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Mi Ángel

Había un matrimonio que tenía tres hijos, pero un 19 de agosto llegó a sus vidas un angelito especial que cayó del cielo para ellos, y ese nombre le dejaron: Angelito. Sus padres notaron en sus ojos algo inusual. Acudieron al doctor y él también lo notó. Le hicieron pruebas y estudios que revelaron que él era un angelito especial. El doctor comunicó a los padres la noticia lo más pronto posible y ellos inmediatamente la comunicaron a sus hijos, familiares y amigos. No había nada por ocultar y mucho por celebrar.

Todos trataban a Angelito con respeto y cariño, como un niño normal. Querían proporcionarle lo mejor y desgraciadamente no estaban bien económicamente; sin embargo, las carencias y privaciones no impidieron que fuera un bebé latoso y feliz. Abuelos, tíos, primos y, sobre todo, sus hermanos lo admiraban, pues habían visto su desarrollo y entusiasmo.

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Tal vez la familia carecía de recursos materiales, pero de amor jamás, eso les sobraba, tanto que un día los papás les dieron un regalo a Angelito y a sus hermanos: Aranza, su nueva hermanita. Para Angelito fue genial, pues ver un bebé era muy raro, pero su corazón se llenó de felicidad. Para él y sus hermanitos fue una nueva experiencia.

Tiempo después, Angelito empezó sus terapias para que pudiera hablar y caminar, ya que decían que no podría hacerlo, pero con su esfuerzo, perseverancia, y el amor y dedicación de su familia, él logró caminar antes de lo esperado, y a todos les dio mucho gusto. Sus terapeutas del DIF lo admiran, lo quieren y lo cuidan, pues cada logro de Ángel es el producto del esfuerzo de todos. El ver sonreír a Ángel les alegra el día.

En ocasiones, Ángel falta a sus terapias porque su estado lo hace enfermarse constantemente de las vías respiratorias y hay que tener cuidados especiales con él, para que no recaiga; pero cuando regresa le echa más ganas a sus ejercicios. Como cualquier niño, Ángel hace travesuras y se molesta cuando no puede hacer sus ejercicios y no puede lograr sus metas: saltar, correr, brincar...

Ángel ha aprendido a tocar la guitarra y le gusta mucho cantar. La otra vez estábamos festejando el Día de la Candelaria y Angelito nos dio un show de rock. En el festejo, tocó, cantó y al final rompió la guitarra. Angelito es el niño más creativo que he visto. Tal y como su nombre lo dice es un angelito... mi angelito.

Danna Laura Velázquez González Cuarto grado de primaria Escuela Primaria “Club Rotario” 11EPR0530R San Felipe

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