Livingup. Adultos Mayores

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del 14 de agosto

No.019

al 30 de septiembre

Adultos +60

pp—016  La salud física, social y emocional de los adultos mayores es uno de los mejores indicadores para mostrar la efectividad de un proyecto de país. No es casualidad que en México, los mayores padezcan de enfermedades crónicodegenerativas, no exista acceso universal a la seguridad social y muchos dependan económicamente de sus familiares. Cambiar el modelo actual es procurar un mejor futuro a los adultos mayores que serán nuestros jóvenes.


«  Cuando me dicen que soy demasiado viejo para hacer una cosa…


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Mesa Escritorio

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#Beneficios De cuando tienes más de 60

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#PorSaludMental Adultos mayores & millenials, ¿brecha generacional?

Datos duros 008  #EnElMundoActual Rompiendo mitos de la tercera edad en la mujer

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Diálogo

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Portada

Sueños del futuro e historias del pasado

adultos 010 Los mayores en

022 #Entrevista Olivo 024 Internet, redes sociales y tercera edad

México

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Postre

s e p t i e m b r e

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Para los mayores

Game of Time

036 #EntreComidas

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038 #YoGlotón

#Tecnología

028 #Mancha

Los nuevos héroes

#Finanzas

Una vejez plena

Inteligencia Artificial y Computacional

Tradición es pertenencia, es identidad

Editorial

M Una cosa es clara, lo que hicimos mal en el pasado nos llevó a este presente. La mala educación, la poca cultura en materia de planeación social, el escaso acceso al deporte, al entretenimiento y la precariedad laboral, trajeron como consecuencia una generación de adultos mayores que padecen más que disfrutan esa etapa de la vida, que, según la promesa del sistema económico, debe ser para el goce, la reflexión y el bienestar, para vivir en plenitud. Lo grave, más allá de emergente presente, es que el futuro inmediato y el horizonte medio, anuncia un destino aún peor: México tiene jóvenes obesos, en el subempleo y con el mayor consumo de sustancias adictivas de su historia. La promesa –sustancia del modelo económico actual– de estudiar-trabajar mucho en la juventud para asegurar una mejor edad adulta se cumple cada vez menos, y corre el riesgo de extinguirse, no así los ritmos innobles de trabajo al que se ven obligados jóvenes que no tienen prestaciones laborales ni seguros médicos y laboran en condiciones multitask en las que el estrés, la mayor enfermedad de nuestra época, es el estilo diario. Nos dicen que la gran amenaza de la economía nacional es el crack de los sistemas de salud y pensiones (que ya está haciendo sus primeros crujidos), y los especialistas proponen privatizaciones o alternativas de atención, pero no se les ocurre la prevención como antídoto. La salud de nuestros mayores es asunto de todos, y es síntoma del fracaso del Estado mexicano.

Los editores

040 #Esquina George Foreman

d i r e c t o r i o

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l e g a l e s

Coral Quintero dirección general — Zarina Ortíz comercialización — Diego Mejía dirección editorial — Diego Cabral redacción & contenidos — Cecilia Moreno cuidado editorial — Erandi Torres Shulz y Rafael López de la Cerda Velarde \ Lola Estudio fotografía  ▶  LivingUP®, Año 2, No. 19, 2017 es una publicación mensual editada y distribuida por Junta Letras, Av. Palmas 830 int. 202 AB, Lomas de Chapultepec, Miguel Hidalgo, 11000 Ciudad de México. correo electrónico juntaletras@gmail.com  ▶  reserva de derechos al uso exclusivo 04-2015-082511373100-102, expedido el 25 de agosto de 2015; otorgado por la Dirección de Reservas de Derechos del Instituto Nacional del Derecho de Autor.  ▶  impreso por A&E Herencia Gráfica S.A. de C.V., Trabajo y Previsión Social 419, Federal, Venustiano Carranza, 15700 Ciudad de México  ▶  Este número se terminó de imprimir en junio de 2017, consta de un tiraje de 5000 ejemplares. Las opiniones expresadas por los autores no reflejan necesariamente la postura de la dirección editorial de esta publicación. Queda estrictamente prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos e imágenes sin previa autorización del Instituto Nacional del Derecho de Autor. Impreso y hecho en México. comercialización ventas@livingup.com.mx — teléfono 5005706


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#Escritorio

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texto Coral Quintero

“¿Qué se puede hacer en ochenta años? Probablemente, empezar a darse cuenta de cómo habría que vivir y cuáles son las tres o cuatro cosas que valen la pena.” —Ernesto Sábato

Nuestros viejitos son aquellas personas que nos acompañan en la última etapa de su vida para regalarnos, con los años que llevan de recorrido, sabiduría, amor y enseñanzas, que nos permiten revalorar nuestra vida, para replantearnos el tiempo –lo más preciado– y dar un poco más de ese esfuerzo cotidiano.

De los viejitos admiro su capacidad para enfrentarse a nuevos retos y vencer cada día adversidades físicas y psicológicas, estoy convencida que cada experiencia que transmiten deja marcas en quien se toma el tiempo para escuchar, entender y hallar en sus historias un ejemplo a seguir.

Son fuente de inspiración, ejemplo de fortaleza y dedicación, con la que construyeron un patrimonio que les permitió sacar adelante a su familia –lo más preciado–, su legado. Ellos son el cimiento que nos ha permitido erigirnos aquí, cargados de sueños, de ganas de dar lo mejor, de trabajar por un futuro próspero, también para los que vienen, y ¿por qué no?, intentar dar un paso más grande en este camino llamado vida. La falta de atención social y familiar –la constante desvaloración que tienen las canas– son prejuicios que viven y sufren muchos de aquellos viejos olvidados, desatendidos y solos, que se contrastan con el valor que le pueden generar a la sociedad, que no siempre se los permite. Actualmente se han hecho múltiples campañas en pro de las personas de la tercera edad, se les llama adultos en plenitud, ¿en plenitud? 64 por ciento de los ancianos encuestados refieren que en México no se les respeta, y 8 de cada 10 consideran que sufren abuso o suelen ser ignorados (Encuesta “Vejez: ¿Cómo la vemos? ¿Cómo la enfrentamos?, Centro de Opinión Pública, UVM, 2017). Si esta es la percepción que tienen nuestros adultos mayores, no estamos hablando de plenitud. El respeto, la atención y el sentirse valorados son un asunto de dignidad. Es cierto que la vejez es el momento de la vida en que se puede disfrutar plenamente, es el tiempo ideal para estar con la familia con una responsabilidad diferente, para cumplir con las actividades que anhelaron y que por diversos motivos no les fue posible realizar, para contar y escuchar, para participar en la comunidad. Después de todo lo que han hecho durante la adolescencia y adultez, recordemos que muchos de ellos han sido el soporte de toda la familia, dándonos las herramientas que hoy nos constituyen: es lo mínimo que deberían vivir. Ser adulto en plenitud se vuelve más un deseo de vivir plena y dignamente, para disfrutar cada día. Para mí, el hecho de contar con mis abuelos, “mis viejos”, ha sido crucial, sin duda esa capacidad de observar, de darme tiempo para voltear a los detalles, la mecánica, la compasión, el amor incondicional y el apoyo, el disfrutar las pláticas eternas y placer de los alimentos más sencillos, son marcas que me permiten observar el horizonte y comprender que gran parte de lo que soy se lo debo a ellos; a quienes han puesto un farolito en el camino –dos arbolitos–, esa luz que me guía y me da fuerza para lograr lo que alguna vez me he propuesto: “con raíces tan firmes es imposible no aspirar al cielo”. Yo, lejos de las modas y los buenos términos, prefiero llamarles “mis viejos” y aprovechar cada momento para salir a tomar un cafecito con ellos, caminar, escucharlos y regalarles risas y anécdotas nuevas. Estos son los recuerdos que valen la pena… y ¿tú?, ¿cómo ves a tus viejos? ¿Los disfrutas, les aprendes, los vives? En vida, siempre es mejor en vida…


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#DatosDuros

¿De qué se trata ser mayor?

Fuera de la visión estereotipada, las tercera edad debería ser cuidada como una etapa creativa de la existencia. En general se tiene más tiempo libre y mayores conocimientos, quizá la pregunta que deberíamos hacernos es ¿cuánto talento mayor estamos desperdiciando?

¿Cuántos son, cómo viven, cuánto gastan, cuánto invierten en salud los adultos mayores?

En México son ciudadanos de segunda que sólo importan en días previos a las jornadas electorales de todos los niveles en toda la geografía nacional. Cambiar la política pública hacia los adultos mayores no sólo se trata de justicia social, sino de una posibilidad de apertura de un nicho de mercado con necesidades y gustos muy particulares y definidos. Cuando se convirtió en el campeón mundial más viejo de la historia, George Foreman rompió y confirmó el mismo mito: el deporte de alto rendimiento es asunto de la primera adultez, porque fue excepción: su récord sigue vigente. Sin embargo, cambió la manera de ver a los deportistas en retiro y promovió los retos físicos para los mayores… y también los intelectuales, informáticos y emocionales.

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#Beneficios

Como bien se sabe, uno de los principales retos para los adultos mayores en nuestro país es la situación económica que éstos enfrentan a la hora del retiro. Ya otro de nuestros artículos en esta revista nos da los números negros: la mayoría de los jubilados en México (87%) reciben una pensión de hasta dos salarios mínimos. ¿Cómo estirar los pesos para vivir plenamente esta etapa de la vida? Si bien nuestro sistema pasado y el actual de jubilación –tuvimos una reforma en 1997– están lejos de ser lo que deberían o fueron, existen ciertas instituciones gubernamentales, además de asociaciones civiles y empresas del sector privado que buscan apoyar con programas de distinta índole o descuentos directos a este sector vulnerable de la población; no olvidemos, este es un grupo de personas que ya trabajó toda su vida, que sacó adelante familias enteras, que sufre la mayor cantidad de enfermedades per cápita y, con todo, hoy vive una precaria situación. Sin embargo, aunque nada de esto cambie a menos que se encaucen serias, muy serias, políticas públicas al respecto, aquí les presentamos algunos tips, sabías qué, y consejos que te permitirán a ti, adulto mayor, disfrutar de alguno que otro beneficio sólo por contar con más de 60 años de edad. Es justo y muy necesario. ¿Conoces el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam)? El Inapam es el organismo público federal, descentralizado, rector de la política nacional a favor de las personas adultas mayores, y tiene por objeto general coordinar, promover, apoyar, fomentar, vigilar y evaluar las acciones públicas, estrategias y programas que se deriven de ella, de conformidad con los principios, objetivos y disposiciones contenidas en la Ley de los Derechos de las Personas Adultas Mayores. Pues bien, como adulto mayor, te conviene inscribirte al Inapam porque existen numerosos comercios y empresas asociadas que brindan descuentos que van del 3 al 100 por ciento en sus productos o servicios a aquéllos que presenten su credencial del Instituto. Entre estos beneficios puedes encontrar descuentos en productos médicos, servicios médicos generales y auxiliares de todo tipo, así como análisis, transporte, artículos de vestimenta, servicios veterinarios, spa, servicios jurídicos y legales, centros recreativos, y un largo, largo, etcétera. Y dado que estos servicios varían de ciudad en ciudad, aquí te dejamos la liga a su dirección electrónica para que explores todos aquellos comercios y proveedores inscritos para la Ciudad de México. Inscríbete al Inapam y no dejes de disfrutar los beneficios que esto otorga. http://www.inapam.gob.mx/es/INAPAM/Beneficiarios_Cd_de_Mexico_gobmx

Pero ahí no para la cosa…


al 30 de septiembre 005 texto Cecilia Moreno ig @cesmoreno

Misión del Inapam

Promover el desarrollo humano de las personas adultas mayores, brindándoles atención integral para alcanzar niveles de bienestar y alta calidad de vida en el marco de una sociedad incluyente.

¿Sabías que… 1…

todas las líneas de autobuses foráneos te otorgan 50 por ciento de descuento en cualquier viaje?

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Visión del Inapam

Consolidar al Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores como órgano rector de la política pública nacional a favor de las personas adultas mayores, así como fortalecer sus derechos y atención integral a través de los modelos, programas y acciones en coordinación con los tres órdenes de gobiernos, la sociedad y la academia.

en la Ciudad de México el transporte público como Metro, Trolebús y Metrobús es gratis para ti?

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tienes descuento en diversos trámites gubernamentales, como los notariales? ¡No olvides hacer tu testamento!

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tienes descuentos en todos los museos y actividades culturales promovidas por el gobierno y las universidades públicas?

5… 6… 7…

la mayoría de las aerolíneas también te otorga descuentos en vuelos nacionales e internacionales?

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tu predial cuesta sólo 44 pesos bimestrales, si el valor catastral del bien inmueble es menor a 1’957,786 pesos?, ¿y que si es mayor, podrás tener un 30 por ciento de descuento?

9…

la mayoría de las aseguradoras también te ofrece diferentes descuentos en sus servicios? Qualitas, por ejemplo, asegura tu automóvil con un ahorro de 30 por ciento.

10…

existen las Casas del Jubilado y Pensionado? Lugares especiales de convivencia que promueven diferentes e interesantes actividades, clases y servicios especiales (como de turismo) para tu sector.

11… 12…

tienes descuento en todas las cadenas de cine?

el Turibús te otorga 50 por ciento de descuento en todos sus paseos?

todos los supermercados tienen una fila especial para ti? ¡No te canses! algunas universidades privadas como la Universidad Latinoamericana (ULA) te otorga un descuento de hasta 50 por ciento si deseas emprender más estudios?

En fin, como podrás ver, estos son unos destellos de luz entre tanta oscuridad, que no sólo te mereces, pero que debes aprovechar para fomentar una cultura del envejecimiento en las nuevas generaciones y para obligar al gobierno a no aflojar las políticas públicas que fomenten y promuevan una mejor calidad de vida entre nuestros adultos mayores.


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#PorSaludMental

Adultos mayores & millenials, ¿brecha generacional?

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Lucía Cruz es médico psiquiatra, con dos subespecialidades en psiquiatría infantil y de adolescentes, y en adultos mayores (psicogeriatría). Con amplia experiencia en salud mental, nos habla de las principales dificultades que enfrentarán los millenials y las personas de la tercera edad. Esta plática es un encuentro entre generaciones, una pausa para darse cuenta de que pasado y futuro convergen en este momento, y la oportunidad para celebrar lo que se ha logrado y hacer un plan de vida –sin importar la edad– para el futuro, sobre todo en materia de salud mental, tópico del que a menudo se estigma a la población de adultos mayores, aunque la problemática de enfermedades mentales se presente cada vez con mayor impacto en adultos jóvenes. Ver hacia el futuro Dra. Lucía Cruz: Los adultos jóvenes suelen tener padecimientos relacionados con ansiedad y depresión. Si consideramos que el promedio de atención –desde que inicia un padecimiento psiquiátrico hasta que se atiende– es de aproximadamente siete años, en ese tiempo ya puedes tener cierto deterioro en las funciones cognitivas, eje-

texto Diego Cabral @padiegoc

cutivas y cognitivas en general, lo que va a repercutir en tu desempeño global: laboral, familiar, académico, etcétera. Actualmente, la esperanza de vida está aumentando por la atención especializada con la que contamos, sin embargo, si no te atendiste un trastorno por ansiedad o depresión, vas a tener mayor probabilidad de desarrollar algún tipo de demencia, riesgo que aumenta con la edad. Si nosotros vamos juntando lo que se va deteriorando, muy probablemente cuando seas anciano vas a seguir con depresión o ansiedad, o vas tener algún tipo de demencia y eso va a mermar tu funcionalidad y a requerir mayor atención; es decir, vas a ser una persona que necesite asistencia, ya sea médica o familiar. Entonces, el panorama que tenemos hoy en día a futuro resulta muy triste si no hacemos alguna intervención temprana. El foco rojo principal para identificar que no estás cuidándote es cuando te das cuenta que no estás funcionando bien en la actividad que haces regularmente o en mayor tiempo; por ejemplo, cuando la haces en el trabajo no rindes en tus actividades: cuando ya no te puedes concentrar, cuando en casa ya no haces las actividades que cotidianamente hacías porque se te olvidan o pierdes el interés o no puedes organizarte. “Sí sé qué hacer pero no sé cómo organizarme, entonces termino sin hacer…” Esta frase es muy común en consulta, aunque tengan interés no saben cómo llevarlo a cabo, cómo organizarse. Esta generación (de adultos jóvenes millenials) tiene la ventaja de que son muy activos, creativos, emprendedores; pero lo que les falta es constancia, son muy fluctuantes y cambian rápidamente de un interés a otro. La desventaja de alguien que no es constante

es que rápidamente puede caer en frustración, por lo que es más probable que desarrolle algún trastorno relacionado con ansiedad o con abuso de sustancias, que también es muy frecuente actualmente. ¿Cómo cuidarse en esta ciudad cuando el tiempo no alcanza? Dra. Lucía Cruz: Lo ideal es que una persona debe destinar un momento al día para poner pausa al estrés; un descanso para ver por sí mismo, el tiempo suficiente para que pueda funcionar en el resto de sus actividades, de tal modo que no se sienta presionado, que no se sienta con lentitud. ¿Cómo saberlo? Por tus horas de sueño, aunque varían en cada individuo, lo recomendable sigue siendo ocho horas diarias de sueño. Otra recomendación importante es que tengan por lo menos un momento de esparcimiento diario: “Este momento es para mí, hago meditación, hago ejercicio, escucho mi música favorita, sin estar haciendo mis pendientes del trabajo”. Los padecimientos para esta generación van a ser distintos a los que actualmente padecen los adultos mayores. Creo que van a estar ligados a la impulsividad y además muchos no tienen el soporte que a los anteriores les daba la religión. Una de las tradiciones que ayudan mucho a los adultos mayores es la religión, la creencia de que existe alguien que los cuida, que los quiere; los millenials ya no tienen eso. ¿Adultos en plenitud? Dra. Lucía Cruz: Los adultos mayores suelen tener algún padecimiento de tipo crónico, físico, como diabetes o hipertensión; desgraciadamente las atenciones que se les dan en el primer nivel (medicina general) son muy deficientes. Así que una hipertensión que se


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pudo haber atendido tempranamente puede resultar en padecimientos más delicados como cardiopatías, enfermedades renales y deterioro visual. Si hablamos de la diabetes – que trae muchas más complicaciones– el costo para la atención por complicaciones va a aumentar. Estas son enfermedades crónicas que te dan síntomas que ocasionan molestias y por lo tanto se atienden. Sin embargo, las enfermedades mentales, como no se ven, y muchas de ellas no se comprueban hasta que se encuentran muy avanzadas, tienen todavía más complicaciones, porque se atienden tardíamente. Pensando que un adulto mayor tiene un problema físico y también tiene un problema mental, como la depresión –por la que se aísla, se desatiende, se descuida–, obviamente lo físico no va a estar muy bien atendido y el pronóstico va a ser peor. En un estudio que se hizo recientemente en una clínica familiar especializada del IMSS en el Estado de México, con atención a usuarios con diabetes, la mitad tenía síntomas depresivos y eso mermaba su atención respecto a su enfermedad metabólica. En el caso de los adultos mayores, los focos rojos no los identifican fácilmente ellos mismos, a menudo tienden mucho al aislamiento, ellos mismos dicen: “empecé por no sentirme útil, entonces como ya no sirvo, ya no busco a mis hijos, a mis nietos, ya no participo, ya no les llamo, ya no tengo nada qué ofrecerles”. Entendamos que son una población más vulnerable, en el sentido de ser fácilmente víctimas, por ejemplo de mal-

trato psicológico o económico. Yo creo que siendo una población más vulnerable deberíamos tener más cuidado cuando se aíslan, no comen o descuidan su cuidado físico y no se dan cuenta; casi siempre los que reconocen que algo no va bien son las personas que conviven con ellos: un vecino, un amigo, la personas que forman parte del mismo grupo. ¿Cómo fomentar la salud en ellos? Dra. Lucía Cruz: Los adultos mayores también necesitan tiempo para ellos, cuando tienen grupos de amigos, cuando se reúnen constantemente, cuando están integrados a un grupo con una actividad de esparcimiento para ellos como la pintura, la música, es más difícil que se aíslen, porque el mismo ambiente los va jalando. A diferencia de cuando nada más están dedicados a la familia, la misma familia favorece a que se vayan aislando, porque como “ya no les son útiles, ya no los buscan tanto”. Tendríamos que hacerle ver al adulto mayor que siempre es útil: útil para sí mismo. El tener actividades, prepararse su comida, ir al cine, hacer ejercicio es de gran utilidad para su salud. Quitarnos el estigma de “si no le sirvo a alguien entonces no soy útil”. Una persona que dedica tiempo a sí misma se conoce más, entonces está viendo por su salud; cuando deja de hacer esas cosas que le gustaban es común que se pregunte: “Algo me está pasando, por ejemplo, voy al cine y me quedo dormido, ya no disfruto las películas”. Si se da cuenta que algo le está pasando

se atiende oportunamente, porque reconoce un cambio en él que no le agrada. A esta generación, ¿por qué aspirar a llegar a ser adulto mayor? Dra. Lucía Cruz: Creo que vale la pena ser viejito, porque en este momento tú puedes darte cuenta que tienes ciertas necesidades emocionales que puedes cubrir hoy y prevenir para que no tengas todas estas complicaciones que se ven venir. Yo veo como área de oportunidad el que no tengan estas pensiones de las que antes gozaban, porque algo que pasa con los adultos mayores es que pensaban que ya tenían la vida resuelta y no tenían una planeación como tal, esperaban a que llegara la jubilación y muchos se deprimían, porque ya no sabían qué hacer con su tiempo. Yo creo en ver esto como área de oportunidad porque te mantienes activo, te mantienes buscando en qué ocuparte, hacer eso te da también un motivo, una esperanza de hacer algo, independientemente de la edad que tengas. La tercera edad no es el punto en el que ya puedes descansar, todavía puedes ser productivo y aportar a la sociedad, a la familia y a ti mismo, siendo más creativo. ¿Qué pasa con una pequeña parte de adultos mayores que sí planearon su futuro? Ahora los ves viajando, pagando cursos de pintura, de baile; porque toda la vida quisieron hacer eso y ahora tienen el tiempo para hacerlo. Si no lo planeas con un aporte económico constante no te va a ir bien. El futuro debe ser una motivación más que algo que te pese.

ilustración. 123rf


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#EnElMundoActual

Rompiendo mitos de la tercera edad en la mujer

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texto Emma Laura Rubio @hadacosquillas

ucho se habla en torno a la mujer y es que en verdad es un tema apasionante y lo digo desde una fuente muy auténtica que soy yo misma. Como mujer de ya un poco más de cuarenta años puedo hablar sobre lo maravilloso que es ser una mujer que vive en un mundo en el que las damas hemos cobrado fuerza, y hemos trabajado un poco más en conjunto por la igualdad y la equidad de género (temas que requieren de mucha tinta). Sin embargo, es muy limitado lo que se habla en torno a la mujer de la tercera edad. El día 29 de septiembre se celebra el Día Internacional del Anciano. En 1975 en la Ciudad de México se llevó a cabo la primer conferencia de las Naciones Unidas para la mujer, posteriormente fueron las de Copenhague, Nairobi y Beijing. Como ya se sabe, dichas conferencias han contribuido significativamente a legitimar la preocupación por el desarrollo económico y social de la mujer, así como por su incorporación en ámbitos en los cuales antes no se nos había dado cabida. Dentro de este contexto, las mujeres que ya se encuentran en la tercera edad son las que más han sufrido a pesar de las mencionadas conferencias y de la Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento de 1982, donde existen párrafos alusivos a la mujer envejeciente que hacen hincapié en los aspectos humanitarios y de desarrollo de la ancianidad. Sin embargo, en pleno 2017 aún son muy pocas las políticas públicas que existen en el mundo en torno a la mujer de la tercera edad. Ahora bien, ¿en México cómo se vive el proceso de la mujer anciana? Muchas son las que terminan en la calle u olvidadas por los propios familiares. Estamos en una sociedad en la que ser mujer no es cosa fácil; tenemos que aprender a cuidar de nosotras al grado de que tenemos que luchar por demostrar que la violencia de ningún tipo es legítima ni justificable. Vivo en un estado de la República en el que hay alerta de género y les juro que esto despierta mucho la conciencia con respecto al autocuidado y la autoprotección. ¿Es justo vivir de este modo?, ¿temerosas, a la defensiva ante cualquier mirada masculina? En la mayoría de los casos hasta somos culpadas por haber sido violadas. Lamentablemente, esta es la realidad en nuestro país y créanme que lucho porque las mujeres no caigamos en un discurso desgastado de victimización, porque no reaccionemos de modo violento ante la violencia. Desapruebo totalmente esas actitudes de “revanchismo”, esos modos que hoy se han categorizado como “hembrismo”; sin embargo, insisto, ¿dónde y de qué modo se procura a la mujer de la tercera edad? Ciertamente, se ha buscado validar los derechos de la mujer en general, pero es necesario que hagamos conciencia que las necesidades de una mujer mayor van cambiando y que esa igualdad y equidad que buscamos en ámbitos como el laboral y el familiar en una mujer que ya tiene edad avanzada cambian; puesto que sus necesidades cambian, sus prioridades también, y éstas engloban lo que implica calidad de vida y hay que tener claro que cuando se habla de calidad de vida no existen estándares universales pero sí necesidades básicas como: nutrición, vivienda digna, salud, educación, seguridad y recreación. ¿Es acaso tan complicado obtener esto? Seguramente si usted está leyendo esto dirá que no, pues para tener acceso a este texto se requieren ciertas condiciones que no implican necesariamente una necesidad básica; pero déjeme decirle que hay mujeres de edad avanzada que no tienen cubiertas estas necesidades, y las causas son que se quedan solas, viudas y muchas de ellas, al no haber sido independientes y autosuficientes económicamente durante su vida adulta se quedan a merced de la bondad humana. En México, de acuerdo con el Conapo, hay 13 millones de personas adultas mayores: 46.2 por ciento son hombres y 53.8 mujeres, las cuales en promedio viven 6 años más que los hombres según estudios realizados. Por eso no es de extrañar que las féminas asuman más la labor de cuidar a adultos mayores a parte de sus propias labores. De un tiempo a la actualidad, México ha estado experimentado un cambio demográfico, pues junto con el envejecimiento acelerado de su población, vive también un proceso de feminización del envejecimiento, lo que plantea serias disyuntivas para la atención de este sector. Según estimaciones del Conapo, en 2030, el país tendrá una población de 20.4 millones de adultos mayores (15% de la población total). Estos datos nos llevan a plantearnos la necesidad de generar medios para que en un futuro las mujeres que se encuentren (o nos encontremos) en esa etapa de la vida, no padezcamos y podamos vivir el declive de nuestra existencia en paz. Pero hay algo más allá a parte de todo esto, porque las mujeres, en general, no dejan de vivir de modo activo sus diversos roles en la sociedad –y con esto quiero invitarle a que piense en su abuela o su madre o las tías, aquellas mujeres que son parte de su familia y se encuentran en esa edad–. Es raro que una mujer tome sus cosas y diga: “¡Me he cansado de ser madre, abuela, tía! Me dedicaré a mí misma porque ya es tiempo.” Esto sería verdaderamente maravilloso, sin embargo, siguen atendiéndonos, cuidándonos, procurándonos, como si fuesen seres incansables; pero lo que no sabemos es que muchas de ellas sufren en secreto y padecen depresión por lo mismo. Es por ello que debemos terminar con el mito y el prejuicio de que una mujer mayor ya no tiene ambiciones y sueños. Pues nada las debe limitar sino todo lo contrario, la sabiduría adquirida, la experiencia obtenida es mucho más fuerte que la fortaleza física que se va perdiendo con los años. Una mujer mayor es aún más valiosa por todo el cúmulo de experiencia y conocimiento que habita en su ser, y es por ello que hoy les invito a valorar más a las mujeres de edad avanzada que conozcan, que las hagan sentir lo valiosas que son, lo fuertes que han sido y lo valientes por haber sido tan entregadas. Y les ruego que si ven a una anciana solitaria, vean el modo de acompañarle, apoyarle que su presente es nuestro propio futuro y a nadie le ha de parecer atractivo terminar su misión en esta vida en absoluta soledad y vulnerabilidad. Hoy aplaudo a todo aquel que se dedica a procurar, cuidar y amar a mujeres que están en esta etapa y a aquéllos que valoran y reconocen la importancia de estar a su lado.

Fuentes. https://www.gob.mx/conapo — http://www.unwomen.org/es/csw


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texto Alan Plata y Sergio Pérez @AlanPlata_97 — @SerPerS96

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Según cifras del Consejo Nacional de Población (Conapo), en México viven 13 millones de personas mayores de 60 años, de las cuales, a diferencia de lo que algunos pudieran pensar, hay un alto porcentaje que labora; únicamente 8.7 por ciento de las mujeres mayores de sesenta años está pensionada y jubilada, mientras que el 82.2 por ciento tiene alguna actividad. Por otro lado, 58.8 por ciento de los hombres trabajan y sólo el 25.1 por ciento está pensionado o jubilado. Más aún: en total, la tasa de participación económica de los adultos mayores es de 33.7 por ciento. Y es precisamente aquí donde comienzan las dificultades para este sector poblacional, pues de aquel porcentaje de adultos que laboran en el sector formal, el 49.2 por ciento no recibe prestaciones. Dicho esto, es posible aseverar que los adultos mayores conforman un sector demográfico vulnerable, cuyos niveles de bienestar y calidad de vida tienden a ser bajos, particularmente entre las mujeres. Por ende, resulta de suma importancia averiguar en qué situación se encuentran estas personas, qué problemas aquejan y qué necesidades tienen. Para empezar, hay que anotar que 74.3 por ciento de los adultos mayores laboran en el sector informal (de manera que no gozan de ninguna prestación), que la mitad percibe dos salarios mínimos, que otro 16 por ciento no recibe ningún ingreso, y que únicamente el 26.1 por ciento cuenta con una pensión contributiva, de los cuales la mayoría son hombres. Esta situación de vulnerabilidad trae como resultado que 3 de cada 20 personas adultas mayores de 65 años vivan en la pobreza; que 1 de cada 4 esté en condiciones bajas de bienestar, y que 1 de cada 5 esté en condiciones muy bajas de bienestar. Asimismo, debemos de agregar que en México hay cinco millones de adultos mayores que carecen de los ingresos suficientes para vivir de manera digna. En suma, resulta evidente que los adultos mayores viven en condiciones efectivamente precarias, pues aunado a que el envejecimiento y la acumulación de años provocan deterioros en la salud, menos capacidades laborales y

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en consecuencia, precarización de las condiciones de vida, es notoria la inminente situación de abandono social en la que este sector se encuentra. Ante todo, ¿cómo podemos explicar esta situación? Una buena parte de las causas radican en el hecho de que el gasto público destinado a los adultos mayores de 60 años en México no es elevado. Si contrastamos este rubro con el promedio de los países de la OCDE, se evidencia lo bajo que es; pues mientras los países de la OCDE gastan en promedio 7.9 por ciento del PIB en adultos de la tercera edad, México gasta menos del 2 por ciento –cifra que no ha variado desde 1990–. Para combatir la situación de abandono senil a corto plazo, sería oportuno reinsertar a los adultos mayores en actividades laborales formales. En esta lógica, la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), aprobó una reducción de 40 por ciento del impuesto sobre la nómina a quienes empleen a adultos mayores, una decisión acertada para estimular la inclusión de los adultos mayores a la sociedad.

¿Y los adultos mayores del futuro? Una vez expuesto el panorama de vulnerabilidad en que viven actualmente los adultos de la tercera edad, resulta oportuno preguntarse por las condiciones en que vivirán las siguientes generaciones de adultos mayores en México. En la actualidad, México tiene la mayor cantidad de jóvenes en su historia –según el CONAPO, en 2014 había 19 millones de jóvenes país—. El problema radica en que el bono demográfico no ha sido aprovechado en el país, pues en 2015 el 25 por ciento de los jóvenes del país ni estudiaba ni trabajaba (porcentaje que supera el promedio de América Latina). Por otro lado, resulta alarmante que durante las próximas décadas, México experimentará un fuerte envejecimiento demográfico: se espera que en 2030 los adultos mayores en el país pasen a ser 20.4 millones, en torno a 15 por ciento de la población total (en 2015, los adultos mayores representaban 7.2 por ciento de la población); y se espera que para 2050 el envejecimiento poblacional se agudice, pues se prevé que entonces las mujeres mayores de 60 años constituirán 20.4 por ciento del total de población femenina y los hombres 18.3 por ciento del total de la masculina. Este fenómeno de acelerado envejecimiento demográfico se explica por los procesos de modernización y urbanización del país, así como por el aumento de la esperanza de vida, misma que se duplicó de 1930 a la fecha. En suma, a lo largo de las próximas cuatro décadas, tanto la natalidad como la mortalidad descenderán en México –en


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foto. 123rf


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El creciente riesgo de quie dirección fatal, pues en el de trabajadores afiliados n a los pensionados (gracias demográfico), por lo que se 2036, el crecimiento del nú afiliados se aproxime a cer décadas después el númer también, igual a cero. Actividad

Total

De 60 a 69 años

De 70 a 79 años

80 y más años

Mujeres

100

100

100

100

Económicamente activas

19.4

27.6

13

4.7

Quehaceres domésticos

62.8

59.5

70

60.2

Pensionadas y jubiladas

8.7

9.6

8.4

6.5

Incapacitadas

1.1

0.6

0.9

2.9

No económicamente activas

8

2.7

7.6

25.7

Actividad

Total

De 60 a 69 años

De 70 a 79 años

80 y más años

Hombres

100

100

100

100

Económicamente activos

50.8

63.9

42.1

20.8

Quehaceres domésticos

8

4.8

10.8

13.8

Pensionados y jubilados

25.1

21.4

29.7

29.1

Incapacitados

1.4

1

1.3

3.1

No económicamente activos

14.7

8.9

16

33.2

2050

Mujeres

Hombres

Total

Mujeres %

Hombres %

Total

18’182,536

14’224,659

32’427,197

100

100

60 a 69 años

8’332,700

6’875,120

15’207,821

45.8

48.3

70 a 79 años

6’138,609

4’765,267

10’903,877

33.8

33.5

80 años y más

3’711,227

2’604,272

6’315,499

20.4

18.3

fuente. Inmujeres e INEGI


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iebra del IMSS lleva a una el futuro, el crecimiento s no alcanzará a cubrir as al envejecimiento se estima que a partir de número de trabajadores cero, de manera que unas mero de pensionados será,

2014, los mayores de 80 años representaban 15.1 por ciento de las personas mayores de 60 años y en 2050 serán un poco menos del 20 por ciento—. Este fenómeno de envejecimiento, aunado a la improductividad de los jóvenes y al abandono del estado frente a los adultos de la tercera edad (debido al bajo porcentaje del gasto público que se les destina), generará enormes desafíos para los sistemas de pensión, jubilación y salud en el futuro, pues un alto número de adultos mayores no tendrá los recursos necesarios para su manutención, y si actualmente la situación de los adultos mayores en México ya es complicada, el incremento del número de ancianos sin capacidad económica para mantenerse propiciará un grave problema en nuestro país. En una línea, podríamos decir que en un país que gasta poco en su población adulta, aquellos que fueron improductivos durante su juventud, difícilmente podrán mantenerse a edades adultas, hecho que se agrava con el envejecimiento demográfico, fenómeno que representa un reto enorme. ¿Cómo explicar este problema? La vulnerabilidad y el abandono que los adultos mayores aquejan, al igual que los problemas que padecerán las generaciones futuras, y son producto de malas políticas públicas y falta de empleo entre los jóvenes, así como del desmantelamiento y la crisis del Estado de bienestar. La más clara manifestación del problema introducido sobrelíneas es el déficit financiero que desde hace varios años tiene el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), un problema que terminó por devenir en crisis, cuando en 2013 se agotó el Fondo Laboral destinado para pagar las jubilaciones de los trabajadores. Para enmendar el problema,

el IMSS ha tomado recursos de las reservas financieras del Seguro de Enfermedades y Maternidad, para poder garantizar sus obligaciones como asegurador, particularmente para pagar el Régimen de Jubilaciones y Pensiones previo a 1997. Como resultado de lo anterior, en 2015, el déficit financiero del instituto ascendió a más de 17 mil millones de pesos. Asimismo, la proyección de ingresos y gastos para 2017 registra un déficit de 19 mil millones de pesos. La agudización de la situación financiera del IMSS requeriría una resolución adecuada para el Régimen de Jubilaciones y Pensiones, así como elaborar una mejor construcción de cuotas que resolva los problemas estructurales del Instituto. ¿Qué otras causas podemos ubicar para explicar la situación? Una causa más que podría explicar el problema es la manera de pensar de las nuevas generaciones de jóvenes trabajadores, denominados millennials, quienes se caracterizan por tener una visión de la seguridad social y el retiro como algo lejano a su realidad y que no es de vital importancia. Por esta razón esta generación no aspira a un trabajo subordinado, sino que pretende trabajar de forma independiente, bajo conductas financieras y de consumo que son poco responsables en materia de prevención y retiro, dado que se piensan a corto y no a largo plazo. Un estudio (realizado en 2017) acerca de la visión de los millennials sobre el retiro, elaborado por la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (CONSAR), demuestra lo señalado anteriormente. Pensando a largo plazo, sólo 20 por ciento de los jóvenes encuestados respondió que ahorra con miras a prepararse para el retiro y/o la jubilación. Un dato verdaderamente preocupante.

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texto Diego CasteĂąeda @DiegoCastaneda

foto. Vista posterior, Hospital 20 de Noviembre del ISSSTE


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La historia del nacimiento de los Estados de bienestar en el mundo cuenta con muchas explicaciones sobre los motivos de su aparición. Quizá la forma más práctica de entender sus orígenes es a través del trabajo de Christopher Pierson, quien en su libro Beyond the Welfare State? examina las tres principales tesis sobre las causas económicas, sociales y políticas desde finales del siglo XVIII hasta nuestros días. Pierson identifica las siguientes tres tesis: la “industrialista”, la de la “modernización” y la llamada “poder y recursos”. La primera, la industrialista, argumenta que los Estados de bienestar nacen de las necesidades de una sociedad industrial; el Estado de bienestar es entonces un producto del crecimiento económico que trajo la revolución industrial, la necesidad de una fuerza laboral educada y saludable es suficiente razón

para implementar políticas públicas a favor de la población. En la perspectiva de la modernización, el origen del Estado de bienestar yace en la adopción de la democracia en Occidente y la participación política de grupos de izquierda y protrabajadores, como la Sociedad Fabiana en Reino Unido. Por último, la de “poder y recursos” enfatiza la tensión entre los mercados y la política en la que la lucha por institucionalizar el control sobre los factores de producción produce incentivos para la redistribución y la acción política. Es importante considerar las distintas tesis que intentan explicar las causas del Estado de bienestar porque las pensiones son, en su existencia moderna, producto de los cambios políticos y económicos que le dieron origen. México hace 100 años introdujo a su Constitución política una amplia gama de derechos sociales, entre ellos el de-


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Este modelo resultó muy exitoso en su momento, porque México era un país de muy baja informalidad, por lo que la gran mayoría de los trabajadores estaban inscritos en el IMSS o ISSSTE, y contribuían a la bolsa común. recho a la pensión. México, en aquel momento, optó por lo que en la tipología de los Estados de bienestar del sociólogo danés Gosta Esping-Andersen se conoce como el régimen de bienestar “continental” o “conservador corporativista”. Estos regímenes son llamados “continentales” porque se desarrollaron originalmente en Europa continental, en países como Alemania, Francia e Italia –a diferencia del régimen liberal en Reino Unido o el régimen social demócrata de los países nórdicos–. Este tipo de regímenes, los continentales, se caracterizaban por ser contributivos; en ellos el trabajador y el patrón aportan una suma acordada a un fondo para que el trabajador pueda contar con ahorros en su retiro. Estos tipos de regímenes de Estado de bienestar eran muy buenos para las personas en empleo formal y de larga duración. El modelo que México adoptó durante principios y mediados del siglo XX –con la creación de instituciones como el IMSS y el ISSSTE– fue una variación del modelo continental, también llamado “bismarckiano”). El modelo mexicano consistía en contribuciones tripartitas, el Estado se volvía un socio del trabajador y del patrón en la acumulación de fondos para las pensiones de los trabajadores.

Las pensiones bajo este tipo de modelos se llaman “de beneficio definido”, ya que tienen un beneficio (cierto monto de pensión) que es financiado por el dinero que se acumula en una bolsa común, donde todo el dinero de las contribuciones se acumulan. El éxito de este modelo yacía en que el número de trabajadores activos era más grande que el número de trabajadores que se retiraban; los trabajadores activos financiaban las pensiones de los viejos y, eventualmente, los trabajadores del futuro harían lo mismo con las pensiones de los trabajadores del presente. Pero este modelo tiene puntos débiles, que radican en el cambio demográfico que las sociedades han sufrido; una población más envejecida que tiene una menor tasa de reemplazo entre trabajadores retirados y activos, pone mayor presión en los segundos, comprometiendo así la sostenibilidad del modelo. Otro aspecto que resultó ser catastrófico para el modelo mexicano ocurrió en la década de los ochenta. Tras la crisis de la deuda y la imposición de medidas de ajuste estructural por parte de organizamos internacionales –el Fondo Monetaria Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM)– como condición para rescatarnos sucedieron multitudinarios despidos en

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Héctor En su más Villareal reciente estudio director del centro sobre pensiones de investigación económica y analiza algunas presupuestaria alternativas de (ciep) política pública al respecto, por ejemplo: Reducir las exenciones fiscales a las pensiones superiores a 2 salarios mínimos. Topar los montos máximos de las el sector público y quiebras masivas en el sector pensiones. Incrementar las privado. El resultado fue un incremento exponencuotas y las edades cial de la informalidad en el país y con ello un duro de jubilación. golpe al sistema de seguridad social mexicano. El Disminuir las comisiones de las sistema fue construido pensando en una fuerza laAFORES. boral primordialmente formal, que ahora era preIncentivar el ahorro dominante informal; con menos contribuciones y voluntario. Cuentas con capital el cambio demográfico, el futuro de las pensiones semilla para estaba en entredicho. personas al cumplir Después de algunos años bajo la mayoría de edad.

el gobierno del presidente Ernesto Zedillo, en 1997 se realizó una reforma a la Ley del Seguro Social con lo que se modificó el modelo de pensiones, pasándolo de uno de beneficio definido a uno conocido como de “cuentas individuales”. Los modelos de cuentas individuales (las famosas AFORES) consisten en que la aportación del trabajador no está en una bolsa común, sino que lo que él ahorre durante su vida laboral será con lo que se retire; es decir, no existe de antemano un monto asegurado para su retiro (un beneficio definido). A partir de este momento, el sistema de pensiones mexicano se volvió un tanto complicado. Los trabajadores que ingresaron a trabajar antes de la reforma de 1997 se jubilarán bajo el sistema de beneficio definido, los que se integraron al mercado laboral después de la reforma lo hará por cuentas individuales. El resultado de esto es una gran desigualdad entre las pensiones que los trabajadores pre y post 1997 pueden recibir. En los años subsecuentes 2004, 2005 y 2009 se continuaron realizando otras reformas para introducir la adopción del sistema de cuentas individuales de forma más generalizada y para incrementar la edad de retiro de las personas y ganar algo de tiempo y aminorar así la debilidad del sistema de pensiones. Después de este repaso rápido sobre los cambios en el sistema de pensiones y el estado de bienestar en México vale la pena hablar un poco sobre los números de las pensiones hoy. El valor del pasivo pensionario en AFORES del país es de alrededor de 80 puntos porcentuales del PIB y representa un serio proble-

ma, pues la pensión promedio en estos esquemas es insuficiente para un nivel de vida digno; un buen número de pensionados apenas se jubilan con un equivalente a 1 salario mínimo, en el caso del IMSS, y alrededor de los 2 salarios mínimos para el ISSSTE. Además, las distintas AFORES invierten primordialmente en FIBRAS, la deuda privada nacional, en instrumentos de renta internacionales, en deuda gubernamental, entre otros. Pero sus rendimientos dejan poco qué desear y se suele ubicar por debajo del 8 por ciento anual. El gasto en pensiones del gobierno mexicano para este año es de 3.7 puntos del PIB; en esencia, toda la recaudación del IVA se destina a cubrir este rubro y se espera que continúe incrementando durante los siguientes años. El problema de las pensiones tiene el potencial de volverse un problema de finanzas públicas para el país. En otros países, como Chile, ya se han visto obligados a realizar rescates a su sistema de pensiones porque el sistema de cuentas individuales está fallando; esto ha llevado a muchas personas y gobiernos a la necesidad de reformularlo o, incluso, volver a un esquema de beneficios definidos. Las pensiones en México y el débil sistema de seguridad social fueron en el pasado un gran sueño del Estado de bienestar mexicano, una gran conquista de la revolución. Hoy son más una bella memoria de una época en la que el país tenía una visión a largo plazo. Las pensiones, hoy en día lejos de una garantía de una vida digna en la vejez, se han vuelto paradójicamente una gran preocupación y una gran fuente de desigualdad. Trabajos como “Un decenio de reducción de la desigualdad en México. ¿Fuerzas del mercado o acción del Estado?” de los economistas Gerardo Esquivel, John Scott y Nora Lusting, han encontrado que las pensiones en México son regresivas, concentran sus beneficios en pocos trabajadores que reciben pensiones extraordinarias mientras que un grupo mayor recibe pensiones miserables, y a las que la gran mayoría no tiene acceso por la elevada informalidad laboral que tiene el país.


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Durante los últimos 30 o 40 años México ha transitado de ser un régimen “continental” a uno de “seguridad informal”, en la que se depende más de las relaciones familiares y de la comunidad para satisfacer las necesidades de seguridad social. Todo esto nos deja con una pregunta: ¿Existen políticas públicas que puedan ayudarnos a sortear una futura crisis de pensiones en el país? Algunas de estas propuestas dejan ver que para las generaciones que están por entrar al mercado laboral o tienen pocos años dentro del mismo, contar con una pensión será un sueño, y que el ahorro voluntario parece ser el único camino viable en el corto plazo. Por otro lado, mayores recursos fiscales serán necesarios si el Estado desea, a la larga, poder ofrecer una seguridad social que sea capaz de garantizar lo mínimo

a la población, una dotación de capital al cumplir la mayoría de edad es una propuesta muy parecida a la que planteó Tony B. Atkinson para combatir la desigualdad; sin embargo, para implementar algo así, primero sería necesario recaudar más y mejor. Hace unos 200 años Thomas Jefferson, en una comunicación epistolar con John Adams escribía optimistamente sobre el país que construirían; a él le gustaban más los sueños del futuro que las historias del pasado. Hoy en día, si México no cambia de rumbo pronto para evitar una crisis de pensiones y comienza a tomar medidas que aseguren su estabilidad fiscal, mayor crecimiento equitativo, menor desigualdad, y a tomar con seriedad la construcción de un estado social, quizá recuerde aún con más cariño las historias del pasado frente a las pesadillas del futuro.

foto. ruizripoll.com


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texto Redacción

Muchos Adultos mayores en Ciudad de México tienen un bien inmueble, pero no los medios para mantenerlo ni asegurarse la manutención diaria, o simplemente necesitan una entrada extra a su pensión o rentas de su trabajo para vivir esa etapa con mejor calidad de vida y poder realizar esas cosas que antes por tiempo y ahora por dinero no pudieron realizar. Olivo es una institución que permite capitalizar el esfuerzo que realizaron esas personas mayores para obtener un bien inmueble; es una empresa que encontró un área de oportunidad de negocio en el bienestar de sus clientes. Casi como mantra, la oferta de la marca reside en:


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Creemos que los adultos mayores deben disfrutar los beneficios del esfuerzo realizado en su vida. Creemos que los adultos mayores tienen dignidad y derecho a tener autosuficiencia y libertad económica. Creemos que los adultos mayores tienen derecho a disfrutar en vida, todo lo que construyeron con su esfuerzo. Creemos que los tratos justos y las cuentas claras. Creemos que la mejor herencia que puedes dejar es una familia unida y armoniosa.

Gerardo Solórzano, director de comercialización de Olivo, tiene un ímpetu vital que contagia. “Cuando comenzamos este negocio lo hicimos con una sola intención, un mantra que nos metimos todos en la cabeza: la gente de la tercera, edad, los adultos mayores, los viejitos, pues, merecen vivir con dignidad e independencia, lo merecen”. Es un hombre claro que no confunde la táctica con la estrategia, quizá la experiencia se la deba a sus años como jugador o a su vida como gran aficionado al futbol americano. Sabe de negocios porque escucha y entiende a su target. Escucha, y cuando habla hay algo de lecciones, es didáctico sin pontificar. Olivo es la nueva propuesta que Gerardo emprende junto con un grupo de profesionales, que atiende una realidad terrible: cerca de 40 por ciento de los adultos mayores no cuentan con una pensión o jubilación, ni con apoyos estatales para la vejez. “Muchos de ellos trabajaron toda su vida, cuentan con un bien pero no tienen los medios para mantenerse: en promedio, un adulto mayor en México gasta 60 por ciento de sus ingreContacta a Olivo. sos en medicamentos y consultas hospitalarias”, apunta Solórzano. Homero 538 Int. 903, “Creemos que los adultos mayores deben disfrutar los beneficios del esfuerzo realizado Polanco, V Sección Del. Miguel Hidalgo en su vida, que tienen dignidad y derecho a tener autosuficiencia y libertad económica”, lo dice como CP. 11560 CDMX después de encontrar la fórmula de un primero y diez. “¿Te has puesto a pensar todo el dinero que una T. 4440 2222 persona de 65 años invirtió en su propiedad y que hoy le cuesta trabajo –no pensemos en los servicios ✉ info@olivo.mx básicos– ir al cine, al teatro, estar en plenitud con su pareja? Para eso creamos Olivo”. “Es muy sencillo: Olivo es una pensión hipotecaria, en la que el poseedor de un bien inmueble lo vende a plazos –15 años–, y recibe mensualmente una cantidad determinada por el valor del bien. Además, y esto es quizá lo más importante: los dueños, el titular o su esposo o esposa, tienen la garantía de habitar su casa de manera vitalicia”, prosigue Solórzano Rojina, quien es aficionado a las novelas de detectives y de intriga policiaca. “ El modelo se aplica en otros países en los que los contratos de compra-venta o arrendamiento son más diversos; Olivo es pionera, pero, sobre todo, una alternativa: “Las herencias se convierten en un problema cuando las cosas no están bien en una familia y una disputa por ella puede terminar con las relaciones sentimentales necesarias para la preservación del tejido social”. Se le pregunta directamente: entonces, ¿Olivo nació con una firme idea de responsabilidad social? “Mira, esa categoría se gana después de hacer bien las cosas y cumplir con una serie de requisitos ante las autoridades, y eso es lo que queremos, pero antes que eso, sabemos que podemos ser un detonante, un catalizador para que muchos adultos mayores puedan elevar o mantener su calidad de vida, que viajen más, que se diviertan más, que vivan mejor.” La duda razonable surge de inmediato, ¿cómo hacer rentable un servicio de esas características? “Es sencillo, somos una institución que permite capitalizar el esfuerzo que realizaste en tener un bien inmueble, apoyándote a mantener un estilo de vida. Para todos aquellos que tengan una propiedad y que deseen seguirla habitando al mismo tiempo que tienen una una pensión mensual por un tiempo determinado Olivo es la solución. Olvídate de problemas con tu familia; no heredarás problemas porque creemos que el mejor legado es la tranquilidad y la armonía”. Gerardo sabe de negocios y sabe de consumidores y posee un ojo privilegiado para encontrar negocios de beneficios mutuos; además de Olivo, es directivo en la agencia de remates hipotecarios UpTown, empresa a la que llegó procedente de la gerencia de ventas en Vitos y Procter & Gamble. “Me ofrecieron ser un broker externo, pero me interesó venir por la idea de invertir; de eso ya pasaron ocho años y medio. Me llamó tanto la atención que tengo el récord de ventas mensual de la empresa con 17 propiedades. Soy administrador de empresas con especialidad en Negocios. Tengo más de 30 años de experiencia y creo que lo mejor para México es que todos los ciudadanos encuentren lo que les gusta y lo hagan”. En esto último es enfático, quizá ahí radique el éxito de Olivo: que cada persona obtenga los medios para realizar las cosas que quiere hacer, las que lo hacen feliz, las que lo hacen sentirse más vivo, más productivo, mejor. Olivo ya ofrece sus servicios en la Ciudad de México, y pronto crecerá a lo largo y ancho de la República Mexicana. El servicio es sencillo e integral: además de la asesoría legal y financiera. Termina Solórzano con un objetivo muy claro: “si queremos que este país cambie, debemos estar atentos a todos los grupos sociales y crear alternativas de desarrollo: eso queremos hacer, de eso se trata Olivo.”


Intern redes socia y terc edad

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texto Santiago Calderón Berra

En la actualidad no es noticia escuchar sobre el incremento de los denominados “silver surfers” (es decir, las personas de la tercera edad que conocen y utilizan internet). Se calcula que cada año se adhieren al uso de Internet entre 2.5 y 3 por ciento de la generación de los no “nativos digitales”. Esto demuestra que la afirmación de que únicamente las personas “jóvenes” utilizan internet y las redes sociales hoy en día es una falacia. En el mundo, la población mayor de 60 años es de 810 millones; pero, ¿qué hacen en internet? Además del habitual uso del correo electrónico, lo que parece tener cada día nuevos adeptos son las redes socio-digitales. Facebook es el primero, pero también Whatsapp, Twitter, Instagram, Skype y Youtube: para muchos es una forma de mantenerse en contacto con las noticias, con los amigos y la familia. Internet es un lugar para

socializar y sentirse menos solo, favorece la independencia, es una fuente de servicios y un propagador de información. Es precisamente el grupo de entre 55 y 74 años el que está aumentando en número de usuarios que utilizan esta red global. Por ejemplo, en el 2016 en Estados Unidos de América 43 por ciento de las personas mayores de 65 años ya utilizaban las redes sociales, cuando en 2006 eran sólo 1 de cada 100; esto denota un boom. En las personas denominadas de la tercera edad, el conocimiento y el uso de internet y la práctica de las redes sociales está demostrando ser una herramienta de apoyo cada vez más popular y eficaz para reducir la sensación de soledad. Internet, de hecho, ayuda a evitar el riesgo de depresión entre los ancianos. Un estudio reciente realizado por Shelia Cotten de la Universidad Estatal de Michigan, y publicado en el


net, s ales cera d En el caso de México

12 por ciento de los internautas tiene más de 55 años, de ellos 40 por ciento tiene entre 65 y 74 años, y 12 por ciento tiene más de 75. Casi tres cuartas partes cuenta con un celular y 29 por ciento con computadora. ¿Para qué lo utilizan? 90 por ciento para hacer uso de su correo electrónico y 60 por ciento para obtener información. Las redes sociales más populares son: en primer lugar, Facebook (56 por ciento), luego LinkedIn y Pinterest (28 por ciento), Instagram (26 por ciento) y, finalmente, Twitter (23 por ciento). Los hombres son los que más utilizan esta tecnología con 39 por ciento, contra 15 de las mujeres.

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Journal of Gerontology afirma que la investigación realizada durante seis años y que analizó la vida cotidiana de miles de personas de edad avanzada, dio como resultado más significativo que internet se ha convertido en un compañero entre las personas mayores, ya que el uso de esta tecnología disminuye en 30 por ciento el riesgo de depresión. Además, existen estudios científicos que muestran que una hora en internet y en redes sociales ayuda a reducir los déficits cognitivos y mejora la memoria de las personas mayores de 65 años. Existen aplicaciones específicas para esos grupos sociales. Por ejemplo, en Italia existe el caso de un “Facebook” para la tercera edad, denominada Special Age, (www.specialage.it), ideado por una monja franciscana, Angela Musolesi. Basado en la red social para grupos de tercera edad, Tapestry, existente en Estados Unidos y en Australia, la Easy Family Social, es una aplicación de Facebook para personas mayores que tiene un diseño sencillo y permite la comunicación con seres queridos y compartir distintos formatos de archivo. Existen otro tipo de aplicaciones de ayuda también, como podemos observar. Por ejemplo, las personas mayores utilizan teléfonos inteligentes de última generación, con los que a menudo tienen dificultades de uso por problemas de visión; para esto encontramos Koal Phone Launcher o Big Launcher, que convierte la pantalla de los teléfonos en una interfaz perfectamente visible, con grandes íconos y letra fácil de leer. La aplicación optimiza la visualización de mensajes, fotografías, reloj despertador, calendario, linterna y otras aplicaciones fijas, además de simplificar la gestión del teléfono. También existen las aplicaciones para administrar la toma de medicamentos; en ellas, por ejemplo, los usuarios pueden programar los días en que tienen que tomar cada pastilla. Entre estas aplicaciones podemos encontrar a Pillboxie, MediSave Virtual Pillbox y MediSafe. Asimismo hay aplicaciones y juegos para ejercitar la memoria y hacer que el cerebro esté en continuo trabajo. Por lo general a estas aplicaciones las caracteriza su sencillez y fácil funcionamiento. Así que si usted es una persona mayor no tenga miedo a atreverse. La tecnología también está a su servicio para pasar el tiempo, entretener, apoyarle e informar.

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#Tecnología

Para los mayores texto Diego Vidal Cruz-Prieto @vidaleando

Resulta irónico cómo se invierte la relación entre facilidad de adaptación y edad del usuario en contextos tecnológicos; pareciera que la juventud siempre lo tendrá más fácil y que a medida que se crece se cae en un estancamiento tecnológico. Hasta el momento, esto ha sido así, pero no es por una cuestión de plasticidad cerebral, negación a cambiar costumbres o lejanía al origen de la era digital. Es consecuencia de una negligencia que hemos tenido como sociedad al momento de incluir a nuestros mayores en nuestro uso común de cómputo, aplicaciones, internet, etcétera.

foto. wallpaperup

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Simplemente no podemos pedir que vean la cosa desde nuestra perspectiva, tenemos que entender sus necesidades y de qué modo las podemos contextualizar para que no se sientan ajenos y rezagados en una herramienta cuyo uso crece día a día a nivel internacional; es más, no hacer esto se podría considerar un tipo de discriminación que ha sido ignorada por bastantes sociedades a lo largo del planeta. Así que la pregunta aquí es: ¿Cómo cerramos la brecha tecnológica con nuestros mayores? La respuesta es la misma que en nuestro caso: fomentando su uso más allá de necesidades artificiales y llamadas por Skype con familiares. Por ello, durante el resto de este texto me centraré en el tema de las aplicaciones (“apps”), ya que es mucho más sencillo que alguien haga la transición de un celular análogo a un smartphone bajo el argumento de que hace lo mismo y más. Esto, en contraposición a enseñarles a usar una computadora, es una tarea un tanto más realista y natural. Por otra parte, recomiendo ampliamente que el smartphone sea un iPhone, ya que iOS tiene una interfaz gráfica mucho más sencilla que la de Android; pero en caso de que no les agraden mucho los términos y condiciones de Apple y quieran apegarse a nuestro querido robot verde, les recomiendo ampliamente que instalen Nova Launcher para hacer que la pantalla de inicio sea clara, sencilla y eficiente. Es innegable que los sentidos se deterioran con la edad y que en general todas las interfaces de celular están pensadas para un usuario con 35 años, por lo cual la primera barrera que hemos de derribar es esta. Si la gente tiene vista cansada, unos puede ir a Configuración>General>Accesibilidad (el vocabulario varía según el sistema operativo), y posteriormente activar la opción de Leer selección, lo cual de ahora en adelante permitirá que cuando se sombree un texto, aparezca una opción de leer en voz alta, la cual empezará a dictar todas las palabras del texto en un tono claro y un ritmo moderado. ¿El problema no es la vista sino el oído? Si casi nunca te contestan las llamadas bajo el argumento de que no oyen el celular, puedes ir de nuevo a Configuración>General>Accesibilidad y activar la opción Luz LED para notificaciones, de este modo, cada vez que reciban una llamada o un mensaje, el diodo LED al reverso del aparato comenzará a centellear. La tecnología bien empleada apunta hacia la independencia del usuario, en este sentido puede llegar a ser muy reconfortante que varias actividades relacionadas a la salud puedan llevarse a cabo de un modo más sencillo sin la necesidad de ayuda externa. Por ejemplo: medir la presión. Ya ha habido

un gran avance desde el esfigmomanómetro, hoy existen aparatos que miden muy bien la presión con tan sólo presionar un botón; sin embargo, no es algo que siempre se tenga a la mano, o cuyas baterías siempre tengan carga. En ese sentido, se puede usar la app Instant Heart Rate (iOS) para medir la presión por medio de la cámara del celular usando técnicas similares a las empleadas para oximetría. Ahora bien, los medicamentos tienden a ser un elemento cotidiano a partir de cierta edad, y la cantidad a consumir parece incrementar exponencialmente con cada consulta al médico. Así que en cierto momento llega a ser complicado mantener el control de qué tomar y a qué hora; para simplificar esto existe Pillboxie (iOS), la cual lleva un registro categorizado de las sustancias a tomar y emite alarmas en las horas de consumo. EyeReader (iOS) sería prescindible si uno no considerara que hay varios ambientes con poca iluminación, pues bien, esta aplicación es una lupa que funciona a través de la cámara. Y si además consideramos que enciende la lámpara del celular para iluminar, podemos pensar en un sinfín de escenarios donde esta aplicación sería muy práctica. Finalmente, algo que me parece triste es que a medida que avanza la edad se pierde el hábito de la lectura, pues muchas veces el tamaño de la fuente es muy pequeña e induce dos conductas: dejar de leer por cansancio ocular o, leer tan cerca de la página que parece que se está inhalando el libro. Para evitar este tipo de situaciones y regresar a una lectura cómoda podemos comprar un Kindle, ya que su pantalla es opaca y emula en medida de lo posible al papel. Además, se puede ajustar el tamaño de la fuente y en caso de que se esté cansado de leer pero bien clavado con la historia, se puede optar por una lectura en voz alta. Otra ventaja que ofrece es que se pueden comprar muchos libros en línea, lo cual es bastante oportuno para personas con impedimentos de movilidad. En caso de que no haya posibilidad de invertir en el dispositivo, también se puede descargar la aplicación de Kindle, la cual tiene prácticamente la misma funcionalidad aunque sin la opacidad en la pantalla; aún así, se puede optar por elegir un fondo sepia, lo cual es muy amigable a la vista en un iPad. La tecnología es un bien social, no generacional. Las barreras en su adopción responden más a una falta de interés por parte de los usuarios dominantes en que el resto aprenda. Hoy es más fácil que nunca poder ayudar a los adultos mayores con estas herramientas y poder regresarles cierta independencia que el tiempo les ha quitado. Podrán ser pequeños detalles, pero son de aquellos que reponen un estilo de vida que estuvo en erosión por un largo rato.


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#Mancha

M México tiene un problema con sus adultos mayores, porque nunca atendió a sus jóvenes. La grave crisis de enfermedades derivadas de la obesidad y el sobrepeso –condición en la que viven 72 por ciento de los mexicanos adultos– se debe a la mala alimentación y a la casi nula actividad física a la que estamos acostumbrados; es decir, a la falta de educación física y corporal en la mayor extensión del concepto. Pero el problema de fondo radica en la caída estrepitosa del aparato de Seguridad Social en el país, en la falta de espacios y oportunidades para el correcto desarrollo de los ciudadanos. Además, junto con pegado, por las pésimas condiciones laborales y de planeación urbana que condenaron (y condenan) a millones de mexicanos a destinar largas horas en el transporte para llegar a sus trabajos, centros de estudio y recreación. Por ende, este problema se debe a los malos hábitos alimenticios, derivados del poco tiempo y el muy restringido presupuesto con el que cuentan millones de empleados para comer durante la jornada laboral. No se puede aspirar a tener adultos en plenitud cuando no se procuró tener juventudes sanas; no se puede esperar que los adultos mayores obtengan el descanso, calidad y dignidad de vida mínimos indispensables, cuando la edad económicamente activa se vivió entre la supervivencia y el medio vivir: los jóvenes que medio duermen, medio comen y medio descansan, serán adultos mayores con diversas enfermedades, discapacidades y desigualdades. Luego, el discurso oficial, victimiza a los viejos y nos muestra datos alarmantes en los que los coloca como vampiros del presupuesto, como hoyos negros que acaban con los quintos, y que detienen la “correcta” inversión en salud, educación y empleo. Y utilizan campañas en las que se muestran “enamorados” de las grasas, las azúcares y las calorías; y la muerte será la única que los separe de sus trastornos alimenticios y holgazanería. Peor aún, el presente anuncia una desgracia para la plenitud: si México es el país con más niños obe-

d i á l o g o

del 14 de agosto

texto Diego Mejía @diegmej

sos en el mundo, si los jóvenes están condenados al subempleo, la informalidad y la precariedad laboral, el futuro no será nada alentador; más grave, en 30 años, el 20 por ciento de la población será mayor de 60 años. ¿Qué futuro estamos construyendo? La curva del escándalo no se soluciona prohibiendo las papitas, restringiendo las Coca-Colas o “enseñando” a los freelancers a ahorrar para su futuro. Se remedia educando, ofreciendo oportunidades de desarrollo para cada etapa vital, y creando empleos de calidad. ¿Cómo decirle a una generación que piense en el futuro, cuando las políticas públicas, la desigualdad –política, económica y todas sus variantes– han hecho justo eso: destruir la idea de futuro? Si los años 40, 50 y 60, los años del Milagro Mexicano y el Desarrollo Estabilizador fueron los tiempos de Ciudad Universitaria, del florecimiento del IMSS y los grandes proyectos habitacionales y urbanísticos que fueron habitados por la incipiente clase media; los siguientes, los de la cruda petrolera y la instauración del régimen neoliberal, dinamitaron lo conseguido: los estudios universitarios ya no son garantía de movilidad social, el bienestar quedó en eslogans de campaña y la vivienda se convirtió en megaproyectos de casas ínfimas en las periferias de las grandes ciudades (además de los escándalos de corrupción), que crearon ambientes terribles, y escenarios para la tragedia de inseguridad que viven millones de mexicanos. Crear futuro, pensar en vejez, es tener los medios mínimos indispensables para habitar de manera adecuada el presente. México confundió los tiempo, se saltó los pasos y el traspié nos tiene con niños gordos, jóvenes estresados y viejos enfermos. Hace mucho que dejamos de pensar en lo necesario y gastamos en lo urgente: el país se dializa cada seis años, y estamos muy abajo en la lista del trasplante de riñón: nos hemos envenenado con nuestras propias toxinas.


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foto. 123rf


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postre

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#Finanzas

Game of Time

texto Adolfo Vargas @av_campeche

Cuando el destino nos alcance

Retirement is Coming Así como si te hablara de una serie donde avisan que detrás del muro vienen los caminantes blancos, y que una vez que estén acá, los peores miedos serán realidad. Bueno pues, no es serie, ¡y así va a pasar! Sólo que el muro es tu tercera edad o temporada (por ahí de tus 65 años), y que atrás del muro lo que hay son un montón de años que se te vendrán encima. Junto con muchos gastos y ningún ingreso para poder enfrentarlos. ¿Verdad que el plot de la historia ya se puso bueno? Antes de seguirte dando spoilers, te voy a contar otra historia que en verdad está de miedo, y que al paso que va, tendrá un final “cero” feliz. Se llama Generación X “Horror Story”. Aquí, los personajes están metidos en serios aprietos, y mueren de miedo porque saben que su vejez está a la vuelta de la esquina. Y aunque tuvieron la oportunidad y tiempo suficiente, han hecho muy poco o casi nada para enfrentarla. Por lo que tendrán una muerte lenta y triste en un asilo público… ¡si bien les va! Aunque suene a contenido de Netflix o HBO, de lo que te hablo son las diferencias entre dos generaciones que hoy se encuentran compitiendo en el mercado laboral. Y que ambas enfrentan o enfrentarán (en algún momento) el reemplazo por gente más joven y, a su vez, la eventual e inevitable jubilación.

Investiga, oriéntate y, sobre todo, actúa en tu propia historia, existen distintos productos financieros para que no te tome por sorpresa el futuro, conoce cuál se adecúa mejor a tus ingresos y necesidades: — Planes privados de retiro — Seguros de retiro — Afores — Fondos de inversión Estos son sólo algunos ejemplos para que no te tome por sorpresa.

La diferencia es, ¿cuánto tiempo le falta a cada generación para ese momento y qué pueden hacer para enfrentarlo? Una característica que distingue a los millenials es el uso de la tecnología y el acceso a la información, lo cual es una gran ventaja (además de su juventud), ya que tienen fuentes suficientes en el internet y otros medios para informarse, decidir y tomar acciones desde hoy, para poder enfrentar el complicado escenario que puede ser el vivir una vejez sin recursos económicos. Otra gran ventaja que tienen es que valoran las experiencias más que más que las posesiones. Así que el vincular la idea de un futuro con medios e independencia suficientes, para disfrutarlo tanto como el presente, es un poderoso motivador rumbo al futuro. Por otro lado, la generación X ha tenido tiempo suficiente (y aún queda algo) para asegurar su propia vejez, y por ende debe ser responsable de lo que ha hecho o dejado de hacer con ese tiempo. Así que no se vale decir “el de atrás paga” y voltear a ver a los millenials como una posible fuente de ingresos. Como tampoco los millenials lo deberán hacer con los aún misteriosos generación Z. Así que no dejes que te pasen Strager Things en tu futuro e investiga, oriéntate y sobre todo actúa en tu propia historia, antes de que te llegue un futuro sin audiencia, o peor aún…¡sin libertad económica! Si tienes dudas o comentarios, por favor házmelos llegar, que con gusto las responderé. Y claro, si te sirvió esta información, por favor compártela. ¡Hasta la siguiente colaboración!



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Inteligencia Artificial e Inteligencia Computacional

texto ErĂŠndira Itzel GarcĂ­a Islas @eitzelg26

foto. Amar Rai/travelingcolors.net


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En la historia de la Automática, Cibernética e Inteligencia Artificial, se entretejen realidad y ficción. Ya sea como ornamento, deseo de inmortalidad o eternidad, la idea de crear vida, reproducir la inteligencia, así como la realidad con una perfección que parece desafiar la obra del Creador, convoca sentimientos y emociones especiales: sorpresa, admiración, recelo e incluso temor.

E

n particular, la idea del Universo como un mecanismo y la hipótesis fascinante del isomorfismo hombre-máquina, inspira a los defensores de la Inteligencia Artificial dura desde hace más de sesenta años, quienes aseguran que todo símbolo, información o significado que pueda expresarse en forma de palabras o números, puede ser codificado (y transmitido) en secuencias binarias de longitud finita; de modo que nosotros, nuestros pesares y alegrías, nuestras memorias y ambiciones, nuestra sensación de identidad personal y libre albedrío, no son sino el resultado de un vasto ensamblaje de células y moléculas asociadas, cuyo funcionamiento puede reducirse a una serie de algoritmos que por tanto es posible conseguir simular en sistemas indistinguibles de la realidad. De este modo, hay quienes afirman que los humanos, paradigma del ser inteligente, representa un simple algoritmo y que nuestro universo, personalidad y actos no constituyen sino respuestas ante programas complejos, y que el comportamiento de un sistema puede evolucionar exactamente igual por medio de la programación que por la interacción del medio ambiente, por lo que el reemplazo de la humanidad por una hiper-humanidad formada por potentes sistemas computacionales, constituye un fenómeno natural inminente. De acuerdo con Alan Turing, a finales del siglo XX las máquinas evolucionarían hasta convertirse en entidades tan complejas como nosotros, que no existiría diferencia alguna entre un ser humano y una máquina. La realidad es que la predicción de Turing nunca llegó a cumplirse. Sin embargo, al dotar a la computadora de cierto poder de razonamiento, de la utilización de lenguajes similares al lenguaje natural y de la capacidad para resolver problemas, características presentes en los organismos avanzados que identificamos como “inteligentes”, podemos encontrar programas que si bien no poseen la capacidad de aprender ni involucran ninguna técnica de aprendizaje de máquina, premisa esencial de la Inteligencia Artificial, sí se encuentran dotados de cierto grado de inteligencia computacional. De esta manera, en la actualidad encontramos “inteligencia” en todas partes; desde los más ar-

caicos sistemas de control de temperatura en aparatos de aire acondicionado; edificios dotados de dispositivos para cerrar puertas y ventanas, registrar la entrada o salida de personas, encender o apagar electrodomésticos; sistemas de iluminación que se deshabilitan en forma automática cuando los ambientes no se encuentran en uso; lavadoras y secadoras de uso doméstico que determinan el programa de lavado y /o secado adecuado de acuerdo con el tipo de composición de las prendas (optimizando el uso de detergentes y recursos energéticos); en los frenos de los automóviles que compensan el desbalance producido por la fricción; en las tabletas digitales y teléfonos celulares que realizan predicción de texto y evitan la escritura de errores ortográficos y gramaticales; hasta sistemas dotados de verdadera inteligencia artificial capaces de aprender, como robots provistos con sistemas de análisis del lenguaje natural, capaces de realizar traducciones multilingües, conversar y predecir palabras a partir de imágenes; sistemas médicos de diagnóstico equipados con sistemas expertos para la detección de enfermedades; sistemas de defensa militar dotados de visión artificial capaces de seguir a sus blancos en movimiento y tomar acciones estratégicas de forma automática; sistemas de control de calidad industrial que no sólo disminuyen la probabilidad de fallo, sino que cuentan con sistemas que permiten determinar las mejores rutas de distribución de los productos desde una fábrica hasta sus puntos de venta; sistemas de navegación autónoma que evitan accidentes debido al agotamiento y/o la falta de pericia de los pilotos; sistemas basados en redes neuronales que detectan el uso fraudulento de tarjetas de crédito y evitan el lavado de dinero en las instituciones financieras; prótesis que se conectan directamente al cuerpo de los discapacitados y que pueden ser activadas con el solo recurso de su voluntad, etcétera. No se sabe con certeza si en un futuro las máquinas superarán a su contraparte humana, los recientes progresos en Cómputo e Inteligencia Artificial han mostrado su eficacia en la resolución de problemas del mundo real; sin embargo, la teoría de la Inteligencia Artificial dura –en el estado actual del desarrollo de la ciencia– convierten a esta disciplina en un sueño aún por alcanzar, entre lo imaginario, lo concebible y lo real.

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Los nuevos héroes

texto José María Freyre Nava

l Los héroes modernos ya no son como los de antes. En el pasado, buscábamos a ese individuo joven, fuerte, valiente y optimista que se enfrentaba a sus oponentes con una sonrisa en la cara. Era buscar al Knight of Roses de Game of Thrones, al Rey Arturo, al Capitán América, a Superman. Hoy ya no buscamos al joven optimista, ansioso de comerse el mundo y libre de hacer lo que cree correcto porque su conciencia está limpia. Ese tipo de héroes ya no funcionan del todo en este mundo de incertidumbre y miedo en el que vivimos. No queremos alguien que nos salve, sino alguien que nos proteja; pero no como un Superman que está desvinculado de nosotros, que nos salva simplemente porque ÉL lo cree bueno. Queremos una figura más paterna, alguien que sabemos humano y que ha sufrido como nosotros, que sabe cómo se siente y que a veces no puede hacer más que lo malo, porque hacer lo bueno es demasiado difícil o es demasiado peligroso para sus seres queridos, aquellos a los que protege a toda costa. El mundo ya no quiere héroes, quiere personas. Personas con las cuales te puedas identificar, aunque no sean completamente ideales. Y ejemplos de esta mentalidad están tan cerca en nuestra llamada “cultura popular”:

están en los videojuegos, los libros y las series. The Last of Us, uno de los mejores juegos jamás creados y de los más premiados en la historia de la industria, tiene como personaje principal a este nuevo modelo de “héroe”. El juego plantea un futuro distópico donde un hongo muta para infectar a los humanos, destruyendo muchos de los grandes centros de civilización y creando comunidades en cuarentena aisladas y militarizadas. Joel, el personaje principal, es un contrabandista que mueve a personas y mercancías entre las zonas de cuarentena de Boston. A sus cincuenta años, ha perdido a su familia y se ha vuelto tan salvaje y gruñón como el mundo en el que vive lo requiere para sobrevivir. Sin embargo, todo cambia cuando conoce a Ellie, una niña que tiene que llevar con un grupo de rebeldes que buscan una cura para el hongo que destruyó todo. A lo largo de la historia Joel y Ellie forman un vínculo como de padre e hija. Joel protege a Ellie del peligro, pero no por un sentido altruista, sino por un sentimiento muy humano de amor. El héroe viejo y cansado del mundo es lo que parecemos querer en estos momentos. Alguien con experiencia que sabe cómo manejar las situaciones, pero que también

puede defender a los que quiere. El Superman sonriente que vuela por los cielos y nos saluda desde las alturas ya no nos llama la atención como lo hacía antes; se ha vuelto predecible, artificial y “débil” en un mundo donde las cosas se obtienen siempre con un sacrificio, con una lucha contra fuerzas muy superiores a uno, y donde no hay cabida para la mirada de láser ni el aliento de hielo. Hemos crecido dándonos cuenta de que el verdadero superhéroe no es Superman, que tuvo todo dispuesto desde el principio para “salvarnos” y que es bueno por naturaleza; el verdadero héroe de hoy es Batman, que tuvo que aprender todo desde cero y que nunca deja de ser tan humano como a quienes protege. Lista de Videojuegos con protagonistas fuera del héroe tradicional: — The Witcher III: The Wild Hunt (Geralt of Rivia) — The Last of Us (Joel) — Uncharted 4: A Thief’s End (Nathan Drake) — Watchdogs (Aiden Pearce) — Starcraft 2 (James Raynor)


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del 14 de agosto

#EntreComidas La vejez plena es un platillo que se prepara diario

foto. noticiasmvs

texto Daniela Chรกvez @Dan_Chb


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Los consejos básicos para que tengas una buena salud son. 1. Tomar suficiente agua. La deshidratación es muy común y tiene muchos efectos adversos. Para ello no tienes que beber agua sola exclusivamente, puedes incluir té, o café, sopas y cremas de verduras, que también contribuyen a mantenerte hidratado.

“Hay que vivir con la certeza de que envejeceremos y que no será algo bonito, ni bueno, ni alegre. Y decirse que lo que importa es el ahora: construir, ahora, algo, a toda costa, con todas nuestras fuerzas. Tener siempre en mente la residencia de ancianos para superarse cada día, para hacer que cada día sea imperecedero. Escalar paso a paso cada uno su propio Everest y hacerlo de manera que cada paso sea una pizca de eternidad. Para eso sirve el futuro: para construir el presente con verdaderos proyectos de seres vivos.” (Muriel Barbery, 2006.)

2. Incrementar la actividad física. Esto ayuda a mantener cuerpo y mente activos, contribuye a que la pérdida de músculo, un proceso normal en la vejez, sea menor, y ayuda a tener mejor equilibrio y elasticidad, y es un excelente aliado para mantener un peso adecuado. 3. Disminuir el consumo elementos nocivos, como grasa, sodio y azúcar refinada. En vez de ello, incrementa el consumo de fibra dietética, proteína de buena calidad (como huevo, carne, pollo y pescado) y grasa insaturada (presente en almendras, aguacate, nueces y aceite de oliva). 4. Consumir antioxidantes. La oxidación de las células es un proceso natural, acelerado por el estrés, el alcohol, el cigarro, el ejercicio extremo, y se puede evitar consumiendo antioxidantes, presentes de manera natural en frutas y verduras.

5. Planear las comidas con anticipación. Así se evitan ayunos prolongados y ayuda Cuando buscamos información de nutrición a tener alimentos para adultos mayores nos encontramos con saludables siempre a un gran problema, hay muy poca y la que se la mano. tiene es muy general. No es tan difícil enten- 6. Disfrutar la der el porqué de esto, pues por un lado, no comida. Cocina nos gusta hablar de la vejez, y por el otro, las platillos que te gusten, condimenta recomendaciones dependen de la condición con hierbas de olor, o estado físico individual. Por ello me parece siéntate en la mesa importante conocer a cada persona para de- y come cantidades pequeñas; cada que finir qué es lo que necesita. Por ejemplo, hay puedas, procura quien llega a los 70 años con buena salud, comer en compañía. físicamente activo y sin complicaciones, por lo tanto, no requiere de tanto cuidado en su alimentación; pero si tuviese alguna enfermedad o se le dificultara masticar o no hiciese actividad física, todo cambia, y entonces hay que analizar bien el estado de la persona y las recomendaciones deberán de hacerse en función de eso.

A los 20 años son pocas las personas que piensan cómo van a ser a los 40, a los 60, a los 80… Sin embargo, ése es el mejor momento para pensarlo. Tener buenos hábitos desde joven impacta enormemente en una buena salud a futuro; una alimentación adecuada te ayuda a tener menor probabilidad de enfermedades como osteoporosis, hipertensión, diabetes, incluso cáncer, como también puede ayudarte a incrementar la longevidad y calidad de vida para llegar cómodamente a los 80. La buena noticia es que cualquier momento es bueno para empezar los cambios que se verán reflejados a futuro, siempre que éstos se sostengan a largo plazo, y claro, mientras más pronto lo hagas, mejores serán los efectos. No hay duda de que el cuerpo va cambiando con los años. En primer lugar, el requerimiento de calorías disminuye, al igual que la actividad física, y por lo tanto es necesario comer menos que antes; pero también, por ejemplo, puede haber disminución en la percepción de los sentidos, provocando que se disfrute menos la comida. Entonces, por esto y varias cosas más, es muy importante elegir los alimentos que aporten más nutrientes y no más calorías. ¿A qué me refiero? Se debe dar prioridad a alimentos que aporten una alta cantidad de nutrientes de calidad, como las frutas, las verduras, carnes magras, cereales integrales, nueces, almendras, aguacate, y dejar de lado la comida chatarra, que si bien aporta energía y probablemente sepa rico, no te dará los nutrientes necesarios, sino, por el contrario, aportará otro tipo de elementos como colesterol y grasa, que tu cuerpo no necesita. Sin duda, otro factor que hay que tomar en cuenta es la consistencia de los alimentos, para evitar dificultades al masticar; por esto, las sopas y las cremas se vuelven excelentes opciones para los adultos mayores, así como los purés, pero es importante prepararlos y servirlos de una manera atractiva y sazonarlos bien para su disfrute. A fin de cuentas, la vida, como la comida, deben disfrutarse. No se trata de eliminar alimentos y olvidarte de los postres, lo mejor es consumir todo con moderación, en cantidades pequeñas para que cada vez valga la pena.


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postre

del 14 de agosto

Según el sociólogo Amin Maalouf, la identidad es aquello que hace que no seamos idénticos a nadie más; son todos aquellos elementos (pertenencias) que nos constituyen. ¿Y qué más potente en nuestra identidad mexicana, en nuestra tradición chilanga, que la comida y las costumbres alrededor de ella? Por ello, para este número de #YoGlotón visitamos la tradicional Fonda Margarita en la colonia Del Valle, un lugar de deliciosos guisos mexicanos cocinados a las brasas que nos ha dado de desayunar a miles de chilangos durante décadas. He aquí un recorrido por los sabores y aromas de su cocina.

#Yo Glotón

texto Cecilia Moreno ig @cesmoreno

P foto. cecilia moreno


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Tradición es pertenencia, es identidad

P Por más de 65 años, la Fonda Margarita ha alimentado a los trabajadores de la zona, primero como puesto ambulante, sorteando una y otra vez las modificaciones que la colonia fue sufriendo (que una calle aquí, que ahora un parque por acá...), después, finalmente, en el local que los ha albergado los últimos 48 años. Como muchos comercios en este país la Fonda fue emprendida por la familia de doña Margarita Lugo Alba y su marido; y comenzó como un pequeño puesto callejero de barrio en la plaza frente a la iglesia. Pero tal fue el éxito y la necesidad que cubrían que, poco tiempo después, una persona les construyó un local, y luego otra, otro, hasta que llegaron a su ya tradicional número 1364 B de la calle Adolfo Prieto en la colonia Del Valle. Como el entorno, la clientela también ha variado, nos cuenta uno de los hijos que hoy sigue atendiendo el pequeño desayunador, Joel Castillo Lugo. Al principio, los que se detenían a echar el taco tempranero eran los telefonistas y braseros de

Fonda Margarita ▶ Adolfo Prieto 1364 B, Colonia del Valle ● Ma — Do \ 5:30-12 hr. Fb @fondamargarita ✉ contacto@fondamargarita.com

la zona, hoy, nos dice, son más bien oficinistas, uno que otro artista y los borrachitos del fin de semana, pues este lugar sirve deliciosos guisos mexicanos cocinados a las brasas de martes a domingo desde las 5:30 de la mañana hasta las 11, 12 de la tarde. Como toda tradición, heredada generación tras generación, al morir doña Margarita, sus tres hijos, Joel, María de Jesús y Ricardo continuaron el negocio familiar, en el que hoy también participan sus propios hijos. Así, todos los días, esta familia se da a la tarea de guisar a la “antigüita” los básicos tradicionales del lugar, que son su exquisito, en verdad exquisito, chicharrón en salsa verde, los frijoles enteros, los tumbados con huevo, la carne de cerdo en salsa verde y el bistec en pasilla; además de las variaciones que cambian con el día. Dentro del resto de los guisos que se ofrecen de martes a domingo también sirven espinazo con verdolagas, albóndigas con jitomate,

longaniza en salsa verde, tortas de carne, pata de res en salsa verde, carnero en salsa verde, manitas de cerdo, chicharrón en salsa roja, huevo en pasilla y milanesas; y, por supuesto, pancita para el sábado. ¿Y cuál es el ganón? Los deliciosos frijoles refritos tumbados con huevo. Un platillo, una guarnición si quieren, de lo más sencillo, pero de lo más delicioso… y no lo decimos nosotros, el mismísimo Anthony Bourdain, que visitó esta tradicional fonda, dijo al respecto: “esto es exactamente lo que debe ser”. Y en efecto, la tradicional cocina de la Fonda Margarita es exactamente lo que debe ser. ¿Su secreto?, ¿será el carbón, el sazón de esta familia, el calor de la mesa comunal, los años, el entonado cantante de boleros que acompaña a los comensales cada mañana? Es todo; es cada una de estas pertenencias lo que compone la identidad de esta tradición, y los sabores y aromas de este entrañable lugar.

Otros lugares de tradición para comer en la Ciudad de México Restaurante Nicos Cocina tradicional mexicana Av. Cuitláhuac 3102, Clavería ● Lu — Vi \ 7:30-19:30 hr ● Sá    \ 8-19 hr Info nicosmexico.mx Fb @nicos.mexico Ig @nicosmexico Tw @NicosMexico El Pozole de Moctezuma Pozole Moctezuma 12-E, Guerrero ●  Lu — Sá \ 14-19 hrs. Fb @elpozoledemoctezuma Hostería Santo Domingo Cocina tradicional mexicana Belisario Domínguez 70-72, Centro Histórico ● Lu — Sá \ 9-22 hr ● Do    \ 8-21 hrs Info hosteriasantodomingo.mx Fb @HosteriaSantoDomingo Tw @H_StoDomingo Los Chamorros de Tlacoquemécatl Tacos de guisado y chamorro Tlacoquemécatl 117 Colonia del Valle ● Lu — Do \ 9-18 hr Fb Los-Chamorros-de-Tlacoquemecatl El Rey de las Ahogadas Flautas ahogadas Av. Coyoacán 360-E Colonia del Valle ● Lun — Jue \ 11-00 hr ● Vi — Sá \ 11-1 hr ● Do     \ 12-23 hr Fb @elreydelasahogadas

Recuerda que para los lectores LivingUp, Toño obsequiará una bebida a las primeras 10 personas que presenten este número de la revista.

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T Ta

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M S

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al 14 de agosto

#Esquina George Foreman: el viejo que ganó el campeonato mundial en box

texto César González Gómez @elcesargzz

Una derecha cruzada, corta y lenta, explotó en el mentón de Michael Moorer el 5 de noviembre de 1994. Como un edificio en demolición, Moorer cayó en estricta vertical, enrollándose sobre su propio cuerpo como un yoyo, y sacudiéndose violentamente sobre la lona. George Foreman, de 45 años, vio al cielo, y de inmediato se arrodilló en su propia esquina en agradecimiento. El gesto no era una exageración: George Foreman se había convertido en el campeón más viejo en la historia del boxeo. El gesto no era una exageración: George Foreman se había convertido en el campeón más viejo en la historia del boxeo. En boxeo, entrar a la edad adulta equivale a la tercera edad de cualquier humano. El ring presenta más peligros que una selva tropical. Sin embargo, George Foreman, el adulto contemporáneo, un anciano con guantes, disfrutaba de algo más que un segundo aire. Su crisis de los cuarenta no sólo lo rejuveneció, sino que lo dotó de una nueva personalidad. El George Foreman de 25 años que dos décadas antes había enfrentado a Muhammad Ali era el perfecto opuesto al Foreman de los 90. Era un ser oscuro, de mirada siempre encabronada, poco sonriente, lacónico y amenazante. Su cabello era ensortijado, y su barba rala crecía entre sus cicatrices. Golpeaba los sacos como si fueran las costillas de Ali, hasta dejarles un enorme hoyo. Aquel George Foreman era el terror, era la calle… de noche. Luego de su primer retiro en 1977, George Foreman se reinventó. Aceptó y abrazó la idea de dejar atrás al joven para convertirse en un adulto. El retiro lo disfrutó gozando los placeres de la comida rápida y las hamburguesas. Decidió darle un finiquito a aquel cabello ensortijado para quedar en la total calvicie, limpió su rostro de aquella barba rala, y sonrió. Sonrió como nunca. El hombre que más miedo infundía en los cuadriláteros, el terror hecho persona, se había convertido en un gordito afable, sonriente, comelón…y treintón. El gesto de encabronamiento perenne había quedado atrás, y ahora se había construido el personaje del gordito afable. Sin embargo, a los 38 años, y tras diez años en el retiro, George Foreman decidió volver a los cuadriláteros en 1987 para buscar coronarse nuevamente como campeón mundial de los pesados. Con casi 40 años, y en la división más peligrosa del boxeo, el gordito afable se jugaba la vida. Inició una campaña para volver a coronarse campeón mundial de los pesados, ante el escepticismo de todos. Pero las grandes oportunidades no le llegaban por el miedo de que frente a la televisión en vivo, las familias vieran fraguarse una tragedia ante sus ojos. Durante casi tres años, George Foreman peleó en arenas oscuras, en pueblos desconocidos, lejos del glamour de las grandes carteleras, como lo había hecho 20 años antes. Su edad asustaba, quemaba. Era tóxica. Pero 23 nocauts en 24 triunfos en su campaña de regreso, finalmente hicieron inevitable la pelea por el título mundial. Foreman perdió contra Evander Holyfield por decisión unánime el 19 de

abril de 1991, y luego, dos años después, también perdió frente a Tommy Morrison. Recibió una tercera oportunidad titular y fue ahí que logró hacer historia, vencer al tiempo y volver a coronarse campeón mundial de los pesados tras demoler a Michael Moorer en Las Vegas. Era 1994 y Foreman tenía 45 años. Para el boxeo, que había visto coronarse a Mike Tyson a los 20 años como el campeón más joven en la historia de los pesados, George era un anciano que se valía de un solo recurso, el uno-dos: jab de izquierda y cruzado de derecha. Ese único recurso, momificado y lento, le valió para llevarse el triunfo. Técnica. El deporte, a la vez que ensalza la adolescencia, también se la engulle. El atleta adolescente recibe responsabilidades de hombre adulto, limita los placeres de la vida, pierde el privilegio de estirarse en la cama a las 10:00 de la mañana, cuida con rigor su alimentación, y vive diferente de su tribu. Como empieza temprano, también termina pronto. A los 30 años, muchos atletas se han jubilado. Mentes frescas habitando cuerpos devastados, improvisando sus próximos derroteros en la vida. Cruel como es, el deporte crea ancianos jóvenes. George Foreman hizo que ese concepto de “ancianidad” al que lo orilló el deporte, quedara en una abstracción. Vetusto para un deporte de alto riesgo, George Foreman recuperó la frescura respirando dentro del nuevo personaje que se había construido para vivir la segunda parte de su vida, su segundo aire. Parte de su reinvención fue la de convertirse en vendedor, y terminó marchándose de forma definitiva del boxeo para incursionar en los negocios. El gordito afable, y su sonrisa entrañable se volvieron el rostro de una línea de parrillas que prometían retirarle la grasa a cualquier carne que se cocinaba en ella. El artilugio fue un éxito. Se calcula que la parrilla de George Foreman ha vendido más de 100 millones de unidades. Según distintas fuentes, el peleador se embolsó 138 millones de dólares en 1999 cuando accedió a alquilar su nombre y su imagen para promocionar la parrilla. Como peleador activo, su bolsa más cuantiosa fue de 12.5 millones de dólares cuando peleó con Evander Holyfield en 1991. George Foreman fue joven para el boxeo, pero también viejo. Él mismo decía que no le gustaba el deporte, que peleaba para recibir un cheque. Y finalmente, su cheque más importante le llegó cuando estaba acabado en el boxeo, cuando alguien tuvo la idea de que aquel gordito afable, y su sonrisa, se verían bien como el rostro de una línea de parrillas. George Foreman se volvió multimillonario. El gordito de las parrillas descubrió que la vida del hombre se consume a fuego lento.


… procuro hacerla enseguida.  »

foto. cortesía

—Pablo Picasso



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