Batalla de Ibarra. 7.- Marchando hacia Ibarra, el Libertador. MARCHANDO HACIA IBARRA EL LIBERTADOR.
El Libertador Simón Bolívar Bolívar sale de Quito el 6 de julio, con el objeto de dirigir personalmente la batalla contra Agualongo, y deja encargado al Coronel Tomás de Heres, Jefe Superior de Quito, para que pueda seguir enviándole pertrechos y subsistencias al Ejército Libertador. El 8 llega a Otavalo donde permanece hasta el 11. El 12 imparte orden al general Salóm de «replegarse hacia Ibarra y de conservar siempre 10 leguas de distancia entre el enemigo y la columna de su mando. Mientras tanto, ya llegan los refuerzos que Bolívar espera. El Libertador se replega a Guayllabamba; el 12 de julio, y allí se le unen las columnas de retaguardia que venían de Guayaquil. A Guayllabamba acude el Comandante Pallares, que estaba con alguna fuerza en Tabacundo.»
Mientras tanto, aquel mismo día 12 de julio, Agualongo ocupaba Ibarra sin resistencia y la retirada de Bolívar le hace creer que lo teme. Organizado el Ejercito en Guayllabamba en tres seccionen, la primera compuesta de los. Guías de la Guardia y del Batallón Yaguachi, confiada al General Salóm; la segunda de
Granaderos a Caballo y de unas compañías del Batallón Vargas, a las órdenes del General Barreto, y la tercera al mando del terrible Coronel Maza, compuesta de la artillería y del Batallón Quito, emprende él Libertador la marcha en busca del enemigo.
Llega el 15 a Tabacundo y luego, pasando por el Abra, el 17 de Julio, hacia las seis de la mañana, se encuentran sus tropas a la vista de Ibarra, en donde el descuidado Agualongo, ocupados sus soldados en saquear y robar la población, no advierte que el poder de Colombia llega a castigar su rebeldía.
A las dos de la tarde de aquella memorable fecha, el Libertador, marchando a la vanguardia del ejército, y acompañado tan solo de sus ayudantes de campo y de ocho Guías avanza sobre la Villa.