Hombres Ilustres. Rafael Sánchez. EL NOTABLE MÚSICO IBARREÑO Tomándolo de "El Ferrocarril del Norte", el diario "La Verdad" reprodujo el 12 de. Octubre da 1.968, el hermoso artículo "La orquesta de músicos de pelo blanco", ibarreños, escrito por el destacado periodista Víctor M. Guzmán. En dicho artículo después de exponer que el arte musical pertenece, al hombre como algo innato, manifestaba el periodista que el arte bello y universal no podía faltar en la ciudad de Ibarra, tanto en su época aborigen como en los tiempos colonial y republicano. Acerca de la época republicana, daba a conocer en forma patética y agradable, como una prueba del arte musical en Ibarra, la tradicional orquesta de los músicos de pelo blanco, orquesta que dirigida magistralmente por don José Dalgo, se conformaba de Alipio García, Rafael Suárez, Antonio Chávez, 'Pancho Largo", Pedro Mena, Rafael Pazmiño, José Nicolalde, Antonio Sánchez y Miguel Sánchez. Afirmaba que todos ellos eran notables en hacer hablar a sus respectivos instrumentos", porque los manejaban con honda sentimentalidad, 'recorriendo la gama de las emociones'. Decía que los Miembros de la Orquesta se caracterizaban por su "blanca cabellera que imponía respeto y simpatía".
Como consta en el párrafo anterior, formaba parte de aquella tradicional Orquesta Don Miguel Sánchez B., muerto hace años, quien contrajo matrimonio con la señora Carmen Pañaherrera Bastidas, alma delicada y gemela; la suya, adicta por naturaleza a las exquisiteces musicales. De este matrimonio, pobre en lo material pero rico en sentimientos tiernos, advino una generación de músicos, los mismos que han encarnado. A esta familia perteneció el inolvidable Rafael Sánchez P.
Queremos hoy recordar con justicia y amor patriótico, ajenos al egoísmo y adictos a la jerarquía de valores prestigiosos, a este maestro cuya memoria hay que refrescarla entine, los artistas verdaderos de Ibarra. El y su hermano Segundo, becados por el Ilustrísimo González Suárez, Obispo de la Diócesis, se dedicaron a la música, bajo la enseñanza del Maestro Manuel Rodríguez; alcanzaron a integrar en la última etapa, la Orquesta de los 'Músicos de Pelo Blanco', quienes augurándole triunfos y renombre, dada su vocación, su adelanto progresivo y su consagración al arte. Rafael se especializó en piano y violín, Segundo en flauta. No fueron pues unos aficionados al oído ni unos músicos carentes de técnica. Muchas personas que viven aún, dan testimonio sobre la indiscutible importancia de Rafael y afirman con tristeza que su ¡muerte temprana causó un enorme vacío que 'hasta la fecha no se lo llena a cabalidad, Rafael dinámico, organizador y director de coros estudiantiles y orquestas; fue profesor con acertada didáctica en la materia, sea en escuelas y colegios, como maestro particular de jóvenes y señoritas de la sociedad; fue artista de fecundas iniciativas en rondas, 'representaciones teatrales, danzas clásicas, etc. Rafael Sánchez, algunas veces sirvió de magistral pianista ad-hoc de compañías dramáticas que en esos tiempos inmemoriales llegaban a Ibarra y actuaban con esplendor. Razón hubo entonces para que su fallecimiento consternara en la ciudad', pase a la modestia que le distinguió. Animado de legítimos afanes y aspiraciones, acudió al Conservatorio Nacional de Quito y allí mereció siempre el cariño y alabanzas justicieras por parte del Dr. Sixto M. Duran, de Juan Pablo Muñoz, de Belisario Peña y de otros prominentes maestros. Allí, en el Conservatorio obtuvo con brillantes la aprobación de 5 cursos en año y medio de estudio asiduo y eficiente, perfeccionándose en piano y armonía. Por expreso pedido u orden más bien del señor Dr. Sixto M. Duran, quiten sufrió antes en grave accidente en los dedos de la mano izquierda, intervino (ejecutando en piano) en la composición del maravilloso Himno 'Patrio del maestro prenombrado. Fue amigo y
compañero de músicas selectos, como José Ignacio Canelos, Cristóbal Ojeda, en Quito. Enrumbó sin egoísmos a algunos jóvenes que después lucieron en él arte. ¿Compuso o creó obras musicales? Sí y muchas, tanto en lo profano como en lo religioso, en lo escolar y en lo patriótico. Por desgracia una fatalidad inesperada. Había sido víctima de una atroz fiebre tifoidea que en esa época era insalvable esta clase de enfermedades. Los profesionales ordenaron que se quemaras las pertenecías en las cuales fueron incineradas centenares de partituras compuestas y arregladas por el artista prenombrado Rafael Sánchez, hecho este que ha impedido no poder recordar su música y su arte. Unos pocos papeles que sobraron, guardan sus familiares, sin que éstas puedan asegurar su autenticidad. Lo que si se ha observado es que su música popular (religiosa o profana) se, halla en el alma ibarreña y quizás hasta creaciones de autores ficticios. La Sra. Esperanza Sánchez de Fuentes, ha tenido la amabilidad de grabar unas dos piezas al piano, que las considera creaciones de su tío Rafael, y ha grabado también el pasillo de Canelos, dedicado al señor Rafael Sánchez, su dilecto amigo, su coterráneo distinguido y músico de verdad, como así lo proclamó en un festival que se realizó hace años en el Salón del Colegio 'Teodoro Gómez de la Torre'. Diario "La Verdad" 24 de septiembre de 1972.