1
2
3
Apreciado lector, tenga en cuenta el significado de estos íconos para que sea más fácil la lectura y pueda encontrar los enlaces a páginas web y a videos
Haz Clic Para Ver El Video
Haz Clic Para Ver El Enlace
Indica que el artículo sigue
Haz Clic Para Descargar
MercadeoGlobal.com/revista revista@MercadeoGlobal.com Mercadeo Global 8374 Market St Unit 161 4 Lakewood Ranch, FL 34202. USA
Editor General Álvaro Mendoza
alvaro@mercadeoglobal.com
Asesoría Periodística Carlos Eduardo González caredugo@mercadeoglobal.com
Diseño Giancarlo Rodríguez
gian@mercadeoglobal.com
EDITORIAL
¿Pagarías el precio del éxito y la prosperidad? Supongo que habrás oído alguna vez aquella frase de “Quien no conoce su historia, está condenado a repetirla”. Hace referencia a la necesidad de conocer bien nuestro pasado, el origen de nuestras equivocaciones y sus consecuencias, para no replicarlas más tarde, quizás con mayor daño. Una reflexión que deberíamos aplicar cada día de nuestra vida y así nos evitaríamos dolor y sufrimiento y, sin duda, seríamos más felices.
Es el caso de los emprendedores, especialmente de los novatos. Claro, alguno podrá decirme que carece de experiencia, que no tiene pasado en esta actividad y que, por lo tanto, no puede haber aprendizaje. Sin embargo, eso no es cierto: también podemos (y debemos) aprender de las experiencias de otros, de los errores de otros, de los aciertos de otros, de los logros de otros. Porque esos otros, finalmente, son maestros de vida.
El problema es que nos educan con la mentalidad de que el pasado ya pasó, de que no existe. Nos dicen que el presente es lo único que tiene validez como proyección de un futuro. Sin embargo, lo que hemos hecho anteriormente influye en lo que somos, nos marca con cicatrices y también con miedos, dolor o condicionamientos. Son estrategias de la vida para enseñarnos qué camino que debemos seguir para cumplir nuestros sueños.
Dado que soy un poco incrédulo, siempre dudé, o cuando menos tuve reservas, cuando me decían que internet era la nueva mina de oro de los negocios, que era la veta que podría convertirme en rico de la noche a la mañana. Afortunadamente, la vida me brindó el ejemplo de mis padres, de mi familia y de mis mentores, que se forjaron a base de trabajo, de esfuerzo, de sacrificio, de constancia y, claro, de errores, de muchos errores.
Conocer nuestra historia y evitar errores es una estrategia útil en la vida e imprescindible en los negocios. Esos episodios del pasado actúan como un poderoso kit de herramientas que te alertan sobre los peligros que vas a encontrar en el camino y que te indican cuál es la solución (o, al menos, las alternativas que puedes considerar). Pero, la realidad es que muy pocos, casi nadie, hacen uso de esas herramientas.
A comienzos de 1848, el 24 de enero, James Wilson Marshall, un carpintero de Nueva Jersey que trabajaba en la construcción de un aserradero propiedad de John Sutter, encontró unas pepitas de oro en el lecho del río American, en las faldas de la Sierra Nevada, cerca de Coloma, en California. Sutter era un inmigrante suizo-alemán de la colonia de Nueva Helvetia, que dio origen a la ciudad de Sacramento.
5
Ese casual episodio dio origen a un período corto, pero muy significativo, que dejó profunda huella en la historia de los Estados Unidos. Es el que conocemos como La fiebre del oro, un lapso comprendido entre 1849 y 1860. Aunque Sutter intentó que la noticia del hallazgo no se difundiera, pronto la buena nueva se regó por doquier. Así, entonces, en poco tiempo la región se vio invadida por hambrientos buscadores de riqueza. Miles de estadounidenses afincados en la costa oriental cruzaron el país en busca de ese golpe de suerte que les permitiera labrar un futuro mejor. Se los denominó los fortyniners (49’erns), por el año que transcurría. A ellos se sumaron inmigrantes provenientes de destinos tan diversos con Hawái, Chile, Perú, México y China. Llegaron en busca de lo que hoy conocemos como el sueño americano, pero que para algunos fue pesadilla. En efecto, muchos de ellos murieron en la travesía, algunos no tuvieron suerte y se quedaron con las manos vacías y otros cayeron producto de las disputas por la defensa de los territorios y la incipiente explotación. Una situación parecida a la actual, cuando nos dicen que el éxito, la riqueza y la fama están a solo unos clics, pero la verdad es que el premio es para unos pocos, para los que aprenden las lecciones de la historia. Aunque la fiebre del oro en Estados Unidos impulsó la creación de California y su integración a la Unión, el costo en vidas, en sueños, fue demasiado elevado. Hoy, la fiebre del oro de internet también hace estragos en aquellos que creen en los objetos brillantes, los que le apuestan a volverse millonarios en un abrir y cerrar de ojos, a la vuelta de un clic. Una historia que necesitamos conocer, para no repetir los errores del pasado. Internet es una herramienta superpoderosa. Es fuente de riqueza si tienes un negocio propio, si perteneces a un programa de afiliados, si eres consultor o mentor, si vendes un producto o un servicio, si sabes sacar provecho de los dones, el conocimiento y la experiencia que posees. Internet es la mina de las oportunidades de oro siempre y cuando estés dispuesto a pagar el precio: trabajo, sacrificio, esfuerzo, dedicación, pasión… 6
Decir que internet es la nueva mina de oro o la nueva fiebre del oro es una mentira, porque todo lo que puedes recibir es fruto de tu trabajo, no de un golpe de suerte.
Corría la segunda mitad de los años 90 cuando mi pasión por los computadores me llevó al más maravilloso encuentro de mi vida: conocí internet. Un internet precario, de pedal, como solíamos decir en ese tiempo, con conexiones telefónicas y planes de costos elevadísimos. Un internet con unos computadores que hoy les provocarían un ataque de nervios a los mileniales. Un internet sin video, sin fotografías, sin audio. Si no viviste esa época, si nunca supiste lo que era levantar la bocina del teléfono y quedar sordo por el ruido del módem, nunca conseguirás imaginarte lo que era en realidad. Por más argumentos que te dé, por más anécdotas que te cuente. De hecho, cuando la memoria me transporta a esos años me cuesta trabajo entender cómo era posible trabajar así, cómo algo tan limitado se transformó en algo sin límites. Llevo más de veinte años conectado a la red y 19 de ellos dedicado a hacer negocios por internet. Conocí aquel internet precario y disfruto el actual. Pagué cifras astronómicas por 8
servicios que hoy son gratis (o muy baratos) y he sido testigo de mil y una tendencias que iban a revolucionar la vida y pronto desaparecieron, del mismo modo que a diario uso herramientas que han fueron declaradas muertas y enterradas cientos de veces. Comencé con un directorio de la vida y la obra de Gabriel García Márquez, sin duda el colombiano más universal del siglo XX tras ganar el Premio Nobel de Literatura en 1982. Hice todo el curso, viví toda la transformación y ahora tengo negocios, vivo del trabajo que hago en la red. En ese aspecto, mi vida gira en torno de lo que ocurre allí, en ese universo virtual que no cesa de brindarme nuevas y maravillosas alternativas.
trabajo y todos los días le doy gracias a la vida porque considero que fui bendecido al poder transitar este camino maravilloso en el que he sido (y soy) muy feliz. Cuando escucho esas 12 palabras (y el zumbido de los oídos se silencia), le pregunto a mi interlocutor a qué se refiere. Y casi siempre me habla de casos de éxito como Steve Jobs, como Mark Zuckerberg o como Bill Gates… Y a medida que transcurre la conversación, compruebo que es otra de tantas personas que tropezó con la misma piedra: sí, aquella de creer que internet lo hará rico (rico, no, ¡multimillonario!) de la noche a la mañana.
En varios eventos a los que he asistido, como organizador o como participante, escucho recurrentemente la misma frase: “Como internet es una mina de oro, yo también quiero hacerme millonario”. Cuando oigo esas 12 palabras, mis oídos retumban como cuando el módem indicaba que se había conectado, con un pitido repulsivo. ¿Será posible que después de tanto tiempo la gente siga creyendo esa mentira? Si internet es una mina de oro, debo reconocer (con rubor, por supuesto) que después de dos décadas todavía no encontré la veta. No puedo decirte, siquiera, si existe o que es un mito, una historieta de piratas y tesoros. Tengo un negocio, vivo bien producto de mi
Con dos o tres preguntas muy sencillas que le formulo, me doy cuenta de que desconoce el tema, de que ignora cuánto tiempo, esfuerzo, sacrificio e inversión les tomó a esos personajes convertirse en lo que hoy son. Son personas que, simplemente, cayeron en las redes de aquellos que venden humo en la red, de los que prometen riqueza inmediata, de los que atraen a los ingenuos con baratos objetos brillantes. Cuando les explicó por qué internet no es ese mundo de fantasía que les han hecho creer, la mueca dibujada en su cara demuestra su decepción. Y tristemente, al comprobar que la vida en la red no es lo que les habían pintado, muchos tiran la toalla, desencantados, y regresan a esa vida miserable que habían dejado atrás para probar suerte en internet. Y en esto último radica el origen de su equivocación: lo asumen como si fuera una lotería.
9
¿Cómo así? Quieren volverse ricos de la noche a la mañana, quieren disfrutar el estilo de vida soñado (viajes, lujos, placer) en un abrir y cerrar de ojos, y así no funciona. Internet definitivamente NO es una mina de oro, NO es una veta de la que se puedan extraer costosas piedras preciosas, NO es un escenario en el que un golpe de suerte te permite cambiar tu estilo de vida y engrosar tus cuentas corrientes. Eso NO es internet. En cambio, puedo decirte con absoluta seguridad, con completa honestidad, con plena convicción, lo que SÍ es internet: es la mina de las oportunidades de oro. Hay para todos, y no una, sino cientos de oportunidades maravillosas. Para aprender, para divertirse, para conectarse con otros seres humanos, para trabajar, para ser felices y prósperos. Eso y más, mucho más, es posible en internet, la mina de las oportunidades de oro (repito). Hay una condición, sin embargo. Por supuesto, no podrías esperar que algo tan bueno fuera gratuito. Hay que pagar un precio, que para algunos es demasiado elevado. ¿Sabes cuál? Trabajar. Sí, unir tus pasiones, tus aficiones, tus dones, tus conocimientos, tus experiencias
10
y tus sueños y trabajar, trabajar mucho. Puedo garantizarte, porque lo he vivido, que la recompensa que obtendrás, si cumples la condición, es maravillosa. Con el paso del tiempo, descubrí que no hay una mina, que no hay una veta. Pero, aprendí también que así como cada día cuando despierto y abro los ojos tengo una oportunidad de 24 horas, en internet cada vez que hago un clic tengo la posibilidad de acceder a un universo ilimitado de oportunidades de oro. Depende de mí, y solo de mí, aprovecharlas, explotarlas, capitalizarlas, compartirlas, multiplicarlas. Lo más maravilloso que me ha enseñado internet es que NO es una mina de oro. Si lo fuera, tendría un límite, en algún momento su capacidad se agotaría. Y NO es así, afortunadamente NO es así. Internet será una fuente ilimitada de oportunidades de oro siempre y cuando tú así lo quieras, siempre y cuando trabajes para ello, siempre y cuan-
do siembres la semilla y la cuides y la hagas crecer y multiplicarse. La próxima vez que alguien te diga que internet es una mina de oro y que tiene algo para ti, sonríe, da la vuelta y sigue tu camino. Si no lo haces, lo más probable es que caigas en un engaño, que seas presa de alguno de los encantadores de serpientes que pululan en la red y que solo quieren tu dinero. No te ofendas, no te ofusques: solo sonríe, da la vuelta y sigue tu camino, aquel que conduce a tus sueños, a donde está tu felicidad. ¿Por qué? Porque internet es solo una herramienta, fantástica, poderosa, única, ilimitada. Sin embargo, la verdadera mina de oro eres tú. Tú con tus virtudes, defectos, sueños, aprendizajes, errores, conocimientos, ilusiones. Internet te ayuda, pero es de tu corazón de donde puedes extraer lo más valioso que tienes, aquello que te conduce al éxito y a la prosperidad, aquello que no se paga con todo el dinero del mundo: la felicidad.
¿Eres joven? ¿Eres mayor? ¿Eres hombre? ¿Eres mujer? ¿Tienes dinero? ¿Solo tienes buenas ideas? En internet hay una oportunidad para ti, una que puede conducirte a la cima del éxito, la prosperidad y la felicidad.
11
12
13
A veces, quizás en alguno de esos momentos en los que nostalgia me invade, volteo la mirada al pasado y no puedo evitar esa extraña sensación. Cuando la memoria rebobina la película de mi vida desde ese día en que decidí convertirme en emprendedor, no dejo de sorprenderme por cuánto ha pasado, cuántas dificultades he sorteado, cuántas alegrías he vivido y, sobre todo, con cuántas personas maravillosas he tenido la suerte de compartir. Nada. Eso, justamente, era lo que tenía cuando comencé. Bueno, acumulaba algunos fracasos, mostraba las cicatrices de algunas decepciones y cargaba con un puñado de miedos. Y mi mente estaba llena de 14
ideas, y mi corazón atesoraba unos sueños fantásticos y mi cuerpo era fuerte como un roble. Estaba listo para comenzar, pero no tenía nada. Y eso, precisamente, es lo que más me enorgullece: ¡Todo lo hice, todo lo construí! Trabajar en internet era lo más importante de mi vida en ese momento, algo así como un impulso irrefrenable. Me apasionaba saber que mi trabajo llegaba a los confines de la tierra, que tenía una audiencia en países que no sabía localizar en el mapamundi, que me seguían personas de lugares cuyo idioma no entendía. Descubrí que era una herramienta poderosa, muy poderosa, y decidí que era lo que quería hacer en mi vida.
Durante un tiempo (unos pocos años), transité por esa fantástica autopista virtual sin saber realmente lo que quería. Era increíble, porque los resultados eran positivos, porque comencé a ganar dinero, porque los clientes agradecían mi trabajo. Pero, debo confesarlo, no sabía para dónde iba. Hasta que la vida me dio una oportunidad, me bendijo poniendo en mi camino a personas maravillosas, mis mentores, que me ayudaron a ser lo que soy. No es el caso decirte qué me enseñaron, pero sí puedo darte unas pistas: aprendí a trabajar, a aprovechar las herramientas que tenía a disposición, a planear mis acciones, a medir el resultado de ellas, a enfocar mis esfuerzos en el beneficio de mis clientes (que después se revierte en beneficio propio) y en sustentar un presente feliz para mi familia. Y aprendí, sobre todo, que nada en la vida es gratuito, fruto del azar, un golpe de suerte. Y, claro, mucho menos en internet. Lo más curioso es que mucha gente opta por montar un negocio por internet con el convencimiento de que va a trabajar menos, de que se va a hacer multimillonario de la noche a la mañana y de que gracias a los robots se dará la gran vida mientras las máquinas siguen dándole ganancias. Si es así, por favor, que alguien me cuente cuál es esa fórmula, porque honestamente la desconozco. Porque la única fórmula que aprendí, la que domino y la que cultivo cada uno de los días de mi vida es la de trabajar y trabajar. Y si algo hace falta, trabajar más. Y a eso me dedico, y eso es lo que procuro transmitirte a ti y a cualquiera que toque a mi puerta en busca de ayuda, de orientación, de consejo. En esas oportunidades, entonces, hablo de las cinco características que convierten internet en la mina de oro de las oportunidades:
1 Conocimiento: en cualquiera de los
escalafones de virtudes que deben acreditar los emprendedores que elaboro, el aprendizaje siempre está en el primer lugar. Y no podría ser de otra manera, porque si no iría en contravía de mis principios. Aprender es algo que no puedes dejar de hacer cada día de tu vida, es lo que da sentido a cada día de tu vida. Alinea ese conocimiento con tus pasiones y obtendrás excelentes resultados. Aprende de otros, de los que ya transitaron el camino que te propones recorrer, de los que suman más fracasos que tú, de los que tienen valores y principios similares a los tuyos. Escoge una línea académica y profundiza en el tema, conviértete en un experto, sé una autoridad.
2 Acción: obvio, ¿cierto? A nadie le in-
teresa convertirse en un ratón de biblioteca o en uno de los sabihondos de la red. Los emprendedores nos formamos para actuar, para ayudar a otros, para transformar nuestras vidas y ayudar a otros a que hagan lo mismo con las suyas. El conocimiento tiene sentido y validez si el siguiente paso es la acción. Lamentablemente, por la creencia que en internet todo está automatizado, que los programas y las máquinas lo hacen todo por ti, muchos piensan que es dar unos cuantos clics, y listo. Llevo veinte años dando clics y sé que todavía me faltan muchos más (años y clics), pero no importa. La acción de mi negocio es, justamente, lo que me apasiona.
3 Estrategia: la clave del éxito en los
negocios por internet radica en tres aspectos. El primero es definir qué quieres hacer; el segundo, saber cómo hacerlo; el tercero, hacerlo. 15
Saber qué se quiere, creer que se puede y trabajar para hacerlo son los vértices del trípode del éxito en internet. No es magia, no es una fórmula mágica, no es casualidad. Haz de cuenta que son trillizas siamesas y que no se pueden separar: depende la una de la otra, y de la otra. Se complementan, se soportan, se enriquecen mutuamente. En la vida, la improvisación es fuente de aventuras, de sensaciones inolvidables, de aprendizajes increíbles. En los negocios, en cambio, cada uno de tus pasos debe estar planeado, encuadrado en una estrategia global, en unas acciones específicas. Lo que no planeas está fuera de tu control y lo que está fuera de tu control no te produce ganancias.
4 Servicio: como sicólogo de profesión
y como emprendedor con veinte años de experiencia puede decirte con autoridad que no hay mayor soledad que esa sensación de vacío aun cuando estás acompañado. Ese, sin duda, es uno de los peores males del ser humano en el mundo moderno, uno que se trasladó también al mundo de los negocios. Por fortuna, conozco la cura para ese mal: ¡El servicio! Sí, porque cuando sirves a los 16
demás nunca vas a estar solo, siempre tendrás un motivo para seguir, nunca podrás dejar abandonados tus sueños, siempre tendrás con quien compartir tus éxitos. Si tu negocio no está enfocado en brindar un servicio a otros, quizás estés a tiempo para corregir.
5 Equipo:
aunque los emprendedores solemos recalcar que este es un oficio de solitarios, una de las experiencias más enriquecedoras de mi vida laboral es compartir con mi equipo. Sé que soy la cara visible, pero también soy consciente de que mucho de lo que he conseguido habría sido imposible de alcanzar sin el concurso de esas personas. El éxito en un negocio en internet es fruto del trabajo de un equipo. Tus colaboradores, tus socios, tus colegas, tus clientes, esos espontáneos aprendices de emprendedores que te enriquecen con su pasión, con sus ideales, con su empeño. Su presencia, su compañía y su contribución hacen que cada logro, que cada triunfo valga la pena.
17
Evita, a toda costa, estos
5 errores Esa de levantarse un día y saber que somos ricos, multimillonarios, es una idea que la ficción nos vende hace tiempo. Los libros, la televisión y ahora internet nos bombardean con mensajes relacionados con la riqueza surgida en un abrir y cerrar de ojos, de un día para otro. Una mentalidad equivocada, además de mentirosa, que ha hecho mella en muchos emprendedores que se dejaron llevar por algún objeto brillante. Es cierto que muchas personas han encontrado la riqueza en internet, y serán muchos más los que alcancen ese sueño. Sin embargo, lo primero que hay que decir es que, seguramente, el término encontrado no sea el correcto: más bien, deberíamos afirmar trabajado, producido o provocado. Porque internet no es una suerte de lotería (que sí te hace rico de la noche a la mañana gracias a 18
un golpe de suerte), como muchos piensan. Asumir que por la mera presencia en internet vas camino de la riqueza es, sin duda, un grave error. Pero, lamentablemente, es un grave error que muchos cometen quizás forzados por las circunstancias, quizás encandilados por algún objeto brillante, quizás engañados por alguno de tantos que se venden como gurús y mentores. Es una falacia que a muchos ha perjudicado y que le ha causado mucho daño a la propia red. Es algo que repito con frecuencia, porque parece que cuesta trabajo entenderlo: internet no es el fin, sino el medio.
En otras palabras, la riqueza no está en internet, sino en el provecho que puedas sacar de las ventajas, las posibilidades y las características que esta poderosa herramienta nos ofrece. Y está condicionada, por supuesto, por la actividad a la que te dedicas y, sobre todo, por las acciones que ejecutas. Es como los botines que usan los futbolistas: tú puedes comprar la misma referencia que usa Lionel Messi, que nunca serás Lionel Messi. O puedes tener la raqueta de Roger Federer y seguramente nunca ganarás un Grand Slam. Los botines y la raqueta, como internet, son las herramientas, pero lo que verdaderamente marca la diferencia, lo que hace especiales y ganadores a Messi y Federer es lo que son capaces de hacer con ellas. La diferencia está en el gran talento con que los dotó la naturaleza, claro. Y de manera muy especial, también está en lo que ellos hicieron con ese talento: cómo lo desarrollaron, cómo lo potenciaron, cómo lo diversificaron, cómo lo explotaron. Lo increíble es que hay muchas personas que no entienden que tantos talentos, tantos dones y tantas posibilidades como Lionel Messi o Roger Federer, pero no los aprovechan. Quizás no para el fútbol, quizás no para el tenis. A lo mejor es para los negocios por internet, pero se dejan meter ideas erróneas en la cabeza y en vez de trabajar se sientan frente al computador a esperar que esa riqueza brote de la nada. Por eso, para esas personas desorientadas, tengo este Top-5 de errores que hay que evitar a toda costa si tu anhelo es tener un negocio en internet: cómo hacerlo y no morir en el intento. Veamos:
1) La impaciencia: si lo que
deseas es riqueza rápida, internet es el lugar equivocado. Salvo que compres el boleto
Si eres de aquellos que creen que internet es la nueva mina de oro, ten cuidado: el golpe tras la caída puede ser muy muy doloroso. No desperdicies tus oportunidades por una mentira. de la lotería desde la web, el éxito y la prosperidad de un negocio en internet dependen de tu trabajo, de tus acciones, de tus decisiones. No puedes saltarte los pasos, no puedes obviar el aprendizaje, no puedes evitar la inversión. No hay un libreto establecido para alcanzar el éxito en internet, y el proceso es lento. Es como la vida: naces, eres bebé, te conviertes en niño, luego en adolescente, te transformas en un adulto y en el ocaso de la existencia eres un adulto mayor. Y cada etapa tiene sus dificultades, su aprendizaje, sus recompensas.
2) Quieres algo fácil:
no se necesita ser un ingeniero de sistemas, cursar una maestría en negocios y menos ser un habilidoso usuario de los juguetes de la tecnología. Son saberes y habilidades que, por supuesto, ayudan, pero lo que realmente importa para tener éxito en un negocio por internet es lo que tú estás en capacidad de hacer, de producir.
19
¿Que internet es una mina de oro? Con esta herramienta es posible alcanzar riqueza, pero también son muchos los que fracasaron, los que lo perdieron todo, los que malgastaron su vida. Muchos dejan el trabajo tradicional y se embarcan en una aventura en línea y pronto tiran la toalla: les venden la idea de que es algo fácil, y no es así, claro que no es así. Hay que trabajar, mucho y muy duro, si quieres alcanzar éxito y atesorar riqueza. Comprende que el proceso puede ser algo maravilloso y que el resultado puede cambiar tu vida.
3) Creer que es magia: este,
sin duda, es el error más común. Muchos se creyeron la mentira de que riqueza, éxito, fama y reconocimiento están a la vuelta de un clic, y no es cierto. Salvo que les aclaren que es un clic repetido ¡decenas de cientos de veces! No necesitas trucos, sino pasión, disciplina, constancia, dedicación, aprendizaje continuo. Una característica de internet que me agrada es que cualquiera puede alcanzar el éxito. No hay que ser rico, o acreditar amplia experiencia, o ser conocido. Si ya tienes eso, mejor, pero eso no significa, de manera alguna, que puedas tomar un atajo o sentarte frente al computador a esperar que llueva el dinero. No es magia, es puro trabajo.
4) Sin objetivo: esa es
otra frecuente fuente de caídas de los emprendedores aprendices (y aun los que ya tienen experiencia).
20
¡NO saben qué quieren, NO saben para dónde van, NO saben a dónde quieren llegar! Lo único que desean es ser ricos y famosos. Sin embargo, fallan porque se enfocan estrictamente en el fin y se olvidan de los medios. Haz de cuenta que te subes a un avión o a un barco cuyos capitanes no tengan un plan de vuelo. ¿Cómo podrían llevarte al lugar que deseas? ¿Entiendes el riesgo de perder el rumbo o sufrir un accidente? Si eso no es lo que quieres que suceda en tu vida, antes de comenzar debes tratar un plan, una estrategia, una bitácora, y seguirlo paso a paso.
5) Solo buscas dinero:
el dinero es algo que todos necesitamos, porque nos enseñaron que es el medio para conseguir la felicidad. Sin embargo, eso no es cierto. Cuanto más rápido aprendas eso, más dificultades, errores y sinsabores te evitarás. El dinero no es el fin de tu vida, sino un medio, una herramienta que puede facilitarte el tránsito. Cuando lo único que te interesa alcanzar a través de tu trabajo en internet es el dinero, debes saber que estás caminando por la cornisa y en cualquier momento puedes caer al vacío. No te confundas: lo que persigues es bienestar, felicidad, tranquilidad, tus sueños, tu pasión. Y la buena noticia es que todo eso lo puedes conseguir sin ser millonario.
21
MercadeoGlobal.com/8reglas
Moldea tu vida para el
ÉXITO
En la niñez, todos somos artistas en potencia: pintamos, cantamos, bailamos, escribimos, creamos de mil y una formas. Sin embargo, como si sufriéramos una castración intelectual, con el paso de los años dejamos de lado esas actividades tan enriquecedoras, tan placenteras. Y, por supuesto, lo pagamos caro, porque son la clase de hábitos que nos ayudan a ser más creativos, más despiertos, más seguros de nosotros mismos.
Recuerdo que cuando era niño me encantaba jugar con la arena, con el barro. Creo que a todos nos gustaba. Y si podíamos ir al mar, hacer figuras en la playa era una oportunidad que no podíamos dejar pasar. Eso, obedece, quizás, a que todos llevamos dentro un artista en potencia, un artesano con ansias de moldear el mundo. Un artista, un artesano que necesitamos en los negocios para moldear el éxito, la felicidad y la prosperidad. Cuando nos tiramos al agua y comenzamos a nadar en ese mar infestado de tiburones hambrientos que es el mercado, a veces nos obsesionamos con la idea de ser distintos. Y somos tan tercos, que nos vamos al extre22
mo y cometemos uno de los errores más elementales: tratar de reinventar la rueda. No nos damos cuenta de que tenemos la solución en las manos: moldear el éxito y adaptarlo a nuestras necesidades. Sí, esa es una estrategia válida. No se trata de copiar al pie de la letra lo que algún exitoso ha hecho y replicarlo en nuestro negocio. La idea es tomar sus ideas, ver qué hizo bien (cómo lo hizo, por qué lo hizo, en qué momento lo hizo, qué resultado obtuvo) y ajustarlo a nuestras necesidades, a nuestras posibilidades. Es es una opción que muchos desechan sin darse cuenta de que es muy útil para acortar la curva de aprendizaje. Lo primero que debes hacer es fijarte en una empresa exitosa, ya establecida, de las que utilizan estrategias de comprobado éxito, de las que ya están instaladas en el corazón de los clientes. Esa empresa te sirve de modelo, te puede enseñar algo. Averigua quiénes trabajan allí, qué experiencia tienen, cómo llegaron, cómo se han desarrollado; desmenuza sus ofertas, esculca en sus precios, escudriña en los bonos que regala.
Ese, sin duda, es un buen primer paso. Observa, analiza, moldea. Sin embargo, y esa es una realidad a la que no te puedes resistir, eventualmente llega el momento en que lo más inteligente, lo más adecuado y, sobre todo, lo más rentable, sea unirte. ¡Sí, unirte a alguno de esos grandes que te inspiró! ¿O prefieres seguir desgastándote, arriesgando tus recursos, malgastando tus energías, tu tiempo y tu dinero? Te lo confieso: yo mismo pasé por esa situación, también me vi enfrentado a ese dilema. Y traté de luchar contra esos gigantes, hasta que me di cuenta de que lo más prudente y lo más conveniente era buscar una alianza. Los resultados fueron sorprendentes: me arrepentí de haber desperdiciado ese tiempo y de cuánto dinero pude haber ganado antes, si hubiera simplificado el proceso. En un tiempo muy corto, mucho antes de lo que esperaba, percibí ganancias de 6 cifras. Y, lo mejor, esos ingresos se volvieron recurrentes sin necesidad de dedicarle a esa actividad las 24 horas del día, los 7 días de la semana. ¿Te gustaría ser parte de algo así? ¿Te agradaría generar ganancias de 6 cifras de manera consistente y permanente? ¿Estás listo para dejar atrás ese pasado de dificultades, limitaciones y sueños frustrados?
Si la respuesta a esos interrogantes es afirmativa, entonces solo tienes que dar el primer paso. ¡No te arrepentirás!, te lo aseguro. Únete a este exitoso equipo de trabajo y conviértete en un empresario exitoso, moldea tu negocio para que te produzca esas ansiadas ganancias de 6 cifras. Anímate, que hay un entrenador personalizado que te espera para ayudarte a cumplir este proceso lo más pronto posible. 23
CASO DE ÉXITO
Se reinventó y ahora está
en boca de todos “Soy muy feliz. He tomado grandes riesgos en mi vida y los saqué adelante a punta de ganas. En este último, dejé todo por amor y aquí estoy, contra todos los pronósticos, haciendo lo que me gusta, logrando una transformación en la vida de otros que no la logré antes con nada de lo que hacía. Y vivo cada día con la satisfacción de que, si es el último, me voy tranquila porque di el 200 por ciento”. Podría ser el final de una novela famosa, de esas laureadas que se convierten en éxitos editoriales y concitan la atención de públicos de todas las edades. Es una hermosa historia de superación, de lucha por los sueños, pero las líneas anteriores no son, por fortuna, el punto final. Porque esta es una historia que está a medio escribir, que sin duda nos deparará nuevos y gratificantes capítulos de felicidad.
24
Érika Herrera, la protagonista, es una colombiana, nacida en la Costa Atlántica, y vivo ejemplo de las mujeres de nuestra Latinoamérica: berraca, pujante, luchadora, echada pa’lante, un modelo de vida digno de imitar. “Soy madre, esposa y odontóloga de profesión, una mujer que ha construido su vida reinventándose una y otra vez. Y a partir de mi ejemplo, mi conocimiento y mi experiencia, ayudo a los demás”.
De su madre aprendió la disciplina, la perseverancia y la pasión que le imprime a cada reto que asume. El espíritu emprendedor y la convicción de conseguir lo que se propone los heredó de su padre. “Ellos se sentaban horas enteras a escucharnos, a aconsejarnos, a conocer a nuestros amigos, a enseñarnos con su ejemplo. Y tuve maestros que me transmitieron la importancia de tener un propósito en la vida”, afirma.
Luego de 20 años de ejercer como ortodoncista en Colombia, con un divorcio a cuestas, se reencontró con un compañero de colegio y su vida cambió. “Me casé por segunda vez y me vine a Los Ángeles. Aquí viví la última de mis reinvenciones y ahora soy consultora de marketing para odontólogos”. Una actividad que para ella no es trabajo, sino un servicio que le permite trascender, dejar huella en los demás, estar en boca de todos.
Los comienzos profesionales fueron difíciles, pues ya había nacido su hijo Gabriel y requería estudiar más, por lo que no podía emplearse. Entonces, no hubo más remedio que tocar puertas. “Fui de colega en colega, de amigo en amigo, contándoles que por fin era ortodoncista y que ya me podían enviar pacientes. Siempre fui buena estudiante, así que contaba con la confianza de colegas, amigos y familiares y de los pacientes”.
De joven, mientras la brisa del mar golpeaba su cuerpo y el sol tostaba su piel, Érika quería ser cantante. “Me habría encantado ser una cantante famosa del estilo de Celia Cruz, Totó la Momposina o Shakira, con mucho sabor y sentimiento”. El sueño era transmitir el folclor, el baile, la esencia cultural. Sin embargo, pronto se despertó: “Me di cuenta de que, claramente, tenía más ganas que buena voz”.
Sin embargo, ese proyecto no funcionó como ella esperaba y su vida parecía derrumbarse. Antes de que eso ocurriera, no obstante, dio un giro, uno radical y fantástico: “Llegar a EE. UU. significó reinventarme. Nunca antes fui tan feliz y nunca antes había vivido una circunstancia tan adversa: tuve que comenzar de cero a los 50 años, sin poder ejercer mi profesión, sin familia directa, sin amigos, sin ingresos propios, sin dominar el inglés”.
“Aprendí que nunca algo estará perfecto, así que el momento de empezar es ya. Los clientes no quieren consultores perfectos, sino seres humanos comprometidos con su causa que los acompañen a construir un camino”. 25
Érika sueña con crear una comunidad de odontólogos con formación de marketing que les permita ejercer la profesión con dignidad, con vocación de servicio, con ingresos abundantes y capacidad para sobrevivir a la competencia desleal. Fue, entonces, cuando apareció su mejor versión: “Tengo todo el entusiasmo, la pasión y el empeño para sacar esto adelante y lo estoy logrando más rápido de lo que hubiera imaginado. Sé que necesito persistir y enfocarme en los objetivos que me tracé”. Y dio el paso, ese que provoca tanto miedo, y se transformó en emprendedora. El trabajo de tesis fue el que, sin querer queriendo, le indicó cuál era el camino que debía seguir. “Mi trabajo de grado requería la colaboración de los participantes, así que, para convencerlos de ayudarme, les ofrecí un tratamiento de ortodoncia al mismo precio que el de la universidad. Por supuesto, aceptaron y al año mi consultorio era la envidia de todos, con más de 100 pacientes”, cuenta. Una coyuntura, una oportunidad, un acierto: Érika reunió los factores que necesitaba para im26
pulsar su negocio y logró su objetivo. Faltaba algo, sin embargo. “Decidí estudiar marketing para aprender a tomar decisiones acertadas y competir con las grandes clínicas. Sabía que no tenía el dinero para hacer publicidad, así que desarrollé una cultura de servicio al cliente para fidelizarlos y retenerlos. También establecí alianzas estratégicas e hice campañas de referidos”. Y empezó a trabajar con gerentes, asesores y coaches. Pero, el círculo no se cerraba, hacía falta algo vital: apoyo profesional. “En mi afán por aprender acerca de los negocios por internet, compré todos los cursos que me ofrecieron. La verdad, hubiera logrado lo mismo con menos. De hecho, hay algunos que nunca he visto. Eso significó descapitalizarme innecesariamente.
Estaba tan perdida, quería encontrar una luz en la oscuridad”. Y se hizo la luz apareció y se acabó la oscuridad. “La solución fue buscar un mentor, alguien que ya hubiera recorrido el camino y me dijera por donde podía ser el mío. La verdad, yo no vi esta opción de hacer consultorías de marketing, de escribir un libro y aterrizar todo el conocimiento y la experiencia que tenía hasta que Álvaro Mendoza, en una conversación durante su evento ‘Hablar para Vender’, me hizo caer en cuenta de que sabía algo más que pegar ‘brackets’ y enderezar dientes”. Y entró a otro mundo, con internet como gran aliado. “Aprendí que solo eres exitoso cuando otro alcance el éxito gracias a ti, que tu conocimiento vale si lo compartes con otros, que dar más de lo que la gente espera convierte al cliente en evangelizador, que cuanto más avances más humilde debes ser, que se enseña con el ejemplo. Ese es el valor de un mentor y de asistir a un evento en vivo. Esa charla no tiene precio”. Hoy, Érika es una persona diferente gracias a esa ayuda y a la que le brindaron sus mentores de la Escuela Gestalt de Bogotá. “Me exi-
gieron con afecto y me enseñaron a vivir el aquí y el ahora. Cultivo esa filosofía a diario, aunque no es fácil”. Es feliz con su trabajo y ayuda a los odontólogos a ser más felices, a buscar su propósito de vida, a trascender, a ser abundantes y exitosos en todo sentido. Es feliz, muy feliz. Hace consultarías de marketing, tiene un infoproducto llamado Doctor Pro System, es la autora del libro ¿Dónde están los pacientes que no los veo? (éxito de ventas antes del lanzamiento oficial) y da conferencias internacionales en sociedades científicas destinadas a crear conciencia entre sus colegas de la necesidad de implementar el marketing para que su profesión sea rentable, una falencia que les resta competitividad en el mercado. “El logro que más me enorgullece es haber construido un negocio de la nada, trabajar en algo que no tenía en mis planes y convertirlo en un modo de vida, a pesar de las dificultades. No ha sido fácil, pero cada meta alcanzada la disfruto y la valoro al máximo”. La historia, sin embargo, está a medio escribir. Hay mucho camino por recorrer, pero Érika no tiene afán. Mientras, por los laditos, cultiva más sueños y su próxima reinvención…
¿Quieres saber más de Érika Herrera? http://erikaherrera.net facebook.com/ErikaHerreraMarketing/ linkedin.com/in/eriherrerap/ 27
¿Ya estás en el
GRUPO ÉLITE
de emprendedores? ¿Qué rápido se nos fue el año, cierto? Ya estamos a mediados de septiembre, se acerca el Halloween y enseguida podremos disfrutar del encantador aroma de la Navidad. Para muchos, lo que ya no se hizo pasará a encabezar la lista de propósitos para 2018, pero estoy seguro de que tú, como yo, entiendes que esa es una perversa forma de procrastinación. Los sueños no se aplazan: lo sueños se cumplen, y se cumplen ya. En ediciones anteriores de MG La Revista te hablé de Comando Secreto, el evento que junto con mi socio y amigo Gus Sevilla realizaremos próximamente en República Dominicana. ¿Sabes en qué consiste? Es un grupo élite de emprendedores a los que llevaremos de la mano para construir una poderosa marca personal y un negocio con bases sólidas que les permitan convertirse en los número uno del mercado. Cuando se habla de República Dominicana, y más exactamente de Punta Cana, lo primero que se le viene a la mente es el paraíso terrenal. Playa, brisa y mar,
28
esa vida que todos ansiamos, el escenario ideal para la realización de nuestros sueños. Sin embargo, honestamente sé que si tú eres un emprendedor serio y comprometido con tu pasión, lo que en verdad te atrae es la posibilidad de transformar tu vida, transformarla para bien.
¿Cómo hacerlo? En este exclusivo de cinco días y seis noches te vamos a ofrecer lo mejor que tenemos: conocimiento y experiencia. ¡Sin límites, sin restricciones, de forma transparente! Nada de fórmulas secretas, nada de pociones mágicas: conocimiento de alta calidad, herramientas de probada eficacia, estrategias ganadoras. Te revelaremos el código y los secretos que nos permitieron ser los expertos más reconocidos del mercado. En esos cinco días de inmersión total, desarrollaremos un programa de alto impacto que transformará tu vida y te permitirá llevar tu negocio al nivel de las grandes ligas. ¿Algo más? Sí, algo es-
pectacular: durante seis meses, el grupo élite de emprendedores se reunirá en un Mastermind Platino (a través de internet) en el que te llevaremos de la mano a la cima, allí donde te esperan tus sueños, el éxito, la prosperidad y la felicidad. Es cierto, la mente, que a veces es traviesa, nos dice que 2017 se terminó y que dejemos para para 2018 lo que no alcanzamos a hacer. Sin embargo, es mentira: aún estás a tiempo para darle un vuelco definitivo a tu vida si aprovechas esta valiosa oportunidad. Comando Secreto República Dominicana con Álvaro Mendoza y Gus Sevilla + Mastermind Platino es el evento que esperabas. ¡No nos falles!
29
30
MercadeoGlobal.com/flujo
ENTREVISTA
Tiene cara de picardía, de niño travieso, y una sonrisa contagiosa. Sin embargo, es serio, muy serio, especialmente en su trabajo. Y no podía ser de otra manera, porque Hyun Uk Chu es surcoreano, es decir, proviene de una cultura en la que el trabajo es considerado el segundo estandarte de la vida, después de la familia, por supuesto. Y, respaldado también en su origen, es un maestro, un gran maestro de vida para sus hijos adoptivos. La de Hyen Uk era la vida normal de un surcoreano hasta que, cuando contaba 11 años (en 1984), la familia se vino a Colombia. ¡Terrible choque cultural!, en diversas formas, y más para un niño que a esa edad está en plan de conocer el mundo. Cinco años después, sin embargo, sus padres regresaron a Corea del Sur y él se quedó en esta tierra tropical que lo acogió como uno de los suyos. Una adolescencia poco común, sin duda. Para rematar, el día que cumplió los 18 años, que para muchos jóvenes es feliz porque implica convertirse en adulto, recibió el más duro de los golpes de la vida: le informaron que su mamá había fallecido. 31
Graduado en ingeniería química, durante una década comandó los destinos de una multinacional hasta que la vida le pidió un cambio: se independizó y es muy feliz. De ella, le quedaron imborrables recuerdos y, sobre todo, grandes lecciones de vida, de esa sabiduría tan propia de las madres. Y, entonces, no hubo más remedio que echar raíces en Colombia y labrarse un futuro profesional.
una crisis existencial por la fatiga profesional y porque sentía que no tenía un propósito”. Además, lo perseguía ese sueño que forjó en la niñez: “Quería ser inventor, quería patentar y ser el creador de cosas increíbles”. Su ídolo era Thomas Alva Edison.
“Hice lo que la mayoría de los papás les piden a sus hijos: estudiar, entrar a una buena empresa y buscar la jubilación. De hecho, lo hice bien hasta eso de entrar a una buena empresa, pero pronto me di cuenta de que el plan de jubilarme trabajando como empleado no era mi destino”, relata. Entonces, renunció, se volvió emprendedor, se quebró, se divorció y se quedó sin nada, literalmente. ¿Y? A comenzar otra vez.
El paso de la imaginación a la realidad, sin embargo, no fue fácil. De hecho, fue bastante difícil. ¿Por qué? “Lo más complicado para arrancar fue creer en mí mismo, ser consciente de que podía crear cosas que a la gente le encantaría tener y usar”. Por eso, el comienzo fue lento. Afortunadamente, contó con el vital apoyo de su familia, que siempre lo respaldó en sus intentos, que no permitió que se desanimara, que lo motivó a seguir.
Y comenzó, de cero. Sus padres siempre le habían inculcado la idea de ser emprendedor, pero a eso llegó forzado por las circunstancias. “La decisión la tomé cuando sufrí
Un poco de paciencia, tres años de trabajo silencioso y… ¡eureka! Sonó la flauta. “La primera señal que me indicó que iba por el camino correcto fue cuando registré tantas
32
ventas que no tenía tiempo para contabilizarlas”. Fiel a esas características de los orientales, perseverantes, tercos y con gran fortaleza mental, Hyen Uk logró que poco tiempo antes parecía imposible: se reinventó y se transformó en un ganador. No fue, en todo caso, una transformación fácil o cómoda. “Mi vida cambió radicalmente de un momento a otro. Pasé de estar ocupado trabajando para los demás a estar ocupado en lo que amo hacer”. ¿Lo más duro? “Asumir que era mi propio jefe, ser disciplinado y organizado”. Para conseguir el objetivo, por supuesto, tuvo que recurrir a su versión más surcoreana: paciencia, perseverancia y enfoque. “Lo más difícil fue el enfoque”. En ese proceso, en los momentos más duros de ese proceso, las frases de Jim Rohn le sirvieron como vitaminas para el alma. Rohn fue un empresario estadounidense, autor de 34 libros y orador motivacional con más de 6.000 conferencias que reunieron a 5 millones de personas. Se lo consideró un filósofo de los negocios y se distinguió por la sencillez de su discurso: siempre pregonó por lo básico, por los fundamentos de la actividad.
Y en ese proceso también hubo dudas, momentos difíciles, instantes en los que estuvo a punto de tirar la toalla. “Siempre que me llega ese momento de no querer continuar, pienso que mejor lo dejo para mañana. Y ese mañana nunca llega”, afirma entre risas. Unas risas que hoy son la constante, porque después de mucho tiempo, después de muchos errores, después de muchos sobresaltos, Hyen Uk Chu otra vez es feliz. “Tuve que comenzar de cero, aprender de mis fracasos y salir adelante”, cuenta. Se lee fácil, parece fácil, pero fue difícil, inclusive para alguien como Hyen Uk, una persona que no sabe rendirse. “Hoy en día vivo de mis diferentes empresas y de las inversiones que hago en la Bolsa de Valores de Nueva York”, un tema en el que es un coach y consultor que goza de reputación entre quienes han tenido la suerte de ser sus discípulos. Sigue siendo un soñador, aunque de un modo distinto al de la juventud. “Hoy soy un soñador que lucha por servir a los emprendedores hispanos para que desarrollen su inteligencia financiera y puedan construir una vida más próspera”.
33
Es, también, un reconocido conferencista internacional, uno de los preferidos del público por su buen sentido del humor y sus enriquecedoras anécdotas, y por su conocimiento y experiencia. También es uno de los preferidos de los emprendedores novatos, que lo ven como un ejemplo inspirador y que se conectan rápidamente con su mensaje. “Para ellos, mi sugerencia es que amen lo que hacen. Siempre les pregunto qué harían si no les pagaran por aquello que hacen, cómo van a superar las dificultades. Si amas lo que haces, el trabajo ya no será trabajo, porque lo harás por amor”, explica. Cuando voltea la mirada y ve su pasado, sabe qué error no repetiría: “Si pudiera volver atrás, si pudiera devolver el tiempo, no
me divorciaría por causa del dinero, por una quiebra. El error más costoso fue pagar el precio de tener una familia separada”, dice con nostalgia. Hoy, sin embargo, la vida le dio la oportunidad de la revancha: “A mi proyecto de vida no le falta nada. Soy feliz con el camino que recorro día a día”, asegura. Surcoreano de nacimiento, colombiano por adopción, latinoamericano por elección, Hyen Uk Chu es la muestra de que es posible cumplir los sueños, aprender de los errores y reinventarse. “En mi negocio actual, impactamos la vida de los hispanos, les inculcamos un sueño, una meta para mejorar y cumplir aquello que siempre han deseado. Me falta crear una comunidad que se retroalimente por sí misma”. Ese será su mejor invento…
¿Quieres saber más de
Hyen Uk Chu? http://www.hyenukchu.com http://elclubdeinversionistas.com/o/ facebook.com/hyenukchu/ instagram.com/hyenukchu/ twitter.com/hyenukchu?lang=es youtube.com/user/hyenukchu
34
En 2016, Hyen Uk Chu creó el Club de Inversionistas, en el que más de 150.000 personas han recibido formación especializada para invertir y conseguir libertad financiera.
35
REFLEXIÓN
Benazir Bhutto ofrendó su vida
por su gran pasión ¿Qué estarías dispuesto a hacer por aquello que amas, por eso que te apasiona? ¿Cuál sería el mayor sacrificio que realizarías? ¿En dónde estaría el límite de tus acciones? Supongo que me dirás que por tu familia, por tus hijos, por tu negocio, harías lo que fuera necesario, más allá de tus fuerzas. Estoy seguro de que cualquiera se esforzaría al máximo por su familia, por sus hijos, pero, ¿estarías en disposición de ofrendar tu vida? Voy a ser honesto: cuando me hice esta pregunta, automáticamente respondí que sí. Sin embargo, unos segundos más tarde dudé. No porque no esté dispuesto, sino porque me pareció un precio demasiado alto. No te lo voy a negar: también hay una dosis de egoísmo, pues el mayor anhelo de mi vida es ver crecer a mis hijas, compartir la concreción de sus sueños, ser cómplice de sus aventuras, compañero de sus andanzas. Sí, pero no. Sí estoy dispuesto a hacer lo que sea necesario por aquello que más amo, que es mi familia, que son mis hijas, pero no sé si eso incluya también ofrendar mi vida. Por eso, cuando me llegó un artículo acerca de Benazir 36
Bhutto me llamó la atención y me invitó a la reflexión, de la misma manera que te la extiendo a ti ahora. Ella entregó su vida por una causa, la de su pueblo, la de Pakistán, el 27 de diciembre de 2007. Benazir nació en Karachi, la capital paquistaní, el 21 de junio de 1953. Su padre fue Zulfikar Alí Bhutto, presidente de la Nación entre 1971 y 1973 y primer ministro de 1973 a 1977, cuando fue derrocado por un golpe militar. Fue juzgado por la muerte de un contradictor político y murió ahorcado el 4 de abril de 1979. Había fundado el Partido Popular de Pakistán (PPP), un legado que continuó su hija, que heredó la vena política. Tras concluir los estudios primarios, siempre bajo el cuidado de monjas católicas, se fue a Estados Unidos en 1967. Asistió al Ratcliff College y luego ingresó a la prestigiosa Universidad de Harvard, donde obtuvo el diploma en Gobierno Comparativo. Después, se instaló en Londres, donde estudió Filosofía, Ciencias Políticas y Economía en la Universidad de Oxford. También completó el curso de Derecho Internacional y Diplomacia. En diciembre de 1976, fue la primera mujer en ser elegida presidenta de la Oxford Union, la prestigiosa y selecta asociación de debates de ese claustro. Ya mostraba sus dotes de liderazgo, su inteligencia, su vocación de servicio y ese gusto por la política que le venía de familia. En 1977 regresó a su país y se unió a su padre para guiar los destinos de un pueblo que durante el siglo XX sufrió los efectos de sucesivas dictaduras militares. Tras la ejecución de su padre, se convirtió en una perseguida política, pues recogió las banderas del PPP. Fue apresada y enviada a la cárcel en diversos períodos que sumaron más de cinco años, por lo que en
El pasado primero de septiembre, concluyó el juicio contra los cinco acusados de su asesinato. Aunque habían confesado en 2009, fueron absueltos por el “beneficio de la duda”. 1984 tuvo que abandonar Pakistán y regresar a Londres. Desde allí, sin embargo, continuó la lucha en defensa de la democracia y también de los derechos de la mujer. A pesar de la distancia, su voz llegaba con autoridad. En 1986, después de que se levantó la ley marcial, volvió a Pakistán. Y lo hizo con fuerza, pues organizó el Movimiento para la Restauración de la Democracia.
37
Se convirtió en una líder popular seguida por las masas y su lucha dejó de ser exclusiva de los oprimidos paquistaníes y traspasó las fronteras para adquirir visos internacionales. Pero, fue 1998 el año en el que la vida de Benazir Bhutto comenzó a instalarse en los libros de historia. Su partido, el PPP, logró que el dictador Muhammad Zia-ul-Haq fijara fecha para la realización de comicios electorales y luego la misteriosa muerte del verdugo de su padre, en un accidente aéreo que nunca fue aclarado, le abrió las puertas hacia la victoria en las urnas. Las elecciones se realizaron el 16 de noviembre y, con apenas 35 años, Benazir Bhutto se convirtió en la primera mujer elegida primera ministra de un país musulmán. Fue, en todo caso, una victoria que no pudo saborear, porque sus opositores le hicieron la vida imposible. Fue acusada de corrupción y violación de la Constitución, y destituida por el presidente Ghulam Ishaq Khan, en agosto de 1990. Tendría revancha, no obstante, en las elecciones de octubre de 1993, que el PPP ganó por mayoría simple. Su triunfo, empero, solo avivó el fuego de las diferencias políticas, los odios y la intolerancia. En noviembre de 1996, otra vez señalada por actos de corrupción, mala administración y deterioro de la seguridad pública, el presidente Farooq Leghari la destituyó. Además, fue condenada a prisión por corrupción (la pena fue conmutada) y se exilió en los Emiratos Árabes Unidos. El hecho de ser mujer, haberse formado en Occidente y propender por los derechos de la mujer hizo que los partidos religiosos la atacaran sin cesar, sin piedad. Durante casi ocho años, desde el extran38
jero, continuó su lucha y, aunque sabía que su vida corría peligro si regresaba a Pakistán, con el aval del presidente Pervez Musharraf retornó a Karachi. Llegó a hacer campaña para los comicios previstos para el 8 de enero de 2008, pero no alcanzó a acudir a las urnas: el 27 de diciembre de 2007, durante una concentración política, fue asesinada en un atentado en la localidad de Rawalpindi. Acababa de terminar un mitin y se trasladaba en su automóvil cuando fue impactada con disparos en el cuello y la cabeza, mientras se asomaba por el techo del vehículo para saludar a sus seguidores. Enseguida, el asesino hizo explotar una bomba que convirtió el auto de la política en una masa de fuego. Las cifras oficiales estimaron en al menos 24 las muertes provocadas por el atentado suicida, el tercero que sufría Bhutto. Su campaña se enfocaba en los graves problemas políticos y sociales que aquejaban a Pakistán, y en la búsqueda de mejores condiciones para las mujeres. Proponía la creación de instituciones que velaran por el bienestar de las mujeres (hospitales, escuelas), pero nunca pudo ver cumplido sus sueños. De la misma manera que ella tomó el listón de su padre, sus hijos Bilawal Bhutto Zardari y Aseefa Bhutto Zardari continuaron su lucha. Benazir Bhutto, gracias a la educación que le dio su padre y a lo que aprendió en Occidente, rompió paradigmas, cambió esquemas y, sobre todo, se convirtió en una luz para millones de mujeres a las que en su país, por cuestiones culturales y religiosas, se las considera inferiores. Por ellas luchó desde que tuvo uso de razón y por ellas ofrendó su vida. El pueblo de Pakistán fue su gran amor, su pasión, pero también fue su condena.
No te pierdas la mejor informaciรณn sobre marketing para tu negocio
39
¿Te las perdiste porque andabas muy ocupado? ¿Las viste, pero después se te olvidó echarles una mirada? ¿Te gustaron y crees que vale la pena leerlas de nuevo porque su mensaje es enriquecedor? ¡Tranquilo, a todos nos pasa! A mí también me pasa. Es que el ritmo de la vida moderna es frenético y no siempre podemos darnos los gustos que deseamos, no siempre podemos dedicar el tiempo necesario para lo que apreciamos. Consciente de esta situación, porque te lo repito a mí también me pasa, a partir de esta edición de MG La Revista te ofreceré los cinco artículos publicados en mi blog durante el último mes que alcanzaron mayor impacto, que fueron los preferidos de mis clientes. Para que los veas cuando quieras, donde quieras, desde el dispositivo que prefieras. Ojalá los disfrutes y ojalá sean de provecho para la actividad que desarrollas en tu negocio:
Napoleon Hill, el padre de las mentes maestras
Napoleon Hill es el autor del libro Piense y hágase rico, basado en las entrevistas que realizó con miembros de 500 de 40
las familias más ricas de EE. UU., en un proyecto que le propuso el industrial Andrew Carnegie. Su teoría dio origen a las mentes maestras, una técnica de marketing que no pierde vigencia, una poderosa herramienta a tu disposición. http://bit.ly/2eHqqrS
Lee Iacocca, motor del éxito de Ford y Chrysler
La invención del telemarketing como estrategia de ventas y ser el cerebro detrás del Ford Mustang y la Plymouth Voyager, íconos de Ford y Chrysler, orgullos de la industria automotriz estadounidense, le garantizaron un lugar de privilegio en la historia. Sufrió el menosprecio de su talento, pero demostró que solo pierde quien se rinde. Y él no lo hizo. http://bit.ly/2v0ZC8K
Blockbuster: el que a hierro mata, a hierro muere
Blockbuster, que literalmente liquidó a sus competidores, aprendió que “El que a hierro mata, a hiero muere”. La empresa desapareció a finales de 2013, sumergida en deudas. Mientras, los hábitos de los aficionados al cine, las películas,
series o al entretenimiento en los hogares cambiaron tanto, que ya no se dice “Veamos una peli”, sino “Veamos Netflix”. http://bit.ly/2vZxtTE
Airbnb: cómo revolucionar y reinventar el mercado
Estados Unidos, España, Países Bajos, Canadá, Francia, Italia, India, Suráfrica, Japón y Corea del Sur son algunos de los lugares en los que la industria hotelera formal puso el grito en el cielo por esta plataforma que cubre no menos de dos millones de propiedades en 33.000 ciudades de 192 países. Ejemplo de innovación, revolución y reinvención. http://bit.ly/2f58FlV
Hello Kitty: la millonaria de las 1000 caras
Cerca de cumplir 43 años, Hello Kitty es una tierna niña de tercer grado. Siempre lo ha sido y siempre lo será. A esa eterna juventud, el ícono de la cultura japonesa le suma sus éxitos de ventas a lo largo y ancho del planeta y la idolatría de millones de mujeres de todas las edades. Es la millonaria de las mil caras y de las lecciones para emprendedores. http://bit.ly/2tdR8OX
41
MercadeoGlobal.com/youtube
42
MercadeoGlobal.com/facebook
MercadeoGlobal.com/twitter