1
¿Sabías que es posible compaginar tu pasión con el éxito y la prosperidad? SÍ, no es necesario que sigas atado a ese trabajo que te aburre, a esa vida que te impide ser feliz. Primera advertencia: no es una rifa, no es magia, no es un truco. Es que, con una pequeña condición, voy a poner a tu disposición la fórmula de mi éxito y prosperidad. Te lo compartiré TODO, sin trampas, sin secretos, sin mentiras. SÍ, vas a saber cómo hice para convertirme en EL PADRINO del marketing y los negocios por internet. La única condición es que me acompañes en el COMANDO SECRETO República Dominicana con Álvaro Mendoza y Gus Sevilla. Serán 5 días y 6 noches que cambiarán tu vida para bien. ¿Qué debes hacer? Cliquea aquí y entérate de los detalles del evento que se realizará en un paraíso.
2
Segunda advertencia: esta es una oportunidad única, irrepetible. Un ataque de locura que espero no me vuelva a dar. ¿Me ayudas a abrir el cofre de mis más preciados tesoros? De regreso a casa, te lo garantizo, habrás logrado la combinación perfecta. ¿Te lo imaginas? El escenario de tus sueños y la oportunidad de cambiar el rumbo de tu vida y de tu negocio, conduciéndolas al éxito, la felicidad y la prosperidad. Vamos a guiarte para que te posiciones como experto de tu mercado, empaquetes tus contenidos digitales con un impacto increíble, crees una marca personal poderosa. Eso y mucho más podemos hacer si nos lo permites. Solo debes ir aquí y darte la oportunidad de participar del Comando Secreto República Dominicana con Álvaro Mendoza y Gus Sevilla. ¡Te esperamos!
¿QUÉ DEBES HACER? CLIQUEA AQUÍ y entérate de los detalles del evento que se realizará en un paraíso.
3
Apreciado lector, tenga en cuenta el significado de estos íconos para que sea más fácil la lectura y pueda encontrar los enlaces a páginas web y a videos
Haz Clic Para Ver El Video
Haz Clic Para Ver El Enlace
Indica que el artículo sigue
Haz Clic Para Descargar
MercadeoGlobal.com/revista revista@MercadeoGlobal.com Mercadeo Global 8374 Market St Unit 161 4 Lakewood Ranch, FL 34202. USA
Editor General Álvaro Mendoza
alvaro@mercadeoglobal.com
Asesoría Periodística Carlos Eduardo González caredugo@mercadeoglobal.com
Diseño Giancarlo Rodríguez
gian@mercadeoglobal.com
EDITORIAL
¿Que estoy loco? Sí, y muy feliz Durante mucho tiempo, lo confieso con algo de rubor (que gracias a mi piel morena no se ve), fue un asunto que me provocó pánico. Recordarlo es como revivir esas pesadillas que juré nunca volver a protagonizar, pero en algún momento entendí que ese dolor era parte vital del sufrimiento, uno de los ingredientes indispensables del aprendizaje. Hasta que logré soltarlo, me liberé de las amarras y me dediqué a ser feliz. ¡Y soy feliz!
Vivía en casa de mis padres, tenía un genial grupo de amigos con los que pasaba ratos inolvidables, me daba los gustos que quería, había comprado un auto y en teoría hacía lo que me gustaba, ejercía mi profesión. ¡La vida perfecta!, podrá decirme alguno, pero nada más alejado de la realidad. Pronto descubrí que estaba desperdiciando mi tiempo en este mundo, que mi vida no iba para ningún lado y, entonces, decidí dar el salto al vacío.
1998 es un año que quise borrar de mi memoria, unos recuerdos que hubiera pagado por eliminar de mi disco duro. Cuando lo recordaba, me corría un corrientazo por todo el cuerpo, como si fuera a electrocutarme. Honestamente, sentía pánico de que el tiempo diera vuelta atrás y me pusiera otra vez allí, en un lugar, en unas condiciones que no deseo repetir. No son para mí, no es lo que quiero para mi vida.
Con algo de nostalgia recuerdo aquella noche en la que le dije a mi madre que había decidido dejar Colombia y volar a Estados Unidos, en busca de mis sueños. No te imaginas cuánto me costó fabricar el ‘escenario perfecto’ para darle la noticia a la señora Julita, convencido de que iba a estallar en llanto, que le provocaría un dolor inmenso. Sin embargo, para mi sorpresa, lo que ocurrió fue muy diferente.
Tiempo después, mucho después, lo superé. Comprendí que era algo que tenía que vivir, era un golpe que debía recibir de la vida para espabilar, para atender los mensajes que me enviaba. Y, sobre todo, para no desaprovechar las oportunidades que se paseaban ante mis ojos. Entonces, no hubo más remedio: había que salir de la zona de confort y enfrentarse al universo, a puño limpio si era necesario.
“Mijo, si eso es lo que desea, yo lo apoyo. Es su vida y no importa qué piensen los demás, incluida su mamá. Yo lo apoyo y le deseo la mejor de las suertes”, me dijo con esa tranquilidad que la caracteriza. ¡Plop!, ¡replop! No sabía qué hacer, no estaba preparado para una respuesta como esa. Lo que sí recuerdo es que sentí un nuevo corrientazo, muy fuerte, pero esta vez de tranquilidad, de confianza, de ilusión. 5
La lista de personas cercanas que me dijeron que estaba loco es demasiado larga para mencionarla, pero créeme que es posible llenar un auditorio con ellas. Me auguraron fracasos, me pintaron un panorama negro oscuro y no pocos me dieron la espalda. Igual, hice maletas, pagué exceso de equipaje porque traje conmigo mis sueños e ilusiones y me embarqué en la experiencia más maravillosa que pudiera imaginar. Y aquí estoy, con algunas cicatrices en el alma y otras en la piel, producto de las dificultades que debí sortear, que no fueron pocas, ni agradables. Y aquí estoy, recordando con gratitud aquellos años de juventud en los que por culpa de mi resistencia a salir de la zona de confort estuve a punto de echar a perder mi vida, las oportunidades que me brindaba la vida. Y aquí estoy, feliz como una lombriz. Otras veces me habrás escuchado decir que convertirme en emprendedor fue la mejor decisión de mi vida. Y, sí, lo repito a diario cuando me despierto, cuando veo la agenda que me espera, cuando entro en contacto contigo o con algún otro cliente, cuando converso con mis socios, discípulos o miembros de mi equipo de trabajo. Si el tiempo regresara a 1998, no lo dudaría como lo dudé en aquel entonces. Sí, volvería a dar el salto al vacío. Cien veces, mil veces. Más allá de las magulladuras provocadas por las caídas, por las decepciones naturales del proceso de aprendizaje, de esos momentos de soledad y desolación en los que le pedía a la tierra que me tragara, lo disfruté. Lo supe después, mucho después, pero lo cierto es que lo disfruté: como cuando muerdes una fruta y el primer sabor es ácido, pero luego aparece el delicioso dulce. Hoy, por eso, si alguien se acerca y me dice que su sueño es emprender, sin anestesia le digo que debe salir de su zona de confort. Algunos llegan hasta ahí, porque no están dispuestos a dar ese paso. Otros, los verdaderamente apasionados, formulan la pregunta mágica: “Álvaro, ¿tú me ayudarías, tú me acompañas en ese proceso?”. Claro que sí. Para eso estoy, para eso trabajo, ese es mi compromiso, esa es mi pasión, ese es mi sueño.
6
MercadeoGlobal.com/triplique
¿Has estado alguna vez en un laberinto sin salida? Es una de las experiencias más angustiosas que pueda vivir el ser humano. Cuando entras en él, a veces sin darte cuenta, estás seguro de que vas a encontrar la salida. Sin embargo, a medida que avanzas te sientes más perdido y, entonces, la angustia se apodera de ti. Y pierdes la paciencia, y la orientación, y se nubla tu mente, y no te queda más remedio que gritar pidiendo auxilio. Eso mismo ocurre cuando te sientas cómodamente en ese sillón de fino cuero que es la zona de confort. Al comienzo, te agradan la suavidad, la tranquilidad y la seguridad. Estás en un ambiente en el 8
que no corres riesgos, no hay amenazas, en el que tienes el control de las situaciones. Crees saberlo todo sobre ese lugar y eso, por supuesto, te brinda una sensación de felicidad que, a la postre, no es más que una ilusión efímera. La zona de confort es un hábito y, como tal, es aprendido. Eso significa que también puede ser desaprendido, es decir, modificado, suplantado por uno útil y positivo. Se adquiere en casa y se refuerza fuera de ella. Dada la inseguridad y los peligros a los que el ser humano se enfrenta en la caótica realidad actual, la zona de confort se ha convertido en el escudo para evitar esos riesgos, para no sufrir los golpes de la vida.
Es zona de confort cuando a un joven, que ha sufrido una decepción amorosa, se lo anima a que evite otras relaciones, sin caer en cuenta de que ese tropiezo es parte vital del aprendizaje. Es zona de confort cuando al empleado lo despiden del trabajo y se refugia en su casa, en actitud de víctima, porque “nadie me comprende, ni valoran mi conocimiento y mi experiencia”, y no se reconoce limitaciones o problemas personales.
Es zona de confort cuando tu negocio no funciona, pero la culpa es de la alta cotización del dólar, del variable precio del petróleo, de los vaivenes de la economía, de la amenaza del terrorismo, y no se ven y no se aceptan los errores estratégicos. Es zona de confort cuando dejas que tu vida pase día a día, pero no la vives a plenitud, no aprovechas las oportunidades, no entiendes que vida solo hay una, y que además es muy corta. “Él es muy celoso, y me controla todo el tiempo, pero lo hace porque me quiere”, es una frase que escuchamos con frecuencia de boca de mujeres que son víctimas de maltrato, pero que justifican las agresiones y se aferran a esas personas. Una frase que encierra la terrible aceptación de una zona de confort dañina, pero que les brinda algún bienestar material (si así se lo puede llamar) que para algunas personas es lo único importante.
La zona de pánico, que a muchos atemoriza, tiene su encanto: allí están los grandes retos, esos objetivos que te demuestran lo grande que eres, cuánto vales, de qué eres capaz.
Que no se vaya a creer, en todo caso, que la zona de confort siempre tiene connotación negativa. En efecto, también hay zona de confort cuando te acostumbras a la rutina del día a día, a pesar de las molestias que te provoca, y decides quedarte ahí. Por ejemplo, cuando te resignas al sometimiento, al acoso y a la falta de respeto de tu jefe en el trabajo, o a perder varias horas metido en el tráfico, o a no tener tiempo para ti. Todos, alguna vez en la vida, estuvimos (o estamos) en una zona de confort. Al menos en una.
9
Asumámoslo como una parte del proceso, como un aprendizaje de lo que NO debe ser nuestra vida, de lo que NO deseamos que sea nuestra vida, y salgamos de allí. ¿Por qué hacerlo?, te preguntarás: porque si sigues allí te pierdes experiencias, conocimientos, relaciones y emociones que te harán feliz, que te enriquecerán espiritualmente. Para salir de la zona de confort solo se necesita una condición: DE-CI-SI-ÓN. Sí, que honestamente desees construir tu mejor versión. Empezar por un descarnado análisis de tu pasado y determinar qué te gusta y qué te disgusta, y lo mismo con el presente. Dentro de la zona de confort hay aspectos positivos, y debes preocuparte por no perderlos porque ese sería otro error. Eso sí, lo malo, lo dañino, ¡bótalo, quémalo, desaparécelo! La decisión es el primer paso, pero luego viene lo difícil: requieres confiar en ti, en tus instintos, en tus corazonadas, y seguirlas. Necesitas trabajar duro cada día, porque la zona de confort tiene poderosos y largos tentáculos que intentarán llevarte de regreso allí. Y debes darte la oportunidad de soñar despierto: sí, imagina tu mejor versión, tu yo exitoso y feliz, próspero y abundante, y no te detengas hasta que lo alcances. Alrededor de la zona de confort está la zona de aprendizaje: es el escenario que te permite ampliar tus horizontes, cultivar tus sueños. 10
Nada de lo que pienses o sientas te va a sacar de la zona de confort si no reconoces el problema y, lo más importante, sino das el primer paso: ¡Actúa, hazlo ya!
Allí, la vida te da la oportunidad de disfrutar viajes, idiomas distintos, relaciones nuevas, culturas desconocidas, clientes fieles. La actitud adecuada se refleja en permanente observación, experimentación, aprendizaje y comparación. Es la vida que te estabas perdiendo en el pasado. Salir de la zona de confort, sin embargo, implica riesgos: esa es la razón por la cual muchos prefieren seguir ahí, porque tienen miedo de enfrentar sus miedos. En ese lugar, en la zona de pánico, te ves al desnudo: observas lo que eres, lo que sientes, lo que quieres, lo que temes, lo que te estanca… Es un paso indispensable, porque es justamente donde puedes determinar qué desechar, qué potenciar y qué ir a buscar. Es un período en el que vivirás una lucha interna entre la tensión emocional, que te quiere de regreso en la zona de confort, y la tensión creativa, que te impulsa hacia el desarrollo personal. Tendrás que vértelas con el qué dirán, con el miedo a fallar y al ridículo, pero también te podrás respaldar en la motivación de vivir experiencias enriquecedoras como disfrutar de tu familia, contar con tiempo libre para darte gusto y viajar.
Entonces, de estar en un estado en el que dejas pasar la vida te encuentras en otro en el que eres el protagonista de tu vida: tú decides, superas tus miedos, fortaleces tu autoestima. Buscas un qué de motivación, identificas la verdadera misión de tu existencia, determinas para qué quieres alcanzar tus sueños y, lo más importante, PASAS A LA ACCIÓN. Esa es la gran ganancia de salir de la zona de confort, es el beneficio. Si llegas hasta ahí, estás en tierra firme. Experimentarás incertidumbre porque no sabes cómo hacerlo, te asaltarán las dudas, pero la fuerza de tu pasión, de tu convicción, de tus sueños, es más poderosa y evitará que des marcha atrás. Comienza el proceso de construir esa vida feliz y próspera que soñaste, una etapa que requerirá estrategia, paciencia y perseverancia, pero que te brindará recompensas inconmensurables.
Por supuesto, ese es el momento decisivo: como en el boxeo, cuando el árbitro levanta la mano del ganador ya no hay vuelta atrás. Si permites que te dominen las tensiones emocionales, tarde o temprano descubrirás que la zona de confort es, más bien, una cárcel. Si consigues que el triunfo se lo adjudiquen las tensiones creativas, ingresarás a un universo ilimitado de posibilidades, de oportunidades, de éxito y felicidad. 11
12
HablarParaVender.com
Soy padre de dos niñas maravillosas, que cada día suponen un reto a veces indescifrable. Estos niños del siglo XXI vienen con una configuración muy distinta a la nuestra, a la de generaciones anteriores. Y no solo por esa innata capacidad para conectarse automáticamente a lo digital, sino porque tienen una visión diferente del mundo. Y ese diferente significa que todo el tiempo nos tienen en jaque a los padres.
Una de ellas es el modelo de crianza, que a mi juicio es la raíz de muchos de los problemas del mundo actual. Procuro ser muy respetuoso de la forma en que otros padres educan a sus hijos, porque entiendo que cada familia es un universo único. Después de conocer algunos de ellos, de analizarlos desde mi experiencia, casi siempre saco la misma conclusión: ¡No quiere educar a mis hijas bajo esos preceptos, en ese modelo!
Además, seguramente lo sabes, soy sicólogo de profesión. Eso, sin duda, es como una cajón de herramientas útiles que de cuando en cuando me sirven para solucionar algún problema, para encontrar la salida a alguno de los acertijos que me plantea la crianza de las niñas. Y también me da una perspectiva más amplia de la vida, puedo percibir situaciones y circunstancias que para el común de las personas pasan inadvertidas.
¿Cuál es el problema? La premisa es la sobreprotección. Si tú eres padre, te invito a que, con la mano en el corazón, y antes de sentirte molesto, te cuestiones acerca de esta realidad.
La zona de confort no es más que una cárcel que tú mismo construyes y que te impide ser feliz y exitoso. Y tú, solo tú, puedes liberarte de ella.
13
Estoy prácticamente seguro de que vas a reconocer que sí, que eres un padre sobreprotector, y estoy seguro también de que puedes ofrecerme mil y un argumentos que sustenten esa conducta. Y está bien: es tu elección, y es respetable. Sin embargo, percibo la sobreprotección como una jaula, como unas pesadas cadenas que impiden que esa persona se desarrolle, muestre su mejor versión. Creo que es el ambiente propicio para que se cultiven los miedos, es un escenario perfecto para generar hábitos como la inseguridad, la falta de compromiso, la ausencia de responsabilidades. Me aterra, porque pienso que los niños que se educan bajo ese esquema no son felices. Con mi esposa Jenny hablamos con frecuencia de ese tema, pues obviamente tenemos diferentes concepciones y somos conscientes de que la tarea de criar a nuestras hijas solo tendrá éxito en la medida en que actuemos como un equipo. La premisa es que lo único importante es que Nichole y Laura sean felices y, sobre todo, que aprendan a ser personas útiles con nuestro apoyo, pero por sus propios medios. Por eso, en la casa las arropamos con amor, con cariño, intentamos brindarles la seguridad que necesitan, pero igualmente les exigimos, las retamos, les enseñamos a pensar por sí mismas y a tomar sus propias decisiones. Gracias a esa configuración que traen, la respuesta que hemos recibido es fabulosa, al punto que ellas mismas se interesan en el tema y preguntan cuáles son los beneficios de este estilo de crianza.
14
Hablar de la zona de confort con un niño no es un tema fácil, por más sicólogo que seas. Es un escenario resbaladizo que no puedes abordar de la misma manera que lo haces con un adulto. Sin embargo, cuando mis hijas preguntan les respondo con cinco razones por las cuales no solo ellas, sino cualquier ser humano, debería preocuparse por salir lo más pronto posible de la zona de confort. Aquí las comparto contigo: Serás feliz: sí, el único camino para ser feliz en la vida, para tener éxito, para que tus relaciones sean sólidas, duraderas y enriquecedoras, es salir de tu zona de confort.
Allí te sentirás cómodo, pero reaccionarás de manera agresiva, negativa, cuando te veas amenazado. El camino a la felicidad comienza por dar ese primer paso, aun a sabiendas de las dificultades que encontrarás en el camino. Aprenderás mucho: sí, conocerás la vida tal cual es, con sus altas y sus bajas, con sus tristezas y alegrías, con sus responsabilidades y beneficios. Esos son aprendizajes invaluables, que no podrás adquirir en ninguna universidad ni pagando todo el oro del mundo. Salir de tu zona de confort te hará una mejor persona porque te permitirá descubrir de cuánto eres capaz, te fortalecerás en muchos sentidos. Adiós a los miedos: habitar la zona de confort, en últimas, no es más que reconocer que nos da miedo enfrentar la vida real, que nos sentimos incapaces de intentar construir un producto de vida propio. Cuando sales de ahí, te sientes como un superhéroe, con poderes que desconocías y quieres comerte el mundo. Decirles adiós a los miedos es el primer paso para empezar el fascinante proceso del desarrollo personal. No estás solo: una de las consecuencias de habitar la zona de confort es que poco a poco te quedas solo, porque nadie quiere estar junto con alguien que solo piensa en su provecho particular, que es egoísta. Salir de allí te hará descubrir el poder de las relaciones, de las redes, y podrás comprobar cuán útil eres para otros. Y algo fantástico: te permitirá mostrar tu mejor versión, una razón por la que muchos te adorarán.
Irás por tus sueños: aquello de “Si la montaña no va a Mahoma, Mahoma va a la montaña” no aplica cuando estás en la zona de confort. Es decir, si no sales a buscar tus sueños, ellos no vendrán a buscarte. Y pasarse la vida hibernando en un escenario cómodo, pero limitante, no es vida. ¡Libérate!, sal de ahí y ve a buscar tus sueños. Pronto descubrirás que el valor de los beneficios compensa las dificultades del camino. Cuando tomas la decisión de ser emprendedor, de poner tu vida al servicio de los demás, necesariamente debes abandonar tu zona de confort, si es que aún estás en ella. No hacerlo es una contradicción y, además, un obstáculo que se hará insalvable en algún punto del camino. El problema, por supuesto, es que no nos enseñaron cómo hacerlo, por eso no hay más remedio que probar y errar, errar y aprender. No conozco (y estoy seguro de que tú tampoco) a nadie que haya sido feliz y exitoso en la vida o en los negocios mientras está en su zona de confort. Yo mismo no lo fui mientras la habité y, por eso, algún día me sacudí y comencé a trabajar por mis sueños. Esa, por supuesto, es la razón por la cual intento educar a mis hijas para que ojalá nunca entren a ese lugar, y te invito a que tú también lo hagas.
Recuérdalo: vida solo hay una, y estamos en este mundo para aprovecharla. Sentado en la comodidad de tu zona de confort, lo único que harás es desperdiciarla. 15
16
MercadeoGlobal.com/8reglas
Una de las características de los emprendedores exitosos que más curiosidad provoca es aquella de que se esfuerzan más, trabajan más, se exigen más desde el momento en que llegan a la cima. Camino a lo más alto quizás se dieron una tregua o tomaron un respiro, se perdonaron equivocaciones y entendieron sus limitaciones. Sin embargo, una vez arriba su actitud cambió y redoblaron las cargas: saben que solo así podrán mantenerse. Eso, precisamente, es lo que los hace especiales, lo que les permite llegar a donde otros jamás podrán acceder, lo que les da
la posibilidad de seguir adelante por más duro que haya sido el tropiezo. Esa es, justamente, la cualidad que diferencia a los verdaderamente excelentes de los buenos y del resto: nunca están conformes con lo que tienen, con lo que consiguieron; siempre buscan más, siempre suben el listón de las metas. Y no es por ambición desmedida, que quede claro: ¡Esa es su pasión! Nunca están conformes, aunque lo tengan todo, aunque gocen de todos los privilegios, aunque posean todas las comodidades.
17
Siempre hay algo que los inquieta, algo que los motiva, algo que los impulsa a dar más, y por eso sobrepasan los límites que para otros, para el resto, son barreras infranqueables. Ellos, en pocas palabras, no conocen la zona de confort. En mi larga experiencia de casi dos décadas en los negocios por internet he conocido infinidad de emprendedores. Miles de miles. La mayoría, afortunadamente, muy valiosos, muy valientes, muy apasionados, muy serviciales. Gente buena que te contagia con su buena energía, de la que puedes aprender infinidad de lecciones enriquecedoras, con la que tienes el privilegio de compartir experiencias inolvidables. Pero, también me he encontrado, y me encuentro todavía, con personas que malinterpretaron el concepto de emprendimiento. Aquellas que pensaron que este estilo de vida consiste nada más en ser tu propio jefe, en liberarte de la atadura de los horarios de oficina y en tener presencia virtual en internet y las redes sociales. Los que empezaron un negocio motivados exclusivamente por la idea de ganar dinero y pronto fracasaron.
, n e i b s a j a Si trab , o t c e r r o c o si haces l ocio no g e n u t o r e p , e v e u m e s o n , a z n a v a s e e l b a b o r lo más p aído en c s a y a h e qu t r o f n o c e d la zona e t s i d e t o n y aún cuenta. 18
Y cuando digo “pronto fracasaron” no me refiero específicamente a que sus negocios quebraron, sino especialmente a que se alejaron de sus sueños, a que se desviaron del camino que podía conducirlos al éxito, a la felicidad y a la prosperidad, a la tranquilidad espiritual. Personas que subieron de estrato en la zona de confort: pasaron de una con marcadas limitaciones a otra caracterizada por la comodidad y el derroche. ¿Hay zona de confort en tu negocio?, te preguntarás. ¡Sí, claro que sí! Es cuando dejas de luchar por tus sueños, cuando te conformas con las ganancias que obtienes, cuando crees que ya serviste demasiado, cuando piensas que es tiempo de retirarte a descansar, cuando ya no te despiertas motivado por la pasión y comienzas a mostrar desinterés en las labores que antes te agradaban, cuando delegas aquello que es más importante. ¿Sabes cuál es la razón por la cual tantos negocios se echan a perder? No es por falta de recursos, o porque no sean buenos los productos que ofrecen, o porque la competencia los devoró, o porque el mercado se deprimió.
La principal razón por la que un negocio se echa a perder es porque se queda sin clientes. ¡Sí, así de simple, así de doloroso, así de contundente! Ahora, ¿sabes por qué un negocio se queda sin clientes? La mayoría, por el mal servicio que les brindan; otros, porque se cansan de tocar la puerta y que no los atiendan o, peor, no los escuchen; unos más, porque no están conformes con el producto o servicio que recibieron; algunos, porque se sienten engañados, traicionados en su buena fe; algunos más, porque en la competencia, en tú competencia, encontraron aquello que buscaban y, finalmente, unos más porque cambiaron de parecer. Subestimar al cliente, desconocer sus necesidades, no atender sus quejas y reclamos, no cumplir con las promesas que le hiciste o conformarte con lo que ya alcanzaste y no
darle más son, apenas, síntomas de la enfermedad. ¿Cuál? La zona de confort, un enemigo silencioso y peligroso que ataca como una plaga, que es letal y que no respeta pinta. Afortunadamente, en todo caso, hay un antídoto efectivo: ¡Sal de tu zona de confort! La zona de confort es una serie de comportamientos y creencias aprendidas que nos hacen sentir, valga la redundancia, muy confortables, cómodos en extremo. Pensamos que allí nada nos hace falta, pero la realidad es que nos falta todo, al menos lo más importante: pasión, amor por lo que hacemos, vocación, capacidad de servicio, fuerza para ir por nuestros sueños, interés por transformar vidas y mejorar el mundo. ¿Cómo saber que tu negocio está en la zona de confort? Cuando niegas que estés cómodo, en primer lugar: la negación es el primer dolor. 19
Permanecer en la zona de confort es el principal obstáculo para cumplir los objetivos de tu negocio, alcanzar tus sueños. No abandonarla es el error más costoso que puedes cometer. Cuando dilatas tus acciones, las aplazas sin una verdadera razón, y permites que se desmorone. Cuando de manera inconsciente, a través de acciones equivocadas, tú mismo saboteas tu negocio. Cuando pierdes el foco de tus acciones y actúas como una veleta, sin un rumbo fijo. También, cuando te metes en esa carrera loca de tomar cuanto curso te ofrecen por internet, cuando lees “todos los libros que debe leer un emprendedor para ser exitoso”, cuando cedes a tus miedos y no arrancas tu negocio porque “el producto todavía no está terminado, no es perfecto”, cuando siempre encuentras una excusa para no empezar o para no actuar, cuando tu mejor argumento es el consabido “no tengo tiempo”. Te voy a decir algo que puede sorprenderte: el éxito es el principal enemigo de tu negocio, ¿lo sabías? Se antoja contradictorio, sin duda, pero es así. Y no solo en los negocios: también en la vida. Recuerda el primer párrafo: “Una de las características de los 20
emprendedores exitosos que más curiosidad provoca es aquella de que se esfuerzan más, trabajan más, se exigen más desde el momento en que llegan a la cima”. Una de las premisas más útiles que aprendí en la vida, y que me ha servido en grande para los negocios, es aquella que dice que “todo extremo es vicioso”. ¿Y sabes a qué extremos me refiero? Al éxito y al fracaso. No son iguales, en todo caso: del fracaso solo debes extraer los aprendizajes, y desechar lo demás; del éxito necesitas aprender a cultivarlo, a hacerlo duradero, sin que eso signifique obnubilarte y perder el norte. Cuando alcances el éxito que deseabas, aquel por el cual tanto te esforzaste y trabajaste, disfrútalo, compártelo para que se multiplique. Pero, no te cases con él, no te hagas amigo de él. Fija un techo más alto, busca nuevos objetivos, imponte nuevos retos, demuéstrale al éxito que no tiene poder alguno sobre ti. Si caes en sus redes, amigo mío, te verás en la peligrosa zona de confort y ese puede ser el comienzo del fin…
No pases la página! Este espacio está reservado para tí
Si estás esperando que todo el mundo compre tu producto o servicio, es hora de que te conozcan! Anúnciate en nuestra revista, escríbenos a: publicidad@MercadeoGlobal.com
Tengo un reto para ti:
¿lo aceptas?
¿Te gustan los retos? A mí, particularmente, me encantan. Creo que me ayudan a crecer, que me exigen, que me sirven para sacar lo mejor de mi interior. Creo que contribuyen a armar equipos sólidos a partir de la conjunción de fortalezas que minimiza las debilidades. Creo que son útiles porque sirven para nos enfoquemos en el objetivo que perseguimos. Y creo que no hay recompensa mejor que la alegría de superar un reto en conjunto. ¿Te gustan los retos? A mí, particularmente, me encantan. Por eso, voy a ponerte uno, uno más. Porque para quienes conformamos el equipo de trabajo de Mercadeo Global este 2017 ha sido el año de los retos. ¿Y sabes qué? Todos los hemos superado con creces, gracias a tu ayuda. Gracias por aceptarlos, gracias por acogerlos con generosidad, gracias por haberte convertido en agente multiplicador. Si te gustan los retos, tengo uno muy especial para ti: quiero que quebremos los récords impuestos en los meses anteriores. ¿Cuáles? Mi blog registra cifras que nos hacen sentir muy orgullosos y comprometidos. MG La Revista es hoy la mejor compañera de los emprendedores latinos de Estados Unidos, Latinoamérica y España. WebinarClic es la mano derecha de aque22
llos que dejaron sus miedos y fueron a buscar sus sueños. Y mi libro 8 Reglas de los emprendedores exitosos es un best seller gracias a tu respaldo: el pasado mes de abril superó las 100.000 descargas. Los emprendedores lo convirtieron en una celebridad editorial y en su gran aliado en los negocios. Sin embargo, hay más, mucho más. Si te gustan los restos, tengo uno muy especial para ti: hagamos de mi nuevo libro el más grande éxito del año en el mercado latino del marketing en español. Directo al éxito en 100+ palabras es mi nuevo libro, un producto del que estamos muy orgullosos con mi equipo de trabajo. No es un manual de instrucciones o una guía. Es la caprichosa selección de experiencias, vivencias, conocimientos y aprendizajes recolectados a lo largo de la vida, la personal y la laboral. Es un manifiesto de mis errores, de los tropiezos sufridos, de cómo superé los obstáculos e hice realidad mis sueños. Te lo regalo con la ilusión que este conocimiento y estas experiencias te lleven directo al éxito, a la felicidad y a la prosperidad. Y te agradezco de antemano que lo compartas con tus socios, con tus amigos, con tus conocidos. ¿Aceptas el reto?
23
La de los webinarios es una tecnología que ha evolucionado mucho en dos décadas. La transformación de esta herramienta ha sido increíble, al punto que hoy podemos disfrutar de las imágenes y, sobre todo, de la interacción en tiempo real con la audiencia. Sin embargo, uno de sus más poderosas características es que conserva la esencia: es el mejor medio para transmitir conocimiento. Es cierto que si se consulta a los emprendedores que incorporaron los webinarios en su estrategia de marketing, la mayoría de ellos respondería ‘Mayor flujo de ventas’ cuando se les pregunte cuál es el principal beneficio recibido de esta herramienta. Sin embargo, quienes hacemos negocios en internet no podemos eludir una de las responsabilidades inherentes a nuestro quehacer: educar a los clientes. De ello puede dar fe Javier Rivero-Díaz, colega español que ha hecho de los webinarios un poderoso y efectivo medio de comunicación. Él es el autor del best seller ‘Cómo vender más.com’ y también de ‘Gimnasia Financiera.com’. 24
Ninguna de las tareas previas, por sencillas que nos parezcan, es despreciable. Un mínimo error puede echar a perder ese gran esfuerzo que es realizar un ‘webinario’. También lanzó el curso Comunica para Ganar.com, destinado a aquellos que desean aprender a expresarse mejor en público, a hacer presentaciones en televisión o ante los medios de comunicación. “Empecé a usar los webinarios hace diez años y la experiencia ha sido muy positiva. Lo más destacado es que se crea una cercanía con la gente, una que de otra manera no sería posible. Es pasar de la frialdad del texto a la calidez de una imagen y de un sonido, de que te vean la cara y te escuchen”, explica. Un arsenal de beneficios si se tiene en cuenta que los humanos compramos por emociones, y esa interacción ayuda a generar confianza. Por su formación como periodista, Javier le saca el mayor provecho a una herramienta versátil y efectiva como los webinarios. Entiende y disfruta esas características que los hacen únicos. “Lo más poderoso es mostrarnos como somos realmente, sin filtros. Un
webinario es como estar en la televisión: la gente te ve, sabe que eres una persona real, que tiene un rostro. Es la humanización de la tecnología”, afirma. Javier comenzó a utilizarlos para capacitar a los alumnos de sus cursos. Luego, amplió la cobertura a los contenidos promocionales (de ventas) y hoy los emplea prácticamente para todo. “Es una estrategia que me permite ofrecer contenido y al mismo tiempo poner a consideración de los clientes los productos que tengo”. Son parte vital de su estrategia de marketing “porque estamos cerca de los alumnos y ellos nos ven como personas de verdad”, asegura. “El aporte más importante de los webinarios en mi negocio es que nos dan la posibilidad de crear contenidos poderosos, que le llegan muy fácilmente a la gente.
25
A los clientes les encanta comprar cuando están en directo, y para nosotros es muy importante que tomen acción a la vez que se nutren con el contenido. Es la combinación perfecta”, dice Javier. Es una permanente retroalimentación enriquecedora para todas las partes. A Javier, como a muchos de nosotros, también le ocurrieron imprevistos que le hicieron pasar un mal rato. “A veces, no estaba bien organizada la parte operativa, o de repente el computador no funcionó bien, o el contenido de la presentación no apareció, o la potencia de la conexión no sirvió para realizar la transmisión”. Para evitar esos errores, Javier sugiere elaborar una detallada lista para chequear cada tarea y comprobar su ejecución. “Hay muchas tareas de las que se realizan en torno de un webinario que parecen tontas, rutinarias, pero que en realidad no lo son. Independientemente de lo sencillas que sean, hay que revisarlas con anticipación, comprobar que funcionan bien”, recomienda. Es cierto: los webinarios son una herramienta poderosa, pero también muy exigente. Un mínimo detalle puede echar a perder la presentación, al cliente, al negocio… Más allá de esos avatares tecnológicos,
¿Quieres saber más de Javier Rivero-Díaz? http://www.javier.be/ http://www.comovendermas.com/ http://www.gimnasiafinanciera.com/ http://bit.ly/2qBFyuE http://bit.ly/2qL0M6K https://twitter.com/javierrivero https://www.instagram.com/javierriverodiaz/ https://www.youtube.com/javierriverodiaz
26
Javier llama la atención sobre un punto que para él, obviamente, es crucial: “Es importante que el contenido del webinario sea relevante, interesante para los clientes, que se brinden consejos útiles. Le peor sería que queden con la sensación de que perdieron el tiempo. Éxito es que esta actividad sea un antes y un después en su vida, no algo que se hace por rellenar un rato”. La versión original de los webinarios se inventó hace casi dos décadas, y Javier Rivero-Díaz los utiliza desde hace diez años. Es decir, es una voz plenamente autorizada no solo por la cantidad de veces que hizo uso de esta tecnología, sino también porque virtualmente conoce todas las ofertas del mercado, sus virtudes y sus defectos, sus características y sus posibilidades. Y actualmente trabaja con la que para él es la mejor. “Desde que apareció, uso WebinarClic. De todas sus funcionalidades, la que más me gusta es la automatización. Es la posibilidad de reutilizar ese trabajo que has hecho, ese contenido que has preparado, y aprovecharlo en el futuro. También me gusta mucho el soporte técnico, especialmente por la velocidad y eficiencia de la respuesta. No sé si esas personas duermen, porque siempre que los busqué respondieron de inmediato”, finaliza.
Haz Clic AquĂ
27
mercadeoglobal.com/webinarclic
NO es magia, ni una fórmula exacta El papa Juan Pablo II realizó una visita de 5 días a Cuba, el exdictador Augusto Pinochet asumió como senador vitalicio en Chile, Titanic ganó 11 premios Óscar (incluido el de Mejor Película), el brasileño Joao Havelange dejó la presidencia de la FIFA tras 24 años en el cargo, Andrés Pastrana fue elegido presidente de Colombia, Larry Page y Serguei Brin fundaron la empresa Google y Hugo Chávez fue elegido presidente de Venezuela. ¿Recuerdas esos acontecimientos que marcaron la historia del mundo? ¿Sabes en qué año ocurrieron? Fue en 1998, doce meses convulsionados en los que las tragedias y los conflictos, el terrorismo y la
28
crisis económica dejaron honda huella en el planeta. Fue el año en que comencé a hacer negocios por internet, cuando todavía no existían Wordpress, Youtube, Twitter o Facebook, cuando la conexión se establecía por vía telefónica. Desde entonces, ininterrumpidamente, todas y cada una de las horas de mi vida las he dedicado a servir a los emprendedores latinoamericanos, primero los radicados en Estados Unidos (donde vivo desde ese año) y luego en el resto de países de la región. Toda una vida, como dirían las abuelas de antes, un largo tiempo en el que he reunido experiencia y conocimientos para
posicionarme como número de la industria, como un referente. Si bien es posible que conozcas mi trayectoria, te digo esto porque necesito que quede claro que NO soy un aparecido, que estoy aquí desde hace mucho tiempo y que me avalan los testimonios de cientos de emprendedores a los que he ayudado a cumplir sus sueños. Sí, los mismos que en un arranque de excesiva generosidad se refieren a mí como EL PADRINO de los negocios por internet, un privilegio que procuro honrar todos los días. ¿Cómo lo hago? No solo compartiendo el conocimiento acumulado y la experiencia atesorada, sino también brindándote las mejores herramientas para cumplir tus sueños, para iniciar tu negocio y convertirlo en una empresa sólida y próspera, capaz de escalar al siguiente nivel, de llegar la cima. Una de ellas es el curso Flujo Ilimitado de Clientes, en el que te enseño cómo hacer marketing de verdad y atraer clientes nuevos. No es magia, no es una fórmula exacta, no son promesas que nunca te van a cumplir. Son decenas de principios, tácticas y técnicas de marketing direc-
to enfocadas exclusivamente en generar más clientes nuevos de manera permanente. Son las mismas que yo uso en mi negocio, las que me han permitido alcanzar el número uno del mercado, probadas y recomprobadas por mí y por mis discípulos exitosos. ¡No te vendo humo!, te lo aseguro. No es uno de tantos cursos que te ofrecen en el mercado y tampoco necesitas ser experto en economía o marketing para sacarle provecho. Consciente de que la mayoría de los emprendedores del mercado no estudiaron carreras relacionadas con las ciencias administrativas, Flujo Ilimitado de Clientes es sencillo y efectivo, preciso y profesional. El resultado será justo lo que buscas: conseguir más prospectos y convertirlos en clientes. Cuando termines el curso, te garantizo que estarás preparado para generar las ganancias que sueñas, te darás la vida que anhelas y te convertirás en la envidia de tu competencia. Flujo Ilimitado de Clientes es la perfecta combinación entre educación y acción (educacción), el concepto que me llevó hasta la cima. Reserva tu cupo ahora y prepárate para vivir la experiencia más enriquecedora de tu vida. ¡Nos vemos en el aula virtual!
29
30
MercadeoGlobal.com/flujo
CASO DE ÉXITO
La princesa rebelde se transformó en reina A comienzos de los años 70, había dos clases de mujeres: las que querían ser esposas de y las que querían ser independientes, libres de ataduras. Era una alternativa o la otra, pero no era posible la combinación. No hasta que apareció Diane Simone Michelle Halfin, una jovencita nacida en el seno de una acomodada familia de sobrevivientes del holocausto, él de origen ruso y ella, con ancestros griegos, y cambió la historia.
También me gusta haber podido contemplar la tecnología actual y el mundo global en el que nos hemos convertido. Sigo teniendo sueños, soy muy curiosa, y sigo emocionándome al descubrir nuevos talentos y jóvenes diseñadores”, se autodefinió en una entrevista.
Ser autónoma, ser fiel a sí misma, sin tener claro qué era lo que eso significaba, siempre fue su obsesión, su norte. Y lo sigue siendo hoy, a los 70 años, edad a la que es considerada un ícono de la moda y, sobre todo, un modelo para la mujer moderna. Un personaje singular, sin duda, uno de aquellos capaz de romper los esquemas de derribar los paradigmas, de fijar nuevas y revolucionarias pautas. “Ser joven en los años 70 fue muy divertido, me encantó haber vivido aquella época y conocer a esa gente interesante.
31
“Las mujeres siempre me han inspirado, y diseño para inspirarlas”. Ese es el eslogan de DvF, una empresa de corte minorista con alcance internacional. Como una joven cualquiera, Diane no sabía qué rumbo iba a tomar su vida; peor aún, no sabía qué rumbo deseaba para su vida. Lo único que sí sabía, y esa fue precisamente la clave de su éxito, era saber qué clase de mujer no quería ser: no quería ser una mujer sumisa, un artículo decorativo al lado de un hombre. Entonces, se rebeló, se dedicó a trabajar por sus sueños y hoy es la inspiración de muchas mujeres. La suya pudo haber sido la historia de cualquier mujer en cualquier época. Nació en Bruselas, en el hogar de Leon Halfin, un judío rumano de ascendencia rusa, que emigró a Bélgica a finales de los años 90. Su madre fue Liliane Nahmias, que 18 meses antes del nacimiento de Diane estaba presa en el campo de concentración de Auschwitz. Una mujer fuerte que le dio una enseñanza que la marcó: “El miedo nunca es una opción”, le dijo. Estudió economía en la Universidad de Ginebra, en Suiza, y más tarde fue asistente del fotógrafo de moda Alberto Koski, en París (Francia). La siguiente escala fue Italia, como aprendiz del fabricante textil Angelo Ferretti, donde aprendió lo que necesitaba saber sobre confección, colores y telas. Parecía que el destino la llevaba por el mundo de las pasarelas y las casas de moda, pero Cupido se cruzó en su camino y la enredó. 32
En la universidad conoció al príncipe austro-italiano Egon van Fürstenberg, hijo de un príncipe alemán y de la rica heredera de la fortuna de Fiat, la famosa marca de autos italiana. Se convirtió, entonces, en una de las celebridades de la realeza europea y en una habitual de las páginas de las fiestas de sociedad. Allí alternaba igual con Salvador Dalí como con los Duques de Windsor o con Andy Warhol. La vida que cualquier mujer quisiera tener, sin duda. Joven, hermosa, casada con un príncipe, rica y famosa. Sin embargo, esa no era la vida que Diane deseaba para ella. Ya se había mudado a Nueva York y tenía su propia empresa. Alguna vez, New York Times se refirió a ella y a su esposo describiéndolos
como “El matrimonio que lo tiene todo” y fue, entonces, cuando se dio cuenta de que, en verdad, no tenía nada. Nada, al menos, de lo que quería en su vida. Y tomó la decisión más radical de su corta vida, también la más importante, la más trascendental: en términos amistosos se separó de Egon y perdió su título de princesa, aunque continuó llevando el apellido de casada. A partir de ese momento, se dedicó a vivir cada día de su vida, cada hora de su vida, cada minuto de su vida, en procura de cristalizar su sueño de independencia y felicidad. Como por arte de magia, la vida le sonrió. Conoció a Diana Vreeland, editora de la revista Vogue, que le dio el espaldarazo que faltaba: declaró que sus diseños eran “sensacionales”. De inmediato, fue incluida en la lista de invitados a la Semana de la Moda de Nueva York, donde pudo mostrarle al mundo su genial creación, la que la inmortalizó: el vestido de manga larga, cuerpo entallado y falda cruzada atada a la cintura.
La prenda, conocida como wrap dress, supuso el origen de su marca y la piedra sobre la que Diane edificó su imperio. ¿Cuál fue la clave del éxito? Por aquel entonces, los vestidos para dama eran demasiado costosos y muy serios para su gusto. Entonces, creó uno que estuviera al alcance de cualquier mujer y que fuera práctico y ligero, que le permitiera lucir elegante sin perder comodidad; una prenda funcional, sencilla y sexy. De nuevo, tenía todo lo que necesitaba, pues tocaba el cielo con las manos. Inclusive, en 1976 protagonizó una anécdota curiosa: a última hora, tras el éxito de su creación, apareció en la portada de la revista Newsweek. Estaba decidido que la cubierta era para Gerald Ford, al que el partido Republicano acababa de designar candidato a la presidencia de EE. UU., pero los editores decidieron que Diane von Fürstenberg sería más vendedora. A mediados de los 80, sin embargo, decidió tomarse un respiro, vendió su empresa y regresó a París. Allí abrió otros negocios, incluida la editorial Salvy y una línea de cosméticos. A finales de los 90, sin embargo, el bichito de la moda la volvió a picar y su retorno fue por todo lo alto: lanzó una nueva versión del wrap dress y recuperó el camino perdido. Para su sorpresa, seguía siendo un ícono, el modelo que todos querían seguir.
DvF es una firma de carácter internacional: a las 26 sedes en Estados Unidos suma una en Brasil, 14 en Europa y 32 en Asia, incluidas 8 en China. 33
Por esa época también publicó su primera biografía, Diane: A signature life. El proceso de reinvención se consumó en la primera mitad de la década del 2000, cuando lanzó al mercado el DvF por H. Stern, una exitosa colección de joyería fina, y puso en marcha la producción de bufandas y ropa de playa. El año pasado, contrató al escocés Jonathan Saunders como director creativo de la firma y se consolidó en la cima. Tuvo en sus manos la vida que cualquier joven desearía vivir, pero no era lo que deseaba. Construyó una marca poderosa que la lanzó a la fama y le permitió atesorar riqueza, pero llegó un momento en que se sintió vacía y abandonó esa vida. En la ma-
durez, segura de qué deseaba, regresó con bríos juveniles y la misma pasión de siempre para reinventarse. Es la vida de Diane von Fürstenberg, la princesa que se transformó en reina. Con 70 años, Diane aún tiene mucho por hacer, mucho por crear, mucho por transmitir a las nuevas generaciones. En su corazón joven, demostró que es posible reinventarse, que es posible construir una marca que perdure y, sobre todo, que es posible ser la mujer que siempre soñó. Ese, sin duda, es su más grande legado: el atrevimiento de ser una mujer independiente que se vale por sí misma y que, además, alcanza el éxito y la felicidad.
¿Quieres saber más de Diane von Fürstenberg? http://www.dvf.com/home/ https://www.facebook.com/dvf https://twitter.com/dvf https://www.instagram.com/dvf/ https://www.youtube.com/dvf https://co.pinterest.com/dvf/
34
No te pierdas la mejor informaciรณn sobre marketing para tu negocio
REFLEXIÓN
El desenlace trágico, lamentablemente, se dio el pasado viernes 7 de julio. Desde que tenía 18 meses, los médicos le diagnosticaron neuroblastoma, una forma de cáncer terminal degenerativo, y no hubo poder humano capaz de darle una esperanza de vida. Inglaterra entera estaba en vilo por el chiquillo de 6 años, llamado Bradley Lowery, y pendiente de Jermain Defoe, reconocido futbolista, ídolo y amigo del niño. 36
Durante dos años, el pequeño fue sometido a tratamiento y a quimioterapia y parecía haberle ganado la lucha a esta enfermedad que se presenta en niños menores de 5 años con un alto grado de mortalidad. Sin embargo, en julio del año pasado el cáncer regresó, de manera más agresiva, y las esperanzas de vida se extinguieron definitivamente. La historia de amistad con el futbolista inglés, sin embargo, siempre será recordada.
Defoe nació el 7 de octubre de 1982 en Londres, hijo de inmigrantes de la isla caribe de Santa Lucía. Debutó a los 16 años en las filas del legendario Charlton Athletic, en segunda división, y luego llegó a la Liga Premier con el West Ham United, el Bournemouth (segunda) y el Tottenham Hotspur, en el que brilló por su habilidad y capacidad goleadora. Tras un breve paso por el Portsmouth, regresó al Hotspur, hasta 2013. También militó en la selección inglesa, en la que debutó en 2004. Participó en el Mundial de Suráfrica-2010 y en la Eurocopa de Naciones de 2012. Cruzó el Atlántico y se puso la camiseta del Toronto canadiense, en lo que se pensó iba a ser un triste adiós a las canchas. Sin embargo, un año más tarde (2014) regresó a las islas británicas y se enfundó el jersey del Sunderland, los gatos negros, un club pequeño con una historia grande. Fundado en febrero de 1879, acumula seis títulos de Liga de Inglaterra (el más reciente, en 1936) y dos de Copa de Inglaterra (1937 y 1973), además de cinco subcampeonatos. No es tan conocido o famoso como Manchester United, Manchester City, Liverpool, Arsenal o Chelsea, pero tiene una gran y fiel hinchada en el nororiente del país, donde li-
bra un clásico con el Newcastle United, las conocidas ‘urracas negras’. El pequeño Bradley, en medio de su desoladora realidad, encontró en el fútbol un paliativo, un motivo para sonreír y disfrutar. Su caso fue conocido por los miembros del equipo y, de inmediato, se volcaron a brindarle su apoyo, en especial Defoe. Por esas circunstancias mágicas de la vida que son imposibles de explicar, al toque se estableció una fuerte conexión entre el chiquillo y el futbolista, que se hicieron grandes amigos. Inseparables, valga decirlo. Cada vez que pudo, Defoe lo visitó en casa o en el hospital y se convirtió en el abanderado de su causa. Esa actitud del futbolista visibilizó el problema de Bradley, que conmovió a la sociedad británica y, especialmente, al fútbol inglés. Tras la reaparición de la enfermedad, sus padres comenzaron una campaña con el fin de recaudar los fondos necesarios para un tratamiento de urgencia, en Estados Unidos. Se recolectaron 700.000 libras esterlinas (874.000 dólares), de las cuales 200.000 las
37
donó el Everton de Londres, otro club que dejó ver su cara más solidaria en este episodio. Lamentablemente, el diagnóstico de los médicos fue desalentador, al punto que el viaje al otro lado del Atlántico se canceló en vistas de que no había marcha atrás en el avance de la enfermedad, y Bradley era sometido a un tratamiento paliativo, para evitar sufrimiento. “Soy bendecido por formado parte de su vida. Al margen del fútbol, la relación que desarrollé con él y lo que he traído a su vida y lo que ha traído a la mía ha sido realmente especial”, declaró hace unos días en Talksport. “Es triste verlo pasar por todo esto con solo 6 años. Tengo tantos buenos recuerdos y momentos que he compartido con él, que estarán conmigo para el resto de mi vida, así que estoy agradecido por eso”, agregó. Las principales figuras de la Liga Premier inglesa volcaron su mirada hacia el drama de la familia Lowery. El técnico español Pep Guardiola, que conocía la historia de Bradley desde que entrenaba al Barcelona (de hecho, le envió camiseta del club catalán), también estaba pendiente ahora que dirige al Man38
chester City. El alma de esa cruzada, sin embargo, se llamó Jermain Defoe, al que este episodio le cambió la vida. “Me contagia tu sonrisa. Me llena de energía ese brillo en tu mirada. Me infunde valor ese coraje que muestras frente a la vida. A pesar de que los doctores te han dicho que la pelea está perdida, siempre se te ve contento y lleno de vida. Eres mi héroe, Bradley. No te rindas”, fue el mensaje que el futbolista le envió a su amiguito hace unos meses, después de que los médicos tiraron la toalla en esta dura batalla por la vida. El pasado mes de diciembre, el caso de Bradley acaparó la atención de los medios cuando la BBC, en su programa Match of the Day, le entregó el premio por haber marcado el mejor gol del mes. Ocurrió la previa del partido que Sunderland perdió en casa con Chelsea (0-1): Bradley, batió de tiro penalti a Asmir Begovic, suplente de los Blue, una imagen que recorrió el planeta fútbol gracias a la magia de internet.
Aquel día, la madre de Bradley tuiteó: “Bradley se acaba de levantar y ha visto que según ‘Match Of The Day’ marcó el gol del mes. Está como en la Luna. Gracias, BBC; gracias, Sunderland”. Sin embargo, el momento más feliz de la vida de este chiquillo se dio el pasado 26 de marzo, cuando la Selección Inglaterra se midió a la Lituania en partido válido por el grupo F de las eliminatorias al Mundial de Rusia-2018. Defoe, que no había sido convocado al elenco nacional en los tres últimos años, ingresó al campo de juego de primero en la fila, inclusive por delante del capitán Joe Hart, con Bradley en sus brazos. Luego, a los 21 minutos, marcó un gol después de recibir la habilitación de Raheem Sterling. Las gradas del estadio Wembley estallaron de júbilo y el delantero, como era de esperarse, dedicó el tanto a su amigo enfermo. El pasado 17 de mayo, día en que Bradley cumplió 6 años, Defoe volvió a conmoverlos a todos: en su cuenta de Twitter, publicó un colaje con varias fotos en compañía de Bradley, dentro y fuera del campo de juego. Y el primer fin de semana de julio, cuando la
familia del chiquillo organizó una fiesta, el futbolista (que ahora juega en el Bournemouth) dijo presente: inclusive, se recostó un rato con él, dormido en sus brazos. El desenlace trágico, lamentablemente, se dio el pasado viernes 7 de julio. Sin embargo, en la memoria de todos quedará la solidaridad y el amor que tantos le brindaron al pequeño Bradley, especialmente Jermain Defoe. El suyo es un caso que demuestra de cuánto somos capaces los seres humanos cuando tenemos nobleza y generosidad en el corazón y de lo que somos capaces cuando entendemos que el mejor negocio es servir. Estamos acostumbrados a ver a nuestros ídolos del deporte haciendo alarde de su riqueza, de opulencia, de una caridad fingida que solo pretende generar likes en redes sociales. El caso de Defoe, sin embargo, es distinto: en estos años, el delantero demostró que lo suyo es un sentimiento genuino y que es mucho lo que una figura reconocida puede hacer por los demás si encauza positivamente la credibilidad y la confianza que otros le depositaron.
Videos recomendados Sunderland-Chelsea, el gol del mes: http://bit.ly/2tBdWVy Tras bambalinas Inglaterra-Lituania: http://bit.ly/2u3TmAn Entrevista con CNN: http://bit.ly/2sYvLw2 Fiesta de cumpleaños: http://bit.ly/2uCtdWo La lucha de Bradley: http://bit.ly/2sRA9BN 39
MercadeoGlobal.com/youtube
40
MercadeoGlobal.com/facebook
MercadeoGlobal.com/twitter