EL TIEMPO

Por Arturo Arriaga A.

Es muy interesante meditar sobre el tiempo.

A lo largo de mi educación formal y el haber tenido infinidad de maestros, entre ellos filósofos y físicos algunas ocasiones nos daban definiciones de lo que es el tiempo, sin embargo, la que más recuerdo y concuerdo fue la que nos dio un maestro en la escuela secundaria: El tiempo es una sucesión de instantes, nos dijo.

El tiempo es una invención humana y nos afecta queramos o no.

A ese invento, por cuestiones prácticas le hemos asignado unidades de medición y cada una de ellas tiene su historia.

El año, es el tiempo que tarda nuestro planeta en dar una vuelta o ciclo completo alrededor de sol, y tardamos 365 días en hacer ese recorrido. No es casualidad que un círculo se divida en 360 grados, por redondeo.

Cada uno de esos días lo hemos dividido en 24 partes, llamadas horas. Y la razón es que en la antigüedad durante la noche nuestros ancestros contaban el tiempo de la oscuridad en función de 12 constelaciones que iban apareciendo en el horizonte nocturno una a una como relojes. Y así como medían el tiempo de la oscuridad se les ocurrió utilizar la misma unidad de tiempo durante la luz del día utilizando otras 12 horas, para así hacer los días de 24 horas.

Las horas se dividieron en 60 minutos debido a que utilizaron el sistema sexadecimal que es un múltiplo de 360 grados, la vuelta completa de un círculo, un año terrestre análogo, y así en forma similar los segundos.

Los meses se hicieron de 28 días debido al ciclo lunar y eran 13 meses en una año, aunque en la actualidad los hemos alterado en 28, 29, 30 o 31 días y son 12. Las semanas tienen 7 días porque representan cada una de las cuatro fases del ciclo lunar: Cuarto creciente, luna llena, cuarto menguante y luna nueva. Interesante ¿verdad?