en que nos conocimos. Dejamos con el tiempo morir nuestra armonía, sin saber que "para siempre" llegaría algún día...

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CUANDO TE PIENSO

Te encuentro en cada esquina de mis pensamientos, mojándote los pies en mi memoria, salpicando vida en los residuos de mi ser; sembrando mariposas en mis atardeceres. Eres el día y la noche de mi tiempo... En tus ojos se evaporan mis suspiros; tus besos prescinden de mis ataduras... Abrázame y estréchame con el viento, que yo me abandonaré en tu cielo y te besaré las estrellas.

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DESAFIO AL PASADO

Un bostezo de angustia empaña los cristales de mi alma. Anuncian funeral: Murió la calma. Me alzó, me retiro; la partida que parta. El padre del presente jugó otra vez su carta. Me persiguió hasta el bosque donde la noche canta. El novio del ayer jugó otra vez su carta. Pasado que apuñalas mis heridas que sangran; las que hiciste una vez, las que no sanan. Me recuerdas que existes, que estás en mis entrañas. Heredero del tiempo: ¡Cómo dañas! Disparas tus recuerdos como lanzas heladas que acribillan el sueño de mis madrugadas. ¡Quiero desempañar los cristales de mi alma! ¡Te declaro duelo! Renace la calma. Sepulto tu cadáver entre el llanto y mi almohada; donde yo misma un día te dejé hacer morada.

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SACUDIMOS LA TARDE

Sacudimos la tarde y el viento se llevó entre sus dedos un pétalo de sol. Cayeron al suelo las verdades maduras, las hojas de vocablos omitidos en miedos. Mi boca supo a poesía cuando acarició tus labios; y mis versos se colaron por las rendijas del silencio. Sacudimos la tarde... El viento posó en nuestros ojos aquel pétalo de sol, y quedamos sembrados en la tez del delirio, mientras la tarde sacudía nuestros cuerpos.

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RECONCILIACION

En los brazos de un beso agoniza el fracaso; herido gravemente por palabras de amor. Las ganas de besarte le desatan el lazo a la camisa negra del rencor. Los gritos, las ofensas, acortaron el paso; cediĂŠndole el camino a la pasiĂłn. Otra vez nuestras manos se unieron trazo a trazo, y caminamos juntos las sendas del perdĂłn.

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REGRESO

Volví a pisar tus tierras dolorosas cuando a todo el rencor arranqué de mi pecho; tratando de encontrar aquellas rosas que dejé en tú jardín casi deshecho. Volví sobre el pedal de tus entrañas buscándole la huella a tu cultura; lo único que vi fue a las arañas tratando de tejer su sepultura. Tan triste regresé sobre mis pasos al ver morir mis rosas en tus tierras; sedientas, con la piel rota en pedazos, rogándole piedad a tu alma negra. Si piensas que tu orgullo te hace fuerte, el odio de un tirón te lanzará al infierno. Comprenderás entonces que el rencor es muerte y que sólo el amor nos hace ser eternos.

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MIEDOS

Se me ahogan los sueĂąos en el sudor de mis miedos. Naufragan las respuestas en una isla de dudas. Se hunde mi barca... Sigo sembrada en la orilla, esperando florecer decisiones que den a luz los frutos de una esperanza. AĂşn me queda grande el vestido de la vida... Mas yo me aferro a su falda.

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QUIZÁ

Estás ahí: sentado en el andén de mi paciencia, arrojándole piedras a mis afectos. ¡Qué obstinado ímpetu! Retrocedo. No logro concebir un vocablo, capaz de congelar tus movimientos. Cuando tus municiones se te hayan agotado, te alzarás a observar nuestro contexto. Quizá hallan resistido. ¿Quién sabe si a tus piedras se las llevó el viento? Pero quizá tropieces con tu propia conciencia, al encontrar en el suelo acribillados sus cuerpos.

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DISENTIMIENTO

Escucha: no oigas. Oír no es escuchar: no es sentir el sonido. ¿Comprendiste algo? Oyes sin reflexionar y luego te defiendes de lo que crees que digo. ¡Qué extraño dialogo! Así este amor agraviado: insólito y apocado detrás de nuestros gritos.

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TU VOZ

No sientes tus palabras en las piernas del viento, porque el viento las pierde cuando pierde la calma... Las palabras sinceras se sientan en el alma. No maquilles sus letras con verdades sombreadas, las palabras son bellas con la cara lavada. No escondas su esencia en los bolsillos del tiempo, por miedo a que el rechazo se atreva o asesinarlas: Las palabras de amor no mueren nunca; mueren los que se niegan a escucharlas.

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ESPERA

Te espero... Bajo el abedul que llora sus hojas a los pies de septiembre. Traigo una cesta de besos tibios y un deseo de verte sedimentado en la mirada. Te espero... Contándole los pasos a la llovizna que palpa la tierra fértil. Rasgándole un fragmento a este otoño, para guarecer mis besos. Estornuda la tarde el sabor de esta espera... ...Recordarte me recuerda a la vida. Y allá donde se escapan los minutos detrás de las hojas secas; te espero... y mientras tanto vivo.

FIN

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ÍNDICE PRELUDIO 7

Hay quienes oda a este poemario MI VOZ

13

Me busco

14

Mi verso y yo

15

Nube de dudas

16

Salvación

17

Nostalgia

18

Si supiera pintar

19

Intimidad

20

Ridículo

21

Incertidumbre

22

Persiguiendo un sueño

23

Mientras cae una estrella

24

Ayer

25

Contrariedad

26

Tu mirada

27

Monotonía

28

Cuando te pienso

29

Desafío al pasado

30

Sacudimos la tarde

31

Reconciliación

32

Regreso

33

Miedos

34

Quizá

35

Disentimiento

36

Tu voz

37

Espera 39


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Elizabeth Santiago Gómez (Cuba, 1989). Estudió Periodismo en la Universidad de Oriente, Santiago de Cuba. Miembro del grupo en línea «Tu Voz ». Primera Mención de Honor y Primer Premio, respectivamente, en el certamen «Alma del Campo», auspiciado por dicho grupo. 44


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