Alberto Paredes comparte con los lectores de La Otra este ensayo inédito sobre Altazor. El libro cumple 85 años (1931-2016) desde su primera edición; se trata pues de un acercamiento filológico-filosófico. Este ensayo pertenece ya a un libro de su autoría que aparecerá a fines de año, o antes: Y todo es lengua -diez preguntas literarias-, con los sellos de Siglo XXI-UNAM (Facultad de Filosofía y Letras).
Altazor o el Ícaro de nuestros tiempos: de la Musa Eulalia al torbellino Dislalia ALBERTO PAREDES (UNAM)
¿Qué poesía es posible en los tiempos modernos? Jean Paul Richter asistió en trance onírico al espectáculo final de la muerte de Dios (en Siebenkäs, 1789-1796); Nietzsche razona y expone con precisión irrefutable el acontecimiento. Mallarmé culmina su poesía consciente de la incertidumbre, podríamos decir, la incertidumbre como absoluto, y el oscuro paisaje cósmico como escenario de un enorme péndulo cuyo compás alcanza los polos Azar y Necesidad sin que podamos discernir con nuestros recursos limitados cuál da la hora humana; Dios o la Nada en el silencio estelar. Desde 1919 el chileno Vicente Huidobro intuyó su palabra en este drama, el último y el primero de la Creación. En 1931 su visión estaba concluida y al fin fue publicada en su integridad: Altazor o el viaje en paracaídas. Es un clásico mayor y 85 años después hemos de seguir leyéndolo. Prefacio y siete cantos: la cábala –así con minúscula, acaso también con mayúscula– está presente, y la imaginería bíblico-católica. Pues cada quien llega a la gran ausencia