Maria Cooper La Vanguardia paper May'11

Page 1

10 LA VANGUARDIA

Gente

V I V I R

DOMINGO, 8 MAYO 2011

Gustavo Martín Garzo

LA FRASE

“Lo que una persona encuentra cuando lee no son cosas extrañas y ajenas, sino que tienen que ver con sus preocupaciones, sus inquietudes y sus anhelos”.

Declaraciones del novelista vallisoletano, recogidas por Europa Press.

Maria Cooper Janis recuerda a su padre a los 50 años de su muerte

Familia. Maria, con sus padres, Gary Cooper y Veronica Balfe, Rocky.

GARY COOPER Entre el mito y la leyenda

ARCHIVO

LUIS FERNANDO ROMO Nueva York

M

illones de personas le soñaron en blanco y negro y representó el icono de la bondad, pero para Maria fue, simple y llanamente, papá. El próximo 13 de mayo se cumplen cincuenta años de la desaparición de Gary Cooper y así, de repente, a 24 fotogramas por segundo, recordamos sus magistrales interpretaciones en Bola de fuego, El sargento York o Sólo ante el peligro. Pero los cotillas cinematográficos hurgan en su corazón y sacan a la palestra sus romances con otras estrellas de su mismo uni-

Cooper se arrepintió por rechazar ‘Lo que el viento se llevó’, y del aborto de su amante, Patricia Neal verso como Clara Bow, Lupe Vélez, Marlene Dietrich, Ingrid Bergman o Patricia Neal. Su hija se queda atónita. Y matiza: “¡Pero si Ingrid fue una amiga de la familia! De hecho, me llevo fenomenal con su hija Pia”. No dice casi nada de Neal, con quien se lió durante el rodaje de El manantial (1949), se quedó embarazada, abortó y siempre se arrepintió. Por ello, Gary y su esposa, la guapísima Verónica Balfe, alias

Rocky, se separaron entre 1951-54. “Lo pasé muy mal. Estuve sin hablarme con Patricia durante muchos años, hasta que ella tuvo una apoplejía, le escribí una carta, nos reencontramos, me contó que su marido, el escritor Roald Dahl la había dejado por su mejor amiga y nos reconciliamos”. Maria es una prestigiosa pintora. De hecho algunos de sus cuadros cuelgan en casa de alguno de los miembros del clan Kennedy, como Patricia Kennedy, exmujer del actor Peter Lawford. Sentada en el salón de su apartamento de Park Avenue, recuerda a su padre: “Era un caballero y trataba por igual a todo el mundo, fuera la reina de Inglaterra o ante el que arreglaba las bicicletas. Tenía un gran sentido de la justicia y una vena cómica que solo supo explotar Billy Wilder”. Debutó en el cine en 1925 e intervino en Alas (1927), que ganó el primer Oscar y supuso su despegue en Hollywood y el inicio de su romance con Clara Bow. A finales de los treinta protagonizó la metedura de pata más grande de su carrera: “Rechazó el papel de Rhett Butler (Clark Gable) en Lo que el viento se llevó porque pensó que iba a ser un fracaso. Siempre se arrepintió”, asegura Maria. Estuvo nominado tres veces a los Oscar por El secreto de vivir (1936), El orgullo de los Yankis (1942) y Por quién doblan las campanas (1943), y lo obtuvo en tres ocasiones, por El sargento York (1941), Solo ante el peligro (1952) y otro honorífico en 1961. En las reuniones familiares alrededor del piano de su casa era

Un héroe de cine. Solo ante el peligro, con Grace Kelly –por el que obtuvo, en 1952, uno de sus tres Oscar–; El vaquero y

ARCHIVO

Picasso coloreaba su correspondencia ]Gary Cooper tuvo tres grandes amigos: James Stewart, Hemingway

–que se pegó un tiro semanas después de morir el actor–, y Picasso, que coloreaba las cartas y postales que enviaba a Maria Cooper Janis.

la dama, con Merle Oberon; y Morocco, junto a otra divina de celuloide, Marlene Dietrich, tres de los trabajos más populares del actor.

habitual ver a Maria rodeada de Bing Crosby, Judy Garland o Frank Sinatra, pero a pesar del entorno, recalca que su infancia fue muy normal. “Mi padre quería que limpiara mi cuarto o que hiciera la cama. Junto a él aprendí a montar en bici, a esquiar, a bucear...”. Fue gran amigo de Hemingway, con quien iba de caza y toreaba en España, e intimó con Picasso, que decoraba sus fotos y dibujaba los sobres que enviaba a los Cooper. Maria recuerda el rodaje de Veracruz pero no conoce a Sara Montiel. Se troncha de la risa con la anécdota de la actriz. Cuenta Sara: “Como no sabía inglés me estudié el guión fonéticamente.


LA VANGUARDIA 11

V I V I R

DOMINGO, 8 MAYO 2011

Hace 27 años (1984)

LA EFEMÉRIDE

J.M. Caralps coordinó el primer transplante de corazón –con éxito– en España, en el hospital de Sant Pau.

MEDIOS Serenidad. En su salón de Park Avenue, de Nueva York, atendiendo la entrevista.

CRÍTICA DE TV

Víctor-M. Amela

La fama socializada FLAVIÀ. La entrevista televisiva es un género con mil caras. Una que me gusta es la que le pone Carles Flavià en Jo què sé! (BTV). Siempre que lo sintonizo al azar, zapeando, consigue que me quede. En Jo què sé! vemos una presentación de lo más simple: una mesa y dos sillas. Y primerísimos planos (como aquellos que nos sorprendían hace muchos años en De cerca, entrevistas de Jesús Hermida). Y el talento del señor Flavià para la charla coloquial, para el requiebro (si la entrevistada es una dama), para la ironía, para el comentario gracioso, para la aproximación al interlocutor, tan desenvuelta como respetuosa. Flavià conversa con amigos, conocidos y saludados, y echa mano en cada caso de su campechanía y de su curiosidad personal: no pretende aparentar nada, pregunta y escucha, y resulta una entrevista televisiva de lo más estilizado y agradable. No hace falta más. No es tan complicado hacer un buen programa de entrevistas en la tele si se pone al frente a alguien con ganas genuinas de preguntar y conversar, ¿no? Yo qué sé.

LUIS FERNANDO ROMO

Byron Janis, el yerno pianista ]A su lado se encuentra su

pin and beyond: my extraordinary life in music and the paranormal. Ahí cuenta, entre otras cosas, su lucha desde que le diagnosticaron en 1973 una artritis psoriásica que a punto estuvo de acabar con su carrera: “Fue un secreto doloroso que no conté a nadie. La artritis me enseñó a mirar dentro de mí para encontrar una nueva fuerza y creatividad. Si yo pude, vosotros también”. Su anciano corazón lo cuida el eminente cardióloLUIS FERNANDO ROMO go español Valentín Fuster. Maria y Byron, melodía para dos marido, Byron Janis, uno de los mejores pianistas del mundo, a quien ha ayudado a escribir su biografía Cho-

Recuerdo la siguiente frase: ‘Would you like to fight with me?’ (¿Te gustaría luchar conmigo? [‘fight’ se pronuncia fait]), la repetí varias veces, y cuando el director dijo acción, dije: ‘Would you like to fuck with me?’ (¿Te gustaría follar conmigo? [Fuck se pronuncia casi parecido a fait], y Gary contestó: ‘Of course’ (Desde luego)”. “Papá tenía una gran facilidad para quedarse dormido en medio de un rodaje”, confiesa su hija. Enfermo de cáncer, no pudo recoger su Oscar honorífico, así que lo hizo su íntimo amigo, James Stewart. “Eran inseparables. Mis padres fueron sus celestinos. Jimmy tenía cuarenta y pico y no se casaba, así que le presentaron a Gloria, separada y con hijos. Se cayeron bien, se casaron y fue el amor de su vida”. Gary murió seis días después de cumplir 60 años. Unas semanas después, Hemingway se pegó un tiro.c

SAUCA. Mi crítica al trabajo poco profesional de Sergio Sauca en el último Barça-Madrid ha provocado algún debate internáutico, del que destaco esta reclamación: si afeo al periodista Sauca que anime en Televisión Española a uno de los dos equipos españoles que disputan un partido, igualmente debería afear a los periodistas de TV3 que animen a un Barça que juegue contra otro equipo catalán. Tienen razón los reclamantes: si bien en este caso se trata de un conflicto más doméstico –no rompe España, sólo es una querella vecinal–, ese forofismo unilateral resulta igualmente muy desagradable. AÍDA. Sostuvo Abraham Maslow que una vez que te has garantizado el sustento, el cobijo y el cariño de algunos íntimos, anhelarás algo más: reconocimiento social. Y el reconocimiento social es un regalo que la televisión está en óptimas condiciones de proporcionarte, dado que actualmente es la televisión la gran proveedora de visibiAmad a vuestros hijos, lidad social. Pero debes saber que o bien acabarán no siempre la visibilidad condubuscando vuestro ce necesariamenreconocimiento te al reconocimiento: veo a la en ‘Gran Hermano’ pertinazmente televisiva Aída Nízar (joven de cabello azabache, intemperante carácter y ahorrativa en bragas) esparcir acíbar en su torno con el propósito de medrar en platós y formatos televisivos de gran consumo (ahora en La isla de los supervivientes, Telecinco), y esa altísima visibilidad televisiva que consigue... sólo se traduce en una animadversión generalizada hacia su persona. Esta Aída parece no saber mantener con el prójimo otra relación que no sea de dominio, ofensa o conflicto, sea por naturaleza o rentable fingimiento (eso es lo de menos): supongo que le compensa íntima y económicamente ser detestada por la mayoría de telespectadores, pues de lo contrario no se entiende tanto esfuerzo por resultar odiosa. La televisión, como la vida, nos ofrece todas las oportunidades, y nosotros libremente (con nuestro carácter) elegimos. Reflexión final sobre el reconocimiento, esto es, la fama: en la antigüedad la proporcionaba ser el mejor discóbolo, mostrar coraje en la batalla, ser buen gladiador, buen trovador, eficaz dramaturgo, deslumbrante pintor, escultor, poeta o arquitecto, o ser muy rico o muy guapo. Hoy basta con estar en un plató. Es un nuevo oficio: estar, o sea, ser famoso. Amad y estimad a vuestros hijos..., o acabarán buscando vuestro reconocimiento en Gran Hermano.


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.