Jerome Rothenberg
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SIGLO VEINTE ILIMITADO mientras el siglo veinte se esfuma el diecinueve comienza otra vez como si nada hubiera sucedido aunque aquellos que lo vivieron pensaron que todo estaba sucediendo
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lo suficiente como para nombrar un mundo y un tiempo para tenerlos en tu mano ilimitados el último engaño como la perfecta máscara de la muerte
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CANCIÓN SENECA DE BIENVENIDA
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ESA TONADA DADA las madres zig zag de los dioses de la ciencia las lunáticas estrellas fijas y las farmacias padres que dejaron las carpas del anarquismo desguarnecidas los huesos árticos colgados en saint germain como tambores bulbos vivos de luz afrodisia “el arte es chatarra” el urinario dice “haz un hoyo y nada en él” un mensaje de la adusta computadora “vosotros sois hamburguesas”
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HUGO BALL: POEMA SONORO
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UN ÉXTASIS DE TUBO DE VIDRIO
para Hugo Ball
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un tubo de vidrio para mi pierna dice Hugo Ball mi sombrero un cilindro en azul y blanco la noche las avestruces alemanas el fregadero en que él se mea todos éstos se vuelven su mundo su canción dada, empezada ahí sostiene la imagen hasta que nos llega: la imagen de su cruz mira hacia abajo: una cinta un revólver lodo éstos contribuyen a su muerte también a lo que su muerte contribuye más tarde, demasiado histérico demasiado enfermo con dios y el tiempo:
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un carrusel un poeta asado pescado la reina dice a su mente y entra donde la calle de los espejos empieza ella mira la cara de él reflejada hambrienta del mundo como dolor, la conciencia de la muerte no por qué morimos sino por qué la soñamos y por qué nuestros sueños no pueden salvar el resto que muere Hugo mientras escribo este poema la voz reclama desde un cuarto más lejano la bailarina / cantante me llama desde un cuarto más lejano doy un paso dentro del obelisco debajo de la cintura mi boca se abre para cantar pero se congela
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cierra de pesar por ti ombula take bitdli solunkola el colapso del lenguaje tabla tokta tokta takabala taka tak un Êxtasis de tubo de vidrio se escapa del tiempo babula m’balam la imagen y la palabra sobre tu cama cuelgan crucificadas otra vez el cabaret explota otra vez otra vez fatiga un pie en vidrio un nervio de vidrio y una sacerdotal bomba de gasolina
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le arranca el pelo a ella
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COKBOY Primera parte Kon el kulo korolado arrivi un djudio entre indios ke fago aki en este lugar estranyo kon esta djente de ojos estranyos pudia aver problemas pudia aver pudia aver (él dice) una sombra surge de su alfalfa con un tomahawk en mano la sombra de un hacha en su ojo diestro de una pluma fuente en el izquierdo ke fago aki komo fue ke me pedri para yegar aki so sien ombres ciento cincuenta distintas sombras judías y gentiles que traen la Ley a lo Inexplorado (él dice) este ombre so yo mi papu i demas hombres-de-letras
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hombres con letras llevando el correo jinetes lituanos del pony-exprés enloquecido por dinero Búfalo Bill aún cabalga al frente horas antes de vengar la muerte de Custer haciendo el primer filme en 3-D de aquellas guerras o años antes de ellas números desapareciendo en el tiempo cabalístico que reúne a los hombres y el jinete solitario con el culo colorado soy yo mi abuelo y demás hombres-de-letras judíos y gentiles que entran a dominios del indio que traen la Ley a lo Inexplorado en minas de oro y frágiles tiendas comercio de pieles agricultura intensiva boletas balas barberos que amenazan mi barba su cabello pero son condescendientes y harán a uno de los nuestros Senador de Arizona el campeón de su Ley que nos detesta a ambos
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pero se viste como judío un día como indio al siguiente un azno kristiano ke fago aki puede ser un lugar enlokesido kon todas sus letras a la roves (él dice) quién puede leer los letreros que llevan al desierto quién puede hallar su escape de los bosques de la arroyada las abuelas vivían cerca con serpientes en sus panochas dientes quizás quizás motosierras cuando el Baal Shem visitó América usaba un sombrero shtreimel los lugareños pensaron que era un vaquero tal vez de México “¿un cokboy?” no un cowboy seré más que un orgullo para mi comunidad y raza buscaré a mi hermano Esaú entre estos pieles rojas y en sus fuegos nocturnales compartiré la meada tensa de mi verga sagrada que portará la semilla de Adonai
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y los nutrirá de visiones llenaré toda una concha de almeja y pasará de boca en boca veremos el surgir de la luna a través de nuestros ojos distancias que desaparecen en el tiempo cabalístico (él dice) desde el acantilado el viejo mira una ciudad por luz vencida el hombre y la ciudad desaparecen mas observa y ve otra ciudad hecha de cristal dentro de los edificios se alzan estatuas inmóviles rostros morenos atrapan la luz un elevador yendo arriba y abajo en la visión del nele de los Cuna la visión de mi abuelo visión del Baal Shem en América los esclavos en el entrepuente qué visión común tienen a causa de qué luz sus ojos
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daban de frente a las estrellas no podría saber qué hacía yo aquí todas las letras de este sitio están al revés un reverso en el tiempo hacia lo inexplorado el viejo hebreo tira de su gabardina separado de él su espíritu remontó hasta una ladera y se encontró con un águila no un agila capitanes comandantes preziadas locos deliciosos asesinos abriendo el continente para explotarlo cesar i esvachearse (él dice) avlemos (él dice) ai guesmo de umiko aki abasho (él dice) (nunca enfrenta el espejo sin llorar) y el agila lo levanta como un elevador a un sitio sobre el amanecer ahí le entrega una canción la Canción del Baal Shem que se ha cantado sin palabras por siglos “hey heya heya” pero traduce
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“yuh-buh-buh-buh-buh-buh-bum” cuando el Baal Shem (yuh-buh) aprenda a hacer un fardo ¿que pondrá el Baal Shem (buh-buh) dentro del fardo? la seda de la bolsa del taled abajo el forro de piel de castor encima el aroma del fruto del esrog adentro el cuerno de una cabra montañesa en medio las plumas de un pichón a los lados un diente de ajo polaco en el corazón lleva en sus viajes viajes por bosques cabalísticos con la caballería zarista flanqueándolo bigotones de ojos cetrinos y sables que acechan de noche al alma noble por las estepas de Wyoming (él dice) ke fago aki no puedo topar mi chapeyo pudia bushkar el yano kon piezes i manos hasta que tras una roca en Cody un indio anciano expone las profecías de ambos juntas en este lugar como el humo se sostiene una pipa entre los dos por sus labios gotea el intenso tabaco
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“¿cowboy?” cokboy (dice el Baal Shem) pone una nuez en su paño y la truena en una peña ambos comen el indio saca un mazo de cartas y las baraja “¿juega?” y juegan a lobos y corderos crepita el fuego en la pripitchok en una gran carpa en algún lugar de América la historia del surgir comienza
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COKBOY Segunda parte viene un viento marrón girando desde los tejidos tensos esfínter abierto sobre la divisoria continental disparando gente plop plop una muchachita emerge de tetas de castor nariz afelpada ojos del Sabbath de Piel Roja baja el corredor a tientas (diz) hola doitor ¿me echa una mano? el doctor diz ta’ bien −sí doitor y le alza la maraña y le saca un bebé que aúlla bajo las lámparas un pequeño Moisés ahora ríe la hija del Cacique −oh doitor no-o tan duro América nace tan duro
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lo sueña tan duro el Baal Shem 200 años más tarde en Vítebsk (se carteaba con William Blake apareciendo en Peckham Rye −sí ¡totalmente vestido!− y fue su ángel) ángel dice su madre sonriendo orgullosa y mira su piecito abriéndose paso por su ingle una comezón le sube hasta las costillas América nace el Baal Shem es un castor (sucedió mientras el indio hablaba y cantaba tras Cody el judío loco resbaló a la vida tras pasar la rosada espuma de nieve de los canales de su cuerpo raros pasadizos sin luz sin amor como las encías de una anciana cuyos dientes fueron arrancados
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años antes) en un mundo distinto se precipita y despierta de nuevo en la ciénega femenina un castor entre los juncos −¡mama!− clama el Baal Shem −¡mamika! ke fago aki me torni en mi barva (él dice) el ciego mundo brilla para él el agua corre por su boca vientre abajo es oscura una oscuridad (la felpa es oscura y esconde la carne y la sangre una felpa universal que sólo un hoyo deja abierto para que la oscuridad del cuerpo empuje hacia la luz) hace erupción como una gran verga de los seres primigenios roja y suave como el cobre del rojizo ojo solar de noche el viejo Castor la arrastra en mano
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(él canta) mi nombre es Cokboy −COKBOY, ¿entendesh? dejo a mi abuela en la ciénega femenina seré El Gran Redentor algún día yuh-buh-bum tal vez halle un tarro de miel tal vez ahí meta mi pito tal vez hormiguee mi pito tal vez no cosquillee las abejas lo saben y me pican el glande que crece un segundo una docena más o menos de glandes a lo largo son 30 glandes cuál es el chiste me pregunto tal vez lo intente de nuevo lo arrastro rojo e inflamado detrás mío qué vulnerable soy en este clima cálido cagando y pedorreándome disparando canicas mi boca estaba abierta y viniéndose en ella caga el mirlo oh no tan pronto amor mío adentro del sombrero mis ojos se tornan blanquecinos los lirios crecen de ellos un nacimiento eslavo no puedo negarlo tan tierno a mis ojos tiernos los mojones nativos que van flotando y por toda América en un arranque inútil grito contra el sol tú no eres más mi padre luna tú no eres más mi madre te abandoné me largué satisfecho con la verga colgando sobre mis hombros éste es el viaje que harán tus jóvenes (dice Castor) llega a la choza donde vive aquella anciana un delantal sobre su vientre un carpín en el horno tal vez pan frito grasa grasa madrecita no te importa si dejo caer una piedra en tu 20 cerebro tus hijas volverán pronto
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sabrosas muchachitas que monto haciéndome pasar por ti les chupo las orejas y grito oh ponme más abajo amor oh mi verga adentro y debo enfriarla la enfrío en las aguas donde una princesa hija de un jefe indio se metió a bañar la verga letal e inocente halló su rastro (su tren llegó a Topeka Custer ha muerto) y entra a los aposentos del novio la oscuridad de su piel ella está preparada por la luna nueva en su abdomen una tajada crece un dólar de plata encima de Barstow alumbrando El Matrimonio de América en el tiempo cabalístico (dice Cokboy) sos la fija de la montanya agora te yevaré a la tribu del padre mio 21 a baylar el bayle de la kulevra
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o Él o Him en mi morral llevo fotografías sucias concesiones de tierras (mas luego al volver su gente le disparará cómo se sentirían al ver a su hija en brazos de Cokboy −¿C-O-C-K, entendesh?−) ya sos la novia del padre mio están casados con (puf) el dios cristiano para siempre adío adío a korrer agora que mos asperan lavoros en Salt Lake la industria surge en todos lados flechas golpean el concreto nunca feriré la karne de mi kuliko (dice Cokboy) a kavayo río arriba emprende su camino pasando los campos minados donde los polacos criban el oro 22 y otros productos puros de América
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oh exploradores oh anglosajones dumplings con cara de bebé que pacificaron el oeste con ametralladoras con recompensas por pellejos de niños vulvas maternas hechas bolas de béisbol para su lujuria oh portadores de la civilización héroes héroes peleando me abriré paso a través de ustedes guardianes de la sagrada orilla última frontera aldea de mis sueños a tiros tiranías (él grita) que han escapado de la ley o que trajeron con él komo me pedri para yegar aki me quedé sin suerte encima de una montaña y lejos de la entrada verdadera al verdadero paraíso occidental como Moisés en las Rocallosas mirando California fantasmal en la luz hebrea de los cuernos sobre mi cabeza grandes carreteras anaranjadas de la mente América un desastre América un desastre América un desastre América un desastre 23 donde puede mirar el caer del sol
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en el desierto Cokboy duerme (preguntan) espierto (grita Cokboy) sólo su barba lo ha abandonado como la suya la de su abuelo fantasma de Ishi esperaba en la cima parecía un judío pero en silencio guardaba silencio en América creo que no tengo nada más que decir
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UN POEMA DE MILAGROS
para Jack Collom
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1/ Un milagro más ordinario que la grama bajo nuestros pies el sol ardiente deslumbrando ojos y piel tantos recuerdos fundiéndose en uno no hay lugar a dónde ir sino donde estamos no más cerca del fin que de la fuente
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2/ Un milagro en todos lados abierto hacia donde la mente va lenta y el ojo como en un sueño se abre y cierra nubes sin lluvia cubren el sol el animal dormido sobre el tragaluz no conoce el reposo ni el despertar sólo un sueño
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3/  Un giro de la mano por el que un ave perfecta se hace visible un vuelo encima de algunos no hay misterio en lo que vemos  nos apartamos de ello no bien se ha ido cuando algo brillante acaso un fulgor de ala nos asalta oculto hasta entonces
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4/ Lo real ocurre primero la fantasía sigue después es difícil discernir aún más en la oscuridad el ojo es muy débil la piel aún más débil como la mente el origen de las especies oculta su nacimiento los contornos de lo real son sentidos por la mano por el ojo imaginados sólo más tarde en búsqueda singular
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5/ Un milagro hacer lo visible antecedente de lo invisible el animal que miras su metamorfosis diferida la imaginación acecha aquí trae lo oculto a la luz el mundo interno de la mente se invierte
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6/ Un milagro vivir una vida en celebración conociendo el miedo y sintiendo la muerte él halla un poema más de su agrado unos lo llaman fantasía un juego de azar o elección que retrae a la mente de lo literal abre una puerta a lo imaginado real
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7/ Un milagro de donde el otro milagro procede la lechuza que vive toda la noche en una palmera un vuelo de pelícanos sombras pardas al este donde el sol roza el océano un milagro de cuerpos distantes voces del cielo sonidos sin palabras
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8/ Un milagro el sol destrozado por sus nubes se aparta la mente de los lazos de sangre que tiñen el horizonte cuando llueven la palabra es firmamento un cielo rasgado sobre el sol y la luna imaginarios seguidores atrás de ellos la luz filtra un campo de estrellas
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9/ Un milagro nuestras vidas que pasan una valla el aciago viento no es tan aciago nos da palabras para encordar un poema no hay dónde ir sino arriba y afuera el milagro de saber incluso que el saber termina luego que hemos intentado y fallado contra todas las apuestas
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10 / Un milagro de oscuridad oculta la luz en sí un milagro donde las infinidades se nos escapan y nos arrojamos en búsqueda frenética el océano cubierto por nubes escarlatas un milagro o no que abajo la arena sea rosa malva o ámbar abierta y cerrada
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11 / Â Un milagro la luz un milagro la noche un milagro el mar un milagro el ĂĄrbol un milagro el ave un milagro la palabra un milagro la lluvia un milagro la mente un milagro el tiempo un milagro la rima un milagro el aliento un milagro la muerte un milagro la luz un milagro
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12 / Un milagro haber estado aquí y desaparecer como acaba el tiempo no más real que aquello que sabemos o de lo que huimos en mi mano todo roce me sorprende el color de los muertos es también un roce sus rostros y voces apretándome roce tras roce
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13 / un milagro que aún sean verdes las palabras tras una era de sequía que la savia que asciende colme hojas y brotes que aún el sol brille en la oscuridad envolvente es una ilusión poco conocida una oscuridad más honda ocultando todo el desquiciado firmamento un milagro que de este lugar transitorio nazca un universo
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14 / un simple accidente muestra un milagro más el plato cae de mi mano y halla el suelo una manzana revela marcas de dientes una ráfaga de cosas más reales que palabras o menos el momento ha llegado de añadir que nuestro saber flota en el aire hacia él me elevo
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15 / suda la grama las palabras reverdecen un dedo señala un nuevo milagro el cielo conduce al espacio vacío que la mente es incapaz de abocarse o rellenar sólo en el pequeño mundo podemos amar y matar aquí el solipsista es rey esperando por el fin del tiempo y sabiendo que no tiene fin
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16 / un milagro por el que los muertos hombres y animales yacen caídos para nunca alzarse otra vez sino radiantes en su disolución el lento curso de hacerse carne y salir otra vez sigue en tanto el mundo siga sólo entonces no hay rastro de la mente más cierto
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17 / un milagro los mundos pequeños y los vastos la aparición de la sangre súbita y caliente el sol al amanecer alumbrando la llaga persiste el firmamento sobre el sol y la luna la imagen más honda que oculta dónde luz y oscuridad cambian de sitio un tiempo que crea un misterio de tiempo y espacio
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18 / Un milagro poner un pie en tierra firme y saber que la tierra rota 1000 millas cada hora por el ecuador apenas una pulgada en cada polo el ordinario ascenso y descenso de cómo respiramos y nos movemos pasos dados en la estampida y caída de galaxias más oscuras que claras
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19 / si el tiempo es interminable lo que sentimos como tiempo nos engaña con el milagro de lo que sentimos la habitual presión de los días a contracorriente un milagro la mentira de la belleza que nos deslumbra elfo engañoso duende y capricho que oculta al dolor y al hambre a punto de estallar
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20 /  un milagro la tierra colapsando hacia la ruina mientras un mundo mayor sobrevive o decir la humanidad termina extraviada  y deja una huella atrås un aliento o susurro a punto de volverse palabra la imagen en la mente no es una imagen hasta que evocas un pixel a la vez
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21 / un milagro donde no hay milagro que permita a tu mente volverse real después rozar los cabellos la piel de la que brotan los ordinarios aromas que entrega el sexo y el calor surgiendo del abismo una historia contenida un roce de los dedos no el primero o el final
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22 / la última letra nombra el final y desaparece el milagro del sonido absorbido el cuerpo libre para decir su mundo un milagro la marca del pie en tierra la tierra un milagro más el firmamento que ya no está para estorbar la vista
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23 / un milagro de secuencia números que cubren una pared el cielo en sí es un campo de números números como alfabetos juegos de números apenas trazados y apenas rociando la mente inscritos en sueños el sueño del hambre conduciendo a un mundo calculado y cifrado injertado en la piel
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24 / un milagro las flores en el jardín creciendo burdamente y declinando el camino a lo milagroso no es lo que creímos o alguna vez juzgamos sino respirar día tras día esperando que el aliento se agote que el flujo de sangre se seque el milagro de la muerte el mayor de los milagros
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25 / un milagro despertar de un sueño y contar el sueño en sí un milagro que la flor en el sueño sea tan ordinaria como la flor despierta y dicha con tu voz la palabra es una flor tan rota y a la deriva el sonido resonando es un milagro mayor que eso que el ojo mira o conoce la mente
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26 / un milagro haberse librado hasta aquí la belleza en lo poco conocido el día a día repetido en un roce de los dedos traducir lo que sabemos a lo bárbaro vasto y salvaje el libro del testimonio se abre todas nuestras palabras son suyas y nos lleva sin ojos susurrando los años mismos un milagro frente a un mundo de dolor
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CODA para Diane Un milagro lo invisible superándonos un mundo más grande en la oscuridad más oscura que el misterio de nacer el milagro habita en lo que vemos y tocamos qué alegría estar aquí e inclinarme ante ti mi más querida amiga en la oscuridad como dijo el poeta
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CANCIÓN NAVAJO DE CABALLOS
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