Edificaciones Antiguas. El Antiguo Teodoro Gómez de la Torre EDIFICIO
Edificio del Colegio Nacional San Alfonso
Amílcar Tapia Tamayo, PUCE-SI. LA HORA, IBARRA, Sábado 11 de marzo de 2006 En tiempos coloniales, la educación era privilegio de las clases pudientes. Sin embargo, para 1687 se abre la primera escuela elemental para hijos de caciques de la Villa de Ibarra. (1), la cual estuvo en manos de los frailes dominicos, quienes al momento de la fundación de la ciudad se hallaron representados por fray Pedro Bedón, al tiempo que fue el primero en instalarse en la zona de Caranqui en 1605. El primer colegio que funcionó en Ibarra fue el colegio San Diego, que fue creado en el año de 1826 gracias a la filantropía de don Martín Sánchez, quien en su testamento señala entre otras cosas:" Declaro, y es nuestra voluntad, hacer y dejar para el bien público así espiritual como temporal de este nuestro lugar, que como madre patria nos ha sostenido, y dado con que vivir, para descargo de nuestra conciencia, en los términos, condiciones y seguridades siguientes: Primeramente disponemos que se establezca en este cantón y en la casa que
ocupamos y queda menciona da, una lugar de estudios, bajo el nombre y patrocinio de San Diego "(2) Este plantel funcionó bajo la conducción de un rector eclesiástico y de profesores que enseñaron por vez primera en Ibarra filosofía, gramática castellana y religión. Este colegio funcionó como tal hasta el año de 1865 en donde se transformó en Seminario Conciliar dedicado a la formación de sacerdotes, requisito indispensable para la erección del obispado de Ibarra, cuyo hecho se produjo el 29 de diciembre de 1862. El terremoto de Ibarra destruyó totalmente el edificio que se hallaba junto al imponente colegio de la Compañía y que en nuestros días ocupa el colegio Diocesano Bilingüe, antiguo colegio San Diego. Un colegio nacional. La fuerza con la que regresaron los ibarreños a su antiguo solar en el año de 1872, permitió que se busque la creación de un colegio nacional. Asoman en la palestra de la historia personajes admirables y casi desconocidos en nuestros días como el canónigo Mariano Acosta, Coronel. Teodoro Gómez de la Torre, José Nicolás Vacas, Luis Felipe Lara, Alejandro Pérez, entre otros, y son ellos los que buscaron con afán la materialización de este singular proyecto. El canónigo Mariano Acosta, en su condición de Representante por Imbabura en el año de 1884, luchó para que la legislatura apruebe la creación del colegio nacional San Alfonso, actualmente Teodoro Gómez de la Torre. El 27 de octubre de 1884 se inauguran las clases. El primer rector designado fue Teodoro Gómez de la Torre, quien se excusó de aceptar debido a su grave estado de salud, así como su avanzada edad. Por ello fue nominado el canónigo Mariano Acosta, quien se posesionó ante el gobernador de la provincia General Vicente Fierro. El coronel Teodoro Gómez de la Torre, hizo constar en el acta de inauguración del colegio que "para favorecer la creación del nuevo establecimiento, tenía a bien donar el sitio,
escombros y edificio que posee en la plaza principal de este lugar y que se extiende por toda la calle del frente de la Antigua Compañía. El Señor Gobernador declaró instalado el Colegio Nacional de San Alfonso de Liguori..."(4). Fiel al cumplimiento de la promesa cívica, el primer rector del colegio canónigo Mariano Acosta dispone que es prioritaria la construcción del propio edificio en el terreno destinado para el efecto. Los planos originales fueron elaborados por don José Domingo Albuja, muy cercano al referido religioso. Sin embargo, en el proceso de construcción sufrieron algunas modificaciones debido a que el Doctor Acosta buscaba que el plantel no tenga limitaciones de espacio, sino que "sea amplio, grande y distinto, por lo que debe ocupar todo el terreno entregado por su benefactor...” (5). Polémica La construcción que da al actual parque "Pedro Moncayo" fue inaugurado en el año de 1913 y para continuar con los trabajos se buscó que los bienes del antiguo colegio San Diego pasen a propiedad del "Teodoro Gómez" suscitándose una polémica entre la Iglesia y las autoridades educacionales de corte liberal. (6) En el año de 1921, el ministerio de Educación entrega la suma de veinte mil sucres como una contribución adicional para la construcción del "edificio lateral y contiguo del colegio nacional de Ibarra que acusa un gran crecimiento de alumnos, razón por la que es obligación del Estado contribuir al incremento de la fama y prestigio de este joven colegio imbabureño..." (7) Lamentablemente el viejo edificio del prestigioso "Teodoro Gómez de la Torre" no ha sido conservado, pues refleja duras huellas de cansancio y deterioro. Ojala las generaciones de profesionales que cursaron sus estudios en esta respetable casona busquen las posibilidades de recuperar su antiguo esplendor y hermosura.
Historia>> ACUERDO DE CREACIÓN El acuerdo de creación, dice: "La Convención Nacional del Ecuador, Considerando: Art. 37 de la Ley de Instrucción Pública que habla de los establecimientos de colegios nacionales en todas las provincias, no ha tenido efecto en Imbabura. Que esta Provincia necesita urgentemente de un establecimiento de esta clase para dictar materias elementales. Art. 2. El colegio contará con cuatro mil pesos anuales del tesoro Público, que se emplearán en la construcción o adquisición del edificio.