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Misión, plantando iglesias2

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MISIÓN, PLANTANDO IGLESIAS

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“Si quiere hacer crecer alguna cosa para que dure la estación, plante flores; si quiere hacer alguna cosa para que dure una vida, plante árboles; si quiere hacer alguna cosa para que dure la eternidad, plante iglesias. (Roger L. Dudley y Clarence P. Gruesbeck) No puede haber misión sin expansión territorial. No podemos hablar de misión en la iglesia sin que hayan nuevas iglesias. Según las Escrituras, un crecimiento numérico de nuevos discípulos es acompañado de nuevas iglesias y es que, como bien dice Elena G. de White:

“Los miembros de la iglesia no han sido todos llamados a trabajar en los campos extranjeros, pero todos tienen una parte que realizar en la gran obra de dar la luz al mundo. El Evangelio de Cristo es agresivo y expansivo”. 64

Definitivamente, la misión nos lleva a la expansión territorial. A esto le llamamos: Plantío de iglesias. Esto es misión pura porque una iglesia nueva es más eficiente para hacer nuevos discípulos, recibirlos y asimilarlos también. Según Gerson P. Santos, eso nos muestra que plantar nuevas iglesias es un método evangelizador eficiente. Además de esto, mantiene a los recién bautizados y evita la apostasía.65

A estas alturas de la lectura, todos concordamos que la misión de hacer discípulos es nuestra prioridad, y es que “La misión no se hizo para la iglesia; la iglesia se hizo para la misión, la misión de Dios”.66 No obstante, cuando hablamos de plantío de iglesia nos encontraremos

64 Elena G. de White, Servicio cristiano (Buenos Aires: ACES, 2006), 21 65 Gerson P. Santos, “Mirando a las ciudades. Transforma comunidades urbanas por medio de la plantación de iglesias”, Revista del anciano (julio - septiembre), 2018, 12. 66 Christopher J. H. Wright, The Mission of God: Unlocking the Bible’s Grand

Narrative (Downers Grove, IL: IVP Academic, 2006), 62.

con copiosa información respecto al tema, lo que puede generar confusión entre no pocos. Sin embargo, cuando hablamos de plantío de iglesias, debemos hacerlo en el contexto del discipulado bíblico. Y, en ese sentido, en la presente sección abordaremos el tema desde la perspectiva adventista. Por lo tanto, se intentará responder las siguientes cuestiones: ¿En qué consiste? ¿Por qué es necesario? ¿Y cómo hacerlo?

PLANTACIÓN DE IGLESIAS, ¿QUÉ ES?

Debemos empezar definiendo la palabra iglesia y, aunque parezca muy básica, la correcta comprensión del término será importante para abordar el tema. La palabra iglesia viene del griego ekklesia y, en su sentido original, significa “reunión de personas”, literalmente “llamados afuera”. Entonces, cuando hablamos de iglesias, según el modelo bíblico, no se refería a edificios ni a lugares, sino a personas (Mateo 16:18; 1Corintios 1:1-3; Colosenses 1:18; Efesios 1:22; 5:25 y Hebreos 12:23). De este modo, la frase “plantar iglesias” no debe llevarnos a pensar exclusivamente en “construcción de templos o edificios”, sino que se refiere a uno de los métodos utilizados en el cumplimiento de la gran comisión: de hacer discípulos (Mateo 28:1820).67 Esto es más que notable en la Biblia. El plantío de una iglesia era el objetivo de Pablo en su ministerio, y también debería ser el nuestro.68

Entonces, por definición, es un “esfuerzo para atraer a los hombres y a las mujeres hacia la fe en Cristo e incorporarlos en las comunidades de la fe para que crezcan y se multipliquen”.69 Y Wagner diría: “El inicio de nuevas iglesias es la metodología evangelística más efectiva que se conoce debajo del cielo”.70

PLANTACIÓN DE IGLESIA, ¿POR QUÉ ES NECESARIO?

Podríamos decir, como el título del libro de Ron Gladden: “¡Hay muchas iglesias! ¿Por qué plantar más?”71, y en la respuesta que Emílio Abdalá, nos presenta siete razones72 por las que debemos plantar iglesias:

67 Emílio Abdalá, Guía para plantar iglesias (Buenos Aires: ACES, 2010), 11. 68 Jefrey Mcauliffe y Robert Mcauliffe, O modelo Éfeso. Uma estrutura bíblica de missão urbana (Artur Nogueira, SP: União Central Brasileira da IASD, 2019), 67. 69 Emílio Abdalá, Manual de plantación de iglesias (Buenos Aires: ACES, 2015), 13. 70 C. Peter Wagner, Strategies for Church Growth (Ventura, CA: Regal Books, 1987), p. 168. 71 Ron Gladden, Plantar el futuro. ¡Hay muchas iglesias! ¿Por qué plantar más? (Buenos Aires:

ACES, 2002), 11-90. 72 Emílio Abdalá, Manual de plantación de iglesias, 17-23.

1. En el Nuevo Testamento, la plantación de iglesias está

fuertemente apoyada por la práctica. La plantación de iglesias no es una moda del momento, sino la moda del pasado.

El Nuevo Testamento sugiere que hubo dos grandes abordajes de multiplicación de iglesias en el inicio del cristianismo:

Hubo una plantación espontánea de iglesias (Hechos 3-8), y hubo una plantación estratégica de iglesias, que puede ser observada en el ministerio de Pablo y de sus compañeros.

2. El Espíritu de Profecía destaca, con amplitud, la plantación

de iglesias. El plantar iglesias no es una opción para los adventistas del séptimo día. Una de las declaraciones más vehementes de Elena G. de White fue: “Sobre todos los que creen, Dios ha colocado la responsabilidad de fundar iglesias con el expreso propósito de educar a hombres y mujeres para que utilicen, en beneficio del mundo, las aptitudes que les ha concedido y empleen para su gloria los medios que les ha confiado”.73 Sus escritos son una segura fuente de orientación e inspiración para continuar expandiendo el reino de Dios hasta lo último de la tierra, con el anhelo de que todos los seres humanos tengan la oportunidad de escuchar el mensaje de salvación en Jesucristo.74 La mensajera del Señor dice claramente: “Hay que establecer nuevas iglesias y grupos. Es necesario que haya representantes de la verdad presente en todas las ciudades y hasta en los lugares más remotos del mundo”.75

3. Las iglesias ya establecidas, en general, tienden a estabilizarse cuando alcanzan cerca de diez o veinte

años de edad. Esto sucede porque, conforme van pasando los años, las iglesias se van concentrando en actividades de manutención y pierden el fervor por la evangelización. Y es que la naturaleza nos enseña que es mucho más fácil producir bebés ¡que resucitar a los muertos! Hay una etapa cuando la

73 Elena G. de White, El ministerio médico (Buenos Aires: ACES, 1987), 419. 74 Edward Heindinger Zevallos, El plan “Las seis metas del discipulado”, 76. 75 Elena G. de White, Testimonio para la iglesia, 6:32.

iglesia ya no está pensando en campañas de evangelismo o movilización misionera, sino en comprar alfombras, poner aire acondicionado, un piano de cola, etc. Es por ello que, para que la iglesia no entre en estado de confort, es necesario llevarla a la acción siempre.

4. Es esencial para el crecimiento denominacional. Existe una relación entre el crecimiento del número de miembros y el número de iglesias organizadas. Las iglesias que más crecen son las que enfatizan un plan de plantación de nuevas iglesias.

5. Los miembros de las nuevas iglesias participan más plenamente en las actividades de estas cuando viven cerca.

El discipulado de los miembros resulta afectado por la distancia entre el lugar donde viven y la iglesia a la cual asisten. Si viven más cerca de la iglesia tienden a estar más involucrados en todas las actividades y pasan de ser espectadores (en una iglesia lejana) a protagonistas (en una iglesia cercana). Es por esta razón que resulta imperativo que se planten más y más iglesias.

6. El evangelismo es más direccionado. Los miembros tienen la oportunidad de salir de las cuatro paredes del templo y visitar a sus amigos, vecinos y familiares para compartirles el evangelio que han aprendido en el templo.

7. Las nuevas iglesias ofrecen más oportunidades de liderazgo para la participación y el desarrollo del liderazgo.

En iglesias pequeñas y cercanas no solo puedo participar de las actividades de la iglesia local, sino que puedo liderar.

Tendremos más oportunidades de liderar y ser usados de manera poderosa por Dios. Hay muchos líderes en potencia que pueden sin problemas liderar las iglesias, departamentos y proyectos que, hoy por hoy, no lo hacen por falta de oportunidades.

El mayor misionero de la historia, el apóstol Pablo, tenía una simple estrategia doble. Primero, iba a las ciudades más grandes de la región (Hechos 16:9,12) y, segundo, iniciaba iglesias en cada ciudad (Tito1:5: establecía ancianos en cada ciudad). Una vez que Pablo cumplía con su cometido, entonces podía decir que había llenado todo con el evangelio en una región y que no tenía más campo en esas regiones (Romanos 15:19, 23).76 Es imperativo plantar iglesias intencionalmente.

PLANTACIÓN DE IGLESIA, ¿CÓMO HACERLO?

En la actualidad existen una variedad de modelos que fueron elaborados por experiementados plantadores de iglesias, los cuales se encuentran disponibles en la literatura especializada.77 Sin embargo, siguiendo el modelo bíblico y del Espíritu de Profecía, vamos a usar lo que la Iglesia adventista usó históricamente de manera eficaz para crecer de manera expansiva con efectividad; nos referimos a las Filiales de Escuela Sabática:

Filiales de Escuela Sabática: Una futura iglesia

Las Filiales de Escuela Sabática son las Unidades de Acción de Escuela Sabática que pertenecen, obviamente, al departameto de Escuela Sabática de una iglesia o grupo organizado.78 Las Escuelas Sabáticas Filiales o Filiales de Escuela Sabática funcionan fuera del templo los días sábados y cualquier día de la semana. Es un programa evangelístico que contribuye al cumplimiento de la misión de la Escuela Sabática.79

Las Filiales de Escuela Sabática son parte importante del crecimiento de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. La gran mayoría de las iglesias que hoy son grandes y fuertes, así como las congregaciones que están avanzando, tuvieron sus inicios sencillos en un pequeño grupo de hermanos que dejaron la comodidad del templo grande o madre para

76 Timothy J. Keller y J. Allen Thompson, Manual para plantadores de iglesias (Broadway, NY:

Redeemer Church Planning Center, 2002), 29. 77 Emílio Abdalá, Manual de plantación de iglesias, 11. 78 Asociación General de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, Manual de iglesia (Buenos

Aires: ACES, 2015), 94. 79 Departamento de Ministerio Personal y Escuela Sabática de la Asociación General, Manual de escuela sabática. Pautas para la directiva de escuela sabática, 86. En línea: https:// www.sabbathschoolpersonalministries.org/manual-de-la-escuela-sabática.pdf (consultado: 24 de julio, 2019).

iniciar una nueva iglesia. Estoy pensando, por ejemplo, en la iglesia Parra de Arequipa, Raimondi de Pucallpa, Miller de Tacna, Miraflores y España de Lima, solo por mencionar algunas. Todas esas iglesias tienen un común denominador: Empezaron como una Filial de Escuela Sabática, crecieron, fueron iglesias y, de ahí, salieron muchas iglesias más y, de esas iglesias hijas, resultaron iglesias nietas y bisnietas.

Son pocas las iglesias que fueron parte de un proyecto organizado y planificado con estudios técnicos, inversión de grandes cantidades de dinero, intervención de instructores bíblicos, pastores y evangelistas de renombre. No; la mayoría de iglesias, por no decir casi todas, tuvieron un inicio sencillo y fueron el resultado de la pasión por el cumplimiento de la misión. Hombres y mujeres que, en muchos casos, animaban al pastor para que planten una nueva iglesia en tal o cual lugar porque no había presencia adventista. Esas iglesias que empezaron en la sala de una casa, en una cochera y hasta en patios o terrazas, son ahora grandes iglesias madres de otras iglesias hijas. Esto puede parecer increíble para los que conocieron el adventismo en un templo grande. Sin embargo, muchos conocimos la fe en templos sencillos o casas. Russell Burrill dice que:

“La Gran Comisión es la creación de una iglesia ‘distribuida’ como forma dominante, y no el presente estado, en que la iglesia ‘reunida’ es dominante. Necesitamos de ella, pero esa no debe ser la forma principal de la iglesia. La verdadera iglesia de la Gran Comisión actúa como la sal, infiltrándose en la comunidad, para hacer discípulos”.80

Así como el fruto definitivo de un manzano no es una manzana, sino otro manzano; el fruto definitivo de una familia no es un hijo, sino otra familia; el fruto definitivo de una iglesia no es un converso, sino una serie de conversos que se agrupan dando a luz una nueva iglesia.81

¿Cómo plantar iglesias a través de Filiales de Escuela Sabática?

1. La Escuela Sabática tiene que ser misionera.- Todos concordamos que la Escuela Sabática es misionera. Entonces, para que

80 Russell Burrill, Discípulos modernos para revolucionar iglesias (Buenos Aires: ACES, 2008), 16, 17. 81 Isabel y Daniel Rode, Crecimiento. Claves para revolucionar su iglesia, 142.

la plantación de iglesias en el siglo XXI sea efectiva, los plantadores de iglesias tienen que obedecer el mandato de Jesús en el siglo primero: “Id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado” (Mateo 28:19-20).82 Si la iglesia no es misionera, si no tiene pasión por expandir el reino de Cristo, entonces no harán el mínimo esfuerzo para crecer ni multiplicarse.

2. Los maestros/líderes de la Escuela Sabática deben tener visión de multiplicación.- Todo depente del líder. Los líderes influyen de manera impresionante. Es de suma importancia que el maestro/líder sepa que, al asumir el liderazgo del

Grupo Pequeño o Unidad de Acción, es sinónimo de asumir el liderazgo de una nueva iglesia. Cuando el anfitrión de Grupo

Pequeño acepta que este funcione en su hogar, él debe tener en su mente que en un futuro ahí se establecerá una nueva iglesia, y si no es en su hogar, será en un lugar cercano a su casa.

3. La Escuela Sabática debe estar organizada geográficamente.-

Por eso es de vital importancia que las clases o Unidades de Acción de Escuela Sabática estén organizadas de manera geográfica, tal como lo vimos cuando tratamos el tema de los

Grupos Pequeños. Joel Comiskey, destaca que:

“Las células constituyen la estrategia frontal para ganar a la gente para Jesucristo. Como otras iglesias celulares alrededor del mundo, Elim define una célula como un grupo de 4 a 15 personas que se reúnen semanalmente fuera del edificio de la iglesia con el propósito de evangelizar y discipular, y con la meta de multiplicarse. Los grupos celulares evangelizan a través de la amistad”.83

82 David Miller y Ron Anderson, “5 verdades actuales para la plantación de iglesias. Cómo hacer discipulado efectivo en el siglo XXI”, bajo “Plantío de iglesias”, https://www.lausanne.org/es/ contenido/aml/2017-11-es/5-verdades-para-la-plantacion-de-iglesias-actual (consultado: 22 de julio, 2019). 83 Joel Comiskey, La apasionante historia de una iglesia transformando una ciudad para

La primera iglesia de gentiles, que llegaron a ser cristianos, nació en una reunión pequeña en la casa de Cornelio, según lo narra Hechos 10. Pablo alquiló una casa y enseñó el evangelio durante dos años a todos los que se acercaban allí (Hechos 28:30, 31). La Biblia dice que la casa de Lidia, según Hechos 16:40, se convirtió en un lugar de encuentro para los cristianos. Ese Grupo Pequeño creció hasta convertirse en la iglesia de Filipenses, una de las iglesias que se hizo cargo del cuidado integral del apóstol Pablo.84

Podemos concluir que plantar nuevas iglesias debe ser un imperativo en el quehacer de la iglesia. Y el mejor método es hacerlo a través de un Grupo Pequeño o unidad de Escuela Sabática que sea desafiada a ser una Filial de Escuela Sabática.

¡Vamos juntos y conecta2!

Jesús. Elim (Terrassa, Barcelona: Editorial CLIE, 2004), 80, 81. 84 Alfredo Vallellanes, Grupos pequeños saludables, 62.

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MISIÓN, MÁS BAUTISMOS

“Los redimidos encontrarán y reconocerán a aquellos cuya atención dirigieron al ensalzado Salvador. ¡Qué bendita conversación tendrán con estas almas!”. (Elena G. de White) El mandato de Cristo es claro: “Hagan discípulos”. Y esta tarea implica el bautismo: “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén”. (Mateo 28:18-20) Todos los verbos, que indican los medios para lograr este fin: HACER DISCÍPULOS, están en gerundio presente del griego, y debieran traducirse como yendo, bautizando, enseñando. Estos son medios para lograr el gran objetivo que está indicado en el único imperativo de la comisión: mathetéuo (¡Hacer discípulos!).85 Entonces, el bautismo es parte del discipulado. No se puede hablar de hacer discípulos omitiendo el bautismo. Por lo tanto, el bautismo de un creyente es el resultado de un trabajo en conjunto de la iglesia, pues es uno de los ritos más importantes y frecuentes en la iglesia. Elena G. de White refiere que “todo lo relacionado con este santo rito debe revelar una preparación tan perfecta como pueda”.86

El plan de Dios para evangelizar al mundo87 La Escritura nos dice lo que sucedió en la tierra en esos días anteriores

85 Isabel y Daniel Rode, Crecimiento, 130. 86 Elena G. de White, El evangelismo, 231. 87 Mark A. Finley, Reavivamiento para la misión (Buenos Aires: ACES, 2013), 35.

a la ascención de Jesús. Considera cómo habrá sido la escena cuando Jesús llegó al cielo. Diez mil veces diez mil ángeles le dieron la bienvenida. En mi imaginación, veo al poderoso ángel Gabriel que se acerca a Jesús. - Señor – le dice-, tú sufriste mucho, muriendo por los pecados de la humanidad. Tu muerte proporcionó vida eterna a todos los que la acepten. ¿Saben esto todos los que están en la tierra? ¿Han escuchado todos de tu sacrificio? - No Gabriel, no todos lo han oído – replica el Salvador –; solo un puñado de personas en Jerusalén y Galilea saben esto. - Bueno, Maestro – sigue Gabriel –, ¿cuál es tu plan para informar a todos de tu gran amor? - He comisionado a mis seguidores – responde el Maestro – para que lleven el mensaje de salvación a todo el mundo. Les dije que lo cuenten a otros quienes, a su vez, se lo contarán a otros, hasta que la última persona, en el rincón más alejado, haya oído la historia.

El rostro de Gabriel se entristece. Ve lo que podría ser una falla en el plan del Maestro, de modo que pregunta: - ¿Qué pasaría si Pedro se cansa de contar a otros la historia de la cruz, y se vuelve a pescar? ¿Qué pasaría si Santiago, Juan y

Andrés se unen con él, y Mateo regresa a su puesto de recolector de impuestos en Capernaum, y todos los demás pierden el celo y dejan de hablar de tu sacrificio?, o ¿qué pasaría si estos discípulos mueren antes que la tarea se complete, y tu iglesia se vuelva grande y cómoda, y los corazones de tu pueblo ya no ardan para contar la icreíble historia de tu amor? ¿Cuál es tu plan de emergencia?

Hay una larga pausa, y luego se oye la voz del Señor Jesús: - Gabriel, no tengo otro plan.

Por supuesto, esta escena es imaginaria, pero la lección que enseña es verdadera para cada generación. Cristo nos ha dado la tarea, el privilegio de comunicar el evangelio a la gente de este mundo. No tiene otro plan.

Si se tratara de buscar el método más fácil y rápido de evangelizar al mundo, Dios llamaría a los ángeles.88 La sierva de Dios declara: “Dios podría haber proclamado su verdad mediante ángeles inmaculados, pero tal no es su plan”.89 En ese sentido, nosotros somos colaboradores de Dios en esta bendita causa de salvar a las personas y llevarlas al bautismo.90 Y es que “la más alta de todas las ciencias es la de salvar almas”.91 Definitivamente, Dios nos llama a todos para cumplir la misión de predicar el evangelio, porque esta es la comida de Jesús, (Juan 4:34).

Entonces, todo creyente, todo miembro de la iglesia y discípulo de Cristo es llamado a cumplir la misión de predicar el evangelio.92

PESCADORES DE HOMBRES

Philip G. Samaan93 registra en su libro, El método de Cristo, una parábola ilustrativa de John Drescher sobre “un grupo que se denominaban Los Pescadores”. Cuenta, la ilustrativa parábola, que los pobladores de esa región gozaban de hermosos ríos y lagos llenos de peces.

“Todos “los pescadores” amaban su vocación. Semana tras semana se reunían para discutir sobre la abundancia de los peces y sobre los mejores métodos para pescar.

“Periódicamente definían con cuidado qué significaba pescar, defendían la pesca como una profesión y declaraban que pescar era, es y sería siempre la primera tarea de los pescadores. Continuamente buscaban nuevas y mejores técnicas para lograr renovadas definiciones de pesca. Decían convencidos: “La industria pesquera existe gracias a los pescadores, como el fuego viene a la

88 Alejandro Bullón, Todo miembro involucrado. Un llamado a servir (Buenos Aires: ACES, 2017), 5. 89 Elena G. de White, Hechos de los apóstoles, 266. 90 Amilton Costa Cunha, Conectados con el discipulado. 40 días con orientaciones prácticas para el evangelismo personal (Ñaña, Lima: Centro de Aplicación Unión, 2019), 92. 91 Elena G. de White, El ministerio de curación, 310. 92 Carlos Martín, La ciencia de ganar almas (Buenos Aires: ACES, 2012), 19. 93 Philip G. Samaan, El método de Cristo para testificar. El delicado arte de relacionarse con la gente y llegar a ella mediante el testimonio personal (Buenos Aires: ACES, 1995), 114 – 17.

existencia al producirse la combustión”. Les gustaban frases como: “pescar es la tarea de cada pescador”, “Todo pescador es un recolector de peces” y “un puesto de cada pesca por cada club de pescadores”.

“Patrocinaban reuniones especiales que llamaban “campañas de pescadores” y “El mes de la Pesca Abundante”. También patrocinaban congresos nacionales e internacionales para discutir acerca de pesca y de cómo promoverla. Oían disertaciones acerca de los nuevos equipos, sonidos especiales y cualquier nueva carnada que fuese descubierta. Estos pescadores construyeron grandes y hermosos edificios llamados “Sedes de Pescadores”. La consigna era que cada uno debía ser un pescador modelo, y cada pescador debía obtener una buena pesca. Sin embargo, había una actividad que ellos no hacían: PESCAR.

“Además de reunirse regularmente, organizaron un consejo para enviar pescadores a otros lugares donde había muchos peces. Parecía que todos los pescadores concordaban en que era necesaria una junta administrativa que pudiese desafiar a los pescadores para que confiasen en la pesca.

“Esta junta contrató personal, nombró comisiones y organizó muchas reuniones, asambleas y seminarios para consolidar la pesca y decidir qué nuevas corrientes se deberían considerar. Pero el personal y los miembros de las comisiones NO PESCABAN.

“Se edificaron grandes, elaborados y caros centros de entrenamiento, donde el principal propósito era enseñar a los pescadores cómo pescar con eficacia. A lo largo de los años se dictaron muchos cursos acerca de la necesidad de pescar, la naturaleza de los peces, dónde encontrarlos, sus reacciones psicológicas y cómo aproximarse a estos para alimentarlos.

“Quienes enseñaban eran doctores en “pescalogía”. Estos profesores enseñaban muy bien a pescar… pero no pescaban. Luego de tantos años de entrenamiento se graduaban como licenciados en pesca… pero nadie pescaba.

“Algunos salían de su región para viajar a otros países y estudiar en prestigiosas universidades, pero después de todos sus doctorados y maestrías… seguían sin pescar.

“Construyeron una imprenta y publicaban manuales y libros especializados sobre la pesca y sus formas. Técnicas y más técnicas… pero nadie pescaba.

Te imaginas ese pueblo de pescadores que no pescaban. ¿Se puede considerar pescador a una persona quien, en el transcurso de varios años, no captura un solo pez? ¿Es pescador de hombres el que no está pescando? No, no lo es.

No puede haber pescador sin pesca, ni pesca sin pescador. Seguir a Jesús y pescar con él son dos acciones ligadas por los mismos intereses. Ambas están tan entrelazadas que no pueden existir separadamente.94

Sin embargo, algunos podrían pensar, erróneamente, que el bautismo es el fin supremo del evangelismo. Esto no es así. El fin supremos del evangelismo es HACER DISCÍPULOS para llevarlos a vivir con Cristo por la eternidad. No podemos bautizar por bautizar. Para que el bautismo se dé de manera completa, debemos considerar el ciclo del evangelismo:

EL CICLO DEL EVANGELISMO

El evangelismo tiene un proceso que consta de cinco fases: 95

Preparación – Organización

Esta es la etapa de la planificación. Tenemos que planificar a través de la Escuela Sabática, pues es la estructura del discipulado y base de la movilización misionera, por ello debemos organizarnos o

94 Philip G. Samaan, El método de Cristo para testificar, 17. 95 Ministerio Personal de la Unión Peruana del Sur, “El ciclo del evangelismo” en Guía para la clase de maestros de Escuela Sabática CONECTADOS ed. Heyssen J. Cordero Maraví (Ñaña, Lima: Centro de Aplicación Editorial Unión), 178-183.

reorganizarnos debidamente: 1. Las Unidades de Acción de la Escuela Sabática (UA) llevándolos a reunirse también en casas, como un Grupo Pequeño (GP), a favor de la comunidad. 2. Las Parejas Discipuladoras (PD), dentro de la Unidad de Acción de la Escuela Sabática, capacitándolos para ser amigos de oración, amigos del Grupo Pequeño y amigos en misión. 3. Las clases bíblicas (CB) en cada iglesia y grupo organizado en la Escuela Sabática, Clubes de Conquistadores y Aventureros, así como también en los jóvenes.

Elena G. de White dice:

“La obra de ganar almas exige cuidadosa preparación. No se puede entrar en el servicio del Señor sin la preparación necesaria, y esperar obtener el mayor éxito... El arquitecto os dirá cuánto tiempo necesitó para saber proyectar un edificio cómodo y agradable. Y así sucede también con todas las vocaciones que siguen los hombres. ¿Y habrían de manifestar menos diligencia los siervos de Cristo al prepararse para una obra infinitamente más importante? ¿Habrían de ignorar los medios y recursos que se han de emplear para ganar almas? El saber interesar a hombres y mujeres acerca de los grandes temas que conciernen a su bienestar eterno, requiere conocimiento de la naturaleza humana, estudio detenido, meditación cuidadosa y oración ferviente”.96

Siembra

Este es el evento más sencillo del proceso. Consiste en sembrar la semilla del evangelio en los corazones de nuestros amigos, vecinos y familiares. Esto puede ser de manera efectiva a través de un curso bíblico. Y es que no podemos cosechar si no hemos sembrado. Pablo diría: “Pero esto digo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que siembra generosamente, generosamente también segará” (2 Corintios 9:6).

96 Elena G. de White, Obreros evangélicos, 96, 97.

Ningún campesino siembra las semillas y se aleja olvidándose del campo, él lo cuida para que produzca una buena cosecha. El campesino sabe que, al sembrar la semilla, tiene que arrancar la maleza, despedregar el campo, regar la semilla, y cuidar de ella hasta el momento de la cosecha. Si tú deseas una buena cosecha en tu vida, al sembrar la Palabra, cuídala y riégala. Siembra amor, cuidándolo y regándolo, restaura tus relaciones con las personas y cambia tus actitudes egoístas.

Llegará el momento cuando verás un cambio de actitud por parte de la gente hacia tu persona, te estimarán y amarán más, no porque seas muy bueno, sino por lo que sembraste en en las personas. No desmayes que, a su tiempo, cosecharás lo que siembres.

¡No hay cosecha sin siembra!

Cultivo

Esta es la parte más delicada del proceso. Tiene que ver con perseverar durante días, meses y años. La clave, en este punto, es la oración intercesora. Pero no podemos orar y orar sin actuar. Es necesario orar y actuar. Elena G. de White dice:

“Se siembra simiente preciosa. Pero si no se hace un esfuerzo personal para cultivar el terreno, la semilla no se arraiga”.97

Si el cultivo es atender a los interesados, ¿cómo atenderlos adecuadamente?

- Tener un programa de oración intercesora: Orar por los nombres. - Hacer de la iglesia un lugar receptivo: Enseñe a los hermanos cómo hacer una invitación efectiva, disponga de biblias e himnarios, preocúpese de los niños, etc. - Vincular a los estudiantes con la iglesia: Invítelos a formar parte de un Grupo Pequeño, a programas especiales de la iglesia, reflejando sinceridad y fortalezca a través de su vida de estudio. - Cultivar la amistad que gana confianza: Las personas lo seguían no solo por las evidencias que presentaba, sino por lo que el hombre era; ganaba los corazones por medio de la amistad tanto

97 Elena G. de White, El evangelismo, 315.

como por la verdad y se identificaba con las personas. - Atender a los estudiantes: De forma individual o grupal; ser responsable. - En la visitación y los estudios bíblicos, mantener un registro, etc.

Cosecha

Es la parte más especial del proceso de evangelismo. Cosecharemos en abundancia si hemos sembrado y cultivado eficazmente. Sin embargo, debemos preparar COSECHADORES – EVANGELISTAS en una escuela de predicadores para ese evento.

Elena G. de White dice: “Dios obra de acuerdo con grandes principios que ha dado a la humanidad, y nuestra parte consiste en trazar planes sabios y en poner en acción los medios por los cuales Dios producirá ciertos resultados”.98 “El arar superficialmente conduce a una cosecha limitada y dispersa. Sostened y aumentad el interés ya despertado, hasta que la nube avance, y entonces seguidla”.99

Discipulado

Preparar discípulos maduros es el ideal de Dios para todos los que forman parte de su pueblo. Al fin y al cabo, él no desea recibir solamente miembros bautizados o registrados en una iglesia, sino discípulos que desarrollen una vida plena y productiva en la tierra y se transformen en ciudadanos del reino de los cielos. Esa visión de discipulado es confirmada en las más de 250 veces que la palabra “discípulo” es mencionada dentro del Nuevo Testamento, siempre refiriéndose al compromiso de ser como el Maestro (Mateo10:25; Lucas 6:40).

EL “ANDUDE” DEL BAUTISMO

El problema no es bautizar, ya que el bautismo es un milagro de Dios. El problema es cómo lo bautizamos. Es el antes, durante y después. A esto le llamo ANDUDE:

98 Elena G. de White, El evangelismo, 473. 99 Ibíd, 63.

ANDUDE

Acción

ANTES

DURANTE DESPUÉS

ESTUDIOS BÍBLICOS BAUTISMO DISCIPULADO

Responsable MiPES

Material Fe de Jesús Evangelismo Mayordomía

Sermones LESAdv

Nuestra misión no es llenar las bancas de los templos con miembros, sino los cielos de discípulos que caminaron con Cristo acá en la tierra.

¡Vamos juntos y conecta2!

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MISIÓN, MÁS DONANTES FIELES

“La mayordomía también llega a ser la raíz de la misión, la base del compartir el evangelio al mundo”. (Charles E. Bradford)

El discipulado no es un evento sino un proceso. Y es que “cada verdadero discípulo nace en el reino de Dios como misionero”.100No puede haber un discípulo de Cristo que no sea un misionero apasionado por el cumplimiento de la misión descriro en Mateo 28:19, 20:

“Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén”.

Claramente esta misión no tiene un origen en el hombre sino en Dios. No es invención de los líderes de la iglesia, de la Asociación General, de la División, de la Unión, ni siquiera del evangelista o del pastor. La misión es un mandato divino que debe ser cumplido por todos y para todos. En ese sentido, podríamos decir que:

1. La misión debe ser hecha por TODOS. En tiempos donde todo puede ser hecho, desde la comodidad del smartphone, debemos recordar que la misión implica IR, SALIR, ENVIAR. Y este cometido es para TODOS. Como ya vimos, en capítulos anteriores, este llamado no es solo para los pastores o líderes, sino para todos los que nos decimos ser discípulos de Cristo.

2. La misión debe se hecha para TODOS. La misión es para ir a todos

100 Elena G. de White, El Deseado de todas las gentes, 162.

[a todo el mundo]. El texto dice: “A todas las naciones”, “a todo el mundo”, “a toda nación, tribu y lengua” y a “toda criatura”. Por lo tanto, cuando recibimos la misión, debemos pensar en el mundo y no solo en donde vivimos. Así, es imperativo que, como iglesia, dejemos la comodidad de las bancas de la iglesia y del calor del templo, y salgamos a buscar a nuestros vecinos, amigos y familiares para llevarlos a Cristo, pero no solo a ellos, sino a “todo el mundo”.

¡Un momento!

Algunos pueden decir: “Heyssen, entiendo que la misión es que todos los creyentes hagan discípulos, pero, ¿a todo el mundo? ¿o sea que la misión de todos los creyentes es ir a todo el mundo?”.

Y finalizan diciendo, casi siempre: “¡Esto es imposible! ¿cómo podríamos ir a TODO EL MUNDO? Tendríamos que ir a más de 200 países para predicar y algunos no han salido ni siquiera de su país de origen”. Pues sí, la misión es llevar el mensaje de salvación a todo el mundo.

MISIONERO A TODAS LAS NACIONES

El cumplimiento de la misión personal a todo el mundo puede resultar una utopía, pero no lo es. El cumplimiento de la misión, al mundo de manera personal, es posible por medio del Espíritu Santo. Sin la intervención del Espíritu Santo, en nuestras vidas, no será posible. Lucas dice: “pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra” (Hechos 1:8). Todo aquel que ha recibido el poder del Espíritu Santo podrá vivir la promesa y ser testigo en Jerusalén, toda Judea, Samaria y hasta lo último de la tierra.

¿Cómo ser testigo hasta lo último de la tierra?

Cuando leí Hechos 1:8, y lo medité en mis primeros años de adventista, entendí que solo sería testigo fuera de mi amada Pucallpa, en el Perú, lugar donde conocí el evangelio, cuando recibiría al Espíritu Santo. Entonces, cada día pedía la unción del Espíritu Santo y no se me

presentaba la oportunidad de predicar fuera de mi ciudad, y mucho menos de mi país. Me parecía imposible. No obstante, en el fondo de mi corazón, sentía que había algo que no estaba entendiendo. Hasta que un día, en mi pequeña iglesia de la Misión de Pucallpa E, mientras entregábamos los diezmos y ofrendas un amigo, quien visitaba la iglesia esporádicamente, me preguntó: “Heyssen, ¿para qué se dan los diezmos y ofrendas?”. Sin pensarlo mucho, le respondí como siempre me respondieron a mí: “para la predicación del evangelio”.

En ese momento sentí, en mi corazón, la respuesta de Dios a mis tantos días de oración y pedido para ser misionero en todo el mundo: SERÉ

TESTIGO EN TODO EL MUNDO a través de mis diezmos y ofrendas.

Solo cuando yo sea un FIEL DONANTE, podré ser un misionero para toda nación, tribu y lengua.

¿Y qué tiene que ver el PODER DEL ESPÍRITU SANTO?

El discípulo que no vive cada día en la presencia de Dios, y que no es bautizado diariamente por el Espíritu Santo, no tendrá amor por las personas y, por lo tanto, no solo no predicará el evangelio donde esté, sino que tampoco será un donante fiel para la causa del evangelio, a través de sus diezmos y ofrendas. En una ocasión, un líder me invitó a predicar a su iglesia. Cuando le pregunté sobre qué le gustaría que hable, él me dijo: “Pastor, predique sobre evangelismo, y de cómo podamos ser evangelistas con poder”. Entonces, yo prediqué de la importancia de ser bautizados diariamente para poder ser donantes fieles a favor de la causa de Dios. Al finalizar el mensaje, él se me acercó y me dijo: “Pastor, gracias por el mensaje, pero yo pensé que usted era el evangelista de la asociación, no el mayordomo”. Él continuó diciendo: “no imaginé que un evangelista hable de diezmos y ofrendas para cumplir la misión”.

Si se trata de evangelismo puro, debemos hablar del impacto del Espíritu Santo en la vida del creyente. Cuando el Espíritu Santo nos dirige, lo mínimo que haremos será apresurar la venida de Cristo predicando el evangelio. No hay comunión real que no nos lleve al cumplimiento de la misión en todo sentido, a través de todos los

medios y formas posibles. Yo seré un fiel donante fiel en la medida que el Espíritu Santo me guíe y me lleve a amar a las personas que aún no conocen el evangelio.

LA MISIÓN SE CUMPLE CUANDO SOY UN DONANTE FIEL

Cada vez que diezmes y ofrendes, ten presente que ese dinero contribuirá a la predicación del evangelio en tu ciudad, en tu país, en tu continente y hasta lo último de la tierra. Este año estamos leyendo un devocional misionero para la recepción del sábado titulado: Puesta del sol en la ventana 10/40. 101 Es emocionante leer las historias que se cuentan y testimonios preciosos. Dios sigue haciendo milagros en otros países, en lugares donde no es fácil evangelizar, lugares donde está prohibido ser cristiano bajo penas muy crueles, hasta la muerte. Cada testimono termina diciendo: “Tu fidelidad y tus oraciones nos mantienen allá”. ¡Qué bendición! Quizás nunca vaya allá, pero sé que, a través de mis diezmos y ofrendas, yo también estoy predicando en otros países. Eso es lo que más me emociona al llevar mis diezmos y ofrendas al alfolí.

Un donante fiel también cumple la misión acá

Puede que alguno esté pensando y diciendo: “Está bien Heyssen, entendido. Cumplo la misión cuando soy un donante fiel. Si hago eso, ya no necesito cumplir la misión acá, es decir, en mi barrio, mi colegio, mi trabajo entre mis amigos, vecinos y familiares”. ¡No! Recuerda que el texto dice: en Jerusalén, Judea, Samaria… lo que significa que nuestro llamado es para ser misioneros acá (en tu barrio, distrito y ciudad) y allá (país, continente y hasta lo último de la tierra). En nuestro terreno misionero y en los lugares a donde solo pueda llegar a través de mis diezmos y ofrendas.

¡Vamos juntos y conecta2!

101 Diogo Cavalcanti, Puesta del sol en la ventana 10/40. Tu fidelidad y tus oraciones los mantienen allá (Buenos Aires: ACES, 2018).

PARTE IV

DISCIPULADO PRÁCTICO

1. Proyecto CONECTADOS 2. El corazón de la Iglesia 3. La clase de MAESTROS 4. El pastor como MAESTRO

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