Iglesia Misionera Hoy N° 516

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Marzo - Mayo 2019/ Nº 516 Revista Iglesia Misionera Hoy Propietario: Obras Misionales Pontificias Domicilio Legal: Medrano 735 (1179) Buenos Aires Director: P. Jerzy Marian Faliszek SVD Secretario de Redacción Favio Rosso Administración Norma Jiménez Diseño y Diagramación Claudio Martín Navarro

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Ilustraciones: Cristian Camargo


BAUTIZADOS Y ENVIADOS

Papa Francisco)

Estamos viviendo una época de enfriamiento religioso generalizado y de debilidad profética y apostólica de la Iglesia. Muchos fieles bautizados abandonan la fe o la reducen a unas vagas referencias que ya no configuran la mente ni rigen la vida. Hay pocos cristianos que asuman la misión apostólica de su vocación cristiana como una tarea expresa y determinante en su vida.


En este contexto, el Papa Francisco hace la llamada a todos los cristianos a redescubrir la gracia del bautismo, como también la identidad y la misión que brotan de él. Toda persona que recibe el bautismo queda revestida de Jesús, el Mesías, lo que significa que en ella está presente y actúa la propia vida de Cristo. El bautizado es una persona en la que el Espíritu actúa y se manifiesta. Es un ser humano animado por una fuerza sobreabundante que se traduce en alegría, amor, verdad y libertad. A propósito de los admirables frutos del bautismo es ejemplar la historia de la comunidad cristiana en Japón. Ésta sufrió una dura persecución a inicios del siglo XVII. Hubo numerosos mártires, los miembros del clero fueron expulsados y miles de fieles fueron asesinados. No quedó ningún sacerdote en Japón, todos fueron expulsados. Entonces la comunidad se retiró a la clandestinidad, conservando la fe y la oración en el ocultamiento. Y cuando nacía un niño, el papá o la mamá, lo bautizaban, porque todos los fieles pueden bautizar en circunstancias especiales.

Cuando, después de casi dos siglos y medio, 250 años más tarde, los misioneros regresaron a Japón, miles de cristianos salieron a la luz y la Iglesia pudo reflorecer. Habían sobrevivido con la gracia de su Bautismo. Esto es grande: el Pueblo de Dios transmite la fe, bautiza a sus hijos y sigue adelante. Y conservaron, incluso en lo secreto, un fuerte espíritu comunitario, porque el Bautismo los había convertido en un solo cuerpo en Cristo: estaban aislados y ocultos, pero eran siempre miembros del Pueblo de Dios, miembros de la Iglesia. Por el bautismo, Dios nos llama y nos envía para que, con nuestro vivir cotidiano, santifiquemos y transformemos, desde adentro, los ambientes de la familia, el trabajo, el estudio, el descanso, la diversión, la salud, la educación, el deporte, la cultura, el arte, la economía, la acción social, la política, en fin, todo el entramado de la vida social. Por lo tanto "deja que la gracia de tu bautismo fructifique en un camino de santidad. Deja que todo esté abierto a Dios y para ello opta por él, elige a Dios una y otra vez. No te desalientes, porque tienes la fuerza del Espíritu Santo para que sea posible, y la santidad, en el fondo, es el fruto del Espíritu Santo en tu vida" (Papa Francisco) P. Jerzy Marian Faliszek SVD


(Lc. 22,14-30) En alguna ocasión hemos tenido la experiencia de tener que despedir a un ser querido. No es fácil decir adiós. El pensar y sentir la amenaza de la ausencia se vuelve un trago amargo y difícil. Uno quisiera, por una parte, decir todas las palabras no dichas, manifestar los sentimientos no expresados; y por otra, recoger de quien se va sus últimos consejos que consideramos necesarios para seguir el camino sin esa persona, a la vez que recibir sus últimas palabras. Son momentos en los que salen a flote profundos sentimientos.

Jesús se despide de los suyos Jesús ha llegado al final del camino que inició con sus discípulos y entra en Jerusalén (19,28). Allí, durante el día, enseña en el templo y por la noche, se retira al monte de los olivos. La ciudad tiene un gran movimiento de gente, que se prepara a celebrar la fiesta de Pascua. Jesús se reúne con su nueva familia (sus discípulos) para celebrar la cena, a lo largo de ella dará un sentido nuevo a esta celebración, vinculandola a la nueva alianza realizada en su persona. Jesús toma la iniciativa, convoca a los discípulos y pide que preparen todo para celebrar juntos la cena pascual (22,8).

Invocación al Espíritu Santo Ven, Espíritu de Dios, Abre mis oídos para que escuche tu Palabra, ilumina mi mente para que comprenda. Haz que mi corazón la reciba y allí se encuentre con lo más profundo de mí; que me ayude a vivir en comunión con mis hermanos, que me haga vivir en actitud de entrega y servicio, que sea capaz de partirme y repartirme para todos.

Proclamación del texto.

Lucas 22, 14- 30


Lectura: ¿Qué dice el texto? Después de la proclamación comunitaria del texto, volvemos a leerlo personalmente en silencio introduciéndonos en la escena.

Después de un breve silencio, compartimos en el grupo, la frase, la palabra o actitudes que más hayan llegado al corazón de cada uno.

Jesús envió a Pedro y Juan a preparar la cena pascual. Ahora llega el momento de la celebración y ya están todos sentados a la mesa.

Meditación: ¿Qué me dice el texto?

Me sitúo como un comensal más en la cena. Escucho con alegría las palabras de Jesús sobre su deseo de comer la Pascua, aunque pronto ese gozo se transforma en tristeza: habla de la proximidad de su muerte. Sus palabras nos unen a todos en el mismo destino que el del Señor. También nos llena de esperanza el futuro banquete del reino, al que estamos llamados. Veo como Jesús toma el pan y realiza unos gestos con él: lo bendice, lo parte y lo da. A continuación escucho sus palabras, que están llenas de densidad. Identifica el pan con su cuerpo que va a ser entregado “por nosotros”. Luego nos invita a repetir el gesto cuando ya no esté, actualizando todo su significado. A continuación toma la copa. Sobre ella hace los mismos gestos que sobre el pan. Pero ahora cambian sus palabras. Dice que esa copa es la nueva alianza que Dios establece con su pueblo. Y que esta alianza va a ser sellada con su sangre derramada. Al igual que especificó en la entrega del cuerpo, ahora también dice que la sangre será derramada “por nosotros”.

Somos conscientes de lo que implica estar sentado a la mesa con Jesús. Las comidas eran símbolo de comunión de vida. El ser de los suyos implica compartir su pan y su vino, y vivir en nuestra vida cotidiana lo que esto significa: partirnos, entregarnos y servir. ¿Con qué gestos concretos damos nuestra vida a favor de los otros? ¿En qué medida la Eucaristía que celebramos no es sólo un rito sino que nos dispone a vivir ese “dar la vida” como Jesús? ¿Cómo podemos comprometernos más y mejor? ¿Tengo alguna responsabilidad en mi comunidad o en mi familia? ¿Cómo podemos caminar juntos hacia una Iglesia que sirve, como lo hizo Jesús?


Oración: ¿ Qué le decimos a Dios a partir del texto? La invitación de Jesús a su cena nos llena de alegría, pero también deja a la luz nuestras incoherencias en esa experiencia de comunión y entrega. Presentemos todo esto al Señor, que nos invitó a compartir la experiencia de ser “uno de los suyos”.

Acción y Compromiso Durante un momento de silencio leemos de nuevo el pasaje bíblico. Con la luz que nos aportó la Palabra, formulo el compromiso que quiero vivir. Compartimos en el grupo nuestros compromisos.

Le agradecemos la invitación a su banquete. Allí el Señor se hace Palabra y Pan que nos fortalece y alimenta en el camino. Hacemos en este momento nuestra acción de gracias por lo que recibimos en cada eucaristía. Le pedimos perdón. Somos conscientes de que esa entrega y ese dar la vida por otros que celebramos en el sacramento de la eucaristía no lo realizamos en nuestra vida cotidiana. Pedimos a Señor ayuda y coherencia para nuestra vida. Le presentamos nuestro grupo, nuestra comunidad, con la que celebramos cada domingo la eucaristía. Le pedimos que siga acompañándonos en esa dinámica de crear comunidad de vida y misión. Tras unos momentos de silencio, expresamos nuestra oración de petición, agradecimiento o perdón según lo que el Espíritu hace surgir en nuestro corazón.

Hay un a forma concret de escu a char lo q ue el Se nos quie ñ or re decir en su Palabra y de de transfo jarnos rmar p or el Es píritu. Es lo qu e llama m os « lectio divina Consist ». e en la lectura Palabra de la de Dios momen e n un to de o ración permitir para le que nos ilum ine y nos ren u eve. Esta lec tura or ante de Biblia n la o está s eparad estudio a d el que rea predica li z a e l dor par a descu mensaje brir el central del text contrar o; al io, debe partir d para tr e allí, atar de descub le dice rir qué ese mis mo me n saje a la prop ia vida .


La resurreccion esta aconteciendo

(Mensaje Pascual enviado desde Colombia)


Espiritualidad de la UEAM

Salvar el mundo “El sufrimiento es tu compañero; y la muerte, desde el principio de aquellos tiempos, te hace señas. ¿Qué vas a hacer? ¿Rebelarte? ¿Aguantar pasivamente? ¿quejarte a todos y vengarte? Jesucristo, al venir a este mundo, encontró tres criaturas que no eran creación de su Padre- Dios: el pecado, el sufrimiento y la muerte. Para devolver la paz y el amor al hombre y la armonía al mundo, tuvo necesidad de vencer el pecado, el sufrimiento y la muerte. Como Jesucristo amaba a los hombres con un amor infinito, a todos reunió en sí, cargando con todos los pecados, sufriendo todos sus sufrimientos y muriendo con su muerte. Todos tus sufrimientos Cristo ya los ha ofrecido y han sido aceptados por el Padre. Sólo te hace falta juntarte con el salvador en el dolor. Entonces soporta libremente los “sufrimientos” con Él, ofrécelos libremente con Él y así libremente salvarás al mundo con Él. Todos los sufrimientos de la humanidad son detalles en el tiempo de la pasión de Jesucristo. El camino del Calvario pasa por todos los campos de batalla del mundo, los hospitales, por los ambientes del trabajo, por las calles de tu ciudad o de tu pueblo. El camino del Calvario pasa por todos los caminos de los hombres. Pero si encuentras y sigues a Jesucristo, el camino del Calvario te conducirá a la resurrección. Si quieres que tu sufrimiento y el sufrimiento del mundo, queden compensados y sirvan de algo, has de mirar, encontrar y unirte a Jesucristo en la cruz. Por Jesucristo redentor, el sufrimiento inútil, absurdo y odioso, se convierte en materia prima, en instrumento de redención. No es el sufrimiento en sí que redime, sino el amor. No puedes amar el sufrimiento en sí, que sigue siendo un mal, incluso después de la venida de Jesucristo, pero puedes amar la ocasión que te brinda para salvar. Tus sufrimientos de cada día, plenamente aceptados y ofrecidos al Padre, son tus acciones apostólicas más eficaces. La cruz debe ser el instrumento cotidiano de quien, con Jesucristo y por amor, quiere salvar al hombre y al mundo.” Michel Quoist


Desde hace 175 años en todo el mundo, niños y adolescentes junto con sus animadores experimentan, a través de la Obra de la Infancia y Adolescencia Misionera, la alegría de ser amigos de Jesús y de hacer más amigos para Él. Argentina no es la excepción:

¡La IAM continúa creciendo y brindando al mundo gestos concretos de Amor!


ar! ยกA cant

Los ninos y adolescentes ยกSeguimos anunciando el Amor!


Como cada año, la Infancia y Adolescencia Misionera lanzó para el 2019 un Lema a nivel nacional que tiene como propósito animar a los niños, adolescentes y animadores de la Obra a vivir la comunión bajo una misma idea y, al mismo tiempo, establecer un programa de acción, una guía en dirección a la cual se orientará toda la labor de la IAM Argentina. A continuación, explicamos el sentido del Lema y los ejes que contempla

El pasado 9 y 10 de Marzo, la sede de OMP Argentina (Buenos Aires) se vistió de las tan conocidas pañoletas y remeras de la IAM en el marco del Encuentro Anual de Delegados Diocesanos de la Infancia y Adolescencia Misionera, una instancia de formación, comunión, espiritualidad y establecimiento de líneas comunes de acción, que logró reunir a representantes de más de cincuenta diócesis del país. En este Encuentro, que tuvo como eje el llamado de Jesús: “Vamos a la otra orilla”, los Delegados y Referentes Diocesanos de Argentina se sumaron al desafío de ir a lo profundo, ahondar, crecer como Obra, ir a “orillas” poco transitadas, llegar a todos, ir más allá. Esta propuesta de salir de “las aguas seguras” y adentrarse a lo hondo estuvo en sintonía con el pedido del Papa Francisco a los Directores Nacionales de OMP el pasado Junio de 2018: “Renovar nuestras Obras Misionales Pontificias (…) Renovar el corazón, renovar las obras, renovar las organizaciones… (…) Nos tenemos que renovar para no acabar en un museo”. “La reforma de vuestras obras –expresó Francisco- consistirá en una refundación, una reestructuración según las exigencias del Evangelio”. Agregó: “No solo renovar lo viejo, sino permitir que el Espíritu Santo cree lo nuevo”.

En esta línea, la IAM Argentina pondrá este año el acento en Redescubrir el Carisma de la Obra (la cooperación misionera) expresado en la frase: “Que los niños y adolescentes ayuden a los niños y adolescentes”. Para ello, será la Formación de los animadores y de los miembros de Equipos Diocesanos de la IAM (a través de una Plataforma de Formación Virtual lanzada para tal fin) la que tendrá un lugar privilegiado, como una forma de revitalizar los cimientos, volver a construir lo nuevo a partir de la conciencia misionera, que es fundamental en la Obra. En esta sintonía de revitalización, de renovación y en comunión con toda la Iglesia, especialmente en este año en el que el Papa Francisco llama a vivir un Mes Extraordinario de Misión en todo el mundo, los Delegados Diocesanos propusieron y votaron el que será el Lema de la IAM para el 2019: “Renovando el Corazón, nos jugamos por la misión”. Dicha frase concentra en sí misma los tres ejes que se convertirán en guías de este año de trabajo:


¡Mes Extraordinario de Misión:

¡Nos jugamos por vos… con vos!

“Bautizados y Enviados”! Considerando el llamado a toda la Iglesia a vivir un Mes Extraordinario de Misión bajo el lema “Bautizados y Enviados” como una manera de renovar el compromiso misionero de toda la Iglesia, el Lema de la IAM alude expresamente a la condición misionera del Bautismo que nos configura en discípulos/misioneros: “Renovando el corazón”, un corazón de Hijo que, por el Bautismo, asume y renueva la misión de anunciar, haciendo opción por el compromiso misionero que nos involucra con los demás (y que se refleja en la expresión “nos jugamos por la misión”).

Una de las expresiones que más llaman la atención en el nuevo Lema de la IAM para el 2019 es la idea de “jugarnos”. Esta palabra encierra no solo el compromiso, el involucramiento que implica salir al encuentro de los demás, sino también remite a un Proyecto nacional lanzado con el fin de profundizar en el conocimiento y en el acercamiento de los niños y adolescentes a las distintas realidades de los continentes: “Nos jugamos con vos… por vos”. Este proyecto promueve descubrir a los niños y adolescentes del mundo en su esencia, en lo que los hace ser, precisamente, niños y adolescentes: los juegos y juguetes. De esta manera, la IAM está invitada a trabajar en los encuentros semanales el concepto de “juegos y juguetes del mundo”, como una manera creativa de acercarse a la realidad de otros niños y adolescentes. Asimismo, con el propósito de cuidar “la Casa Común” –Laudato Si-, se propone que cada niño, adolescente y animador construya su Alcancía Misionera –una de las maneras de cooperar en la IAM- recreando la forma de juguetes a partir del uso de materiales reciclables.

¡Redescubrir el Carisma de la IAM! Con la invitación clara del Papa Francisco a “renovar auténticamente las OMP” a la luz del Evangelio y ante las exigencias actuales, volver a reflotar, revalorizar y rescatar el carisma de la IAM como Obra que ayuda a los niños y adolescentes a través de los niños, adolescentes y sus animadores, se constituye en un llamado a volver y renovar el corazón de la misión (“Renovando el corazón” refiere también a este carisma, este don de Dios para la Iglesia que nos hace “latir” como Obra y dar vida al mundo). La IAM Argentina asume el compromiso, a través de la formación, de encarnar el carisma de la Obra, su esencia, y encenderla nuevamente en cada grupo, en cada encuentro.

De esta manera, bajo un Lema que sin dudas será gritado a viva voz por niños, adolescentes y animadores en todos los rincones del país durante todo el 2019, la IAM lanza un programa de trabajo, una mirada renovada, un llamado a crecer y a fortalecernos como Obra Misional Pontificia. Se trata de una frase que identifica pero que, al mismo tiempo, abraza, cobija y lanza a las más de 450 IAM de todo el país al encuentro de los demás con un corazón renovado y jugado por la misión.

Ezequiel Rogante Secretario Nacional Infancia y Adolescencia Misionera


Marruecos LA VIEJA BIBLIA DEL PRISIONERO Cuando Dios entra en prisión La cárcel puede no ser un infierno o un lugar de desesperación, sino un espacio donde Dios se encuentra con el hombre, herido y sufriendo. Y puede incluso convertirse en un lugar donde dar testimonio de la propia fe. El misionero padre Matteo Revelli, sacerdote de la Sociedad para las Misiones Africanas y párroco de San Francisco de Asís en Fez, está convencido de ello, refiriéndose a su reciente experiencia. "Fui a visitar a los prisioneros detenidos en la prisión de Fez. Tres de ellos, que serán liberados dentro de unos días, me han dado un paquete bastante pesado, con tres Biblias arrugadas dentro", dice el párroco. "Uno de ellos me dio una Biblia grande y vieja, que pesaba por lo menos una libra y media, arrugada, engrasada, pegada, subrayada, con páginas faltantes. Luego me llevó a un lado para decirme que la Biblia había estado con él durante 20 años, que la había ganado como primer premio en un concurso de cultura bíblica en su país. La llevó consigo y siempre la leyó durante sus viajes de aventura alrededor del mundo en busca de fortuna"."Durante años había estado llevando cocaína en su maleta, desde algún país latinoamericano a Europa o África", explica el p. Revelli.

"Me confesó que, por un sentido de moderación, nunca se atrevió a llevar la Biblia en la misma maleta que la droga. Un día fue llevado durante su última escala en Marruecos, donde pasó 9 años y solo conoce el aeropuerto y las dos cárceles donde se alojó con otros prisioneros, incluidos los marroquíes. Ahora, cuando sale de la cárcel, conoce perfectamente el dialecto marroquí y la Biblia. Me dice que la Biblia fue su único apoyo durante su encarcelamiento y que ahora ya no necesita ese libro escrito, porque mientras tanto lo ha aprendido de memoria. Él me lo confía para que yo se lo dé después a otro preso". El misionero añadió con emoción que "al tomar esa Biblia grasienta y arrugada y ver mi Biblia ordenada y limpia, casi sentí vergüenza. Esa Biblia habla de la vida de un hombre que encontró la Palabra de Dios en cautiverio: hoy, como él, otros prisioneros pueden tener la misma experiencia gracias al humilde y desinteresado apoyo espiritual que los sacerdotes, religiosos y laicos ofrecen a los prisioneros de Fez.

Fides.org


Voluntariado:

Expresión de la Cultura de la Gratuidad y la Solidaridad El voluntariado es el trabajo de las personas que sirven a una comunidad o al medio ambiente por decisión propia y libre. El término también hace referencia al conjunto de dichas personas, los voluntarios. Por definición, los voluntarios no cobran por su trabajo Hay diferentes motivaciones que mueven a estas personas a dedicar parte de su tiempo al trabajo no remunerado. También hay distintas maneras de ser voluntario: una clasificación básica distingue al voluntariado formal (el realizado dentro de organizaciones no lucrativas) del informal (los voluntarios actúan individualmente o en grupos no registrados). Otra clasificación elemental distinguiría el voluntariado en el que los beneficiarios son personas de aquél en el que el trabajo mejora el medio ambiente (en general o parte de él: animales, plantas, etc.). El trabajo voluntario debería cumplir tres condiciones: Ser desinteresado: el voluntario no persigue ningún tipo de beneficio ni gratificación por su ayuda. Ser intencionado: el voluntario persigue un fin y un objetivo positivo (buscar un cambio a mejor en la situación del otro) y legítimo (el voluntario goza de capacidad suficiente para realizar la ayuda y de cierto consentimiento por parte del otro que le permite que le ayude).

Estar justificado: responde a una necesidad real del beneficiario de esta. No es un pasatiempo ni un entretenimiento sin más, sino que persigue la satisfacción de una necesidad previamente definido como tal. El voluntariado es uno de los signos de los tiempos. En una situación de la crisis de pertenencia de las nuevas generaciones a la Iglesia, la convocatoria al voluntariado es una gran puerta al “Ven y lo verás” de la Iglesia de América Latina. La única puerta de entrada no puede ser exclusivamente la vía sacramental litúrgica o la catequística. El voluntario aglutina, por un lado, una de las respuestas organizadas de servicio a los pobres, y por otro representa una propuesta de convocatoria para tantos alejados y para otros cristianos que no encuentran ocupación en lo que las parroquias les ofrecen en el interior de los templos y locales parroquiales. El voluntariado puede ser una respuesta a la necesaria proyección social del laicado, donde se vincule la acción personal en forma de servicio a los pobres con la necesaria transformación de estructuras injustas y que tienen su sustento de reflexión en la doctrina social de la Iglesia. ¿Quieres cambiar el mundo? ¿Poner tu granito de arena para que mejoren las cosas? Haciéndote voluntario puedes convertirte en agente de este cambio.

En marzo de este año las Obras Misionales Pontificias inauguraron el proyecto” Voluntariado Bolivia 2019”. Los primeros voluntarios argentinos brindarán su servicio en el Barrio ”20 de octubre” de la ciudad de Cochabamba. Para obtener más informaciones sobre dicho emprendimiento se pide escribir a : director@ompargentina.org.ar



Mes Misionero Extraordinario / Octubre 2019


Hechos de los apostoles Fuente de inspiración misionera “Que su libro frecuente de oración y de meditación sea los Hechos de los Apóstoles. Vayan allí a encontrar inspiración. Y el protagonista de este libro es el Espíritu Santo”. (Papa Francisco a los directores nacionales de las OMP, 01.06.2018) “Recomiendo a los cristianos que lean el Libro de los Hechos de los Apóstoles: descubrirán la creatividad de esos hombres. Hombres que sabían cómo continuar con una creatividad que, si hacemos la traducción a lo que significa hoy, ¡nos asusta!” (Papa Francisco a los Jóvenes, 20 de marzo de 2018)

El libro de los Hechos de los Apóstoles tiene una especial importancia entre los libros de la Biblia. En él aprendemos la vida de la Iglesia primitiva y cómo los primeros discípulos del Señor respondieron con gran fidelidad a las enseñanzas de Jesús, al mismo tiempo que difundían el Evangelio por el mundo entero. Este segundo libro de Lucas nos ofrece las claves profundas que identifican a la Iglesia, lo que la Iglesia de todas las épocas y lugares es y debe ser. Como realización histórica concreta de los primeros tiempos, es algo pasado. Como indicaciones esenciales de lo que es constitutivo para la Iglesia, son algo permanente. Y como tales piden ser continuadas.

Es significativo que en todos los momentos de renovación de la Iglesia a lo largo de la historia se hayan vuelto los ojos a los Hechos de los Apóstoles. Muchas reformas se han inspirado, explícita o implícitamente, en el estilo de vida de las primeras comunidades cristianas. Por eso, el libro de los Hechos puede y debe seguir inspirando nuevas realizaciones y proyectos de vida cristiana comunitaria y misionera. Las circunstancias son distintas, y continuarán cambiando, pero las claves profundas serán siempre las mismas. No se trata de repetir, sino de prolongar los Hechos de los apóstoles. “Hoy se pide a todos los cristianos, a las Iglesias particulares y a la Iglesia universal la misma valentía que movió a los misioneros del pasado y la misma disponibilidad para escuchar la voz del Espíritu” (RMi 30).


Misionera reconocida como mujer coraje 2019 La hermana Orla Treacy, misionera en Sudán del Sur del Instituto de la Bienaventurada Virgen María, recibía el pasado jueves el Premio Internacional “Mujeres de Coraje 2019”. Instituido por la Secretaría de Estado de Estados Unidos hace 13 años, este premio es un reconocimiento a mujeres de todo el mundo que han demostrado y demuestran una valentía y un liderazgo excepcionales en la defensa de la paz, justicia, derechos humanos, igualdad de géneros y promoción de la mujer. El premio, desde su institución, ha dado a conocer la labor y la vida de más de 120 mujeres excepcionales de 65 países del mundo. En el caso de la hermana Orla Treacy, misionera irlandesa de 46 años, se reconoce toda su vida dedicada a los demás y, en especial, la labor que ahora realiza como directora de la Escuela Loreto en Maker Kuei, en las afueras de la ciudad de Rumbek, en Sudán del Sur. La hermana abrió esta escuela secundaria con internado en 2008 con 35 niñas, acogiendo hoy a 300 alumnas de todo el país.

La vocación, valentía de arriesgar por la promesa de Dios Se hizo público el mensaje del Papa Francisco para la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, que se celebrará el domingo 12 de mayo. El Papa Francisco comienza de hecho su mensaje citando el Sínodo de los Jóvenes y la JMJ, “dos grandes eventos, que han ayudado a que la Iglesia prestase más atención a la voz del Espíritu y también a la vida de los jóvenes, a sus interrogantes, al cansancio que los sobrecarga y a las esperanzas que albergan”. Fijándose en el encuentro de Cristo como Simón y Andrés junto a Santiago y Juan, el Papa cuenta que, en la historia de toda llamada, siempre “se produce un encuentro. Jesús camina, ve a esos pescadores y se acerca... Así sucedió con la persona con la que elegimos compartir la vida en el matrimonio, o cuando sentimos la fascinación de la vida consagrada: experimentamos la sorpresa de un encuentro y, en aquel momento, percibimos la promesa de una alegría capaz de llenar nuestras vidas. La llamada de Dios, explica el Papa Francisco no es una jaula o un peso, “es la iniciativa amorosa con la que Dios viene a nuestro encuentro y nos invita a entrar en un gran proyecto, del que quiere que participemos, mostrándonos en el horizonte un mar más amplio y una pesca sobreabundante”. La vocación, añade, “es una invitación a no quedarnos en la orilla con las redes en la mano, sino a seguir a Jesús por el camino que ha pensado para nosotros, para nuestra felicidad y para el bien de los que nos rodean”.


Escuchar el grito de la tierra

Poner todo al servicio de la misión. "Hablar de reconfiguración pastoral significa poner a Cristo en el centro de nuestra vida y de nuestras actividades. La finalidad de la reconfiguración pastoral es poner todo lo que somos y tenemos al servicio de la misión", dijo el obispo de San José de Mayo, monseñor Arturo Fajardo, en su carta pastoral para la Cuaresma, titulada "Effatà, apriti - Verso una riconfigurazione pastorale" (Abránse - hacia una reconfiguración pastoral). En el documento, el obispo, después de once años de servicio a la cabeza de esta Iglesia local, revisó las actividades de la diócesis y lanzó la propuesta de "poner todo en la clave de la misión", proponiendo el concepto de "reconfiguración pastoral". El texto está dividido en ocho partes. Después de la introducción hay seis capítulos y una conclusión: una realidad que nos desafía, un texto para meditar, una imagen para contemplar, el encuentro con Jesucristo desde la Palabra, la Iglesia tiende al encuentro, la Iglesia de San José y Flores, pueblo de Dios en camino y poner todo al servicio de la misión

“Si estamos realmente preocupados por desarrollar una ecología capaz de remediar el daño que hemos hecho, ninguna rama de las ciencias y ninguna forma de sabiduría deben quedar fuera, y esto incluye las religiones y los idiomas que les son propios”, dijo el papa Francisco a los participantes en la Conferencia Internacional “Las religiones y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): escuchar el grito de la tierra y los pobres” “La Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, aprobados por más de 190 naciones en septiembre de 2015, fueron un gran paso adelante para el diálogo global, en el signo de una necesaria nueva solidaridad universal”, dijo el pontífice y señaló que “las diferentes tradiciones religiosas, incluidas las tradiciones católicas, han abrazado los objetivos del desarrollo sostenible porque son el resultado de procesos participativos globales que, por un lado, reflejan los valores de las personas y, por el otro, se sustentan en una visión integral del desarrollo”. Sin embargo, el pontífice aclaró que es necesario precisar el concepto de “desarrollo”. “Cuando hablamos de desarrollo siempre debemos aclarar: ¿desarrollo de qué? ¿Desarrollo para quién?”, indicó. Al respecto señaló que, durante demasiado tiempo, la idea convencional de desarrollo se ha limitado casi por completo al crecimiento económico, advirtiendo que esto “ha guiado al sistema económico moderno por un camino peligroso, que ha evaluado el progreso solo en términos de crecimiento material, por lo que casi estamos obligados a explotar irracionalmente tanto a la naturaleza como a los seres humanos”. Por lo tanto, aclaró Francisco, “una discusión fructífera sobre el desarrollo debería ofrecer modelos viables de integración social y conversión ecológica, porque no podemos desarrollarnos como seres humanos fomentando la desigualdad y la degradación del medio ambiente”.



Ser parte de la historia de amor “La salvación que Dios nos regala es una invitación a ser parte de una historia de amor que se entreteje con nuestras historias; que vive y quiere nacer entre nosotros para que demos fruto allí donde estemos, como estemos y con quien estemos. Allí viene el Señor a plantar y a plantarse; es el primero en decir “sí” a nuestra vida, Él siempre va primero, es el primero a decir sí nuestra historia, y quiere que también digamos “sí” junto a Él. Él siempre nos primerea. Así sorprendió a María y la invitó a formar parte de esta historia de amor… Siempre llama la atención la fuerza del “sí” de María, joven, de ese «hágase» que le dijo al ángel. Fue una cosa distinta a una aceptación pasiva o resignada, fue algo distinto a un “sí” como diciendo: bueno, vamos a probar a ver qué pasa. Fue algo más, algo distinto. María no conocía esa expresión, era decidida, supo de qué se trataba y dijo sí… Fue algo más, algo distinto, fue el “sí” de quién quiere comprometerse y arriesgar, de quien quiere apostarlo todo, sin más seguridad que la certeza de saber que era portadora de una promesa. Le pregunto a cada uno de ustedes, ¿se sienten portadores de una promesa? ¿Qué promesa tengo en el corazón para llevar adelante? Fragmento del Discurso del Papa Francisco en la Vigilia con los jóvenes de la JMJ Panamá 2019


NOVIOS MISIONEROS de misión ad gentes a la selva en Ecuador La misión no sabe de frontera ni de estados de vida. Todos los cristianos, jóvenes o ancianos, casados, religiosos o solteros, están llamados a salir al encuentro en el anuncio misionero. El evangelio se anuncia en los templos, pero también en la vida familiar, en las escuelas, en las oficinas públicas, en el ámbito del deporte y también desde la comunicación social. Inés y Maxi son novios y pronto vivirán una fuerte experiencia misionera: junto a su compañero Francisco, irán durante un año como misioneros a una zona selvática de Ecuador. Mientras preparan el bolso y sobretodo, el corazón, nos cuentan su testimonios. Somos Maximiliano e Inés, tenemos 24 años, y participamos hace tiempo de la comunidad Capuchina de Córdoba. Hace más de un año que somos novios, y en marzo nos vamos a ir como misioneros ad gentes por un año a Ecuador, donde nos recibirá la comunidad Capuchina del Vicariato Apostólico de Aguarico, en la ciudad de Francisco de Orellana. Los dos, desde chicos, participábamos activamente en nuestras parroquias. Y luego nos conocimos en las actividades de la comunidad de jóvenes capuchinos. Compartimos el amor por Cristo y la Iglesia, el deseo de seguirlo y servirlo en los que más lo necesitan y nos sentimos llamados a la santidad. Estas cuestiones que son centrales en las vidas de los dos, se hacen centrales también en nuestro noviazgo. Son nuestras vidas y nuestra relación edificadas en Cristo, las que nos sostienen para vivir el amor con una mirada de fe y para caminar hacia el matrimonio y una familia juntos. En definitiva, compartimos el sueño de tener una familia entregada a Dios.


El hecho de poder compartir este llamado misionero como novios, significa una gran bendición. Para nosotros es un sí de Dios, que sigue apostando para que lo sirvamos y hagamos juntos. Además, estamos entusiasmados por conocernos más y desde otra dimensión de nuestras vidas: desde el servicio y la entrega radical que implica una misión. Claro que también involucra renunciar a ciertas cosas, como estar lejos de nuestras familias, interrumpir los estudios (en el caso de Maxi), postergar el comienzo de la vida profesional (en el caso de Inés), pero nos aventuramos mar adentro con alegría y con la confianza puesta en nuestro Salvador. Somos enviados en un año en que los ojos de la Iglesia estarán puestos en esta región, ya que será el sínodo de la Amazonía. Como jóvenes, se renueva nuestra alegría al seguir siendo testigos de los grandes pasos que como Iglesia estamos dando. Y nos sentimos muy cercanos, con nuestro carisma franciscano, a esta invitación del Papa Francisco de cuidar nuestra casa común. (Para más info: redamazonica.org)

A lo largo de nuestro camino de preparación para la misión, nos sentimos muy acompañados por la comunidad, podemos experimentar realmente el abrazo de la Iglesia a sus hijos. Desde el apoyo espiritual con la oración, hasta el soporte económico que recibimos de todos los que colaboran con los bonos contribución que vendemos al finalizar las misas en Capuchinos. Por eso, queremos agradecer a todos los que nos abrazan con su ayuda, para nosotros es estar cada día un paso más cerca del sueño que Dios sembró en nuestros corazones. Igualmente, estamos estamos disponibles para los que quieran más información sobre este proyecto de misión, que tiene como horizonte que otros jóvenes que sientan el llamado también puedan sumarse.

Radio María Jóven radiomaria.org.ar/rm-joven


HNA. DOROTHY STANG Mártir por proteger la Creación

En el mes de octubre de 2019 tendrá lugar en Roma la Asamblea Especial del Sínodo de los Obispos para la región Panamazónica, convocado por el Papa Francisco. El Sínodo despierta cada vez más interés, tanto en los que lo ven como un signo de esperanza, como en aquellos que lo sienten como una amenaza para sus planes de la “colonización “de Amazonia. Muchos hombres y mujeres dejaron la vida por defender el “pulmón del mundo” de la deforestación y a los pueblos que lo habitan. Dorothy Mae Stang,- conocida en Brasil como Irmã Dorothy - nació en 1931 en Dayton (Ohio, Estados Unidos) y en 1948 ingresó en la congregación de Nuestra Señora de Namur, donde hizo sus votos perpetuos. De 1951 a 1966 fue profesora en las escuelas de la congregación En 1966 fue destinada a Brasil con otras cinco hermanas. La comunidad se instaló en la ciudad de Coratá, en el Estado do Maranhão, y la Hermana Dorothy se dedicó a la formación de nuevos catequistas y a la educación religiosa de adultos. Desde 1964, Brasil vivía bajo una dictadura militar que no respetaba los derechos humanos y que contaba con la complicidad de los dueños de las haciendas, que se apropiaron ilegalmente de muchas tierras, dejando a los pequeños campesinos sin nada. Viendo la situación, la Hermana Dorothy y su comunidad decidieron adentrarse en la selva para atender a las empobrecidas comunidades rurales y se instalaron en Anapu, una zona aislada donde no llegaban los servicios públicos, en el Estado do Pará, al norte de la Amazonia. Contando con la solidaridad de los vecinos, inició un proyecto comunitario para levantar una iglesia, atender la vida cristiana y promover la justicia, y organizó un programa de salud e higiene. Su objetivo era detener la terrible deforestación que estaban llevando a cabo los fazendeiros y madereros en la Amazonia y lograr una reforma agraria democrática y justa que reconociera el derecho a la tierra de las comunidades rurales.


Así, ayudó a los campesinos a ganarse la vida cultivando pequeñas parcelas sin perjudicar el bosque y creaba empleo con proyectos de reforestación en áreas degradadas. Diseñó una camiseta con el lema "La muerte del bosque es el fin de nuestra vida” con la que impulsó una gran campaña en defensa de la selva y de las especies vegetales que, explotadas ilegalmente y vendidas clandestinamente en el mercado negro, estaban en peligro de extinción. En 1999, la Hermana Dorothy lideró la creación del primer Proyecto de Desarrollo Sostenible “Esperanza”, de agricultura familiar, al que dedicó su vida, luchando por la regularización de 130.000 hectáreas de tierra que quería repartir entre más de 600 familias campesinas. Su sueño era que los pobladores del proyecto pudiesen ser autosuficientes sin devastar el bosque amazónico. Cuando más crecía el movimiento, más amenazas de muerte recibía la Hermana Dorothy, la cual no se amedrentaba por ello. Poco antes de ser asesinada declaró: “No voy a huir ni a abandonar la lucha de los agricultores que están desprotegidos en medio del bosque. Ellos tienen el sagrado derecho a una vida mejor en una tierra donde puedan vivir y producir con dignidad sin devastar”.

SÍNODO PAN-AMAZONIA: OCTUBRE DE 2019

En un lluvioso día de febrero de 2005 en medio de la selva brasileña, la hermana Dorothy Stang enfrentó a un par de asesinos a sueldo cuando se dirigía a una reunión para discutir una reciente oleada de casa incendiadas por los ganaderos destinada a intimidar a los campesinos pobres para que abandonaran sus tierras. “Ustedes están armados” les dijo, “pero yo no. La única defensa que llevo es la Palabra de Dios”. Comenzó a leer las Escrituras, “Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos”. Los pistoleros escucharon por un momento, retrocedieron unos pasos y dispararon. Stang, de 73 años, murió rápidamente de seis balazos en el pecho y la cabeza. El cuerpo de Dorothy Stang, considerada mártir por mucha gente está enterrado en Anapu. Su muerte fortaleció el movimiento que ayudó a crear. En el ámbito de los conflictos agrarios en Brasil, el nombre de Irma Dorothy se asocia a los de tantos otros hombres, mujeres y niños que murieron y todavía mueren sin que sus derechos sean respetados. Su vida y su obra son una fuente de inspiración para las comunidades campesinas y, aunque la violencia no ha desaparecido, sus hermanas de congregación continúan trabajando por los derechos humanos de los más empobrecidos.

En octubre de 2017 el Papa Francisco anunció la convocatoria al Sínodo de Obispos para la Asamblea Especial para la PanAmazonia, a realizarse en Roma en octubre de 2019. En la visita pastoral a Perú en enero de 2018 en Puerto Maldonado, el Pontífice reiteró la importancia del acontecimiento explicando: “el objetivo principal de esta convocatoria es identificar nuevos caminos para la evangelización de aquella porción del Pueblo de Dios, en especial de los indígenas, frecuentemente olvidados y sin perspectivas de un futuro tranquilo, también a causa de la crisis de la selva amazónica, pulmón de capital importancia para nuestro planeta.”

Escuchar a los pueblos indígenas y a todas las comunidades que viven en la Amazonía, como los primeros interlocutores de este Sínodo, es de vital importancia también para la Iglesia universal. Para ello necesitamos una mayor cercanía. Queremos saber ¿Cómo imaginan su “futuro sereno” y el “buen vivir” de las futuras generaciones? ¿Cómo podemos colaborar en la construcción de un mundo que debe romper con las estructuras que quitan vida y con las mentalidades de colonización para construir redes de solidaridad e interculturalidad? y, sobre todo, ¿Cuál es la misión particular de la Iglesia hoy ante esta realidad?


Familias misioneras Pintar la belleza del amor Entrevista a Urszula Rychlinska, artista, laica comprometida Urszula Rychlińska - esposa, madre, artista gráfica, defensora de la vida. Nació en 1976 en Polonia. Graduada en la Academia de Bellas Artes de Cracovia. En sus obras, presenta el amor matrimonial y familiar enraizados en Dios. Sus cuadros suelen ser acompañadas con las citas de los discursos y documentos de San Juan Pablo II: el papa de la misericordia, patrono de las familias y defensores de la vida

¿Cuáles es tu principal fuente de inspiración? URSZULA: pinto exactamente lo que vivo y lo que experimento en mi matrimonio y familia: la cercanía de Dios en mi esposo, mis hijos y mis deberes cotidianos. A veces mis pinturas son el fruto de conversaciones inspiradoras con mi marido. ¿Qué te ayudó a descubrir la vocación de pintora y defensora de la dignidad del matrimonio y familia? URSZULA: Cuando era pequeña, vi en una revista una foto de Juan Pablo II alzando en sus brazos a un niño y besándolo. Esta escena llena de ternura me cautivó tanto que recorté la imagen y la guardé. Ahora veo en esta fotografía al gran papa - protector de la vida. A la de quince años tuve que abandonar mi ciudad natal, lejos de casa, para ingresar en escuela de arte. Tenía mucho miedo. Fue entonces cuando alguien me propuso participar en una peregrinación al Santuario mariano. Fue 1991 - tiempo de las Jornadas Mundiales de la Juventud de Czestochowa. Dicho evento cambió mi vida. Sentí que Jesucristo entró plenamente en mi existencia. ¿A quién quieres llegar a través de tu trabajo? URSZULA: Quiero llegar a los jóvenes quienes están buscando el sentido de vida. Quiero mostrarles el matrimonio y la familia como fuentes de la felicidad siempre y cuando permitimos a Cristo entrar en nuestro Hogar. Quiero llegar a los matrimonios que están pasando pruebas y conflictos, a los que se sientes heridos y desganados. Quiero decirles que nada es imposible para Dios. Él es nuestro médico y siempre quiere sanar nuestras heridas. Jesús misericordioso está siempre con nosotros. Me consagré a ser testigo y misionera de su Amor.


En tus obras plasmas amor maduro que irradia de los esposos mayores. ¿Cómo es posible esto a pesar de las arrugas, limitaciones y enfermedades? URSZULA: El día de la boda, comienza la construcción de los cimientos de la casa. Recuerdo esa enorme “lluvia de emociones” de ese maravilloso día ... Sin embargo, las p a s i o n e s p a s a n y e l c r e c i m i e n t o e n e l a m o r, independientemente de los sentimientos, requiere mucha dedicación y sacrificio personal. En este proceso no puedes confiar sólo en lo inmediato. El amor es paciente, sabe esperar. Para crecer tienes que pasar por muchas experiencias dolorosas. Y también por las gozosas. Un matrimonio que sabe aceptar sus debilidades y fortalezas conquista como fruto un amor maduro, el ágape. Es bello ver un matrimonio de ancianos quienes aprendieron a comunicarse incluso a través del silencio. ¿Cuál de tus pinturas es la más significa para ti? URSZULA: Imágenes de María y el niño en su vientre. Jesús todavía está oculto, pero vive bajo el corazón de su Madre, de quien es completamente dependiente. Lo que más me impacta es el hecho de que el Hijo de Dios deseaba tanto estar cerca de nosotros, que al ser infinito se encerró en el pequeño espacio humano. María es para mí un tabernáculo, una custodia viva que lleva a Dios. Jesús se identifica con los más pequeños e indefensos, que también están tejidos por el Creador en el vientre de sus madres (Sal 139). Los cuadros de María, Madre de la Vida Concebida pintadas por mí, se refieren al Programa de adopción espiritual del niño por nacer en peligro de ser abortado. Creo que esta es una de las obras de misericordia más bellas que hoy en nuestros difíciles tiempos se expande en la Iglesia produciendo abundantes frutos. ¡Muchas gracias!


SIEMPRE ES POSIBLE RECOMENZAR En mi trabajo en la prisión de Makala en Kinshasa, (RDC) encuentro siempre el momento de testimoniar el amor de Dios entre esta parte de la humanidad que sufre en sus corazones, en sus espíritus y en sus cuerpos, y ofrezco mis servicios para paliar las necesidades que surgen, sobre todo cuando se trata de rezar con ellos, participando en la liturgia, etc. Este año ha llegado un nuevo sacerdote, el padre Julien Mumpwena (O.M.I) que es profesor en la universidad y que se ocupa del trabajo pastoral en la cárcel de modo parcial. Por ello me encuentro que en muchas ocasiones los domingos tengo que ir buscando algún sacerdote que pueda celebrar la Misa a los internos. Muchas de las responsabilidades de la capellanía al interior de la cárcel recaen sobre mí. He tenido que seguir los trabajos de reparación del almacén de caritas porque los cimientos cedieron. Hemos tenido que comprar una gran tienda y hacer un suelo de cemento en el patio de la cárcel, para poder acoger el curso de informática… Los cursos de alfabetización tanto en francés como en inglés avanzan bien y los internos participan mucho. Este año hemos organizado algo mejor el curso de informática, hemos hecho tres grupos para que pudieran tener acceso más internos. Yo sigo estos cursos en todo lo que toca la logística, el material, etc. pero los alumnos y los profesores son los mismos internos que ofrecen este servicio gratuitamente para ayudar a sus compañeros.


En noviembre del año anterior iniciamos también este curso de informática con los menores, porque también hay menores en la cárcel de Makala. Con las mujeres he podido organizar el curso de alfabetización, pero en este caso los profesores son externos. En total tengo más de 80 alumnos entre todos los cursos. También otro trabajo importante es seguir adelante con la comisión Justicia y Paz, que es la que hace el servicio de seguir la Documentación judicial para aquellos a quienes la justicia ha olvidado o que no tienen los medios para pagar a ningún abogado. En el 2018 han sido liberados 192 detenidos, de los cuales habíamos ayudado económicamente a 82 a través de la capellanía católica. Aquí también hay que decir que he tenido que intervenir en muchos casos a nivel de comida y de cuidados de salud en casos de extrema necesidad. Eran personas que no recibían ninguna visita y yo les compraba los medicamentos. A veces no todo ocurre de modo positivo. En Montgafula, las hermanas combonianas tenemos un centro que acoge a las mujeres que salen de la cárcel para ayudarlas en su camino de recuperación y de readaptación a la vida. Conocí a dos chicas en la cárcel que querían, cuando saliesen de allí, ir a nuestro centro.

Durante mucho tiempo las seguí, pero al momento de salir de la cárcel una no quiso saber nada del centro y terminó en la calle. Con la otra tuve que moverme muchísimo para que apareciera su documentación que no se sabía dónde la habían puesto… finalmente la documentación llegó al tribunal y la chica quedó liberada. Al inicio estuvo un tiempo con nosotras en Montgafula y parecía que todo iba bien. La pusimos en contacto con su familia, fue a visitarlos y se la veía contenta, pero al momento de regresar a nuestra casa se echó atrás y se dedicó también a la calle. Una cosa simpática la vivimos en Navidad, cuando el embajador italiano y su mujer decidieron ir a visitar a las mujeres de la cárcel de Makala. Organizaron un concierto para recaudar fondos y con todos los permisos necesarios llegaron a la cárcel donde fueron recibidos como en ningún otro lugar. Hubo cantos, bailes, regalos, una buena comida… y allí estábamos nosotras también para celebrar y festejar con todos los internos y con todo el equipo con el que trabajamos en la cárcel.

Anna Brunelli (Misionera Comboniana)

misionerascombonianasdemadrid.blogspot.com



pum@ompargentina.org.ar


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