Prostitución en España. Situación, legalidad y percepción social

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PROSTITUCIÓN EN ESPAÑA: SITUACIÓN, LEGALIDAD Y PERCEPCIÓN SOCIAL.

prostitución. (Del lat. prostitutĭo, -ōnis). 1. f. Acción y efecto de prostituir. 2. f. Actividad a la que se dedica quien mantiene relaciones sexuales con otras personas, a cambio de dinero.

Autores: Luis Raja González y Sara Mandar Gil Coordinadora: María Teresa Fernández Rodríguez Centro: IES Juan Gris


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PROSTITUCIÓN EN ESPAÑA: SITUACIÓN, LEGALIDAD Y PERCEPCIÓN SOCIAL.

Este trabajo ha sido realizado en el programa de Bachillerato de Investigación del IES Juan Gris de Móstoles (Madrid), marzo de 2020.

Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.

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ÍNDICE 1. AGRADECIMIENTOS 2. JUSTIFICACIÓN DEL TRABAJO, OBJETIVOS Y METODOLOGÍA

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2.1. JUSTIFICACIÓN DEL TRABAJO

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2.2. OBJETIVOS

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2.3. METODOLOGÍA

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3. MARCO TEÓRICO

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3.1. HISTORIA DE LA PROSTITUCIÓN

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3.2. HISTORIA DE LA PROSTITUCIÓN EN ESPAÑA

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3.3. LA SITUACIÓN ACTUAL

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3.4. LA SITUACIÓN ACTUAL GENERAL EN EUROPA

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3.5. LA SITUACIÓN ACTUAL EN ESPAÑA

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4. Hipótesis I: LAS CONDICIONES DE LAS PROSTITUTAS MEJORARÍAN CON LA LEGALIZACIÓN DE LA PROSTITUCIÓN

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4.1. ABOLICIONISMO

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4.1.1. EL CASO DE UN PAÍS ABOLICIONISTA 4.2. REGULACIONISMO 4.2.1. EL CASO DE UN PAÍS REGULACIONISTA

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4.3. CONCLUSIÓN A LA HIPÓTESIS I

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5. Hipótesis II: HAY UNA GRAN DESINFORMACIÓN SOBRE LA PROSTITUCIÓN EN LA SOCIEDAD ESPAÑOLA

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5.1. ENCUESTAS A LOS ALUMNOS

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5.2. ENCUESTAS A LOS PROFESORES

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5.3. ENCUESTAS A ADULTOS SIN EDUCACIÓN SUPERIOR

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5.4. CONCLUSIÓN A LA HIPÓTESIS II

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6. RELACIÓN ENTRE LAS HIPÓTESIS 7. CONCLUSIÓN FINAL

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ANEXO

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Entrevista a Isidro Burgos, coordinador del equipo de atención a la mujer prostituida de la ONG Malos Tratos. 43 Entrevista a Mónica Alonso García, colaboradora de la ONG Médicos del Mundo en su programa contra la prostitución y la trata. 46 Entrevista a Morgana Martínez, prostituta. BIBLIOGRAFÍA

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1. AGRADECIMIENTOS Este trabajo no habría sido posible el uno sin el otro: nos complementamos mutuamente y no creemos haber sido capaces de terminarlo sin la compañía y la ayuda que nos hemos aportado. Fuera de nosotros mismos, son muchas las personas que han hecho posible la realización de este proyecto. En primer lugar, nuestros padres, mascotas, pareja, amigos y compañeros por apoyarnos y alentarnos en todo el tiempo que nos ha ocupado la realización de este proyecto. En concreto, cabe destacar la gran ayuda que hemos recibido de Ana, David, Hannah, Michael y Elisa, sin los que no podríamos haber realizado el trabajo tal y como teníamos planteado hacerlo. Queremos agradecer también a todas las personas que respondieron a nuestras encuestas: profesores, compañeros del instituto, familiares y amigos. Sin las estadísticas que obtuvimos gracias a vosotros hubiera sido mucho más complejo encontrar la información necesaria para nuestra segunda hipótesis. Nos sentimos enormemente agradecidos por el tiempo que gastaron con nosotros los entrevistados: muchísimas gracias Isidro, Mónica y Morgana. La información que recibimos de nuestras conversaciones es la parte más fundamental para el trabajo, y es tan crucial que sin ella no podríamos haberlo realizado. Por último, queremos dar las gracias a nuestra tutora Maite Fernández, que ha creído en nuestro proyecto desde el primer momento y nos han guiado y apoyado en todos los pasos relevantes del trabajo.

¡¡Muchísimas gracias a todos y a todas!!

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2. JUSTIFICACIÓN DEL TRABAJO, OBJETIVOS Y METODOLOGÍA

2.1. JUSTIFICACIÓN DEL TRABAJO Las razones por las cuales decidimos realizar nuestro trabajo de investigación sobre este tema son diversas. En primer lugar, nos llamó la atención el hecho de que la prostitución fuera un tema tan tabú y controversial en nuestro país. Además, ambos somos dos personas con un gran sentido crítico de la sociedad, y sentíamos que no teníamos una opinión formada sobre este tema. En segundo lugar, nos producía curiosidad la poca relevancia mediática y legal que tiene la prostitución gobierne la ideología que gobierne. Finalmente, nos interesaba mucho la idea de encontrar una solución definitiva y justa para un tema tan controvertido como este.

2.2. OBJETIVOS Los objetivos que buscábamos alcanzar en este trabajo en el momento en el que lo tuviéramos finalizado eran, principalmente: ● Conseguir estar suficientemente informados sobre este tema como para tener una opinión cimentada sobre ello, teniendo así el conocimiento suficiente como para hablar con propiedad de la cuestión. ● Tratar de buscar una solución definitiva que ayudara a la mayoría de prostitutas en la mejora de sus condiciones y derechos.

2.3. METODOLOGÍA Al ser este trabajo uno tan teórico, fue necesario buscar mucha información, lo cual hicimos de diversas formas: ● Buscar información en trabajos de investigación anteriores al nuestro, páginas web, foros, documentales, artículos y entrevistas realizadas de forma previa a nuestro trabajo. ● Realizar distintas entrevistas a personas que representan los puntos de vista principales de esta cuestión.

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● Informarnos sobre la situación de otros países con ayuda de personas provenientes de estos. ● Hacer encuestas a distintos grupos sociales: adolescentes, adultos con educación secundaria y sin ella. ● Analizar los datos obtenidos.

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3. MARCO TEÓRICO

3.1. HISTORIA DE LA PROSTITUCIÓN Uno de los dichos más conocidos sobre la prostitución es que es la profesión más antigua del mundo. Lo cierto es que desde que se tienen registros históricos se ha escrito sobre este oficio. En el siglo XVIII a.C. en la antigua Mesopotamia ya existían ciertas “leyes” que protegían a las mujeres que realizaban este trabajo. La primera constitución ya regulaba los derechos de todas las prostitutas. En la Antigua Grecia, podían prostituirse hombres jóvenes y mujeres. Se les obligaba a vestirse de una forma concreta, pagaban impuestos y podían llegar a puestos realmente influyentes y poderosos. La palabra porne (Gr: πόρνη), derivada del verbo pernemi (vender), designada para referirse a las prostitutas, da a lugar a términos como pornografía. Otro caso es el de la Antigua Roma, en la cual existía una libertad sexual mucho mayor a la de las anteriores civilizaciones, por lo cual la prostitución estaba mucho más normalizada. Las prostitutas eran mujeres muy educadas que se parecían a las escorts1 actuales. Tenían relevancia a nivel religioso en diversos rituales a dioses como Venus, además de que se las considerara atracciones turísticas en las ciudades en las que la actividad era mucho más abundante. Existían diversos tipos de prostitutas, según los clientes a los que proporcionaban sus servicios (como las delicatae, que tenían clientes muy poderosos) o dónde lo hicieran (como las lupae, que ejercían en bosques de alrededor de la ciudad). En el Corán, Mahoma prohibió la prostitución, por lo que en el Islam se considera pecado. Sin embargo, la esclavitud sexual no se considera pecado, por lo que esta práctica ha sido muy habitual en los territorios musulmanes. Por otra parte, la prostitución ha ido cambiando a lo largo del tiempo. Por ejemplo, en la Edad Media esta práctica era controvertida a causa de los dogmas religiosos. En el Renacimiento la mentalidad dio un giro gracias a la nueva concepción del ser humano, al que se comenzó a ver como el centro del universo y de la vida, al contrario que en épocas 1

Escort: persona que actúa como acompañante remunerado, es decir, alguien a quien un cliente paga por acudir con él o ella a reuniones, fiestas, salidas a otra ciudad, etc. La contratación puede incluir o no sexo.

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anteriores, en las que se comprendía que lo más relevante era Dios. Por esto, se puede decir que los renacentistas eran humanistas. La prostitución seguía siendo un tema tabú. A lo largo de gran parte de la Época Contemporánea la situación respecto a estas trabajadoras siguió siendo igual, aunque la percepción ha ido cambiando a lo largo de la historia reciente, especialmente conforme ha aumentado la influencia del movimiento feminista en nuestra sociedad. Esto ha creado cada vez una mayor conciencia social que se cuestiona la moralidad de la prostitución.

3.2. HISTORIA DE LA PROSTITUCIÓN EN ESPAÑA En España la situación legal ha cambiado a lo largo de nuestra historia. Se sabe que este oficio fue respetado durante gran parte de la Edad Media, hasta que Felipe IV decretó en 1623 el cierre de mancebías, lo cual hizo que las prostitutas ejercieran en la calle, empeorando así sus condiciones. Fue una decisión tremendamente impopular, pero vigente hasta el siglo XIX, en el que Isabel II introdujo una nueva regulación para disminuir el aumento de la prostitución en varias ciudades. La situación se mantuvo hasta la Segunda República, en la que se prohíbe absolutamente al ser sus líderes cercanos al abolicionismo. Sin embargo, sus circunstancias cambiaron en la Guerra Civil de 1936, en la que aumentó muchísimo la demanda. Cuando se impuso el régimen franquista, se anularon las leyes abolicionistas para dar pie a una situación alegal, pues no existía una ley que regulara estos actos. En ésta época aumentó la prostitución aún más al ser un periodo de hambre y miseria. En 1963 España se declaró abiertamente abolicionista, tratando de multar a los hombres que la consumieran y contemplando a todas las mujeres que ejercieran la prostitución como víctimas de la trata sexual. Sin embargo, la realidad social era de exclusión y marginación a las mujeres, tratándolas como criminales en gran número de ocasiones. Aunque la dictadura franquista terminara en 1975, el Código Penal no se revisó hasta 1999. En ese año se anularon la mayoría de leyes abolicionistas, dejando las que se referían a menores y personas con problemas mentales. Hubo varios cambios para reforzar la lucha contra el tráfico de personas y ayudar a prostitutas inmigrantes. Por esto, la prostitución a día de hoy se considera completamente alegal en España, al no haber una ley vigente que controle la situación de la mayoría de los casos.

3.3. LA SITUACIÓN ACTUAL Resulta interesante mencionar cuál es el punto en el que se sitúa la prostitución a día de hoy. La relación existente con la tecnología es cada vez más intensa: la publicidad en distintas páginas web ha sustituido completamente a la de los periódicos, haciendo de esta una información muchísimo más accesible. Además, con la llegada de Internet han aparecido nuevas formas de trabajo sexual, tales como las personas que trabajan en

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OnlyFans2 o cualquier otro tipo de webcamers, que plantean nuevos debates sobre la regularización y normalización de estas actividades. En debates como este cada vez se ha fragmentado más y más el movimiento feminista entre quienes creen que la estigmatización y marginalización de estas profesiones se debe a factores meramente culturales y que es contraproducente para la sociedad dejarlas de lado y aquellas que creen que la prostitución supone el máximo acto de capitalización y abuso contra el cuerpo y la figura de la mujer. Además, otro factor muy relevante que influye en la situación de la prostitución en la actualidad es el masivo consumo de pornografía a través de portales digitales. Cabe destacar que este consumo es, en muchas ocasiones, llevado a cabo por menores de edad, tal y como refleja un estudio realizado por el Grupo GIFES de la UIB realizado a 2500 adolescentes de distintas comunidades españolas, que expone cómo la edad de introducción a la pornografía se ha adelantado hasta los 8 años y generalizado a los 14. En nuestra opinión, existe una gran relación entre que la principal fuente de educación sexual para los adolescentes sea la pornografía y que la prostitución siga tan demandada como lo está a día de hoy. La objetización hacia el sexo femenino presente en estos videos es un claro indicador de que la sociedad no está tan avanzada como en primera instancia se puede llegar a pensar: gran parte de los hombres siguen viendo a las mujeres como un trozo de carne al que manipular y dominar, ignorando su condición de ser humano. La forma más sencilla para estos hombres de satisfacer sus fantasías sin demasiados impedimentos o dificultades es claramente pagar a prostitutas para mantener relaciones sexuales con ellas. Finalmente, una circunstancia que influencia mucho a las mujeres a ejercer la prostitución es la precarización de la gran mayoría de empleos, el empobrecimiento de las clases bajas y el aumento de la desigualdad: ven en el trabajo sexual una oportunidad de obtener dinero de forma mucho más rápida que otros empleos en los que trabajan durante muchísimas más horas. No es un trabajo para el que haga falta tener ningún tipo de grado o educación superior, y, como ya hemos dicho, cada vez es más y más accesible gracias a las nuevas tecnologías.

3.4. LA SITUACIÓN ACTUAL GENERAL EN EUROPA Para estudiar este tema en su total complejidad hemos decidido acotar los objetivos de nuestro estudio a la situación en España. Para ello, vemos necesario conocer superficialmente la situación de países cercanos a nuestro país, debido a que son los que más se acercan a éste económica, social y culturalmente. La situación difiere mucho según el país, pues, incluso si tenemos en cuenta todas las

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OnlyFans: aplicación que permite a los usuarios vender cualquier tipo de contenido, aunque esta app no se utiliza para publicidad, ha causado mucho furor en las redes sociales por la facilidad de registrarse y suscribirse, además de no prohibir ni borrar cuentas por subir contenido adulto.

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similitudes que estos países tienen en común, las legislaciones son muy distintas entre sí. Según cómo de laxo es el gobierno ante la prostitución, podemos encontrar países como Alemania, en los que la prostitución está completamente legalizada o regulada, países como Hungría en los que los prostíbulos no son legales, pero sí ejercer en la calle o España, en donde no existe una ley que regule la prostitución.

3.5. LA SITUACIÓN ACTUAL EN ESPAÑA Como ya hemos dicho anteriormente, la prostitución en España a día de hoy es alegal. Según el párrafo 1 del artículo 187 redactado por el apartado cuadragésimo octavo del artículo único de la L.O. 5/2010, de 22 de junio, por la que se modifica la L.O. 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal («B.O.E.» 23 junio). Vigencia: 23 diciembre 2010 : “El que induzca, promueva, favorezca o facilite la prostitución de una persona menor de edad o incapaz será castigado con las penas de uno a cinco años y multa de doce a veinticuatro meses. La misma pena se impondrá al que solicite, acepte u obtenga a cambio de una remuneración o promesa, una relación sexual con persona menor de edad o incapaz. Podemos observar que el proxenetismo3 sí que está penado. En párrafos posteriores nos encontramos con que está más penado aún si se trata de una organización criminal o si el proxeneta es funcionario público. La única prostitución no relacionada con el proxenetismo que realmente está penada es la que ejercen menores o discapacitadas mentales. Además, la Ley de Seguridad Ciudadana persigue desde 2015 al cliente en el caso de que pague por servicios sexuales "en zonas de tránsito público" donde pueda haber menores, como parques y colegios, o cuando haya "un riesgo para la seguridad vial”, con multas que oscilan entre 601 y 30.000 euros. En toda España, numerosos hoteles y hostales son conocidos por la prostitución que se ejerce dentro de ellos. Lo consiguen amparándose en que los dueños únicamente reciben beneficios económicos de lo que les cuesta el alquiler de las habitaciones a las mujeres, mientras que los hombres sólo pagan la copa a la que invitan a estas mujeres para luego acompañarlas a sus habitaciones. No existe una situación de proxenetismo a ojos de la ley, por lo que no hay nada ilegal en ello. (Isidro Burgos, 2019). Citando a Isidro Burgos, coordinador del equipo de atención a la mujer prostituida de la ONG Malos Tratos, “Hay grandes clubes y hoteles en los que hay una gran decoración relacionada con la prostitución como la silueta de mujeres en neón, son lugares que actúan con normalidad como hoteles o restaurantes, pero en el que se alojan numerosas mujeres que ejercen como clientes de dichos lugares, por lo que este hotel se convierte en un

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Proxenetismo: delito que consiste en obtener beneficios económicos de la prostitución a costa de otra persona. En la mayoría de los países es un delito por constituir una grave vulneración de los derechos humanos

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burdel. El dueño del hotel no es un proxeneta legalmente, por lo que en realidad no hay problema real, aunque se ejerza la prostitución en su hotel.” La situación, además, varía según la comunidad autónoma o incluso el municipio: algunos, como Barcelona, multan tanto a las prostitutas como a los clientes. Otros, como Valencia, únicamente a los consumidores. Incluso si la prostitución se ejerce en la gran mayoría de municipios, la zona de la costa Levantina se encuentra especialmente expuesta a la demanda de los clientes extranjeros. Alrededor de Girona hay más de una docena de burdeles en los cuales alrededor de un 80% de los clientes son franceses debido al endurecimiento de la regulación en su país de origen. Situaciones similares suceden desde la zona pirenaica de Cataluña hasta el suroeste andaluz. A continuación, procederemos a plantear dos hipótesis acerca de dos suposiciones que realizamos al comenzar el trabajo.

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4. Hipótesis I: LAS CONDICIONES DE PROSTITUTAS MEJORARÍAN CON LEGALIZACIÓN DE LA PROSTITUCIÓN

LAS LA

Para tratar este tema debemos hacer hincapié en su complejidad. Durante la realización de este trabajo se han ido dando diversos factores que han afectado nuestra opinión a lo largo de la investigación sobre dicha hipótesis. No creemos que exista una solución definitiva al problema, ni una opción que satisfaga todas las necesidades de las mujeres que ejercen la prostitución. No existe una respuesta unánime, pero hemos recogido diversos argumentos y puntos de vista que apoyan y niegan la posibilidad de la regulación o la legalización de la prostitución. Existen más posturas sobre este tema, pero evidentemente y por desgracia es imposible recogerlas todas, pues sería inviable. Por ello, dividiremos este apartado en dos: uno que trata de los argumentos abolicionistas que hemos recogido y otro que hace lo propio con los argumentos regulacionistas. Finalmente, tras exponer ambas ideas, haremos una conclusión.

4.1. ABOLICIONISMO abolicionismo 1. m. Movimiento que propugna la abolición de ciertas leyes, tales como las de esclavitud, pena de muerte o segregación racial. Para defender la corriente abolicionista, entrevistamos a Isidro Burgos, coordinador del equipo de atención a la mujer prostituida de la ORG Malos Tratos, y a Mónica Alonso García, colaboradora de la ORG Médicos del Mundo en su programa contra la prostitución y la trata. Antes de exponer y desarrollar sus puntos de vista, cabe destacar que ambos defienden la postura abolicionista. Alonso García afirma que la prostitución es un problema al que no se le puede poner solución sin una regulación que condene y persiga absolutamente la trata para hacerla desaparecer. Burgos va mucho más allá, afirmando que la prostitución es una forma como cualquier otra de violencia de género, y que por lo tanto es inadmisible que nuestro estado promueva y apoye la legalización de esta profesión, incluso si esto afecta negativamente a todas las mujeres que hayan decidido ejercerla libremente. Y, por lo tanto, una de las formas de combatirla es luchando contra el machismo propio de nuestra sociedad, sensibilizando a los hombres y enseñando a nuestras futuras generaciones la educación sexual necesaria

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para comprender el sexo. Así, se trataría de minimizar la demanda sin provocar un impacto directo y repentino como produciría la prohibición completa, la cual también descarta como opción pues dicha prohibición incitaría, según él, aún más al consumo de la prostitución. Burgos no culpa a los hombres de la existencia de la demanda, sino a la unión de una asfixiante sociedad heteropatriarcal en la que el hombre siempre trata de tener mayor control sobre la mujer y una economía capitalista que normaliza la mercantilización del cuerpo femenino como la de cualquier otro producto.

4.1.1. EL CASO DE UN PAÍS ABOLICIONISTA Un ejemplo de un gobierno que se ha posicionado completamente en contra de la prostitución es el sueco. En Suecia, la prostitución lleva ilegalizada desde 1999. Sin embargo, incluso si estas medidas han sido apoyadas desde diversos colectivos y asociaciones, no existen estudios concluyentes que realmente amparen que estas leyes abolicionistas han conseguido alterar o disminuir de alguna forma la cantidad de prostitución consumida en el país. Sí se conoce que no han disminuido, tampoco, los problemas de tráfico de mujeres, y la ley tampoco ha afectado demasiado a las prostitutas de lujo o escorts, sino que las que han visto su trabajo verdaderamente afectado por esta ley son las mujeres que ya estaban expuestas a riesgos económicos. La prostitución allí cada vez es más clandestina, lo cual las pone en un peligro aún mayor. Se considera cómplice a toda persona que reciba dinero de dicho oficio, por lo que se criminaliza a niños y niñas inocentes. Las trabajadoras sexuales no pueden trabajar juntas, por lo que no pueden crear un entorno que les permita realizar su trabajo de forma completamente segura, disminuyendo de este todas las posibilidades de sufrir abusos, violaciones o cualquier tipo de agresiones a los que suelen estar expuestas.

4.2. REGULACIONISMO El regulacionismo es el movimiento que promulga la idea de que para que las condiciones de las mujeres que ejercen la prostitución mejoren se debe legalizar su profesión. Para investigar los distintos argumentos que defiende la corriente regulacionista del feminismo, decidimos entrevistar a Morgana Martínez, prostituta que ejerce desde hace un tiempo por voluntad propia. En primer lugar, Martínez critica al abolicionismo y al feminismo en general: según ella, existe una tendencia a la victimización de las prostitutas cuando se trata sobre sus condiciones. Afirma que estos movimientos victimizan sistemáticamente a personas que

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nunca se han considerado víctimas a sí mismas. No cree que el feminismo tome en serio realmente la opinión de las trabajadoras sexuales, sino que sólo las criminaliza y victimiza para que entren dentro de su ideología. El abolicionismo trata de actuar en nombre de las trabajadoras sexuales sin tener en cuenta su opinión, cuando son a ellas a quienes les afectan realmente las decisiones que pueden llegar a ser influenciadas por el abolicionismo. Además, afirma que mucha de la teoría feminista está basada en “postulados puritanos que beben de la herencia moral cristiana presente en nuestra sociedad”. Esto, para ella, constriñe la sexualidad de la mujer en lugar de liberarla. Por esto existe tantísimo tabú y estigma alrededor del trabajo de las prostitutas. Durante muchísimos años, nuestro país ha sido fervientemente cristiano católico, y es innegable la influencia que ha tenido esto en nuestra concepción del cuerpo de la mujer, nuestra sexualidad y el entendimiento que tenemos de las relaciones emocionales. Para ella, que el Estado español hiciera algo sobre esto sería una gran ruptura con todos los lazos morales y éticos que mantiene nuestra sociedad con la religión cristiana. Una de las razones principales por las que Martínez apoya el regulacionismo es la autonomía y el apoyo del que dotaría a las trabajadoras sexuales una ley. Para ella, ser prostituta es muy similar a cualquier otro empleo en el que se sea autónomo: elige su horario, no existe ningún jefe que mida su tiempo ni valore su rendimiento y consigue mucho dinero en poco tiempo. Y una ley que la amparase le daría una capacidad de desarrollar esta autonomía mucho mayor y dejaría de encontrarse con problemas que requieren de su nómina, en situaciones tan sencillas como alquilar un piso. Contrariamente a lo que afirmó Isidro Burgos, Martínez afirma que el cuerpo policial ignora en muchas ocasiones las denuncias provenientes de prostitutas, dándoles una relevancia mínima o incluso nula. Burgos, por otro lado, piensa que la policía está siendo cada vez más formada y respetuosa, y que la situación real se aleja mucho de lo que la ficción ha intentado retratar.

4.2.1. EL CASO DE UN PAÍS REGULACIONISTA En los Países Bajos, el control de la legislación de la prostitución lo llevan los municipios. El ejemplo más reconocible de uno en el que el trabajo sexual es legal es Ámsterdam. No lo es la prostitución callejera, pero sí los burdeles. Habitualmente todos los prostíbulos de una ciudad se encuentran en el mismo barrio: los conocidos barrios rojos. La excepción son los prostíbulos en los que trabajan mujeres trans, que se agrupan en los barrios azules y morados. No existe requerimiento de hacerse tests de ETS o VIH, pero sí es necesario tener los papeles y permisos adecuados y un mínimo de 21 años. Está muy normalizado socialmente, pues a la mayoría de personas holandesas les parece que gran parte de las mujeres que ejercen lo hacen por diversión o simplemente porque buscan el dinero de forma voluntaria. Existe la opinión generalizada de que si la prostitución no 19


existiera aumentarían los casos de violaciones en el país. En realidad, en Holanda sigue habiendo numerosos casos de violaciones, tales como las conocidas violaciones por parte de eclesiásticos que tan conocidas se hicieron a principios de la década pasada. Sin embargo, la otra cara de la moneda es que los Países Bajos es una de las grandes cunas del proxenetismo y del tráfico de personas: los pequeños empresarios se han convertido en mafias y organizaciones criminales que drogan a las mujeres para prostituirlas. (Suellen Yoryanna Vargas, 2019). Tan mala ha llegado a ser la situación que en julio de 2019 la alcaldesa de Ámsterdam, Femke Halsema, anunció un cambio en la forma de afrontar los problemas que presenta la legalización de la prostitución, afirmando que “debemos atrevernos a pensar a lo grande-y también en acabar la prostitución en el Barrio Rojo. Han surgido situaciones inaceptables, y el ayuntamiento está listo a considerar soluciones de amplio alcance”. (Femke Halsema, The Guardian, 2020). Al parecer, la prostitución ha atraído un tipo de turismo irrespetuoso con las trabajadoras y que causa confrontaciones violentas a las que nunca se habían tenido que enfrentar. Por esto, podemos observar que la legalización de la prostitución tampoco es una opción, ni mucho menos, perfecta. Ampara al proxenetismo y la trata, por lo que tampoco hace que mejoren las condiciones de las prostitutas que se encuentran en las peores situaciones. En este punto sólo nos pudimos preguntar ¿cuál es la verdadera respuesta a este dilema?

4.3. CONCLUSIÓN A LA HIPÓTESIS I Si hemos sacado una verdadera conclusión es que no existe una solución definitiva para el anteriormente mencionado dilema de la prostitución, pues ninguna contentaría o serviría para todos los sectores de la sociedad. incluso si en un primer momento nos parecía que la abolición de la prostitución era la solución definitiva, hemos encontrado muchos fallos en su implantación por lo que no es la perfecta. Nosotros vemos absolutamente necesario el apoyo del Estado a las distintas ORGs que tratan de ayudar a las prostitutas económicamente para que encuentren mayores facilidades al reinsertarse en la sociedad. Está claro que no se puede victimizar a las trabajadoras sexuales, pero tampoco se puede ignorar la situación de necesidad en la que muchas se encuentran. Es estrictamente necesario que no se criminalice a las prostitutas ni se las multe, pues únicamente se las empuja a una situación de mayor empobrecimiento y peligro. No creemos en la legalización directa de la prostitución a día de hoy porque, en nuestra opinión, ampararía a los proxenetas y a las redes de trata de personas. Sin embargo, este regulacionismo tan laxo sería una idea interesante en un futuro lejano y utópico en el que

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no existiera la posibilidad de que esta legalización diera beneficios o escondiera al proxenetismo y a la trata. Cabe destacar, además, que no creemos que las opiniones de Morgana Martínez sean las generalizadas entre las prostitutas: muchas de ellas no poseen el privilegio necesario como para estar en su situación. Es española, blanca, joven y entra dentro de muchos de los cánones establecidos por la sociedad: la mayoría no pueden hacerlo por elección propia sin condicionamientos directos como familiares en situación de necesidad o tener la formación necesaria como para comprender la complejidad de la ideología feminista y el debate inherente en la prostitución. Evidentemente esta no es una forma de desacreditar a Morgana, ni mucho menos de invalidar su opinión, pero vemos necesario puntualizar la situación tan específica en la que se encuentra nuestra entrevistada.

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5. Hipótesis II: HAY UNA GRAN DESINFORMACIÓN SOBRE LA PROSTITUCIÓN EN LA SOCIEDAD ESPAÑOLA Una vez teníamos clara la necesidad de centrarnos en cómo encontrar la forma de mejorar las condiciones de las mujeres que ejercen el trabajo sexual, nos dimos cuenta del gran papel que tenía la sociedad en esto. A su vez, nos fijamos en cómo para muchas personas de nuestro alrededor existía un inmenso tabú y misticismo alrededor de todo este tema, y tuvimos la idea de estudiar la desinformación presente en España. Es evidente la dificultad de estudiar algo como la opinión generalizada de un colectivo tan amplio, por lo que no podemos afirmar con rotundidad que los datos que hemos recogido representen la totalidad de la sociedad española, pero sí que es la mejor representación posible que podemos realizar con nuestros medios. Para completar este estudio hemos realizado diversas encuestas a varios grupos demográficos. Entregamos los cuestionarios a compañeros de nuestro instituto (el IES Juan Gris) de entre 15 a 20 años, al profesorado para representar al sector adulto formado con educación superior y a nuestras familias y conocidos para representar al sector adulto sin formaciones superiores. Estos datos, los cuales representaremos a continuación, representan diversos sectores de la sociedad española.

5.1. ENCUESTAS A LOS ALUMNOS El primer grupo del que vamos a exponer los datos recogidos son los adolescentes españoles de entre 15 y 20 años. Estas encuestas fueron realizadas a alumnos y alumnas del IES Juan Gris de Móstoles, Madrid. En concreto, recibimos respuestas de 61 alumnas y 78 alumnos. A la pregunta “¿Considerarías que dispones de suficiente información sobre la prostitución?” estos son las respuestas que nos dieron las alumnas:

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Y estas son las de los alumnos:

Ante la pregunta “¿Considerarías que a día de hoy la prostitución es un tema tabú en nuestra sociedad?”, estas son las respuestas que obtuvimos de las alumnas:

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Y estas son las de los alumnos:

La gran diferenciación que hemos encontrado en las respuestas (en las que un mayor número de alumnas que de alumnos considera que la prostitución es un tema tabú en nuestra sociedad) nos ha hecho reflexionar sobre cómo la sexualidad es un asunto que se trata de forma más amplia y abierta entre hombres, y sobre cómo tal vez nuestra sociedad restringe a las mujeres la capacidad de tratar su sexualidad con naturalidad, mitificándola y juzgándolas cuando lo hacen. Ante la pregunta “¿Has consumido prostitución?” la respuesta del 100% de ellas fue no.

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Sin embargo, estas fueron las respuestas de los alumnos:

Ante la pregunta “¿Conoces a alguien que haya consumido prostitución?” estas son las respuestas que hemos recibido de las alumnas:

Y estas son las de los alumnos:

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Ante la pregunta “¿Crees que existe una diferenciación clara de las condiciones en este trabajo según el sexo de quien la ejerce?”, estas son las respuestas que obtuvimos de alumnas:

Y las de los alumnos:

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Ante la pregunta “¿Crees que debería ser legalizada la prostitución en España?”, estas fueron las respuestas que obtuvimos de las alumnas:

Y estas son las de los alumnos:

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Ante la pregunta “¿Crees que las personas que ejercen la prostitución toman la elección de ejercerla libremente o lo hacen obligadas por su necesidad y condiciones?” las respuestas que obtuvimos de las alumnas fueron estas:

Y estas son las de los alumnos:

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5.2. ENCUESTAS A LOS PROFESORES El segundo grupo encuestado son las personas adultas con formación superior. Para tomar estas opiniones, hicimos encuestas a profesores de, de nuevo, el IES Juan Gris. Recibimos respuestas de cuatro profesores y siete profesoras. Ante la pregunta “¿Considerarías que dispones de suficiente información sobre la prostitución?”, estas son las respuestas que recibimos de los profesores.

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Y

estas

son

las

respuestas

de

las

profesoras:

De nuevo, podemos observar una gran diferenciación entre las respuestas que dan los hombres y las mujeres: los hombres afirman tener un conocimiento que la mayoría de mujeres niega tener. Esto nos hace plantearnos, de nuevo, cómo de restringida ha estado durante muchas décadas la información sobre la sexualidad para el género femenino en comparación con el masculino. En la segunda pregunta, les preguntamos sobre formas mediante las que se podía dar a conocer aún más sobre el tema. Algunas de las respuestas fueron: ● ● ● ●

Jornadas informativas, trabajos de investigación, padres y familia, charlas. Desestigmatizándolo y hablando de ello abiertamente. Programas de investigación, documentales y talleres. Desmitificándolo y normalizándolo.

Ante la pregunta “¿Considerarías que a día de hoy la prostitución es un tema tabú en la sociedad?” todos los profesores respondieron que sí, pero dos de las profesoras negaron que lo fuera, afirmando que es un tema muy tratado y reconocido. Ante la pregunta “¿Conoces a alguien que haya consumido prostitución?” estas son las respuestas que obtuvimos de los profesores:

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Y estas son las de las profesoras:

En este caso, es significativa el contraste entre las respuestas que nos dieron mujeres y hombres: más profesoras que profesores no conocían a personas que habían consumido la prostitución. Ante la pregunta “¿Crees que debería ser legalizada la prostitución en España?” estas son las respuestas que obtuvimos de los profesores:

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Y estas son las de las profesoras:

Ante la pregunta “¿Crees que existe una diferenciación clara de las condiciones en este trabajo según el sexo de quien la ejerce?” las respuestas que recibimos de los profesores fueron estas:

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Y las de las profesoras fueron estas:

Ante la pregunta “¿Crees que las personas que ejercen la prostitución toman la elección de ejercerla libremente o lo hacen obligadas por su necesidad y condiciones?” las respuesta unánime de todos los profesores fue que se realiza por

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necesidad.

Sin

embargo,

las

de

las

profesoras

fueron

estas:

5.3. ENCUESTAS A ADULTOS SIN EDUCACIÓN SUPERIOR Finalmente, el tercer grupo es el compuesto por persona adultas sin formación superior terminada. Esto significa que este grupo de personas no ha realizado ningún grado superior o carrera o no lo ha terminado de estudiar. Para tomar estas opiniones, hicimos encuestas a familiares, amigos y amigas. En concreto, recibimos respuestas de 25 mujeres y 4 hombres. De estas encuestas hemos decidido tomar algunas preguntas cuyas respuestas nos han parecido significativamente distintas en comparación con las que nos dieron los profesores en las mismas.

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Ante la pregunta “¿Considerarías que dispones de suficiente información sobre la prostitución?” la respuesta de las mujeres fue esta:

De los cuatro hombres, todos negaron tener suficiente información. El hecho de que más personas sin estudios superiores finalizados o comenzados afirmen no saber suficiente sobre el tema nos hace plantearnos dos posibilidades: o bien los estudios superiores te dan un conocimiento más amplio sobre el tema y cultura general o bien dichas personas tienen la sensación de tener un mayor conocimiento del que realmente tienen. Cabe destacar la diferenciación entre jóvenes y adultos en la siguiente pregunta, que es “¿Cómo crees que se podría dar a conocer más sobre el tema?”. Los adultos daban ideas tales como charlas y conferencias impartidas por expertas y prostitutas, mientras que los jóvenes ofrecen, además de estas, respuestas relacionadas con las redes sociales y las nuevas tecnologías. También se diferencian, en este sentido, este conjunto total de las respuestas de las que nos dieron los profesores, que veían también muy relevante la posición del docente. Mientras que las respuestas a la pregunta “¿Crees que debería ser legalizada la prostitución en España?” fueron bastante homogéneas en el sector de profesores (con una mayoría de docentes que no estaban de acuerdo con su legalización), las respuestas en este apartado han variado mucho. Especialmente, las razones con las que han justificado sus respuestas. Mientras que las personas que están a favor de que se legalice dan argumentos como que sería una forma de evitar el maltrato, la vejación que sufren y de darles más derechos, las personas abolicionistas dan argumentos tales como que atentan contra los derechos y la salud de las que la ejercen o que aumentaría la trata y la explotación. Una afirmación que se reitera mucho es que, se haga lo que se haga, es necesario un control e intervención mayores del Estado para ayudarlas.

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5.4. CONCLUSIÓN A LA HIPÓTESIS II Además de las conclusiones que hemos destacado anteriormente, es necesario mencionar algunas otras que hemos sacado de las respuestas. Existen diferencias entre los adultos y los alumnos: los alumnos afirman tener un menor conocimiento que los profesores. También existe una gran diferenciación entre los hombres y las mujeres: por las respuestas que hemos recibido de las encuestas podemos observar un mayor sentido crítico entre las mujeres, que dudan más de sus conocimientos y parecen plantearse mucho más los dilemas inherentes en la prostitución. Además, los hombres parecen victimizar más a las prostitutas sin centrarse en la complejidad de la situación. Por otro lado, hay un mayor número de hombres que están de acuerdo con la legalización de la prostitución que mujeres. Finalmente, la respuesta final a la hipótesis es que está claro que no existe suficiente información sobre la prostitución en la sociedad española, que para la mayor parte de esta es un tema tabú y que se debería normalizar y dar mucha más información de diversas formas, para así desestigmatizarlo y poder tratarlo con naturalidad.

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6. RELACIÓN ENTRE LAS HIPÓTESIS Vemos necesario destacar la correlación presente entre las conclusiones que hemos sacado de la primera y la segunda hipótesis. Podemos observar que está claro que la mayor parte de la sociedad española no dispone de la información que les gustaría tener sobre la prostitución. Dándoles una mayor formación sobre este tema tal vez se podría generar más conciencia social y compromiso a la hora de encontrar respuesta a esta solución. Por esto, pensamos que de esta forma el trato a las prostitutas mejoraría y a la sociedad le parecería un tema relevante y actual que necesita ser tratado por el Estado. De esta forma, las condiciones de vida de las prostitutas podrían llegar a mejorar en cierto modo, incluso si tal vez sería difícil que con esto cambiara su situación de forma directa. Evidentemente no es una respuesta definitiva ni mucho menos, pero está claro que no hay ninguna en este trabajo. Una mayor educación a las generaciones venideras será un impacto positivo en las condiciones de vida de las prostitutas. Es necesario que cambie la percepción en nuestra sociedad sobre el cuerpo femenino, la cosificación de este y el poder que tiene el hombre sobre él. Nuestros jóvenes deben tener una concepción del sexo sana, formada y moderna, sin ningún tipo de tabúes ni percepciones erróneas.

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7. CONCLUSIÓN FINAL La prostitución ha sido un tema mucho más complejo de tratar de lo que habíamos planeado inicialmente. Existen numerosos factores y elementos muy subjetivos que nos han hecho posicionarnos de formas radicalmente opuestas a lo largo de la investigación. Antes de comenzar con el trabajo, no teníamos mucha idea sobre la prostitución. No teníamos una opinión formada porque no conocíamos suficiente sobre todo esto. En un primer momento nos sentimos mucho más identificados con las ideas del abolicionismo: eran las que mejor conocíamos gracias a lo mínimo que sabíamos debido a nuestro interés por el feminismo, y conforme íbamos investigando y entrevistando a Mónica Alonso García e Isidro Burgos (partidarios del abolicionismo), parecían las más lógicas. Veíamos muy claro el sentido dentro del razonamiento inherente en argumentos tales como que las mujeres que se prostituyen lo hacen por necesidad y que están completamente oprimidas. Tras leer el ensayo “Teoría King Kong” de Virginie Despentes, nos acercamos mucho a la ideología regulacionista, comenzamos a entender razonamientos mencionados en dicho ensayo tales como “todos los trabajos asalariados se realizan por opresión” y “la sociedad tiende a victimizar a las prostitutas sin cuestionarse su opinión antes” y a interiorizarlos. Este proceso aumentó aún más cuando entrevistamos a Morgana Martínez, prostituta que comulgaba con las ideas que afirmaba el ensayo de Despentes. Tras un posterior análisis, comprendimos que esta opinión era una de muchas, y que no por ser la de una prostituta representaba los ideales de todo su gremio. A día de hoy nos encontramos entre las dos ideologías, pues no pensamos que ninguna de ambas presente una solución perfecta y definitiva. Incluso si nos sentimos muy enriquecidos e informados sobre el tema, seguimos sintiendo que nos faltan elementos para comprenderlo en su totalidad, debido, en parte, al hermetismo presente en todo lo que rodea a la prostitución y las grandes dificultades que hemos tenido para obtener datos de primera mano.

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ANEXO Entrevista a Isidro Burgos, coordinador del equipo de atención a la mujer prostituida de la ONG Malos Tratos. ¿Cuál es la situación legal de la prostitución en España? La situación desde la modificación del código penal de 1995 ha cambiado. Hay grandes clubes y hoteles en los que hay una gran decoración relacionada con la prostitución como la silueta de mujeres en neón, son lugares que actúan con normalidad como hoteles y restaurantes, pero en el que se alojan numerosas mujeres que ejercen como clientes de dichos lugares, por lo que este hotel se convierte en un burdel. El dueño del hotel no es un proxeneta legalmente, por lo que en realidad no hay problema real, aunque se ejerza la prostitución en su hotel. La situación se ha mantenido así desde la reforma del 95. Las políticas públicas han cambiado, de forma similar a con la drogadicción, se trata de erradicar la prostitución visible, por ejemplo, con la prohibición al paso de vehículos a casa de campo con la excusa del medio ambiente. La prostitución de casa de campo pasó a estar en Villaverde: sigue siendo prostitución en la calle, pero pasa a suceder en un polígono industrial. Sin embargo, esto también causa una reacción de los vecinos de la zona por la peoría de sus condiciones: condones en parques públicos, por ejemplo. Pedían que toda esta prostitución en la calle se llevara a locales como los barrios rojos. Esto demuestra que les da igual lo que pase, no se aborda el problema, sino que se busca ocultarlo. Me da igual que pase, pero no quiero que lo vean mis hijos. Por esto la tendencia en estos últimos años ha sido la prostitución en pisos, lo que hace que el problema pase a ser únicamente de la comunidad de vecinos. Para nosotros el problema no es que la prostitución sea una práctica visible, sino que exista una demanda ante esta, defendemos por ello que se penalice al demandante para que baje la demanda y por lo tanto la oferta, uniéndola con intentos de parar todo tipo de publicidades etc. Todo esto es a nivel local, lo único que se trata a nivel nacional es la trata y la explotación, pero a día de hoy la prostitución es completamente alegal. Los partidos nombran este problema constantemente en campañas electorales y debates, pero nunca se ha terminado de afrontar como debería. ¿Existe mucha diferencia entre comunidades autónomas? Cada comunidad autónoma y cada municipio lo aborda de forma distinta. Existe un plan nacional y formas específicas de trabajar si hablamos de la trata, de forma estatal. Mediante esta, cada zona trabaja de forma regional como puede, pero casi siempre se 43


centran en la trata y no en la prostitución. Por esto, toda la zona del levante y del sur, desde Cataluña hasta Andalucía, sirve como una especie de burdel gigante para todo el turismo internacional. Tras Tailandia, somos el país en el que más se consume de todo el mundo. En casa de campo recuerdo que se atendían a más de 2000 mujeres. El tema es imposible de abordar para nosotros. Somos una ONG pequeña y trabajamos con más de 800 mujeres. Es una práctica excesivamente normalizada. Vas a cualquier pueblo y mínimo un prostíbulo ves. Y no parece ser extraño. ¿Tratáis con mujeres trans? No, tienen una situación distinta pues mayoritariamente no vienen en redes de trata, sino por emigración por amenazas por su condición en sus países de origen. Tienen muy pocas opciones al ser mujeres migrantes trans, incluso si tienen profesiones o carreras en sus países no se les da la opción de ejercer como tal, y por lo tanto se ven obligadas a ejercer la prostitución. No buscamos ayudarlas, pero les ofrecemos ayuda si precisan de ella. Son demasiados procesos para hacer válidas sus profesiones. Mayoritariamente las prostitutas son mujeres extranjeras que han venido a este país por diversas razones: las traen directamente de internados, de procesos familiares en las que, por ejemplo, un tío, las convenció de venir y posteriormente ejercer. Está muy relacionado con la feminización de la pobreza, por sus condiciones socio-familiares, por la violencia que han sufrido. Son condiciones sumamente duras. ¿Qué trato da la policía en estos casos? ¿Existe un protocolo? La policía con el paso del tiempo se va formando más y más. Principalmente porque se evidencia que cada vez más que gran parte de estas mujeres vienen de redes de trata, de loverboys o de organizaciones familiares. Esto hace que las autoridades cada vez sean más profesionales y especializados, y nos solemos coordinar con ellos para asesorar a las mujeres, o servir como traductores. Cada vez trabajamos de forma más estrecha con ellos, con la fiscalía y con los juzgados. Principalmente para poder ayudarlas con todos los trámites, debido a que denunciar es un proceso muy largo y complejo en el que les piden todos los detalles desde el principio. Esto es un proceso muy duro, pues las revictimiza y las hace revivir toda su experiencia. Por esto intentamos que solo lo cuente una vez, y con esto se construye la denuncia y todas las pruebas necesarias. ¿Cuáles son las principales dificultades que se le presentan a las mujeres que ejercen la prostitución? Depende, se enfrentan a muchísimas dificultades. Existen mujeres mayores, españolas, que no encuentran otra forma de sobrevivir por numerosas razones como no haber tenido la posibilidad de formarse en absoluto o haber sufrido violencia de género. Otro ejemplo, mujeres también de mayor edad, magrebíes, que son incapaces ni de leer ni de escribir y están solas en este país, viéndose obligadas a mandar dinero a su familia en su país de origen para mantenerles se ven empujadas, siempre, por su situación socioeconómica. Existen también muchas mujeres latinas que, incluso si no quieren ejercer como

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prostitutas, ven que el dinero viene mucho más rápido de esta manera y pueden enviar mucho más dinero a sus familias. Esto, junto a la trata, son las dos razones principales que a su vez se relacionan con la clara tendencia a la feminización de la pobreza. Evidentemente, el capitalismo ayuda a mantener esta situación, pues ayuda a normalizar la compra y venta de los cuerpos como si fueran un producto. Por supuesto, este negocio se ve respaldado por una sociedad heteropatriarcal en la que el hombre siempre intenta tener y busca mayor control. Luego existen condiciones particulares de cada una, claro, pero a rasgos generales, esta situación resume las dificultades a las que se enfrentan las prostitutas.

¿Cuál es la situación de la trata de personas? ¿Hay muchas diferencias con la de la prostitución? ¿La trata y la prostitución siempre están relacionadas? Como os he dicho, muchas de las prostitutas son mujeres inmigrantes que vienen de focos como Nigeria, Rumanía o Latinoamérica. Esto nos indica que existen unas vías de entrada muy establecidas para estas mujeres. Existe una gran llegada desde allí porque las mafias ya han construido una estructura establecida. Los discursos siempre son similares, comparten muchísimas de las experiencias y procesos. Son las mismas historias. Existe una organización muy clara en la explotación sexual, además de las organizaciones familiares pequeñas que controlan a un grupo de unas cinco o seis mujeres, y los loverboys que solo controlan a una. ¿Siempre usan anticonceptivo? Cuando las preguntamos ellas siempre dicen que siempre es así, pero sabemos que esto no es cierto. Por ejemplo, cuando llamamos a pisos chinos, dan dos precios. Uno usando condón y otro sin usarlo, siendo el segundo más caro. Evidentemente las que están en tratas no lo usan. No dan mucha importancia a la salud sexual, sino a dar el dinero que deben cada semana. Se prostituyan o no. No pueden arriesgarse a no conseguir el suficiente dinero. Y luego sufren numerosas ETS o abortos. Existen mujeres de 20 años que han sufrido más de 10 abortos. Y no les dejan tiempo para curarse de las ETS o de las infecciones, no tienen libertad de ir al médico. Los abortos los provocan ellos tomando pastillas que compran en el mercado negro para sufrir hemorragias masivas. ¿Cuál es la diferenciación entre prostituta y escort? La mujer que ejerce libremente siempre está mejor vista a nivel social. Las “putas” de calle siempre van a estar muy mal vistas, como guarras que están ahí porque no han hecho anda. No como las que afirman hacerlo por gusto, que se escudan en esto para distinguirse y autoprotegerse, se defienden de forma psicológica afirmando que hacen lo que quieren. El capitalismo es así. Pero el abolicionista nunca va a decir a una prostituta que no se prostituya, simplemente intentamos favorecer políticas públicas que las ayuden, porque no estamos abordando un problema personal sino más bien uno social. Consideramos que la prostitución es violencia de género. ¿Queremos violencia de género en nuestra 45


sociedad? Claro que no, entonces vamos a tratar de erradicar la causa de la prostitución, su demanda. Pero nunca vamos a juzgar o penalizar que ejerce libremente, porque esto es una cosa personal. El abolicionismo busca causas públicas, causas sociales y generales. Si tú eres una mujer que decide prostituirse libremente y dedicarse a esto, bueno, adelante. Pero el estado no puede favorecer esto como trabajo. ¿Por qué? Porque no puedes decir que las chicas (porque esto es una cuestión de género, el “noventaytanto” por-ciento de las que ejercen son mujeres y el 100 de la demanda son hombres) deben tener una regulación. Porque, por ejemplo, en el INEM te dan ofertas de empleo. Imagínate que una es la prostitución, si la rechazas pierdes las ofertas de empleo y el paro, y no todo el mundo quiere trabajar prostituyéndose. Habría una FP para prostituta. ¿Querrías eso para tus hijos? Según el abolicionismo pensamos que el estado no puede aceptar esto. ¿Entonces piensas que la solución final es el abolicionismo? La única solución es el abolicionismo, sí. El prohibicionismo tampoco vale. Si prohibes algo incitas a que suceda. Hay que proteger a la mujer mientras se construye una sociedad igualitaria en la que se tratan cuestiones de género como algo relevante. Ya queda claro que es una cuestión de género que se basa en la mercantilización del cuerpo de la mujer en el capitalismo. Hay que formar a nuestras mujeres, darles oportunidades laborales y luchar contra las mafias etc. ¿Hay algo que no hayamos tratado y quieras mencionar? Esto es muy sencillo, en realidad. Hay que seguir luchando por sensibilizar a los hombres. Hay mucha desinformación. Necesitamos formación y educación sexual. Aprendemos de la sexualidad a base de películas, series y pornografía. Y esto no puede ser así. Tenemos que luchar contra la estigmatización y los errores en la educación sexual. No podemos permitir que sigan viniendo grupos de chavales jóvenes a demandar prostitución, a tirarles huevos o empaparles de gasolina. El gran tema pendiente es la educación.

Entrevista a Mónica Alonso García, colaboradora de la ONG Médicos del Mundo en su programa contra la prostitución y la trata. ¿Cuál es vuestra labor en la asociación? ¿Qué servicios ofrecéis? Les damos consejos, asistencia e información sobre todo de orientación sexual. También les proporcionábamos anticonceptivos de todo tipo. Intentamos principalmente averiguar si hay indicios de trata por medio de conversaciones con ellas. ¿Cuál es la situación actual de la prostitución en España? ¿Es muy distinta la situación en Cataluña?

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En este momento es alegal y tampoco está penado su consumo. Sólo puede intervenir la policía en el caso de que haya trata de personas. En cuanto a Cataluña, el problema es que hay municipios que pueden poner leyes propias al estar en un sistema de Comunidades Autónomas, entonces pueden poner multas por ejemplo. Pero no es una sanción penal como tal, es una sanción administrativa. ¿Qué sectores de la sociedad son más propensos a ejercerla? Mayoritariamente son mujeres extranjeras en situación de vulnerabilidad, aunque las hay españolas también es más común que la ejerzan mujeres de otros países. Especialmente de Europa del Este y África. ¿Dónde se suele ejercer y dónde residen las prostitutas? En mi experiencia personal comprobé que vivían en hostales, normalmente vivían juntas. ¿Cómo se suele empezar a ejercer? Principalmente es por problemas económicos de diferentes tipos. ¿Cuáles son las mayores dificultades a las que se enfrentan? Muchas situaciones de violencia física y sexual, incluso teniendo que intervenir la policía. ¿Qué trato reciben por parte de la sociedad y la policía? Realmente no lo sé, por parte de la policía hay un poco de dejadez porque realmente no puede hacer nada porque se encuentran en un vacío legal. ¿Se utilizan anticonceptivos? Sí, en el polígono donde yo colaboré había incluso vendedores ambulantes de este tipo de cosas. Además, nosotros les proporcionábamos anticonceptivos en cada visita que les hacíamos. Ellas los aceptaban de muy buen agrado. Y en el caso de que se quedaran embarazadas las ayudábamos en lo que podíamos. ¿Crees que hay alguna solución para la situación de la prostitución? Yo personalmente me declaro abolicionista. Creo que es un problema que no se puede arreglar con su legalización, primero habría que perseguir y condenar la trata y luego pensar en una regulación para aquellas que sí quieran ejercer.

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Entrevista a Morgana Martínez, prostituta. Háblanos de tu experiencia como prostituta. Pues yo hace tres años era abolicionista y criticaba muchísimo el trabajo sexual, hasta que he ido conociendo testimonios de otras trabajadoras en lugar de atender a lo que decía el feminismo hegemónico acerca de la prostitución. Muchas veces el feminismo habla de realidades que no entiende y victimiza de forma sistemática a personas que nunca se han considerado víctimas a sí mismas, y no lo son. Yo empecé hace dos años en esto a raíz de saber que uno de mis mejores amigos era prostituto. Él estaba informadísimo sobre el tema y a pesar de que me tomaba su discurso como el propio de una persona privilegiada (por blanco y por hombre cis principalmente) me fui interesando por el tema. Ya había "jugueteado" dentro del trabajo sexual como webcamer hacía tiempo, aunque no cobrando porque sentía que no estaba bien cobrar por ese tipo de cosas, lo hacía por placer. Me empecé a dar cuenta de que gran parte de la teoría feminista estaba basada en postulados puritanos que bebían muchísimo de la herencia cristiana que tenemos, constriñendo muchas veces la sexualidad de la mujer en lugar de liberarla, que es lo que se pretende. No está mal que una mujer decida libremente ofrecer un servicio sexual a cambio de dinero, y eso me fue convenciendo para ir atreviéndome poco a poco. Quedé por primera vez con un señor que conocí por Internet en un chat sobre literatura y surgió el tema. Intercambiamos fotos, hablamos de límites y le puse un precio que me pareció más o menos aceptable aún no sabiendo nada del tema. Cuando quedamos todo fue muy normal, más allá del morbo extra que te produce hacer algo "que no está bien", fue echar un polvo con un señor mayor, en un hotel, y ya, no hay nada más "oscuro" o "perverso" o "depravado" en ello. A partir de ese momento empecé a quedar más veces con él y con algunos otros que me encontraba por Internet, para ir tentando el terreno, y la verdad es que fue un comienzo muy divertido en mi caso. Actualmente estoy anunciada en varias páginas, hago colaboraciones con compañeras, vendo contenido y cobro también por prestar compañía o servicios más de cuidados afectivos y trato de girlfriend. Es mi única vía de ingresos y estoy bastante contenta, la verdad, pero es increíble la cantidad de problemas que una se encuentra al convivir en una sociedad en la que tu trabajo está tan estigmatizado, tanto con familia, como con amigues, o a la hora de desenvolverte en ella. ¿Qué es lo peor y lo mejor de tu trabajo? ¿Cómo compaginas tu vida profesional con la personal? No entiendo esta pregunta... Si te refieres a que, si follo profesionalmente como personalmente, la respuesta es sí. Trabajar con el sexo no implica no poder disfrutarlo en mi tiempo libre, ni tener una relación sana con una persona concienciada con el tema. Con respecto a lo mejor y a lo peor de mi trabajo... Yo disfruto muchísimo de mi putería, y aunque empezó a ser algo pasajero, más propiciado por el morbo que por necesidad económica, y con intención de no pasar a más de un mero divertimento, amo mi condición 48


de puta. Me encanta tener un trabajo con un horario que yo misma elijo (trabajo cuando yo decido), de no tener un jefe que mida mi tiempo ni valore mi rendimiento, poder establecer un contacto humano y enriquecedor con muchos de mis clientes, y obviamente la hora se paga infinitamente mejor que en cualquier sitio. Estaba pensando en echar currículum a un trabajo en donde me pagarían una miseria por regalar gran parte de mi tiempo y de mi salud mental por vivir indignamente con dinero solamente para pagar el piso y la universidad, con suerte; ahora sé con certeza que no pienso meterme en un trabajo cualificado como "digno" en donde me sentiría infinitamente más indigna y explotada que laburando en la putería. Disfruto de mis encuentros con mis clientes porque yo misma los elijo, hablo con ellos, y estipulamos qué cosas se harán y que cosas no, qué nos gusta y qué no nos gusta, y eso es muchísimo más de lo que habrá en cualquier encuentro sexual entre dos personas hoy en día. He hablado de límites y condiciones más profundamente con clientes que con parejas sexuales en mi vida personal, me han tratado mejor y me he sentido más respetada que con personas que he conocido en la calle sin transacciones económicas de por medio. El trabajo sexual me parece un terreno en donde poder hacer del sexo algo sano e interesante, donde más cosas se suelen experimentar y donde más libre te sueles sentir generalmente. De hecho, muchos de mis clientes son personas casadas o con parejas estables y debido a la falta de educación sexual que hay o a la falta de experimentación o apertura mental, estas personas acuden a trabajadoras para probar cosas nuevas que sus parejas no les ofrecen. Esto tiene una dimensión mucho más amplia, pero no deja de ser un argumento al libre uso del sexo como campo laboral. Pero obviamente, como todos los trabajos que conozco, tiene su parte mala. Trabajamos porque tenemos que trabajar, sea de puta, de cocinera, o de profesora, nadie lo hace por puro placer, está claro. Dentro de la putería hay cosas que hacen que sea un trabajo de riesgo, como el problema de las enfermedades de transmisión sexual, y el desamparo sanitario que tenemos al no estar dadas de alta en la seguridad social. Estamos "obligadas" a hacernos pruebas constantemente y a sobreprotegernos para evitar el cualquier contagio, la salud sexual en nuestro trabajo es importantísima, como cualquier persona que practique sexo habitualmente, tenemos el compromiso de garantizarla. Además, el problema de la seguridad social y demás derechos a los que no podemos llegar por no pertenecer al grupo de trabajadores legales. Vivimos en la clandestinidad, sin posibilidad de optar a derechos básicos como alquilar un apartamento (ya que hasta para eso te piden nóminas y llevar cotizando tres meses), el hecho de poder cotizar, de optar a un seguro médico, a la jubilación, y a un sin fin de cosas que nos tenemos que buscar por nuestra cuenta, de forma clandestina e ilegal. Algo tan simple como alquilar un piso se convierte en una tortura de meses buscando y tentando el terreno, sometidas a un estigma increíble que acaba minando la salud mental de muchas. Al final siempre acabas compartiendo con amigas u otras putas que te dejen trabajar en casa.

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¿Crees que las condiciones de las prostitutas mejorarían con la legalización de la prostitución? Obviamente mejorarían. Las putas, sobre todo las poligoneras, están hostigadas cada día por el trato criminalizante que reciben por la policía. Las multas, los encarcelamientos, la llevada de trabajadoras a cíes en contra de su voluntad (donde son poco menos que tratados como animales y está pasando aquí en España), el trato humillante y los maltratos tienen que parar de una vez. No se busca tanto la legalización de la prostitución como la urgente descriminalización del trabajo. Que paren los abusos y que las dejen trabajar tranquilas.

¿Cuál es la diferencia entre trata y trabajo sexual? La diferencia más importante es que la trata NO es un trabajo, las chicas obligadas a ejercer en contra de su voluntad no están trabajando, sino que están forzadas, es explotación, maltrato, lo que sea, pero nunca trabajo. Decir lo contrario, como se empeñan en hacer las abolicionistas, no hace más que invisibilizar más aún si cabe los auténticos abusos que se están produciendo dentro de la prostitución. Decir que todas las putas están siendo violadas repetidamente solo hace que aquellas que sí sufren una violación no sean atendidas con la gravedad que la situación merece. Es importante hacer una clara diferenciación para poder tratar ambos temas por separado. Las putas estamos en contra de la trata, como no podría ser de otra manera, y queremos luchar en contra de ella, pero no podemos compartir etiqueta y hay que dejar bien claro que nosotras no estamos forzadas a ejercer, no somos víctimas, no queremos que nadie nos salve, sino derechos laborales urgentes. Y atender como se merecen a las personas que están en condiciones miserables dentro de la trata, como explotadas, no como trabajadoras. ¿Por qué estás en contra del abolicionismo? El abolicionismo va en contra de dar derechos a las trabajadoras sexuales, las criminaliza y victimiza sin contar jamás con su opinión o escuchar su discurso para contrastar información. Como puta que soy no puedo estar a favor del abolicionismo.

¿Cuál crees que es la diferencia entre la prostitución y otros trabajos sexuales? El trabajo sexual es muy diverso y hay muchísimas tipologías, desde atender en persona a un cliente hasta la venta de fotos y vídeos, venta de productos usados, strippers, scorts, webcamers, dominatriz, chat... Todas las modalidades buscan poder ejercer con dignidad y deshacerse del estigma que hay dentro del trabajo sexual. Da igual de qué forma lo hagas, todas somos compañeras y tenemos como fuente de ingresos el sexo o la sexualidad.

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¿Cuál crees que es la relación entre el capitalismo y la prostitución? Supongo que es un consumo como otro cualquiera, hay una demanda y una oferta. Hay quienes buscan y quienes proveen. La verdad es que no tengo ni idea, ni tampoco me importa mucho. Entiendo que hay una realidad que necesita ser regulada se mire por donde se mire, y eso es lo importante, tratar de que las putas que haya se sientan cómodas ejerciendo y que las que no quieran ejercer tengan una alternativa, si es que la hay, y que ésta no sea un trabajo feminizado como limpiadora o cuidadora, en donde estarán trabajando muchas más horas por muy poco dinero y realmente ninguna trabajadora dejará su realidad de puta por otro trabajo patriarcal para cobrar menos. Estamos en una sociedad en la que al sexo se le da mucha importancia, es un reclamo en todas partes, tanto en arte (cine, música, literatura...) como en publicidad. Estamos constantemente bombardeados con sexo y nadie puede negar que forma parte de nuestro día a día y de nuestro imaginario colectivo, vivimos hipersexualizados. Y esto no deja más que un campo excelente para aquellas personas que se dedican a trabajar con él. El problema suele ser que no molesta cuando se aborda este trabajo desde grandes corporaciones a menudo pornográficas, modelos eróticos o sexshops, pero en cuanto se lanzan trabajadoras independientes para intentar ganarse la vida como pueden utilizando el sexo como forma de inversión es cuando lanzamos el grito al cielo. Las pobres son quienes están y estarán siempre más juzgadas y criminalizadas, espero que algún día nos demos cuenta de que nunca han sido el problema.

¿Cómo crees que se podrían mejorar las condiciones de las trabajadoras sexuales? Para empezar, despenalizando el trabajo. Insisto en que las compañeras poligoneras son quienes peor lo pasan, las multas son increíblemente altas y eso es lo mejor que te puede pasar, en caso de que no seas blanca, las putas racializadas no politizadas son siempre quienes pagan el pato y con quienes más se ensaña el sistema, con las más pobres y desprotegidas. Es importante que paren de multar a las chicas, y que si realmente se interesan por su seguridad, que instalen servicios de protección, porque hasta ahora y según lo que cuentas las compañeras la policía sólo se pasa por las zonas de trabajo para poner multas y ensañarse con ellas. Por parte de los partidos “proputas” lo único que se ha recibido son repartos de condones gratuitos y pruebas del sida, lo cual no ayuda a las trabajadoras si hay policías constantemente multando a trabajadoras y a clientes (aunque como siempre las más multadas son siempre ellas). En los casos que me constan de compañeras violadas dentro del trabajo y que han ido a denunciar a la policía las respuestas que han recibido han sido "eso son gajes del oficio" y es una muestra perfecta de la desprotección a las que están sometidas. Si tanto os importa nuestra seguridad velad por ella, que es algo que nunca se ve, “aliades” 51


“proputas” realmente “preocupades” por los derechos y protección de las putas.

¿Existe mucha desinformación y estigma en relación con este tema en la sociedad española? Si, la sociedad española en general concienciada con el tema tiene dos opiniones normalmente: o son abolicionistas “constatades” porque han bebido de las ideas de un feminismo hegemónico, blanco, racista, privilegiado, cisnormativo, acomodado, y con una herencia moralista puritana de la sexualidad y creen que las putas están todas encadenadas en cuartuchos forzadas a ser folladas por cualquiera de cualquier forma, lo cual es una fantasía paternalista del feminismo; o pertenecen a una nueva ola de feministas que están empezando a entender que el trabajo sexual es un trabajo más, que lo importante es velar por la seguridad de las putas (porque putas va a haber se quiera o no se quiera) y que la elección es puntería clandestina o putería descriminalizada. No es difícil ver el paralelismo que hay con el aborto hoy en día, sólo hay que pensar un poco en si las mujeres somos siempre víctimas y necesitamos de alguien que tome decisiones por nosotras, o personas de pleno derecho capaces de formar nuestro propio discurso.

¿Qué te gustaría que la sociedad española supiera sobre la prostitución? Pues un poco como resumen de todo lo anterior decir que es importante que la gente se haga la misma pregunta que se lanza desde las proaborto: el aborto/la prostitución/las mujeres que deciden por sí mismas y por su sexualidad seguirán existiendo por mucha gente que intente frenarlas, y la decisión entonces de la gente que nos rodea sólo es si desea o no apoyarnos, si desea o no que vivamos en mejores condiciones y con mejor salud. ¿Prostitución clandestina o prostitución legalizada?

BIBLIOGRAFÍA   

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“Teoría King Kong”, de Virginie Despentes (2006). https://www.theguardian.com/world/2020/jan/16/amsterdam-green-mayorreform-red-light-district


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