3 minute read
Hugo rosas Director general
Por Hugo Rosas, CEM, CMP
Director General de T Organiza
OCVs
Este es el tercer artículo que dedico a las OCVs en esta revista, y en esta ocasión trataré un asunto particular que además me preocupa y sé que preocupa a muchos de mis colegas en la industria de reuniones.
Desde su creación, las OCVs han adolecido de contar con ejecutivos experimentados en el Turismo de Reuniones, principalmente por su alta rotación de personal directivo y operativo y porque muchas veces son usadas de forma política; sin embargo, muchas de ellas han buscado elevar su competitividad a través de la profesionalización y capacitación continúa, hecho que es digno de respeto.
Foto: sugerendo.com edición: starsky Palma
¿Competitivas o competidoras?
No obstante, en la búsqueda de mayores resultados se ha iniciado una distorsión que sale de las normas y buenas prácticas de competitividad, y es el caso COFSA y la OFVC de Guadalajara.
Sin duda la OFVC de Guadalajara ha dado importantes muestras de cómo se debe de manejar este tipo de organismos, durante los últimos años ha realizado una promoción ejemplar y ha ganado muchos y muy importantes congresos internacionales, lo cual sumado a la gran cultura ferial que la ciudad ostenta, mantiene a la “perla tapatía” como un líder de la industria. La misma OFVC, a través de su consejo directivo, decidió en el año 2009 formar la empresa COFSA, en un principio, con el loable fin de que la agencia operadora de los Juegos Panamericanos fuera mexicana y no se quedará tan importante función en manos de una empresa extranjera, tema que se logró con éxito. Lo que llama la atención es que después de 3 años de realizados los juegos, encontramos a esta empresa operando eventos por todo el país y compitiendo contra PCOs, Meeting planners y proveeduría local, pero el problema no es la competencia, el problema es que el 90% de las acciones de la empresa COFSA pertenecen a la OFCV de Guadalajara, una asociación civil que recibe recursos públicos derivados del impuesto sobre hospedaje y que en su conformación legal se clasifica como no lucrativa, por lo que resulta sumamente extraño que a la vez sea propietaria de una empresa lucrativa. Considerando la naturaleza de las OCVs cuyo principal objetivo es la promoción del destino y la atracción de eventos y no la organización de congresos y convenciones, y observando los excelentes resultados que en particular tiene la oficina de Guadalajara, resulta inentendible porqué se da este hecho que claramente representa un conflicto de intereses y poca transparencia en las prácticas de competencia. No está mal que COFSA sea una organizador de eventos, al igual que muchas empresas que surgen a diario en nuestro país, pero no se vale que sea un competidor prioritariamente respaldado por los impuestos públicos que recibe la OFCV. Si quiere competir que lo haga en el mismo terreno que lo hacemos todos.
Hace algunos años, se demostró que esta práctica puede propiciar incluso corrupción, tal fue el caso donde el Gobierno Federal asignaba directamente todos sus eventos a Turissste, sin pasar por procesos de licitación y así permitir que la agencia turística del estado manejara todo a discreción.
El riesgo podría multiplicarse si otras ciudades replican este modelo, ya que puede llevar a prácticas poco éticas, lo que afectaría gravemente a toda la cadena productiva. No se debe ser La Asociación PCO Meetings México ya ha externado de manera formal juez y parte. y directa su desacuerdo ante el Secretario de Turismo del Estado de Jalisco y ha dirigido una carta al propio gobernador, donde se le solicita la corrección de esta irregularidad desde el pasado mes de mayo, sin embargo aún no se ha tenido respuesta alguna. Ojalá que las OCVs sigan más ocupadas en profesionalizarse para ser más eficientes en la promoción de sus destinos, ganar más eventos, desarrollar más proveeduría especializada y facilitar el trabajo de los organizadores de eventos, fomentando la competitividad en lugar de convertirse en la competencia desleal de sus propios clientes.