Teohaikus (2020). Mauricio Invernizzi

TEOHAIKUS Mauricio Invernizzi

HEBEL

Mauricio Invernizzi TEOHAIKUS POESÍA HEBEL

TEOHAIKUS Mauricio Invernizzi

HEBEL ediciones Cuadrá-Tú | Poesía

TEOHAIKUS | POESÍA © Mauricio Invernizzi, 2020 © HEBEL Ediciones Colección Cuadrá-Tú |Poesía Santiago de Chile, 2020 www.issuu.com/hebel.ediciones Cuidado editorial: Luis Cruz-Villalobos Qué es HEBEL. Es un sello editorial sin fines de lucro. Término hebreo que denota lo efímero, lo vano, lo pasajero, soplo leve que parte veloz. Así, este sello quiere ser un gesto de frágil permanencia de las palabras, en ediciones siempre preliminares, que se lanzan por el espacio y tiempo para hacer bien o simplemente para inquietar la vida, que siempre está en permanente devenir, en especial la de este "humus que mira el cielo".

Dios ausente, las hojas se amontonan, todo es abandono.

Matsuo Basho

1 ยกNi de rodillas, ni verรกs humillarme!

Sรณlo para Dios.

2 Dios les concede convertirse en poetas sรณlo a momentos.

3 Lejos con tu fe y tan bien como el amor por equipaje.

4 ¿Ora el poeta cuando al Señor escribe su poesía?

5 Hora novena, último sacrificio consumado fue.

6 ¡Monte, échate al mar!

Si lo dijeras con fe, allí estaría.

7 ¿Qué Padre fuera, si el hijo pan pidiera, piedra le diera?

8 Di la Palabra.

Pues todo te obedece.

Y sanaría.

9 Deja que vengan, el Reino es de los niños.

No se lo impidan.

10 YO SOY el camino, la verdad y la vida.

YO SOY EL QUE SOY. 11 La más pequeña semilla de mostaza.

La más grande fe.

12 Mujer virtuosa quién la hallará sino Él: Cuerpo de Cristo.

13 Primero actuaba, luego Él les enseñaba.

Es evangelio.

14 El que hace y dice lo que hace y dice Jesús, es discípulo.

15 Cambia tu mente por sobre la estructura.

ES transformación.

16 Abre los cielos, bendĂ­cenos la tierra.

Queremos lluvia.

17 Tienen los panes.

Y no ven los milagros.

Tienen los peces.

18 Suspiro de Dios.

Mil aĂąos un segundo.

Un sol se apaga.

19 Otro suspiro.

Mil años un segundo.

Un sol se enciende.

20 Ante un dios oro.

Y después, la conversión: Ante Dios oro.

21 Se duerme el día. Él ruboriza el cielo.

El crepúsculo.

22 Cae la noche. Él prende las estrellas.

Cuelga la luna.

23 Busqué en las nubes, en el viento y el trueno. Él no estaba ahí.

24 Busqué en el fuego y en los terremotos. Él no estaba ahí.

25 De pronto un silbo apacible y tranquilo.

Quiero acercarme.

26 ¿Cómo es Su rostro?

Sólo vemos Su gloria.

La luna brilla.

27 Gota que cae.

Y rebosa la copa.

Un aleluya.

28 La mano se abre, piedra negra que cae.

Vi mi pecado.

29 Hay un grato olor. ¿Y dónde están las flores?

Son oraciones.

30 Manos alzadas son raíces al cielo ¡Abba Padre!

31 Tras la cortina, hoy lo había pintado temprano de azul.

32 Se corre el velo, Ojos, cortina, día.

Misericordia.

33 Llegó el futuro.

El ayer es más ayer.

Su afán es el hoy.

34 Tú estás allá.

Un cielo de distancia.

Y yo aquí aún.

35 Desde el pasado arriban las estrellas.

Otras se apagan.

36 Ella esperaba.

Los segundos, minutos.

Aromos en flor.

37 Me amó primero.

Y yo no lo sabía.

Y dio su vida.

39 Quisiera ser un… poder, entonces, por fin… y ya nunca más…

40 La paz del alma es caer en sus brazos.

Ya no vivo YO.

41 Gente que pasa sin dirección, buscando paz para su alma.

42 El cuerpo fue al mar.

Las cenizas flotando. ¿Y el alma dónde?

43 Busca salida.

Por pasadizos cuela.

La luz del canto.

44 Si es un camino o es un río sin agua.

No lo sabemos.

45 Pájaro negro, ¿dónde aprendiste a volar? ¿Con Los Beatles?

46 Toda palabra vive sólo un instante, cuando es leída.

47 Toda Palabra es útil para salvar.

Permanecerá.

48 Abre los surcos, sembrando, regándola.

Es buena tierra.

49 Tuyo es el riego. Él quien da el crecimiento de lo sembrado.

50 Me entrego al sueño.

No sé si habrá mañana.

Si lo hay, Su gracia.

51 Me entrego al sueño.

No sé si habrá mañana.

Si no lo hay, a Dios.

52 El aire frío entra por la ventana. ¿O fuera un ángel?

53 Hubo mañana.

La luna se despide.

Su gracia está hoy.

54 Te dejé partir.

Me detuve a mirarte. ¿Luna, dónde vas?

55 A cuentas con Dios, en un lecho de enfermo. ¿O mejor sano?

56 Como en espejo se ve difuso el rostro.

Niebla en la vida.

57 Eres la espina del pescado o la rosa.

Ni de corona.

58 Primera estrella.

Diez luces en la ciudad.

Sรกbana negra.

59 En las sábanas han quedado las huellas de tu silueta.

60 Se queda insomne al lado de sus sueños sin poder entrar.

61 El ángel vela la indefensión de noche.

Mientras tú duermes.

62 En el mercado.

Arte neoliberal.

Canto a la carta.

63 De su escritura, hay manos que no saben de la lectura.

64 Hay unas manos que huyen de la escritura.

Solo quieren leer.

65 De dos ladrones, uno conociĂł a JesĂşs.

Al paraĂ­so.

66 Viento del cerro.

Ha llegado septiembre en este agosto.

67 Un alma grita por agua verdadera, brama sedienta.

68 Buscan las aguas por caminos de almas.

Vivir en ríos.

69 Dime si no es fe.

Las montañas hundidas bajo los mares.

70 Qué son los sueños, sino los borradores de un nuevo día.

71 Noche sin sueños.

Un día sin corregir el block de apuntes.

72 En nuestro mundo el sol también se apaga donde los bosques.

73 Y así edificó sobre la Roca firme, el fundamento.

74 Una galaxia sólo por Él subsiste.

Y en un caracol.

75 Entre ladrones, anduvo con rameras.

Peor, conmigo.

76 Lo que un suspiro regala, se pierde en un segundo.

77 Cuando el insomnio se nos hace presente, ya fue anoche.

78 Si tan sólo soy un punto en este punto.

Es la inmensidad.

79 Y me dejó el tren que viaja por los sueños.

Otro, mañana.

80 Sólo una noche y el despertar culpable.

Rosa y espina.

81 Tiembla la tierra y fuego en las montañas.

Soberano Dios.

82 Pasos sobre un mar.

Debajo las montañas.

La mirada en Él.

83 Suspiro del sol.

Un segundo sobre el mar.

Rubor del cielo.

84 Rodó a la orilla, no sabe si saltará.

El mar la mira.

85 En la penumbra, hay quién buscará la luz en la palabra.

86 Decidió callar esa última palabra.

Entonces amó.

87 No pudo callar esa última palabra.

Entonces mató.

88 Letra que surca el terreno del papel.

Siembra de ideas.

89 ¡Oye, corazón!

No pares, sigue, sigue.

No pares, sigue.

90 Bajo la sombra, la del Omnipotente, yo me refugio.

91 Final de un túnel.

Ni la luz ni oscuridad.

Boletería.

92 De California a germinar caminos.

Las mueven trenes.

93 Tan efímera, ni un sueño, poesía.

Hipnopómpica.

94 Hay que amarrarlas con un lápiz y un papel.

Se van al monte.

95 Un tenue frío recorre mi cubierta.

Me tienes vivo.

96 Hoy no hay décimas.

No rima la palabra.

Ensayo de haijín.

97 Llevo Su marca, ya no me pertenezco.

Arras del precio.

98 Te vas a dormir.

La sĂĄbana celeste sobre tu cara.

99 Tiempo perdido.

SueĂąo la casa propia. ÂżY la eternidad?

100 Rasgando el cielo con ojos incisivos.

Fugaz su paso.

101 Otra milla más. ¿No eras tan comunista?

Dale tu abrigo.

102 Y tus tesoros. ¿No eres capitalista?

Mas en los cielos.

103 Toda la Tierra. ¿No eres imperialista?

Dios es el dueño.

104 Ven y sígueme. ¿No eres tan socialista?

Vende y da todo.

105 Oportunidad.

Volverse y obedecer.

Reconciliación.

106 Si, "Dios ha muerto". ¡Y Él ha resucitado!

Venció la muerte.

107 Si, "Dios ha muerto". ¡Y Él ha resucitado!

También por Nietzche.

108 Un, dos, tres por mí, por todos mis amigos.

(No se vale así) 109 Por gracia les di.

Dan charlas en Mi nombre. ¿Y están cobrando?

110 Por gracia les di.

Educación Bíblica pública y gratis.

111 ¡Y serás libre!

Cuando busques la verdad y la conozcas.

112 Oigo y respondo.

Es incomunicación.

Es egoísmo.

113 Oigo y comprendo.

Comunico empatĂ­a.

Luego, respondo.

114 La bofetada.

Si tu YO sigue vivo: La otra mejilla.

115 Paga al mal con bien, si no, es ojo por ojo y le matarĂĄs.

116 Dicen: fui pobre.

Pero nunca aprendieron a ser humildes.

117 Todos los sueĂąos, que no dan esperanza, son pesadillas.

118 Dicen "diosito", porque no le conocen.

Es soberano.

119 Todo espíritu que pierde la palabra, de a poco, muere.

120 Todo Espíritu que pierde la Palabra, de a poco, muere.

121 Una maleta, lo más inútil para un viaje eterno.

122 Tiempo perdido.

Sueño la casa propia. ¿Y la eternidad?

123 En Casa de Dios.

Debate político. ¿Pero no el arte?

124 Tanta puerta ancha.

La trampa de lo fácil y nos perdemos.

125 ¡Qué ilusiones!

Efímeras razones.

Vanas palabras.

126 Vas caminando.

Volando no podemos.

A la misma luz.

127 Una llamada.

Y alegró su corazón.

Eso bastaba.

128 Una llamada.

Algunos volverían para encontrarse.

129 Te encontraría.

Aún en lo profundo.

Pastor de ovejas.

130 Él regresará de lo alto a lo profundo.

A los pequeños.

131 Con la violencia los violentos combaten a la violencia.

132 Pacificando, los humildes combaten a los violentos.

133 Perdonรกndolos los humildes demuestran ser de su Maestro.

Este bello libro fue diagramado en los talleres binarios de Hebel Ediciones en Santiago de Chile, a fines de un convulsionado verano del aĂąo 2020.

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Mauricio Invernizzi (Valparaíso, Chile, 1963).

Cantautor y poeta chileno, médico psiquiatra.

Fundador e integrante del Grupo Átrio, de música de raíz latinoamericana, ha continuado como solista, desarrollando la poesía y la composición de canciones. La mayor parte de su obra musical y poética está disponible de modo gratuito en medios digitales. Vive y trabaja en Valparaíso.

no. Es ministro presbiteriano, psicólogo clínico y candidato PhD (VU Amsterdam). Cuenta