Liliana Gastemboldo
VIOLENTA Y VIVA Para que tus ojos vuelvan a mí y te acuerdes de las memorias sin escribir sólo pensadas. Para que tus ojos estallen de risa al contar cada una de mis faltas y tonterías. Para que tus ojos sean aliados de tus manos y toquen con furia este pedazo de alma, corazón y cuerpo. Para que tus ojos, me hablen de lo humano o de ese sabor silencioso que tiene lo divino. Por todo esto… espero con los brazos abiertos los ojos cerrados por el viento que me acaricie de una manera violenta y viva.
NO HAY SUITE No responde nadie los hombres se han cansado de construir jaulas por eso moran en la locura. Ya no llaman a los horarios ni a las horas, ni a sus semejantes, ni a sus mascotas: jornadas, ocupaciones, socios o prisioneros. ¿Quién dormirá a tu lado? Si el señor del blues está taladrando su canto oscuro la señora alegría no ha parado de bailar rock and roll y el gato de la esquina ronronea un ritmo perdido. Los demás convidados tienen sus narices y codos puestos sobre el mostrador de la fantasía y navegan ebrios. No hay sobre quién escribir pero sí sobre quien hacer comparaciones o desmembrar. Pero no hay sobre quién escribir en el grito de las voces que simplemente están. Sólo espera no hay voces, acordes; llamados; visitas ni sobre quien escribir no responde nadie, sin embargo todos llaman. No mientas simplemente no hay suite.
PUDE HABER SIDO el asesino que vació su inconformidad sobre unos cuantos;
o ser su víctima , en un día como hoy. Pude haber amado a una mujer bajo la sombra de lo clandestino; o ser el que ella engañó. Pude haber sido un chelista o la mejor voz de todos los coros. Pude haber sido el niño que corrió lejos de casa o los padres que esperan a la obediencia llegar tras el cerrojo. Pude haber sido el silencio del maltrato o la voz que siempre tiene la razón y el mejor gesto; pude llegar a ser un administrador de mil martillazos tal vez el conserje que espera con pasos sigilosos las nuevas órdenes. Ser lo mejor de lo peor en cuartos cerrados por el frío. Pero este pude me dejó quieto y ahora entre mis pasos, manos y lengua; sin palabras: ni vida agotados los medios pude haber sido y ahora soy si acaso la sombra de todos ellos y sus memorias.
VIDA Todo lo cercano se aleja Goethe.
Fragmentos de adioses y reconocimientos en la trampa de las horas. Acostumbramos a hablar de eternidad con otros tan equivocados como nosotros. Ayer leímos una noticia: Le dejo una carta a dios antes de morir de hambre pues el hombre necesita una huella, una marca para justificar su doloroso caminar. En cada época y país lo mismo seguir en pie sin saber cómo ni por qué concluimos: La vida es nuestra sombra vista por animales ciegos.
OJOS DE MUÑECA Descansa como aquella muñeca de porcelana la amenaza todavía no se establece mientras tanto, prepara leche condensada para acompañar el café. Él vigila el fortín entre armas de lujo donde verá el reflejo de su sonrisa dentífrica. Recuerda la historia de la ciudad y de cuando se cambiaron 500 combatientes por 150 jarrones. En la actualidad las muñecas de azúcar se acercan a la milicia detrás de cuerpos agotados de soldados que resoplan por encima de sus vientres algo parecido a la victoria de todas las guerras. Ahora la amenaza llega la advierten los oídos por cada fragmento de ciudad dividido como el ruido de las ventanas rotas y de los gritos al descubrir manos sin cuerpos de niños viejos. Debajo del sol de estas mil ciudades entre jardines y cánticos despiertas junto a la muñeca de Dresden para dar testimonio de la fragilidad de cada gloria en tiempo moderno.
MUÑECA ROTA
Esta criatura solo conquistada, todavía no amada RAINER MARÍA RILKE
1 Al principio acompañó mis juegos con trajes de vivos colores tomamos el té o dábamos un paseo. Rompíamos la vajilla por descuido sorteábamos el aire sin quedar un espacio para el suspiro.
2 Sin ton ni son íbamos de la mano muy cerca la una de la otra alimentábamos la piedad en pupilas tiernas Eras mi princesa; superestrella mi más odiado tesoro. El mañana y la imagen de ojos revueltos y de amaneceres ciertos.
3 Eras el plástico la arcilla, el barro todas las formas consumidas por un viejo arte.
4 Luego te aparté sin señalamientos ni cargos en tu contra o a favor. Acumulaste hollín, abandono y desgaste. Tu figura merodeó en los rincones sin habitar de manos o raíces de cal. 5 Olvidada tus piernas lloraron quebradas entre el concreto que asfixia.
6 Humedeciste tu cuerpo con agua, lĂĄgrimas, sangre y sudor. Sin embargo la mancha se hizo con palabras secas que incomodan en el precipicio.
7 DespuĂŠs te expandiste por el mundo y sus reyes hacia el basurero sin eco.
Donde el flash como un buitre recordĂł una imagen dividida en instantes heridos.
CAJITA DE MÚSICA 1 (A la Chacona de Bach) La Chacona se escribió para sentir el reto de una despedida. Cuando se abandona lo amado y tú mismo te alejas como si no conocieras el asombro. Te sientes perdonado entiendes el mundo y su forma de nombrar lo ausente.
2 (Al último canto de Mark Sandman)
Una conversación pudo despertar al dios terrible que habita en algunas acciones humanas. La música sonó bajito en un grito de respeto. El hombre dejó unas flores de adormidera como registro de voz y una pregunta: ¿Cuál será el misterio que ven en mí para decirese niño parece un poeta?
. 3 (Austronaut de Amanda Palmer)
El piano saltó tal vez no es ella, soy yo la que nunca aprendió a leer las notas. Ella leyó a Kierkegaard sobre la angustia o el temor por la nada. Estabas ahí invadiéndolo todo sonriente con rabia. Puesta en escena te acercabas al ritual más primitivo al atender impulsos y huellas particulares sin desaparecer en la oscuridad del día.
4 (Psico Killer de Talking Heads)
Rápido, pasó para no dejarse atrapar por el psicótico de la canción.
Pensó sin parar y la demencia llamó una y dos veces con múltiples repeticiones. Sin nadie a quién decir: ¡Detente! ¡Baila! ¡Huye! El psicótico de la canción tuvo el combustible que no podías apagar.
5 (Ante la visión de BlindWillie Johnson) Todas las noches tu canto se escuchará fuera del mundo que no supo darte un buen colchón ni oídos para tus melodías graves llenas de luz en la sombra. Veías la reunión de todos los colores por eso calcinaste el canto quizá para llamar a la misericordia. Una mujer respondió beso tus ojos de voz y guitarra.
6 (Goodbye Nick Cave)
Los asesinos y los amantes el dolor y el placer unidos como en una tortura o en un carnaval. Los amantes dijeron adiós a las niñas deseosas de bailar la melodía que interrumpió una mala noche sin sueño dedicada a dialogar con las estrellas.
Primer capítulo
El primer capítulo suele ser el más complejo las preguntas vienen marcadas por el miedo ante el disgusto por estar admitido el festejo para los que lastiman y después salen contentos al finalizar las clases.
Gracias a la carencia la soledad se comparte en escasas sílabas.
Ser invisibles cuando los demás inician sus mandatos: siéntate, calla, no llores, saluda.
Las oraciones simples quieren la libertad del niño para hacerlo gritar y reír antes de reventar sus labios contra la carátula de laresistencia.
Luego, ensangrentados cantar por la victoria junto a voces claras e insurrectas.
Extravíos
Me he perdido de la casa de lego para moscas heridas.
De nada me sirvió dejar por el camino mis dientes de leche
pues ellos se hicieron tierra.
Soy calle despedidas y renuncias aunque tenga en los bolsillos las llaves del hotel infancia. Mi primera mentira.
Liliana Gastelbondo Bernal. Nació en Ibagué (Colombia) en 1978. Profesional en Estudios Literarios de la Universidad Javeriana. Algunos de sus poemas han sido publicados en El Magazín Dominical del Espectador, revista de poesía Ulrika, Antología de poetas jóvenes Verso a Verso (Fundación Verso a verso, 2005); Una visita de la poesía. Selección poética-nacidos después del cincuenta (Secretaría de Educación Distrital, 2008); Panorama virtual de la nueva poesía colombiana (CD multimedia) Ministerio de Cultura y Corpoulrika, 2009, la colección 50 Poetas colombianos y una antología (Caza de libros, 2010) Antología de poesía contemporánea México y Colombia (Cangrejo editores, 2011), revista Casa Silva (2012) y revista Universidad de Antioquia. Vaso de tinta es su primer poemario publicado por la editorial Torremozas en el 2011.