Mujeres Maestras de Colombia Un proyecto expositivo del artista e investigador Ricard Huerta ISBN: 978-958-5413-69-6
El Área de Educación del MUUA como creador de exposiciones: Mujeres Maestras de Colombia es el primer proyecto museográfico del Área de Educación del Museo Universitario que se realizó en el marco de los ciclos expositivos del MUUA. Se denominan ciclos expositivos a los períodos de exhibición que el Museo establece para la renovación de sus ocho salas de exhibición temporal, en total son cuatro ciclos anuales los que comprenden la agenda del Museo en su edificio principal. Si bien el Área de Educación del MUUA desde hace más de 8 años diseña, produce y opera exposiciones temporales, itinerantes y accesibles de forma autónoma no solo para el MUUA sino también para otras instituciones, cabe resaltar que la exposición Mujeres Maestras de Colombia es la primera en su clase en cuanto está integrada a uno de los ciclos expositivos, sin la participación de las curadurías que históricamente han liderado esta práctica museal. Este proyecto inició en el segundo semestre del año 2016 cuando se aprueba la solicitud del Área de Educación para participar del proceso de curaduría de una exposición que pudiera vincular nuestro quehacer institucional con las prácticas participativas de los públicos, fue así como mediante la transformación permanente del escenario expositivo, integrando a su vez acciones cooperativas, se generaron actividades experimentales. Para tal fin, la propuesta del diseño de la sala se enmarco en el
concepto de una práctica experimental en constante cambio y aporte creativo de los visitantes, a un imaginario general que pudiese ser tan particular como el mismo reflejo de un retrato. Por último, la exposición Mujeres Maestras de Colombia no fue la única a cargo del Área de Educación en el segundo ciclo del 2017: desde el 25 de abril hasta el 30 de junio, también se hizo la exposición Niñez, Entre el Conflicto y la Esperanza. Ambas exposiciones se llevaron a cabo con invitados externos al Museo, el artista e investigador de la Universita de València el español Ricard Huerta y el Museo Casa de la Memoria de la ciudad de Medellín, respectivamente, iniciativas que aportaron a la inclusión de voces y realidades distintas que integren el sentir y la experiencia de los niños, ya fuera para hablar de sus maestras o narrar su perspectiva de la violencia armada en Colombia. La exposición contó con la visita de 19.894 personas, algunas de ellas con tiza en mano transcribieron las palabras de Ricard Huerta en un tablero a gran escala que sirvió como texto introductorio a la exposición en una actividad denominada “pasar al tablero” y otras 200 personas aportaron igual número de retratos hechos por ellos mismos durante la visita.
Los primeros contactos con la realidad antioqueña En el año 1993 pude conocer por primera vez, personalmente, la compleja realidad de Antioquia, en tanto que promotor del convenio de colaboración que se firmó entre la Universitat de València y la Universidad Nacional de Colombia. Por aquel entonces, el rector colombiano Antanas Mockus y el valenciano Ramón Lapiedra, firmaron como representantes por ambas instituciones el documento que daba paso a una fructífera relación académica. Mi formación como artista me acercó a la Facultad de Artes de la Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín, si bien las primeras acciones estuvieron más relacionadas con la arquitectura, la estética y los entornos; aquel primer contacto con la capital antioqueña, en una época cruenta y difícil, sirvió para iniciar una relación con la ciudad que se ha prolongado durante casi veinticinco años. A lo largo de todo este tiempo se ha podido afianzar la colaboración entre las dos universidades públicas de Antioquia (la Universidad Nacional y la Universidad de Antioquia) y la universidad pública Universitat de València, instituciones importantes en sus respectivos países. Tal y como lo he observado siempre, Medellín es un lugar fascinante en muchos sentidos. Puede que exista una relación peculiar entre el lugar en el que nací (la comarca de la Costera, en el País Valenciano, España) y el Valle de Aburrá colombiano; en ambos casos se trata de zonas geográficas de frontera, de tránsito, flanqueadas por montañas, con tierras fértiles y con ciudades propensas al comercio y a la fabricación de productos. Xàtiva fue lugar de paso para civilizaciones como la romana o la árabe, centro neurálgico de la fabricación de seda y papel en la Península Ibérica. Ocurre lo mismo con Medellín, que se convierte en un espacio clave para la industria colombiana y en escenario principal del tráfico y del conflicto armado durante el período de los cárteles. En Xàtiva nació el pintor Josep de Ribera, uno de los mayores representantes de la pintura barroca y de la historia del arte. En Medellín nació Fernando Botero, uno de los artistas más representativos de su país a nivel internacional. Xàtiva fue incendiada
por Felipe V, el primer rey Borbón, durante la Guerra de Sucesión en 1707. Medellín sufrió lo indecible en la segunda mitad del siglo XX como foco de atención mediática y en calidad de capital azotada por la violencia que generaron las luchas intestinas entre los correspondientes sectores vinculados al tráfico de drogas, la compra y venta de armas y la gestión de potencial destructivo tanto del tejido social como de la riqueza económica. Las ciudades que han sufrido conservan un poso de serenidad que las convierte en escenarios privilegiados de la memoria. Prueba de ello es el Museo Casa de la Memoria de Medellín, el cual es un ejemplo a seguir entre los mejores centros mundiales dedicados a preservar la memoria de quienes sufrieron de forma violenta las injusticias y el maltrato. Precisamente el colectivo del profesorado (los docentes y las docentes), ha sido el más castigado durante los cincuenta años de conflicto en Colombia; miles de maestros y maestras han muerto o sufrido vejaciones y humillaciones a lo largo de todo este tiempo. Es un deber y un honor rendirles homenaje, reconocer su gran valentía y el papel tan importante que tiene su trabajo para construir una sociedad más digna y más humana.
Agradecimiento al Museo Universitario de la Universidad de Antioquia Quisiera expresar mi reconocimiento al Museo Universitario de la Universidad de Antioquia por su apoyo para la realización de esta propuesta de índole educativa y artística. La investigación forma parte de las iniciativas que lleva a cabo el grupo CREARI de Investigación en Pedagogías Culturales (GIUV2013-103) de la Universitat de València (España), un grupo interdisciplinar vinculado a varias facultades y departamentos de nuestra universidad y asociado muy especialmente al Instituto de Creatividad e Innovaciones Educativas. Las personas con las que hemos estado trabajando durante la preparación de la muestra han tenido siempre un trato cordial y muy profesional en cada paso que se daba. Debo mostrar mi especial reconocimiento a el Equipo de trabajo del MUUA, quien desde el inicio mostró un verdadero interés por el proyecto y, así mismo, ha demostrado una excelente disposición, logrando introducir nuevas variantes creativas, didácticas y
museísticas en el desarrollo del proyecto para la exposición en el MUUA. Entre las numerosas personas de la Universidad de Antioquia que han estado fomentando este trabajo, citaré a cinco profesores con quienes he podido contar desde el inicio y a quienes debo reconocer sus apoyos incondicionales: Alexandra Rendón, directora del Departamento de Educación; Bernardo Bustamante Cardona, profesor en la Facultad de Artes; Silvana Andrea Mejía, profesora en la Facultad de Artes; Carlos Arturo Soto Lombana, profesor en la Facultad de Educación y Francisco Londoño, decano de la Facultad de Artes. También debo reconocer el entusiasmo y apoyo que siempre tuvimos durante el proceso por parte de personalidades como Consuelo Osorio, Daniel Torres, Hilda Mar Rodríguez, Jhon Jairo Carvajal, Lina María Ramírez, Matilde Salazar Vargas, Olga Lucía Olaya, Teresita Ospina y Héctor Abad Faciolince. Si bien el contacto académico con Medellín se inició a
través de la Universidad Nacional, fue a partir de 2009 cuando se incrementaron las colaboraciones con la Universidad de Antioquia, por lo cual, el proyecto Mujeres Maestras de Colombia está directamente vinculado con esta universidad. Tanto las entrevistas a maestras como el trabajo de campo en colegios se han centrado mayoritariamente en el departamento de Antioquia, aunque también se han desarrollado aspectos de la investigación en otros lugares como Bogotá, Manizales, e incluso en Ríosucio. De este modo hemos intentado abarcar un mayor ámbito representativo de diferentes entornos colombianos. En última instancia, considero que es una gran suerte haber podido conocer la realidad colombiana y haberme adentrado en sus peculiares rasgos identitarios desde la primera vez que inicié una estadía como investigador invitado a principios de la década de 1990. Desde entonces han sido varias las visitas académicas y los proyectos compartidos, por ello representa un gran honor poder ofrecer ahora los resultados de esta investigación en un lugar tan privilegiado como es el Museo Universitario de la Universidad de Antioquia.
El proyecto Mujeres Maestras se desarrolla como una acción artográfica El concepto de Artografía (traducción al español del término inglés Artography) ha sido difundido por Rita Irwin, profesora de la University of British Columbia en Vancouver (Canadá). Las tres primeras letras de la palabra hacen referencia a artist (A), researcher (R) y teacher (T); con ello se da a entender que quien practica las artografías es al mismo tiempo artista, educador e investigador, de este modo se presenta una igualdad y una convivencia efectiva entre las tres identidades que crean el neologismo: artista/ investigador/ profesor. Las artografías exploran el entorno de la investigación basada en la práctica (Arts Based Practice) como una metodología que tiene múltiples formas de explorarse y descubrirse, la multiplicidad de esta metodología es lo que convierte las artografías en algo único. Este tipo de trabajo se desarrolla a partir de una “comunidad que fluye en constante evolución”, dispuesta a trabajar fuera de los límites metodológicos convencionales, con el fin de presentar la investigación que es capaz de expandir nuestras ideas acerca de la educación. Al mismo tiempo, la noción de “grafía” promueve asociaciones con el texto escrito y, por lo tanto, presenta una conexión entre el arte y las textualidades, la alineación de las artes junto a la narrativa como una iniciativa conjunta.
El proyecto Mujeres Maestras es un homenaje a las docentes, se trata de una investigación educativa y artística que pretende acercarse a la identidad de las mujeres que se dedican a la enseñanza. Utilizamos una metodología plural que combina los estudios de caso, las narrativas personales y la investigación basada en las artes (Arts Based Research). Nuestro trabajo es de corte cualitativo y de rango artístico. El proyecto pretende unir intereses entre los centros educativos y los espacios museísticos, de este modo, el carácter de la propuesta nos acerca a las opiniones de las docentes al mismo tiempo que reivindica una mayor interacción entre las escuelas y los museos. Planteamos la recolección de datos en un sentido etnográfico, si bien se resuelve de forma creativa a través de instalaciones artísticas participativas. Tras su paso por países como Chile, Uruguay, Bélgica, España y Argentina, en 2017 se presentó el proyecto, por fin, en Medellín. Este reto era algo que teníamos pendiente, ya que la idea de convertir Mujeres Maestras en un evento artístico de carácter internacional se gestó precisamente en Colombia.
La trayectoria del trabajo Mujeres Maestras de Colombia A lo largo de estos últimos años he podido conocer personalmente el trabajo de numerosas docentes colombianas que han venido haciendo su trabajo en situaciones extremadamente difíciles, debido a la crudeza del conflicto armado que durante cincuenta años ha padecido el país. A la violencia de las armas se suma tanto la crueldad de la pobreza como el estigma del machismo, ser maestra en un entorno desfavorecido requiere mucho esfuerzo, especialmente en entornos poco seguros, esto es algo que han estudiado investigadoras como Pilar Méndez Rivera (Méndez, 2016). A las problemáticas laborales habituales del colectivo se suman elementos que dificultan el ejercicio profesional, como la situación precaria de las familias del alumnado o, incluso, el mal estado en que se encuentran las instalaciones donde se trabaja; todo esto influye decididamente en el desarrollo de la actividad educativa, lo cual acentúa factores perversos que afectan a otras cuestiones de rango personal y social. Ser docente en Colombia entraña gran dificultad, puesto que tanto la realidad cotidiana como el conflicto y el postconflicto generan problemas, incertidumbres y desgastes devastadores en el trabajo del profesorado. Algo que resulta muy evidente en Colombia es que entre las personas que se dedican a la educación en los niveles obligatorios la gran mayoría son mujeres, queremos hacer visible esta realidad, construyendo y difundiendo una imagen del colectivo a partir de tres miradas: la del artista, la del alumnado y la de las propias maestras. Deseamos construir una “imagen” de las maestras, más allá
de los tópicos que pueden venir de los medios de comunicación o de la literatura convencional; indagamos en aspectos de la mirada, analizando cómo las vemos, cómo se ven, cómo les gustaría ser vistas. Entre los objetivos del proyecto destacamos la intención de impulsar los valores de la educación artística, reivindicando una mayor sensibilidad por parte de las instancias políticas y sociales, al tiempo que reflexionamos sobre las identidades docentes mediante un espíritu creativo, con deriva social y adecuándolo a los nuevos ritmos artísticos. El proyecto Mujeres Maestras permite así mismo el fomento de acciones colaborativas entre equipos de trabajo de escuelas y museos para animar el espacio formativo generando retos de futuro, al hacer visible la problemática de las mujeres que se dedican a la enseñanza, reivindicamos al colectivo, al unir espacios como la escuela y el museo favorecemos la transmisión de intereses entre colectivos, además, este proceso de reflexión nos lleva a mirar hacia el futuro incorporando temáticas como el papel de la conciliación familiar y laboral de las mujeres que trabajan (Alonso-Sanz, 2016). Los retratos de las maestras son un mensaje con el que se transmite nuestro respeto y admiración por el esfuerzo de estas mujeres trabajadoras de la cultura. He elegido la flor nacional, la orquídea, como símbolo con el que retratar a cada mujer representada en la serie. En Colombia se vive una auténtica fiebre de la educación para la paz, y las maestras han sido un elemento clave para construir la ciudadanía, con posturas conciliadoras en ocasiones silenciadas. Orquídeas y maestras, un elenco más que recomendable para este país de contrastes.
El planteamiento artístico y educativo de Mujeres Maestras integra docentes de escuelas y museos A través de las vivencias y opiniones de las docentes, Mujeres Maestras transita por los lugares de las educadoras mediante sus narrativas personales. Se inicia la recogida de información conociéndolas personalmente y estableciendo un diálogo con ellas, nuestra labor artística se basa en la mirada del observador atento, analizando pacientemente desde la experiencia de quien indaga en sus propias inquietudes; el criterio de selección de las maestras pretende integrar el máximo de situaciones distintas mediante personas que representan a colectivos con características y situaciones peculiares, así como diferentes estamentos sociales y económicos, edades, años de experiencia docente, etc., esta diversidad garantiza y refuerza la amplitud de miras del conjunto, oímos relatos de docentes muy jóvenes y de profesionales con dilatada experiencia, así en cada entrevista se recoge la suficiente información con la cual realizar posteriormente la pintura que representa a cada maestra. Al exponer las pinturas en el museo convertimos a las maestras en protagonistas del discurso museístico y patrimonial. El patrimonio educativo sirve como elemento de integración social y cultural. Desde la cultura visual establecemos una nueva mirada hacia las docentes y una nueva percepción de las maestras, intentamos acercar las artes y la educación artística a las actividades que propician encuentros entre docentes, escuelas y museos, con estas acciones ponemos en
evidencia las realidades en que nos movemos, aportando ideas para mejorar nuestras formas de educar y, al acercar las artes al terreno educativo, promovemos una educación estética y crítica, compartiendo la preocupación por cohesionar las opciones que presenta la educación artística en Colombia (Bustamante, 2016). En los retratos de las maestras utilizamos sus nombres, retratándolas con este símbolo gráfico que las define desde el alfabeto, estos símbolos gráficos del alfabeto latino se convierten en un diseño particular para cada serie, de manera que se moldea la singularidad de cada maestra con base a la composición tipográfica. Por otro lado, los dibujos que realizan los niños y las niñas interpretan a sus maestras con sus composiciones plásticas en las cuales queda reflejado el enorme cariño que manifiestan por estas profesionales. En el caso de las series que elaboró como artista visual, el retrato de cada maestra se construye a partir de su nombre, de las letras con las que se escribe su nombre. En el caso de Colombia me ha interesado de manera especial el juego de varios nombres con que se identifica a la mujer, por ejemplo, los nombres compuestos con que se le llama a las mujeres se convierten en verdaderos poemas sugerentes (Beatriz Elena, Claudia Patricia, …). A las miradas del artista y del alumnado se une la de las maestras que escuchamos a
través de sus entrevistas en los videos, en las que plantean cuestiones abiertas a partir de ideas como el motivo por el cual decidieron ser maestras, las temáticas que les preocupan tanto a nivel personal como a nivel laboral, así como el modo de conciliar su vida familiar con las tareas de la enseñanza. La reflexión se extiende a una faceta conceptual considerando la vertiente teórica desde la propia realidad artística. En Mujeres Maestras combinamos ambos aspectos, facilitando una reflexión compuesta por ideas, sentimientos, imágenes y textos, generando así acción y reflexión teórica (Huerta, 2016), implicamos a los estamentos y colectivos de cada centro museístico y educativo, consiguiendo unir esfuerzos y logrando una mayor integración entre las partes. La base del estudio del proyecto Mujeres Maestras se nutre de nuestra implicación profesional en diferentes aspectos relacionados como la práctica artística, la formación de educadores y la pedagogía en museos y entornos patrimoniales; planteamos un modelo de indagación que permite conocer mejor al colectivo docente, escuchando sus problemáticas, acercándonos mediante la observación
y el análisis en directo, usando las narrativas personales como fuente de información; utilizamos entrevistas semiestructuradas que son grabadas en video, combinamos otros paradigmas de estudio, como la llamada Investigación Basada en las Artes. La aproximación se basa en la praxis, elaborando resultados artísticos y, por supuesto, vinculando la experiencia a nuestras indagaciones sobre las identidades docentes desde la vertiente de la Educación Artística (Huerta, 2012). Es una tarea compleja integrar la reflexión educativa y la creación artística, pero conviene recordar que entre nuestros argumentos más poderosos para la educación en artes visuales están precisamente las imágenes, nos acercamos al mundo de las maestras desde las propias representaciones visuales, lo cual supone generar un marco de trabajo universal, adecuado para cualquier realidad geográfica.
La realidad educativa de Medellín es rica en innovación La tradición de una ciudad en constante cambio como Medellín está vinculada al ánimo constante por evolucionar y progresar, las medidas por mejorar las situaciones sociales y políticas emergen de forma paulatina, un buen ejemplo de ello es la creación de entidades municipales como el MOVA (Centro de Innovación del Maestro) o la Casa del Maestro, ambas impulsadas por la Alcaldía, desde estas iniciativas se impulsa la investigación y la colaboración entre colectivos docentes (MOVA, 2015). La lucha por la democracia, por la paz, por la superación del conflicto, por el respeto a la labor docente, se sitúa muy cerca de lo que nosotros pretendemos con el proyecto Mujeres Maestras, en nuestro caso indagamos sobre las identidades docentes a partir de las narrativas personales (Rivas y otros, 2012), originando la búsqueda de referencias, algo que conseguimos partiendo de las voces de las propias maestras para posteriormente analizar y describir desde la cultura visual, paradigma muy atento a todo lo que afecta a las cuestiones sociales. También los museos antioqueños han llevado adelante propuestas educativas y participativas en las que se ha implicado a colectivos y personalidades del territorio para abordar temáticas de índole social (Red de Museos de Antioquia, 2013). Mujeres Maestras es un merecido homenaje al colectivo de mujeres que se dedican a la enseñanza, cada exposición se estructura en tres ámbitos: la mirada del artista que pinta a las maestras; los dibujos del alumnado escolar,
en los que se retrata a sus profesoras; y para completar esta triple mirada contamos con los relatos de las propias docentes, quienes explican sus realidades a través de entrevistas registradas en video. La perspectiva de las historias de vida es un campo de estudio que plantea desafíos, que no puede aplicarse como una fórmula a la intención del investigador y que se vincula al giro que tomó la investigación en Humanidades y Ciencias Sociales a partir de 1970. En la indagación participativa aplicamos una deriva que contiene elementos artísticos, educativos, creativos y experimentales; en el proyecto se vinculan personas, centros educativos y museos, intercambiando actividades e intereses en el proceso, prácticas artísticas y reflexión estética. Llevar a cabo la iniciativa supone mantener una relación estrecha con las maestras, accedemos a sus problemáticas observando factores como las repercusiones emotivas o los sentimientos, elementos que tanta presencia adquieren en la vertiente cotidiana de la profesión docente, pero también en las artes. Al utilizar la creación artística como medio expresivo generamos una reivindicación de orden social, cultural y político, estableciendo un criterio de implicación personal que nos ayuda a mantener un contacto vivo con la realidad que nos envuelve. La Investigación Basada en las Artes tiene en las imágenes su recurso más habitual, pero también hay que saber manejar dicho discurso cuando se trata de explorar los problemas de los colectivos vulnerables; al acercar al territorio de las artes este conocimiento de una realidad concreta resulta clave realizar la investigación teniendo en cuenta factores culturales y de género.
El proyecto Mujeres Maestras recorre Europa e Iberoamérica
El proyecto ha ido creciendo, enriqueciéndose y actualizándose, el desarrollo artístico se va adecuando a las diferentes realidades abordadas, si bien el esquema inicial y las ideas esenciales se mantienen tal y como fueron planteadas en un principio, en cada país donde recala, y en cada nueva exposición, cambian todos los materiales expositivos; esto resulta factible porque se realiza un minucioso trabajo de recogida de datos, siempre preparamos el montaje con mucha anticipación, de manera que disponemos de suficientes recursos para personalizar las muestras, así mismo, las salas y museos en los que el proyecto ha estado expuesto han presentado en exclusiva todos los trabajos realizados para dicha actividad. Entre los aportes más destacables están las entrevistas, descubrimos relatos interesantísimos y fascinantes, nos sorprenden con sus ideas, compartimos sus deseos de llegar a tener una mayor presencia en tanto que profesionales implicadas y las apoyamos para conseguir un
digno reconocimiento social como trabajadoras de la enseñanza. Algunos documentales con las entrevistas a maestras están disponibles en internet, como es el caso de Mujeres Maestras del Perú , Mujeres Maestras de Colombia o del valenciano Dones Mestres d’Ontinyent . Reivindicamos un espíritu crítico y promovemos la reflexión sobre el papel de los docentes como auténticos intelectuales ante la delicada situación que se vive en tantos lugares con problemáticas diversas. El proyecto se presentó en la Sala Espace Atrium del Parlamento Europeo de Bruselas bajo el título Mujeres Maestras de Europa. Se trataba llevar la voz de las docentes al foro de mayor entidad representativa en el continente europeo con el fin de concienciar a quienes son responsables de las políticas educativas de la necesidad de escuchar a este colectivo tan importante y al mismo tiempo tan poco visible. Santiago de Chile es
otra realidad fascinante en la que hemos podido presentar el proyecto, con una exposición que tuvo lugar en el Museo Artequín, situado en la prestigiosa zona la Quinta Normal. Las declaraciones de las maestras chilenas resultan muy emotivas, teniendo en cuenta que en la memoria reciente todavía pesa el episodio cruento de la dictadura, pues muchas mujeres padecieron persecución por el régimen militar. Al recalar en la ciudad de Montevideo pudimos comprobar el peso específico que adquiere el colectivo docente en un país como Uruguay, pequeño en extensión, pero de gran tradición tanto en logros sociales como en la defensa de los derechos humanos. Numerosas entidades educativas y culturales estuvieron implicadas en la iniciativa. El recorrido del proyecto en España se ha centrado sobre todo en museos universitarios, como el de la Universidad de Alicante, donde se introdujo la novedad de que fuesen los niños quienes instalasen sus dibujos en las paredes, actividad que resultó muy atractiva, pues pudimos comprobar hasta qué punto resultaba importante para los niños y las niñas que sus dibujos estuviesen expuestos en un lugar visible y preferente. El éxito de público en las exposiciones está muy relacionado con el factor de parentesco, familiares de todo rango acuden al museo para que sean los niños y las niñas quienes les muestren y les enseñen sus dibujos; la desafección habitual de ciertos públicos hacia la realidad del museo se convierte aquí en súbito interés por visitarlo, ya que un miembro de la familia está directamente implicado como creador de alguna de las piezas expuestas.
Mara botero
Evelin
Emanuel Cañas
Sofia Montoya Posada
La voz de las maestras en la construcción de una sociedad más justa y equitativa Samuel Zapata El proyecto Mujeres Maestras transita por los territorios de los entornos formales e informales, uniendo la capacidad de las escuelas y los museos en una experiencia creativa y participativa (Perdomo, 2011). Acercamos ambas instituciones para reforzar el mensaje de nuestra propuesta: homenajear y visibilizar al colectivo de las maestras. Al representar a las docentes también generamos una nueva imagen que las define, ya no son solamente profesionales de la enseñanza, sino figuras emblemáticas a quienes se les reconoce su mérito, su valentía y su dedicación. Nuestra investigación parte de la educación artística para integrar el trabajo colaborativo, celebramos la colaboración del museo, ya que para llevar a cabo el proyecto es necesario integrar esfuerzos, y el papel de esta institución es fundamental para involucrar de forma participativa a educadoras, alumnado y familias en una iniciativa de marcado cariz cultural (Rendón, 2011). Fomentamos estas acciones a través de un ambiente lúdico y entusiasta, en el que domina la lucha por los derechos y la reflexión sobre el papel de las maestras en los entornos educativos. Denunciamos la precaria situación en la que viven muchas docentes, debido a la poca remuneración de su trabajo, teniendo en cuenta su dedicación, su esfuerzo y la constante preparación que se les demanda.
https://vimeo.com/215170718 https://youtu.be/gPZzZZw2MPg www.youtube.com/watch?v=Ypr6qUUSNbU
Sofia Montoya Posada
Luciana Loaiza
Referencias
Tania Michel
Alonso-Sanz, A. (2016). Conciliación de la vida estudiantil, familiar y laboral de una madre universitaria. Revista de Antropología Experimental, 16, 223-233. http://dx.doi.org/10.17561/rae.v0i16.2516 Bustamante, B. (2016). Aproximación a una re-conceptualización de la educación artística en la sociedad del conocimiento en Colombia. Revista Gearte, 3 (2), 151-161. Huerta, R. (2012). Mujeres Maestras. Identidades docentes en Iberoamérica. Barcelona: Graó. https://www.academia.edu/29591677 Huerta, R. (2016). Mujeres Maestras de Perú: Investigar en Educación Artística transitando entornos formales e informales. Revista Gearte, 3 (3), 427-443. https://www.academia.edu/30695576 Méndez, P. (2016). Constitución de sujeto maestro en prácticas de resistencia en Colombia. Enunciación, 21 (1), 15-30. MOVA (2015). Encuentro con-sentido pedagógico. Investigación educativa: Un horizonte político de ciudad. Medellín: Alcaldía – Secretaría de Educación. Perdomo, J. (2011). Museo y educación en asocio por el patrimonio inmaterial. Códice, 12 (26), 20-27. Red de Museos de Antioquia (2013). IV Coloquio Red de Museos de Antioquia: Museo y Comunidad. Medellín: MUUA. Rivas, J. I., Hernández, F., Sancho, J. M. (coord.) (2012). Historias de vida en ducación: Sujeto, Diálogo, Experiencia. Barcelona: UB. http://hdl.handle.net/2445/32345
Alejandra Giraldo
Dylan Hernรกndez
Mathias B
Nicol
Davidson Guilfrey
Kevin
Reconocimiento especial: El Museo Universitario Universidad de Antioquia resalta la participación de seis mujeres maestras que apoyadas por sus estudiantes aportaron los 200 retratos iniciales que hicieron parte del montaje de la exposición desde el día de la apertura, a estos retratos le fueron sumados 94 retratos extras que los visitantes a la exposición realizaron directamente en la sala de exhibición en un espacio especialmente acondicionado. Las maestras participantes de la exposición Mujeres Maestras de Colombia en el Museo Universitario entre el 25 de abril y 30 de junio de 2017 fueron: Andrea Marchena (37 retratos) Andrea Ortiz (25 retratos) Gloria Stella Cano (09 retratos) Mónica Betancourt (09 retratos) Oriana María Zapata (44 retratos) Zinayda Quiñonez (76 retratos)
Cll 67 N 53-108, Bloque 15, Ciudad Universitaria / Tel: (4) 219 5180 - MedellĂn - Colombia / museo@udea.edu.co / http://museo.udea.edu.co