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Porrazos
from Joaquin May 2021
Why Fathers Day Plays Second Fiddle At Most Mother’s Day Celebrations
Fathers Day?(¡Qué Padre!)
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andy porras, sacramento, ca
remember your very first and official Fathers Day celebration?
When you become a Father, you enter something like a special club. You don’t need a secret handshake nor do you have to wear crazy-looking headgear. However, you can feel an acknowledgement and if you’re lucky, you’ll also feel appreciation.
Don’t look now but another one is creeping up on us Dads (or Granddads). But it’s the first one that you keep going back to and the way it felt to tell the world you were a Dad. A Father. A man with a wife and a first child.
My first one came as we moved from Houston to brownsville, where I had been hired as a reporter. My wife took a job teaching at a parochial school. Our first child, a daughter, and us ended up living in that city’s low income housing projects. Years later, Jennifer Andrea would warn her friends not to mess with her because she used to live in the projects!
Another one caught us in san Jose then L.A. and Stockton followed and, finally, Sacramento. That same little girl, when a junior high school secretary sarcastically remarked if her family were migrants, calmly looked her in the eye and told her that her family was indeed a migrant one.
“We’re Media migrants!” she said as she skipped away. i learned long ago that dads are not as ‘admired’ as moms on their day. it was no great mystery. nor was it a sin. Any dad worth his weight in, eh, gifts knows this.
But do remember (or learn) this: in a commercial society like ours that has desecrated even the birth of Christ in the name of profit, what can we expect?
Ask your children what Memorial Day or Presidents’ Day is all about and you’re liable to hear about a memorial sale at the local auto mall or a huge discount in honor of George Washington at a big furniture store. Well, the
Por qué el Día del Padre juega un papel secundario en la mayoría de las fiestas del Día de las Madres
¿recuerda usted su primer, oficial, Día del Padre? Cuando se convierte en padre, ingresa a algo parecido a un club especial. no necesitas un apretón de manos secreto ni tienes que usar un estrambótico casco. Sin embargo, uno puede
day set aside to honor dads is no different. or so we thought.
According to some fact finding group, dads today total more than 70 million here in the u.s. not a bad number for those involved in peddling whatever on a special day to ‘honor’ all these millions. Cha-ching!
Dig for more facts and you’ll discover that back in the 1920s and 1930s, a movement arose to shelf Mother’s Day and Fathers Day altogether and create a single holiday, Parents’ Day. Per- continued on next page sentir un reconocimiento y, en ese Día y con suerte, también se sentirá apreciado.
No lo quiero asustar, pero otro de esos Días se está acercando sigilosamente a nosotros los papás (o abuelos). Pero siempre es “el primero” el que nunca se olvida y la forma en que uno se sintió, anunciándole al mundo que eras papá. un padre. un hombre con esposa y un primer hijo.
El primero llegó cuando nos mudamos de Houston a Brownsville, donde me habían contratado como reportero. Mi esposa tomó un trabajo como maestra en una escuela parroquial. nuestro primer hijo —que fue una niña— y nosotros terminamos viviendo en “los proyectos” habitacionales para personas de bajos ingresos de esa ciudad. Años más tarde, Jennifer Andrea advertiría a sus amigos que no se metieran con ella ¡porque había crecido en los proyectos!
El segundo nos pilló en San José, luego nos mudamos a L.A., a Stockton y, finalmente, Sacramento. Esa misma niña, cuando una secretaria de su escuela intermedia le preguntó con sarcasmo si su familia era migrante, Jennifer Andrea la miró con calma a los ojos y le dijo que su familia era, en efecto, migrante.
“¡somos migrantes de la Prensa!” dijo, alejándose.
Aprendí hace mucho tiempo que los papás no son tan “admirados” como las mamás en su Día. no fue un gran misterio. tampoco fue un pecado. Cualquier padre que valga su peso en, eh… ¡regalos! lo sabe.
Pero recuerde (o entérese de) esto: en una sociedad consumista como la nuestra —que ha profanado incluso el nacimiento de Cristo en nombre de las ganancias ¿Qué se puede esperar?
Pregúntele a sus hijos de qué se trata el Día de los Caídos o el Día de los Presidentes y, probablemente, lo único que le dirán es que las concesionarias de autos de la ciudad hacen grandes ofertas o las mueblerías ofrecen grandes descuentos en honor a George Washington. Bueno, el día reservado para homenajear a los papás no es diferente. o eso creíamos.
Según alguna agencia de estadísticas, hoy los papás suman más continúa a la vuelta
Fathers Day
continued from last page haps those in the know thought that families belonged together, commercialism be damned. Ha! the Great Depression, however, undid this plan as struggling retailers and advertisers intensified their efforts to make Fathers Day resemble a “second Christmas”! they mounted campaigns promoting goods such as neckties, hats, socks, pipes and tobacco, golf clubs and other sporting goods, and, of course, greeting cards. shrewd commercial-minded American businesspersons didn’t stop there. When World War II began, PR firms and advertisers claimed that celebrating Fathers Day was a way to honor American troops and support the war effort. Guess they never heard of Rosie the Riveter.
To begin with, Fathers Day was inspired by Mothers Day. Washington state celebrated the nation’s first statewide Fathers Day on July 19, 1910 but you’ll never guess who finally signed a proclamation making the day a federal one that eventually led to Americans spending more than $1 billion in gifts for us each year.
After more than six decades as the special day seen by some as a peripheral event aimed at beefing up store sales, Fathers Day finally came into its own in 1972, when President Richard Nixon recognized it as an official holiday to be marked on the third Sunday in June. it was a long time coming as Mothers Day, the equivalent holiday, had been celebrated since 1913, thanks to President Woodrow Wilson.
I still recall my dad, José, taking me to a lounge he used to frequent after I turned 21. He said he wanted to show me something. He pointed to a fading cardboard stuck on a large mirror: “The best thing a Father can do is teach his Children to love their Mother,” the poster read. i convinced him to buy me a beer and we both toasted Mom. On Fathers Day.
Día de los Padres
viene de la vuelta de 70 millones aquí en los Estados Unidos. No es un mal número para aquellos que se dedican a vender lo que sea en un día especial en “homenaje” a todos estos millones ¡Cha-ching! si escarba un poquito más descubrirá que en las décadas de 1920s y 1930s surgió un movimiento para fundir el Día de la Madre con el Día del Padre en un solo feriado: el Día de los Padres. Quizás aquellos que se estaban dando cuenta pensaron que, si las familias estaban unidas, mandaban al diablo al comercialismo ¡Já!
Sin embargo, la Gran Depresión deshizo aquel plan cuando los minoristas y publicistas que la estaban pasando mal intensificaron sus esfuerzos para hacer que el Día del Padre se pareciera a una “segunda Navidad”. Montaron campañas de promoción de artículos como corbatas, sombreros, calcetines, pipas y tabaco, palos de golf y otros artículos deportivos y, no olvidemos, tarjetas de felicitación.
El astuto empresariado norteamericano con ojo para el negocio no se detuvo allí. Cuando comenzó la segunda Guerra Mundial, las agencias de relaciones públicas y los publicistas afirmaron que celebrar el Día del Padre era una forma de honrar a las tropas estadouniAndy Porras sacramento, ca denses y respaldar el esfuerzo bélico. supongo que nunca oyeron hablar de “Rosie la Remachadora”.
Para empezar, el Día del Padre se inspiró en el Día de la Madre. El estado de Washington celebró el primer Día del Padre en los EEUU el 19 de julio de 1910… pero nunca adivinará quién firmó finalmente una proclamación que convirtió ese día en un festivo federal y que, en la actualidad, lleva a los estadounidenses a gastar más de mil millones de dólares en regalos para nosotros cada año.
Después de más de seis décadas como un día visto, por algunos, como un evento periférico destinado a levantar las ventas en las tiendas, el Día del Padre finalmente se impuso en 1972, cuando el presidente richard nixon lo reconoció como un feriado oficial que se marcaría en el tercer domingo de junio. Hacía mucho tiempo que se celebraba el Día de la Madre, la festividad equivalente, desde 1913, gracias al presidente Woodrow Wilson.
Todavía recuerdo a mi papá, José, llevándome a un salón que solía frecuentar después de que cumplí 21 años. Dijo que quería mostrarme algo. Señaló un cartón descolorido pegado en un gran espejo.
“Lo mejor que puede hacer un
Padre es enseñar a sus Hijos a amar a su Madre” rezaba el cartel.
Lo convencí de que me comprara una cerveza y ambos brindamos por mamá. Eso fue un Día del Padre.
VETERANOS MExICOAMERICANOS Monumentos y Papeles Históricos
un movimiento generado por la muerte de George Floyd que buscaba derribar los símbolos de la opresión contra los afroamericanos se apoderó de California, liderado por nativoamericanos que apuntaban como objetivo a sus opresores. Los monumentos dedicados a los conquistadores y colonos europeos —desde el Padre Junípero Serra (1713-1784), hasta John Sutter (1803-1880)— fueron desfigurados y/o derribados. En ese contexto, el 4 de julio de 2020 en Sacramento, un monumento dedicado a los soldados mexicoamericanos fue desfigurado con grafitis acusándolos de ser “F’ing Colonizers (Pinches Colonizadores).” si bien será difícil determinar quién realmente desfiguró el monumento de El Soldado, podría haber sido un nativoamericano, o un simpatizante o aspirante a serlo. Quienquiera que desfiguró el monumento tiene un conocimiento sesgado y “anti-histórico” del pasado de California —y de quiénes son y quiénes no son los mexicoamericanos.
Ubicado frente al Capitolio, el monumento fue dedicado en 1948 y financiado por las madres y esposas de los soldados mexicoamericanos que murieron luchando en la segunda Guerra Mundial. En mi opinión, para que la acusación de colonizador sea correcta, los soldados mexicoamericanos tendrían que ser descendientes directos de los colonizadores españoles e identificarse con la historia colonial española y sus tradiciones culturales. Yo diría que no es ése el caso de los veteranos mexicoamericanos de la segunda Guerra Mundial.
Aunque anecdótico, los veteranos mexicoamericanos que he conocido han sido más propensos a identificarse con los revolucionarios mexicanos Pancho Villa o Emiliano Zapata, quienes ayudaron a terminar con los residuos de la institución del peonaje que perduraba en el período colonial —luchando contra conquistadores y colonizadores como Hernán Cortés (1485-1547) o el padre Junípero serra.
La acusación de colonizador se ajusta al