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Fernando Castro Marcelo Danza Daniel Minetti Alfonso Olveira
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CASO DE ESTUDIO
GEN '84
1989 caso de estudio
Concurso de 1989, Generación ‘84 Autor — Fernando Castro, Marcelo Danza, Daniel Minetti, Alfonso Olveira Colaborador — Leandro Silva Delgado Jurado — Gastón Boero, L. Garabelli, Juan Carlos Vanini Asesor — Alejando Baptista Programa — Dos viviendas unifamiliares Localidad — Canelones entrevista
Fernando Castro, Marcelo Danza, Daniel Minetti, Alfonso Olveira
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PLANTA BAJA
FACHADA
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Entrevista
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Fernando Castro Marcelo Danza Daniel Minetti Alfonso Olveira 14 de Diciembre — 20:30hs. Bar Sporting (Pocitos)
¿Recuerdan el costo de obra en comparación con la industria del momento? Marcelo
Daniel era de la generación y también hizo la dirección de obra, por tanto estuvo muy cerca en la parte de la construcción. Daniel
Se propuso, se votó y la generación me apoyó para que yo participara en lo que fue la ejecución de las casa. Marcelo
Estaba bien de precio, unos U$S300 el m2, lo más caro que tenía era el muro doble. Era una época en la que no había mucho dinero en plaza, era todo rascando la lata. La generación que construyó la casa viajó muy pocos meses, comparado con el resto de las generaciones.1 Nunca se puso en tela de juicio la construcción de la casa, y esto es un dato que no es menor. Obviamente que era un viaje mucho más chico que el de ahora, no se daba la vuelta al mundo, no se iba a Japón, pero así y todo se optó por disminuir el viaje y no por poner en consideración la construcción o no de la casa. En un momento se hacía el concurso, se entregaba el primer premio pero después no se construía la casa. ¿Recuerdan qué fue ponderado por el jurado?
dos casas que se sumaran y formaran un solo conjunto. En ese momento era un gran bosque, no había absolutamente nada y de esta manera se podía ganar un poco más de porte. Luego al ver las propuestas, bueno…, les pareció que esta casa estaba muy bien y no respondió a esta condicionante, pero el segundo premio, el tercero y creo que las menciones se unen y forman una sola unidad. Daniel
Incluso, nuestra otra mención estaba toda unida. En la revista Trazo, pueden ver que hay una mención que es nuestra también, nosotros presentamos dos proyectos a este concurso. Esta vez fue la primera vez que nos presentamos juntos, dos proyectos, luego al otro año presentamos tres y sacamos una mención. Al otro año presentamos dos y sacamos un segundo premio y luego a los dos años nos presentamos y sacamos otra mención, Alfonso por separado también sacó otra mención. Hay una cosa que yo me estoy acordando, aunque quizá me esté fallando la memoria, quien más nos dio para adelante con este proyecto de parte del jurado fue Vanini. Insólitamente, en realidad era con el que nosotros teníamos menos afinidad, no afinidad personal ya que Vanini era bárbaro, pero menos afinidad ideológica. Teníamos mucho más afinidad con Gastón Boero con quien incluso yo había sido ayudante, y fue finalmente quien más nos dio para atrás. Gastón había sido a quien nosotros habíamos seleccionado. No había una estrategia de selección oculta, pero si alguien afín.
Marcelo
En su momento nos comentaron que cuando el jurado fue a ver el terreno, habían pensado en
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Retrato hablado
Geometrales originales del concurso
1 En el artículo “Un debate equivocado” en la Revista Trazo 21 de 1989, Marcelo Danza plantea dudas sobre algunos argumentos económicos planteados en un debate abierto covocado por el Taller Latchinian en el salón de Actos: «(…) Hagamos un ejercicio de imaginación y supongamos que el planteo es válido. Razonemos, pues, por el absurdo: “La arquitectura de la posmodernidad es cara”. ¿cara respecto a qué? Nada en sí mismo es caro o barato si no se lo compara con algo, un patrón que permita la valoración. (…) Si defendiéramos la escasez de diseño como sinónimo de economía gobal, por poder asociarse más o menos literalmente con el bajo costo, correríamos el riesgo de, sin quererlo, estar defendiendo los intereses del inversor más que los del usuario. (…) Debo entender entonces que el argumentante prefiere hablar de referentes puros y no sus degradaciones. El tema ahora pasaría por preguntarse si, por ejemplo, el chalet de Stabio de Mario Botta es mas caro que la villa Stein en Garches de Le Corbusier o la Villa Tugendhat de Mies Van Der Rohe (…) Las respuestas parecen claras, la hipótesis parece invalidada por el absurdo, sin embargo, el tema sigue siendo deformado, y en esa deformación quienes perdemos somos los estudiantes, ya que con este tipo de argumentos se nos pretende cerrar un camino posible.”
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Fallo del jurado de la vivienda premiada del equipo (Primer premio). Revista Trazo 22, 1990
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Fallo del jurado de la segunda vivienda presentada por el equipo en el concurso (Menciรณn). Revista Trazo 22, 1990
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Entrevista
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Alfonso
Yo creo que el proyecto si bien tiene un lenguaje que puede gustar o no, también tiene una simplicidad y una resolución con mucho oficio que cierra por varios lados. Marcelo
Recuerdo que cuando hubo que equiparlas, no había manera. El argumento del proyecto era la “Sala Patio” que tomaba el tema de la gran sala, la sala de vida y luego un módulo con el dormitorio y otro con la cocina. Para que la cocina quedara con el rigor geométrico que buscábamos era muy chica, entonces sugirieron luego unos cambios. Cuando fuimos a equiparla, nos parecía que una se equipaba fácilmente, pero la de la esquina era muy difícil por la circulación en diagonal. Por eso en la entrega equipamos la de la esquina, para que vean que se puede. Después el jurado nos comentó “equiparon solo esa porque era más fácil, ¿pero como haces para equipar esta otra?”. Siempre la película que te imaginas antes es exactamente lo opuesto a lo que finalmente piensa el jurado. Daniel
Estas casas, imagino que también lograron conquistar a Vanini porque la “Sala Patio” estaba retomando el viejo patio de la casa estándar montevideana, de alguna manera lo estaba insinuando y esto era una idea muy atractiva. Resolvía la esquina, en esa época estaba todo el tema del Urbanismo Urbano, había que lograr una tipología que fuera diferente a mitad de cuadra que en la esquina, que se adaptara en la esquina. El antecedente que había de esquina, era una casa de Antonio Gervaz (1982) y la de ellos era una diagonal muy bien resuelta, pero era un único elemento, no lograba articular la vuelta como esta si lo articulaba. Recuerdo que todo el tema de la IBA y el Urbanismo Urbano, eran edificios resolviendo situaciones urbanas, en esa época tenía que resolver las situaciones urbanas. Recuerdo el de Alvaro Siza, que resolvía la esquina girando toda la fachada para atar una calle con la otra. 2 En esa época la IBA tenía mucho peso, era muy interesante. Siempre a uno le parece que la época de uno tiene otro valor, pero haber estudiado la IBA, haber proyectado estas cosas, y al año siguiente haber ido a Berlín a ver todo eso que habías visto en las revistas era algo muy fuerte. ¿Qué edad tenían y en qué año de la carrera se encontraban? Fernando
23, 24 años. Estábamos en Ante 4.
¿Tenían actividad docente en la Facultad? Marcelo
Sí, todos. En ese momento, en el ‘89, Alfonso era ayudante en Taller Vanini y Daniel era grado 1 en taller Sommer. Yo entré al otro año, en ese momento éramos estudiantes de Thomas (Sprechmann) en ante 4. Estábamos en la revista Trazo también. Alfonso, Fernando y yo habíamos llegado de Chile, por un viaje que hicimos para Trazo por un Encuentro de Arquitectura Latinoamericana. Daniel no había podido ir por trabajo. Fueron 20 días, Pluna nos dio los pasajes a cambio de publicidad en la revista, y el colegio de Arquitectos de Chile nos dio el hotel. Este viaje luego dio lugar al Encontrazo. 3 Fernando
Yo estaba de ayudante en introductorio. Alfonso
Yo como era ayudante en Vanini y no podía cursar en el mismo taller que daba clase, me fui a Sprechmann a hacer anteproyecto 4. Marcelo
Yo también estaba en el Instituto de Historia de la facultad. ¿Trabajaban por fuera del ámbito de Facultad? Daniel
Si, teníamos trabajos particulares como una casa para un doctor en Lagomar y algunos otros proyectos. Marcelo
Alfonso, Daniel y yo fuimos compañeros de anteproyecto IV en Sprechmann, en ese momento le encargan a Alfonso hacer una obra para un doctor y nos invitó a nosotros para hacer la obra juntos. En ese momento también surgió la idea de hacer juntos el concurso de vivienda, hicimos un equipo y nos presentamos los cuatro mientras se construía esa casa. Ambas casas se construyeron en paralelo, y al ambas encontrarse hacia el este, pasábamos por las dos obras de camino. (haciendo referencia a un croquis) Tienen muchas cosas en común. La casa del doctor también tiene un basamento de ladrillo, un techo como una torreta que en ese caso es de ladrillo y en este de chapa. También tiene un ornamento similar en los balcones. Los conceptos eran similares, un juego en planta de figuras cuadradas. Hay una figura cuadrada más grande que era el living y tres cuadrados más chicos que eran los dormitorios. Al subir hacia planta alta se liberaba la planta y se formaba una doble altura, como en la biblioteca de Stirling.
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Retrato hablado
Bonjour Tristesse, IBA, Berlín, 1984. Álvaro Siza. Antes y después de la construcción llenando el vacío urbano y completando la esquina.
2 En el artículo “El concurso de Viviendas y sus arrabales” de António Gerváz y Gastón Boero resumen algunas búsquedas de este período: «(…) En otras palabras si las claves para entender los proyectos en la década del 60-70 provienen basicamente de las ideas del Team X en términos de identidad, flexibilidad, crecimiento, etc.; en la década 70-80 se transita por la producción de significados y son entonces las dimensiones sintáctico-semánticas los ejes de interpretación; actualmente los años de fines del 80 parecen haber desplazado sus preocupaciones hacia la construcción de la ciudad siendo entonces la tipología, la morfología, los tejidos, etc., los nuevos ejes interpretativos.» Trazo 20, 1988 3 Luego del período de intervención, la actividad estudiantil de la facultad se vuelve muy activa cultural y académicamente, publicando la Revista Trazo periódicamente, generando instancias de debate, seminarios, congresos, etc. Es un momento en el cual se produce cierta renovación natural del cuerpo docente de la facultad y muchos jovenes comienzan su carrera docente. En la entrevista al equipo del concurso de 1983 se puede ver como esto ya se comenzaba a gestar.
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FotografĂa actual de la vivienda del concurso de 1989
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Retrato hablado
Marcelo «Alfonso, Daniel y yo fuimos compañeros de anteproyecto IV en Sprechmann, en ese momento le encargan a Alfonso hacer una obra para un doctor y nos invitó a nosotros para hacer la obra juntos. En ese momento también surgió la idea de hacer juntos el concurso de vivienda, hicimos un equipo y nos presentamos los cuatro mientras se construía esa casa. Ambas casas se construyeron en paralelo, y al ambas encontrarse hacia el este, pasábamos por las dos obras de camino»
Fotografía actual de la vivienda del Dr. gonzález Moreno en Lagomar, construída en paralelo a la vivienda del concurso.
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Entrevista
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¿Era obligatorio presentarse al concurso? Fernando
No era obligatorio pero todo el mundo se presentaba, más de 100, como ahora. 4 Daniel
Antes de la generación ‘84, las generaciones eran más chicas porque había examen de ingreso, estudiabas todo el verano para dar el examen. ¿Cuál consideran como su taller de afinidad? Alfonso
Para mi Vanini, que luego se convirtió en Pintos. Era una facultad muy polarizada, había diferentes visiones y opiniones sobre la arquitectura. Daniel
Hoy día creo que es algo más homogénea, pero en ese momento nos rasgábamos las vestiduras, las discusiones eran fuertes. Nosotros (con Fernando) hicimos en Sommer que luego lo continuó Thomas Sprechmann. Mas adelante, en determinado momento se dividió nuevamente el taller, por un lado Rúben Otero y por otro Thomas.
Estos talleres que retomaron acusaban esta arquitectura de posmoderna, como algo traído de Europa y alejado de los intereses populares, se decía también que era más cara. Por otra parte ellos promovían una arquitectura que consideraban más comprometida, etc. 6
Marcelo
Fernando
Sommer sin duda, Daniel incluso era grado 1. Yo había cursado antes en Serralta. En ese momento era un grupo muy diverso, veníamos de varios lados, quizá por esto presentábamos varios proyectos. ¿Podría desarrollar brevemente el momento cultural en el que se encontraba la facultad? Marcelo
En este momento, cuando terminó la dictadura, la facultad optó por traer a todos los directores de taller que estaban antes y recomponer la situación previa a la dictadura. Hubo dos o tres talleres que pudieron evitar esto, uno de ellos fue Vanini, que fue un taller formado en torno al Cooperativismo 5, y el otro fue el Taller Sommer que tenía un plantel muy joven con Otero, Bastarrica, Gervaz y otros. Luego también estaba Molas que siguió un año más pero cerró. Los talleres que volvieron tenían una línea moderna pero muy asociado al tema sociológico, un modernismo con compromiso político. Yo hice Serralta por ejemplo, y creía a muerte toda esa línea, cuando me cambié al taller Sommer para mí fue un momento de quiebre, en ese momento los conocí a ellos.
Las casas que hacen Barreto y sus compañeros luego de esta son bastante más posmodernas y son algo menos ideológicas... mucho menos ideológicas. Marcelo
Una enseñanza de lo que estaba pasando en este momento, a mí lo que me aportó fue: hasta qué punto la arquitectura es una construcción cultural: nosotros creíamos esto a muerte, sin embargo veo la casa hoy y te puedo decir con seguridad que esto marca una época, y a su vez, los profesores que nos enseñaban esto, poco tiempo después estaban haciendo otra cosa. Es una construcción cultural y no hay claramente una línea de lo que está bien o mal, mis referentes eran los profesores y mis compañeros de los cuales aprendía. Esta época fue de mucha pasión y también de entender la responsabilidad de la docencia. Nosotros aprendíamos esto como: “esto es la arquitectura”, “los modernos destrozaron la ciudad”, “la arquitectura se produce en el tiempo”, “la historia son capas que van generando la ciudad”, era un discurso impecablemente desarrollado con talleres perfectamente armados bajo estos discursos. Cuando era estudiante del taller Serralta, y vivía con bastante angustia la contradicción de que (Conrado) Petit claramente te decía en el taller de no mirar revistas, que había que ser independiente culturalmente, hablaba sobre la responsabilidad social del arquitecto y toda una serie de cosas al respecto y luego veías en la calle los carteles de Feder Svirsky Petit. Un mismo profesor que con pasión te decía una cosa, por otro lado hacía sus edificios de promoción inmobiliaria. En lo personal siento que fue un momento de mucha pasión, mucho amor y mucho desencanto también.
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Retrato hablado
Marcelo «Una enseñanza de lo que estaba pasando en este momento, a mí lo que me aportó fue: hasta qué punto la arquitectura es una construcción cultural: nosotros creíamos esto a muerte, sin embargo veo la casa hoy y te puedo decir con seguridad que esto marca una época, y a su vez, los profesores que nos enseñaban esto, poco tiempo después estaban haciendo otra cosa»
Fernando «Las casas que hacen Barreto y sus compañeros luego de esta son bastante más posmodernas y son algo menos ideológicas... mucho menos ideológicas»
Maqueta original de la vivienda de 1990, Barreto, Caram, Facio
4 En la Revista Trazo 25, p93. se menciona que es a partir de 1990 que el concurso deja de ser obligatorio para los integrantes de la generación auspiciante. 5 Durante las entrevistas de los casos de estudio de 1975 y 1977, Carlos Cohe y Jack Couriel, ambos vinculados en su momento al movimiento cooperativo, mencionan que luego fueron docentes del taller Vanini, desde 1985 a 1998 y 1985 a 1997 respectivamente. 6 Ver nota 1 sobre el artículo “Un debate equivocado” de Marcelo Danza, Revista Trazo, 21 de 1989.
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¿Considera a ese período como un momento de ruptura o punto de inflexión en la disciplina? Daniel
En ese momento se empezaron a abrir un montón de opciones de cambio. A los dos años estabas hablando de algo totalmente distinto. Como ya no estoy en facultad hace más de 6 años, puedo decir con distancia, con extranjería, luego de ir el otro día (En los festejos del centenario de FARQ) y recorrer los talleres, que me pareció que me había ido el día anterior. No se ven ahora grandes cambios como se veían en esa época, en ese momento se abrían muchos caminos, Peter Wilson hacía una cosa, Zaha Hadid hacía otra que no tenía nada que ver, ahí ya tenías dos caminos muy distintos. Fue una época de quiebre, de muchos cambios, hoy día creo que ya no hay tantos cambios.
Alfonso
En Vanini había una formación diferente, otro enfoque más del oficio, como la formación que tuvo Sergio Barreto y Sebastián Caram. Los docentes eran Iván Arcos, Isidoro Singer, Loro Pintos, profesores con mucha práctica profesional, es una tradición que quizá se continúe en el taller hoy día. ¿Estudiaron proyectos anteriores del concurso? Fernando
Muchísimo, se desarrollaba toda una estrategia. Recuerdo las entregas de Apolo, con excelentes perspectivas.
Fernando
Alfonso
Marcelo
Daniel
Nosotros estábamos convencidos que estábamos siendo punta de lanza, pero el mismo año que se hizo este concurso se hizo el concurso del Panteón Bancario, de Franco Comerci , Gustavo Scheps y Martha Barreira.7 Franco venía de Barcelona y traía mucho de lo que pasaba allá, Piñón y Viaplana, una línea muy poética que la traía muy a flor de piel y en realidad si miras ese proyecto y la propuesta de la casa se puede ver un desfasaje.
Marcelo
Había una serie de talleres que pensaban en la arquitectura y en lo que estaba pasando en la disciplina en ese momento a nivel internacional y había otros talleres que no. Algunos talleres intentaban participar de una discusión contemporánea y traer temas a discutir y otros talleres estaban en una discusión más sociológica. Este fue el año donde cayó el muro. Te digo más, creo que en el 89 fue cuando Tabaré Vázquez ganó la intendencia de Montevideo. Pasaban muchas cosas, también ganaba un blanco la presidencia.
La entrega era muy importante. Había no solo que hacer un buen proyecto sino también saber venderlo. Era una época donde se dibujaba todo a mano y había muy buenos dibujantes, Apolo, Christoff. Nosotros no éramos perspectiveros y por suerte no nos cruzamos con ellos, eran un poco mayores. Te ponías el casco e ibas a la guerra. Recuerdo que una vez eché a alguien, para que no viera lo que estábamos haciendo, era algo serio, hoy en día te causa gracia, pero en el momento lo sentías, analizabas todo. Competidores nuestros eran Vegh, Moreira y Rodriguez, que eran de nuestra generación, eran amigos, también eran de Trazo, ya habían ganado unos años anteriores estando en primer o segundo año.
¿Considera algún docente en particular que haya sido influente en ese momento?
Recuerdo que para este concurso cuando terminamos antes de que estuvieran los fallos, nos juntamos todos en el estudio de Canale a mostrarnos los proyectos, y entre los que nos juntamos estaba el primer premio, tres menciones, y tercer premio. 8 Nos vimos, nos hicimos críticas, éramos un grupo que estábamos todos en Trazo.
Marcelo
Daniel
Ahí vamos a tener diferentes referencias entre nosotros. En este momento, nosotros (con Fernando y Daniel) éramos alumnos de Thomas Sprechmann, Ángela Perdomo, Jorge Tuset y Diego Capandeguy. También estaban como referentes Luis Zino, Gastón Boero, Rúben Otero, Juan Bastarrica, Antonio Gervaz, Nino Pesce, y algún otro. ¿En Vanini cuáles eran los referentes? (le pregunta a Alfonso)
No había celular, entonces llegamos en la tarde del día de los fallos y salía de la facultad por la escalinata Miguel Canale con una botella de Champán en la mano para felicitarnos que habíamos ganado el Concurso de Vivienda. Miguel había llegado antes, se había enterado y nos estaba esperando. No sé de dónde sacó la botella, ahora me pongo a pensar, estaría seguro que alguno del grupo iba a ganar. Marcelo
Se demoraron mucho en dar los fallos, terminó el año y pusieron carteles que el 23 de Diciembre se daban los fallos.
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Estacion de bomberos de Vitra, Saha Hadid, 1989 Biblioteca de Münster, Concurso de 1985, Bolles+Wilson
Daniel «No se ven ahora grandes cambios como se veían en esa época, en ese momento se abrían muchos caminos, Peter Wilson hacía una cosa, Zaha Hadid hacía otra que no tenía nada que ver, ahí ya tenías dos caminos muy distintos»
7 En 1989 Francesco Comerci, Gustavo Scheps y Martha Barreira ganan el concurso para el Panteón Bancario en el Cementerio del Norte. 8 En este concurso el segundo premio fue de Fernández, Meronio, Urtazú. El 3er Premio fue para Rodríguez-Vegh, y las menciónes: Rubio-Gelpi-Saavedra, Ramos-Caimi-Fernández, Bato-De LeónToledo, Espinosa-Canale, Fernández-Meronio-Rivero-Urtazú y otra para Minetti-Danza-Castro-Olveira.
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Alfonso «La entrega era muy importante. Había no solo que hacer un buen proyecto sino también saber venderlo. Era una época donde se dibujaba todo a mano y había muy buenos dibujantes, Apolo, Christoff. Nosotros no éramos perspectiveros y por suerte no nos cruzamos con ellos, eran un poco mayores»
(arriba) 2o Premio 1987, Apolo, Boga, Cayón. (abajo) Primer Premio 1987, Brena, Brandon, Campón, Christoff
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Panteรณn Bancario, Barreira, Comerci, Scheps, concurso 1989.
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¿Leían o tenían suscripción a alguna revista o libro? Daniel
Mirábamos revistas todo lo que podiamos. Era una etapa dónde no había tantas, después vino una etapa de muchas más revistas. Consumíamos mucho a León Krier, Aldo Rossi, Michael Graves y a Tony Diaz, alguien poco nombrado hoy día. Krier era el que más elementos formales trabajaba en ese momento. Rossi te dejaba muy poco espacio, Krier sin embargo manejaba más elementos, después también tenías a Richard Meier que era terrible. Fue la época cuando empezó a salir la revista Croquis, que fue una revista muy importante. La revista te iba marcando, cuando salió la Croquis de Peter Wilson, nosotros presentamos una casa con una clara referencia a él, sacamos un segundo premio, cuando ganó Canale y equipo. Marcelo
El debate que planteamos que se daba aquí, era reflejo de lo que pasaba internacionalmente. En ese momento había muy poca bibliografía, por lo cual los profesores tenían mucha incidencia sobre la formación. Se supone que ellos recibían antes la bibliografía, la estudiaban y luego la transmitían, tenían ese poder. Ahora es absolutamente horizontal, los estudiantes de repente se enteran antes que vos lo que está pasando. 10 En ese momento el Taller Sommer, tenía mucho de esta ideología y Boero estaba dentro del jurado del concurso. Nos pasábamos mirando hacia afuera, íbamos directo a las fuentes. Cuando mirábamos las referencias nacionales, también estábamos mirando para afuera, por ejemplo las Menonitas de Juan y de Ruben, o el Hogar atardecer. Fernando
Estaba El Croquis, A&V, Arquitectura Viva, las comprábamos en facultad, íbamos corriendo cuando llegaban. Era el momento de la IBA de Berlín y había muchos libros sobre esto. Había un monográfico y una publicación de tapa negra. Recuerdo que cuando Daniel viajó fue a ver las obras de la IBA.
¿Dónde se juntaban a proyectar? Fernando
Nos juntábamos todas las tardes en lo de Marcelo a charlar, trabajar, concursar. Marcelo
Mis padres justo en ese momento se habían separado y había un espacio libre en su estudio, era dónde solíamos juntarnos todas las tardes. Fueron momentos muy productivos, hicimos algunos artículos para Trazo, un anteproyecto de una casa para la marina de Santa Lucía, la casa del doctor, etc. Daniel
El estudio se llamaba “Impar”, porque éramos cuatro, creo que aún conservo una tarjeta, era terrible, parecía una tarjeta de fiesta de 15 años, la hizo un tío que trabajaba en una imprenta. ¿Cuánto tiempo invirtieron en el concurso? Fernando
Un mes aproximadamente, incluso todas las noches, la mayor tecnología era el paralelógrafo. Le dedicábamos mucho al proyecto, era una angustia plasmar lo que habíamos pensado, la entrega la hacíamos rápido, luego sacabas copia, la pegabas en un Duraboard y entregabas. En este momento no se pedía maqueta. Marcelo
Este concurso particularmente lo hicimos en el garaje de la casa de los abuelos de Fernando. Llevamos las mesas de dibujo y trabajábamos con la puerta abierta sobre la vereda. Entregábamos varias propuestas. Suele suceder que discutís propuestas distintas, en determinado momento las dos te parecen buenas, no querés abandonar ninguna y se entregan ambas. Luego de ganar esta vivienda, empezamos a tener mucha gente que nos ayudaba, ahí hacíamos varios proyectos ya en la casa de mis padres. Eran de generaciones más chicas, con mucha energía y ganas de colaborar, Javier Umpiérrez, Daniel Gallo, Guillermo Rodriguez, etc. A su vez nosotros los ayudábamos a ellos con historia, taller, y otras materias, era un grupo de intercambio.
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Daniel « Fue la época cuando empezó a salir la revista Croquis, que fue una revista muy importante. La revista te iba marcando, cuando salió la Croquis de Peter Wilson, nosotros presentamos una casa con una clara referencia a él, sacamos un segundo premio, cuando ganó Canale y equipo.»
Arriba: Segundo premio del equipo 1991 / Izquierda: Revista Croquis N°47 / Drecha: New City Library, Munich, Bolles+Wilson,1993.
10 En ese momento había muy poca bibliografía, por lo cual los profesores tenían mucha incidencia sobre la formación. En el caso de estudio de 1983, Rafael Calvette comenta: “En el taller a veces confiscábamos libros de biblioteca. Los primeros libros de Aldo Rossi los teníamos nosotros. También teníamos confiscado un libro que se llamaba “Forma y deformación de los objetos arquitectónicos y urbanos” que estaba en francés. Estaba en la biblioteca y los docentes del taller se lo habían apropiado, en algún momento logré que me dieran una fotocopia.”
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Daniel «Mirábamos revistas todo lo que podiamos. Era una etapa dónde no había tantas, después vino una etapa de muchas más revistas. Consumíamos mucho a León Krier, Aldo Rossi, Michael Graves y a Tony Diaz, alguien poco nombrado hoy día. Krier era el que más elementos formales trabajaba en ese momento. Rossi te dejaba muy poco espacio, Krier sin embargo manejaba más elementos, después también tenías a Richard Meier que era terrible.»
Village Hall, Windsor, Florida, Léon Krier 1997
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Interior caso 1989.
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Marcelo «Nos pasábamos mirando hacia afuera, íbamos directo a las fuentes. Cuando mirábamos las referencias nacionales, también estábamos mirando para afuera, por ejemplo las Menonitas de Juan y de Rúben, o el Hogar Atardecer.»
Centro 3 de Febrero, Iglesia Evangélica Menonita, Bastarrica, Otero, Montevideo, 1984. Revista Arquitectura, SAU N° 259, año 1989
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“Seguramente sería excesivo atribuir una paternidad rossiana a todas las obras presentadas en este número, inevitablemente surgen otros nombres(el más obvio, el de Robert Venturi) que alimentan el universo formal contemporáneo: Stirling, Krier, Botta ... Sin embargo, observamos la iglesia de los Menonitas o el colegio San José: las fotografías hablan por sí solas. Lamedianera de las casa se Scheps, el forntón de la casa en la calle Sepé, el aire abuhardillado de las lucarnas del hogar “ El Atardecer” y sus pórticos, así como los de las casas de la “La blanqueada” (...)” Articulo “Imagen y realidad”, Jorge Nudelman, Revista Arquitectura, SAU N° 259, año 1989.
Hogar de ancianos “El Atardecer”, Benech, Sprechmann, Villaamil, Montevideo,1986. Revista Arquitectura, SAU N° 259, año 1989
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¿Podrían describir puntos fuertes y puntos débiles del proyecto? Fernando
La idea más fuerte es la “Sala patio” y como se adapta esto a las dos situaciones de esquina y entre medianeras. Daniel
Es tan fuerte el espacio que la formalización sale sola, es muy lineal, muy didáctico. Marcelo
Había muchísimas cosas de percibir en la obra, por ejemplo el hecho de que el techo inclinado muriera vertical en un canalón y que no se viera, como en el Teatro del Mundo. Un canalón perimetral y un techo que se apoyaba, no sé si llega a ver en las piezas que tenemos, pero esos detalles eran muy importantes. Es chapa galvanizada con un mordiente y un color cobre oxidado pintado por encima. La casa de Lagomar por otra parte volaba y era de teja. (Hacen un croquis del detalle). La chapa plana se mandó plegar especialmente, era todo muy artesanal. Con la proporción de la chapa plana respecto a la pestaña, como en la Facultad de Medicina, lo veíamos en todas las revistas, pero no existía el sistema industrial para construir eso. Ahí la fue peleando Daniel en la dirección de obra, para generar una pieza en el medio donde se juntan las chapas, recuerden que en esta época no había engrafado, era todo hecho artesanalmente, pero así lo querías. Los contrapesos para poder hacer estas ventanas en guillotina como son en las casas en Nueva York, fue todo trabajo, acá en Uruguay no había nada ni parecido, hubo que copiarlo, inventarlo, resolverlo, todo de manera artesanal. Ahora hay más tecnología disponible, pero en aquel momento era el carpintero, el herrero y listo. Otro punto fuerte es que la circulación es muy poca, el resto es todo área de uso. Y como otro punto fuerte, destaco mucho la tipología. Daniel
Las áreas son muy miserables, pero eso fue por razones de las bases, eran muy restrictivas. Hay una anécdota bien interesante, que volviendo nosotros del viaje, nos llaman de la casa, ya que había humedades. Fuimos a ver la casa y efectivamente había hongos, los techos estaban absolutamente negros, negros como nunca más volví a ver en otra obra por suerte, pero no en el baño, ¡en toda la casa!. No se entendía porque no se llovía, pero cuando subimos a la azotea estaba la losa y punto. (risas)
Estaban los 10 cm de losa y la empresa nunca había hecho la azotea. Había un puente térmico total, pero igual no entraba ni una gota de agua. La de la esquina que no estaba habitada, pero también tenía la azotea sin hacer estaba impecable por dentro. ¡El problema era la gente!, subía la temperatura y condensaba. Le preguntamos al escribano de la generación si había algo de dinero, y los de finanzas nos autorizaron para hacer la impermeabilización y la aislación térmica a los techos planos. Es una casa muy económica, 300 dólares por metro cuadrado. Es todo con muro de 20cm, muro simple de ladrillo aplacado, era lo mínimo que aceptaba el Banco Hipotecario en aquella época. Marcelo
Las casas tenían pocas concesiones, eran muy ortodoxas. La estufa que estaba hacia afuera, el caño iba por afuera porque tenia formalmente referencias a Michael Graves, pero desde el punto de vista racional y el consumo energético era terrible. Con la estufa resolvías la esquina al girar, el rigor geométrico realmente era importante. El norte no importaba tanto. Daniel
El proyecto de las cucarachas, que hicimos unos años mas adelante, era muy provocativo, no sé si era para ganar. Me acuerdo de Yaco Couriel que se paró frente al cartón y dijo “no entiendo más nada, me voy de esta facultad” y no se si no se fue efectivamente de la facultad. (risas) Cuando vio las cucarachas estaba furioso. Podías llegar a ofender a alguien con la propuesta que entregabas, eso era muy bueno, la gente discutía y peleaba por la arquitectura. ¿Le parece que el proyecto entregado respondía a la imagen arquetípica de “Casa”? Daniel
Supuestamente si, en ese momento creo que te hubiera peleado por lo que estás preguntando. Era una casa. Marcelo
Tenía basamento de ladrillo, cornisa, ventana de madera, porch, alero, galería y todo lo que se requiere. Esta podría ser una casa perfectamente alternativa a las cooperativas, una casa adaptable. 11 Alfonso
Para los núcleos evolutivos, hubo propuestas como la de Canale por ejemplo, que tomaba este proyecto como referencia. Hay proyectos de núcleos evolutivos que se hacen a partir de una “sala patio”, con otras proporciones.
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Retrato hablado
Marcelo « Había muchísimas cosas de percibir en la obra, por ejemplo el hecho de que el techo inclinado muriera vertical en un canalón y que no se viera, como en el Teatro del Mundo. Un canalón perimetral y un techo que se apoyaba, no sé si llega a ver en las piezas que tenemos, pero esos detalles eran muy importantes. Es chapa galvanizada con un mordiente y un color cobre oxidado pintado por encima. La casa de Lagomar por otra parte volaba y era de teja.»
Derecha: Village Hall, Florida, Léon Krier 1997 / Arriba: Environmental Education Center, Michael Graves,1982 / Abajo: Foto caso 1989.
11 En el caso de estudio de 1977, en la entrevista a Jack Couriel, fuertemente vinculado al movimiento cooperativista, también enumera los componentes de la casa: “Estamos cumpliendo con La Sistemática, con la doble orientación en el estar-comedor, cocina comedor al fondo, espacios de transición techados.”
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Entrevista
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¿Volvieron a presentarse luego de obtener el premio? Daniel
Un montón de veces, y en cada uno varios proyectos, fueron 4 o 5 concursos con varios proyectos. En total deben ser como 10. 12 Marcelo
‘89, ‘90, ‘91, ‘93 y Daniel se había presentado antes en el ‘88. ¿Fue su primer obra? Daniel
Más o menos, alguna cosa había hecho antes, pero como algo entero sí. Fue un poco en paralelo a cuando estábamos haciendo la casa del doctor González Moreno en Lagomar. Marcelo
Poco tiempo después hicimos la carpeta juntos, que la hicimos dentro de un convenio con la Junta de San Carlos, y también la construimos.
¿Ven ustedes al concurso de vivienda como una legitimación académica desde la Facultad? Alfonso
El haber ganado y haber podido construir las casas tiene un plus muy grande. Haber hecho algo siendo estudiante, eso es algo que pesa mucho. Fernando
El concurso de vivienda es como una IBA a lo largo del tiempo. 14 Daniel
El objetivo que tenías en la vida era ganar el Concurso de Vivienda, era lo máximo a lo que podías aspirar. ¿Vivirían en la casa que ganaron? Alfonso
Hoy no, pero en ese momento sí. Daniel
¿Cambiaron el repertorio para los siguientes concursos?
En aquel momento sí. Si ahora pudiese hacerla con las áreas con que a mí me gustaría vivir si, y con Termopanel.
Marcelo
Marcelo
Totalmente, seguimos con muchas búsquedas. La abstracta y la figurativa era bien náutica, la del techo inclinado era un poco expresionista, luego las cucarachas. Estábamos buscando permanentemente, a cada año probábamos algo nuevo.
Quizá en la Pedrera sí. (risas) En esta época era una casa suburbana.
¿Consideran vigente el repertorio utilizado? Daniel
A mí me generó pasión por la arquitectura. Fernando
Fue una época muy , donde uno discutía mucho de arquitectura. En ese sentido trazó una forma de abordar los problemas relacionados con la profesión. 13 Marcelo
También están las cosas más autobiográficas, yo aprendí muchísimo de ellos en especial, ya que venía de otro taller, de otra línea. Además, cada uno de ellos tiene un perfil muy diferente, lo cual hacía muy interesante el trabajo en equipo, Alfonso era alguien con una pasión por Siza, de una arquitectura más poética, Daniel era el único que era docente en ese momento y había trabajado con Thomas Sprechman, con Bastarrica y con Otero, Fernando trabajaba con Raúl Velazquez. Yo aprendí muchísimo de trabajar con ellos.
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1989
Retrato hablado
Jack Couriel «Esta etapa de la arquitectura posmoderna, de la simetría, a la Facultad le hizo mucho mal. Y a mí que me perdone (Thomas) Sprechmann, pero él tenía un discurso en el taller y otro cuando hacía arquitectura. En cuanto a su arquitectura yo comparto con Sprechmann, ahora, cuando veía las cosas que hacían en el taller, pensaba: yo con eso no tengo nada que ver»
11 Este equipo, asi como el de 1992, fueron de los equipos que más propuestas entregaron. El equipo de 1992 se presentó en más oportunidades con menos proyectos y este menos veces, pero entregando varios proyectos en cada concurso. En total entrgaron un total de diez proyectos obteniendo un primer premio, un segundo premio y tres menciones. 12 Ver nota 3. 13 Ver nota 2.
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Identikit
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Aldo Rossi
LĂŠon Krier
Ă lvaro Siza Juan Carlos Apolo Julia Bolles
Thomas Sprechmann (Sommer)
Juan Carlos Vanini
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1989
Aldo Rossi En un registro teórico muy cercano al caso de estudio de 1983, hay una exploración tipológica con dos propuestas en torno a la sala patio. A diferencia del caso de 1983, ya no hay un interés por una lectura semántica de la vivienda. Hacen referencia directa a Aldo Rossi, ya que formalmente les daba “poco espacio”. Léon Krier Dentro de la escena internacional del postmodernismo, hacen mención a Léon Krier como su referente más claro para su repertorio de recursos formales. Proyectaron y construyeron la vivienda en paralelo a otra con búsquedas similares, la sala patio se repite, aunque más integrada a una escalera (con referencias a la biblioteca de Stirling) adoptando recursos (ventanas, detalles en fachada, balcones, etc) así como también el realizar una arquitectura alusiva al imaginario colectivo de un “hogar”, algo que se puede ver aún en el caso de 1992. Álvaro Siza A nivel urbano, los autores destacan la experiencia de la IBA que se dio en Berlín entre los años 1979 y 1989, con propuestas de renovación urbana a modo de exposición permanente dónde los edificios además resolvían situaciones urbanas, la arquitectura como generadora de ciudad. El edificio Bonjour Tristesse de Alvaro Siza es un ejemplo de esto. En este sentido proponen girar los dormitorios y cocina sobre las salas patio de manera que ambos responden distinto a la esquina. Juan Carlos Apolo En un registro infográfico hacen hincapié en la importancia de cómo se presentaban los proyectos y la valoración de esto por el jurado, puntalmente destacan la calidad de las perspectivas de Apolo y Christoff, de algunas generaciones anteriores, así como también Vegh, Moreira y Rodríguez como competidores directos de su generación y compañeros en la Revista Trazo. En cuanto a la resolución de esquina mencionan como antecedente al proyecto de 1982 el cual resuelve la esquina con una diagonal. Junto con el caso de 1983, los autores mencionan concursos anteriores como referencia de su proyecto, tanto a nivel gráfico como proyectual, esto en parte lo atribuimos al aporte de la revista Trazo en registrar y publicar las viviendas de manera periódica. Julia Bolles Este equipo junto con el ganador de los concursos de 1990, 1992 y 1994 (ver caso 1992) son quienes tienen más propuestas en el Concurso de Vivienda, en este caso presentaban más de un proyecto por instancia, algo que atribuyen a la heterogeneidad del grupo. Por un lado por los talleres dónde cursaban, pero también por el momento de la disciplina en el que reconocían varias corrientes, varios caminos que aparecían en la escena arquitectónica mundial, a la que ellos no eran ajenos y que como estudiantes exploraban en sus propuestas, la presentada en 1991 (2o premio) es un claro ejemplo de otra exploración con influencias directas a Bolles Wilson, a quién estudiaron a través de la publicación de El Croquis. Thomas Sprechmann (Adolfo Sommer) La mayoría de los integrantes estaban vinculados al taller Sprechmann. Daniel era en este momento grado uno, Fernando ayudante en introductorio y Marcelo ingresó al año siguiente. Destacan como docentes a Ángela Perdomo, Diego Capandeguy, Jorge Tuset, Antonio Gervaz, entre otros. El taller tuvo siempre una imagen de apertura, multiplicidad de miradas y un carácter explorativo muy claro y evidente en las variadas propuestas. En otro registro, los autores comentan que al buscar referentes locales, estaban indirectamente por rebote mirando los referentes internacionales ya mencionados. Es el caso de las Menonitas de Rúben Otero y Juan Bastarrica y el Hogar de ancianos Atardecer de Benech, Sprechmann y Villamil. Juan Carlos Vanini Alfonso cursó anteproyecto 4 en el taller Sprechmann junto con Daniel y Marcelo, ya que era ayudante en el Taller Vanini. Del taller remarcan la formación enfocada en el oficio y el rigor en las resoluciones. Destacan como docentes con mucha práctica profesional a Conrado Pintos, Iván Arcos e Isidoro Singer, arquitectos que además tenían una gran experiencia en concursos. Es la primera vez en los casos de estudio que los equipos son conformados por integrantes provenientes de distintos talleres, algo que refleja la realidad de la facultad, en la que los movimientos entre talleres son más frecuentes que antes.
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IDKT -1989G84
Krier, Bolles Wilson, Hadid, Stirling Graves Siza Rossi
Otero, Bastarrica, Sprechman, Bencech Villamil
Tony DĂaz
Mapeo de referentes directos
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1989
Fuente de las imágenes En orden de aparición
Ignácio Correa (SMA): 1 a 9, 15, 27, 33 y 35 Cortesía de los autores: 10 y 23 Trazo No22: 11 y 12 S/i: 13, 14, 18, 19, 26, 31 y 32 Victoria Steglich: 16 Barreto Caram Facio: 17 Apolo Boga Cayón: 20 Brena Brandon Campón Christoff: 21 Andrea Sellanes (SMA): 22 Croquis No47: 24 y 25 Revista Arquitectura SAU No259: 28 y 29 Aldo Rossi: 30 Revista Trazo No26: 34
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