6 minute read

zona t

SEÑALES DE DEPRESIÓN EN TUS HIJOS

JIM BURNS

Advertisement

Jim Burns @drJimBurns

Es presidente de HomeWord, un ministerio que educa, equipa y anima a padres y a iglesias a construir familias que honren a Dios de generación a generación. Es reconocido conferencista internacional, anfitrión de radio y autor de más de 40 títulos. Los años de la preadolescencia y adolescencia son un sube y baja emocional. Quiero decir, con toda honestidad, ¿quién de nosotros como padres estaría dispuesto a volver y revivir nuestros años de secundaria nuevamente?

Los momentos felices para un adolescente pueden ser absolutamente sensacionales, pero los «tiempos muertos» también son muy reales. Una encuesta reciente informó que muchos adolescentes experimentan sentimientos de depresión y tristeza que a menudo no reciben tratamiento, y que 9 de cada 10 adolescentes tienen períodos de depresión que duran al menos dos semanas.

Entonces, ¿qué debe hacer un padre? Bueno, un buen lugar para comenzar es identificar si su hijo tiene o no un problema, y para hacer eso vale la pena considerar los diferentes tipos de depresión.

Cuatro tipos de depresión

Depresión reactiva. Esta es la forma más común del estado de ánimo en niños y adolescentes, y también es la menos grave. La depresión reactiva es un estado depresivo provocado por la dificultad para adaptarse a una circunstancia perturbadora: esto podría involucrar algo tan serio como la pérdida de un padre o algo relativamente intrascendente como un rechazo o desprecio de un buen amigo. Por lo general, dura de unas pocas horas a un par de semanas, pero no se considera un trastorno mental.

Desorden bipolar. También conocido como «depresión maníaca», este tipo de depresión se caracteriza por cambios inusuales en el estado de ánimo y la energía. Aunque no es tan común en los jóvenes, la condición con frecuencia comienza con un episodio depresivo durante la adolescencia.

Trastorno distímico. Esta es una depresión más leve pero más crónica, también conocida como distimia. Es una depresión de bajo nivel que se siente la mayor parte del día la mayoría de los días, y continúa durante años. En los adolescentes, la duración promedio es de cuatro años, lo que significa que pasan prácticamente toda su adolescencia en un estado deprimido.

Trastorno depresivo mayor. El TDM es una depresión grave que en los adolescentes dura de siete a nueve meses en promedio. Tiene muchas similitudes con la depresión adulta –la tristeza, el pesimismo, el sueño y la alteración del apetito–, pero en otros aspectos es distinta (por ejemplo, los síntomas de ansiedad y la irritabilidad son más comunes en adolescentes deprimidos que en adultos).

Los adolescentes frecuentemente tienen la forma «atípica» de TDM. Esto se caracteriza por ser demasiado sensible al entorno y responder a interacciones negativas percibidas, con síntomas opuestos a la imagen «clásica» (es decir, comer en exceso o dormir demasiado, en lugar de muy poco).

NOTA: La depresión doble es una combinación de trastorno distímico y trastorno depresivo mayor, una depresión que es a la vez grave y crónica.

Determina si tu hijo está deprimido

Haz estas preguntas relacionadas con el comportamiento de tu hijo y obtendrás una idea de si él o ella están deprimidos. 1. ¿Está él o ella siempre triste o de humor irritable? 2. ¿Ha perdido interés en algo que antes disfrutaba? 3. ¿Has notado un cambio significativo en sus patrones de alimentación? (Parece haber perdido su apetito, o está consciente en exceso de su figura.) 4. ¿Tu antiguo «madrugador(a)» ahora duerme mucho más tiempo? 5. ¿Tiene problemas para concentrarse en proyectos que nunca antes habían sido un problema? 6. ¿Ha comenzado recientemente a expresar sentimientos de inutilidad o culpa inapropiada? 7. ¿Teme a la muerte? 8. ¿Experimenta aburrimiento excesivo? 9. ¿Es propenso a ataques repentinos de gritos, quejas, irritabilidad inexplicable o llanto? 10. ¿Ha comenzado frecuentemente a quejarse de dolencias físicas vagas o poco específicas?

Si algo en la lista se aplica a tu hijo(a), puede que esté lidiando con depresión. ¡Busca apoyo hoy mismo!

Adolescentes varones y mujeres pueden experimentar la depresión de manera diferente

Los hombres son más propensos a sufrir de depresión persistente.

En comparación, los hombres deprimidos también son más propensos a sufrir graves consecuencias, como el abuso de sustancias y el suicidio

(según el neurocientífico Dr. Jie-Yu Chuang, investigador de la Universidad de Cambridge y autor del estudio) Las mujeres corren un mayor riesgo de heredar depresión Hay varias razones posibles para esto, incluyendo problemas de imagen corporal, fluctuaciones hormonales y factores genéticos. Las mujeres la depresión tiende a ser más episódica.

Hasta ahora, la mayoría de los investigadores se ha centrado en la depresión en las mujeres, probablemente porque es más común en ellas.

DEPRESIÓN ADOLESCENTE

MARV PENNER

Así está el asunto

Todos se llegan a sentir de bajón en algún momento de la vida, especialmente durante la adolescencia. Pero a veces, esos sentimientos cruzan la línea hasta convertirse en una depresión seria. La depresión viene en diferentes tipos y tiene una variedad de causas. La depresión endógena es causada por factores biológicos: hormonas, química del cerebro o infecciones. La depresión reactiva viene como resultado de una pérdida real o imaginaria, y usualmente dura algunos meses. La depresión neurótica es una depresión a largo plazo que se desarrolla a partir de un intento de escapar de otras emociones. Sin importar el tipo, los desórdenes depresivos, siempre incluyen estados de ánimo tristes o irritables, o bien una pérdida de interés en la vida. ‘ La depresión es llamada «la gripe de las enfermedades mentales» ‘ A través de la historia, la depresión se ha tratado con remedios tales como latigazos, flebotomía, exorcismo y baños tranquilizantes. Los medicamentos antidepresivos, se desarrollaron en la década de 1960, y hoy en día hay más de 16 variedades de antidepresivos disponibles en el mercado. ‘ Las manías depresivas, o el desorden bipolar, son diagnosticados cuando los períodos de manía (hiperactividad, estado de ánimo elevado, y a veces irritabilidad) se alternan con depresión. A menudo, estos dos estado de ánimo ocurren simultáneamente.

Dónde empezar

Hablando estadísticamente

‘ En niños y adolescentes, un episodio depresivo dura en promedio de siete a nueve meses. La mayoría de jóvenes con depresión tienen episodios recurrentes. ‘ 20-40 por ciento de los jóvenes deprimidos caen de nuevo en depresión en un período de dos años, y 70 por ciento, recaerán durante su vida adulta. ‘ 20-40 por ciento de adolescentes con depresión, eventualmente desarrollan desorden bipolar. ‘ La depresión, incrementa en 12 veces el riesgo de suicidio en adolescentes. ‘ 20 por ciento de adolescentes en general, tiene problemas emocionales. ‘ Un tercio de adolescentes que asisten a clínicas psiquiátricas sufre de depresión. ‘ 20-25 por ciento de adolescentes varones reportan tener estados de ánimo depresivos. ‘ 25-40 por ciento de jovencitas reportan tener estados de ánimo depresivos.

¿Sabías que...?

‘ Después de los 15 años, la depresión es dos veces más común en señoritas y mujeres, que en jovencitos y hombres.

LO QUE SÍ DEBES HACER…

‘ Ayudar a los adolescentes a reconocer que tienen un problema. ‘ Animarles a hacer un inventario diario de actividades de autocuidado, y animarles a que lo practiquen. ‘ Establecer comunicación con otros en una red de apoyo para adolescentes. ‘ Retarles cuando expresen desesperanza. ‘ Tener empatía con sus sentimientos. ‘ Enfatizarles que la depresión es algo que se puede tratar. ‘ Animarles a hacer ejercicio físico.

LO QUE NO DEBES HACER…

‘ Decirle a alguien depresivo que «salga de ese estado» o que «se anime». No esperes que puedan simplemente sobrellevarlo sin ayuda. ‘ Usar juicios críticos o que los avergüencen. ‘ Ignorar o minimizar intentos o pensamientos suicidas.

Marv Penner @marvpenner

Es un autor experto en ministerio juvenil con más de 30 años de experiencia. Es director de un departamento de ministerio juvenil y familiar en Canadá, y del centro canadiense para investigación de adolescentes. Fue director de la red académica de Youth Specialities.

This article is from: