3 minute read
III. ACTORES INTERVINIENTES EN EL DELITO DE “TRATA DE PERSONAS
La segunda etapa está dada por el “transporte” y “traslado”, de la víctima desde su lugar de origen a su lugar de destino. Es importante resaltar que, a diferencia del delito de “tráfico de personas”, como fue mencionado en el punto I., el lugar de destino puede ser tanto local como internacional. La víctima puede viajar “acompañada” por el reclutador o sola, pero en la mayoría de los casos, el dinero y/o los pasajes son proporcionados por la red delictiva.
Advertisement
El desplazamiento de su lugar de origen provoca un desarraigo, dejando a la víctima en un lugar de vulnerabilidad tanto emocional como económica, además de dificultar la investigación y búsqueda por parte de las autoridades.
Durante los últimos 15 años, se registró un aumento en el número de víctimas locales de trata; estos números se ven reflejados en el Reporte Global de Tráfico de Personas de UNDOC (2018). De acuerdo con esta publicación, la gran mayoría de las víctimas son detectadas dentro de su propio país. En Latinoamérica, el 93% de las víctimas de trata fueron detectadas dentro de la misma región.
El siguiente gráfico de 2016 detalla el porcentaje de víctimas detectadas por área de origen y detección; a su vez se tienen en consideración las subregiones.
Finalmente, en la fase final se produce la “explotación”, la cual supone sometimiento y privación de la libertad de la persona mediante distintos mecanismos de coerción, como lo son el control de sus movimientos, de su entorno físico, la violencia física o psicológica, la sujeción constante a un tratamiento de extrema crueldad, entre otras formas. En síntesis, estos mecanismos se pueden englobar en tres grandes grupos a saber: - Mecanismos económicos: Se utilizan sistemas de endeudamiento inducido. El ciclo comienza con la deuda
adquirida por el costo del pasaje de traslado, desde su lugar de origen a su lugar de explotación, y luego se va
incrementando con el costo de alojamiento, comida y elementos de higiene, por los cuales debe pagar precios muy superiores a los de mercado. A ello se le suma un sistema de multas pecuniarias por supuestas faltas cometidas, como ser llegadas tardes y otros incumplimientos. El explotador suele definir unilateralmente el porcentaje que cobra la víctima, disponiendo esta última de muy poco dinero lo que la coloca en una situación de endeudamiento perpetuo y una anulación de su autonomía económica. - Mecanismos de uso de la fuerza o amenaza: La violencia sufrida por la víctima puede ser tanto física, sexual y hasta psicológica y en muchos casos, se las amenaza con denunciarlas a las autoridades locales. - Mecanismo de control sobre la víctima: Implica un control sobre cada aspecto de su vida como ser falta de descanso, control permanente, privación de la libertad, malas condiciones habitacionales, aislamiento, confiscación de documentación, etc.
El objetivo final de esta fase es lograr un lucro económico. Para lograr este cometido, las víctimas serán sometidas a distintos tipos de explotación según se detalla: a) Explotación sexual: el lucro en este caso estará dado por la explotación sexual ajena, principalmente en mujeres, niñas y niños. Este tipo de explotación incluye la pornografía infantil, el turismo sexual. b) Explotación laboral: el principal objetivo de las víctimas es conseguir mejores condiciones de vida que las que llevan en sus provincias o países de origen. Ante esta necesidad de mejorar sus condiciones de vida se ven engañadas tanto en los trabajos que van a realizar como así también en las condiciones de paga que finalmente no condicen con lo que fue prometido. La producción agropecuaria, la industria textil, hotelería, el servicio doméstico, la construcción, la minería y la pesca son los sectores de la economía que mayor número de casos de explotación laboral registran en el mundo. Este tipo de explotación afecta principalmente a hombres, niños y niñas. c) Extracción de órganos: la extracción de los mimos para trasplante, que se concreta mediante el engaño o uso de la fuerza.
d) Prácticas análogas a la esclavitud: De acuerdo a la “Ley Modelo de la UNODC sobre la Trata de Personas” la definición para las “prácticas análogas a la esclavitud” abarcan la servidumbre por deudas, la servidumbre de la gleba, el matrimonio servil y la explotación de niños y adolescentes. El matrimonio forzado es la institución o acción de hecho por la que una persona es otorgada o tomada en matrimonio a cambio de una contraprestación, por dinero o por cualquier otra clase de bien, o como herencia.