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Universidad Nacional Autónoma de México Coordinación de Difusión Cultural Dirección General de Proyectos y Fomento Editorial Colección Tezontle Fondo de Cultura Económica Espejo de viento
Coordinación editorial Verónica Martínez Lira Textos Verónica Martínez Lira Traducciones Alejandra Reta Lira Investigación Horacio Heredia Verónica Martínez Lira Alejandra Reta Lira Corrección de estilo Horacio Heredia Roberto Kretschhmer Patricia Zama Diseño gráfico Ricardo Salas & Frontespizio. Cristina Santoyo Edición Verónica Martínez Lira Concepto editorial © Editorial Espejo de viento, S.A. de C.V. Portada “An original Theory or New Hypothesis of the Universe”, Wright, Thomas, London, 1750. In-4°, París, Bibliothèque nationale de France, Réserve des livres rares, Rés. v. 1945, planche XXXII. Ilustraciones Bibliothèque nationale, France; Kungliga biblioteket, Stockholm; Biblioteca Statale, Lucca; The Granger Collection, NewYork; Landesbibliothek Wiesbaden, Deutschland; Österreichische Nationalbibliothek; The British Library, London; Bayerischen Staatsbibliothek, München. D.R. © Editorial Espejo de viento S.A. de C.V. Depósito legal: Editorial Espejo de viento S.A. de C.V. Prado Norte núm. 652, Lomas de Chapultepec, 11000, Miguel Hidalgo, D. F., México ISBN 970-32-0480-5 Edición digital, 2014 Prohibida su reproducción parcial o total por cualquier medio, sin autorización escrita del legítimo titular de sus derechos.
índice I. NOTA DE LAS EDITORAS II. HILDEGARD VON BINGEN: LA ENCICLOPEDIA MEDIEVAL FEMENINA Por Ernesto de la Peña EL LENGUAJE SECRETO: EL CAMINO HACIA HILDEGARD VON BINGEN Por Verónica Martínez Lira III. CONTEXTO HISTÓRICO SIGLO XII Los monasterios Los manuscritos medievales El neoplatonismo La filosofía del siglo XII El amor cortés Los cátaros Las Cruzadas Los Templarios IV. CRONOLOGÍA BIOGRÁFICA DE HILDEGARD VON BINGEN V. EPISTOLARIO Introducción Carta de Hildegard al abad Bernard de Clairvaux (1146-1147) Carta del abad Bernard de Clairvaux a Hildegard (1146-1147) Carta de Hildegard al papa Eugenio III (1148) Carta de Hildegard a Hartwig, arzobispo de Bremen (después de 1148) Carta de Hildegard a Oddo de Soissons, rector de la universidad de París (1148-1149) Carta de Hildegard al papa Eugenio III (1148-1153) Carta de Hildegard al rey Konrad III (1150-1151) Carta del papa Eugenio III a Hildegard (1151) Carta de Hildegard a Hartwig, arzobispo de Bremen (después de 1151-1152) Carta de Hildegard a la abadesa Richardis (1151-1152) Carta de Hartwig, arzobispo de Bremen a Hildegard (1152) Carta de Hildegard a Hartwig, arzobispo de Bremen (1152) Carta de Friedrich I, Barbarroja a Hildegard (1152-1153) Carta de Elisabeth von Schönau a Hildegard (1152-1156) Carta de Hildegard a Elisabeth von Schönau (1152-1156)
H ildegard vonBingen
Carta de Hildegard al papa Eugenio III (1153) Carta de Hildegard a los cardenales Bernhard y Gregorio (1153) Carta de Hildegard al papa Anastasio IV (1153-1154) Carta de Hildegard al papa Adriano IV (1154-1159) Carta de Hildegard a Friedrich I, Barbarroja (1164) Carta de Hildegard al rey Henry II de Inglaterra (1165) Carta del abad Gedopt von Brauweiler a Hildegard (1169) Carta de Hildegard al abad Gedopt von Brauweiler (1169) Carta del abad Gedopt von Brauweiler a Hildegard (1169) Carta de Hildegard a su hermano Hugo (antes de 1970) Carta de Hildegard a una monja (antes de 1973) Carta de Hildegard a Philipp, arzobispo de Colonia (1970-1173) Carta de Hildegard al papa Alessandro III (1173) Carta de Hildegard a Guibert de Gembloux (1173) Carta de Philippe de Alsacia, conde de Flandes, a Hildegard (1177) Carta de Hildegard a los prelados de Mainz (1178-1179) Carta de Hildegard a Christian, arzobispo de Mainz (1179) VI. SCIVIAS: CONOCE LOS CAMINOS Introducción Comienza el Libro Scivias, obra de un sencillo ser humano PRIMERA PARTE Primera visión: El ser resplandeciente Segunda visión: El hombre Tercera visión: El universo Cuarta visión: La intimidad Quinta visión: La reunión Sexta visión: Los sonidos SEGUNDA PARTE Primera visión: Las ideas Segunda visión: La unidad Tercera visión: La imagen de mujer Cuarta visión: La confirmación Quinta visión: La ciudad sagrada Sexta visión: La ofrenda de la luz en la ciudad sagrada Séptima visión: La tradicional seducción
TERCERA PARTE Primera visión: El que está sentado en su trono Segunda visión: La obra de la ciudad sagrada Tercera visión: La intuición Cuarta visión: La columna de la palabra divina Quinta visión: El Sagrado Equilibrio Sexta visión: La primera unión Séptima visión: La dualidad Octava visión: La palabra luminosa Novena visión: La comunidad espiritual Décima visión: El hijo del hombre Undécima visión: La plenitud de los tiempos Duodécima visión: El juicio Decimotercera visión: Cánticos de júbilo y celebración VII. CAUSA ET CURAE: CAUSAS Y CURAS Introducción La creación Elementos y humores Sexualidad humana Complexión y aptitudes Del dormir y los sueños Desórdenes y enfermedades Régimen de salud Desórdenes nutricionales Tratamiento Diagnóstico y pronóstico Pronosticación lunar VIII. PHYSICA: INTELIGENCIA DE LAS DIVERSAS CUALIDADES DE LAS COSAS CREADAS Introducción Las plantas Los elementos Los árboles Las piedras Los peces Las aves Los animales
H ildegard vonBingen
Los reptiles Los metales IX. LIBER VITAE MERITORUM: LIBRO DE LA VIDA MERITORIA Introducción PRIMERA PARTE Las palabras del amor terrenal, la respuesta del amor celestial; las palabras del descaro, la respuesta de la disciplina; las palabras de la burla, la respuesta de la cautela; las palabras del duro de corazón, la respuesta de la misericordia; las palabras de la apatía, la respuesta de la victoria; las palabras de la ira, la respuesta de la paciencia; las palabras de la euforia, la respuesta de la Voluntad Creadora SEGUNDA PARTE Las palabras de la gula, la respuesta de la abstinencia; las palabras de la amargura, la respuesta de la generosidad; las palabras de la impiedad, la respuesta de la piedad; las palabras de la falsedad, la respuesta de la verdad; las palabras de la disputa, la respuesta de la paz; las palabras de la tristeza, la respuesta de la bendición; las palabras de la inmoderación, la respuesta de la discreción; las palabras de la destrucción de las almas, la respuesta de la salvación TERCERA PARTE Las palabras del orgullo, la respuesta de la humildad; las palabras de la envidia, la respuesta de la caridad; las palabras de la vanagloria, la respuesta del temor a Dios; las palabras de la desobediencia, la respuesta de la obediencia; las palabras de la infidelidad, la respuesta de la fe; las palabras de la desolación, la respuesta de la certeza; las palabras del lujo, la respuesta de la castidad CUARTA PARTE Las palabras del entumecimiento, la respuesta de la fuerza; las palabras del abandono, la respuesta de la santidad; las palabras de la inconsistencia, la respuesta de la sensatez; las palabras del cuidado de las cosas terrenales, la respuesta del deseo divino; las palabras de la obstinación, la respuesta del corazón; las palabras del deseo, la respuesta de la satisfacción; las palabras de la discordia, la respuesta de la concordia
QUINTA PARTE las palabras de la lujuria, la respuesta de la reverencia; las palabras de la inestabilidad, la respuesta de la estabilidad; las palabras del obrar mal, la respuesta del cuidado a Dios; las palabras de la avaricia, la respuesta del contento; las palabras de la tristeza del tiempo, la respuesta del gozo del tiempo SEXTA PARTE Concerniente a los elementos y a las virtudes; al fuego y a las virtudes; al aire y a las virtudes; al agua y a las virtudes; a la tierra y a las virtudes X. LIBER DIVINORUM OPERUM: EL LIBRO DE LOS TRABAJOS DIVINOS Introducción PRIMERA PARTE. EL MUNDO DE LA HUMANIDAD Primera visión: Sobre el origen de la vida Segunda visión: Sobre la construcción del mundo Tercera visión: Sobre la naturaleza humana Cuarta visión: Sobre la articulación del cuerpo SEGUNDA PARTE. EL REINO DEL MÁS ALLÁ Quinta visión: Los lugares de purificación TERCERA PARTE. LA HISTORIA DE LA SALVACIÓN Sexta visión: El significado de la historia Séptima visión: La preparación Octava visión: Sobre el efecto del amor Novena visión: Culminación del cosmos Décima visión: Sobre el fin de los tiempos ICONOGRAFÍA BIBLIOGRAFÍA
Eso que te ha sido mostrado desde arriba no puede ser traducido por ti al latín porque no tienes las palabras adecuadas para expresarte. Por lo tanto, quien sea que tenga el manuscrito deberá, celosamente, mejorarlo con el lenguaje popular. La Luz Viviente a Hildegard von Bingen (Vita, libro II, capítulo I)
nota de las edi toras La bibliografía sobre la cual están basadas las traducciones
1988; Schnapp, Jeffrey, “Virgin Words: Hildegard of
de la presente obra es la siguiente: The Life of the Holy
Bingen Lingua Ignota and the Development of Imaginary
Hildegard, The Monks Gottfried and Theoderic, Colleg-
Languages, Exemplaria Magazine, iii, Fall 2, Fall 1991,
eville, Minnesota, The Liturgical Press, 1980; The letters of
Binghamton, New York, Center for Medieval and Early
Hildegard von Bingen, vols. i y ii, trad. del latín al inglés
Renaissance Studies.
de Joseph Braid y Radd Ehrman, New York–Oxford,
Todos los textos de esta edición, excepto Scivias: Co-
Oxford University Press, 1998. [De esta investigación se
noce los caminos, fueron traducidos y seleccionados por
aprovecharon algunas notas introductorias, se suprimieron
Alejandra Reta Lira. Cuando se dudó sobre la adecuada
algunos párrafos repetitivos que dificultaban la lectura y
interpretación de algún pasaje, se consultó la versión de
se entresacó una que otra locución: “poor little woman
Patrología latina, Jacques-Paul Migne, BnF, vol. 179. Sin
though I am” (ego paupercula forma), frase comúnmente
embargo, las traducciones que aquí se presentan no son
utilizada por Hildegard para comenzar su discurso en
idénticas a las fuentes mencionadas. Su tratamiento litera-
algunas epístolas. En la mayor parte de las cartas se con-
rio, así como la interpretación de las visiones de Hildegard
servó la segunda persona del singular.] Scivias: Conoce los
von Bingen, son responsabilidad de las compiladoras. Al
caminos, trad. del latín al español de Antonio Castro Zafra
comparar esta versión con el escrito original en latín o con
y Mónica Castro, Madrid, Trotta, 1999; Cause et curae, trad.
las publicaciones citadas, el lector encontrará vocablos,
del latín al inglés de Margret Berger, Cambridge, The Li-
términos, frases, expresiones e incluso sintaxis con una
brary of Medieval Women, Brewer, 1999; Physica: Natural
dinámica de la lengua más ágil que la usada en el siglo xii.
History, trad. del latín al inglés de Priscilla Throop, Ver-
No fue tarea fácil establecer los grados en los que parecía
mont, Healing Arts Press, 1998; The Book of the Rewards
conveniente intervenir o mantener la anterior redacción,
of Life, trad. del latín al inglés de Bruce W. Hozesk, New
por lo cual se fijaron criterios de fluidez y legibilidad,
York–Oxford, Oxford University Press, 1994; Book of Di-
poniendo cuidado en ofrecer la obra de Hildegard von
vine Works, trad. del latín al inglés de Matthew Fox, Santa
Bingen de la manera más clara y accesible para el lector,
Fe, Nuevo Mexico, 1987; Symphonia, trad. del latín al in-
prefiriendo conservar el vigor en los textos que los rigores
glés de Barbara Newman, Cornell Press, Ithaca–London,
impuestos por la literalidad.
XV
h ildegard von bingen :
la enciclop edia medieval femenina
Una sana tradición pedagógica nos ha acostumbrado a
un acercamiento cabal a una de las heroínas culturales de
entender la Edad Media como el periodo de las grandes
mayor peso en toda la Edad Media. Este trabajo, ímprobo
síntesis, vistas de través por los ojos de la teología. Notker
por sus necesidades intrínsecas y las dificultades de tra-
el Tartamudo, Alberto de Sajonia, Tomás de Aquino y,
ducción de los textos, no siempre claros, debe agradecerse
en las filas enemigas, Avicena, los Hermanos de la Pure-
a la colaboración de dos mujeres, Verónica Martínez Lira
za, Averroes y los extravíos del averroísmo latino, son los
y Alejandra Reta Lira. El resultado es un libro ejemplar,
elementos de un tapiz humanístico que orna al medioevo
bello por su contenido y por su continente, que permite al
enfrentándose en plan de igualdad a los delirios góticos
lector recrearse a la vez en las especulaciones y las visiones
y las cadencias plagales de la música. Las empresas gue-
de esta mujer genial y contemplarla, por así decirlo, en el
rreras que se proponen conquistar el sepulcro de Cristo
paisaje y el entorno que fueron suyos.
para convertirlo en lugar de peregrinación contribuyen a
Distinguen a las creaciones de Hildegard von Bingen
grandes desplazamientos de gente y a fortalecer, mediante
dos características insignes: la sensatez humana de sus con-
el espíritu de las Cruzadas, la sensata resolución de quienes
sejos y la elevación y estructura de sus visiones. Porque en
abandonan el mundo para acudir al claustro.
Hildegard se unen, paradójicamente, la asesora de reyes y
Alemania, cristianizada filosóficamente por Hrabano
magnates, la abadesa prudente y sabia que sabe conducir a
Mauro, ve surgir a una mujer de esplendor intelectual so-
su rebaño por el camino cristiano y la vidente apocalíptica
bresaliente y dotes artísticos de igual calibre: Hildegard von
que intuye (en el sentido latino del término) verdades no
Bingen, respetuosamente llamada la Sibila del Rin. Mística,
conocidas por los hombres comunes y corrientes.
teóloga, compositora y política, la abadesa de Disibodenberg
Empeñadas en darnos a conocer los aspectos funda-
no desdeña ni las formas teatrales para hacer tangibles sus
mentales de Hildegard von Bingen, Verónica y Alejandra
concepciones religiosas ni la observación de los menudos
presentan, al lado del Epistolario, versiones pulcras de otras
animales que reflejan, en su humildad, la grandeza de Dios.
obras como Scivias, verdadera enciclopedia medieval; Cause
La obra de esta mujer excepcional podría considerarse,
et curae, en la que se entrelazan los conceptos teológicos y
sin exageración alguna, retrato y resumen del siglo xii, en
cosmogónicos con las ciencias curativas; Physica, auténtico
el que le tocó vivir. Nacida hace poco más de novecientos
tratado de historia natural; Liber vitae meritorum y Liber
años, Hildegard von Bingen, conoció la fama internacional
Divinorum Operum, que no son sino la visión cristiana de
recientemente. Nuestra lengua, por desgracia a la zaga
la vida y el destino del hombre.
de muchos aspectos medulares de la cultura, apenas tenía
Este libro une a lo indispensable de su tema la gran be-
noticias de su existencia (la versión de Scivias que realizaron
lleza de su realización. Deseo que el ejemplo que esta obra
Antonio Castro Zafra y Mónica Castro, y el libro Vida y
ha de dar a todos quienes se acerquen a ella y la frecuenten
visiones de Hildegard von Bingen de Victoria Cirlot).
se haga extensivo a otras tareas de la alta cultura, tan poco
Hoy, la aparición de El lenguaje secreto de Hildegard von
solicitada en nuestro país.
Bingen, vida y obra colma este espacio y nos permite tener Dr. Ernesto de la Peña 10 de febrero de 2004
XVII
el lenguaje secreto :
el camino hacia h ildegard von bingen
Un místico es un ser que busca el conocimiento de lo eterno, el
las palabras. Lo más interesante parece el hecho de que la
regreso a la unidad, al Uno. Hildegard von Bingen (1098-
Lingua ignota no era el esbozo de un idioma universal, sino
1179) fue una mística, que poseía el don de la videncia y las
de uno secreto.
dotes intelectuales necesarias para que su obra trascendiera
Los siguientes son algunos argumentos para esta afirma-
el tiempo; fundadora de tres conventos, la Sibila del Rin,
ción: 1. El título: Lingua ignota. 2. Consiste sólo en sustanti-
escribió tres obras visionarias, dos trabajos sobre medicina,
vos y unos cuantos adjetivos. Por esta razón sólo puede ser
una gran cantidad de epístolas, un lenguaje desconocido y
empleada suplementariamente con otro idioma al cual tiene
setenta y siete sinfonías.
que pedir su gramática y las palabras que faltan. Esta es una
El tema principal de su obra gira en torno a la relación
característica de todos los calós y jergas, los cuales emplean
del hombre con la divinidad (léase también con la naturale-
expresiones escondidas que deben permanecer así para los
za): La claridad cobija a los artistas que aman la tierra y todo lo
no iniciados. 3. En sus muchos trabajos y epístolas nunca
que en ella habita. Los humanos creadores son chispas divinas.
se menciona que ella alentara a otros a hablarla. 4. No hay
En 1147, el papa Eugenio III leyó en público un frag-
evidencia de que fuera empleada como lengua mágica para
mento de Scivias: Conoce los caminos, la primera obra de la
producir conjuros; en cambio, el predominio de términos
santa, posteriormente, la exhortó a escribir. A partir de ese
corporales y herbolarios implica un vínculo con las artes
momento, ella no sólo inició una intensa correspondencia
curativas (Lingua ignota contiene una terminología médica
con las personalidades más relevantes de Occidente, sino
muy completa: más de un cuarto del total de los términos
que se convirtió en una mujer de su tiempo, como se verá
se refieren al mundo natural y ciento cuarenta describen el
en las páginas de este trabajo que compila su vida y obra.
cuerpo humano. Su estructura muestra afinidad con los tra-
Entre los trabajos de Hildegard se encuentra una extra-
bajos enciclopédicos de Isidoro de Sevilla, particularmente
ña y hasta ahora poco conocida Lingua ignota per simplicem
con su Etymologiae, y con los diccionarios medievales y listas
hominem Hildegardem prolata. Sólo existe una edición
de palabras). 5. Su método para crear palabras consistía en
íntegra y dos parciales de esta obra; la completa (Roth,
adaptar y recombinar las raíces del latín, griego y alto alemán
1880) es particularmente difícil de conseguir. Consiste en
con un melodioso y aliterado efecto. 6. Conociendo la vida
poco más de mil palabras seguidas por su glosa en latín o
de Hildegard, podría representar un intento por renombrar
alemán; contiene sólo sustantivos y unos cuantos adjetivos.
el mundo, por redescubrir el corazón estético del lenguaje
Las palabras no se encuentran alfabetizadas ni totalmente
humano (la granja, el jardín y el convento son para ella
al azar, sino en categorías: primera, la esfera supernatural;
terrenos asociados con la plenitud existente y la belleza de
segunda, el orden humano; tercera, la Iglesia; cuarta, la or-
la creación divina); quizá un afán por recuperar la pureza e
den secular; quinta, la medición del tiempo; sexta, la esfera
inocencia del acto de Adán de nombrar en presente. Existe una carta muy interesante del monje Volmar a
socioeconómica; y séptima, el mundo natural. Lingua ignota se acompaña de otra pieza, Litterae ig-
la abadesa: teme que Hildegard fallezca pronto y le pide
nota; ambas fueron halladas junto con otros manuscritos
con tristeza que no deje que mueran con ella su música y
de Hildegard. Al parecer, el esfuerzo que la santa realizó
su lenguaje. Sólo una vez en su música la santa emplea esta
se inscribe en la tradición de búsqueda de creación de
lengua. Entre sus cantos (Carmina) hay uno, “In dedicatione
idiomas que rescatan la pureza primigenia y el vínculo con
ecclesiae”, que dice:
XIX
O orzchis Ecclesia[1], armis divinis praecincta, et
El significado de las palabras de Hildegard permanece
hyacinto ornata, tu es caldemia stignmatum loifo-
distante; su discreción confirma el aislamiento provocado
lum et urbs scienciarum. O, o tu es etiam crizanta
por las paredes del convento y la naturaleza privada de su
in alto sono, et chorza gemma.
tesoro: ella atribuía su música y su lengua desconocida a la Gracia. Este misticismo, característica esencial de sus traba-
Este pequeño texto contiene cinco palabras del len-
jos, no puede ser comprendido por medio de la razón y, por
guaje desconocido; sólo una se encuentra en el glosario
este motivo, la Lingua ignota es aparentemente un enigma
(loifol=populus; loifol-um). Las otras cuatro son un com-
imposible de responder. ¿Por qué en la cúspide de su inspi-
pleto misterio.
ración pidió palabras nuevas para mantenerlas en secreto?
El texto demuestra que la Lingua ignota estaba vincu-
Probablemente, el enigma radica en que no sólo existe
lada con la música. La carta al papa Anastasio IV es un
una respuesta a la pregunta: la presente investigación su-
importante testimonio al respecto: ella adscribe un origen
pone que el punto de partida de los trabajos de Hildegard
milagroso a su sistema secreto de escritura; no lo identifica
se encuentra en la Lingua ignota. El fin de la razón no parece
con sus trabajos visionarios o científicos (aunque un cuarto
ser otro que lograr cierta comprensión de la revelación. Es tal
del total de los términos se refiriera al mundo natural y
vez a través de sus obras oficiales que Hildegard transmite
ciento cuarenta describieran el cuerpo humano), sino con
los mensajes de sus palabras ocultas. Como quedó señalado
su Symphonia.
antes, la santa únicamente empleó las palabras del idioma
Se dice que en la intimidad del convento de Ruperts-
desconocido en el canto, dicho sea en la liturgia, en el ritual,
berg, Hildegard interpretaba –en el contexto de elaborados
en la comunicación con Dios. Quizá el lenguaje secreto era
rituales– sus composiciones musicales, en las que desapare-
para ella un privilegio divino y, por esta causa, no podía hacer
cían las fronteras entre convento e iglesia celestial.
pública la íntima inspiración que la vinculaba con la escritura.
Al enigma de la etimología y estructura de los términos
[…] La razón no tiene que discutir la revelación, tiene que
se añaden otros: ¿cuál es el propósito de la Lingua ignota?
interpretarla; debe guiar al fiel para que capte la sustancia de
¿Quiénes fueron los iniciados en este secreto? El cántico
ella, deduzca sus consecuencias y formule sus propias reglas
citado muestra que el glosario está incompleto.
de conducta. Verónica Martínez Lira 24 de agosto de 2013
XX
notas Notker el Tartamudo (840-912) monje de la Abadía de San Galo, uno de los poetas litúrgicos más importantes de la Edad Media. Introdujo en Alemania un nuevo tipo de lírica religiosa llamada secuencia, innovando en la manera de separar las sílabas latinas para cantarlas. Beatificado el año 1512 por Julio II. 2 Tomás de Aquino (1224-1274) teólogo y filósofo católico perteneciente a la Orden de Predicadores, principal representante de la tradición escolástica, y fundador de la escuela tomista de teología y filosofía. Su trabajo más conocido, la Suma Teológica, tratado en el que expone, de modo ordenado, la doctrina católica. Canonizado en 1323, declarado Doctor de la Iglesia en 1567 y santo patrón de las universidades y centros de estudio católicos en 1880. 3 Avicena (980–1037) médico, filósofo, científico y polímata persa. Escribió alrededor de cuatrocientos cincuenta libros sobre diferentes temas, sobre todo, de filosofía y medicina. Sus textos más famosos son El libro de la curación y El canon de medicina. 4 Elémire Zollá, Los místicos de Occidente, vol. I, Barcelona, Paidós, 2000, p. 15. 5 Scivias: Conoce los caminos, primera parte, primera visión. 6 Hildegard fue formalmente canonizada el 10 de mayo de 2012 por el papa Benedicto XVI. 7 Los párrafos que siguen a estas líneas y que dilucidan sobre el
sentido y las intenciones de la Lingua ignota, corresponden en gran medida a una edición y complementación de los trabajos de Schnapp, Jeffrey, Virgin Words: Hildegard of Bingen Lingua Ignota and the Development of Imaginary Languages, en Exemplaria Magazine, Center for Medieval and Early Renaissance Studies, Binghamton, N.Y., vol. III, Fall 2, 1991, pp. 267-298 y de Manders, W.J.A., Lingua ignota per simplicem hominem Hildegardem prolata, trad. del esperanto al inglés por Don Harlow, publicado originalmente en Sciencaj Studoj, Copenhagen, Internacia Scienca Asocio Esperantista, 1958, pp. 57-60. 8 El latín consistía en sonidos y letras al mismo tiempo; no sólo contenía letras, también encerraba teoría. 9 Una parte se encuentra en el manuscrito de Wiesbaden y la otra en el manuscrito de Berlín. 10 The letters of Hildegard von Bingen, vol. II, trad. del latín al inglés de Joseph Braid y Radd Ehrman, New York.–Oxford, Oxford University Press, 1998, p. 168. 11 The letters of Hildegard von Bingen, vol. I, trad. del latín al inglés de Joseph Braid y Radd Ehrman, New York–Oxford, Oxford University Press, 1998, p. 43. 12 Tatakis, Basilio, Filosofía Bizantina, Buenos Aires, Editorial Sudamenricana, 1952, pp. 22-23. 13 Ibid., p. 24
1
XXI
H ildegard vonBingen
22 22
cronolo gía bio gráfica
Jutta concedió
XXIII
H ildegard vonBingen
XXIV
25 25
H ildegard vonBingen
26
XXX
H ildegard vonBingen
XXXI
Por la estupidez
XXXII
H ildegard vonBingen
30
scivas
cono ce los caminos Introducci贸n
que sea
CIII
H ildegard vonBingen
CX
33 33
H ildegard vonBingen
34
cause et curae causas y cura
CXLI
H ildegard vonBingen
CLII
CLIII
H ildegard vonBingen
38
p hysica
inteligencia de las diversas cualidades de las cosas creadas
CLIV
H ildegard vonBingen
LAS PIEDRAS
Una persona que padece nubes en los ojos, o cuya
Las gemas se forman en Oriente, en áreas donde el
vista está agitada o supurando, debe tomar jacinto y
calor es muy intenso. En épocas de lluvia torrencial,
ver el sol a través de la piedra. Inmediatamente, el
el agua cubre las montañas y produce vapor, que
jacinto recuerda que nació del fuego y se calienta.
al enfriarse se solidifica; y de acuerdo a la hora del
Debe mojarse con saliva y ponerse en los ojos para
día y a la temperatura, la materia toma el color y
que los avive y se vuelvan claros y saludables.
los poderes de las diversas piedras preciosas. Las corrientes las arrastran a otros países para que
EL ÓNIX (ÓNICE)
sean descubiertas por los hombres.
(Onychinus)
Así, las gemas nacen del fuego y del agua y
Se forma alrededor de la tercera
poseen calor y humedad, y su vigor es efectivo para
hora del día, en una nube espesa,
varias necesidades. Muchas cosas honestas y bené-
cuando el sol está muy caliente
ficas para la humanidad se pueden hacer con ellas.
pero rodeado por vapores y no se puede ver por la densa humedad. Su color es claro o muy oscuro.
LA ESMERALDA
El ónice no tiene la fuerza del
(Smaragdus) Se forma al amanecer, cuando
fuego, pero posee el calor del aire. Se origina por un
el sol comienza su recorrido. En
rayo de sol congelado por varias nubes y tiene gran
ese momento, la fuerza natural
poder contra enfermedades que surgen del aire.
de la tierra y de los pastos está
El que está triste debe mirar un ónice inten-
especialmente viva, el aire quieto
samente, después ponerlo en su boca. La opresión
y frío, y el sol caliente. Las hierbas
de su mente cesará.
se empapan de vitalidad como borregos tomando leche. El calor del día es apenas suficiente para se-
EL BERILO
car la energía vivificante de veinticuatro horas,
(Beryllus)
y da nutrientes para que las plantas se fertilicen
Se forma entre la tercera hora y el
y produzcan frutos. Por lo tanto, la esmeralda es
medio día, de la espuma del agua
poderosa contra todas las debilidades y enferme-
que calienta el sol. Su poder viene
dades humanas, ya que el sol la irradia y toda la
más del aire y del agua que del
materia de su fortaleza proviene del aire.
fuego, aunque es ardiente. Es una variedad de la esmeralda de color verde mar, amarilla, blanca o azul.
EL JACINTO
Quien sostiene berilo en su mano y lo observa
(UNA ESPECIE DE CIRCÓN)
frecuentemente, se mantiene tranquilo.
(Jasinctus) Nace del fuego, en las primeras horas del día, cuando el aire tiene
EL SARDÓNICE
un calor gentil. Más airoso que
(Sardonix)
cálido, capta el aire y su energía
Es cálido y se gesta cuando la sexta hora pasó, justo
en proporción a la atmósfera que
una línea después de la novena hora del día. Lo
contiene. Se halla en los terrenos de aluvión en la
calienta el sol que brilla en su pureza. Ya que el
India y se usa como gema.
aire empieza a enfriarse, se vuelve más ardiente
CLXXII
que el agua. Tiene grandes poderes
tu esplendor, caprichoso ángel, así debes quitarle el deseo
y da fuerza a los cinco sentidos.
insano a este hombre.
Es un remedio particular para
Su belleza es parecida al trono celestial; simboliza
cada uno de ellos, ya que na-
el corazón de los simples, de aquellos movidos por
ce del sol cuando nada empaña su
la certeza que brilla en la virtud de lo puro.
claridad. Es como un ágata de color amarillo con zonas más o me-
EL TOPACIO
nos oscuras.
(Topazius)
Si una persona lo coloca sobre su boca y res-
Nace en la novena hora del día,
pira, fortalece su entendimiento, conocimiento y
cuando, por las variaciones del aire,
los sentidos de su cuerpo. La ira, la estupidez y la
el calor del sol es más claro. El to-
ignorancia desaparecen.
pacio es incandescente y contiene un poco de agua y un poco de
EL ZAFIRO
aire. Su claridad semeja al agua.
(Sapphirus)
Su color es más como el oro que
Se desarrolla después del medio-
amarillo. No tolera el calor ni el veneno, así como
día, cuando el sol arde, el aire está
el mar es incapaz de producir ninguna falsedad.
obstruido por su calor y el brillo
Si hay veneno en pan, carne, pescado, agua o
no es tan intenso como cuando el
vino, y hay un topacio cerca, inmediatamente sudará,
viento es frío. El zafiro es turbio,
como la espuma de mar cuando tiene basura. Al
más candente que airoso o acuoso,
comer o beber, una persona debe sostener un topacio
y simboliza completo amor a la sabiduría.
y mirarlo frecuentemente. Si hay algo envenenado
Una persona con una perrilla en el ojo debe
en la comida o bebida, transpirará.
sostener un zafiro con la mano cerrada o cerca
Todos las mañanas pon un topacio sobre tu ca-
del fuego, y tocarla con la piedra húmeda por la
beza y repite: Que Dios, quien es magnífico sobre todas
mañana y por la noche durante tres días.
las cosas y todas las formas, me preserve, fortalezca y
Alguien que desee buen entendimiento debe
estabilice con su bendición.
poner un zafiro en su boca todas las mañanas, en ayunas, y mantenerlo ahí el suficiente tiempo para
EL PRASIO
que la saliva se impregne de sus propiedades. Luego
(Prasius)
requiere calentar un poco de vino en un recipiente
Se forma en la tarde, cuando el
metálico y sostener la piedra en este vapor para que,
sol retira sus rayos de las partes
sudando, se humedezca. Se debe chupar la humedad
altas de la tierra, y cuando el
y tragarla para tener un conocimiento puro.
rocío se aproxima. El sol cae
Un tonto, que no contempla malicia, debe frotar
gradualmente sobre la piedra y
su lengua en ayunas con un zafiro. Los humores que
la calienta. Del calor del sol, la humedad del aire, del agua y el vigor del rocío,
impiden el entendimiento desaparecerán. Si un hombre no correspondido enloquece al
nace el prasio.
amar a una mujer, ella debe verter tres veces un
Alguien que tenga moretones en alguna parte
poco de vino sobre un zafiro y decir: Sirvo este
del cuerpo por un golpe o caída, debe mezclar
vino, de ardiente poder sobre ti; así como Dios te quitó
manteca vieja con la misma cantidad de salvia. Debe poner
CLXXIII
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CCI
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CCIV
se comportan
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