HIARES
Historia universal del arte y la cultura Ernesto Ballesteros Arranz
18
La arquitectura romรกnica
Historia universal del arte y la cultura eBooks Libros Audiolibros
www.hiares.com EBOOK INTERACTIVO Link con imágenes a patalla completa (El link se realiza desde las imágenes en miniatura)
Galería fotográfica para proyectar o ver en pizarra digital
HIARES 4ª Edición ISBN: 978-84-16015-01-6 Paseo de Guadalajara, 74 28700 San Sebastián de los Reyes (Madrid)
La arquitectura románica
E
ste tema se encuentra íntimamente relacionado con el anterior. El arte románico es la manifestación plástica del feudalismo europeo. La cultura es un conjunto de órganos y funciones que se unen sustantivamente para formar un todo unitario. Ningún aspecto cultural puede estudiarse por separado de la época que lo ha producido.
INTRODUCCIÓN Si presentamos en temas diferentes el feudalismo, la vida monástica y las artes románicas, es por razones metodológicas no esenciales. El feudalismo es el tipo de vida, la organización política, social y económica de Europa Occidental durante los siglos IX a XI. Pues bien, en esta época aparece un arte plástico característico: el románico. La gran cantidad y variedad de monumentos que nos ha dejado
este estilo aconseja dedicar al estudio de la arquitectura, su más gloriosa y ejemplar manifestación, un tema completo. A la escultura y a la pintura, que, a pesar de ser en general artes subsidiarias de la arquitectura, descubren ante nuestros ojos los aspectos más enigmáticos y cautivadores de la Alta Edad Media, dedicaremos el tema siguiente. Es innegable la gran sugestión que el arte románico ha
La arquitectura románica
3
1. Planta y alzado de un templo románico.
ejercido sobre los hombres del siglo XX. El arte románico es el arte de una época que no se preocupa por la razón, que está obsesionada por los problemas de ultratumba. A partir del siglo XII, y hasta fines del XIX, el europeo se alejó cada vez más del románico y emprendió una dirección humanística que culmina en la filosofía alemana, la democracia y el arte impresionista. El protagonista de este gran espacio de tiempo es, indudablemente, la razón humana. Pero en el siglo XX se ha experimentado un nuevo cambio de valores y perspec-
4
Historiauniversal delarteylacultura
tivas. El hombre ha dejado de interesarse por lo racional para descubrir nuevos horizontes al quehacer humano. Ha surgido así un arte «deshumanizado», en frase de Ortega y Gasset; comienza una «nueva Edad Media», según afirma Nicolás Berdiaeff. El arte moderno tiene muchas de las características del románico: abstracción, expresionismo, despreocupación por la imitación de la realidad, etc... Por ello, el románico resulta muy atractivo para la sensibilidad del siglo XX. Las imágenes románicas han sido evocadas continuamente por los decoradores modernos hasta
provocar su «re-fabricación» en serie. Existe hoy día una fiebre por lo medieval. La gente, incluso el público más profano, se complace admirando las primitivas tallas románicas, claras, simples, expresivas, rotundas. Todos los gobiernos europeos han dedicado grandes presupuestos a restaurar monasterios y recomponer obras románicas. La pintura románica ha saltado a la arena de la popularidad y se ha «puesto de moda» como estilo decorativo y culto, evocador de secretas vanidades. Los libros de arte románico se suceden y multiplican en un alarde editorial
2. Le Puy de Dome. Claustro de la c atedral.
nunca conocido, y amenazan saturar los escaparates de las librerías. No se trata sólo de libros especializados o eruditos, sino de obras de divulgación que ponen el arte románico al alcance de una gran cantidad de lectores de preparación media. No hace falta estudiar bachillerato para conocer el arte románico. Creemos que sólo existe un periodo histórico que ha sufrido similar auge; la arqueología de Oriente Medio. También en este campo se han multiplicado las ediciones populares de divulgación. ¿Qué quiere decir todo esto? Que son temas actuales, ni más ni menos. Parece un poco raro afirmar que el románico es un tema actual, pero lo es, en tanto interesa a los hombres de nuestra época. Es un hecho muy significativo sobre todo
si tenemos en cuenta que el arte románico fue olvidado y frecuentemente despreciado a partir del Renacimiento. El Romanticismo empezó a reivindicar el arte medieval, pero fijó preferentemente su atención en el gótico. Fue necesario esperar a los últimos años del XIX y principios del XX para ver el estilo románico colocado en los altares del fervor europeo.
3. Interior de un templo románico.
GENERALIDADES SOBRE EL ARTE ROMÁNICO Era preciso referirse al feudalismo antes de entrar en este tema. Y también a la vida monástica, porque el arte románico es la producción plástica de la aristocracia feudal y de los monjes altomedievales. Es un arte
monástico y feudal. Ya hemos visto en el tema anterior que había una especie de alianza entre el clero y la nobleza. Formaban una sociedad, tenían intereses comunes en muchos aspectos. Los principales magistrados de
la Iglesia (obispos y abades) eran nobles y tenían castillos y vastas posesiones, siervos y huestes feudales. Los obispos cuidaban sus feudos como lo hacía el conde o el barón, con idénticos medios. El alto clero se sentía solidario
La arquitectura románica
5
de la nobleza feudal. La reforma cisterciense es el primer movimiento de corte democrático, el primer impulso de la Iglesia para acercarse a las formas de vida serviles y plebeyas. Los monasterios y algunas catedrales eran frecuentemente poderosas construcciones, similares a castillos, y tenían una función defensiva como aquéllos. El arte románico se origina en estos monasterios de la Alta Edad Media y tiene características feudales. Ya hemos dicho que la sociedad feudal es una sociedad aristocrática y cerrada, basada en una «economía natural sin mercados». Es decir que la inmovilidad de las clases sociales viene determinada por la falta de comercio y dinero. El único bien rentable es la tierra, poseída siempre por
las mismas manos. Por eso, mejor que hablar de clases se habla de «estamentos» o grupos sociales cerrados y jerarquizados. La falta de competencia comercial, material, impidió la competencia intelectual. Sólo en los monasterios se respira cierto ambiente científico. El público está completamente alejado de todo problema teórico. Es una época «irracionalista». Aquí encontramos un parecido con el siglo XX, que también quiere ser «irracionalista», como reacción al XIX excesivamente racionalista. Es, pues, una época conservadora, inmóvil, que produce un arte tranquilo, de escasas variaciones. La Alta Edad Media no es progresista, porque el progreso es un síntoma de la racionalización. Está completamente segura de las verdades eternas
4. La columna románica.
6
Historiauniversal delarteylacultura
y no siente necesidad de replanteárselas. A este respecto, dice Arnold Hauser: «Es una época tranquila, segura de sí misma, robusta en su fe, que no duda de la validez de su concepción de la verdad ni de sus leyes morales, que no conoce ningún conflicto del espíritu ni ningún problema de conciencia, que no siente deseos de novedad ni se cansa de lo viejo». No estamos totalmente de acuerdo con esta fórmula, porque nos parece demasiado extremista -sin duda, los románicos tendrían algún problema y de hecho se conocen varios conflictos espirituales de su época-, pero en conjunto refleja muy bien el sentido ideal del período. Esta cultura, tan conservadora y tranquila, está íntimamente relacionada con la fe. Es una cultura teológica. La Iglesia intentó el predominio espiritual absoluto sobre la conciencia europea. Todas las cosas de este mundo estaban mutiladas, faltas de sentido por sí mismas. El sentido de este mundo y de todos sus seres se encontraba en la religión. La Teología era a la vez Física, Astronomía, Filosofía, etc...
5. Capiteles románicos.
hijos que entraba en religión. En Alemania y en Inglaterra surgen las primeras catedrales, porque en esta zona los obispos alcanzan mayor poder que las ordenes monásticas. Los edificios románicos son fuertes y poderosos, como los castillos medievales. Por ello se les llama «fortalezas de Dios».
«Todo lo humano estaba referido a lo divino. La Iglesia desarrollaba incluso un poder de coacción contra toda manifestación del pensamiento libre. Recordemos que las contiendas contra Roscelino y Abelardo se encrespan, no tanto contra sus doctrinas -totalmente ortodoxas-, sino contra sus métodos claramente racionalistas-. La Iglesia desconfía de los individuos que se ponen a pensar por sí mismos y tratan de ver las cosas con la «luz de la razón». Una luz más poderosa, la de la fe, lo iluminaba todo con suficiente claridad. De este modo, en la Alta Edad Media domina una concepción del mundo autoritaria e inmutable, dogmática. A finales del siglo X esta concepción del mundo se impone
claramente a las demás. Es la época en que se construyen las grandes iglesias románicas. La arquitectura románica encuentra su plenitud en el XI. Estas construcciones requerían cuantiosos gastos y sólo fueron posibles con la reforma cluniacense, que multiplicó las donaciones en favor de la Iglesia. Era muy frecuente en esta época que los grandes nobles dejaran parte de su fortuna a una orden religiosa o que levantaran iglesias o monasterios como dote para alguno de sus
Son, muchas veces, de proporciones exageradas, mas grandes de lo necesario, dado el reducido número de fieles. Pero hay que tener en cuenta que no se hacían para los fieles, sino para glorificar a Dios y publicar su inmenso poder. Para ello, toda grandeza era poca. Son también un símbolo del supremo prestigio de esta sociedad estamental y autoritaria. Otra característica de la arquitectura románica es su claro
6. Exterior de un templo románico.
La arquitectura románica
7
geometrismo. Emplea formas simples, geométricas, rotundas, que indican una vuelta a la sensibilidad primitiva y rural. El arte románico es un arte rural. Los monasterios y abadías románicas se encuentran sobre todo en el campo, lejos de los refinamientos cortesanos y la sensibilidad urbana. Es una arquitectura sencilla, poco variada, que da mucha más importancia a los volúmenes que a la decoración. El hombre medieval tiene un concepto de la obra de arte que dista mucho del nuestro. No se realizaba por placer estético, sino por motivos de exaltación religiosa. Una iglesia no era una bella composición espacial, sino una ofrenda a Dios. En este sentido se reduce el arte a un ejercicio religioso y se olvida prácticamente el arte autónomo, que es un placer
7. Pórtico románico.
en sí mismo. El arte es, en la Alta Edad Media, uno de los medios de dar gracias a Dios. Encontramos mucha similitud con el criterio de los antiguos egipcios, cuyos monumentos tienen las características de descomunal pesadez y afán de culto que encontramos en los románicos. Además, este arte no era comprensible para las grandes masas de la población (villanos y siervos) que asistían,
empequeñecidos y anonadados, a las complicadas ceremonias en el interior de los templos. Se trata de un arte clerical, porque sólo los clérigos pueden comprender su sentido grandemente simbólico. Los clérigos son los únicos clientes de obras de arte, pues nadie posee medios para sufragarlas. Los nobles prefieren rodearse de objetos muebles y pocas veces dedican su atención a la arquitectura o la estatuaria.
ARQUITECTURA ROMÁNICA El comienzo de la arquitectura románica está muy relacionado con la reforma de Cluny por las cuantiosas donaciones que reciben los cluniacenses que les permiten acometer obras arquitectónicas de grandes dimensiones y porque incluso
8
Historiauniversal delarteylacultura
desde el punto de vista espiritual el arte románico tiene su origen en Cluny. La abadía de este nombre en Francia es el primer monumento con todas las características fundamentales del estilo. La influencia arquitectónica de
Cluny se transmite a través de las vías de peregrinación y sus portadores son los propios monjes cluniacenses, que son los arquitectos de la época. Debieron existir pocos arquitectos seglares y los pocos que hubiera tenían