Conventos y Monasterios. La Orden Mercedaria en Ibarra. LA ORDEN MERCEDARIA EN IBARRA Y SU ACCIÓN PATRIOTICA Y RELIGIOSA A TRAVES DE LA HISTORIA. La acción de la Orden Mercedaria en la benemérita ciudad de Ibarra, comienza después de tres o cuatro días posteriores al 28 de septiembre de 1606, día en que de acuerdo con una información del capitán Cristóbal de Troya, al fundar esta villa de San Miguel de Ibarra, fundo también cuatro conventos: Santo Domingo, San Agustín, San Francisco y nuestra señora de las Mercedes. El día mismo de la fundación de Ibarra no estuvieron presentes los Mercedarios en el sitio en que se asentaba la nueva ciudad; pues desempeñando funciones misionales o de curas doctrinales en apartadas regiones del norte y del Occidente de las actuales provincias de Imbabura, del Carchi y de Esmeraldas, solo después de pocos días llegaron, en el momento oportuno de firmarse el acta de fundación como lo acredita basándose sin duda en documentos históricos uno de los más significativos cuadros que debidos al pincel magnifico del artista Troya, forma parte de la colección municipal ibarreña. Mas si la acción Mercedaria comienza en Ibarra hacia los primeros días de septiembre de 1606 al alborear el siglo XVIII es lo cierto que esa misma acción en lo que hoy forman las mencionadas provincias de Imbabura, Carchi y Esmeraldas se remonta al primer tercio del siglo XVI como consta en los anuales más indiscutibles de la historia nacional. Fácil seria siguiendo al benemérito historiador Mercedario Fray Joel L. Monroy al ilustre historiador Señor Gonzales Suarez tan adicto a nuestra orden y tan justiciero con ella y a otros competentísimos historiadores como el seños canónigo Juan de Dios Navas, el doctor Julio Tobar Donoso.
SU ACCION EN CUATRO SIGLOS. En más de cuatro siglos 1535 a 1945, la acción y la presencia mercedarias han sido firmes en esta región del País, habiéndose extendido, en su bienhechora y fecunda labor, allende las fronteras nacionales, o sea a buena parte de la porción meridional de Colombia. Si grandes acontecimientos felices le han ocurrido a Ibarra allí los mercedarios, al firmarse el acta de fundación de la ciudad o al realizarse la epopeya asombrosa de la emancipación política de España. Si le han ocurrido grandes acontecimientos desgraciados, allí los Mercedarios, como en los momentos sombríos del terremoto de 1868, en que la tragedia, pensó borrar a Ibarra del haz de la tierra, sin tener presente que Dios, como al ave fénix del mito, le haría renacer de sus propias cenizas.