española

La conducta del Comandante140 interino de Coro pone al relieve sus intenciones de exponer a los habitantes a una situación de inseguridad ante los peligros que se avecinan, no solo de la guerra, de las conexiones económicas que están logrando los Juntistas con el viejo continente, quienes buscan el reconocimiento de sus acciones políticas, debido a la ausencia del monarca, sin embargo, los habitantes de Coro se exponen a quedar, fuera de esos beneficios y más aún, convirtiéndose en un bastión de los franceses en el propio territorio de los venezolanos, es por ello, que Roscio, está buscando alternativas para evitar que sus compatriotas, queden expuestos a un umbral de inseguridad y buscar medios alternos para que se una a la causa justa, que solo busca consolidar la Seguridad Pública y común de todos los habitantes de la Provincia.

A la luz de los hechos, éste protervo141 hombre encargado de Coro, sugiere que está destinado por una herencia a mantenerse en el cargo, se intuye que su figura política se remonta siglos atrás en tiempos de conquista, donde la patente de corso era la condición para dominar los predios conquistados, de allí al parecer se acoge el Comandante de Coro, quien alude tener derechos hereditarios que le permiten perpetuarse en poder, debido a la desgracia que atraviesa la monarquía española y que los indios de Venezuela no tienen el poder ni la venia para removerlo de su estatus, convirtiéndose así, en un cargo vitalicio según su visión trasnochada del pasado.

Las condiciones de vida de los habitadores de Coro, son muy inseguras, las represiones por parte de la autoridad encargada deja claro que sus intenciones, consisten en someter al pueblo y exponerlo a una situación de servidumbre, miseria e infelicidad, lo cual deja en riesgo a la población, la seguridad pública y personal, se diluye en los placeres del Comandante, quien por su poder puede aplastar a quien contradiga sus intenciones, deja

140 “Cuando menos es evidente, por el contenido de un oficio requisitorio a los Cabildos de Barquisimeto y demás del interior, que esta destituido de principios de equidad y que juzga con demasiada bajeza sobre los derechos y la suerte de estos Pueblos cuando asegura con aquel Cabildo, que aun en el caso de ser la España enteramente sojuzgada por los Bonapartes,(sic) no tenemos derechos para despojar de la autoridad á los agentes Españoles que la ejercen; siendo al parecer aquel, en su sentir, un derecho de herencia á que tiene opción legítimamente cualquier hombre malvado que por acaso ha sido destinado a ocupar una plaza de América en un tiempo de incertidumbre, de injusticia y de precipitación”. (p.113) Ibídem. 141 “Un raciocinio tan insultante a los sagrados derechos de la naturaleza, es el que necesita para dilatar el imperio de la tiranía y de la arbitrariedad, sobre un pueblo que ha hecho infeliz y miserable el mismo espíritu de depredación, con trabas y restricciones injuriosas al carácter y circunstancias apreciables de sus habitadores, desde que dejo de ser la Capital del Departamento de Venezuela”. (p. 113) Ibídem

claro que él es rey en esos predios por su procedencia, haciendo entender a sus súbditos que su autoridad no se cuestiona, y su voluntad es similar a la del monarca, he allí la situación que pone en tela de juicio y su contumacia con el movimiento de Caracas, que es dinamizado por criollos, obedeciendo a la voluntad popular de otrora.

La condición del pueblo de Coro, bajo el mando Comandante interino Brigadier José Ceballos, es remitirse a la guerra142, ese pueblo esta atemorizado por la fuerte influencia tiránica que ejerce sobre esas personas que ineluctablemente los induce al sacrifico, violándoles todo tipo de Seguridad Pública y personal posible y conduciéndolos a una infelicidad, lo cual es inaceptable para el nuevo gobierno caraqueños, que consideran a sus compatriotas como hermanos y desean que el logro adquirido en la Capital, sea de provecho para ellos también, de manera que están tendiendo los puentes necesarios para evitar la confrontación bélica bajo cualquier circunstancias.

En todos estos hechos, está implícita la seguridad pública, como una necesidad imperante, quienes vivieron la época reflejan en sus escritos una intencionalidad de una exhortación a proteger sus vidas y sus bienes, la cual estaba en riesgo por el constructo psicológico143 que tiene Ceballos de la situación que corre por las calles y caminos, se percibe en el ambiente una confrontación inminente entre compatriotas por la contumacia del Brigadier Ceballos, que se niega a reconocer la Suprema junta de Caracas, e insiste en congraciarse con la Regencia de España.

Todas estas decisiones equivocadas, por parte del Comandante Interino de Coro, expone a toda la población y sus zonas aledañas a una inseguridad inminente que atenta contra sus tierras, bienes y la vida, dejando en un estado de vulnerabilidad a todos los habitantes de esa provincia, la situación de infelicidad en al cual se encuentran deja claro que quien tiene el poder es el Gobernador encargado y que sus intenciones sobre pasan el bienestar de sus pobladores, dejando sin la posibilidad de decidir a dónde acudir para

142 “No distingue menos, como un espíritu predominante y activo por su propia causa, halla felicidad para seducir á (sic) cuarenta mil almas que comprende aquella jurisdicción, y hacer que se armen cuanto sea posible para acrecentar su miseria, hostilizando a los Pueblos vecinos que han seguido a Caracas y merecen su protección”.(p. 114) Ibidem 143 “Estos son los indicados al principio: velar sobre la conducta y medidas que toma el comandante de coro, y observar la disposición y los sentimientos de los habitantes que están bajo su dominación que están en aquel desgraciado distrito,…” (p. 114) Ibídem.

librarse de la atrocidad que se acerca, al respecto, las comisiones144 que se envían, buscan tratar de convencer a los vecinos que deseen reconocer a la Suprema Junta de Caracas y unirse a la causa y de esta manera reducir y mitigar la inminente situación violenta145 que se observa en el horizonte.

La Comisión del teniente coronel Carlos de la Plaza, enviado por la Junta146, a la provincia de Coro, consiste en informar a dicha institución de todos los por menores acaecidos en ese distrito, que sean de su interés, sin ser detectados y mucho menos poner en riesgo a sus habitantes, pero es necesario seducir a través de una serie de proclamas escritas que instan a los lugareños unirse a la causa revolucionaria caraqueña y pasar a ser protegidos por todas la leyes que fueron creadas para asegurar la vida y sus bienes que estaban buscando los capitalinos antes de tomar a la decisión de deponer a Emparan.

La intención de la Junta Suprema, está orientada a evitar por todos los medios la confrontación, en este sentido y dadas las circunstancias, se orientan a conquistar el apoyo del pueblo como se logró en Caracas y de esta manera, conforma un Gobierno en todas las provincias; Empero, Coro estaba domina por el tirano de Ceballos, quien piensa que su cargo es eterno y nadie, excepto el rey, tiene la autoridad para deponerlo, aun mas, este sujeto cicatero asume que su estadía en el territorio le da poder supremo para dominar todo el continente, es por ello, que se aferra a la Regencia de León, a sabiendas que ésta, está dominada por los franceses.

144 “El objeto de la comisión de Vd. es solo el de observar el estado y disposición en que se encuentran los habitantes de aquel partido, relativamente a la causa que proclamado solemnemente el Pueblo de Caracas el día 19 de abril último”. (p. 114) Ibídem. 145 “Saber las medidas que toma aquel comandante, sea por fortificarse o consolidar su partido, ó (sic) para seducir ó (sic) atacar los demás pueblos interiores de Venezuela que se han unido a Caracas”. (p. 114) Ibídem. 146 “…pasar al conocimiento de la Junta Suprema, para que, en su vista, pueda tomar las medidas que estime más oportunas a precaver y asegurar los habitadores vecinos que se han unida a la causa de Caracas, de toda invasión o seducción de parte de los coreanos, tendrá Vd. cuidado de comunicarla a S.A. sin pérdida de tiempo; en el concepto de que, proteger a los nuestros contra todo atentado, persuadir a los pueblos de Coro de la justicia, liberalidad y regularidad de nuestras intenciones, y sofocar en su propio origen por estos medios el espíritu desorganizador que fomenta la discordia entre aquellos habitantes, para arrojarlos incautamente en las mas (sic) espantosas miserias que le han preparado largos tiempos a las torpes e imperiosas resoluciones de una administración viciosa y arbitraria, son las atenciones principales que ocupan a la Suprema Junta; y por lo tanto conviene mucho que usted procure propagar y hacer circular entre aquella gentes los impresos y papeles que le acompañan relativos a nuestra causa, y asegurar y persuadir a todas nuestras intenciones pacíficas (sic) y los sinceros y vivos deseos que tenemos de verlos unidos a nosotros con aquella cordial fraternidad que inspirando unos mismos derechos”. (p. 117) Ibídem.

Por otro lado, el comunicado147 que emite Juan Germán Roscio dirigido al distrito de Coro, revela las verdaderas intenciones de Ceballos, su actitud deja claro que despojarlo de su cargo implica irse la guerra entre criollos y canarios, sin embargo, la Suprema Junta solo quiere logra la mayor suma de felicidad en sus habitantes y que estén protegidos de cualquier amenaza interna y externa, en todo esto se busca establecer la Seguridad Pública, que les permite a los venezolanos comenzar de nuevo sin un rey, con autodeterminación, libre de la injerencia de ultramar, establecerse y ser reconocidos por todo el mundo y todos los gobiernos como una nación independiente, capaz de afrontar los nuevos retos sin el dominio de los imperios.

La pluralidad estaba naciendo, se entre teje una nueva forma revolucionaria de hacer gobierno popular de calle, que asegure la vida, los bienes y la felicidad de sus habitantes y puede lograrse si, hombres como el brigadier Ceballos, no se opone a estas nuevas formas de gobiernos del pueblo, que están buscando una seguridad digna que les permita avanzar hacia el bienestar colectivo individual, sin la tutela de regentes que consideran a los criollos como unos párvulos que aún no tienen las suficiente preparación para dirigir sus destinos y se hace necesario la supervisión de un español que vigile de sus actos, usando la tiranía, la violencia, el autoritarismo, como mecanismo represivo que induzca al miedo y al sometimiento.

La situación de Coro, pone en riesgo todo el esfuerzo realizado por la Suprema Junta de Caracas, la seguridad está en un total riesgo, el estatus de interregno que está latente en Venezuela, abre una posible brecha para que los franceses puedan con facilidad apoderarse del territorio, a todas luces, las medidas de seguridad son tomadas de inmediato y se envía a las fronteras de Coro al Señor Coronel Márquez del Toro, con la intención de proteger a sus

147 “Algún día los pueblos de Coro conocerán la sinceridad de estas expresiones, cuando sepan que en el momento mismo que dábamos los primeros pasos en la carrera de nuestra actual organización política, aun antes que hubiéramos sabidos la oposición de sus sentimientos que han seguid muy de cerca al memorable día del 19 de Abril, ya habíamos recorrido por todos sus males pasados, considerado su ventajosa situación, y previstos los recursos que pueden restituirlos a su antigua prosperidad rompiendo las trabas y restricciones injuriosas con que por mucho tiempo se han procurado a presionar su actividad, y sepultar en un eterno olvido las más preciosa y fértil porción de territorio que humedecen las abundantes aguas del Tocuyo”. (p. 117) Ibídem.

habitantes, no como una fuerza invasora que atente contra la Seguridad Pública de esa localidad, sino como un protector148 de la localidad, sin embargo es derrotado.

La seguridad pública concebida desde la psiquis humana, guarda relación con los temores de las personas, sus intereses materiales y personales, desde esa perspectiva se comprende el hecho de ese impulso desesperado de cercar y blindar, todo lo que este próximo al entorno social que sea de interés colectivo e individual, es esa instancia mental, que genera incertidumbre y por ende, miedo en los seres humanos, que conlleva a los Juntistas de Caracas ya conformados en nuevo gobierno, a enviar tropas a las fronteras del pueblo de Coro, tratando de evitar así una confrontación con Ceballos, Comandante interino de esa localidad.

Es importante destacar, que Juan Germán Roscio, en relación al tema de la seguridad pública, de manera empírica, estaba estructurando los servicios de inteligencia primarios con el Teniente Coronel Carlos de la Plaza149, sus instrucciones dirigidas al Coronel son específicas, las cuales dan luces para conformar un servicio de inteligencia militar y policial que permita recabar suficiente información para suministrársela al señor Coronel Márquez del Toro, quien se dirige a esa localidad y debe estar al corriente de los hechos que le permitan tener un panorama o visual de lo que acontece en ese territorio.

Sin soberanía no hay libertad, al respeto lo que busca Juan Germán Roscio con la toma de Coro, es retomar la soberanía de aquellos predios sin el derramamiento de sangre, al respecto busca una manera de cómo se viene aseverando de recabar suficiente información usando un sistema para recabar información suficiente, que permita saber la realidad de Coro y sus adyacencias o zonas circunvecinas, sometidas por un tirano como lo

148 “Pero la Suprema Junta ha dirigido reservadamente fuerzas armadas a las fronteras interiores de aquella provincia, mas (sic) para servir de apoyo a las opiniones del gobierno, protegiendo a los nuestros, que para ser un medio de hostilidad y de invasión contra aquellos pueblos, no por esto dejaran ellos de obrar en daño de sus personas y de sus intereses, siempre que una mal aconsejada obstinación, y un designio decidido de hostilizarnos, hagan necesaria esta medida para asegurar nuestra tranquilidad, rechazar su fuerza y corresponder a su ingrata conducta”. (p. 118) Doc. II, 436. Ibídem. 149 “Por tanto usted, cuidará de observar y avisar a la Suprema junta cuidadosamente cuanto le parezca reparable y digno de atención a estos respectos; y como el señor Coronel Marqués del Toro se acerca a la frontera de Carora, Barquisimeto y San Felipe con fuerzas y prevenciones particulares sobre este mismo objeto, Ud., procurará instruirle de cuanto juzgue conveniente poner en su noticia, estableciendo comunicaciones con este Jefe, si fuere posible y le pareciere preciso por las proporcionadas vías de los del rio del Tocuyo, Aroa y Yaracuy que dirige aquellos partidos fronterizos, y por otras que tenga por mas (sic) oportunas, según los informes que adquiera de aquellas gentes”. (p.118) Doc. II, 436. Ibídem.

es Ceballos, que pretende imponer su voluntad en nombre de una regencia que esta carcomida por vicios y parcializada hacia los galos, lo cual representa un peligro y amenaza para la Seguridad Pública de la Provincia de Venezuela.

Los avances hacia Coro, por instrucciones de la Suprema Junta de Caracas, son determinantes y están orientados a cerrar todas las ventanas territoriales que eviten una posible entrada a la provincia de fuerzas adversas, que vengan a perturbar la paz que ya empieza a retomarse con la conformación de Suprema Junta de Caracas y sus decisiones políticas que están sustentadas en las necesidades de la población, que ha sufrido por varios años los embates agresivos del gobierno afrancesado impuesto por Emparan.

La confrontación dialéctica, está en ciernes, por una lado se encuentra el Comandante interino de Coro José Ceballos, quien apoya la Regencia tomada por el bando de los franceses, aunque no lo admita abiertamente, y en segundo plano están los criollos con un gobierno constituido en una Junta Suprema, en esta polémica nacen las contradicciones150 que dan origen a una dialéctica materialista para poder entender el contexto de los hechos acecidos en aquellos días de confrontación política, donde una fracción social decidió hacer ruptura con el imperialismo francés, conformando su propio gobierno popular que tributaba a la seguridad pública y común de aquellos días de angustia y miedo.

En este sentido, era necesario consolidar un gobierno que estuviera dirigido por una representación popular, es decir, que obedeciera a los intereses del pueblo, todas estas contradicciones entre los nuevos líderes de Caracas y los que apoyan la regencia francesa entran en un conflicto dialectico151 producto de los nuevos cambios que prácticamente están obligando a una parte involucrada en el conflicto a que se rinda y asuman sin resistencia a lo nuevo que se avecina, por otro lado, el gobierno caraqueño recién instaurado se niega a

150 “La teoría del desarrollo social como desarrollo que tiene lugar a través de la lucha de las contradicciones a adquirido así una amplia base factual, y una serie de afirmaciones, sobre las cuestiones más variadas de la historia humana”. (p.168). Metodología de la historia, 1982, Jerzy Topolsky, editorial Cátedra. Madrid. España. 151 “Las contradicciones entre las fuerzas productivas y las relaciones de producción adoptan varias formas. Su forma más manifiesta es la lucha de clases, es decir, el conflicto entre grupos de personas algunos de los cuales están interesados en cambiar las relaciones de producción existentes, en asfaltar el camino para el desarrollo de nuevas fuerzas de productivas, mientras que los otros se esfuerzan en conservar el estado actual de cosas”. (p.170) Metodología de la historia. Ibídem.

participar en el caos europeo, y mantener su estatus de Junta, para garantizar las demandas de la población.

La seguridad es primordial, para el reciente gobierno en marcha, su intención de promover los canales diplomáticos para evitar el conflicto152 se pone de manifiesto, cuando se conforman las comisiones militares que traten de entrar en dialogo con el pueblo de Coro, para que se unan a la causa caraqueña, y así evitar un baño de sangre entre comunidades hermanas, lo cual no era necesario si reconocían el gobierno recién conformado en Caracas, a través, de la Suprema Junta, las sanas intenciones de Roscio eran convencer a los habitantes de Coro y sus zonas aledañas a que se unieran a la causa como se viene afirmando, sin embargo, la traba la sostienen el Comandante interino, quien contumazmente se niega a reconocer a la Junta.

152 “A pesar de las providenciad de seguridad que se le indican a V.d. ha tomado la Suprema Junta para prevenir todo acontecimiento funesto a aquellos Pueblos y a nuestra causa, sin excluir el doloroso recurso de la invasión cuando se juzgue absolutamente necesario en nuestra defensa, no olvide V.d. que el deseo más vivo que predomina en las deliberaciones de esta Superioridad, es el de que se empleen siempre con preferencia los medios suaves y dulces que inspira una verdadera fraternidad, para lograr la conclusión de este negocio grave e importante”. (P. 118) Documentos de la Suprema Junta de Caracas. Tomo I. Ibídem.